MI MAMI Y MI HERMANITA MONTAN PROSPERO NEGOCIO. SEGUNDA PARTE.
Mi mami Paloma y mi hermanita Patricia se visten como putas para comenzar a ejercer en la calle, y empiezan así su próspero negocio. Papá y yo las “morboseámos” de lo lindo. .
ESCRITA POR SIREMIS.
3.
Al otro día, nos levantamos muy contentos a las 4 de la madrugada en punto. Era aún de noche, pero las ganas de empezar el negocio del puteadero eran tan poderosas que no nos importó madrugar tanto, así que nos bañamos a prisa y empezamos a alistar todo con gran ansiedad y entusiasmo.
Nos acordamos de las viejas cámaras de circuito cerrado de televisión que teníamos por ahí, algunas ya instaladas, pero sin ser usadas, y otras por ahí dando botes, papá las había comprado hace mucho tiempo, pero nunca las acabó de instalar porque él es muy dejado y todo lo hace a medias o ni siquiera empieza.
Ahora, muy motivados, papá y yo nos pusimos a la tarea de acabar de instalar esas cámaras dentro de sus respectivos domos, los cuales, algunos de ellos, ya estaban puestos desde hace muchos meses. Obviamente algunas de las cámaras tendrían que quedar ocultas.
Pusimos cámaras en la entrada de la casa, en la sala, en los corredores, y unas ocultas en cada cuarto. Quedaron cámaras y hasta micrófonos en cada parte de la casa, la cual era muy grande.
Mamá Paloma y mi hermanita Patricia no tendrían problemas en atender a los clientes en cualquier parte de nuestro hogar contando con nuestra vigilancia en todo momento, pues papá y yo estaríamos mirando y escuchando todo lo que ocurriera desde varios monitores instalados en una salita, la cual también contaba con un gran ventanal a la calle. Los vidrios especiales de esa ventana permitían poder ver de adentro hacia afuera, pero no de afuera hacía adentro.
Mamá y mi hermanita se encargaron de arreglar los dormitorios y de dejar la casa reluciente.
Con el último dinero que quedaba fui corriendo a comprar unas cajas de condones, papel higiénico, alcohol, pañitos humedecidos y otras tantas cositas. Afortunadamente mamá tenía bastantes pastillas anticonceptivas.
Llegué con el pedido a casa y le entregué todo a mi hermanita Patico.
YO: ¡Listo, Patico!… ¡Uuff!… ¡Qué gran cantidad de condones compré!… ¡Aquí hay tantos condones como para que mamá y tú atiendan a 500000 clientes!… Jejeje…
PATRICIA: ¡Dios te oiga, hermanito!… ¡Necesitamos que nos lleguen muchos clientes y nos dejen bien folladas y pagadas! ¡Qué emoción!… ¡Quiero verga y dinero!…
YO: Jajaja… ¡Calma hermanita!… ¡Aunque, realmente, yo tampoco hallo la hora de verlas putear a ustedes dos, mamasotas ricas!… Jejeje…
PATRICIA: ¡Yo tampoco hallo la hora de empezar, Pachito!… ¡Quiero dinero y quiero verga, jueputa, mucha verga! ¡Estoy desesperada! ¡Ansío que me la metan hasta por los ojos!… Jejeje…
YO: ¡Vaya!… ¡Hermanita!… ¡Qué hambre de plata y verga tienes, pilluela!…
Mi hermana, después de revisar que estuviera bien el mandado, tomó los condones y los artículos y los puso en todos los dormitorios y hasta en la sala, y luego fue a maquillarse y a alistarse.
Papá terminó en tiempo récord la instalación de las cámaras, los micrófonos y los monitores, y al poco tiempo, mamá bajo las escaleras, venía muy sonriente y coqueta vistiendo y luciendo el atractivo e ínfimo atuendo con el que iba a comenzar a atender sexualmente a los hombres.
4.
Papá y yo quedamos lelos mirando a mamá, es que parecía estar más desnuda que vestida, casi se nos para el corazón y nuestros ojos se salieron tal cual como sucede en las caricaturas.
De inmediato nuestros penes se erectaron al máximo, lo hicieron como nunca antes bajo nuestros pantalones.
