• Registrate
  • Entrar
ATENCION: Contenido para adultos (+18), si eres menor de edad abandona este sitio.
Sexo Sin Tabues 3.0
  • Inicio
  • Relatos Eróticos
    • Publicar un relato erótico
    • Últimos relatos
    • Categorías de relatos eróticos
    • Buscar relatos
    • Relatos mas leidos
    • Relatos mas votados
    • Relatos favoritos
    • Mis relatos
    • Cómo escribir un relato erótico
  • Menú Menú
1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (6 votos)
Cargando...
Heterosexual, Incestos en Familia

MI HIJO ME CONFESO QUE ME AMABA, Y NO TUVE OTRA OPCION QUE CORRESPONDERLE.

Siempre supe que haria lo que fuera para que mi hijo sea feliz. Lo que fuera.
Mi hijo es el amor más grande que tengo en la vida. Lo supe desde la primera vez que vi su carita, supe que haría lo que sea por él, mi amor no tiene límites. Y debido a esto es que paso lo que paso.

Pensándolo bien, creo que solo era cuestión de tiempo para que termináramos así. Si una madre puede sacrificar su vida por su hijo por amor, entonces no es descabellado que una madre se entregue a su hijo por el mismo motivo.

Mi esposo falleció cuando mi hijo tenía apenas dos años. Un cáncer de próstata se lo llevo. En realidad, fue su machismo, nunca se hizo un examen de próstata a pesar de que el medico se lo recomendó. Nadie le iba a meter un dedo en el culo a Roberto, «primero muerto antes que eso» Y así fue.

No fue un buen esposo, pero afortunadamente era muy trabajador y astuto para los negocios, y gracias a eso nos dejó bien asegurados, a mí y Robertito, mi hijo.

Si bien no sufrí nunca carencias económicas, el criar a un hijo sola fue muy duro. Yo hacía lo posible por llenar la falta de un padre, pero al final por más que lo intentara, se notaba la ausencia de una figura paterna. Y lo intente, trate de buscar un sustituto a su padre. Pero tuve siempre mala suerte, solo me buscaban por mi cuerpo, mas no por quien era yo. Desde chica ya los hombres me perseguían. A temprana edad desarrolle unos senos frondosos y un culo amplio, rechoncho. Todos me miraban con lascivia, hasta los profesores, hasta mis tios. Creo que por eso me case muy joven con Roberto, a los dieciocho años, y no me importo que el me llevara veinte años. Solo queria que me dejaran en paz, y si bien no se acabó el acoso, si disminuyo, ya tenía dueño, y los hombres respetaron eso. Y eso fue bueno.

Así que cuando mi marido murió, intente buscar un hombre que me diera eso, respeto, respeto y que quisiera a mi hijo como si fuera suyo. Que ingenua fui, todos los que encontré solo querían satisfacer sus deseos, y una vez lo hacían ya no les importaba, me trataban mal a mí y a mi niño.

Ya cuando Robertito cumplió ocho años deje de buscar, tire la toalla y decidí criar sola a mi hijo, si aparecía un buen hombre pues lo intentaría, pero nunca apareció. O tal vez si apareció en forma de un pequeño hombrecito, hombrecito que yo había traído a este mundo.

Al ser solo los dos, mi hijo y yo, me volví una madre muy devota de mi hijo, mi mundo era mi hijo. Me volví muy permisiva. Que mi niño quería que le compre algo, pues tenga. Que quería ver televisión de noche, pues bueno, pero solo esta vez, Que quería comer tal cosa, pues tenga. Y así con todo. Y allí creo que esta el inicio de todo.

Alguna gente vería la relación que tenía en esos años con mi hijo como no muy normal. Nos saludábamos con besos en la boca, dejaba que entrara donde sea a pesar que estaba bañándome o en el baño, cuando quería podía abrazarme, apretujándome las tetas o el culo al hacerlo. No me importaba, no le veía nada malo. Me resultaba gracioso como María, mi empleada doméstica, nos veía espantada al ver cómo era mi relación con mi hijo. Pero no dijo nada durante ese tiempo. Yo me reia y no le daba importancia.

