Mi niño favorito

Una pequeña fantasía mía como madrastra.
Estaba de los nervios hoy. Después de una hermosa boda y lo que solo podría describirse como una luna de miel decepcionante, me preocupa haber estado a punto de pedir el divorcio en ese momento, ya que mi ahora esposo, Diego, apenas hizo que valiera la pena. Solo me contuve gracias a una de las principales razones por las que me casé con ese idiota de todos modos. La razón es por su lindo hijito de su matrimonio anterior. Su nombre es Matías, ese lindo niño de 9 años es el mejor ejemplo de ternura. Estoy hablando de 130 cm de ternura que solo quiero abrazar y acariciar todo el día. Cuando lo conocí, era muy tímido y me saludó con un hola silencioso mientras se escondía detrás de su padre. Su lindo saludo hizo que mi corazón se derritiera. Fue ese día que supe que tenía que tenerlo, incluso si eso significaba que tenía que lidiar con su padre ciertamente con dinero pero honestamente no de mi gusto.

Han pasado dos días desde que volvimos de la luna de miel y Diego estaba recogiendo a Matías de casa de su abuela. Estaba nerviosa por volver a ver al niño, después de estar lejos de él por tanto tiempo; pero cuando escuché el auto acercarse por el camino de entrada, supe que no podía dejar que mis nervios me afectaran. Tenía que tener a este niño solo para mí sin importar qué. Total soy irresistible, esa era la razón por la que pude conseguir a Diego. Tengo un par de buenos senos doble d; un rostro angelical que desprende una dulce e inocente vibra, un estómago tonificado; grandes caderas que gritan me engendren; un trasero que se sacude y menea cada vez que camino; y para rematar, tengo muslos gruesos que no son demasiado grandes, pero se ajustan perfectamente a mi cuerpo. Sabía que podía atrapar al niñito solo con mi cuerpo si él lo notaba.

Cuando vi que se abría la puerta, me invadió una combinación de nerviosismo y excitación. Cuando vi a Matías corriendo para darme un abrazo y verlo tan feliz de verme hizo que mis preocupaciones desaparecieran junto con mi corazón derritiéndose en un charco de ternura y amor. «¡Amanda, volviste!» exclamó mientras saltaba a mis brazos. Lo abracé contra mi pecho, lo que pareció hacerlo más feliz pero no hizo mucho por mi objetivo final. Diego se acercó por detrás a Matías y me dio un beso en los labios mientras yo abrazaba al niño. Incluso si no quería que Diego me tocara, y mucho menos me besara, sabía que tenía que mantener las apariencias si quería a Matías para mí en el futuro. Entonces, por ahora, tengo que actuar como la esposa perfecta, menospreciando a Matías. Le hablé mientras me sonreía y le preguntaba: «¿Cómo estuvo tu tiempo con la abuela?» «¡Fue increíble! Hicimos galletas y ayudé al abuelo en la casa y también te traje algunas galletas. Mi abuela y yo las hicimos con amor». Mi corazón se derritió aún más por su consideración. Me entregó un recipiente con un par de galletas dentro. «¿Está bien si saco una ahora, Matías?», Pregunté. «Por supuesto, ahora eres mi mamá, así que recibes todas mis galletas de amor», dijo sonriendo. La sonrisa que me dio podría derretir un glaciar. Me comí una de las galletas mientras decía en mi cabeza, ‘al diablo con las calorías’, ya que eran las mejores galletas que había probado. «Mmmmm… delicioso, estas son las mejores galletas del mundo.

Lo celebró vitoreando, «yayyyy a mamá le gustan mis galletas». Fue en ese momento que Diego habló y dijo: «Hijo, hablamos de esto, no puedes llamarla mami a menos que ella diga que puedes». Esto pareció hacer que la felicidad de Matías se esfumara. «Está bien papá», respondió. Casi me rompe el corazón verlo así, así que me arrodillé frente a Matías y le dije: «¿Qué tal esto, puedes llamarme mami si puedo llamarte Mati?». Esto lo animó. Pude ver sus ojos brillar «¡Sí! ¡Por favor!» Le di otro abrazo empujando su cabeza entre mis pechos haciendo que se acurrucara en el abrazo. Esto solo hizo que lo deseara más. Tenía que hacer mío a este hombrecito.

