MI MAMI Y MI HERMANITA MONTAN PROSPERO NEGOCIO.
Una familia disfuncional, depravada y ambiciosa, en una grave crisis económica, es capaz de hacer cualquier cosa con tal de obtener dinero y gozo..
ESCRITA POR SIREMIS.
1.
Hola, me llamo Francisco, naturalmente, me dicen Pachito.
Soy un joven muy alegre, curioso e inquieto. Además, soy hijo de un incesto entre hermanos.
Papá y mamá son dos hermanitos de mente muy abierta en cuanto al sexo, por eso, mi hermana y yo hemos sido tan terribles en la vida.
Hace 23 años, papá Pascualino y mamá Palomita, eran una parejita de ingenuos, ignorantes, calenturientos y adolescentes hermanitos campesinos. Mis abuelos descubrieron su relación incestuosa y el embarazo de mamá y por eso los echaron como perros de sus fincas teniendo ellos entre 13 y 14 años de edad.
Juntos contaban con muy poco estudio, aun así, decidieron arrejuntarse y venirse a la ciudad a probar suerte, y aunque a papá, en los primeros años, le tocó cargar pesados bultos en las plazas de mercado, y, a mamá lavar montañas de ropa y criarnos a Patricia (La Patico) y a mí, con el tiempo les fue muy bien, juntos validaron rápidamente su bachillerato y papá, después aprendió mecánica y trabajó en un taller por unos buenos años, hasta que, por un gran golpe de suerte, se ganó una lotería.
Papá, en ese tiempo era en cierta manera juicioso, montó su propio taller y compró una buena casa en un buen barrio, es donde vivimos actualmente. Todo iba bien, pero al pasar el tiempo, papá se volvió muy vago, muy vicioso y muy borracho, y comenzó a despilfarrar el dinero en trago, en putas, en marihuana y en otras drogas y mañas, el viejo huevón no tardó en perder su taller de mecánica.
Llegamos a estar en una grave crisis económica, sin embargo, continuamos siendo una familia unida y comprensiva. Actualmente, ya salimos de esa crisis, y ahora les contaré de qué manerita lo hicimos.
2.
Hace 5 años:
Eran las diez de la noche, mi mamá, mi hermanita y yo estábamos muy hambrientos a la mesa de la sala principal de la casa esperando a papá. Papá había salido desde por la tarde supuestamente a conseguir trabajo, y quedó en traer la tan ansiada cena.
Yo estaba muy aburrido y se me dio por hacerme la paja bajo el mantel.
Mamá y mi hermanita Patico, al notarme bien pajoso, no me dijeron nada, pero se fueron para el comedor de la cocina ya que también se dieron cuenta de que yo las estaba mirando con ojos de lobo hambriento de carne y de sexo.
Seguí contento haciéndome mi buena pajota cuando escuché afuera las voces de don Eliécer y de su hijo Johny, los celadores de la cuadra.
Eyaculé unas cuantas goterotas de espeso semen sobre la alfombra, me guardé mi erecta verga y fui a la ventana a mirar qué estaba ocurriendo con ellos, pero no era gran cosa, los celadores solo estaban piropeando, molestando y asediando a algunas mujeres bonitas que caminaban por ahí.
Me quedé mirando por la ventana hacia la calle. Al igual que mamá y mi hermanita, yo tenía un hambre voraz y estaba esperando a que llegara papá con la cena.
Pasados unos minutos vi que papá, caminando por la calle, llegaba tambaleándose de una fuerte borrachera la cual le ganó y le hizo caer como un sapo sobre el liso y limpio pavimento.
Mientras yo me cagaba de la risa viendo la graciosa caída del borracho de mi viejo por la ventana, los celadores rápidamente lo ayudaron a poner en pie, lo saludaron muy cordialmente y lo ayudaron a sostenerse hasta llegar a la puerta.
Papá les agradeció y los celadores siguieron con su ronda y su asedio a cuanta mujer veían pasar.
Papá frente a la puerta, al esculcarse los bolsillos y no encontrar sus llaves, usó el timbre.
Yo le abrí la puerta, lo saludé, y, adelantándome, fui al comedor de la cocina donde estaban mamá Paloma y mi hermanita Patricia mientras papá entraba al baño.
Papá, muy sinvergüenzonamente, había llegado hasta esa hora, sin la cena, oliendo a trago, a feo, fumando vicio y con un tufo tremendo.
YO: ¡Llegó papá… y con las manos vacías! ¡El viejo no trajo lo de la cena! ¡Nos tocará acostarnos sin cenar!…
MAMÁ: ¡Caramba! ¡Estoy segura que ese perro estuvo donde las putas gastándose con ellas la poca plata que nos queda!… ¡Ni modos… va tocar acostarnos a dormir para no sentir hambre!…
PATRICIA: ¡¿Otra vez sin cenar?! ¡Uy, no! ¡No aguanta, mamá!… ¡Jueputa vida!… ¡Estoy que me muero de hambre! ¡Estoy que me como lo que me encuentre!…
La hambrienta de la Patricia recogió una fea y sucia cucaracha del suelo y se la metió a la boca masticándola crujientemente ante la asombrada mirada de su madre y hermano.
YO: ¡Pues me tocó hacerme más pajas para no pensar en comida, mamá!… Jejeje…
MAMÁ: Jajajaja… ¡Chino pajuelo!… Jajaja… ¡Pero tienes razón, caballerito, te va tocar pajearte hasta el alma para no sentir hambre esta noche, mi amor!
YO: ¡Hermanita ¿me vas a hacer la paja?!…
PATRICIA: ¡Cállate, marica! ¡A ti jamás te la haría, huevón!…
YO: ¡Vaya! ¡Qué carácter!… ¡Tú acabaste de decir que te comerías lo que encuentres, perrita! ¡Pues entonces cómete mi verga, putita! ¡Hazme la paja con tu boquita de mamadora!… ¡Al menos mi verga sabe mejor que las cucarachas!… Jejeje…
PATRICIA: ¡Mamááá!… ¡Pachito me está molestando!…
MAMÁ: ¡Pachito!… ¡Ya, párala!… ¡No molestes a tu hermanita!…
YO: Jajaja… ¡Está bien!… ¡Oye, mamá, no vayas a regañar a papá!
MAMÁ: ¡¿Y por qué no tendría qué regañarlo?!
YO: ¡Porque papá te ha permitido tener tus amantes y él también tiene derecho a divertirse y a visitar a las puticas de vez en cuando!
MAMÁ: ¡No me digas!…
YO: ¡Pues sí te digo!… ¡Además él es hombre!… ¡Tú entiendes… los hombres tenemos necesidades sexuales y ganas de culo muy constantemente!
MAMÁ: Jajaja… ¡Pero papito, las necesidades sexuales de tu papá las puedo suplir yo! ¡Si él tiene muchas ganas de culo pues que me lo pida y me lo clave! ¡No hay necesidad de gastarse el poco dinero que nos queda con esas perras bandidas y ladronas!
YO: ¡Es que los hombres nos aburrimos de comer la misma cuca y el mismo culo de siempre y por eso buscamos otras hembrotas, mami!
MAMÁ: Jajajaja… ¡Atarván!… Jajaja… ¡Chino alcahueta!… ¡No defiendas a tu papá!…
Papá, un tanto ebrio, entró al comedor de la cocina, y mamá acercándose a él, le dijo:
MAMÁ: ¡Hola mi amor! ¡Por fin llegaste, picaronsote!…
Papá se sacó el cigarro de su boca y mamá se le abalanzó encima y lo abrazó tan intensamente que casi hace caer al borrachito.