Y así pasaron cuatro años, cuatro desde que deje de buscar un padre para mi hijo. Todo estaba yendo bien, hasta que ya no fue así. De un momento a otro mi hijo cambio su comportamiento. De abrazarme cuando quiera y como quiera, dejo de hacerlo en absoluto. De darnos besos en la boca, buscaba cualquier excusa para no hacerlo, y cuando no encontraba ninguna solo me besaba en el cachete. Ya no entraba a mi cuarto o mi baño sin aviso, simplemente dejo de entrar.

¿Era la rebeldía adolescente? Yo sabía que en algún punto pasaría, pero la verdad no lo esperaba tan pronto, y me dolió mucho que pasara. Luego de dos meses no pude soportarlo más y tuve que decir algo.

-Robertito, siéntate, quiero hablar contigo-

-Ahh, pero Mama, tengo que hacer algo en la compu, no puede ser después?- Espetó algo fastidiado.

-No, tiene que ser ahora, siéntate por favor- Replique molesta.

Mi hijo se sentó con la mirada triste y preocupada. La misma mirada que tenía desde hace un par de meses. Eso borro mi enojo, cambiándolo por preocupación.

-Robertito, he notado que has cambiado tu trato conmigo, me evitas, ya ni siquiera hablamos. ¿Que pasa, ya no quieres a tu madre?

-No mami, no, claro que te quiero, es solo que….-

-Vamos dime, hijo, por favor. Cualquier sea el problema yo te ayudare. Lo que fuera-

-Bueno, mama, yo, este, ehhhh.-

-Vamos hijo, dime, por favor. –

-Veras, mama, yo, yo, estoy enamorado- En ese momento sentí como una daga en el corazón, creí que era porque sentia que al estar enamorado de alguien significaba que estaba creciendo y solo era cuestión de tiempo para que se vaya de mi lado. Creía que era eso, pero ahora que lo pienso no fue eso, estaba celosa.

-Enamorado? ¿Quien es?? ¿De donde la conociste? ¿La conozco? Vamos dime- Intenté decirle lo más calmada posible pero no pude, estaba enojada y mis preguntas se escucharon como reclamos.

-No Mami, no entiendes-

-Dime, hijo, quien es. ¿Quien es esa? Dímelo ya-

-Eres tu mama, eres tu- Su respuesta me dejo estupefacta. No supe que decir, que hacer. Solo sé que sentí un gran alivio, sabía que estaba mal, pero no puede evitar sentir eso.

-¿Pero como, de mí, tu madre? –

-Mami, tu eres muy hermosa, eres muy tierna, me tratas muy bien, y no sé cómo paso, pero me enamore de ti-

-No hijo, talvez te equivocaste, como te vas a enamorar de tu madre, debes estar confundido-

-No mami, lo he pensado bien y sí, estoy enamorado de ti. Quiero besarte, quiero abrazarte, quiero…-

-¿Quieres que, hijo? –

-Quiero tocarte y que me toques, quiero que me quieras como yo te quiero-

-Ay, Hijo-

-Es por eso que he estado tan distante, porque sé que estoy mal, discúlpame Mama- Rompió en llanto y se fue a su cuarto corriendo.

Y yo me quede allí, petrificada. Nunca me imaginé que el motivo porque mi hijo me trataba diferente era que estaba enamorado de mi. ¿No sabía que hacer, como solucionaba esto? Mientras pensaba todo esto no me percate que una sonrisa se dibujaba en mi rostro, me sentía halagada.