YO: ¡Oooohhhhh!… ¡Mamáááá!… ¡Uff!… ¡Válgame Dios!… ¡No lo puedo creer!… ¡Dios santo! ¡Pero si estás desnuda!…
Mi exuberante madre terminó de bajar las escaleras y se situó coquetamente frente a nosotros.
MAMÁ: Jajaja… ¡No exageres, papito, solo estoy algo ligerita de ropa y no más!… Jejeje…
PAPÁ: ¡Wow!… ¡Pero qué linda es mi esposita!… ¡Oohh!… ¡Mamasota rica!… ¡Esta sí es toda una hembrota!…
YO: ¡Uff!… ¡Mamááá!… ¡Pero quién pidió pollo!… ¡Severo cu- cu- cu- cuerpazo!… ¡Wow!… ¡Estás rebuenaaaa!… ¡¿Rebuena? diré más bien rebuenísiiiima!…
MAMÁ: Jejeje… ¡Gracias, mis amores!… Jejeje… ¡Precisamente vine para que me den su visto bueno!…
Mamá dio una coqueta vueltecita sobre su propio eje y empezó a modelarnos de una manera muy morbosa, provocativa e indecente. Su mirada era de pura prostituta ganosa de verga. Nosotros la aplaudimos y le hicimos música de modelaje erótico con nuestras bocas y con las palmas de las manos.
Mamá estaba riquísima, su sonriente y radiante rostro figuraba excesivamente maquillado; tenía su liso, castaño y brillante cabello suelto y llevaba puesta una negra minifaldita supremamente minúscula con unas vulgares botas rojas de látex de tacón y caña alta. Sus grandísimas y espectaculares tetazas prácticamente estaban al aire, solo unas pequeñísimas estrellitas de papel amarillo brillante tapaban sus gruesos y largos pezones, y, colgando de esas minúsculas y refulgentes estrellitas, tenía unas finas y alegres tiritas de hilos danzantes. Las aureolas de esas excitantes tetotas eran tan grandes que esas estrellitas brillantes no las alcanzaban a cubrir.
MAMÁ: ¡¿Qué opinan? mis amores! ¿Si me veo bien puta o todavía me falta?!
YO: ¡Por todos los cielos, má!… ¡Ohhh!… ¡Juemadre!… Jejeje… ¡Perdona lo que voy a decirte, pero te ves relucientemente putísima! ¡Toda una ramera de antro, hijuemadre!…
MAMÁ: Jajajaja… ¡Gracias, papito!… ¡Esa es la idea, que me vea bien atrayente y putona para los clientes!
PAPÁ: Jajajaja… ¡No lo puedo creer, mujer!… ¡Te ves como las mejores fulanas de calle que he visto y que me he comido en mi vida, amor!… ¡Así te ves mil veces mejor que la puta de la Johanna!… Jejeje… ¡Eres toda una diva del sexo, mi amor!…
MAMÁ: ¡¿En serio? ¿estoy mejor que la zorra de la Johanna?!…
PAPÁ: ¡Totalmente, Palomita!… ¡Me encantas, rucurita putona!…
Era increíble la manera como mamá estaba vestida y la forma tan atrevida en que nos modelaba y exhibía su cuerpazo y sus casi inexistentes prendas.
YO: ¡Wow!… ¡Qué piernotas te mandas, mamá!… ¡De verdad pareces otra mujer!…
MAMÁ: Jajaja… ¡Soy otra mujer, ahora soy una completa mujerzuela, papito!… Jajaja…
PAPÁ: Jejeje… ¡Y mírale qué tetotas tiene nada más ni nada menos esta mujerzuela, Pachito!
YO: ¡Uff!… ¡Papá, no digas más!… ¡Mamá se manda severas tetazas!… ¡Son unas súper mega tetotas!… ¡Mamá, eres todo un bombón! ¡Qué mujerzota ven mis castos ojitos!… Jejejeje…
Mamá agitó excitantemente sus tetas haciendo unos deliciosos movimientos circulares de manera tal que le imprimía ese giro a las tiras de hilitos que tenía prendidas en las estrellitas que se había pegado en sus pezones, eso nos puso a papá y a mí a mil por hora mientras mirábamos, como bobos y con la boca abierta escurriendo babas, esas hipnotizadoras y diabólicamente hermosísimas y atrayentes tetazas.
