Mi novio
Esta historia es sobre como conocí a mi novio y como es que conocí a su papá.
Hola. ¿Me extrañaste? perdón por tardar en escribirte, pero he estado algo ocupada, y no me ha dado tiempo de sentarme a contarte mis locas aventuras; y también me ha dado algo de pereza escribir y escribir jajaja…
A mi novio lo conocí en el diciembre del año pasado, antes de la pandemia, recuerdo que las chicas fueron a mi casa para salir con ellas a un antro, si se preguntan como es que nos dejaron entrar, ya se los contare mas adelante. recuerdo muy bien que me estaba despidiendo de mi papi y ellas no dejaban de insistir en que me diera prisa.
-Apurate mujer!!! ya quiero bailar.
-Ya voy, ya voy
Subo lo más rápido que puedo en el asiento de atras donde esta Andrea, y nada más cierro la puerta y Mia nos lleva de regreso a la ciudad.
-¡Feliz navidad! -Me abrasa Andrea dándome un beso en la boca, un beso con un poco de lengua y mordida de labio -¿Como esta tu familia?
-Bien, gracias, todos estan bien -Me estiro para darle un beso en la boca a Jessica, y al mismo tiempo le pregunto a Mía- ¿Como hiciste para que te prestara el auto tu papá?
-Fue su magia bucal jajajaja me dice Jessica antes de besarme.
-Jajajajaja claro que noooo no soy tan puta jajajajaj mi papá se fue de viaje con mi mamá y me dejaron con mi abuela, ella ya esta durmiendo y como me se el numero de seguridad de la caja fuerte, lo demás fue pan comido -De la misma forma me estiro y le doy un beso, pero con ella solo fue uno muy rápido porque estaba manejando.
Pasamos como 4 minutos de camino de terracería, como la hacienda mi mis abuelos está separada de la ciudad, aun en esa parte no hay camino para autos, asi es que pasamos un poco de brincos y oscuridad, entramos por la parte sur de la ciudad y fuimos directamente al antro al llegar dejamos el auto en el estacionamiento y antes de bajar teníamos que organizarnos quien negociaria la entrada con el cadenero. Como aún no tenemos la edad requerida para entrar a esos lugares, teníamos que ingeniárselas para entrar.
-¿A quien le toca? -dice Mia
-Ya nos toco una vez a todas -Dice Jessica
-entonces nos toca un piedra papel o tijeras
La perdedora fue Jessica, solo era darle una mamada al cadenero; así es que bajamos del auto y ella iba unos metros adelante de nosotras, se pasó de largo la fila de espera, llegó con el cadenero, el la vio desde antes y hasta se le iluminó la cara, como él mide cerca de los dos metros se agacho para que Jessica le dijera algo al oído, después de unas palabras, dijo que si, nos hicieron una señal y entramos, el cadenero entró con nosotros cerrando la puerta, caminamos por el pasillo y él y Jessica entraron en un cuarto y nosotras seguimos de frente.
Al llegar a la pista de baile Andrea me tomo de la mano y me llevó al centro, le urgía ponerse a bailar, así es que en esa estábamos, nos acercabamos mucho, nos dábamos la espalda y hacemos que nuestros culos se frotaran al ritmo de la música.
No sé cuánto tiempo estuvimos bailando, la música cambiaba de ritmo y nuestros cuerpos se amoldaban a esos cambios, nos sentíamos en nuestro ambiente, este es el tiempo de lugar donde me gusta estar, también hay otros, pero un antro, es uno de ellos, había mucha gente, la mayoría rondaba, creó, arriba de los 30 años, como es un día familiar, supongo que a los que tenían menos edad preferían o los obligaban a estar con sus familias, así es que los que estaban ahí tenían una muy buena independencia, aunque a decir verdad, ahora recuerdo a ver visto a gente más joven, pero muy poca. La pista de baile estaba llena, lo que hacía que teníamos que bailar muy juntas, estábamos bailando de frente, en algunos momentos nos tomábamos de la cintura y pegábamos nuestros cuerpos, nuestros senos se acariciaban al ritmo de la música, yo en momentos pasaba mis manos por mi cuello, la nuca y seguía hacia arriba, acariciando mi cabello, alzándolo en ese movimiento, hasta que mis manos llegaban a lo más alto, mientras que mi amiga me tenía agarrada de la cintura pegando su cuerpo al mío, en momentos ella bajaba más sus manos de lo que es permitido, me acariciaba las nalgas, pero solo era por unos cuantos segundos y regresaba a mi cintura. Bajaba mis manos abrazándola por el cuello me acercaba a ella mirándola a los ojos, ella sonrió sabiendo lo que aria e hizo lo mismo, se acercó más a mí, incline la cabeza a la derecha; nos acercamos más hasta que nuestros labios hicieron contacto. Fue un beso de un par de segundos, sentí en mis labios la humedad de los suyos, nos separamos más rápido de lo que nos acercamos, la mire a los ojos sonriendo, ella me miró de forma traviesa, de esas miradas que solo las niñas malas tienen, así es que nos besamos de nuevo; ahora fue un beso largo, con ligeras pausas, primero empezamos solo con el contacto de nuestros labios, como si estuviéramos midiendo algo, después empezamos a usar la lengua, unos roces al principio, mordidas con y al terminar empujamos nuestras lenguas, ya después el beso se fue intensificando, yo mordía su labio inferior lo jalaba con los diente, y después metía mi lengua en su boca. Durante el beso que duro lo de una canción, no dejábamos de movernos, al principio solo éramos ella y yo, pero supongo que los hombres que estaban a nuestro alrededor se dieron cuenta porque a media canción sentía como nuestro espacio se hacía más pequeño y podía sentir algunas manos en mi culo, primero fueron solo unos roces, después me apretaban una nalga, supongo que a Andrea le hacían lo mismo ya que lo sentía en la forma en que empujaba sus caderas. Unas manos acariciaban mis piernas y otra mi culo, una más me tomo de las caderas y me quería jalar lo que hizo que termináramos con nuestro beso, ella entendió mis movimientos y durante el baile nos movimos de donde estábamos, lo suficiente para evitar que la situación se descontrolara. Seguimos bailando un par de canciones más hasta que Andrea me dijo que fuéramos con Mia así es que comenzamos a caminar hacia la barra. Al salir de la pista de baile no faltaron las manos traviesas, como Andrea iba frente a mí pude ver dos veces como le apretaron el culo, a mí solo me lo hicieron una vez.