Pensándolo bien, la idea de mi hijo enamorado de mí no debió ser una gran sorpresa. Antes de mostrarse frio hacia mí su trato se «intensifico», estuvo más amoroso que nunca. Me miraba el cuerpo todo el tiempo, sobre todo las tetas, se abrazaba a mi todo el tiempo y todas las noches venía a mi cama a acurrucarse conmigo al ver la tele. Y la mayoría de veces que lo hacia el pene se le ponía erecto. Esto no era una sorpresa para mí, a veces sentía sus erecciones, pero yo no lo veía como algo malo, así funciona el cuerpo masculino y a veces con el tacto pues estas cosas pasan. Su intensidad la atribuí a la adolescencia, recién entraba a esta y las hormonas la tienen a mil. Es natural que reaccione así. Nunca imagine que era porque estaba enamorado de mí.

Durante unas tres semanas estuvimos muy distantes. Apenas hablamos, apenas nos veíamos.  Al final de ese tiempo aun no sabía que hacer, no sabía cómo solucionar esto, pero lo que si sabía era que quería a mi hijo de vuelta, extrañaba nuestra relación, no soportaba que mi niño este tan distante. No sabía que hacer pero sabia que tenia que hacer algo. Así que espere a que viniera del colegio para hablar con el.

-Robertito, hijo, ven, quiero hablar contigo- Exclame en voz alta a través de la puerta de mi dormitorio.

-Ah, mami, tengo mucha tarea que hacer, voy luego-

-Ven en este momento, obedece a tu madre- Replique con firmeza para que me haga caso

-Si mami, si- Abrió la puerta del cuarto y tímidamente se paró al pie de la puerta.

-Ven papito, ven. Siéntate aquí para que hablemos- Cambie mi tono de voz a uno más tierno para que se suelte conmigo.

Mientras mi hijo se acercaba a la cama pude ver como sus ojos se abrían ampliamente. No se porque, pero de manera inconsciente me había puesto una blusa con un gran escote, escote que hacía que se puedan apreciar muy bien mis tetas, si era un poco más abierto se verían mis pezones.

-Ven, acuéstate aquí, amorcito, a mi lado- Lo jale del brazo y lo acosté a mi lado. Me recline a su dirección para poder hablarle de cerca y no lo negare, también para que me vea las tetas.

-Amor, como es que estás enamorado de mami? ¿Estás seguro de eso?

-SI mami, al comienzo no lo quería admitir, pero después de varias semanas sintiendo lo mismo creo que no hay duda, estoy enamorado de ti-

-Ay hijito, pero a ver cuéntame, como te sientes, como llegaste a pensar eso de mami-

-Mami, no se como paso, pero solo empece a verte mas bonita, y queria estar contigo todo el tiempo, quiero estar contigo todo el tiempo-

-Y quieres besarme? –

Si mami, si quiero-

-Y que más quieres hacer con mami, a ver dime- Me recline un poco más hacia el para hacerle cosquillitas, dejando reposar mis pechos en su mano izquierda.

-Jajaja, mami, basta, jajaja- Allí note cuanto extrañaba la risa de mi hijo, Entendí cuanto lo quería y que estaba dispuesta a lo que sea para tenerlo de vuelta.

-Dime bebe, mami no se va a enojar ni nada, que quieres- Deje, de hacerle cosquillas y empecé a sobarle el pechito suavemente. Eso y su mano debajo de mi pecho empezó a tener un efecto en su entrepierna. Una erección empezó a asomarse en sus pantalones. Lo ignore para evitar que se cohíba.

-Pues mami yo lo quiero es que seas mi enamorada-

-Tu enamorada? –

-Sí, mami-

-Bebe, entiendo cómo te sientes. Talvez sea pasajero…

-No lo es, mami….

-Déjame terminar, amor. Tal vez sea pasajero o no, pero mientras tanto vamos a jugar que somos novios, si? Eso te gustaría?- Mientras decía esto baje mi mano y empecé a sobar su barriguita hasta el inicio de su entrepierna, rozando muy levemente su pene. A pesar de que hacia esto sobre la ropa esto tuve un efecto en su pipi. Que en realidad era un pitote, al menos para su edad estaba grandote. Su pantalón estaba realmente luchando para contener su miembro.