Mamá besó en la boca con mucho cariño a papá, pues, a pesar de él ser tremendo vago, un completo vicioso y un bueno para nada, ella lo amaba profunda e incondicionalmente.
Mientras ella lo besaba y le agarraba la pija sobre el pantalón, él le sobaba sus inmensas tetotas y le agarraba sus buenas nalgotas, eso lo hacían muy descaradamente frente a mi hermanita y a mí, lo cual ya no era raro, pues era costumbre ver esas grotescas manoseadas entre ese par de mañosos.
Al separarse sus labios, papá, con voz de borracho, dijo:
PAPÁ: ¡Caramba! ¡Qué manera de besar la tuya, mamacita rica!… ¡Wow!… ¡Qué rico!… ¡Se nota que tienes ganas de verga!… Jejeje…
Seguidamente mamá le quitó el cigarro de marihuana a papá y empezó ella a fumarlo mientras comenzó a llamarle la atención, pero de muy buena manera.
MAMÁ: ¡Al menos me trajiste un poquito de vicio, papi! ¡Con esta hambre que tengo soy capaz de llevarme todo a mi boquita!…
PAPÁ: Jajajaja… ¡Lo que tienes es hambre de verga ¿no zorrota?!… ¡Y hablando de hambre, sírveme la cena!
MAMÁ: ¡Te guardé un poquito de pollo del almuerzo, amor!… ¡Oye, ahora cuéntame ¿dónde te la pasaste todo el día de hoy? cariño! ¡¿Estuviste donde las perras?!
Mientras mi hermana y yo mirábamos con cara de hambre cómo mamá le servía a papá la única porción de pollo y de patatas que había para comer, él se sentó a la mesa, se echó un bocado a la jeta y masticando como un cerdo contestó lo siguiente con la boca llena:
PAPÁ: ¡Me fui a buscar trabajo por la tarde!… ¡No encontré nadita!… ¡Y, al atardecer, me dio arrechera y me fui a buscar a la puta de la Johanna, nuestra antigua compañerita del instituto de validación y amiguita del alma ¿la recuerdas? Palomita!
MAMÁ: ¡Cómo no voy a recordar a esa mujerzuela barata!… Jejeje… ¿Otra vez estuviste dándole pinga a esa vagabunda de mierda? cariño!…
PAPÁ: ¡Tu bien sabes que esa mujerzuela es mi perra preferida! ¡Siempre me han encantado las tetazas y el culazo de esa hijueputa!
MAMÁ: Jajajaja… ¡A ti te encantan todas las putas, mi amor!
YO: Jajajaja… ¡Papá, si sabe gozar la vida!… ¡Bacano!… ¡Eres todo un pervertido, viejo!…
PAPÁ: Jajajaja… ¡Exacto, campeón! ¡Al menos mi verga y yo sabemos divertirnos en esta cochina y puta vida!… Jajajaja…
MAMÁ: ¡Tu papá es terrible, Pachito!… ¡Muy terrible!… Jejeje… ¡Ese es el ejemplo que te está dando!… Jejeje…
YO: ¡Bacano!…
Mamá, a pesar de ser una señora joven, hermosa y acuerpada, nunca fue muy decente que digamos, tenía un marcado aspecto ordinario, inculto y vulgar, y se sentó cerca a papá, poniendo la silla al revés, es decir, mamá estaba sentada abierta de piernas con la silla entre ellas, poniendo sus brazos y mentón sobre el espaldar, a lo mero macho.
Y si mamá era ordinaria y vulgar, papá no se le quedaba atrás, a la vez que él comía, iba hablando con la boca llena desparpajando comida por todas direcciones, también eructaba y soltaba pedos con frecuencia, y mi hambrienta hermanita estiraba la mano para recoger las sobras que salían disparadas de su sucia boca y se las comía sin asco.
PAPÁ: ¡Uff!… ¡Es que esa marrana de la Joha lo mama muy rico y me da severo culote! ¡Tú vieras cómo hoy me encarnicé con su culazo y le di rica verga por ese rico ojete! ¡Qué bárbaro! ¡Se lo destrocé!… Jejeje… ¡Se lo dejé como un cráter a esa malparida!… Jajajaja… ¡No soy capaz de dejar a esa puta, ella me domina, es una bruja!
MAMÁ: ¡Wow!… Jajaja… ¡Mejor no sigas diciendo esas cosas delante de los chicos! ¡Qué dirán ellos!… Jejeje…
YO: ¡No te preocupes, mamá, no hay nada que la Patico y yo no sepamos ya! ¡Papá es severo depravado!… Jejejeje…
PAPÁ: Jajaja… ¡Además la perra te envió saludos, Palomita! ¡Me mandó a preguntarte que cuándo le vas a volver a lamer la raja!
YO: ¡¿Qué?!… ¡Vaya, mamá! ¡¿Le lamiste la raja a una puta?!… ¡Wow!… ¡¿Cuándo fue eso?! ¡Yo no lo sabía!…
MAMÁ: Jajaja… ¡Antes de que me lances juicios, mijo, déjame decirte que Chupar y lamer cuquita no es ningún pecado, papi!… Jejeje… ¡Sin embargo, eso no es algo como para una estar contándolo en familia como si fuera cualquier cosa!… Jejeje… ¡Además eso fue hace mucho tiempo, mijo! ¡Sucedió una vez que hicimos un trío como para experimentar un poco! ¡Éramos ella, tu papi y yo! ¡Esa perra tiene una panocha muy tentadora y deliciosa! ¡No me aguanté las ganas y le di lengüita! ¡Y fue rico porque le sabía delicioso esa cautivadora cucaza a esa puta!
YO: ¡Wow!… ¡Esa sí no me la sabía, mamá!… ¡Me dejaste sorprendido y excitado!… ¡De las cosas que uno se entera hasta ahora!… Jejeje… ¡Yo sabía que te gustaba chupar una que otra pija por ahí, pero no sabía que eras bisexual, mami!
PAPÁ: ¡Tu mamá es toda arepera, mijo!… Jajajaja…
MAMÁ: Jajaja… ¡Con que la Joha me envió saludos!… Jejeje… ¡Perra esa!… Jajaja… ¡Pero qué bueno que me haya enviado saluditos! ¡Al menos esa loca también me recuerda!
Mientras papá seguí tragando como cerdo, mamá y yo continuamos amenamente la conversación, aunque estuviéramos hambrientos conservábamos buen genio, cosa que mi hermana no hacía, Patricia sí estaba muy brava, se le notaba en esa mirada de fiera hambrienta.
YO: ¡La Patico y yo no conocemos a esa puta! ¡¿Quién es esa tal Johanna? mami!
MAMÁ: ¡Johanna era una compañerita del instituto de validación donde estudiamos tu padre y yo!
YO: ¡¿Y se volvió puta?!
MAMÁ: ¡Así es, mijo! ¡Totalmente puta! ¡La emputeció la calle!
YO: ¡Wow!… ¡Que rico!… ¡Se dejó corromper esa zorra!
