Mi novia y su rica sobrina.

Cómo lo que al principio parecía ser un fin de semana frustrado termina siendo un fin de semana lleno de sexo y perversión. .
No pude evitar mi cara de decepción cuando pase por mi novia Ana a su casa.

Ese fin de semana largo saldríamos a Cuernavaca, lo había planeado durante todo el mes anterior. Llevábamos 6 meses de novios y por fin estaríamos solos, ella y yo, durante cuatro días en una casita que había rentado, pero cuando pase por ella ese viernes por la mañana me sorprendió con la noticia de que había invitado a su sobrina, la hija de su hermana mayor, a qué viniese con nosotros.

No lo podía creer, en lugar de pasar el fin de semana cogiendo como conejos, íbamos a estar cuidando a esa niña de 13 años.

Como sea, no tuve más remedio que aceptar a regañadientes, así que nos encaminamos los tres a Cuernavaca. En el camino mi novia y su sobrina iban muy emocionadas, cantando al ritmo de la música y me contagiaron de su buen humor, fue cuando pude observar de manera detallada, por el retrovisor, que la sobrina era una niña hermosa, de piel clara, ojos cafés, cabello al hombro y una sonrisa coqueta. Iba vestida con una blusa blanca ceñida que hacía notar sus pechos en formación aunque ya grandes para su edad y una minifalda de mezclilla por la que se veían dos bien torneadas y gruesas piernas.

Por su parte, mi novia iba vestida con una playera ombliguera negra y ajustada que denotaba sus dos pechos grandes y redondos, además de unos leggins azules que hacían que su rico y redondo culo destacara aún más. Pensé, al menos tendré la hermosa vista del culo de Ana.

Llegamos a la casita que había rentado, era pequeña pero muy linda y contaba con una pequeña piscina solo para nosotros. En lo que yo bajaba las maletas del auto, mi novia y su sobrina corrieron a cambiarse para meterse a la alberca, cuando las vi casi tiro todo de la sorpresa, quedé embobado. Mi novia y su sobrina salieron con sendos biquinis diminutos. Mi novia vestía uno de color amarillo que de la parte de arriba apenas podía contener sus hermosas tetas y de la parte de abajo una tanga de hilo que solo cubría su depilado y jugoso coñito, el hilo se perdía entre esos dos generosos y redondos glúteos que me volvían loco. Su sobrina llevaba prácticamente lo mismo pero de color azul, aunque sus tetas eran más pequeñas si que eran grandes para su edad y su culito respingón también se comia el hilo de la tanga, pero me sorprendió ver qué del triangulito que cubría su sexo no se asomaba ningún pelito. ¿Acaso esa niña de 13 años ya se depilaba el pubis?

Ambas se metieron a la piscina mientras yo metía las cosas y acomodaba todo dentro de la casita. Cuando salí ambas se divertían jugando y salpicandose en la alberca. Era una vista tan hermosa de esas dos que mi verga empezó a reaccionar sobre mi traje de baño. Tenía que acomodarlo para que no se notará la erección que me estaban provocando, sobre todo el morbo de ver a esa chamaquita con una prenda tan atrevida.

Me acomode en una tumbona, me abrí una cerveza y encendí un cigarrillo mientras las veía, era una vista muy erótica, ver a mi novia de 20 años y a su sobrina de 13 casi desnudas.

Ana salió de la piscina y se acercó a mí para pedirme un trago de cerveza y una calada a mi cigarro. Me dijo que por qué no entraba con ellas a la piscina y le dije que por el momento no me apetecía, además ya era un poco tarde y que me estaba dando hambre, mejor haría la carne que habíamos traído. Que ella siguiera jugando con su sobrina en lo que preparaba todo.

Mientras encendía el asador y ponía la carne no dejaba de observar a esas dos hermosas hembras, sobre todo a su sobrina que me llenaba de vicio y morbo. Una chiquilla que tenía un cuerpo que muchas mujeres envidiarįan y que me estaba llenando de pensamientos lascivos. En ellos recordaba las cogidas que le daba a Ana, pero no era ella a la que penetraba, era a su sobrina.

Tío, ¿ya casi está la comida? Tengo mucha hambre.

La voz de la sexy nena me sacó de mis pensamientos.

Si Viri, ya casi está la carne, dile a tu tía que ya vamos a comer.

Comimos entre risas y bromas, la verdad fue muy ameno, pero no pude evitar recorrer con la mirada los hermosos cuerpos de las hembras que tenía junto a mi.

Cuando terminamos de comer Viri se metió nuevamente a la alberca mientras Ana y yo charlamos en lo que nos tomábamos una cerveza y fumábamos un cigarrillo. No podía dejar de ver a Viri y mi novia al percatarse me dijo

¿Verdad que está bien buena mi sobrina?

La verdad es que no quería pasar como un pervertido y le dije que no me fijaba en eso, que era solo una niña y que la veía por si tenía algún accidente, además de que me divertía la forma en que jugaba la chamaca.

Ana solo sonrió y seguimos platicando, pero mis miradas tuvieron que ser más discretas. Así transcurrió la tarde. Para ese momento yo me había resignado a qué no iba a haber sexo y que solo podría fantasear, ya que la casita solo tenía una recámara con dos camas.