Como la barra del bar está en la parte más alta del antro, desde ahí podíamos ver todo; estábamos buscando a Mia para reunirnos con ella, cuando un chico se me acercó.
-Hola guapa ¿Qué hace un antro como este en una chica como tú? –De primera no entendí lo que dijo pero después se me hizo chistosa su línea, seguro ya muy usada.
-Hola, estamos buscando a una amiga.
-Mientras aparece, ¿Te puedo invitar un tequila? -¿Qué no conocen otra cosa?
-Ahora no, primero queremos encontrar a nuestra amiga –Le di un repaso de pies a cabeza rapidísimo y muy discreto, era un chico lindo, de unos casi 30 años o menos. Tomándolo de el botón de la camisa que estaba más cerca de su pantalón le dije- pero ya que estemos con ella, con mucho gusto te acepto ese tequila –Tome la mano de mi amiga y la jale para que comenzara a caminar- adiós guapo!!! –Le grite al chico.
Bajamos del are del bar y nos dirigimos a las mesas del área VIP durante el camino mi amiga me jalo de la mano, volteo y es que un par de chicos la detuvieron, le dijeron algo al oído, ella se rio y les dio la mano y después un beso en la mejilla, supongo que se estaban presentando, después ella me jalo más para que me reuniera a ellos.
-Ella es mi amiga Dolores, ellos son Tomas y Miguel
Yo lo salude con beso en la mejilla, me dijeron lo guapa que estaba y que nos quedáramos con ellos para pasarla en grande, ella les dijo algo que no llegue a escuchar, después me dio un empujo y seguimos caminando. Ya en el área VIP estaba un poco más despejado, pero más oscuro, para tener más intimidad, ahí pasamos por todas las mesas, y al llegar al final no la encontrábamos, decidimos dar otro repaso al área, y unas mesas más adelante la encontramos con un chico, ella estaba colgada de su brazo, y el bien macho estaba bien acomodado en el sillón de media luna con un vaso de no sé qué en la otra mano. Jessica se sentó del lado del chico, y yo del lado de mi amiga.
-Me dejaron sola –nos dijo alzando la vos para que la escucháramos por encima de música
-Pero no estuviste mucho tiempo sola –Le digo al bombón que tiene a su lado- no pierdes el tiempo
-Jajajaja… él se llama… ¿Cómo te llamas?
-Ricardo
-Ella es Dolores y ella es Jessica
El chico me saludo dándome un beso peligrosamente cerca de mis labios e hizo lo mismo con Jessica, al hacerlo con ella aprovecho la oportunidad de que mi amiga se estiro para saludarlo y paso su otra mano por sus hombros atrayéndola hacia él y no soltarla, Andrea se rio mucho por esto pero no hizo nada para impedirlo. Y ahí estaba él, todo un macho alfa con tres hembras rodeándolo.
-Que buen beso se dieron –dijo Ricardo- me la pusieron bien dura.
-Jajajaja… estuvo bueno.
-Repitanlo
-¿Cómo crees? Jajaja ¿Quieres espectáculo?
-Claro o ¿no me harán ese favor como regalo de navidad?
-Solo uno ¿ok?
-Que sean tres
-Uno y no seas aprovechado.
-ok.
-Ok pero con tu amiga.
Jalo a Mia y a Jessica al mismo tiempo y ellas un poco al principio se resistieron pero después riendo por la travesura que estaban haciendo se dieron un beso rápido frente al chico.
-heyy… pero uno bien puesto, con lengua y todo.
Las volvió a unir poniendo más fuerza en sus brazos, yo solo estaba riéndome por todo eso, y así ellas se fundieron en un beso largo y cachondo, tanto que me puso húmeda al instante.
-Muy bien, es lo más sexy que un hombre pueda ver. Ahora tú y ella nos dijo a Mia y a mí.
Ya estábamos a punto de darnos e beso cuando llego otro chico.
-Heeyy te tardaste un poco jajajaja. Mira, te presento a mis novias –nosotras nos reímos.
El chico que llego se llama Alfredo, pero eso de chico es un decir porque calcule que tendría mucho más de 30 años tal vez 40 ya que su cuerpo, la forma de hablar y denotaban a alguien maduro que Ricardo.
-Pero para que no estés solo te presto a mi novia Doli.
Él se sentó y lo primero que hizo fue pasar su mano por encima de mi hombro, ya marcando que yo era para él. Empezamos a platicar los dos llegado el momento él estaba prácticamente encima de mí, empezamos a hablar al oído para no alzar la voz y que a la mañana siguiente nos doliera la garganta. En momentos nuestros labios se acercaban peligrosamente y ya él tomando la iniciativa comenzó a besarme, al inicio del beso yo lo hacía algo insegura por el hecho de que no lo conocía, ya después me comenzó a gustar la forma en que metía su lengua que yo comencé a sentirme en confianza rápidamente, esto es lo que me gustan de los hombres de verdad, hacen que te sientas segura de lo que estás haciendo rápidamente. Mi cabeza estaba ya recargada en su brazo sobre el sillón de media luna, y su otra mano la tenía sobre mi cintura bajando lentamente rumbo a mis piernas. Yo lo tenía tomado de la nuca atrayéndolo hacia mí para hacer más intenso el beso, le acariciaba el cabello mientras abría mi boca para que el pudiera meter más su lengua. No sé cuánto tiempo estuvimos así, hasta que el, a regañadientes se separó de mí y volteo a ver a su amigo.
-¿Qué quieres wey? –Le dijo algo molesto.
-Voy a la pista a bailar con ella. –dijo refiriéndose a Jessica.
-Y yo voy a buscar a Rebeca, ya ha de estar buscándonos tu quédate divirtiéndote.
-OK –fue lo único que dijo y siguió besándome.