MAMÁ: ¡Aunque ya en ese entonces se comportaba como toda una putita dentro del instituto! ¡No hacía otra cosa que chupar pollas y acostarse con todos los compañeros!…
YO: ¡Caray!… ¡Me gustaría conocerla!…
Sonreí, y mamá, dirigiéndose a papá, con fuerte voz, expresó:
MAMÁ: ¡Oye, Pascualino, a la próxima vez que visites a esa puta dile que gracias por el saludo! ¡Dile también que tenemos que volver a vernos algún día para chismosear y adelantar cuaderno!… Jejeje… ¡Y que mejor sea ella la que me meta su puta lengüa por el culo cagado esta vez!… Jajaja…
Papá y yo reímos al escuchar a mamá y sus groserías, en serio era gracioso y estimulante oírla y verla cuando hablaba así de vulgarmente.
PAPÁ: Jajajaja… ¡Se lo diré a esa cerda!… Jejeje…
MAMÁ: ¡Me agrada saber que estuviste contento, Pascualino!
PAPÁ: ¡Bastante, mujer!… ¡Bastante!… ¡Me divertí mucho con esa prostituta!… ¡Uno la agarra de las tetas y le da verga bien duro por esa chocha y ese culo! ¡La puta apenas se estremece como si ella fuera una muñequita de trapo!… Jajaja… ¡Tú la vieras!…
Yo estaba divirtiéndome mucho escuchando a papá y mamá y participando de esa obscena charla, pero mi hermana, muy callada, tenía una mirada de querer matar y comer del muerto. Papá prosiguió en su narración.
PAPÁ: ¡Definitivamente nací para disfrutar la vida!… Jejeje… ¡Es que mientras me gozaba y le taladraba el culo a esa vagabunda ella me hacía reír muchísimo! ¡Como siempre, esa degenerada sale con unos cuentos que ni te imaginas, Palomita! ¡Esa Joha, aparte de ser una ninfómana y loca, es súper morbosa y vulgar!… ¡Me encanta que esa mujer sea así!… Jejeje…
Papá decía eso con un gran desparpajo y un poderoso orgullo como si lo que estaba contando fuera algo muy honorable y decente, y mamá le contestó:
MAMÁ: Jajaja… ¡Si, ella es muy chistosa!… ¡La hija de puta se sabe muchos chistes supremamente groseros! ¡Acuérdate de los que nos contaba en el instituto!… ¡Eran para taparse los oídos!… Jejeje…
PAPÁ: ¡Uy, sí!… ¡Eran revulgares!… ¡Eso es lo que más me gusta de ella, su morbo, su alegría, su docilidad, su facilidad para soltar miles de palabrotas por segundo, sus gemidos, sus gritos, sus gestos!… ¡Juemadre!… ¡Por todo eso siempre que voy por ese sitio busco el culo de esa puta grosera!… Jejeje…
Mamá se levantó de la silla, y ahora sí, poniéndose un poco seria, expresó:
MAMÁ: ¡Me parece bien, cariño, pero ahora sí debo decirte algo muy serio!…
PAPÁ: ¡Aiiicchhh!… ¡Tan bien qué íbamos, carajo!… ¡¿Ya vas a dañar el rato con algún reproche o qué? so perra!…
MAMÁ: ¡No te preocupes, putito, que no es ningún regaño! ¡Solo es una observación para que la tengas en cuenta!
PAPÁ: ¡Bueno, está bien!… ¡Dime, mujer!
MAMÁ: ¡No es por molestarte, pero por lo que veo no conseguiste trabajo y te estuviste gastando la poca platica que nos quedaba en esa putica de la Johanna y en vicio!…
PAPÁ: ¡Ay, mujer!… ¡Eso ya lo comenté!… ¡No comiences!… ¡Ya veremos que haremos después!… ¡Dios nos ayudará!… ¡Hay que tener fe como siempre!… ¡A ver si nos hace ganar la lotería como la vez pasada! ¡Diosito lindo!…
Papá se persignó muy católicamente, y yo, apoyándolo, metí mi cucharada:
YO: ¡Dios proveerá, mamá!… ¡No se la montes al viejo!…
Mamá y mi hermana me hicieron una mala mirada y prosiguió el llamado de atención a mi papá:
MAMÁ: ¡Mira, Pascualino, tu hija Patico es la que más tiene hambre de todos y estaba muy esperanzada en que trajeras alguito para comer!… ¡Te estuvo esperando ahí desde hace horas con la cara larga!… Jejeje…
Papá, mientras relamía su plato como un cerdo, miró a Patico, quien estaba cabizbaja, enojada y haciendo muy mala cara, y luego, mirando a mamá y riendo burlonamente, le dijo:
PAPÁ: Jajaja… ¡Bueno, esta vez no se pudo!… ¡Tocará que la nena se aguante el hambre hasta mañana!… Jejeje… ¡Ya mañana miraré cómo consigo lo del almuerzo! ¡Por el momento no me molestes, Palomita!… Jejeje… ¡Soy un hombre libre y dichoso! ¡Aunque yo sea un vago y no tenga dinero ni trabajo estoy seguro que cuento con una hermosa familia que me comprende y me apoya!… Jejeje… ¡Eso me gusta de ustedes!… Jejeje… ¡Déjame seguir siendo feliz, mamasota rica!
Papá tiró bruscamente el plato a la mesa y mi hermana lo agarró para seguir relamiéndolo todito. Inmediatamente el viejo le dio una nalgada en la falda a mamá y ella rio como si nada. Mi mami le dio una cerveza y procedió a sentarse sobre el mesón de la cocina.
Mi callada hermanita, la mimada colegiala, muy desanimada, triste y enojada, no se aguantó más tanta desfachatez, tiró el plato contra la pared rompiéndolo en pedazos y se atrevió a gritarle a papá lo siguiente mientras él le daba unos sorbos a su cerveza:
PATRICIA: ¡Jueputa!… ¡No trajiste la cena, papá!… ¡Es el colmo!…
Al ver el violento y explosivo acto de mi hermanita y al escuchar su irrespetuoso grito hacía papá, mamá automáticamente cambió su parecer y se puso ahora en defensa de su vago y puerco marido.
MAMÁ: ¡Ya no molestes a tu papá, Pati! ¡No le grites! ¡No seas irrespetuosa! ¡Déjalo descansar, pobrecito! ¡No seas injusta! ¡Él hizo lo posible por conseguir empleo, pero el empleo no quiso ser encontrado! ¡¿Qué culpa tiene él de no haber traído la cena?!…
Mi hermana continuó hablando en voz bastante alta e irreverente:
PATRICIA: ¡No lo alcahuetees más, mamá!… ¡No justifiques a este vago!… ¡Papá, te estábamos esperando desde hace horas con la comida y llegaste con las manos vacías y untadas de chocha de puta callejera! ¡¿No te da vergüenza y tristeza con tus hijos?! ¡No es justo que le dejes los últimos pesos que nos quedan a las putas y al cantinero!… ¡Todos ustedes están locos! ¡¿Acaso yo soy la única que tiene cerebro y piensa en esta puta familia?!