YO: ¡Wow!… ¡Má!… ¡Me excitas!… ¡Pareces una estriptisera!… Jejejeje… ¡Me hiciste parar la verga!…
MAMÁ: ¡Oohh!… ¡Se te nota, papito!…
YO: ¡Tengo ganas de pajearme!… Jejeje… ¡Te juro que, si yo no fuera tu hijo, y, si tuviera dinero, sin duda tomaría tus servicios! ¡Si no fuera tu hijo me abalanzaría contra ti y no respondería por mis actos! ¡Te daría una buena culiada, mamá!… Jejeje…
MAMÁ: Jajajajaja… ¡Tan tierno!… ¡Qué lindo eres, mi amor!… ¡¿De verdad te parece que estoy bien rica? papi!
Mamá nos dio la espalda, adoptó una sensual pose de modelo poniendo una manita en su cintura y la otra en su cabello y, levantando vulgarmente su espléndido culazo y sus tetas, volteó la carita giñándonos lujuriosamente un ojo mientras su microfaldita se le subía solita y nos dejaba ver sus ricas nalgotas.
¡Wow! ¡Mamá estaba adoptando poses de pura y genuina puta, y eso me encantaba y me excitaba sobre manera!
Ella estremeció sus glúteos y yo, silbándole provocativa, descarada y morbosamente, me atreví a darle unas ricas nalgadas y a decirle:
YO: ¡Vaya, mamá! ¡Lo que estás es riquísima!… ¡Qué nalgotas tan apetitosas tienes!… ¡Qué culote tan bárbaro!… ¡No me aguanto la arrechera tan bestial que traigo!
Abusivamente empecé a sobarle el culo y me atreví a darle otras buenas y sonoras nalgadas, y agregué:
YO: ¡Con este rico culazo y con este magnífico par de buenas y deliciosas tetazas te van a llover clientes a montones, mamá! ¡Eso es indiscutible!…
PAPÁ: ¡Estás como para levantar muertos, mamacita! ¡Qué culote tan severo!… Jejeje… ¡Ven acá, perraza!…
Papá y mamá se empezaron a besar y a tocar, papá le agarraba las nalgas con muchas ganas, y yo, mirándolos muy celoso, carraspeé y dije en voz alta:
YO: ¡Papá no magulles la mercancía ¿quieres?!… ¡Ella es para venderla toda afuera a los clientes que pagan, y tú no tienes dinero!…
MAMÁ: ¡Es cierto, papi! ¡Consigue dinero y ahí si te doy cuquita y culito!
PAPÁ: ¡Demonios!… ¡Quiero meterte un dedito por este culote!… Jejeje… ¡Al menos dame otro beso, doña putona!… Jejeje…
YO: Jejeje… ¡Oigan… ¿y dónde está mi hermana?!…
Mamá separó sus labios de los de papá y dijo:
MAMÁ: ¡Se está demorando la Patico! ¡Debe ser que no se decide por ninguna prenda! ¡Como ella es tan indecisa siempre! ¡Voy a ir a ayudarla a vestir! ¡Ya vengo!…
PAPÁ: ¡Dile a esa putita que venga que su hermano y yo queremos darle el visto bueno!
YO: ¡Queremos morboseárla un ratico como hicimos contigo, má!… Jejeje…
MAMÁ: ¡Ok!…
Mamá subió las escaleras y nosotros rápidamente nos acercamos a dichas escaleras y nos agachamos para ver bajo su obscena microfaldita mientras ella subía, y constaté lo que me estaba imaginando, en efecto, la puta de mamá no tenía puesta su tanga, de razón se le veían esas nalgotas tan deliciosas.
5.
Nos quedamos mirando bajo la microfaldita de mamá mientras ella subía las escaleras y le alcanzamos a ver una rica chochota peluda y un sabroso y paradito culote.
YO: ¡Uuff!… ¡¿Viste eso? papá!… ¡Qué rajotota acaban de ver mis inocentes ojitos!… ¡Ohh!… ¡Le acabé de ver la grandísima y peluda chochaza a mi mami!… Jejejeje…
PAPÁ: Jajajaja… ¡Claro que la vi!… Jajaja… ¡Sobre todo tus inocentes ojitos, gran degenerado de mierda!… Jajajaja…
YO: ¡Así no se puede, papá! ¡Uno tratando de evitar tener malos pensamientos y mi propia mami es la primera que no me lo permite!… Jajajaja… ¡Jamás se me borrara de mi memoria la imagen de semejante chochota!…
PAPÁ: Jajajaja… ¡Se te ocurren a ti decir unas cosas muy graciosas, parce!… Jejeje… ¡Me haces reír!
