Mi compañera Mariela parte 1

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por juancarlos606.
Este relato esta basado en una historia que se dio por los designios de la fortuna, fue en ocasión de concurrir a una fiesta de compañeros de trabajo que se realizaba en un complejo turístico importante de nuestra ciudad, donde además de contar con un salón hermoso destinado a fiestas y reuniones, cuenta con cabañas de primer nivel, piletas de natación y todos los servicios imaginables.

Todos concurrirían con sus esposas, parejas, amigos o novios, yo opte por concurrir solo por distintos compromisos y concurrí por cumplir una formalidad laboral, ya que sabia todos irían acompañados y en parejas, al llegar me encuentro con la sorpresa que varios habían optado por esto ultimo y nos encontramos en una mesa los solos y solas, entre las cuales estaba Mariela, hermosa mujer, quizás un poco bajita 1,56, pero un cuerpo y una cola que es la envidia del resto, su rostro como joven que es ya que solo tiene 22 años, mirada picaresca e insinuante, muy rápida con el doble sentido de sus dichos, esa noche llevaba un vestido dorado entallado muy corto, unos zapatos haciendo juego y un tapado que era una maravilla, sus piernas eran una belleza total, acostumbrados a verla todos los días con su trajecito de trabajo con pantalón de vestir y camisa con la corbata, no dejan apreciar la belleza de mujer que es.

Esa noche se mostró, la comida de primera discursos, aplausos y llego la hora de el baile, comenzaron a salir las parejas y nosotros continuábamos en plena conversación, además de ella, también estaba Alejandra y Mariana, del lado nuestro los solos Roberto, Mauricio y yo. Roberto fue quien interrumpió la charla y saco a bailar a mariana y lo siguió Mauricio con Mariana y por ultimo Mariela conmigo, bailamos y nos divertimos bastante, cargadas y bromas relacionadas a nuestro trabajo, ya entrada la noche y después de haber tomado varias copas Mariela al menos por que yo no bebo alcohol, fue que comenzaron a bajar la música porque pedían los lentos y el discjockey largo una selección de los 80 mortales y nadie se sentó todo alardeaban y bromeaban. Fue así que Mariela se acerco la tome de su cintura de avispa y la atraje como haciendo una broma y no retrocedió, por lo que nos pusimos a bailar sin decirnos nada solo bailamos y sentíamos las sensaciones que nuestros cuerpo sentían en cada roce, me anime a desplazar una manos por su espalda, porque el vestido tenia un escote que llegaba prácticamente a su cintura y ni se inmuto, le susurraba a su oído lo hermosa velada que estaba pasando y la suerte de haber sido ella mi compañera de baile esa noche, ella con sus ojos cerrados apoyaba su cabeza en mi hombro sin decir nada, así bailamos largo rato, donde nuestras manos comenzaron a recorrer nuestros cuerpos, ella acariciaba muy levemente mi cuello y mi pelo, hablábamos bastante poco, en un momento me propone tomar algo y salimos a la barra, donde el barman preparaba unos tragos internacionales; allí fue que le propuse si deseaba seguir bailando o descansamos un poco, nos trasladamos a un rincón del salón donde habían unos sillones muy mullidos y cómodos, yo me ubique en otro individual que se encontraba casi de frente y allí la comente lo bella que estaba esa noche, a lo cual me retruco, nunca me miraste antes, con una sonrisa y entre bromas le decía que no había apreciado la belleza de sus piernas y la perfecta cintura que tiene, la tersura de su piel me había impresionado, a lo cual me dijo directamente, que ella si me veía todos los días y que sentía algo, lo cual me dejo descolocado por cuanto nunca me percate de ello.