En el transcurso de días, si no semanas, traté de seducir al niño una y otra vez hasta el punto de frustrarme hasta la locura. Intenté todo. En un momento, llevaba una camiseta sin mangas que amenazaba con romperse debido a que mis tetas eran demasiado grandes para ellas, mientras que llevaba una falda muy corta que mostraba mis calzones apretando bien mi vagina, pero que Dios bendiga el alma de este niño, todo lo que hizo fue preocuparse de que yo tuviera frío y pudiera enfermarme por eso. Incluso comencé a abrazarlo más y más mientras empujaba su cabeza entre mis tetas. Juro que pude sentir los celos de Diego cuando apenas dejé que me tocara. Matías simplemente pensó que eran abrazos extra cariñosos, lo que me ayudó un poco porque seguía deseándolos más pero no progresó más allá de eso. Como dije antes, este lindo e inocente niño me estaba volviendo loca a estas alturas, pero me negué a rendirme.

Entonces sucedió, lo juro por Dios, he visto mi frustración como la mejor noticia que haya sucedido en este mundo ya que Diego fue transferido al extranjero por un par de meses. Esto significa que estaré sola en casa con Matias las 24 horas del día, los 7 días de la semana, finalmente podría poner en marcha mi plan final.

Cuando por fin llegó el día y Diego se fue, como buena esposa, me despedí de él, le di un beso y todo. Una vez que el taxi se fue, mi mente entró en acción. Primero, abracé a Matías porque estaba un poco molesto porque su papá se iba. «No te preocupes, mi pequeño Mati, mami no se va a ningún lado», le aseguré. Esto lo ayudó a calmarse. «¿Promesa?» «Lo cruzo por mi corazón» le di un gran abrazo justo en mis tetas «¿Qué tal esto? ¿Qué te gustaría cenar? Lo que quieras, lo tendremos». Su sonrisa volvió con toda su fuerza ante esto. «¿En serio?» cuestionó. Le devuelvo la sonrisa. «¡En serio en serio!» Pensó un poco antes de responder: «¿Podemos comer pizza?». Demonios, sí, esto haría que mi plan fuera más fácil. «¡Por supuesto cariño!» Yo respondí. «Yayyyy pizzaaaaa», vitoreó. Lo dejé mientras corría de regreso a la casa para jugar.

Fui a mi habitación y preparé un afrodisíaco para esta noche. ‘Si pudiera conseguirlo de forma natural, usaría un poco de ayuda química’. Esa noche rocié su pizza con un poco del afrodisíaco y, como el niño pequeño que es, se tragó la pizza antes de que pudiera saborearla. Ahora sólo tenía que esperar para obtener lo que quería.

Después de la cena, lo metí en la cama y fui a la mía solo para comenzar a ver un poco de televisión mientras esperaba que se desarrollara mi plan. Me tomó casi media hora pensar ‘mierda, qué pasa si no funciona’ antes de que Matías entrara con las manos frente a él. «Mamá, me siento raro». en mi cabeza celebré mientras caminábamos hacia mi cama y apagaba la televisión. «¿Qué quieres decir, Matías?» pregunto . Salí de la cama para encontrarlo a mitad de camino ya que se veía muy nervioso. «Es mi pipí, se siente raro». Sonriendo por dentro mientras hacía mi mejor voz de madre amorosa en lugar de la voz de un gato que atrapó al canario, «Bueno, ¿puedo verlo para poder ayudarte, Mati?» Se sonrojó ante la idea, pero apartó las manos del camino. Fue entonces cuando vi el bulto que se había desarrollado en sus pantalones. ‘No hay manera de que mi niño pequeño pueda ser tan grande’, pensé. «No te preocupes, Mati, mamá te ayudará», le sonreí mientras mis manos tomaban sus pantalones. Los bajé, lentamente mis sueños más húmedos y depravados se estaban haciendo realidad.

Podía sentir mi coño humedecerse ante la simple vista del rico pedazo de carne virgen que colgaba entre las piernas del niñito. Estaba hipnotizada. No podía dejar de mirarlo. Se había apoderado por completo de mi mente mientras esta cosa palpitaba como si estuviera rogando que la devorara. Matías habló, «¿Qué pasa mamá, es algo malo?» Podía escuchar el miedo en su voz. «No, bebé, significa que estás creciendo, eres un niño grande. ‘En más de un sentido’ ahora puedes hacer un tipo diferente de cariños con tu mami en lugar de abrazos». Parecía confundido ante esto. «¿Qué quieres decir, mamá?» Sonreí ante esto. «¿Amas a mami?» Él sonrió. «¡Por supuesto, te amo mucho mami!» Le devolví la sonrisa. «Y cómo te amo tanto, significa que podemos hacernos cariños especiales que se sienten mucho mejor que los normales como los abrazos» «De verdad, mamá, ¿podemos?» cuestionó. «Sí, pero tenemos que ir a la cama para hacerlos. ¿Está bien?»