Al llegar la noche y prepararnos para dormir no podía sacarme de la cabeza el hermoso cuerpo de Viri en ese lindo bañador. Nos acostamos, Ana y yo en una cama y Viri en la otra, me dispuse a dormir, pero como a la media hora sentí la mano de Ana tocando mi pene que reaccionó enseguida y se puso muy duro.

Te quiero chupar la verga como a ti te gusta

Me dijo Ana muy sensualmente al oído.

Estás loca, tu sobrina está en la cama de al lado, se puede despertar.

Le contesté un poco alarmado de que la niña se despertara mientras su tía me hacía una felación o estuviéramos follando.

No se despierta, tiene el sueño muy pesado.

Me dijo Ana mientras empezaba a bajar mi shorts y dirigía su boca a mi verga, que ya estaba durísima. La verdad es que me daba mucho morbo que me la mamara mientras su sobrina dormía plácidamente en la cama a escasos dos metros de nosotros.

Su primer succión me saco un gemido ahogado, por qué si bien me daba morbo la situación, tampoco quería despertar a la nena. No sabía cómo podría reaccionar. Aún así me dispuse a disfrutar de esa rica mamada, cerré los ojos y me concentré en la rica boca de mi novia, es una experta en felaciones. Sentía su garganta cuando se introducía toda mi verga y como al sacarla su lengua apretaba contra el paladar, su lengua enroscándose al glande y nuevamente a succionar para volver a introducirla hasta su garganta. Estaba en la gloria, cuando de pronto

Eso se ve muy rico, ¿me invitas a probar ese pedazo de carne tía?

Abrí los ojos y vi parada detrás de mi novia, atenta, a su sobrina, viendo como su tía se tragaba mis 18 centímetros de verga. Me quedé sorprendido, primero de que nos estuviera viendo y segundo por la pregunta, pero más me sorprendí cuando…

¿Ya te visitó el tío Timoteo?

Ya tía, desde hace año y medio que tuve mi primer periodo.

Entonces adelante, muéstrame lo que has aprendido Viri.

No entendí su conversación, aunque ya después me lo explicó Ana, pero esa es otra historia.

Pero…

Fue todo lo que pude decir por qué mi novia me dijo

Cállate y disfruta, ¿acaso crees que no me di cuenta como te la comías con la mirada? ¿Cómo se te paraba la verga cuando le veías las nalgas? ¿Cómo te perdías, supongo que fantaseando en cogertela? Y no digas que no, te conozco. Así que hazme caso, cállate y disfruta de mi sobrina.

Dicho esto me plantó un apasionado beso de lengua mientras que Viri tomaba la iniciativa y empezaba a recorrer mi verga con sus manos, mirándola extasiada, para después de eso empezar a recorrerla con la lengua, lamiendo cada parte de mi miembro. Abrió la boca y mientras hacia pequeñas succiones la fue metiendo poco a poco hasta su garganta. Electricidad corría por toda mi espina dorsal mientras mi novia se desnudaba y se sentaba en la cama a observar cómo su pequeña sobrina me mamaba la verga. Abrió las piernas revelando su coñito hermoso, húmedo y caliente y empezó a masturbarse. Con la mano derecha pasaba sus dedos de forma suave pero firme sobre su rajita libre de cualquier vello púbico, sobaba su clítoris y metía su dedo índice, mientras que con la mano izquierda acariciaba sus pechos, se tocaba sus pezones rosas y gemía de forma erótica. Todo esto mientras Viri engullía mi verga.

Vaya que la niña sabía muy bien cómo mamar, lo hacía casi igual que mi novia. Se la metía hasta la garganta, no sabía cómo podía introducirse de esa forma una nena de 13 años la verga en la boca. Cuando la sacaba, succionaba mi glande, lo recorría con la lengua.

Estaba a punto de estallar en su boca y Ana se dio cuenta. Le dijo a su sobrina que se detuviera y que se desnudara y se acostara ahí, junta ella. Vi como se quitó la blusa olgada que le servía de pijama, sin brasiere, y sus tetas se balancearon ante sus movimientos. Unas tetas redondas, duras y firmes debido a la edad de la chiquilla. Quedó con una tanga negra, muy linda, de encaje que era devorada por su dos ricos y parados glúteos, aunque no tardó mucho en quitarse esa prenda tambien, dejándome ver su juvenil rajita. Efectivamente, como lo había pensado en la tarde, esa niña se depilaba su zona íntima, la cuál estaba sin un solo bellos púbico. Viri se acostó en la cama, con las piernas hacia a mí y Ana se las abrió. Pude observar como esta brillaba un poco en la semi oscuridad, producto de sus flujos vaginales. Se veía muy jugosa y apetitosa. A mí me ordenó que la comiera la rajita a Viri. Mi novia estaba llena de morbo, vicio y perversidad, parecía que estuviera dirigiendo su película porno persona, pero no me negué.