YO: ¡Es que mamá está como para llevársela a la cama y darle dura verga por todos los huecos! ¡¿Le viste esa chochota tan rica y provocativa a la puta? viejo! ¡Yo se la taponaría de inmediato!
PAPÁ: Jajajaja… ¡Ya te dije que se la vi todita!… ¡Yo se la veo, se la beso, se la lamo, se la consiento y se la penetro a diario, pilluelo, y es bien rica esa cuca!… ¡Oye, a propósito, dime una cosita, picarón ¿tú qué haces mirándole la cuca a tu mamá?! ¡¿No te da pena? pelafustán este!…
YO: Jajajaja… ¡Perdona, papá, es que mamá sí que quedó muy buena así como puta!
PAPÁ: ¡Ni qué decir! ¡Está como para chuparse los dedos! ¡Tengo unas ganas enfermizas y locas de ver cómo se emputecen tu mamita y tu hermanita!
YO: ¡Qué degenerados somos, papá!… ¡Yo también estoy muy ansioso de ver eso!… Jejeje… ¡Quiero ver cómo esas perras se emputecen! ¡Me da mucho morbo!
PAPÁ: ¡Por ahora quiero ver cómo está quedando la tonta y zorrita de tu hermanita!
YO: ¡Uff!… ¡Yo también, papá! ¡De seguro esa muchachita está quedando espectacular!…
6.
Al poco tiempo comenzaron a bajar por las escaleras mamá y mi hermanita.
La Patico quedó abrumadoramente hermosa, insinuante y provocativa vestida de putita.
PAPÁ: ¡Wow!… ¡Mira! ¡Mira, huevón!… ¡Qué par de putazas tan suculentas vienen bajando las escaleras!…
YO: ¡Uff!… ¡Válgame Dios, papá!… ¡Qué par de putas tan bacanas!… ¡Me lleva el Putas!… ¡Viejo, sosténgame que me desmayo de la emoción!… ¡Uuff!…
PAPÁ: ¡Caracoles!… ¡¿Y a mí quién me sostiene?!
Papá y yo nos entusiasmamos, aún más, al ver bajar por las escaleras a mamá acompañando y cogiendo de gancho a mí preciosa hermanita.
La nena tenía puestos sus zapatos colegiales, medias blancas a mitad de muslo, una escandalosa minifaldita de cuadritos estilo colegiala y un topcito negro, ombliguero, escotado y semitransparente, se le notaban sus buenas tetotas y sus bonitos pezones a través de él. Su amarillo cabello se lo había recogido en dos largas coletas y su carita estaba pintorreteada por toda parte, se veía inocentemente putísima. Realmente, me di cuenta de que mi hermanita había sacado esa vulgar minifaldita recortando la falda de su uniforme de colegio.
YO: ¡Recontra chanfle!… ¡Acaso… ¿esta es mi hermanita?!… ¡Santo Dios bendito!… ¡Estás deliciosamente divina, hermanita!… ¡Uff!… ¡No lo puedo creer! ¡Esto es el cielo!… ¡Hermanita preciosa, quedaste exquisitamente espectacular, te felicito, nenita!
PATRICIA: Jejejeje… ¡Gracias, hermanito!…
PAPÁ: ¡A mí me va a dar un infarto! ¡Téngame duro, mijo, que yo soy el que estoy que me desmayo!… Jejeje… ¡Mi hija-sobrinita está sugestivamente preciosa!… ¡Uff!… ¡Esta nena está altamente follable!… Jejejeje…
Debo hacer una aclaración aquí, papá dijo “mi hija-sobrinita” porque mamá y papá son hermanos, mi hermana y yo somos hijos de un incesto entre hermanos, por tanto, nosotros somos hijos y sobrinos de ellos al mismo tiempo, eso ya lo conté en la primera parte.
Continuemos.