Y abriendo la boca y señalando insistentemente con su dedo índice dentro de ella, añadió:
PATRICIA: ¡Agghhh!… ¡Agghhh!… ¡Tengo hambre!… ¡Agghhh!… ¡Agghhh!… ¡Tengo hambre!… ¡Agghhh! ¡Agghh!… ¡Quiero jartar!… ¡Entiendan eso!…
Al escuchar las palabras de Patricia, papá se alteró un poco, dio un fuerte golpe en la mesa con su puño, y enojadamente le profirió las siguientes fuertes palabras a mi desafiante hermanita con voz de borracho altanero:
PAPÁ: ¡Patricia!… ¡Perra!… ¡Qué palabras son esas para con tu padre!… ¡¿Tú también me vas a echar lora?! ¡Tan alzada esta pequeña zorrita! ¡Tú ya estás como grandecita para que yo te siga sosteniendo! ¡Qué tal ésta!…
Patricia quedó asombrada y papá prosiguió el regaño:
PAPÁ: ¡Mira, pequeña putita!… ¡Me lo vas a tener qué mamar para que yo siga manteniéndote, señorita!… ¡Qué tal esta!… ¡Y tras del hecho se pone bravita esta hijueputa! ¡Ve mejor a meterte un dedo, zorra!… ¡Yo también tengo derecho en divertirme de vez en cuando sin que me vengas a fiscalizar la vida! ¡¿Acaso me quieres ver esclavizado de por vida trabajando?! ¡No mamita, así no son las cosas!…
El regaño que papá le dio a Pati nos hizo fue reír a mamá y a mí.
Pati respiró profundo, se calmó un poco y respondió:
PATRICIA: ¡Claro que no quiero verte esclavizado, papá, disculpa! ¡Pero es que ya no aguantamos más esta puta pobreza!…
Patricia casi llora, y yo, abrazándola, manoseándola un poco y besándola en las mejillas, la consolé.
YO: ¡Tranquila hermanita, no te preocupes que Dios proveerá! ¡Ten fe, mamacita!…
Mi hermanita, de repente, muy triste y alterada, retiró con agresividad mis manos de encima suyo, se puso de pie sobre una silla y se subió la faldita del uniforme del colegio, y, mostrándonos sus calzones, dijo:
PATRICIA: ¡Mamá!… ¡Papá!… ¡Hermano!… ¡Miren todos!… ¡Yo ya tengo hasta los calzones rotos! ¡Qué pena con mi novio cada vez que me mete mano y me los ve así!
Me acerqué a verle los cucos a mi hermanita y, a la vez que le sobaba las piernas, exclamé:
YO: ¡Wow!… ¡Es cierto, má!… ¡La Pati tiene los cucos bien rotos! ¡Doy fe de que se le ve toda la rica chochita!
Mamá rio, y, en seguida, en tono jocoso y burlón, le contestó a la Patico:
MAMÁ: Jajaja… ¡Pues tu novio feliz de verte la almeja, mi amor!… Jejejeje…
YO: ¡Velo de forma positiva, Patico! ¡Todos esos huecos en tus cuquitos te sirven de ventilación, hermanita! ¡Pues como tienes una cuca bien caliente te convienen todos esos agujeros!… Jajajajaja…
Todos reímos y mi hermanita se puso furiosa de nuevo, se bajó de la silla, se volvió a sentar estirando las piernas y poniendo los pies sobre la mesa, y papá le dijo:
PAPÁ: ¡Pues la solución es fácil, mamita, no te pones cuquitos y ya!…
PATRICIA: ¡¿Y ya?!… ¡¿Acaso sabes lo que me estás diciendo? papá!… ¡Las mujeres tenemos que ponernos cucos!… ¡No hay de otra!…
MAMÁ: ¡Yo a veces ni me los pongo!… Jejejeje…
YO: ¡¿En serio? má ¿no te pones cucos?!…
MAMÁ: Jejeje… ¡Pues pa’ qué!… ¡Cuando voy a divertirme no son necesarios los cucos! ¡¿Entiendes? papi!
YO: ¡Wow!… ¡Entiendo, mamá!… ¡Uuff!… ¡Eres terrible!… Jejeje…
Reímos, y papá, mirando a mi hermanita, manifestó:
PAPÁ: ¡Mamita, piénsalo mejor!… ¡Ve el lado bueno de eso, mi Pati!… ¡Mira, muñequita, así sin cuquitos a tu novio y a quién sabe cuántos sujetos más les quedaría fácil darte pipí por esa dulce rajita!
PATRICIA: ¡Paapááá!…
PAPÁ: ¡Estoy seguro que tu novio debe tener tremenda vergota ¿no?!
PATRICIA: ¡Pues sí!… ¡Es grande!…
PAPÁ: ¡Tú ganas porque más gozarías sin cucos! ¡Pues no sufrirías hambre porque te comerías por la chocha severas barrotas de buen salchichón vergario, putita!… Jajajaja…
Todos reímos ante la graciosa barrabasada que había acabado de decir el borrachín de papá, fue genial, yo tenía tremenda erección, a cada ratico me tocaba mi verga sobre mi bragueta, y Pati contestó muy seria y preocupada lo siguiente:
PATRICIA: ¡Pues sí, papá, pero tampoco hemos pagado la cuota del colegio desde hace meses! ¡El rector ya me dijo que si no pagó esta semana no me va a dejar entrar a clases! ¡Y como yo no se lo he querido volver a mamar a ese viejito hijueputa porque ya ni leche le sale, me tiene entre ojos! ¡Además soy muy indisciplinada y los profesores no me aguantan y le han pedido que me eche!… ¡Puto colegio, ya ni quiero volver allá!…
MAMÁ: ¡Nenita, mi amor, tocará que hagas un mayor esfuercito bucal y le sigas rogando al señor rector que te dé más placito de pagar! ¡Ya sabes a qué me refiero, muñequita preciosa!
Mamá puso cara de puta depravada y viciosa, y, descaradamente, le hizo a mi hermanita la grosera mímica con sus manos, su boca y su lengüa de estar mamando una verga invisible, papá y yo reímos viendo a mamá mover su lengua dentro de su mejilla.
YO: ¡Yo sí sé a qué te refieres, mamá! ¡Te refieres a sendos trabajos orales!…
MAMÁ: ¡Así es, papito! ¡A deliciosos trabajos bucales!… Jejejeje…
YO: Jajajaja… ¡Lo dicho, mamá! ¡Eres terrible!…
PATRICIA: ¡Mamá!… ¡No me haces gracia!… ¡No me simpatizas!…
MAMÁ: ¡Pero amor, la verdad es que te va tocar estimular un poco más al señor rector! ¡Yo veré, mija! ¡Mucho entusiasmo con su barra! ¡Mucha lengüita y mucha presión en los labios, mi nena! ¡Eso sí, vas a necesitar un buen labial y un buen brillo para esos labios, mamita!
YO: ¡Un buen labial para que no se te marchiten los labios de tanto mamar verga de anciano, hermanita!… Jajajaja…
PATRICIA: ¡Ojo!… ¡No me jodas más, gran huevetas!
MAMÁ: ¡Pero el viejito no está tan mal, mi nena!
Y mi hermanita, cruzándose de brazos, le contestó con molestia ahora a mamá:
PATRICIA: ¡Ay… no jodas, mamá!… ¡Ponte seria!… ¡De verdad ¿qué vamos a hacer ante esta mala situación económica?! ¡Yo ya me cansé de estarle mamando la verga a ese viejito para que no me saque del colegio! ¡Mejor dicho ya ni paguen porque no quiero seguir estudiando, jueputa!… ¡Con hambre no puedo ni pensar!…
MAMÁ: Jajaja… ¡No seas tan exagerada, mamita!… ¡Pero bueno, discúlpame!… ¡No se me ocurre qué más hacer! ¡La verdad es esa, mija, no sé qué hacer!… ¡Yo me le mediría a trabajar para salir de esta mala situación, pero es que no sé hacer ni un culo!