Ya estando solos, y sabiendo que era algo difícil que nos vieran porque el área VIP está más oscura que todo lo demás él sin preguntar paso su mano directo a bajo de mi falda y comenzó a acariciarme mi pierna izquierda yo la tenía cruzada sobre la otra pierna lo que le permitió que la sintiera por encima y abajo. Sus manos eran suaves, pero fuertes, llegaba hasta mi rodilla y subía hasta donde le permitía llegar el sillón mis besos se hicieron más intensos ya que la forma en que me estaba acariciando era de lo más placentero; subió por mis caderas, cintura hasta llegar a mis senos, apretó mi seno izquierdo, yo ronronee como gatita ante su caricia, él separaba todos sus dedos lo más que podía para más de mis seno, lo jale de la nuca para besarlo más fuerte; Al principio su caricia era un masaje ligero, pero después me apretaba mi seno casi hasta hacerme sentir un poco de dolor a lo cual yo le respondía con unos gemidos que se ahogaban en su boca.
Después de sentirse satisfecho de acariciar mi seno, bajo su mano hasta llegar a mi pierna que la tenía cruzada sobre mi pierna derecha, me la acaricio todo un par de veces y después se detuvo en mi rodilla. Hizo algo de fuerza para que yo separara mis piernas, y como supe que es lo que quería hacer, yo sola las separe lo suficiente para darle espacio a su mano que hiciera lo que quisiera. Metía su mano directamente hasta mi vagina, sus dedos chocaron con algo de fuerza con mi braguita blanca y ahí fue cuando solté un fuerte gemido por la sorpresa y lo rico que sentí.
-Estas empapada putita. –Yo no dije nada porque no podía hacerlo, sus caricias solo me hacían gemir y gemir- te voy a coger puta.
Deje de besarlo por la intensidad de lo que estaba sintiendo, mi cuerpo se tensó por un momento, mi cabeza se hizo hacia atrás lo que el aprovecho para comerme mi cuello, desesperada por mas, busque su boca sedienta de su lengua, él me recibió de forma dominante, sus dedos estaban buscando un hueco entre mis braguitas y mis piernas para poder acariciar mi vagina, yo abrí las piernas un poco más, lo suficiente para que ya pudiera meter sus dedos. Los sentí ya húmedos de mis propios jugos, uno de sus dedos, fue directamente a mi interior. Por la posición en la que estábamos solo podía meterme medio dedo, pero fue suficiente para que yo sintiera el cielo. Mis piernas se pusieron rigidas al instante, los dedos de mis pies se arquearon dentro de las zapatillas, su dedo daba cirulos rosando las paredes de mi vagina.
-Haaaaa haaaaa… haaaaaaaaa… haaa haaaa papi que rico… -le decía cuando podía hacerlo.
-Vamos puta, te voy a meter la verga. –Me dijo al mismo tiempo que me jalava para que me pusiera de pie.
Tomada de la mano de él yo lo seguía, pasamos a un lado de la pista donde pude ver a Jessica bailando con Ricardo, ella tenía tomada de las nalgas y ella estaba colgada de su cuello bailando y riendo. Pasamos frente a los baños donde pude ver a Mia y Rebeca. Jale fuerte la mano de Alfredo el voltio a ver lo que yo quería, le señale a mis amigas dándole a entender que quiera hablar con ellas, el con la cara de molestia por eso me llevo con ellas.
-¿A dónde vas? –me dice Rebeca
-Tu ¿A dónde crees? Voy a rezar la biblia jajajajaj… ¿y tu que tal la mamada?
-muy buena, ¿Quieres probar? –y sin darme oportunidad me tomo de atrás de la cabeza y me beso fuertemente metiéndome su lengua en la boca. Unos segundos después, pude percibir el sabor a verga madura en su lengua- ¿Esta buena verdad?
-Si jajajaja…
-No te pierdas tanto, vamos a estar en la mesa de hace rato –me dijo Mia. En ese momento sentí un jalon de parte de Alfredo que ya quería salir de ahí.
-Por favor dime que tienes condones
-No manches Dolores, ¿no traes?
-Estaba en casa de mis abuelos, no llevaría condones a su casa.
-¿Cuántos quieres?
Voltee a darle un repaso a Alfredo y después respondí –Dame dos por si las dudas.
Ya Alfredo me estaba casi arrastrando para llevarme a coger, Mia buscaba rápido en su bolso y casi corrió estirando la mano para darme los dos condones. Alfredo me llevó por el pasillo que lleva al estacionamiento, lo sé porque muchas veces he pasado por ahí, al salir, el señor encargado del estacionamiento preguntó cuál era el nuestro, Alfredo le dio un billete de $200 y le dijo “tu no sabes nada”
Llegamos hasta su auto el cual es un VMW blanco, abrió los seguros con el control a distancia y al llegar abrió la puerta de atrás, sostuvo la puerta y prácticamente me aventó hacia dentro. Ya estando sentada en los asientos de piel del auto, él entró detrás de mí, se estiró por el medio de los haciendo de adelante y presionó algo en el tablero e inmediatamente los dos asientos comenzaron a hacerse hacia adelante dejándonos mucho espacio para nosotros. Él se abalanzó hacia mí, metiendo directamente sus manos por debajo de mi blusa directos a mí ceno derecho, mi mano izquierda se quedó acariciando su pecho y la otra mano directo a sentir su paquete.
Acariciaba su verga por encima del pantalón, la sentía bastante grande, y larga, siempre he tenido suerte para las vergas, siempre me tocan las gordas y largas; aunque no sé si decir que es buena o mala suerte porque como soy de hoyitos pequeños y apretados siempre me duele cuando me cogen, aunque es un dolor rico, así es que yo creo que es buena suerte.