PATRICIA: Jejejeje… ¡¿Estoy altamente follable? papá!… ¡Pero ¿¡qué estás diciendo?!… ¡Soy tu hija!… ¡Respétame!… Jijijiji…
PAPÁ: ¡Perdóname mi niña, es que con lo pervertido que soy se me salen las palabras solitas! Jejeje… ¡Pero la verdad es que estas como para pegarte severa taponada de cuca con la verga! Jajajajaja… ¡Oohh!… ¡Otra vez se me salieron las palabras!… Jajajaja…
PATRICIA: ¡Lo que está que se te sale es tu cíclope por tu bragueta, papá, no te hagas!…
PAPÁ: ¡Oh!… ¡Tienes razón!… ¡Es que mi arrecho cíclope está con ganas de embarazar a una nenita que mis ojos están viendo ahorita todita, mamita!… ¡Qué ricurita!…
MAMÁ: ¡Oye, Pascualino, acuérdate que, aunque esta nenita sea toda una putita, es tu hijita-sobrinita! ¡No puedes decirle esas cosas tan morbosas y fuertes!… Jejejeje…
PAPÁ: Jajajaja… ¡Dios mío, las cosas que me hace decir la arrechera! ¡Pero es que estás riquísima vestidita así, como putita colegiala!… ¡Uff!… ¡Qué tetas te mandas, mi vida!… ¡Te juro que te estoy comenzando a ver con otros ojos!… Jejejeje…
MAMÁ: ¡Claro! ¡Ya la estás viendo con ojos de macho depravado y de degenerado sexual!… ¡Vaya hombres!… Jajajaja…
PAPÁ: ¡Si, eso! Jejeje… ¡Es que nunca le había visto esas tetotas a esta muchareja y como soy muy hombre pues me excito fácilmente viéndoselas y morboseándoselas!… Jejeje…
MAMÁ: Jajajaja… ¡Pues sigue divirtiendo tu vista, amor! ¡Yo vestí a la nena así de destapadita!… ¡Quedó muy chula mi princesita!… ¡Sus tetas son un primor! ¡Son más bonitas que las mías!…
PATRICIA: ¡No, mamá! ¡Las tuyas son mucho mejores que las mías! ¡Ya quisiera yo tener tus tetotas!…
MAMÁ: ¡Qué va, mija!… ¡Las tuyas son unas tetazas hermosísimas y jóvenes!…
Mamá se puso tras mi hermana, metió sus manos bajo las axilas de Patico y le agarró y le movió esas espléndidas tetotas de forma provocadora.
PAPÁ: ¡Wooooowww!… ¡Qué par de tetotas!…
MAMÁ: ¡Pero no se queden ahí paradotes! ¡Vengan, toquen esta hermosura de tetas y den su opinión! ¡¿Verdad que está riquísima esta dulce perrita?!
Inmediatamente papá y yo, con manos temblorosas, nos pusimos a tocar y a apretar las excelentes tetazas de mi hermanita sobre la ligera y suave tela de su pequeñísimo y transparente topcito. Nuestros corazones estaban acelerados y bombeando mucha sangre a todo el cuerpo, sobre todo a nuestras vergotas, las cuales estaban por estallar.
YO: ¡Me lleva el Putas!… ¡Qué perfección de tetas tiene la zorrita de mi hermanita!… ¡Uuff!… ¡De razón todo mundo le mete mano y verga en el colegio, es que está riquísima esta perrita!
PAPÁ: ¡Wow!… ¡Nunca le había agarrado las tetas a mi niña!… ¡Uuff!… ¡Es que para todo existe una primera vez!… ¡Uuff!… ¡Está muy desarrolladita la chamaquita!… ¡Caray!… ¡Par de tetorras maravillosas tiene mi hijita!… Jejeje… ¡Se sienten muy bien al tacto!… ¡Yo de 1 a 10 le pongo un 11 o un 12 de calificación!… Jejeje… ¡Muy ricas tetas! ¡Me derriten!… ¡Está riquísima mi perrita hermosa, mi hijita del alma!
El material de la tela con el que estaba fabricado ese indecente top era como el de las medias veladas, por lo tanto, se sentía muy rico tocar y apretar esas hermosas tetorras.
Nuestras inmensas y atrevidas manotas se estorbaban al querer agarrar con ímpetu y al mismo tiempo esas terribles y formidables tetotas.
De tanto tocamiento el topcito se le bajo y dejó sus excelentes tetas al aire, nosotros al vérselas gritamos y aullamos como lobos y seguimos tocándoselas y agarrándoselas al desnudo sin permitir que ella se volviera a poner su top correctamente.
