Me cogí al novio de mi mejor amiga

Cómo por hacerle un favor a mi amiga termino en el hotel con su novio y siendo su puta.
Me di al novio de mi mejor amiga. Antes de que me juzguen, lean el contexto por favor.

Ese día estábamos en una entreclase cuando mi amiga, llamemosle Andrea, me dijo que le tirará paro. Me comentó que había quedado con su novio a la salida de la escuela, pero que se iba a ir antes por qué Rubén, un compañero de clase la había invitado a salir. Obviamente, ese invitar a salir quería decir que se iba a ir a coger con el.

La verdad es que ellos ya no estaban bien, peleaban mucho y Andrea continuamente le ponía los cuernos a su novio. No juzgo, digamos que por algo somos mejores amigas.

Total que al finalizar las clases me encontré a su novio, le llamaré Abel. Me preguntó por Andrea y le dije que se había tenido que ir, que le había surgido algo. El me miró con cara de, no me quieras hacer pendejo y vi la tristeza en sus ojos. La verdad es que a pesar de todo se ve que la quería mucho.

Me sentí mal por el que le dije, invitarme una cerveza y platicamos, se ve que lo necesitas. Nos fuimos a un local cerca de la escuela donde podías tomar en el interior.

Una cerveza llevo a dos y dos a tres. Estuvimos platicando sobre su relación, sobre Andrea y poco a poco esto nos llevo a algo más íntimo, hablando sobre como tenían sexo el y Andrea.

Total, que ya medio entonados decidimos irnos, aclaro, no estábamos borrachos, solo alegres.

Ya en la parada del camión, cuando me iba a ir al despedirse me beso en la mejilla, pero muy cerca de la boca, casi besando mis comisuras. La verdad no sé si fue intencional o accidental, pero me estremecí y antes de que se retira lo tome por la nuca y lo bese. Fue un beso apasionado que el no dudo en corresponder. Nuestras lenguas de encontraban y entrelazaban frenéticamente mientras el me tomaba por la cintura y acariciaba mis caderas. Ya no aguantaba más, quería tenerlo dentro y le dije al oído… Llévame a un hotel.

Me tomo de la mano y fuimos a un hotel que estaba cerca, muy popular entre los alumnos jajajaja.

Apenas entramos empezamos a besarnos con frenesí. El me quitó la blusa y el bra. Empezó a chupar mis pechos. Su lengua jugaba con mis pezones, los besaba, los chupaba, los succionaba. Primero una teta y después la otra. Todo esto mientras sus manos acariciaban mi espalda y bajaban hasta llegar a mis nalgas, las cuales apretaba y acariciaba.

Beso mi cuello y empezó a desabrochar mi pantalón. Yo solo me dejaba hacer y acariciaba su cabeza mientras su lengua se ocupaba de recorrer cada parte de mi cuello y bajando a mis tetas.

Una vez quitó mi pantalón y dejándome en tanga me arrojó a la cama, hizo a un lado la tanga y empezó da dar lenguetazos suaves pero firmes en mi rajita. Poco a poco introducía su lengua, despacio, rozaba mi clítoris con el nariz y después lo lamia despacio con su lengua. Estaba súper excitada, este cabron sabía cómo dar un buen sexo oral.

Después de unos minutos en qué el me estuvo chupando llegué a un escandaloso orgasmo. El bebió todo mi flujos.

Cuando lo vi ya estaba desnudo. Estaba tan absorta en su sexo oral que ni cuenta me di cuando se quitó la ropa. Lo que vi me gustó. Un pene promedio, pero muy, muy grueso. Justo como me gustan. Así que devolví el favor.