Así se dio la posibilidad de retirarnos y continuar con aquella noche en otro lugar, lo cual acepto sin pensar, trae mi abrigo manifestó, luego de colocarle el abrigo la acompañe hasta su vehiculo ya que ella había ido en su automóvil y yo en el mío, al partir me dice espera unos minutos y salís te espero en la estación de servicios que hay allí, a unos mil metros del lugar, entre nuevamente y comencé a saludar a uno y otro y manifesté debía partir y se me había ido la compañera de baile, bromas de te colgaron y quedaste solo, tome mi saco celular y demás. Nos encontramos en la estación de servicios como habíamos quedado y de allí nos dirigimos a la cochera donde ella deja su vehiculo, partiendo en busca de un café abierto donde continuamos nuestra charla y decidimos culminar la noche en su departamento, donde llegamos y tras tomar un café ella se puso mas cómoda de ropa y allí me mato mal, se coloco un short corto y amplio que utiliza para dormir y una remera también suelta y bastante corta, que dejaba su ombligo descubierto y las clásicas pantuflas, fue allí que le manifesté, no podes salir asiiii ,, ella miro y dijo estoy mal con doble sentido, me quieres matar dije en broma a lo cual ella dio media vuelta mostrando la parte trasera de su cuerpo y fue mortal aquella vista esa prenda metida en la zanja de su cola me desquicio y la tome por detrás aprisionándola contra mi cuerpo y paro mas su cola que rozaba mi cuerpo, desatando un sin fin de caricias y toqueteos que, nos hizo olvidar café y todo lo demás, la tome en mis brazos, la levante en el aire y la traslade a un sillón que tiene, donde la ubique sobre mis piernas y comencé a comer aquella boca deliciosa y joven, ella desato una serie de caricias que recorrían mi cabello la nuca , parte de mi espalda y mi pecho, yo la tomaba de su cintura y subí mis manos por su espalda, desprendiendo unos suspiros que invitaban a continuar con aquella faena, baje mis manos y subí por su parte delantera llegando a aquellos pechitos hermosos sublimes y deliciosos que probé y devore con todas mis ganas jamás imagine esa delicia de cosita, así desinhibida y entregada total a terminar una noche que había sido esplendida.-

Caricias y manoseo total nos devorábamos uno a otro, ella mordía mi pecho acariciaba mi espalda y yo había bajado mi mano a su panochita que estaba mas que húmeda y ya dejaba escapar suspiros y arrullos de su garganta haciendo enloquecer, ella sentía mi pene erecto en su cola, por lo que se levanto y bajo de un estirón su short y yo me despojaba de mi ropa, nos dirigimos a su habitación, donde tiene una cama inmensa, allí la traslade tomándola por su parte trasera y me lance de golpe a comer aquella panochita y esa cola que la disfrute a mil introducía mi lengua, mis dedos y ella saltaba, gritaba y perfilaba su cuerpo de una manera bestial, aquella pequeña me ponía a mil y el ver esa cola perfecta que tiene, la mordía y chupaba de una manera descontrolada, ella se ubico de una manera que mi pene quedo cerca de ella, bajando de un manotazo mi boxer y lo tomo entre sus manos, mientras decía nooo esto no me entrara (24 cms y muy gruesa ), pero así todo, comenzó a acariciarla y besarla intentando meterla en su pequeña y delicada boca, comía mi glande y parecía se desgarraban sus labios, siguió intentando y lograba meter un cuarto en su boca, estaba enfurecida con aquel pedazo de carne, yo mientras llegaba su cuquita que estaba delicademante depilada y denotaba un cuidado especial, lamia todo su precioso cuerpo, mordía aquella hermosa cola y pasaba mi lengua desde su ano hasta terminar en ese clítoris que estaba erecto a mas no poder, al cual le brinde una sesión de lengua que la hacia gritar sin limites y volvía a mi pene, pero le llegaban aquellas caricias mías y largaba todo para continuar gritando y jadeando, emitía unos sonidos guturales que me calentaban mal, con su mamada sentía que me vendría, por eso la ubique como para penetrarla y me pedía sin cesar suave Juank, quiero disfrutarla, no me hagas doler por favor, no te preocupes, (aquí cabe acotar que ella solo tuvo un novio desde los 14 años y no tenia ese tamaño), me senté al costado de la cama y le dije póntela tu, subió sobre mis piernas y temblaba toda, sentía deseos y miedo, trate de calmarla y la convencí de que ella lo introdujera hasta donde ella quería, me tire de espaldas y ella quedo frente a ese miembro que lo acomodo, se movía tratando de abrir al máximo sus piernas e intentando introducirlo; Entro la cabeza y se quejo la retiro y volvió a intentar, se contorneaba de una forma y se notaba comenzaba a gozar como una perra, empujaba hacia abajo y poco a poco llego casi a la mitad y gritaba, me insultaba, pedía la besara, y yo devoraba esos labios divinos y sensuales que tiene, mientras yo le insinuaba querías verga ahí esta, dale cómetela toda, ella jugaba y saltaba en aquel pedazo de carne que la estaba haciendo volar, quería meter un poco mas y denotaba el dolor y volvía a sacarla, su cuerpo hacia aréolas intentando entrara mas y no, allí gozaba mal pues llegaba a su punto G y le sacaba unos gritos despavoridos, insultos y palabras hermosas que me hacían sentir que la logre llevar a su goce máximo, galopó unos minutos y nos vinimos en una acabada que fue monumental y bestial, nunca había visto a una mujer acabar de esa manera con tanto berrinche y sacada de si, torcía su cuerpo como hurgando con aquel trozo de carne introducido en su anatomía, hacia un batido que me dejo vacío; allí quedamos prendidos disfrutando aquellos últimos momentos del vaciamiento total, ella tenia su rostro desfigurado, no era la preciosa nena, con quien había pasado una noche maravillosa, era una hembra destrozada, no se podía sus brazos, quedo con un decaimiento que no pudo levantarse y se lanzo sobre la cama para quedar tendida, su cuerpo sin fuerzas y rendida total, reposamos un momento y al ver la hora, decidí debía retirarme, ya que soy casado y no quería llegar tan tarde, me dispuse a bañarme muy rápidamente, me vestí y prepare para retirarme, ella estaba muerta allí como había quedado estaba, nena estas bien pregunte, solo asintió con su cabeza y con sus ojos cerrados, me dijo cierra y tira la llave por la ventana del baño, ok respondí nos vemos y allí quedo nuestro primer encuentro, que jamás me habría imaginado sucedería, ya que es una joven que tiene novio y pretendientes que la cortejan.-