Baje mi otra mano para desabrochar el cinturón, después el botón de sus jeans y bajar el cierre. Metí mi mano derecha y sentí sus vellos recortados, pude sentir el calor de ahí abajo, después sentí la dureza de su verga, mi mano recorrió toda su longitud hasta llegar a su punta. Pase mis dedos por toda su hombría, trate de cerrar mis dedos en torno a ella pero por lo gorda y lo apretado de ese espacio no pude hacerlo, aun así la tome con los dedos y comencé a sacarla. Él alzo las caderas un poco para que su ropa no estuviera tan tensa y saliera más fácilmente; al salir, nuevamente intente cerrar mis dedos en torno a ella pero no pude por lo gorda que la tenía, lo masturbe moviendo la mano de arriba y después a bajo. La sentía hervir en mi mano, dura como el acero. Mi macho en turno me pellizcaba mis pezones causándome dolor, pero lo resistía porque ese es mi trabajo como hembra frente a un macho, dejarlo hacer su voluntad.
Después con se separó de mí, con su mano derecha que la tenía detrás de mi cabeza me fue guiando sin decir palabras hacia su verga, saco su otra mano de debajo de mi blusa, dentro de mí di gracias de que lo hiciera porque mis pezones ya no aguantaban ese trato; abriendo mi boca, baje mi cabeza guiada por su mano, directamente a su verga, yo la sostuve en el ángulo perfecto para que me entrara en la boca, unos centímetros antes de llegar pude sentir su calor, mis labios fueron los primeros que lo tocaron, después mi lengua acarició la punta de su cabeza, sentí como sus piernas se tensaron y escuche un “eso es puta” comenzó a entrar lento, muy lento en mi boca, sentía como su verga se deslizaba hacia mi garganta guiada por mi lengua que le servía de camino, sentía su calor, mi boca sacaba más saliva a medida que entraba más su verga en mi boca, sentí la punta chocar con la entrada de mi garganta lo que hizo que diera una arcada, el tomo mi nuca con fuerza para evitar que la sacara, y con la otra mano en mi cabeza comenzó a empujar para que entrara más, y más; mis ojos se humedecieron a medida que entraba su verga, mi quijada me dolía por el esfuerzo de abrir mi boca lo más que se podía, y mi garganta me ardía, pero al final, pude metérmela toda.
Esta es una de las cosas que me más me gustan hacer en la vida. me gusta estar con una buena verga en la boca mientras mi macho en turno me guia con sus manos en la cabeza para disfrutar mas de mi, y yo feliz de ser la causante de sus gemidos guturales. Su verga entra y sale de mi boca de forma pausada, así es como el le gusta porque con sus manos mueve mi cabeza marcando el ritmo de la mamada; cada vez que su verga va saliendo la voy acariciando con mi lengua, el me la deja con la punta entre los labios, y después empuja mi cabeza hacia abajo para que vuelva a entrar. Cada vez la mamada es más rapida.
-Eso es puta, que rica lengua, tan joven y ya eres una experta mamadora.
Yo me sentí orgullosa de sus palabras, y se lo hice saber con un gemido cuando su verga iba saliendo.
-Ya es hora, ya quiero sentir tu vagina -yo estaba tan agusto ahí mamandosela que no hice nada por obedecer -vamos putita -me jalo del cabello para sacarla.
Cuando me enderece pase mis dedos por la comisura de mis labios para recoger el poco liquido pre seminal que se escurrio y después chupar mis dedos.
-¿Te gusta mamar verdad?
-Si jijijiji
-Vamos zorrita, portate bien y quítate las bragas.
Yo lo obedecí de inmediato, me quite mis braguitas saque uno de los condones que me dio Andrea.
-No, no, yo no uso esas chingaderas.
-¿No quieres cogerme? -No dejo que cualquiera me coja sin condon.
-Claro que si, para eso estás aquí.
-Pues pontelo.
-Ok, pero ponmelo tu, y con la boca.
Le sonreí y rompiendo la envoltura y sacando el globito me lo puse entre los labios, me agache y se lo puse en la punta de la verga, fui comiendome su verga estirando el condón por su longitud, hasta que se lo puse correctamente.
Lo mire a los ojos mientras pasaba mi pierna derecha por encima de las suyas, no deje de mirarlo con una sonrisa en la boca mientras tomaba su verga con mi mano derecha mientras que con la izquierda me apoyaba de su hombro, no dejaba de mirarlo a los ojos mientras acomodaba su verga entre mis labios vaginales y mi cuerpo temblaba por la excitación. no dejaba de mirarlo a los ojos mientras mi cuerpo temblaba y soltaba un gemido mientras su verga iba entrando poco a poco. No deje de bajar hasta que sentí sus huevos en mi culo.
-HAAAAaaaaa… que…. rico.. ricooo…
-PUTA MADRE!!! estas muy estrecha.
-HAAAaaaaa uffff se siente bien esto.
Esto es lo que más me gusta en la vida. ser cogida por un macho y saber que está contento con mi cuerpo. Me toma de las nalgas, y me alza, su verga recorre toda mi vagina hacia afuera dejando la punta entre los labios de mi vagina, y despues deja de cargarme con sus manos para que mi peso haga que me la meta otra vez.
-Estas muy buena putaaaa
-Para que disfrutes papi.
De repente me da una fuerte nalgada. -¡Mueve el culo puta!- Doy un grito por la sorpresa de la nalgada y como la niña obediente que soy comienzo a mover el culo sin sacarme su verga, comienzo moviendome de adelante hacia atrás, restregando mi clítoris lo que me hace gemir más fuerte, lo tomo por la nuca y lo abrazo fuerte, el aprovecha para desabrochar unos botones de mi blusa y chupar mis senos, lo hace como un bebe alimentandose, lo que provoca que mi excitacion crezca más y más, muevo mi culo en círculos, él me aprieta las nalgas y me muerde mis senos, yo suelto gemidos a cada acción de su boca y de su verga.
-Que rico te mueves.
-¿Te gusta?
-Si puta, si, lo haces muy rico.
Cada vez mis movimientos los hacía más rápidos, ahora los combinada con subidas y bajadas; constantemente me daba de nalgadas, y me comia mas desesperadamente mis senos, yo me sostenía de sus hombros y de su cabeza
-Papi, la tienes enorme!!!