Lo levanté en mis brazos mientras lo llevaba a la cama y lo acosté «solo recuerda que no podemos decírselo a papá, pero está bien» asintió «está bien, mamá» llegando a mi límite conteniendo la mano. Agarré su pene palpitante con mis manos, que ni siquiera podía sortear todo el asunto, dije que lo acariciara agradable y lentamente al principio. Podía escuchar sus pequeños y lindos gemidos mientras lo hacía, pero dejé que mis ojos se empaparan en este espécimen perfecto de pene, pero mientras mis ojos se deslizaban hacia abajo, vi algo que hizo que mi boca se ahogara en baba, este niño no solo tiene una pene que avergonzaría a cualquier hombre, sino que también tenía unos ricos testículos que palpitaban a medida que producían más y más semen para que yo bebiera. No pude evitarlo cuando mi boca se decidió por esas hermosas bolas suyas cuando comencé a besar y chupar cada una de ellas saboreando el sabor almizclado que abrumó no solo mis papilas gustativas sino que envió mi cerebro al cielo y solo escuché los dulces gemidos de mi niño, se mojó aún más mi coño y me dejó con ganas de más y más por cada segundo que adoraba su cuerpo.

«Mamá, se siente tan bien». «Bien, pero esto es solo el comienzo, Mati, quiero que mi hombrecito sienta todo el placer que pueda». Antes de que pudiera hablar, puse mis manos sobre sus bolas y comencé a masajearlas mientras besaba mi camino desde la base hasta la punta de su palpitante miembro causando que él gimiera, juro que podría correrme con solo escucharlo gemir en voz alta, pero cuando llegué a la punta vi su liquido preseminal haciendo que su cabeza brillara y no pude evitar seguir lamiendo todo, el niño me hacía gemir solo por el sabor del dulce néctar que estaba produciendo «mamá, quiero más, por favor» «por supuesto, cariño» Tomé la mayor cantidad en mi boca, ni siquiera fui sutil en mi deseo de tener su leche de bebé en mi estómago, tomé todo lo que pude para moverme a mitad de camino, pero quería y necesitaba más, podía sentir mi coño gotear de celos cuando comencé a violar mi propia garganta con su miembro palpitante.

No pude contenerme más, necesitaba que se corriera en mi estómago, necesitaba que el niño se corriera dentro de mí, seguí bombeando su pene mientras masajeaba sus bolas, pero luego sucedió algo inesperado, Matías agarró mi cabeza y comenzó a bombear su pene más adentro de mi garganta «Lo siento mamá, pero siento que algo se acerca y no puedo parar» siguió empujando su pene una y otra vez sin detenerse por un segundo, fue entonces cuando sucedió algo hermoso «mamá se acercagggg» sentí su pene se reventar cuando su semen salió disparado directamente a mi estómago llenándome una y otra vez con su semen y había tanto de él que seguía viniendo y viniendo y una vez que el dulce semen del niño golpeó mi garganta me corrí bien duro , Me sentí completamente llena en cuestión de segundos, pero no se detuvo. Mi hijo semental tardo al menos un minuto en correrse para finalmente detenerse.

Empezó a sacar el pene, pero quería asegurarme de tenerla toda, así que lo chupé mientras tiraba, lo que hizo que gimiera de nuevo cuando chupé lo último de su adictivo semen directamente sobre mi lengua, haciendo que mis papilas gustativas explotaran. ya que los abrumó con su perfecto sabor y espesor.

Respiraba con dificultad cuando dejé que lo tomara por completo sabiendo que lo había sacado todo, mientras saboreaba y disfrutaba de este semen perfectamente espeso, me miraba con lujuria y confusión en sus ojos. Decidí tragarme este semental y le hablé «¿qué estás pensando hijo?» se sonrojó ante esto «quiero hacerlo más» le sonreí «oh, créeme, planeo darte mucho más, niñito» sonrió cuando miré su pene todavía duro, palpitaba en anticipación de lo que vendría después «pero creo que es hora de que demuestre lo que las tetas de mamá puedan hacer» Vi que sus ojos se deslizaban hacia mis tetas mientras hablaba, así que sabía que lo deseaba tanto como yo. Envolví mis tetas alrededor de su grueso miembro y procedí a chupar la punta  mientras mis tetas frotaban y apretaban su pene haciéndolo gemir «oh mamá, se sienten tan suaves».