YO: ¡Mamá, no lo tomes a mal, pero si seguimos así de mal económicamente va tocar que salgas a la calle y te prostituyas!… Jejejeje… ¡No le veo más solución ni alternativa!…
Papá casi se atora con un sorbo de cerveza al soltar una sonora carcajada al escuchar lo que dije. Mi hermanita aprovechó para darle unos fuertes golpes en la espalda para que él se desatorara, se puso rojo como un tomate y al ratico vomitó esa cerveza junto a un pedazo de pollo ya digerido que se le devolvió, y mamá, mirándome sorprendida, expresó:
MAMÁ: ¡¿Qué dijiste? papi!…
YO: ¡Que te metas de puta a callejear, mamá!… Jejeje… ¡Igual, nunca te da pena vagabundear por ahí!… ¡Tienes mucha madera para ser puta de esquina, mamá, no veo por qué no!
MAMÁ: Jajajajajajajaja… ¡Chino verriondo este con las que me sale!… Jajajaja… ¡Me hizo fue cagar de la risa este puto atrevido!… Jajajajaja… ¡¿Sí oíste a tu hijo? Pascualino!… ¡Con el chistecito con el que me acabó de salir este hijueputica!… Jajajajajajajaja…
Ahora mamá se toteó de la risa. Papá tomando aire siguió riendo y, dándose golpecitos en el pecho, dijo:
PAPÁ: Jajajaja… ¡Lo oí perfectamente, Palomita!… Jajaja… ¡Buena esa Pachito, así se habla, campeón!… Jajaja… ¡Eres bien macho! ¡Le estas aconsejando a tú propia madrecita que se ponga a putear para sostener el hogar!… Jajaja… ¡Eres lo máximo, hijo!… Jajaja… ¡Tu mamá como puta callejera!… Jajajajaja… ¡Ya me imagino a la Palomita parada en una esquina en diminuta minifalda y en severo escotazo mostrando piernotas, culazo y tetazas y pispiándole indecentemente a cuanto hombre y bandido pase por ahí!… Jajajajaja… ¡Qué buena idea, genio!… Jajajajaja… ¡¿Por qué rayos no se me había ocurrido a mí eso antes?!… Jajaja…
Mamá riendo y mi hermana muy seria, se quedaron mirando a papá mientras este reía como loco, él se dio cuenta de su impertinencia y añadió:
PAPÁ: ¡Bueno, qué pena, es que me gustó el chiste del cabezón este!… Jejeje… ¡Para qué, pero estuvo bueno el chistecito!… Jejeje…
YO: ¡Pero no era ningún chiste, papá!…
PAPÁ: ¡¿Ah no? diablillo!… Jejeje…
YO: ¡Pues claro que no, viejo!…
MAMÁ: ¡¿No era de bromita? papi! ¡¿O sea que lo dices es serio? mijo!
Mamá me miró haciendo una mueca como queriendo llorar, obviamente de mentiritas, y, con una vocecilla asimilando un llanto, me dijo:
MAMÁ: ¡¿Acaso quieres ver a tu propia mamita semidesnuda ofreciéndose a los hombres en la esquina, siendo una viciosa completa, pasando peligros, aguantando frío y siendo manoseada por muchos desconocidos como una vulgar chupavergas callejera? mijo!… ¡¿Acaso quieres verme puteando en la calle como una cochina mujerzuela cualquiera o qué?!
YO: ¡Por Dios, mamasota!… ¡Sí!… ¡Pues claro que sí!… ¡Obvio que me gustaría verte en ese plan, mami! ¡Acaso por qué no?! ¡La prostitución es el trabajo más antiguo del mundo y es muy digno!… ¡Igual, muchos hombres ya te lo han clavado gratis! ¡Desde ahora podrías empezar a cobrar y a salir a la calle a ofrecerte como una profesional, mamá! ¡Date cuenta de lo buena que es mi idea!…
PAPA: Jajajaja… ¡Jueputa!… ¡Qué risa!… Jajajajaja… ¡Qué chino malparido tan atrevido!… Jajaja… ¡Me cago de la risa!… Jajajajajaja…
Papá soltó tremenda hilera de pedos, y mamá me dijo:
MAMÁ: Jejeje… ¡No puedo creer que me estés diciendo eso así de forma tan sinvergüenza, papito!
YO: ¡lo digo en serio, mamá! ¡Perdona que te lo diga así como así, pero, tú sabes que yo soy muy franco y digo las cosas tal como las pienso! ¡No te enojes! ¡Tú misma me enseñaste a ser así!
MAMÁ: ¡Está bien, papito! ¡No estoy enojada, más bien perdóname tú a mí! ¡Yo sé que te he inculcado a decir siempre la verdad y a ser espontáneo! ¡No te preocupes, mi vida, mi bebé hermoso!
YO: ¡Gracias, mami!… Jejeje… ¡Continuando con el tema, te digo abiertamente que de verdad tú deberías ejercer la prostitución, así como lo hace tu excompañera de estudios, la tal Johanna esa! ¡Te repito que eso sería la solución a nuestros problemas económicos y podrías darme todo lo que yo merezco!
MAMÁ: ¡¿Tú crees? papi!
YO: ¡Claro, mami! ¡Te iría muy bien! ¡Es que estás muy buena, mamasota rica! ¡Mírate esas piernotas! ¡Mírate esas tetotas!… ¡Son una verdadera delicia!… ¡Uuufff!…
Miré a mamá con lascivia y ella se alzó un poco su falda para mirarse sus piernas y luego se agarró sus tetas sobre su blusa y de manera venidosa se las apretó y se las movió.
YO: ¡Madre mía!… ¡Severa viejota!… Jejeje… ¡Ni retratada para ese oficio!… Jejeje… ¡Ganarías muchísimo dinero porque todos los hombres, sin duda alguna, querrían contigo, mamá! ¡¿Quién diablos no desearía meterte la verga? hasta yo querría!… Jejeje… ¡El negocio de la prostitución es uno de los más lucrativos, madre!
Mamá, sintiéndose halaga por lo que le había acabado de decir, muy vanidosa, estiró sus buenas piernotas sobre la longitud del mesón de la cocina, y muy coquetamente, con una mano se alzó nuevamente su falda, dobló un poco una pierna, y con la otra mano se abrió someramente su escote, se puso en una pose sensual de modelo de catálogos y haciendo una voz provocativa, me miró fija y lujuriosamente a los ojos, y me preguntó:
MAMÁ: ¡¿Te parezco buenota? papasote rico y vergudo!
Mi hermanita estaba asombrada, papá silbó y yo le respondí a mi seductora mami:
YO: ¡Uff!… ¡Claro que sí, mamasota rica!… ¡Mírate nada más qué buenas piernotas y qué par de senotes tan grandes y atrayentes tienes! ¡Y con mucho respeto, y sin que lo tomes a mal, te digo que, con esa carita sensual de puta barata y de linda mamadora que tú te mandas yo creo que te iría muy bien ejerciendo ese delicioso oficio, mami!… Jejeje…
Todos rieron al escuchar lo que me atreví a decir, hasta mi hermanita no pudo aguantar y rio, y papá, muy entusiasmado, exclamó:
PAPÁ: Jajaja… ¡Este chino si es bien tremendo!… Jajaja… ¡Atreverse a decirle eso a la propia mamá!… Jajaja… ¡Chino hijueputa tan lanzado!… Jajajaja…
YO: Jejeje… ¡Pues a mí no me da pena, viejo! ¡No sé por qué se alteran! ¡Es algo completamente normal! ¡Nos tenemos confianza ¿o no?!
