Mi cuñadita, mi amor mas prohibido

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Jamás vi a mi pequeña cuñada como si fuera lo que pienso que es ahora, era solo una nenita normal de 7 años como cualquier otra, una nena con un poco de confianza por su instinto un poco travieso, pero una muy buena personita mas allá de todo.
tenía un pelo rubiesito con 2 colitas normales, bastante largo, unos cachetitos apretables y lindisimos, sus ojos marrones oscuros, blanquita y con los labios de una princesita.
Era realmente bella, pero era solo una niña.
no vi atracción ni nada por el estilo, nos tomábamos fotos, jugábamos, salíamos juntos y hemos hecho decenas de cosas con la familia de mi ex novia, tanto con ella como con su hermanita.

Cumplía los 2 meses con mi novia, íbamos al cine, un día viernes, mi billetera dispuesta a gastar lo que sea, alrededor de unos 4500 pesos disponibles, era mi inocencia al pensar que con esa persona lo iba a tener TODO.
compramos ropa, sacamos decenas de fotos, subiendo a juegos, yendo a almorzar, dentro de la sala antes del comienzo de la película, al terminar saliendo seguíamos con las capturas, en la partida, el viaje de ida, de vuelta, y hasta el momento en el que nos volvimos.
Todo fue hermoso, me da un poco de nostalgia el tener que recordarlo, pero esa noche empezó una de las aventuras mas peligrosas de mi vida.

Eran eso de las 22:30 si mal no recuerdo la hora no me he fijado pero calculo que fue ese el horario.
Llegamos a su casa agotadísimos, estaba mi suegra mirando su novela también algo cansada por sus días laborales siendo ama de casa, mi novia se entraba a duchar y saldría ya dispuesta a ayudarme a copiar unos trabajos que debería pasar a otro compañero el día domingo.
no había visto a mi cuñada y después de ir preparando la computadora y algunas carpetas sale de su cuarto (al parecer hace 10 minutos se despertaba) y vino a saludarme contenta como siempre, le mostré las fotos que sacamos en los juegos y demás cosas.

ella se sentaba arriba mío y yo no sentía nada, hasta ese momento ella era como una hijita para mi, cometí un error que fue algo desapercibido y completamente sin intención al decidir tomarme unas 5 o 6 fotos con ella, acá partió mi calentura.
Estábamos en el cuarto de mi novia sentados en el puf, saqué mi celular, coloqué la cámara frontal y ella con su cara algo pegada a la mía, estando a upa, saqué la 1er foto, la 2da también fue igual, cambiamos un poco nuestras caras, a la 3er foto le dije que me diera un beso en la mejilla, como un gesto de cariño, la foto lucía sensacional, era nada mas ni nada menos que la relación que llevábamos yo y mi cuñada, reflejada en una foto.

Estábamos muy pegados y es a la 4ta foto cuando me volteo y ella hace un gruñido extraño y abre un poco su boca, como queriendo ladrar, lo curioso es que tomé esta foto sin darme cuenta, queriendo disimular lo que sentí en ese momento, fue ese aliento a niña, tan rico y excitante que en cuestión de segundos me hizo transformar todo lo que ella era para mi en otra cosa.
Me reí junto con ella, disimulando ese momento, y le dije "ladrame de nuevo.
" y ella recurría.
dejando escapar ese aliento tan lindo, y yo ponía mi nariz cada vez mas cerca para percibir ese olorsito, se me empezaba a parar.
dudé en continuar asique entre calentura y risa a la misma vez la aparté y me propuse a esperar a que mi novia saliera del baño.
Le dije a mi cuñadita que jugara en su cuarto o vaya a mirar tele ya que era lo que siempre hacía, que mas tarde iría a jugar con ella si terminaba rápido mis trabajos.
Esperé mas de 10 minutos a que mi novia saliera del baño, y las ganas de crear algo con mi cuñada eran inmensas, su aliento me había encantado y sus labios ya los veía con ganas de besarlos, era solo eso, moría por chaparla aunque sean segundos.
pensé en salir y recurrir a eso pero fui consciente de que no haría mis trabajos tranquilo y mucho menos sabiendo que mi cuñadita podría delatarme si la situación no le gustaba, lo iba a poder hacer mientras yo completaba mis trabajos tranquilamente.