Mientras seguía chupando y frotando su grueso miembro, sus gemidos se hacían más y más fuertes, sabía que no duraría tanto a este ritmo, pero no quería parar. Necesitaba más de su semen dentro de mí, era como si despertara un hambre dentro de mí que sabía que solo él podía satisfacer, así que chupé más fuerte y acaricié su pene con mis tetas cada vez más rápido a medida que sus gemidos se hacían más fuertes. más frecuentes y en ese momento mi coño se estaba volviendo tan necesitado que sabía que no duraría más si no metía este pene pronto.

Ven, hijo, ven a correrte para mami, ¿no quieres bañar a mami en tu lechita?» Esto solo hizo que él gimiera aún más fuerte cuando sentí que su pene se contraía. a la cabeza de su polla y chupó con fuerza, gritó «mummmmm» mientras su semen viajaba por su miembro y directamente a mi boca llenándola en segundos, traté de tragar todo lo que pude pero no detuvo, solo seguía llenándose y más lleno a medida que siguió y siguió hasta el punto en que su semen comenzó a salir de mi boca, pero me negué a dejar de chupar este magnífico pedazo de carne, cuando finalmente se detuvo, «mira todo el delicioso semen que le diste a mamá» abrió los ojos y miró mi cara y mi estómago, lo que vio fue tan hermoso que su pene comenzó a ponerse duro de nuevo e incluso más duro que antes, pero sabía dónde lo necesitaba a continuación.

«Cariño, ¿te gustaría ponerlo en el lugar especial de mamá?» Parecía sorprendido y solo podía asentir con la cabeza. «Buen niño». Quería que pusiera ese grueso poste de carne a continuación «Mira este agujero aquí». Lo miré y vi hambre en sus ojos mientras asentía. «Mientras se arrastraba hacia mí, supe que mi hijo estaba en piloto automático mientras alineaba su pene para coger brutalmente mi coño, no podía creer que estaba a punto de tomar la virginidad del lindo niño de 9 años, pero conocía mi cuerpo, no me dejaría retroceder sabiendo que mi coño estaba tan hambriento.

«Eso es hijo, ama a mamá con ese gran pene tuyo, puedes reclamar a mamá por ti mismo, todo lo que tienes que hacer es coger tanto a mamá que ella solo pueda decir eso», empujó su pene directamente en mi matriz antes de que terminara. Provocándolo, esto hizo que me corriera de inmediato cuando su pene remodeló mi coño a su gusto, lo que me obligó a olvidar mi nombre mientras empujaba a través de mi cuello uterino y dentro de mi útero hasta el punto de que podía ver el bulto de su pene a través de mi abdomen haciéndome gritar «ohhhh mierda bebé sí» se sorprendió «¿estás bien mami, no te lastimé?» Pude ver al niño cariñoso que caí en los ojos que estaban tan llenos de preocupación por mí «no cariño , acabas de hacer que mamá se sienta tan bien que quiero aún más» Pude verlo sonreír con felicidad ante la idea de hacer feliz a su mamá.

«Realmente te hice feliz mamá» sonriéndole «sí, mi Mati ahora mamá quiere que la penetres hasta que te corras en mí, está bien» asintió mientras sacaba su pene, me sentí tan vacía en este momento pero antes de que pudiera decir cualquier cosa, me empujó de nuevo y por los dioses esto me hizo llegar al clímax otra vez,  «oh, sí, más hijo, más, ama a mami todo lo que quieras», sonriendo, él siguió empujando dentro. yo yendo directamente a mi útero con eso no era más que otra parte de mamá para complacerlo.

Siguió penetrándome una y otra vez en un punto, juro que perdí el conocimiento por el placer que este niño me estaba dando, era como si cada embestida igualara otro orgasmo hasta el punto en que perdí la cuenta y simplemente disfruté la sensación de mi hijo cogiéndome, como él era mi dueño y en este punto, si él quería, podía poseerme, no podía pensar en nada más que en el grueso pene que estaba remodelando mi mente y en cómo sabía que nadie podría volver a darme placer así nunca más. Sabía en este momento que yo era suya y esperaba que él fuera mío, fue entonces cuando escuché la voz más dulce del mundo decir las palabras que esperaba escuchar «mami, me voy a correr de nuevo» «oh dios, sí, por favor vente en el coño de mamá» » pero ¿no es eso malo? ¿No debería hacer eso solo papá? Apenas podía pensar en este punto, pero sabía que tenía que cortar esto de raíz porque mi útero estaba rogando por su semen. Necesito que te corras en mí, por favor. reclama mi útero Mati, olvídate de tu papá, solo te quiero a ti, así que por favor reclámame, por favor, córrete en mi».