-Muevete mas puta ya casi me corro
-Si, si así mas mas maaasss!!!!!! -mi cuerpo se tensó en un intenso orgasmo que me hizo ver las estrellas, mi cuerpo se tenso mi vagina lo apretó más lo que provocó que el soltara un gemido mas fuerte
-Putaaa!!! hija de puta!!! que ricooo…
-HHHHHAAAA!!!!! -Soltaba un fuerte gemido cerrando los ojos y abriendo la boca lo mas que podia.
-Puta correte en mi vergaa!! siii asiii asiiiii
Después de correrme, el me tomo fuerte de las nalgas y me alzó lo suficiente para tener espacio para mover sus caderas de arriba hacia abajo, lo hacía brutalmente rápido, yo aun no me recuperaba de mi orgasmo, comencé a gritar desesperadamente sin importarme si alguien nos escuchaba.
-HAAA HAA HAA HAAA HAA HAAA
-Ahora me toca a mi puta, apriétame la verga
Obedecí al instante, apreté su verga con mi vagina lo más que puede, el soltó un grito de macho a punto de correrse.
-HIJA DE PUTAAAAAA!!!!!!!!! -Sentí como su verga y todo su cuerpo comenzaban a temblar debajo de mi, inmediatamente despues senti como su semen salía con fuerza de su verga chocando con el condon, pude contar no menos de 5 disparos.
Nos quedamos pegados esperando que nuestras respiraciones se tranquilizaran, mi pezon derecho estaba en medio de sus labios, mientras que yo le acariciaba la cabeza con cariño. Involuntariamente mi vagina apretaba y aflojaba su verga.
-Quiero cogerte otra vez, hay un motel cerca de aquí
-Pero ya tengo que regresar con mis amigas, les prometi que no me desaparecia mucho tiempo.
-No me importa.
-Pero a mi si, y si eres bueno, tal vez nos volvamos a ver.
-¿Segura?
-Claro.
me saqué su verga mientras me acomodaba en el asiento de piel, cuando me iba a ponenr las bragas tomo mi cabeza y la guió a su verga.
-Pero aun no terminas, dejamela limpia. -Le quite el condon y abrí mi boca y me la metí. Chupe y chupe sintiendo el semen que se le quedo pegado, lo reunía con mi lengua y me lo comía, le quedó un poco en los huevos así es que tambien pase mi lengua por ahí, cuando vi que ya estaba bien limpio, le di un beso cariñoso en la punta y se lo guarde, subí el cierre, abroche le acomode al camisa, abroche su pantalon y despues el cinturón. Lo mire con una sonrisa traviesa.
-¿Nos vamos?
-Vamos.
Me puse las bragas y salimos del auto, sentí algo de frío, así es que me di prisa para entrar al antro. Fuimos directamente al área VIP donde estaba Jessica y Andrea con Ricardo. Andrea estaba besando a Ricardo mientras él tenía una de sus manos en la pierna de Jessica, y ella se entretenía sobandole el paquete de Ricardo.
-¿Te la estas pasando bien? -Le pregunto Alfredo a Ricardo.
-Claro que si, y ¿tu que tal?
-Coje estupendo la niña
-Si se ve
-¿Que tal ellas?
-No me quejo -diciendo esto las abraza más fuerte.
-Se tardaron mucho -me dice Andrea y noto que está ya algo tomada- ya hiba a ir a ayudarte jajajaja.
-Jajajajaja
-Cuando quieras hermosa, tengo para las dos
-De verdad?
-A las pruebas me remito. -tomo la mano de Andrea y la llevó a su entrepierna demostrando que ya estaba listo para otro ataque.
-HHHuuy que rico
Alfredo abrazo a mi amiga que ya no soltó su verga, Ricardo comenzó a besarse con Jessica y yo tenía sed, así es que me fui a la barra haciéndole señales a Andrea de lo que iba a hacer. pase por un lado de la pista de baile. Llegue a la barra y pedí un vaso de agua mineral, cuando el barman me lo dio ya estaba sacando el dinero para pagar cuando un chico guapo se me adelanto.
-Yo invito preciosa
-Gracias
-¿Quieres algo mas fuerte?
-Casi no tomo alcohol
-Si que eres hermosa.
-¿De verdad? Gracias.
-¿Con quien estas?
-Con unas amigas
-¿Novio?
-Jajajajaja.. obvio noooo!!! no me gusta estar amarrada a un novio, no me gustan eso de los celos.
-Eres de las mias.
-¿Si?
-Por supuesto, a mi tampoco me gustan las complicaciones. Eres de las mías, de hecho combinas conmigo.
-Jajajajaja…
-Claro, te lo mostrare.
Me tomo del brazo y sin esperar que dijera que si me llevo hacia el área de los baños, ahí hay un gran espejo, me abrazo por la espalda repegandome su paquete.
-Vez combinas conmigo y combinas más -y me dio vuelta bruscamente y me planto un beso.
Yo me resisti y lo separe de mi, lo vi con cara de enojo y el me beso a la fuerza, yo me resistía y el me tomaba con una mano de mi culo y la otra en mi nuca, sentí que uno de sus dedos quería meterlo por atras, mi falda se empezó a alzar y yo tome con las dos manos mi falda para que no se me viera más de lo debido. Y así me tenía bien agarrada, sin mucho que pudiera yo hacer, poco a poco comencé a aceptar su beso, hasta que ya dejaba que me metiera la lengua en la boca dejo de besarme sin soltarme.
-Besas rico
-Te gusto
-Sipi.
Y me beso otra vez, ahora era yo quien metía la lengua en su boca, disfrutaba el sabor de su saliva con el sabor del tequila, podía sentir como comenzaba a mojarme, me gusta mucho cuando un macho es así de dominante, tomando cuando el quiere.
-¿Alguna vez has cojido en estos baños?
Yo me le quedé viendo sorprendida por su propuesta, nunca lo había hecho y la verdad se me hacía peligroso porque alguien podía vernos -o no quieres esto- me tomo la mano y la llevo a su paquete, yo la apreté, la tenia dura.
-Llévame.