PAPÁ: Jajaja… ¡Claro, mijo!… ¡Pero fuera de chiste, y pensándolo bien, el niño tiene toda la razón, Palomita! ¡Te va tocar ponerte a ejercer la calle! ¡Mira que la Johanna, me contó que ella gana bastante bien por día puteada!… Jejeje…
YO: ¡Si, mamá, en eso se gana muy bien! ¡Por lo menos a las putas bonitas les va muy bien y tú eres una verdadera remamasota rica y apretadita, una hembrota a todo dar! ¡Deberías animarte y al menos intentarlo, bomboncita!…
MAMÁ: Jajaja… ¡Gracias, mi amor, pues para serte sincera yo estaba pensando en eso mismo desde hace unos días, pero no me había atrevido a proponerles tal cosa!
YO: ¡¿De verdad? mamá!…
MAMÁ: ¡Si, cariño!… ¡Ya que tu papá no consiguió trabajo y ya que tú lo propusiste me tocará ahora sí prostituirme para salir de la miseria!
YO: ¡Uff!… ¡Bacano!… ¡Me dejas sin palabras, má! ¡Oye ¿lo dices en serio? ¿De verdad te le medirías a ser puta?!
MAMÁ: ¡Si tuviera que prostituirme para ayudar a que ustedes salgan adelante, yo, como buena madre que soy, lo haría con muchísimo gusto y deleite!… ¡A fin de cuentas me gustan mucho las vergas y la vagabundería!… Jejejeje…
PAPÁ: ¡Así se habla, Palomita!… ¡Esa es mi mujer, carajo!… ¡Un aplauso para ella!…
Todos aplaudimos, hasta la seria y hosca de mi hermanita se animó a hacerlo.
YO: ¡Wow!… ¡Me haces el hijo más feliz del mundo, mamá!… ¡Casi lloro!… ¡Estoy bastante emocionado!… ¡A pesar de yo haberte hecho esa propuesta tan indecente nunca pensé que fueras a estar tan de acuerdo con ella, má! ¡Vaya que eres puta!… Jejeje…
MAMÁ: ¡Es que tampoco veo de otra para salir de esta crisis, papi! ¡Además ustedes tres merecen lo mejor y yo también merezco gozar de unos buenos pipís como la perra que bien soy!…
PAPÁ: ¡Esa!… ¡Esa es mi hembrita!…
YO: ¡De verdad me has dejado impresionado y anonadado, mamá! ¡Te lo vuelvo a preguntar, mami ¿estás segura de querer prostituirte?!
MAMÁ: ¡Ya te lo dije, mi vida!… ¡Pues claro, papito!… ¡Además lo único que sé hacer en la vida es culiar y ser bien morbosa, cochina y vulgar, y precisamente esas son las condiciones necesarias para ser puta!
YO: ¡Wow!… ¡Me tienes alucinando, mamá! ¡Tengo ganas de hacerme un pajazo! ¡Me gusta y me excita todo lo que estás diciendo! ¡Eres súper genial! ¡Vas a ser la mejor de las putas callejeras!
MAMÁ: ¡Gracias, amor!… ¡Realmente no le veo lo malo a tener que putear! ¡Ese es un oficio como cualquier otro! ¡Además nunca he sido tan decente que digamos! ¡No soy una mojigata ni he tenido buena moral, por eso me le mediría con gusto a ejercer ese trabajo! ¡Pero el único problema que sí logro detectar es que ir a putear a la calle es un poco peligroso!
PAPÁ: ¡Eso no importa, Palomita! ¡Sé positiva! ¡Desde que tengas claras posibilidades de traer dinero al hogar bien vale la pena que te arriesgues un poquitín! ¡Hazlo por nosotros! ¡Me parece buena idea la que se le acabó de ocurrir al cabezón del Pachito! ¡Podrías asociarte con la Johanna y así se reducirían los riesgos!
MAMÁ: ¡No sé!… ¡Podría ser!… ¡Como para estar acompañada de la Johanna al menos! ¡Pero, ella es bien mañosa, de pronto esa perra termina robándome plata o algo así!
YO: ¡Pues si esa perra intenta robarte dinero le rompes la puta cara y ya, mami!…
Todos volvimos a reír ante mi impertinencia, y la callada Patricia, por fin volvió a hablar, y dijo:
PATRICIA: ¡La verdad es que a mí también me suena la idea de la prostitución, mamá!… ¡Y teniendo en cuenta que papá quiere que yo me ponga a trabajar, te iba a proponer una cosita!
MAMÁ: ¡¿Qué cosita? mi muñequita hermosa!
PATRICIA: ¡Lo que quiero proponerte es que en lugar de asociarte con la puta de la Johanna trabajemos nosotras dos solas! ¡Pues yo también quiero ejercer ese oficio contigo y ganar mucho dinero! ¡De paso nos acompañamos en la calle para que no corramos tanto peligro, mamá! ¡Puedo llevar mi gas pimienta y mi navaja para defensa personal!…
MAMÁ: Jajaja… ¡Gracias, mi Pati! ¡Tan linda y colaboradora mi muñequita hermosa! ¡Pero no quiero arriesgarte a ti tampoco! ¡Además tú debes seguir estudiando, mi nena!
PATRICIA: ¡Pero mamá… es que yo no quiero estudiar más! ¡Yo quiero acostarme con hombres! ¡Con muchos hombres y tener mucho dinero!…
PAPÁ: ¡Ay! ¡Jueputa!… Jajajajaja… ¡Pero…! ¡Qué putita eres, mijita! ¡Yo lo sabía!…
PATRICIA: ¡Cállate, papá!… ¡Déjame seguir hablando con mamá!…
PAPÁ: ¡Bueno, está bien! ¡Caramba!… ¡Qué geniecito el de esta zorrita! ¡Sigue hablando con tu mami!…
YO: ¡Sí! ¡Sigue rogándole a mamá para que te deje putear de lo lindo en la calle, so perra!… Jejeje…
PATRICIA: ¡Bien!… ¡Mira, mamá, al escucharte decir esas cosas ya me arreché, se me calentó la chocha y me dieron unas ganas terribles de ponerme a putear contigo, mami! ¡Tengo que hacerlo! ¡Me quiero prostituir!
PAPÁ: ¡Esto está como para alquilar balcón!… Jejeje…
YO: ¡Cállate, viejo! ¡Deja oír lo que va a contestar mamá!…
MAMÁ: ¡Ay, mi Patico! ¡Lo entiendo, mi amor! ¡Pero es que lo mejor para ti es estudiar, mi diva hermosa!…
PATRICIA: ¡Yo soy mala estudiante y muy buena mamadora, mamá! ¡Yo podría ayudarte mucho! ¡Haríamos una fortuna!… ¡Sería la lotería que papá tanto desea! ¡Por favor, di que sí!…
MAMÁ: ¡No insistas, muñeca! ¡Mamarle el pirulo a tus compañeritos y profesores en el colegio es muy distinto a putear entre gente potencialmente peligrosa en la calle!