Podía sentir su pene endurecerse, «vamos, hijo, preña a tu mami». Escuché un gruñido casi primitivo proveniente de este dulce niño, iba a reclamarme, sabía que iba a suceder, Podía sentir a la mujer primitiva en mí abrazar a este semental cuando me escuché decir «me estoy corriendo mummmmm». más grande a medida que seguían eyaculando y eyaculando, fue entonces cuando realmente perdí la cabeza por este niño que sabía por dentro y por fuera que ahora era su mujer cuando sentí que mi útero se inflaba por el gran volumen de semen que estaba liberando y para mi sorpresa Matías tomó mi cabeza y me besó con fuerza en los labios como para reclamarme por completo y no pude evitar abrazarlo en este beso mientras se profundizaba arrastrándome a las profundidades de la depravación, finalmente obtuve mi deseo, tengo un pequeño niño para reclamar mi mente cuerpo y alma total  absolutamente.

Después de que los dos nos corrimos por lo que parecieron horas pero en realidad fueron 5 minutos, dejó de besarme y me miró como un depredador miraría a una presa y pude sentir que no se estaba alejando de mí. Quiero más mamá. estaba atónita, podía seguir adelante, pero cuando sentí que su pene aún duro y palpitante comenzaba a empujarme de nuevo, supe que no era una solicitud o incluso una pregunta, era una declaración, una orden de mi lindo hombrecito «sí, hijo, hazlo tanto como quieras» le sonreí mientras me devolvía la sonrisa y comenzaba a poseerme de nuevo, nuevamente tomó mis labios y me besó mientras seguíamos cogiendo por horas solo deteniéndonos para beber un poco de agua o cuando quería que chupara su pene mientras descansaba, me encontré completamente adicta a él.

Dos semanas después.

Estábamos cogiendo en la cama cuando Diego llamó, mi hijo me estaba penetrando de perrito por lo que parecía la cuarta vez hoy, en el transcurso de los últimos días siguió queriendo más y más, así que para estar segura aumenté su comida y se aseguró de beber más agua pero esto solo sirvió para ponerlo más cachondo y fuerte, este pequeño de 9 años se estaba convirtiendo en un dios del sexo con su único enfoque en mí, yo ya sabía que estaba embarazada por todo esto y no podía estar más feliz hasta que Diego llamó mientras este dios me estaba cogiendo «levántalo mamá, no te preocupes, no me detendré, solo reduce la velocidad un poco» casi podía sentir su sonrisa descarada mientras hablaba «está bien hijo» levanté el teléfono mientras apenas contenía mis gemidos «hola cariño, ¿cómo te va?» Escuché a Diego decir al otro lado «no está mal, Matías y yo estamos jugando en este momento, ¿cómo va el trabajo?» Podía escuchar a Matías reírse de esto mientras azotaba mis nalgas y me daba por detrás haciéndome casi gemir.

«no está mal, un poco aburrido sin poder verte ni a Matías» (eso fue dulce pero que mal que Matías haya tomado tu lugar) «Juro que Matías estaba golpeando mis puntos más sensibles a propósito» te amo cariño » «Yo también te amo ohhh ok tal vez gemí un poco pero me recuperé rápido «Tengo algunas noticias», «genial, ¿qué es?» «Estoy embarazada» Lo escuché gritar lejos del teléfono «SÍ, VAMOS A SER PADRES?». Sonreí sabiendo que en realidad pensaba que era suyo, pero sabía que era de Matías. Podría garantizarlo. «¿Estás segura? «,  «Todavía no me he hecho la prueba, pero puedo sentirlo y me perdí el período»

Sonreí por mi pequeña broma, pero cada vez era más difícil contener mis gemidos. «Genial. ¿Ya le dijiste a Matías?» «Sí, y él está muy emocionado, espera una hermanita». otra reunión, no puedo esperar a verlos y recuerden, tómenlo con calma, está bien» «Lo haré querido, diviértete en el trabajo» se rió Matías mientras colgaba, tiré el teléfono al suelo y solté todos los gemidos que estaba conteniendo en ese momento, «¿cómo se siente ser preñada por tu hijo, mamá?» «mmmm, qué bueno, planeo tener tantos de tus hijos, Matías», me puse en misionero y comenzó a besarme mientras comenzaba a penetrarme con fuerza. y rápido como a mí me gusta.

Soy tan afortunada de tener la vida perfecta, un esposo que puede mantenerme a mí ya  los niños que planeo tener y el hijo amoroso que me dará esos niños. La vida no podría ser mejor que esto.

Honestamente siento que este no es el trabajo más pulido que he hecho, he estado algo ocupada y no he tenido mucho tiempo libre. Espero sus comentarios y ojala les haya excitado.