Fue lo único que dije. caminamos al área de los baños, en un momento pensé que me llevaría al de las niñas, pero no, me llevo directamente al de los hombres, entramos, y casi chocó de frente con uno que iba saliendo, sorprendido se hizo a un lado para que pudiéramos pasar. Ya dentro, había tres chicos en los urinales. Me llevo directo a un cubículo tocó en el primero que estaba ocupado, los chicos que estaban en los orinales se dieron cuenta de mi presencia, me miraron y sonrieron, él chico me llevó al otro cubículo que estaba desocupado y dándome una nalgada me hizo entrar, cuando él entró detrás de mí, cerró la puerta y puso el seguro, me beso con brusquedad y de la misma forma me dio vuelta y me dio una nalgada diciendome “pon las manos en la pared y para el culo puta” lo dijo de una manera tan dominante que no pude decir que no, puse las manos en la pared y paré lo más que puede mi culito.
escuche como se desabrochaba el pantalón sacaba su verga, sacaba un paquete de condones y se lo ponía, con las dos manos alzo mi falda hasta dejarla como cinturón,me bajo mis braguitas y me acaricio mis nalguitas “que buen culo tienes puta” me decía. me separo mas las piernas con uno de sus pies, y fue cuando sentí la punta de su verga entre los labios de mi vagina, me tomo con las dos manos de mis caderas y al mismo tiempo que empujaba me jalo hacia el. Me la metió toda de un solo golpe.
-HAAAAA!!!! -Solté un gemido largo y profundo. Los que estaba en el baño escucharon mi gemido, rieron y aplaudieron, mientras le decían a mi macho. “eso es hombre revientala” “Dale fuerte a la puta esa” “con ganas” “Luego me la prestas” y más cosas. Yo tapé mi boca con mi mano izquierda para que no se me salieran mas gemidos, en una de esas me la metio tan fuerte que casi pierdo el equilibrio de mi mano que tenía en la pared, así es que use las dos manos para sostenerme y cerraba lo más fuerte que podía la boca para no gemir. En ese momento ya estaba arrepentida de meterme en ese lugar, el me dio una nalgada que los de afuera vitorearon y de repente me la metio tan fuerte que no aguante y solté un gemido; los de afuera aplaudieron y comenzaron a gritar en coro “Duro, duro, duro, duro”
La verdad en ese momento ya estaba sintiendo bien rico, el chico comenzo a cojerme mas pausadamente pero igual de fuerte, mi cuerpo comenzó a reaccionar al orgasmo que me venia, mis piernas no me aguantaba, y de repente solté un gemido largo y profundo disfrutando de mi propio orgasmo, los de afuera aplaudían, organizaban porras, y mi macho en turno se movia mas rapido hasta que comenzó a temblar y correrse con su verga dentro de mi. Los de afuera aplaudieron y felicitandolo como si fuera un matador.
Se salio de mi, yo me enderece acomodandome mis braguitas y el vestido.
-Estubo bien rico -le dije al oído -ya estas listo
-Claro
Salimos juntos del cubículo, y me di cuenta que todo el baño estaba lleno de gente, algunos gritaron “me toca a mi” otros preguntaban “que tal esta” rumbo a la salida de los baños me dieron 4 nalgadas. Y a estando afuera, seguí caminando y cuando me giré para verlo, el ya no estaba, me quede parada buscandolo, pero ya no lo encontre, y seguí caminando rumbo a la zona VIP.
De verdad, no vuelvo a coger en los baños.
Cuando llegue a nuestra mesa estaba Ricardo sentado en el centro del sillón de media luna, enfrente de él, parada, entre sus piernas estaba Jessica, bailando, con las piernas juntas, las manos en la nuca moviéndose hacia arriba, mostrando su cuerpo al macho que tiene enfrente. Cuando llegaban sus manos hasta arriba de su cuerpo regresaba acariciando todas sus curvas hasta llegar a sus caderas y de regreso. Ricardo me vio llegar, me senté junto a él.
-¿Dondé está Andrea y Mia? -me acerque a hablarle al oído para que me escuchara bien, lo que él aprovechó para pasar su brazo izquierdo y acercarme a él.
-Mia se fue con Alfredo, y Andrea fue al baño, pero de eso ya hace rato, me imagino que encontró diversión.
-¿Como el que tienes tu ahora? -Refiriéndose a mi amiga teibolera.
-Jajajaja… Espero que si, porque la noche está llegando a su fin.
-¿Que hora es?
-las 3:40 a.m.
-Uuuuuuyyyy si, ya casi termina.
-Pero lo bueno es que llegaste, no puedo terminar a casa sin hablar con la más hermosa de todas.
-¿Yo? jiji ¿De verdad?
-Claro, tienes una carita de niña buena que solo provoca que piense cosas malas.
-Jajajajaja.. ¿Como crees?
-Claro!!!. y no hablemos de tu cuerpo, estás de infarto; a pesar de que ya me coji a Andrea y aun estoy duro con tan solo verte caminar.
-¿Tu y Andrea?
-Claro, es muy buena con la boca.
-Jajajajaa…
-Ese trasero que tienes es una delicia, Párate y muevelo como tu amiga.
-Jajajaja.. no tuvieras tanta suerte.
-Si la tengo, y la prueba son ustedes, Vamos obedece.
-Si Loli, ven, quiero bailar contigo -Me dice Jessica tomando mis manos y jalandolas para que me pare.
En un momento me resistí, pero ante las súplicas de mi amiga y la voz autoritaria de Ricardo, decidí levantarme y bailar con ella. Al levantarme del sillón Ricardo me dio una fuerte nalgada diciendome “Mueve bien ese culito que me voy a comer” nos paramos casi en medio de las piernas del macho de Ricardo, no había mucho espacio por la mesa de centro que teníamos enfrente, lo que hacía que nuestros cuerpos se pegaran. Comenzamos a bailar, nuestros senos se apretaban, yo tenía las manos en las caderas de mi amiga mientras ella las subía por su cabeza, después yo hacía lo mismo. Volteamos a ver a Ricardo que no perdía detalle de nuestros cuerpos; yo movia mas el culo para calentarlo por lo que dijo cuando me levante. Cuando volteo a ver a Jessica, ella me sorprende con un beso profundo. sentía su lengua jugar con la mía, sus labios mordiendo los míos y cuando me di cuenta comencé a luchar contra su lengua usando la mía.