PATRICIA: ¡Yo tengo años de buena experiencia siendo la putita del colegio! ¡Putear es lo mío, mamá! ¡Ya te dije que si quieres me llevo mi gas pimienta y un cuchillo por si acaso!…
MAMÁ: Jajajaja… ¡Tú si sales con unas cosas peores que tu hermano!… Jejeje… ¡Eres muy ingenua!… ¡No, mi amor, que te manoseen y te usen en el colegio es muy diferente a que te lo hagan en la calle! ¡Entiende, mamita, no te lo puedo permitir!
PATRICIA: ¡Mamá! ¡Por favor!… ¡Yo tengo algunos juguetes sexuales que compré con mis ahorros, podríamos usarlos en ese oficio, mami, yo te los presto con gusto!
YO: ¡Wow!… ¡¿Juguetes sexuales?! ¡No sabía que usabas eso, hermanita!… ¡Esto se pone bueno!… Jajaja… ¡Qué opinas, viejo!
PAPÁ: ¡Pues que me gustaría mucho ver de putita callejera a tu hermanita!… ¡Uuff! ¡Mamasota rica, cómo está de buena! ¡De seguro esta perrita nos traería buen dinerito!… ¡Yo también tengo ganas de hacerme una paja imaginándome a la nenita puteando!
Mi papá y yo nos estábamos tocando nuestras respectivas braguetas con movimientos exquisitamente masturbatorios.
PATRICIA: ¡Mamá, veo que mi hermano y mi papi están de acuerdo conmigo! ¡Déjame prostituirme contigo, mami, por favor! ¡Te lo ruego por lo que más quieras!
MAMÁ: ¡No, amor!…
PATRICIA: ¡Te regalo mis juguetitos sexuales si me dejas putear contigo!
MAMÁ: Jajaja… ¡Préstamelos, Pati! ¡Pero yo voy sola! ¡Te lo repito, la calle es muy peligrosa!…
PATRICIA: ¡Mamá!… ¡Te regalo mis dildos anales y mis consoladores con la condición de que vayamos a putear juntas! ¡Di que sí! ¡No seas así! ¡No seas mala! ¡En el colegio todos me pedían mamadas y culito y nunca me pasó nada malo!
PAPÁ: ¡Dile que sí a la nena, Paloma! ¡No seas así!… ¡Mira que la putita tiene muchas ganas de cooperar!
YO: ¡Sí, mamá! ¡Dile que sí! ¡¿No ves que la pobre perrita está que se infarta de las ganas de ir a putear contigo y meterse las vergas hasta por el culo?!
PATRICIA: ¡Mamá, te lo ruego!… ¡Hazlo por mí!…
MAMÁ: ¡Por favor, mi nena, comprende! ¡Ser la putita de todos en el colegio es un juego de niñas! ¡Allá no es arriesgado como sí lo es la calle!
PATRICIA: ¡Ay, mamá!… ¡No seas tonta! ¡No seas malparida! ¡No seas tan rogada! ¡Yo seré buena putita de calle, te lo prometo!
MAMÁ: Jajajaja… ¡Ay, mija!… ¡En el colegio solo se corre el riesgo de quedar en embarazo! ¡Pero no hay mayores peligros! ¡Allá se puede decir que es seguro, pero en la calle hay gran peligro en todo momento! ¡De tener que putear a la calle prefiero ir yo solita que sé enfrentar situaciones y manejar hombres sobrios y borrachos! ¡En caso tal lo haré con la perra de la Johanna! ¡Pero no puedo permitir que te arriesgues tú, mamita! ¡Yo te quiero mucho y no permitiría que te arriesgaras!
PATRICIA: ¡Mamá, quiero dedicarme a putear y ganar mi propio dinero! ¡Eso es lo mío! ¡Me encantan la verga, los hombres y el dinero! ¡Ese es mi destino! ¡No puedes prohibirme que me ponga a putear en la calle contigo ni puedes negar ni detener mi destino escrito!
MAMÁ: ¡Si quieres dedicarte a putear primero acaba el bachillerato! ¡Es mejor que cuando ejerzas la prostitución digan: esa puta es estudiada y no es una bruta cualquiera como las otras vagabundas de por ahí!…
PAPÁ: ¡No discutan más!… ¡Paloma, deja putear a la niña contigo! ¡Déjala ser feliz y cumplir su destino!…
YO: ¡Si, mami! ¡A lo bien! ¡Déjala!… ¡Pobrecita, mira su carita, ella también quiere cooperar!
PAPÁ: ¡Palomita, mírale los ojitos a la nena!… ¡¿No te conmueves?!… ¡Está muy ilusionada!… ¡Ella solo quiere hacer realidad su locura de jovencita ingenua mientras coopera con nuestra economía! ¡Palomita, acuérdate de todo lo que hacíamos nosotros de jóvenes! ¡No hay que ser egoístas con la niña! ¡Ella también tiene derecho a disfrutar la vida, así como lo hicimos nosotros!
MAMÁ: ¡Bobos!… ¡No la animen!
PAPÁ: ¡Palomita, la nena sabe lo que quiere y lo que quiere es ganar dinero para ayudarnos a salir de esta crisis mientras calienta cuca y la goza rico, mamasota! ¡No le veo nada malo a eso! ¡Por mi parte yo sí quiero ver a mi nena como una linda y entregada prostituta!
PATRICIA: ¡Gracias papi!…
YO: ¡Si, mamá! ¡Pati es muy generosa y bondadosa! ¡Quiere ayudarte y ayudarnos a todos con el dinero ganado con el sudor de su raja! ¡Yo también quiero verla como puta! ¡Está muy rica!…
PAPÁ: ¡Además, en la calle estarían acompañaditas la una de la otra! ¡No habría peligro! ¡Realmente no le veo problema!
PATRICIA: ¡Si, eso, papi!… ¡Mami, dale! ¡No seas egoísta! ¡Di que sí, por favor! ¡Te lo suplico con toda mi alma!…
MAMÁ: ¡No, Pacualino!… ¡Y no, mijita! ¡No insistas más!…
PATRICIA: ¡Pero… qué vieja tan rogada! ¡Qué seba!… ¡Mamá, comprende… putear es lo quiero seguir haciendo en la vida y eso es lo que voy a seguir haciendo ahora en la calle contigo, así tú te opongas, so perra!…
YO: ¡Uuuuuhhhh!… ¡Mi hermanita ya se puso lo más de alzada!… Jejeje… ¡Ya la hiciste enojar otra vez, mamá!
Mi consentida, egocéntrica y manipuladora hermanita golpeó la mesa con enojo e hizo cara como si fuera a llorar, y mamá contestó:
MAMÁ: ¡Mija, tranquila! ¡No hagas pucheritos ni berrinchitos! ¡Mira, me gusta mucho tu entusiasmo, tu energía y tus ganas de cooperar! ¡Te agradezco mucho por todo eso, mamita, pero de verdad la calle es muy peligrosa!… ¡PELIGROSA!… ¡Aunque vayamos juntas acompañadas pasaríamos peligro! ¡Si no fuera por eso no habría problema en salir las dos bien provocativas y casi desnuditas a la calle, incluso de noche! ¡Si quieres podrías ser modelo de Web Cam que es más seguro!
