Mi prima Veronica de 9 añitos, mi hermoso angel – Parte 4
CAPITULO IV..
Relato rescatado de la red.
Mi primer amor “Verónica”
Ya habían transcurrido una semana desde aquella vez que tuve sexo con prima Verónica, en ese entonces pensaba que todo iba a ir a la perfección después de aquel día, pero un día lunes, estando en el colegio en filas para ingresar a los cursos se nos indico que debido a problemas de carácter administrativo cosa que no entendí nada, se había dispuesto el cambio de horario de todo nivel secundario a la tarde, no podía creer lo que escuchaba, para mí eso significaba que ya no podría encontrarme con mi prima vero a solas casi nunca y los fines de semana paraban en su casa y mi cuarto mi madre, mi hermano, mi tía Carla en su casa, mi tío y su hijo Daniel, ¡adiós a los días de intimidad que tenía planeado con mi prima!, mmm… que mal salió todo, en ese entonces mi tía Marcía se mudo junto con sus hijos Grecia y Coco a una cuadra de la casa de mi tía Carla, ya que desde ese día Coco y Grecia paraban más seguido en casa de vero, y yo sin poder estar a solas con mi primita desde hace 2 meses ya que para ese momento era junio, estaba totalmente decepcionado de mi mala suerte.
Era sábado 28 de junio, el cumpleaños de mi prima Verónica, ella se había estirado y desarrollado más, pero no tenía idea hasta que punto, además era casi verano hacia bastante calor, motivo por el cual compraron una torta helada, ese día se encontraban todos mis primos y primas reunidos esperando a la cumpleañera, por la tarde después de volver del mercado con su madre, ya que fueron a comprarse ropa no se imaginan la sorpresa que me lleve al verla entrar, su cuerpo había cambiado vertiginosamente para sus 11 añitos, llevaba puesta una solerita blanca, y un corto apretado de color celeste que dejaba que su ropa interior se marque fácilmente, además resaltaba su figura estrepitosamente, su cuerpo de niña se estaba convirtiendo en el de una adolescente, eso se notaba fácilmente porque ya que tenia forma de una pera, es decir que su cintura se hizo más pequeña y su colita era más enorme resaltando a simple vista, sus piernas que decir, tenía ventaja sobre niñas de su edad, estaba realmente bella y atractiva, no podía creer que esta era la niña que vi por primera vez hace dos años y medio, ese cambio drástico me dejo boquiabierto, para que mentir su cara también le ayudaba ya que parecía el de una niña angelical e inocente, en ese instante me di cuenta que a sus 13 o 15 años se convertiría en mujer hermosa con sus pechos ya desarrollados, lo que me gusto también es que ocupaba sandalias que combinaban muy bien con su ropita de verano y sus uñas de sus pies y manitos estaban pintados de color celeste, en ese momento desesperado corrí a darle un abrazo cariñoso y un beso en la mejilla a la mujer de mis sueños por su cumpleaños. A partir de ese día rara vez podía encontrarme con mi prima verito, pero a pesar de eso ella cambio su conducta fría hacia mi muy tarde, debido a que ya no teníamos nada de intimidad, a veces cuando hablábamos se ponía más atenta conmigo y cariñosa, me abrazaba de mi cintura preguntándome que hacía en el colegió, o si ya tenía novia en tono burlón, yo a modo de juego le decía ya verás y comenzaba a abrazarla por la espalda rozando mi pene por encima de su colita, lo más extraño fue que parecía que cuando no la veía mucho tiempo ella me extrañaba, un día sábado mientras mi primo Dani y mi hermano jugaban videos juegos en mi cuarto, yo estaba en casa de mi tía Carla quien hablaba con mi madre en la cocina, en ese rato apareció mi prima vero quien me dijo que entremos a su cuarto a ver tele hasta mientras, al entrar me recosté sobre la cama, ese día mi prima llevaba una malla blanca y una licra de color anaranjado que resaltaba su figura, ella se echo a mi lado y me abrazo de la cintura, yo también la abrece y le preguntaba que tal su semana, mientras le daba un besito en su ojo derecho, ella me dijo bien sonriendo, se agarro de mi cuello y puso su pierna derecha encima de mi cintura, yo estaba feliz y con mucho cariño acerque mi boca a sus labios y comencé a besarla, ella respondía con la delicadeza de una niña, deslice mis manos por su cintura hasta llegar su colita donde empecé a darle suaves caricias con mi mano, se levanto y me pregunto si quería comer flan con ella, mientras yo buscaba algo que ver, si claro le dije siendo lo único que hice ese día. También un día viernes por la tarde salí 20 minutos antes de colegio, mi prima verónica se encontraba en su casa con su amiga angélica en la sala, su mama salió un rato, angélica estaba sentada en la silla peinando su muñeca y detrás ella estaba mi