-Si mami, me gustaría muchísimo-

Me recosté un poco más sobre el para darle un beso. Apretando mas su mano con mis tetas, Esta vez no le di un beso como se dan las madres que besan en la boca a sus hijos. No, este fue un beso apasionado, metiendo mi lengua en su boca. El tan lindo no sabía que hacer, pero daba su mejor esfuerzo y eso me ponía muy contenta. Tan contenta que empecé a mojarme.

-¿Así imaginabas el beso, amor? –

-No mami, esto estuvo mucho mejor-

-Ay que lindo, que bueno que te gusto- Decía esto mientras empecé a sobar su entrepierna, tocando su pene con descaro.

-Mami…-

-Shhh, está bien amorcito, Mami sabe lo que hace- No tardo mucho hasta que empezó a agitarse. Sentí su pene convulsionar a través de la ropa, luego empezo a jadear y todo su cuerpo convulsiono. Mi hijito, mi bebe, se estaba viniendo. Yo sabia que esto no era normal, que quizas estaba mal ante la sociedad, pero en ese momento se sentia que debia pasar, que era correcto que esto pasara entre nosotros dos. Talvez para el resto seria algo malo, pero para nosotros era algo hermoso.

Robertito quedo con los ojos cerrados y jadeando. Se veia tan lindo. No pude evitar darle otro beso, y otra vez con lengua. Esta vez mi bebe tambien movio su lengua, y para mi sorpresa lo hizo mejor que la primera vez.

-Bebe, tienes que cambiarte, no puedes quedarte con el uniforme. Ve a bañarte y vuelves. Quieres que veamos la tele juntos?-

-Si mami, si- Como rayo salto de la cama y se fue raudo a la ducha-

-Sin correr, bebe. Que te puedes lastimar-

-Si mama- respondió mas no me hizo caso.

No me podía creer la dicha que sentía, tenía a mi bebe de vuelta, pero esta vez era mejor, estábamos mas compenetrados que nunca.

Diez minutos mas tarde lo tenia bañado y cambiado al pie de la cama. Como un felino, salto encima mío, hundiendo su cara en mis tetas.

-Ay bebe, más despacio, no seas tan bruscote-

-Perdón Mami, no te lastime, verdad? – Asomo su carita entre mis tetas, Dios, era tan lindo que podía comérmelo allí mismo

-No bebe, estoy bien, nomás no saltes así, más despacio, si?-

-Sí, mamita-

Se quedó así unos minutos, echado encima mío, moviendo su cara entre mis tetas mientras se abrazaba a mis senos. Obvio su pene estaba a mil, súper duro. Desde que se echó encima mío pude sentir su rabo palpitante.

-Amor, ni estás viendo la película. Tan cómodo estas allí? –

-Si mamita, disculpa, es que aquí se esta muy bien-

– No te disculpes, bebe, Estate allí todo lo que quieras. –

-Mami, Quiero pedirte algo- Mi niño dejo de frotarse contra mis senos y cambie su semblante a uno mas serio.

-Dime, que paso? – Replique preocupada

-Veras mami, eh, ya que somos enamorados te quería pedir algo, y no se si quieras-

-Que es bebe, dime con confianza-

-Bueno, yo vi una película el otro dia en la que aparecían un par de novios y pues…-

-Si dime, que hacían esos novios, bebe-

-Pues en un momento la novia le enseña los pechos al novio-

-Que películas estas viendo, bebe?-

No mami, la vi de casualidad, estaba buscando para mi tarea y apareció ese fragmento de la película, yo no …

-Tranquilo, no te estoy regañando. ¿Ósea que quieres que te muestre los senos? Ahora que eres mi novio?-

-Mmm, pues si mami, si, quiero verte las tetas- Que mi hijo me pidiera verme las tetas hizo que me excitara tanto,

súper mojada me puse.