De repente sentí un par de manos extrañas en mis caderas e inmediatamente sentí el cuerpo de una mujer restregarse en mi espalda, era Mía que se había unido a la fiesta, así es que pase mi mano izquierda para tomarla por la cintura mientras que mi otra mano estaba en la cintura de Jessica. En ocasiones daba media vuelta para quedar de frente a Mía, y así poder bailar con ella y de vez en cuando besarla.
-Ya me aburri ¿y si nos vamos? -era Andrea que estaba colgada de Ricardo que tenía un brazo por sus hombros de ella, ni siquiera me di cuenta cuando llegó.
-¿En donde estabas? -Le pregunté.
-Divirtiendome como tu.
-Si ya vamonos -Dijo Jessica.
-Sí -Dijo Mia.
-¿A donde me llevaran? -Dijo Ricardo
-Nadie dijo nada de llevarte, nos vamos nosotras a mi casa.
-Las acompaño.
Se levantó lo que hizo que nosotras tres nos separarámos, él tomó mi mano y me jalo rumbo a la puerta, yo mire a mis amigas y las mire con cara de ¿Este que se cree? ella se encogieron de hombros, se rieron y siguieron caminando.
Ya rumbo al estacionamiento le pregunté.
-¿Y Alfredo?
-Después de que regresara de cojerse a Andrea lo mande a hacer unos encargos.
-Oyee!!! más fuerte por favor. -dijo Andrea dándole un manotazo en el hombro y quejándose de lo poco discreto que fue, pero la verdad es que solo era una queja banal ya que estábamos solos en el estacionamiento.
-¿Lo mandaste?
-Claro, es mi gato.
-Woowww.. jajaja… pero no puedes acompañarnos a mi casa.
-¿Porque no? solo mira como lo hago.
-Jajajajaja… sera otro día.
El inmediatamente me pidió mi numero de celular, lo le pedí el suyo, lo ingrese a mi celular y le mande un mensaje diciendo «Espero poder estar a solas contigo muy pronto» Nos despedimos y no lo vi más hasta dos semanas después.
Al pasar dos semanas de esa noche, yo estaba en la calle cuando me lo encontré por casualidad. Después de platicar cosas sin sentido ni importantes, yo estaba súper entusiasmada con él, ya que es de esos chicos grandes y musculosos, teníamos una plática candente, sobre cómo es que le hacia el sexo a una mujer, no me pregunten cómo es que llegamos a ese tema, lo importante es que platicábamos a gusto… muy a gusto.
El me dijo que si quiera, podía llevarme a casa, así que yo acepte encantada.
Me llevaba en un coche último modelo VMW o algo así no recuerdo bien, durante el trayecto el hacia los cambios de velocidad y en una ocasión puso su mano en mi pierna, yo dibuje una sonrisa en mi boca, no dije nada y deje su mano ahi, así pasamos varias calles mientras él me acariciaba desde la rodilla hasta tocar mi vagina, la acariciaba suave y a veces la apretaba, yo ya estaba húmeda con esos toqueteos, de pronto me dijo que si quería ir a su casa, yo le pregunte que si sus papas no estarían ahí, él con la sonrisa de un macho alfa me contesto que no me preocupara
Así llegamos a su casa, al entrar me planto un tremendo beso!! sentía sus labios mordiendo los míos, después su lengua se introdujo en mi boca y mi lengua fue en busca de la suya, el me tenía agarrada por la cintura, apretándome fuertemente, yo podía sentir a plenitud sus músculos, sus manos comenzaron a bajar hasta llegar a mi culito, una de sus manos acariciaba la parte donde se separan mis nalgas, desde arriba hasta abajo, y la otra me apretaba una nalga, después la que acariciaba mi nalga, paso para enfrente y me acariciaba mi vagina, eso sí, por encima de los jeans. Yo me aferraba a su cuello acariciando su cabellera, cuando sentí su mano en mi vagina, di un pequeño respingo y un ligero gemido ahogado por la lengua de él, mi primer orgasmo de la tarde.
Me apreté mas a él, sintiendo sus caricias, el ascensor comenzó a detenerse y tuvimos que separarnos, cuando se abrió el ascensor, caminamos por un pasillo, el abrió la puerta de su casa, me dejo entrar primero, cuando pase a su lado, me dio una nalgada que me hizo saltar de sorpresa y me reí como niña traviesa.
Su casa es de lo más lujoso que he visto (y mira que conozco de lujos), pero no los voy a aburrir describiéndolo todo, cuando entramos me dijo que me sentara en el sofá, me ofreció un tequila pero le dije que no tomo alcohol y después me ofreció jugo eso si lo acepte, después que me lo tome todo.
-¿quieres una novia?
-asi es nena.
Sé acerco a mí y lo tome de la cabeza y comencé a besarlo, me abraso y me empezó ha acariciar un seno, mis gemidos ahogados no se hicieron esperar, me comencé a mover por la excitación, metió su mano por debajo de mi playera y me la alzo para acariciar con mayor facilidad mi seno, me pellizcaba el pezón por lo que se puso súper duro su mano muy grande casi podía cubrirlo por completo.
Unos minutos después empezó a bajar su mano acariciando mi cuerpo por debajo de mi playera negra, hasta llegar al botón de mis jeans azul marino, lo desabrocho sin dejar de besarme, como yo sabía lo que pretendía, solo abrí un poco las piernas, el metió inmediatamente su mano dentro de mis braguitas.
-esta muy húmeda.
-aha.
Lo abrase más fuerte y mis besos se hicieron más intensos; podía sentir como su dedo medio me tocaba el clítoris, haciendo movimientos circulares, hizo que comenzara a salir la puta que llevo dentro, me hizo gemir, pero gemidos ahogados porque su lengua estaba muy dentro de mi boca, mi cuerpo comenzó a moverse como puta en automático por las sensaciones que sentía en mi clítoris,
Su dedo empezó a bajar, lentamente hasta que encontró mi orificio vaginal, su dedo entro lentamente, pero sin dificultad por la buena lubricación que tenía en ese momento, podía sentir como su dedo entraba rozando las paredes de mi vagina, hasta que lo tuve todo dentro, yo me separe de su boca para poder gemir a gusto y sin problemas.