Fue una verdadera delicia cogerle ese par de ubres a mi esbelta y putísima hermanita y por fin, tras mucho esfuerzo para apartar nuestras manos de sus tetas, ella pudo ponerse su topcito en su lugar correcto.
PATRICIA: ¡Aaayyy!… ¡Ya!… ¡Me asedian como moscas!… ¡A lo bien ustedes están a punto de violarme! ¡Par de machos pervertidos!… Jejeje…
PAPÁ: ¡Caray!… ¡Qué tetas!… ¡Uff!… ¡Perdona mija!… ¡Es que uno en estado de arrechera no piensa, se vuelve una bestia sedienta de sexo!… Jejeje… ¡Yo estoy a punto de hacerme la paja aquí, tocándolas y mirándolas!…
Papá estaba en lo cierto, uno cuando está arrecho no razona y solo busca obtener sexo y calmar las ansias sea como sea.
Mi viejo, me miró y añadió:
PAPÁ: ¡Pachito ¿cierto que tu hermanita quedó hecha toda una obra de arte?!
YO: ¡Quedó muy bizcochota la nena, papá! ¡Mamá supo vestirla! ¡Se le ven todas las tetas a esta carajita!…
PAPÁ: ¡Se ve vulgarmente sexy y provocativa la Pati! ¡Qué cosas las que se ven en esta casa!… Jejeje… ¡Cosas riquísimas!… Jejeje… ¡Estás muy rica, mi Patico preciosa!…
YO: ¡Y mamá ni se diga!… ¡Uuff!… ¡Qué súper tetona es mamá!… Jejeje… ¡Solo en mis pensamientos, mientras me pajeaba, la veía vestida así!… Jejeje… ¡Qué par de piernotas se manda la señora de la casa!… Jejeje… ¡Mamá es toda una mamasota, por donde se le mire está buenísima!… ¡Uuff!… ¡Qué viejota!… Jejeje… ¡Es una locura!… Jejeje….
Yo estiré las manos y me iba a atrever a tocar las piernas y las tetas de mamá, pero mi hermana, al notar mi intención, me empujó un poco y retiró mis abusivas manotas y de paso apartó también las de mi papá de sus ricas tetas.
PATRICIA: ¡Basta!… ¡No manoseen la mercancía!… ¡Nos van a entecar!… ¡No olviden que somos familia!… ¡Y cierren la boca que se les va a entrar los moscos, par de pervertidos hijuemadres estos!… Jajaja…
YO: ¡¿Tú traes calzones puestos? hermanita!
PATRICIA: ¡Si, pero también están deliciosa y convenientemente rotos en toda mi cuquita! Jejeje…
YO: ¡Deja ver!
PATRICIA: ¡No, papito, deja la calentura!… ¡Luego los verán por los monitores cuando estemos en acción! ¡Incluso nos verán completamente desnuditas, ofreciditas y a la orden!
Papá con un rápido y abusivo movimiento de manos le levantó la faldita a mi hermana y se le alcanzó a ver los calzones rotos y su cálida cucaza.
Mi hermana dio un gritico y con sus manos sostuvo su falda para que papá no se la volviera a levantar.
PATRICIA: ¡Aaagghh!… ¡Papá!…
YO: ¡Wow!… ¡Qué coño!… ¡Qué rico!… ¡Se te vio toda la raja, hermanita Patico!… Jajajajaja…
PAPÁ: ¡Todita, todita!… Jejeje… ¡Sabrosísima!… ¡Qué cabrón soy!… Jejeje…
PATRICIA: Jajajaja… ¡Par de abusivos!… ¡Jueputas!… ¡Ustedes dos están súper arrechos!…
YO: ¡Y mamá ni siquiera trae puestos sus cucos!… Jajaja… ¡Ya nos dimos muy bien de cuenta de eso!… Jajaja…
MAMÁ: ¡Jaahhh!… ¡¿Cómo lo supieron?!… ¡Dímelo, amor!…
YO: ¡Te vimos toda la raja cuando subías las escaleras, mamá! ¡Además esa minifaldita tan vulgar a cada rato se te sube y te deja ver todo!
De puro pícaro y abusivo, rápidamente levanté con mis manos las minifalditas de mamá y de Pati al tiempo.
La temperamental Pati me dio un puño en el pecho, y nuevamente pude observar las rajas de juntas mujerzotas mientras papá reía divertido.