Pasado el finde, al llegar el día lunes, me encuentro que no había llegado a su trabajo, a pesar de vivir a solo tres calles; cuando llego caminaba de forma extraña y dolorida todavía, manifestó que tenia lumbalgia y había tenido un tirón de ciática, se sentó y no se movió para nada, al verla concurrir al desayunador, me dirijo a la parte de cocina y me acerco, su primeras palabras fueron, hijo de puta, me hiciste mierda, a lo cual respondí que fue ella quien definió el limite y no yo, tras lo cual me manifestó había cortado con el chico que estaba saliendo y que fuera a su casa para hablar.

Al día siguiente a la salida del trabajo concurrí a su casa, donde me recibió de una manera tan dulce y sensual que me conmovió y tenia preparado una merienda que compartimos y hablábamos; allí me pidió ser su pareja, quería ser mi hembra, lo que me lleno de orgullo que semejante belleza, me haga esa propuesta enjundiosa, no tuve que aclararle que yo era casado y debía guardar una compostura ante mi esposa y que no podía vivir o pasar mucho tiempo con ella, respondiendo en forma directa y claramente, quería que mi pene fuera solo de ella y de nadie mas ok, que había quedado enloquecida con aquello que había sucedido, que jamás nadie la hizo sentir como esa noche, a pesar que me había aprovechado de ella porque estaba pasada en copas y bla, bla, bla, quedamos en probar, pero, si yo tenia problemas largaría todo y eso quedo bien aclarado para evitar confusiones posteriores, tras lo cual saco mi pene y lo acariciaba como quien tiene un chiche nuevo, lo besaba y pajeaba y note se empezó a caldear el ambiente, comencé a besar su pequeño y delicado cuerpo como queriendo comerlo todo, daba tarascadas en sus carnes y me ponía a mil, tras lo cual me aclaro que todavía sentía mucho dolor que no hiciéramos nada, a lo que respondí que quería su cola fuera mía, quería penetrarla por allí, fue que me contó que solamente una vez lo había probado y que sufrió mucho, por lo que nunca mas lo hizo y lo que vos tienes me harás mierda manifestó, le aclare que era la parte de su cuerpo que mas había enloquecido y que quería probar ese bocado exquisito; allí quedo este encuentro que fueron solamente caricias besos y sexo sin penetración disfrutándolo también de una forma maravillosa, ya que logre sacarle dos orgasmos en los que no se privó de nada.-

Pasado un día ya que tuvo que trabajar de noche y no coincidían nuestros horarios nos logramos encontrar y al llegar, le comí esa boca preciosa, mientras preparaba una cena que compartimos luego, donde no falto el erotismo y la sensualidad por parte de ella, ya que tiene unos modales primorosos y atractivos a mas no poder, dan ganas de poseerla allí mismo su sensualidad su mirada picaresca y sus insinuaciones embriagadoras, nos fueron llevando a que comenzáramos a propinarnos sendos besos, caricias y todo tipo de garatusas, que continuaron con un toqueteo que nos fue llevando a tirar nuestras vestiduras, hasta quedar completamente desnudos y tendido allí, sobre la alfombra, donde nos besamos y nos proferimos todos tipo de caricias que ya pasaron a nuestros respectivos sexos, ella como embobada, se fue directamente a mi pene así de una y lo quería comer todo, que, al estar medio flácido le fue fácil meterlo en esa boca paradisíaca que tiene, yo comencé a engullir todo su cuerpo, centímetro a centímetro sus pechos indescriptibles que los devore con todas mis ganas, daba dentelladas en ese cuerpo que me volvía loco y me excitaba al extremo; allí fue que se me ocurrió utilizar otra estrategia y hacerle el prisionero, la tome por su parte trasera y ella sin saber mis intenciones, se dejo llevar, a la pasada a su dormitorio tome unas corbatas y procedí a atar sus manos en el espaldar de la cama, ella miraba desorientada y solo decía Juank que te pasa, yo le manifestaba hoy te la comes toda nena, ella se asusto y me pedía Juank por favor no me hagas esto, Juank que haces por favor me lastimaras, y yo como decidido, le decía que le haría todo, hasta que estuvo amarrada al espaldar y comencé a comer su bello cuerpo