Con la otra mano que tenía libre, tomo mi playera de color azul oscuro y comenzó a alzármela, yo alce mis manos para ayudarle a quitármela, una vez que aventara la playera al suelo se abalanzo a mis senos, primero los besaba, los succionaba como bebe, mi placer iba en aumento en cada momento que pasaba.
Su dedo, me presionaba la pared posterior de mi vagina tocando mi punto G, después lo movía en círculos, yo presionaba mas su cabeza contra mis senos y mis gemidos eran fuertes.
-Estas muy apretada mamita, tu vagina aprieta mi dedo muy rico, quiero probar como aprieta mi verga.
Yo entendí inmediatamente lo que él quería, me saco el dedo de mi vagina, y se levanto; yo solo me quite el calzado que tenia y me quite los jeans con todo y braguitas, el comenzó a desnudarse, y pude ver impresionada el cuerpo que tenía.
Aunque ya era un hombre mayor, tenía un cuerpo muy bien conservado, no con músculos, pero si bien conservado; cuando se bajo los pantalones y se los quito para quedar completamente desnudo, pude ver su verga; no muy gruesa pero si algo larga, curva y venosa; cuando él me miro cuando me estaba poniendo de perrita en el sofá con la cara hacia donde estaba el, se emociono al verme desnuda tomando mi cabeza metió su verga dentro de mi boca.
-Pero que rica estas, ooo siii, que bien se siente tu boca, ooo siii..
Cuando sentí la punta de su verga entrando en mi boca, estaba caliente, su textura suave, pero firme, podía sentir en el paladar y mi lengua las palpitaciones de su verga, yo la apreté con mi boca, moviendo mi lengua dentro para saborear ese sabor entre salado y acido, el movía su cuerpo y mi cabeza para dar un mete y saque, su verga cada vez entraba más adentro.
Así estuvimos un rato, a veces me la sacaba y pasaba la punta de su verga por mis labios hinchados de tanto mamar, yo sacaba mi lengua para pasársela desde sus huevos hasta la punta de su rica verga. Cuando me la metía, ya entraba casi hasta el fondo, podía sentir la punta de su mástil tocando la entrada de mi garganta algo que me producía arcadas, pero él entendía y no me la metía más, pero aun así quedaba fuera una buena cantidad de carne.
-Si que rico se siente, ya verás que después te entrara toda, la sentirás hasta media garganta. Ya quiero metértela.
Yo me di vuelta en el sofá quedando de perrita, pero esta vez con mi culo ofreciéndoselo a sus antojos, incline mi cabeza hasta que la acomode en un cojín, volteándolo a ver; el tomo su mástil con una mano y la otra me tomo de las caderas.
-Y por cierto ¿Qué edad tienes?
Al decirle mi edad, se sorprendió, y una sonrisa de felicidad se dibujo e incredulidad en su cara.
-No me estarás engañando, porque te vez mas grandecita, no tanto pero si mas grande.
Me estaba acariciando la entrada de mi vagina con su mástil, yo me mordí el labio inferior con un ligero gemido por la rica sensación que me producía.
-No te estoy mintiendo,
Y diciendo eso, me la comenzó a enterrar, despacio, pero sin detenerse, el gimió de placer, yo hice lo mismo pero también al mismo tiempo cerrando los ojos y abriendo la boca.
Solo pudo entrar la cabeza de su mástil, y se detuvo, le costaba entrar más adentro.
-Aaaaa que apretada estas, hasta pareces virgen, pero nada de eso, porque bien que te gusta, que rica está tu conchita putita –empujo más su verga dentro de mi—esta calientita, apretada, que bien se siente.
Podía sentir como se resbalaba dentro de mí, su mete y saque, era lento al principio, después comenzó a ser más rápido y más rápido, hasta convertirse en una cogida brutal. Mi cabeza se incrustaba en donde se acomodan los brazos en el sofá, yo solo mantenía los ojos cerrados y gimiendo como la putita que soy.
Después de varios minutos así, me la saco, me tomo de la cintura y me dio vuelta quedando yo, acostada en el sofá, con las piernas abiertas. Él se acostó encima de mi apuntando su verga a mi vagina penetrándome inmediatamente. Su mete y saque hacia que mi cuerpo se moviera a ese ritmo, yo lo abrase por el cuello, y en ocasiones lo besaba apasionadamente, pero eso sí, sin dejar de gemir, cuando me cogía más fuerte, lo único que podía hacer era gemir peor en su oído, dándole un fuerte abraso.
El tenía un brazo por debajo de mi espalda y el otro en mi culo acariciándomelo, hasta que uno de sus dedos, se poso en mi agujerito anal, lo acariciaba, hasta que comenzó a presionarlo para metérmelo. Su cogida comenzó a ser más fuerte; su dedo entro en mi culito solamente la mitad, entre gemidos solo podía decirle “si papi, que rica verga, que rica verga tienes” el solo me decía lo que le encantaba que mi vagina estuviera apretada, que era una buena puta para mi muy corta edad.
Empecé a sentir que mi orgasmo se acercaba, mi cuerpo se comenzó a tensar, mis piernas lo abrasaron por la cintura apretándolo hacia mí, nuestra respiración comenzó a ser más rápida y dificultosa; sus embestidas comenzaron a ser más fuertes y el orgasmo de los dos llego al mismo tiempo, podía sentir como mi vagina bañaba de jugos la verga de él y sentía plenamente como su palo vaciaba toda esa rica leche caliente que tanto me gusta dentro de mi vagina, hasta dejarla llena.
Nos quedamos así unos minutos, el dentro de mí, sentía el sudor de los dos, y la respiración comenzó a ser normal.
Después de descansar un momento me vestí, él se quedo desnudo, mirándome, ya que tenía toda la ropa puesta, parada en frente de él, empecé a despedirme, mientras lo hacía, él me acariciaba mi vagina y mi culito por encima de los jeans, me despedí dándole un beso y cuando me di media vuela el me dio una nalgada yo di un brinco de felicidad…
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