PATRICIA: ¡Mamá, yo no quiero ninguna puta Web Cam!… ¡Tú tampoco la quieres!… ¡Yo quiero putear contigo en la calle! ¡Quiero ser una chica malota y arriesgada! ¡Deseo tener miles de aventuras en la calle y que me den verga y vicio mientras gano dinero! ¡Quiero exhibirme en vivo y en directo en la puta calle, y lo haré sea como sea, con o sin tu permiso, perra infame, y punto!… ¡He dicho!… ¡No se hable más del asunto!
MAMÁ: ¡Ay, pero me la gané, pues!…
Mi encolerizada hermanita Patico, después de gritar lo anterior, volvió a golpear fuertemente la mesa, y se quedó pensativa un par de segundos, no obstante, cambiando el gesto de mal genio de su cara por uno de agrado y esperanza, añadió:
PATRICIA: ¡Oye, mamá, hablando de Web Cam se me acaba de ocurrir una idea muy buena! ¡Mira… ¿qué tal si comenzamos a atraer y a atender clientes al frente de la casa y que nos follen aquí adentro para no salir a exponernos al peligro de la calle lejana?!… ¡¿Qué dices? putica! ¡¿Qué dices! ¡¿Ehhh?!…
PAPÁ: ¡Uy! ¡Mamita! ¡Le atinaste a la solución! ¡A mí esa idea me parece excelente! ¡Eres una genio!…
YO: ¡Por fin pensaste, hermanita del alma!… Jejeje… ¡Por fin usaste la cabezota hueca que tienes y no solo esa cucaza mojada!… Jajajaja… ¡Dejaste de ser bruta!… Jajaja… ¡Por fin se te ocurrió una buena idea en la vida, Patico!… Jajaja…
PAPÁ: ¡Bien podrían atender a los clientes aquí! ¡En casa ustedes dos no van a arriesgarse ni a pasar ningún peligro! ¡Podríamos poner a funcionar las cámaras del circuito cerrado de televisión que la vez pasada compré! ¡Y en caso de ser necesario Pachito y yo las defenderíamos como tigres celosos!
YO: ¡A mí también me parece genial!… ¡Wow!… ¡Me parece de pelos convertir la casa en un puteadero!… Jajaja… ¡Má, tú y mi hermanita podrían provocar y esperar a los hombres frente a la casa y atenderlos aquí adentro divinamente! ¡Hay suficientes piezas y espacio para la culeadera!
PATRICIA: ¡Yo no le veo problema! ¡Esa idea me calienta!… Jejeje…
PAPÁ: ¡A mí también me calienta, mija! ¡Se me pone la verga a reventar!… ¡Pensar en ver a mi propia hijita de puta y culiando aquí en casa me arrecha como nunca!… Jajaja…
YO: ¡Y ver a mi mamá a mí también me la para resto!… ¡Uuff!… ¡Mami, ahora ¿qué contestas ante semejante propuesta?!…
Mi papá y yo dijimos lo anterior tocándonos sin pena nuestras respectivas vergas por encima de nuestros pantalones.
MAMÁ: ¡Bah!… ¡Ustedes ganan!… ¡Está bien!… ¡Pues si es así podríamos intentarlo!
PAPI: ¡Excelente!…
YO: ¡Wow!… ¡Increíble!…
PATRICIA: ¡Yyyyuuuupppiiii!… ¡Mamá, eres lo máximo!… ¡Yo sí decía que no podías ser tan huevona ni tan mala!
Mi hermana se abalanzó sobre mi mamá a besarla y abrazarla, ahora estaba muy contenta.
PATRICIA: ¡Mamá, si quieres podríamos intentarlo desde mañana mismo! ¡Mañana me puedo quedar aquí! ¡No quiero ir al colegio! ¡No pienso volver! ¡Mejor me vestiría de puta y comenzaríamos a putear las dos aquí! ¡¿Te parece bien? mamá hermosa y putona!
MAMÁ: ¡Me parece bien, mija putita!… ¡¿Pero estás segura de querer ayudarme? zorrita!
PATRICIA: ¡Totalmente segura, mamá putona!
YO: ¡Esta perrita con tal de ponerse a mamar penes se siente muy segura de hacerlo!… Jajaja…
MAMÁ: Jajaja… ¡Entonces no se diga más! ¡Trato hecho!… ¡Mañana mismo lo haremos!
Mi mami y mi hermana se echaron babas en las manos y las chocaron alegremente en señal de trato hecho y jamá desecho, y yo, muy entusiasmado, dije:
YO: ¡Bravo, mamá! ¡Tú y mi hermanita nos van a sacar de esta ruina tan espantosa!…
PAPÁ: ¡Y de paso nos van a hacer parar las vergas como nunca!… Jejeje… ¡Serán las putas más apetecidas de la zona!
YO: ¡Eso, papá!… Jejeje… ¡Es lo mejor que nos puede pasar!…
PATRICIA: ¡Yupi!… ¡Mañana mismo empezaremos a putear, a ganar dinero, a gozar y a comer como Dios manda! ¡Eso me pone feliz! ¡Nos ganamos la lotería otra vez!…
YO: ¡Las felicito!… Jejeje… ¡Llegaron a un sabio acuerdo! ¡Han tomado una excelente decisión, mamá y hermanita! ¡Es que hablando se entiende la gente!… ¡Yo sé que les va a ir bien y saldremos de esta crisis!
MAMÁ: ¡Así será, mijo! ¡Ante todo, gracias a mi Dios que nos ha iluminado y bendecido tanto!
YO: ¡Es que nuestro señor nunca nos desampara! ¡Debemos orarle mucho esta noche!
PAPÁ: ¡Con todo el optimismo!… ¡Pachito, es que tu mamá y tu hermana definitivamente son unas duras!
YO: ¡Son unas duras y unas putas, papá!… Jajajaja…
Mi mamá, mi hermanita y mi papá se quedaron mirándome y yo añadí:
YO: ¡Ohh!… ¡Digo!… Jejeje… ¡Si… son muy duras!… Jejeje…
MAMÁ: ¡No te preocupes, mijo, lo dijiste muy bien, papi! ¡Somos unas putas reputas!
YO: Jejeje… ¡Me fascina!…
MAMÁ: ¡Bien… veo que todos estamos de acuerdo!… Jejeje… ¡Siendo así, entonces debemos colocarnos manos a la obra!… ¡Pero pensándolo mejor vamos a dormir primero para acumular energías y mañana nos levantamos bien temprano para organizar todo y empezar a trabajar con ánimos!
PATRICIA: ¡Vale, mamita hermosa!…
YO: ¡Va a ser genial!…
PAPÁ: ¡Eso!… ¡Acostémonos ya y mañana nos levantamos a las 4 de la mañana en punto para alistar los cuartos donde la Palomita y la Patico van a atender a los clientes!
YO: ¡Mami, bendición!…
Mientras mi mami me daba la bendición y el besito de buenas noches yo me seguía pajeando sobre la tela del pantalón sin ningún disimulo con una mano y con la otra me atreví a agarrarle una nalga.
Papá se acabó otra cerveza, terminó de reposar, de eructar y de pedorrear, y nos fuimos a acostar muy animados e ilusionados en el día siguiente. Por fin íbamos a recibir algunos pesos para calmar nuestra hambre y suplir nuestras necesidades gracias al trabajo que mi buena mamá y mi tierna y colaboradora hermanita alegremente iban a realizar con gran habilidad y entusiasmo.
FIN DE LA PRIMERA PARTE.
CONTINUARÁ…
ESCRITO POR SIREMIS.
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