-Pero bebe, pensé que íbamos a ir más lento, recuerda que apenas tenemos una hora de enamorados, apenas nos estamos conociendo- Le contesté de manera jocosa. En realidad, hubiera aceptado cualquiera pedido que me hubiera hecho, estaba super excitada.

-Mmm, pero mami, nos conocemos desde hace trece años, y yo te he querido desde el primer día, tu no me has querido?-

-Jajajaja, que listo eres, bribón. No solo te ame desde el primer día, te ame desde que supe que estabas aquí, en mi barriga. Bebe, antes me tienes que prometer una cosa-

-Qué cosa mami?-

-No le debes contar a nadie que somos novios, ni lo que hacemos como novios, a nadie. Me entiendes, si le cuentas a alguien este puede decirle a alguien más y podrían alejarte de mí. No quieres eso, verdad?-

-No mami, yo no quiero que te vayas. No, yo no le diré a nadie, a nadie- Sentí como la angustia le subía, imaginar que nos separaban era mucho para el

-Tranquilo, amor. No me iré a ningún lado mientras no le comentes a nadie. ¿Bueno, quieres verme las tetas? Pues prepárate, aquí vienen-

Su carita se ilumino y podría jurar que su pene creció mas debajo de su pantalón.

-¿Bebe, no te duele allí abajo? Se ve incomodo-

-Pues duele un poquito-

-Ven. Si te voy a mostrar las tetas tú me tienes que mostrar algo- cogí su pantalón de tela y desabroche su bragueta. Jale luego con apuro con todo y truza. Su miembro salto de su prisión con gran entusiasmo. Una verga gruesa y tiesa se erguía hacia mi.

-Que linda la tienes, bebe. Y esta enorme para tu edad- Exclame mientras tocaba ligeramente ese mástil y me relamía con lujuria.

-Ah. Si ya sabia, en las duchas después de los partidos los demás me molestaban por mi tamaño- Me respondió mi bebe mientras su pene daba un respingo al sentir mi mano.

-Bueno, lo prometido es deuda- Lleve mi mano atrás de mi espalda y desabroche mi corpiño. Con la destreza de haber hecho esto miles de veces, deje mis senos al aire libre. Unos firmes 38F se erguían enfrente de mi niño, que quedo embobado ante tal espectáculo.

-Mami, tus tetas son hermosas- Sus juveniles manos tomaron mis tetas con algo de torpeza, las empezó a masajear suavemente pero con firmeza, explorando por primera vez el seno que alguna vez lo alimento. Su pene estaba mas tieso que nunca y empezó a gotear. Eso me excito mucha mas, estaba super empapada allí abajo.

-Mamita, puedo?- Mi bebe hizo el ademan de querer chupar mis tetas. Eso me puso a mil y ya no resisti mas, tenia que masturbarme allí mismo. Me quite la falda quedando solo en unas bragas blancas. Me eche en la cama en un santiamén y me meti un par de dedos en la concha.

-Ven bebe, ven chupa mis tetas todo lo que quieras- Mi pequeño se acerco rapidamente  poniéndose a mi costado. Cojio mis tetas y se metio mi seno derecho a la boca, o lo que pudo caber en esa boquita tan linda.

Las apretaba todo lo que podía con sus manitas mientras alternaba entre mis tetas para chuparlas., Lo hacía con desesperación, con ansias, con deseo. Me volvia loca como apenas podía con mis grandes pechos, como luchaba contra ellos.  A esto yo me masturbaba frenéticamente con mis dedos y podía sentir que estaba cerca. Con mi otra mano me acerque a su miembro y empece a jalársela. Queria que ambos nos viniéramos juntos.

-Ah mami, mamita, me vengo, mami-

-Yo también bebe, sigue chupando, sigue chupando mis tetas- Grite entre mis jadeos. Todo mi cuerpo empezó a convulsionar, sintiendo como el orgasmo se avecinaba.