Ella imploraba Juank no, que haces, hoy serás mi putita le decía y ella comenzó a temblar, por favor, decía, esto no me gusta, ya te gustara, y comencé a deglutir ese maravilloso cuerpo, sus pechos, ella suplicaba y se movía toda , como queriendo liberar sus manos, yo continuaba con mis caricias hasta que llegue a su ingle, su ombligo y baje a su panochita, que ya comenzaba a liberar sus líquidos, la saboreaba de una manera descomunal, mordisqueaba su clítoris y saltaba, a todo esto ella profería todo tipo de insultos, y volvía a pedir que así no, pero yo veía que estaba gozando con esta nueva forma, arqueaba y ondulaba su cuerpo para facilitar llegara mas profundo con mi lengua, murmuraba palabras que no entendía, y volvía con mas insultos y pedía mas, introduje un dedo en su ano mientras comía su deliciosa y delicada vagina, allí sentí vino su primer orgasmo, acompañado de gritos y pedidos, cojéme toda pedía, ya estaba ardiendo su cuerpo, el cual levante y acomode un almohadón debajo de su cola para darle un poco de altura y fuera mas fácil la penetración, que comencé suavemente y a poca profundidad, tratando de que ella pida mas y así lo hacia, dame mas, quiero mas hijo de puta, a lo cual embestí con una bombeadas haciendo introducir mi pene hasta la mitad y allí arqueo su cuerpo, yo seguí bombeando y tratando de entrar un poco mas, a partir de allí sus pedidos fueron suplicas Juancito por favor decía, me estas partiendo decía, yo le murmuraba a su oído que sos mi prisionera, hoy sos mi esclava y ella levantaba temperatura olvidando el dolor y decía siii soy tu hembra, hazme todo y ya veía su orgasmo cerca y aproveche para continuar bombeando ese trozo de carne que iba abriendo camino en ese cuerpo espectacular, ella gritaba y entre su venida y mis embestidas logre en esta ocasión entrara tres cuartos de mi pene, imploraba la desatara, y así lo hice, solté sus manos que se vinieron con sus uñas de punta a mi cuerpo, insultaba y pedía mas, estaba teniendo un orgasmo atrás de otro, y quería mas

Con un empellón la mande toda y escuche un grito desgarrador, y sus manos quisieron impedirlo pero ya era tarde estaba toda adentro, la calme por un momento y comencé a bombear suave pero sin pausa ella continuaba acabando de una manera descomunal, borbotones de flujo, mordía mis labios y mi pecho clavaba sus dientecitos en mi cuerpo y me excitaba mas ver esa hembra entregada total, cuando iba a fondo con mi pene largaba y gritaba desesperada y se volvía a prender a mi cuerpo, arañazos mordiscos y hacia montoncitos de mi piel con sus manos, golpeaba su cuerpo contra la cama, rebotaba y venia de nuevo por mas, continuamos así por unos minutos hasta que nos vinimos de una manera que propinábamos mordiscos, caricias y ella acabo con un mordisco en mi piel que me hizo sangrar, mientras yo, empuje lo que mas pude y me vine en ese interior tan pequeño, que aprisionaba mi pene introducido a mas no poder, allí quedamos con las últimos latidos de mi pene y el aprisionamiento de su vagina, hasta quedar sin una gota de semen, ella de desparramo sobre la cama y quedo allí abandonada total, con mi trozo en su interior que poco a poco iba decayendo, hasta que salio por completo de su cuerpo y observe unos hilos de sangre, me mataste Juank, me hiciste mierda, decía, mientras yo le acariciaba sus pechos besaba su boca y quedo tendida allí mal.- Entre caricias y arrumacos la fui consolando y la acomode sobre la cama donde quedo tendida y sin ganas de nada, procedí a cubrirla con una manta y le pregunte si quería la ayude a levantarse, dijo déjame así quiero sentir ese aroma un rato mas, anda yo me higienizo luego, mañana nos vemos, nos dimos unos besos y partí.

Allí quedo este encuentro que fue maravilloso, glorioso e inenarrable, luego les contare en otro relato lo que siguió sucediendo con esta hermosa pequeña que me hacia volar.. Espero sus comentarios y criticas en todovaleaqui@yahoo.com.ar Juan Carlos San Rafael Mendoza.