Supuse que la situación era peligrosa, pero mi calentura le hacía frente, en fin.
decidí pensar en mi novia y el maldito tiempo en el que tardaba para salir de ducharse.
salió cambiada ya del baño, y que mejor idea que querer sacarme la calentura con ella, pero por suerte mi conciencia me aconsejaba que podría llegar a levantar sospechas, intenté mantener la calma los primeros 20 minutos en los que nos pusimos a completar los trabajos, cuando quise ponerla en mi juego, ella solo quería terminar de ayudarme a completar y recibir unos masajes, estaba completamente cansada y no tenía el mejor humor de todos.
Yo lo tomé a mal, y por dentro me propuse sacarme la calentura con su hermanita unas horas mas tarde, pero siempre después de haberlo pensado todo bien.
Terminamos los trabajos, luego de casi 1 hora, mis planes se marchitaban, ya que veía a mi novia con otro humor y siendo muy tierna conmigo, no me salía hacer eso por venganza, le di sus masajes que le había prometido y a los 20 minutos se acostó a dormir, yo aún no tenía ni un gramo de sueño asique le dije que miraría unos programas de fútbol en el living y luego me iría a acostar.

Recuerdo cada detalle de esa noche, el momento en el que puse un pie afuera de su cuarto, dejando de pisar la alfombra y sintiendo el piso de cerámica bajo la suela de mis zapatillas, los escalofríos, el miedo, la calentura y la sangre que me subía hasta la cabeza, el pensar el plan para hacerla caer, todo esto me hacía sentir con un poco de culpa al tener un morbo de ese tipo, me sentía una mierda humana, tome aire y me concentré para calmarme, era consciente que debía estar tranquilo.
Después de tantas dudas y temores, fui al cuarto de mi cuñadita actuando como siempre, solo tenía que ser la persona que fui siempre con ella.
Entré y estaba sentada en su cama leyendo un cuento, verla levantar esa carita con un poco de asombro al tener la típica curiosidad de saber quien era la persona que ingresaba su cuarto, fue el 1er paso a estar completamente decidido de que si hacía todo lo que tenía planificado, me iba a estar comiendo nada mas ni nada menos que a la pendejita de 7 mas linda de todo el mundo, un angelito, hermosa tal y como era, no necesitaba mas lindura.
me senté al lado de ella, mi primera mano posada en su pierna en forma de cariño, me hizo sentir miles de cosas en ese momento.
me sentía raro, no tocaba la pierna de mi cuñada, tocaba la pierna de otra nenita, una nenita que no quería hacerle daño, solo disfrutar de ella porque me gustaba tal y como era en ese momento.

Partió mi plan, saqué mi celular y la filmaba como ella leía, algo trabada pero con una voz clara que me hacía sonreír de lo bella que era, tan pura.
corté el video y comencé a grabarla con la cámara frontal, esta vez le dije que volvamos al juego, que hiciera su piquito y me diera su "beso" en la mejilla y yo haría lo mismo mientras corríamos nuestras para los costados, cediendo nuestras mejillas para recibir los besos uno del otro.
fue ahí cuando hice mi jugada y salió todo perfecto para hacerla caer en mi trampa.
ella fue rápido al 3er beso y yo no puse mi cachete sino que giré mi cara dejando mi boca ahí y CHAN.
Yo la miré con asombro, haciéndola creer que eso estaba mal, y para colmo, estaba filmando TODO! Corté el video y me asomé rápido a la puerta para ver donde estaba su madre y al parecer ya se había acostado, solo la luz del living estaba encendida, que era donde yo supuetamente iba a estar mirando fútbol.
Puse mis pasos dentro del cuarto nuevamente, mi cuñadita tenía dibujada esa sonrisa de felicidad en la cara, derivada por nuestro juego que era muy divertido, al fin, se iba a desvanecie temer un poco, la llevé mas a la punta de la cama para aumentar el temor, y ahí arranqué mi treta.