Me acerque a ese juvenil coño y lo observé atentamente, lo acaricie un poco, pasando suavemente mis dedos atravez de su rajita y comprobé que estaba muy mojada, aproxime mi rostro, saque mi lengua y la pase por esa raja, su sabor era delicioso. Al primer lenguetazo Viri se estremeció, Ana me dijo

Comele bien el coñona está pequeña zorrita, hazla disfrutar como la putita que es.

Y así se comportaba la escuincla, se estremeció, gemía con su vocecita de niña inocente, a cada lamida que le deba, cuando introducía mi lengua en su rajita, cuando succionaba su clítoris ya extremadamente duro. Ese coño sabía a gloria.

Levanté la vista y lo que vi me puso aún más duro. Mientras yo le comía la vagina a Viri, Ana se ocupaba de acariciar sus pechos, de besarlos, lamerlos, morder sus pezones rosaditos y también de besar apasionadamente a su sobrina. Ella correspondía los besos ardientemente, con pasión. Arremetí moviendo con mayor velocidad mi lengua y succionando con más fuerza su clítoris. La niña se retorció, lanzo una grito super sexy

Me vengooooo, que ricoooo, que deliciosoooo

Y le lleno con los flujos producto de su orgasmo, mi novia beso con mayor pasión a su sobrina y le apretaba las tetas. Bebí sus ricos fluidos y Ana me beso con pasión para probar directamente de mi boca el sabor de su sobrina.

Viri recuperaba la respiración acostada y Ana me dijo

Cogétela, métele tu verga hasta el fondo, quiero verla disfrutar y como la penetras. Esta putita ya no es virgen, cogétela y descarga tu leche dentro de ella.

Me lo dijo con una voz de excitación, de morbosa, autoritaria y que no aceptaría un no por respuesta, obedecí, porque además de Ana, era llevado mi calentura. Mi verga estaba que quería explotar, pero explotaría dentro de Viri.

Si tío, cógeme, méteme tu verga, quiero sentirte dentro, quiero sentir que me penetras, quiero ser tu putita.

Si había algún rastro de vacilación en mi interior, este desapareció con las palabras de Viri.

Ana abrió las piernas de su sobrina y me ofreció su sexo, al cuál ya no me iba a negar por nada. Tomé mi pene y lo puse en la entrada de su cuevita. Despacio fui introduciendo el glande, quería disfrutar al máximo lo apretado, caliente y húmedo de ese coño juvenil. La fui penetrando lentamente pero sin pausas, disfrutando cada centímetro.

Que rica verga, que rico siento como me abre. Que rico me penetras tío, hazme tu putita, quiero ser tu zorrita delante de mi tía. Por favor tío.

Me dijo una vez que entro toda mi verga en su raja.

Ya escuchaste cabron, follatela como a una zorra, no es más que eso, una puta que quiere disfrutar de tu verga. Cogetela cabrón.

Me decía Ana fuera de sí por la excitación. Yo también estaba lleno de morbo y muy, pero que muy excitado, así que empecé a moverme dentro de Viri, despacio al principio, pero poco a poco fui subiendo la intensidad de las embestidas. Sentía mi verga entrando y saliendo de su útero y ella produciendo más y más flujo mientras gemía como una auténtica zorra adulta, aunque solo tenía 13 años.

Mi novia veía como penetraba a su hermosa sobrina mientras se introducía tres dedos en su coño y apretaba sus tetas. De vez en cuando besaba a su propia sobrina. De pronto la chiquilla estalló entre gemidos y gritos de placer en un segundo orgasmo, ya no pude con eso, estaba a punto de correrme cuando escuché a Ana tendiendo su propia corrida mientras me gritaba

Córrete cabrón, llena de leche a mi sobrina, quiero que la dejes chorreando de tu lefa.

No pude más y me corrí dentro de Viri, inunde su vagina con mi leche, cuatro fuertes chorros de semen la llenaron.

Estuve unos segundos quieto y saque mi verga del interior de esa linda jovencita. Mi esperma empezó a resbalar fuera de su cuevita, Ana tomo un poco entre sus dedos y se lo dio en la boca a Viri que los chupo con gusto. Ana tomo otro poco y lo llevo a su boca, después ambas se besaron con lengua compartiendo mi semen en un excitante y delicioso beso incestuoso. Eso hizo que mi verga empezará a reaccionar. Mi novia al verme así me beso aún con rastros de semen en su boca y me dijo

Tranquilo bebe. Vamos despacio, aunnos quedan tres días para disfrutar, guarda fuerzas. Además estoy cansada del día y del tremendo orgasmo que tuve. Vamos a dormir que mañana será un gran día, te prometo que no te arrepentirás.

Viri solo se rió y dijo

Si tío, vamos a descansar por qué todo este fin de semana seré tu putita con el permiso de mi tía.

Eso me hizo volar, imaginé miles de escenarios, todos ellos morbosos y super excitantes, así que acepte y me acosté en medio de mis dos putitas, putitas mías al menos durante este fin de semana. Me dormí con una gran sonrisa en la cara. La verdad Ana no mintió, no me arrepentí de aguantar las ganas de seguirmelas cogiendo.

Pero eso será para la segunda parte. Bueno, si es que quieren segunda parte, denme sus

opiniones para contarles más de esta excitante historia.