prima apoyada en el espaldar de la silla indicándole se debía hacer, como se encontraba medio agacha su colita resaltaba, entonces yo aproveche para darle un abrazo de sorpresa por su espalda agarrándome con fuerza de su cintura como si quisiera penetrarla ese rato, ella reacciono y me dijo te voy a matar, mientras la tenía aprisionada con mis brazos, en ese rato angélica le dijo que parecíamos novios, ella se puso roja, se veía súper tierna y le respondió no como crees él es mi primo, yo me reía nomas. Como se darán cuenta nuestra relación se hizo más cálida, mutuamente nos dábamos mucho afecto, mi tía me decía que vero me quería harto, y yo le respondía que ella era mi prima favorita, así cierto día domingo casi a las una de la tarde, me encontraba solo en mi cuarto viendo televisión después de almorzar, verónica entro a mi cuarto y me pregunto qué hacía, yo le dije que estaba viendo una película, se acerco y detrás de sus manos tenia ensalada de frutas, me dijo que la acabe enseguida porque tenía que llevar la copa a su casa, le indique que no podría acabar rápido, entonces riéndose me amenazo o te la comes o te obligo, yo me reí y le conteste oblígame, agarro la cucharilla y empezó a llenarme la boca con el postre, mientras me daba de comer, miraba su cuerpito, tenía una polerita verde con un dibujo de mini, y una falda de tela corta que tan solo llegaba a la mitad de sus muslos, era un niña tierna con el cuerpo de una mujer en crecimiento, no sé cómo pero se vestía combinando su inocencia junto con su bello cuerpo, de callado acerque mi mano a su carita y empecé a tocarla con mucha delicadeza, ella solo se reía, ese rato me anime a quitarle el postre de sus manos y ponerlo sobre la mesa, la tome de la cintura y la senté sobre mis muslos, y comencé a besarla tiernamente, ella simplemente se dejaba llevar por mí, ella se abrazo de mi cuello y yo respondí a su abrazo, podía sentir como mi boca rozaba con sus tiernos labios cada vez que le besaba; lentamente la recosté en la cama y me subí encima de ella, y continué besándola, con mi mano agarré su pierna derecha y la eleve un poco, como para que se deslice su falda hacia abajo por sí sola, y comencé a acariciar su muslo mientras descendía con cuidado hacia su vagina, sus calzoncitos ya no eran como los que ocupa una niña, sino que eran más apretados, con dificultad metí mi dedo pulgar y empecé a darle suaves masajes a su vagina, ella abrió sus piernas un poco para facilitarme que la acariciara, pero ella se levanto rápidamente en ese momento indicándome que su mamá la había enviado en realidad para que le preste tazas porque tenía invitados, me dijo que tal vez que se enojaría con ella por tardar mucho, así que la ayude a buscar las tazas, luego se acomodo un poco su falda y se fue, y al cerrar la puerta me dijo ¡te echaré la culpa si se enoja! sonriendo. Al poco tiempo note que algo cambiaba dentro de mí cada vez que veía a mi prima Verónica, pero en ese momento no lo entendía ya que solo sentía confusión o era demasiado inmaduro, un día miércoles me escape del colegio, porque ese día era el festival escolar y para mí era una pérdida de tiempo, ya que no se pasaba clases ni se hacía nada importante, cuando regrese el padre mi prima Verónica estaba borracho con uno amigos en la sala cantando con el karaoke, entre y me dijo que hacía un joven como yo sin novia, que debería estar paseando por ella calle como él cuando era joven; creo que ya tienen un idea de cómo era de borracho todo lo contrario al gruñón de todos los días, entonces me dijo que al menos saque a pasear a su hija que ya es una señorita y que yo la cuidará, pero le indique que no tenía dinero, en instante abrió su billetera y me dio 200 pesos, que para mí era muchísimo, mi tía Carla me dijo que aproveche ya que yo y mi prima nunca salíamos pero que volviéramos antes de las 10 de la noche, para que mentir siempre parábamos encerrados como tortugas, bueno le dije, así que fui a cambiarme a mi cuarto y retorne a su casa, cuando llegue mi prima vero ya estaba lista, su cabello había crecido casi hasta la mitad de su espalda, su madre la peino como si fuera una mujer mayor, su ropa que le había comprado, era algo que nunca me había imaginado, no estaba vestida como una niña, sino como una hermosa joven, tenía puesta una minifalda de cuerpo entero que hacia resaltar su figura, sus piernas eran muy hermosas, su cintura era delgada, su colita me dejaba ciego de la emoción, en ese instante me dio un pequeño puñetazo en mi estomago y me pregunto qué cosa miras, simplemente le sonreí, y le dije saldremos de una vez; entonces entendí porque chicos de 13 y 14 años la acompañaban del colegio o le