Me arrodille y empecé a mover su verga con mi mano derecha mientras la izquierda empezaba a jugar con sus bolas. Abrí la boca y poco a poco lo introduje, saboreando cada pedazo de carne que entraba en mi boca. Cuando tuve prácticamente todo casi hasta la garganta apreté mis labios y mientras lo sacaba despacio mi lengua apretaba su pene contra el paladar, al llegar al glande, mi lengua jugueteo con el frenillo y con la punta del glande. Parece que le gusto por qué soltó un pequeño gemido. Repetí esa operación hasta que poco a poco apure la frecuencia de mi felación.

Sentí que estaba a punto de eyacular cuando lo saque de mi boca y deje de chuparlo. El se quedo con cara de, que está pasando? Le dije, no quiero que eyacules aún, quiero que me cojas de perrito. Me coloque en el borde de la cama parando mi culito y abriendo mis piernas. El se colocó detras de mi y de un golpe me penetro. Le dije que se relajara, que lo hiciera despacio, que disfrutara de mi cuevita. Creo que entendió el mensaje. Me tomo por la cintura y empezó un mete y saca lento, suave, pero firme. Me acariciaba las nalgas, me daba pequeñas nalgadas. Yo lo disfrutaba tanto. Sentía como el grosor de su verga abría mi estrecha vagina y me dolía de una forma tan deliciosa.

Fue en ese momento que empecé a moverme. Moví mi cuerpo de atrás adelante, ensartandome yo sola en su rica verga, aumentando los movimientos, cada vez más rápido. Estaba a punto del orgasmo otra vez. Ahí si ya no me importo, me moví más rápido y cuando sentí que el lanzaba su primer chorro de lefa dentro de mi, explote en un más sonoro orgasmo. Gimiendo por el placer que sentía.

Cuando su verga se puso flácida nos acostamos abrazados, parecíamos dos novios, me preguntó que que tal había estado, le dije, sacaste un 5. Su cara fue genial, no podía creer que le hubiera dicho eso. Le dije, sacaste 5 por qué es la primera parte. Falta la otra para tu otro 5, quiero que me lo metas por el culo. Puso cara de felicidad, ya que siempre le pidió el culo a Andrea y ella nunca se lo dio.

Así que me puse manos a la obra, o más bien a la verga. Lo empecé a acariciar y lo metí a mi boca. Lo chupa despacio mientras sentía como iba creciendo en mi boca.

Cuando estuvo a punto me puse sobre el sillón de la felicidad que hay en los hoteles y abrí mis nalgas mostrándole mi ano. Le dije, escupe tu verga, escupe en mi culo y metemelo. El lo hizo a si. Su cara de lujuria no hacía más que ponerme cada vez más cachonda.

Abel parece que aprendió la lección, por qué me empezó a penetrar despacio, lento, yo gemía de placer. Empezó a moverse despacio y yo frotaba mi clítoris, no les voy a mentir, fue jna cogida menos intensa, pero deliciosa. El estaba en la gloria penetrando mi culo, acariciando mis nalgas y diciéndome que estaba riquísima, que era una putita muy rica y más cachondo se puso cuando le dije, disfruta me, que en este momento solo soy tu puta.

Después de varios minutos empezó a acelerar sus embestidas, yo me faltaba más fuerte el clítoris y segundos antes de que el eyaculara yo llegue a mi tercer orgasmo de la noche. Los músculos de mi vagina y mi ano se contraian al ritmo de mi orgasmo, lo cual hizo que el descargará tres potentes chorros de leche en mis intestinos.

Terminamos rendidos pero satisfechos. Platicamos otro rato donde le.dije que si algún día necesitaba que lo consolara nuevamente me buscará y el dijo que era seguro. Nos duchamos y nos fuimos. Me fue a dejar a mi casa.

Al dia siguiente Andrea me preguntó si no se había enojado Abel, le dije creo que si, pero espero que haya encontrado como consolarse. Me vio a los ojos y me dijo… Te lo cogiste… Pinche Ana, te cogiste a mi novio, eres bien puta y se empezó a reír… Me empecé a reír y le dije… Nos parecemos tanto amiga, nos parecemos tanto.