Le dije qndo por ese acto cometido, empezaba aue le debería contar a su hermana lo que había pasado, tratando de hacerla asustar por lo ocurrido, ella sabía que si su hermana veía eso, se iba a enfadar mucho, iba a hacer un escándalo y muchas mas cosas, pero en teoría, la culpa era de los 2, no solo de la pequeña.
ella sabía eso, le dije que no quería dejar de verla, que su madre la iba a regañar y su hermana también, y ellas 2 también a mi, y que nosotros jamás volveríamos a vernos nunca mas, pensé que se iba a asustar o quizá a ponerse un poco triste, pero el hecho es que mi cuñadita estaba a unos pocos pasos de llorar, en ese momento, no hice mas que abrazarla y decirle todo lo que sentí, sin mentirle esta vez.
le dije que era la mejor niña de todas, que su amor no me lo daba nadie, que la quería mucho y jamás dejaría que nos separen.
se le escaparon 2 o 3 lágrimas, mi pequeña, sentía tanto cariño, pero en el fondo mi calentura alarmaba, nos pusimos en el medio de vuelta y le dije que todo iba a estar bien, que no esté asustada, ella asumió con su cabeza que si, que estaba bien y continuamos normales como siempre solíamos ser.
El hecho es que no podía aguantar, y le confesé que me gustó el beso que me dio, le dije que fue lindo y ella se sonrojaba justificándose que fue sin querer y no quiso hacerlo, todavía seguía con un poco de temor.
Me moría de ganas de besarla, pero no podía continuar con la situación, ella tenía miedo por lo que había pasado, y empecé a convencerla

– queres darme otro beso? Así ves que no pasa nada, no tengas miedo **(nombre)**

.
Pero y **(nombre)** ? sos el novio de ella.

No le gustaba la idea de que yo la besara así como beso a su hermana, pero la convencí con un cuento larguísimo que no voy a escribirlo, ella se quedó pensando, la subí arriba de mi pierna mirándome hacía mi y le sonreí para que viera que todo estaba bien, me miraba seriamente y con un poco de duda en su rostro, ahí paralizada, puse mi mano detrás de su cabeza y la empujé solo un poquito y FUMM! me encajó un beso sin temor a nada, chiquito, pero lindo, la volví a tomar por detrás de su cabeza y ahí empezó nuestra sesión de besitos.
Su aliento seguía igual, me volvía loco, estaba en el cielo tocando con mis labios a un angel.
Mi cuñadita parecía sentirse rara, pero se reía y yo estaba mas que caliente con mi pene erecto ya en un 80%, pasamos besándonos un buen rato, le enseñé a mover su lenguita, y poner bien su boquita a la hora de besar.

Terminando con todo, volví a remarcarle que no dijera nada y continué convenciéndola de todo, que esto no lo debería saber ningun familiar, ni amigo, ni compañerito de escuela, ni NADIE.
Ella me dijo que a nadie se lo contaría y me lo dijo de una forma en la cual yo me sentí tan seguro de que esa niña recién empezaba a ser mi mujercita.
Paré, tenía tiempo y sabía que no tenía que hacerla sentir rara, era una nena de 7, salí de mi cuarto, llevé la notebook y nos pusimos a ver bloopers, la miraba y le robaba besos.
ella me reía, aveces me daba uno y así hasta que la veía con sueño en el transcurso de tantos videos que se tornaban aburridos con el pasar del tiempo, eran casi ya las 2 am y ella con esa sonrisita de tranquilidad, charlé con ella volviendo a remarcarle que no debería decir nada, y la dejé que se acostara tranquila.
Salí al living, apagué la luz que había quedado prendida, cogí unas 5 servilletas y fui a la habitación de mi novia, saqué la ropa que había llevado para dormir, me cambié y me acosté de su lado, ella parecía estar en el 5to sueño, ni se mosqueaba.

Era mas que lógico que todo no se iba a quedar ahí, obvio que no.
Tenía los planes que me comían la cabeza, ya me lo decía yo mismo! una vez mi cuñadita dormida, iba a meterme a su cuarto a continuar lo que no debí ni pude hacer para no sorprenderla con tantas cuestiones.
dejé la puerta de las 2 habitaciones abiertas para no tener que hacer ruido al salir o entrar en otra, eran las 3:40 cuando terminaba de ver por enésima las publicaciones en las redes sociales, esta hora la recuerdo por el momento en el que me atreví a semejante hecho.
Me levanté, tomé mi par de ojotas y las servilletas que había dejado en la mesita de luz, pero antes de salir del cuarto, decidí ir descalzo sin nada en los pies hasta la otra habitación, solo llevando mi par de ojotas en la mano, las servilletas y la linterna del celular.
Al salir, cerré la puerta, si mi novia se llegaba a despertar iba a escucharla abrirla, en el caso de que algo saliera mal, tenía pensado inventar la excusa de que me había levantado para buscar las ojotas que me había "olvidado" en el cuarto de mi cuñadita.