YO: Jajajaja… ¡Te lo dije, mamá, no llevas cucos!… Jajajaja…. ¡Qué sinvergüenza y descarada eres!… Jajajaja… ¡Buena esa, má!… ¡Me gusta que seas así!… Jejeje…
MAMÁ: Jajajaja… ¡Este chino berraco!… Jajajaja… ¡De todas maneras ¿para qué me los pongo si dentro de unos minuticos me los van a quitar?! ¡La idea es emputecerme para ganar dinero!
YO: ¡Wow!… ¡Es muy excitante escucharte decir esas cosas, mamá!… Jejeje… ¡Pensé que eras una mujer decente, pero eres toda una facilonga!… Jejejeje… ¡Me gusta lo bien que estás tomando todo esto!… Jejeje…
MAMÁ: Jajajaja… ¡Hay que tomarlo con naturalidad y gracia, mi amor!…
PAPÁ: ¡Palomita siempre ha sido tremenda, Pachito! ¡Tú hubieras visto lo fogosa y terrible que era cuando estábamos en el campo! ¡Y eso que éramos tan solo unos niños!… Jejejeje…
MAMÁ: Jajaja… ¡Debo reconocer que yo, antes de follar contigo, hermanito Pascualino, ya era un poco promiscua, querido!… Jajaja…
PAPÁ: ¡¿Un poco promiscua?!… ¡Ya eras bien puta, mujer!… ¡Todos en la zona te conocían la chocha, el culo y las tetas!… Jejeje… ¡Todos los peones te follaban! ¡Y hasta nuestro abuelo se divertía con tu culazo, perraza, no olvides a ese viejo!… Jajaja…
YO: ¡Vaya, mamá!… ¡No has cambiado nada!… Jejeje…
MAMÁ: Jajajaja… ¡Eso no era pecado! ¡Eso era normal en ese tiempo allá en el campo! ¡Todos nos cogían a todas!… Jajajaja…
PAPÁ: ¡Pero a nosotros sí nos echaron de la finca como a perros por ser incestuosos y por haberte embarazado!… ¡Las cosas son contradictorias!…
La vulgar minifaldita de mamá no se quedaba en su lugar, a cada rato se le subía y le dejaba al descubierto su felpuda chochota.
Ella, luchando con la rebelde prenda, trataba de bajársela y ponerla en su lugar, pero esta volvía a subírsele solita a los pocos segundos.
YO: ¡Déjate así la faldita, mamá!… Jejeje… ¡Tienes una cucota exquisita que mostrar!… Jejeje… ¡La tienes como para meterte el dedo y hasta el salchichón bien rico y profundo!… Jajajaja…
MAMÁ: Jajajaja… ¡Chino grosero y ordinario!… Jajaja… ¡Creo que ya me acomodé esta puta faldita!…
Tanto papá como yo, muy dichosos, nos estábamos tocando nuestras respectivas vergas sobre nuestros pantalones, teníamos unas ganas terribles de sacárnoslas y hacernos la paja frente a las putas de mamá y de mi hermanita, pues estábamos muy excitados viendo a este par de hembrotas vestidas como auténticas prostitutas de antro y comportándose gustosa y decididamente como tales.
MAMÁ: ¡Bien!… Jajajaja… ¡Ya son más de las 10 de la mañana!… ¡No perdamos más tiempo! ¡Salgamos de una buena vez a putear!…
PATRICIA: ¡Bien dicho, mamá!… ¡Vamos!… ¡Vamos a chupar pijas como las putas que somos y a cobrar sin piedad como buenas banqueras!… Jejeje…
MAMÁ: Jejejeje… ¡Sí!… ¡Eso, mija!… ¡Con toda la actitud!…
YO: ¡Bien, par de prostitutas, entonces a trabajar pues!… ¡Las veo, comadres!…
PAPÁ: ¡A hacer dinero, perras! ¡Echen a ver!…
YO: ¡Putas pa’ la calle!… ¡Pa’ fuera a ver, par de prostitutas cochinas y callejeras!…
Papá, con sus grandes y salvajes manotas, les dio al mismo tiempo unas buenas nalgadas a juntas putas y las dirigió hacía la puerta principal de la casa, yo hice lo mismo, y el par de perras estaban que se reían muy descaradamente y demostrando gusto, placer y complicidad.
FIN DE LA SEGUNDA PARTE.
CONTINUARÁ…
ESCRITO POR SIREMIS.
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