-Ven bebe, quiero tragarme toda tu lechita, toda- Le ordene y el obedeció en el acto. Dejo de chupar mis tetas y acerco su pene a mi boca, pero no dejo de apretujar mi seno derecho con una mano.

-Oh Dios, me vengo bebe, me vengo. Te amo tanto mi amor, tanto-

-Maaaaamiiiiiiiiiii- agarre sus nalgas con una mano acercándolo mas a mi para meterme toda su verga en mi boca, no quería desperdiciar ninguna gota. Un espasmo seguido de otro recorrio todo mi cuerpo. Mi hijo apretujo con fuerza mi pecho haciendo que me doliera un poco, pero eso solo hizo que el placer fuera mas intenso. Trague todo su semen y chupe su polla con ansias.

-Besame bebe, besa a tu mujer- Aun con el cuerpo tembloroso, me limpie lo poco que quedo de semen y acerque su carita a mi. Nos fundimos en un beso apasionado, sudorosos, exhaustos.

No me había venido tan fuerte en mucho tiempo. Solo su padre había logrado que me viniera asi, de tal palo tal astilla.

-Señora? – Se escuchó desde la sala. Haciendo que saliera de mi trance de subito. Era María, a pesar que era su dia de descanso, había regresado temprano.

-Ya bajo, Maria. Esperame- Grite. –Bebe, ve a cerrar la puerta, rápido- susurre. Salto de la cama y cerro la puerta en un santiamén, solo para regresar a la cama y poder seguir besándonos.

-Bebe, espera, espera. Tengo que ver a Maria, espera amor- No quería soltarme, pero debía averiguar que sabia Maria.

Tome mi bata y amarre mi cabello. –Quedate aquí, amor. Ahora vengo, mira la tele si quieres, pero muy bajito, eh. Que no sepa Maria que estas aquí- Lo bese una vez mas antes de lavarme la cara. Dejando a mi amante viendo algunos dibujos en la tele, baje las escaleras algo ansiosa.

-María, tenemos que hablar- Continuara….

66 Lecturas/28 junio, 2025/0 Comentarios/por elgomosito86
Etiquetas: baño, colegio, hijo, madre, mama, mayor, padre, semen
Compartir esta entrada
  • Compartir en Facebook
  • Compartir en X
  • Share on X
  • Compartir en WhatsApp
  • Compartir por correo
Quizás te interese
HOMBRE LOBO IV – EL PELIGRO ACECHA 
Un trío inesperado.
Ernesto, mi repartidor favorito. Parte 4
verano 2016
Inicios con mi primo 1 parte
La prima ana
0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.

Buscar Relatos

Search Search

Categorías

  • Bisexual (1.117)
  • Dominación Hombres (3.382)
  • Dominación Mujeres (2.603)
  • Fantasías / Parodias (2.647)
  • Fetichismo (2.291)
  • Gays (20.603)
  • Heterosexual (7.299)
  • Incestos en Familia (16.539)
  • Infidelidad (4.079)
  • Intercambios / Trios (2.782)
  • Lesbiana (1.075)
  • Masturbacion Femenina (755)
  • Masturbacion Masculina (1.578)
  • Orgias (1.762)
  • Sado Bondage Hombre (413)
  • Sado Bondage Mujer (150)
  • Sexo con Madur@s (3.684)
  • Sexo Virtual (227)
  • Travestis / Transexuales (2.242)
  • Voyeur / Exhibicionismo (2.198)
  • Zoofilia Hombre (2.050)
  • Zoofilia Mujer (1.607)
© Copyright - Sexo Sin Tabues 3.0
  • Aviso Legal
  • Política de privacidad
  • Normas de la Comunidad
  • Contáctanos
Desplazarse hacia arriba Desplazarse hacia arriba Desplazarse hacia arriba