Todo planificado!! Fui hasta al cuarto, entré y allí estaba el amor de mi vida, la luz del patio entrando por la ventana y el suave color de las cortinas, dejaba ver toda su imagen tan pero tan clara, que me hacía verme como un idiota con el intento de querer usar la linterna para alumbrar.
Nunca antes había entrado de noche a ese cuarto, sin importar mi buena suerte, lo único que me importaba era verla ahí, bien dopada, durmiendo de costado, profundamente dormida con la boca un poco abierta.

las manos me temblaban y sentía la yema de los dedos congelados mientras guardaba mi celular en el bolsillo del short.
Cerré la puerta, y sentí un frío que me recorrió todo el cuerpo, estaba a solo un paso de hacer todo lo que mi calentura ordenaba.
Cerré la puerta y me dirigí de inmediato a la cama y con mucho cuidado empecé a destapar la única sabana que la cubría.
Me senté, y tenía que ver como podía hacer para levantar su cuerpito y bajar bien sus pantalones, ya que no eran tan sueltos.
Tomé coraje y lo hice todo rápido, sin siquiera ver, como si fuera a tener que sacarle una bala de allí, levanté rapido su cintura y bajé todo de un solo saque, fue un poco brusco, y mi miedo de que se despertara crecía inmensamente.
Quedó con la colita para arriba, un poco casi de costado como estaba antes, me quedé quieto unos segundos y notaba como todo el deseo se apoderaba de mi al ver que mi cuñadita no movia ni una célula.

!! Ahí estaba mi amorsito y su colita blanca al descubierto, todo exclusivamente para mi, el temor retornaba, me levanté y abrí la puerta a ver si alguien había despierto o algo, estaba muy asustado, pero todo parecía estar en orden, cerré nuevamente la puerta de la habitación,me senté detrás de mi cuñadita y bajé mi cabeza hasta allí.
Puse mi nariz en su colita y abría un poco sus nalguitas con ella, inhalando todo lo que pudiera para disfrutar de semejante manjar, única la sensación amigos, es única.
ahí estaba todo lo suyo, su agujerito y su palomita de bebé que no tenía ni un pelo y era bien lisa y cerradita, me tenía loco.
verla con esa carita durmiendo y estando toda entregada para mi, dejando que yo le chupe la cola, era un deleite.

saqué la lengua y sigilosamente daba besos de labios en sus dos cachetitos de la cola, fui cerrándome con los movimientos hasta que probé su agujerito, no se dan una idea lo rico que es, el saborsito, su olor, chuparlo y sentirlo, en el momento pensé en masturbarme y acabar inmediatamente, nunca antes había estado tan excitado, esa niñita me volvía loco literalmente.
Pasaba mi lengua todo por debajo sintiendo el gusto de esos labiecitos riquísimos, el hecho de mirarla constantemente como dormía mientras yo le chupaba todo me aumentaba la calentura aún mas.
Chupaba y chupaba tan excitado que parecía iba a amanecer ahí de lo rico que se sentía cuando siento moverse toda la cintura de mi cuñadita y siento su mano en mi pelo intentando sacarme para ver que era lo que pasaba ahí debajo.
Algo asustada, pero esta vez yo no podía parar por miedo, ya estaba en los cielos.

– Shhhh shshsh *nombre* *nombre* soy yo no te asustes, está todo bien.

*ella intentando subirse su pantalon y su bombachita* – Que estabas haciendo? me hiciste dar miedo (bastante dormida, casi no abría los ojos pero sabía la situación, estaba despierta)

– Te di besitos por todas partes, ahora termino acá y me voy si? no le digas a nadie porfa, puedo terminar *nombre*?

– noo no voy a decir nada.

– Puedo seguir???

– Sii.

Ya estaba en el podio, mas tranquilo y con una calentura terrible!! le bajé los pantalonsitos hasta abajo, le subí su remera hasta las paletas de su espalda y me puse detrás de mi cuñadita, que imagen!! a punto de comerme la pendejita mas sabrosa! Saqué el juguete mas que grande para esa colita, solamente iba a rozarlo hasta acabar, mi cuñadita no miraba nada, solamente seguía durmiendo o intentando dormir.
y ahí estaba toda la colita llena de baba, yo colocando mi paquete rozandolo por toda esa colita blanca, en el décimo roce ya sentía que me venía y me empecé a masturbar en esa colita pero no, tiraba para mucho mas y seguía pajeandome en esa burrita redonda hasta que me concentré en solo mirar mi imagen cojiendola y acabé mas de 9 chorros de semen desparramados en su espalda y en su colita, eran demasiados, mojé todo su trasero y ahí estuve susp