invitaban a salir, y no era por su carita sino más que todo solo pensaban en su cuerpo, lo bueno era que mi tío era estricto y la sobreprotegía, así que simplemente no tenían oportunidad de salir con ella, al llegar a la ciudad lo primero que pidió fue que tomáramos primero unos helados ya que hacía bastante calor, ella me llevo a un lugar caro donde seguro venía con su otra tía, gaste 50 pesos como si nada, pero lo importante es que ella estaba sonriendo, luego fuimos a un parque donde me llevo al columpio para que la empujara, después quería dar la vuelta al parque en una especia de trenes que había ahí, estaba un poco confundido, llegue a pensar que era una niña aún, pero cuando la veía de espaldas, era el hermoso cuerpo de una mujer muy bien delineado, que combinación más rara de inocencia, picardía y belleza son el tipo de cosas que te vuelven loco, ya eran casi las 16:40 (5 pm) de tarde estaba cansado por la calor, me senté a lado de un árbol y ella me dijo que siguiéramos por fa, le dije que ya no podía caminar, me tomo de la mano me dio un beso inocente en la mejilla y me levanto, al poco rato la abrece de su pequeña cintura con mucho cariño para decirle que me cargue, ella se rió y me dijo que la aplastaría, ya eran las 7 de la noche, mire mí billetera donde solo había un preservativo y un lubricante que me regalo mi amigo, cosas que posiblemente nunca iba a ocupar, revise bien en el fondo y solo me quedaban 110 pesos ella los vio y me dijo vamos al cine a ver una película, literalmente el dinero se fue volando las entradas costaban 35 pesos cada una y un pequeño pack de palomitas mas su refresco cerca de 37 pesos, en ese momento paso por mi mente que si fuéramos novios de verdad ya me habría dejado hace mucho porque me resultaba bastante caro estar con ella, no sentamos a ver Yorch de la selva ya que era de estreno esas veces, y en la oscuridad aproveche para abrazarle mientras ella apoyaba su cabeza en mi hombro y puse mi mano sobre una de sus piernas para acariciarla, me gustaba sonreír junto con ella, en ese entonces no me percate de que estaba empezando a enamorarme de ella, después de la peli.. como no quedo mucho dinero nos fuimos en bus, pero ella estaba feliz, esa tarde no abre hecho nada morboso pero para mí valió la pena estar con alguien tan hermosa e inocente ese día, esa noche llegamos casi a las 10 pm, mi tía y madre nos dijeron que acompañarían a mi tío un hotel donde celebrarían su ascenso dentro de la empresa donde trabajaba, que la cena estaba en el horno y que solo era para los dos, me indico que regresarían a mucho tardar a las una de la mañana, cuando fui a cambiarme estaban en mi cuarto mi hermano y primo Daniel jugando video juegos, no habiendo espacio para mi, ni vero y como solo son dos mandos ni modo que hacer, regrese a su casa y ella ya había calentado y servido la cena por lo que no tuvo tiempo de cambiarse, ya eran casi las once de la noche le dije que viéramos si estaba dando alguna película en la tele después de cenar, pero casi en la mayoría había deportes y resumen de noticias, los dos nos recostamos de lado en parte media de la cama, ella dándome la espalda a mí, a eso de las once y media comenzaba el cine de adultos, bueno en ese tiempo no sabía que daban películas para mayores de edad partir de esa hora debido a que yo me dormía a mucho tardar a las 10 de la noche, era la primera vez que mi prima Verónica veía ese tipo de películas, era una de Antonio Banderas no recuerdo el nombre de la “peli..” pero supuestamente acosaba a hermosa mujer rubia y hermosa que desconfiaba de él porque no sabía su identidad, a veces el fingía que sin querer se encontraban en las tiendas y ese tipo de cosas, la cuestión es que la final la lleva en su moto a un parque a pasear y luego a su departamento, donde la desviste y hacen el amor en todo tipo de posiciones, la verdad es que me estaba excitando viendo esa película, yo creo que también mi prima por que los dos la mirábamos sin hacer ningún comentario, me acerque a ella y la abrece de la cintura muy despacio, lentamente pasaba mis manos por sus piernas ya que ella seguía con su mini, la puse de espaldas y me subí encima de ella mientras le acariciaba sus nalgas y besaba su espalda, mi vero seguía concentrada en la película, yo de callado me pare tome el control de sus manos apague el televisor y la luz, le quite sus sandalias, y comencé a besar muy despacio sus piernas, sus nalguitas por encima de su mini, y luego su espalda, me baje mi pantalón y mi calzoncillo, después le subí su minifalda casi hasta la mitad de su espalda, pude ver que su ropa interior era algo como una semitanga de color azul con rayas blancas como las que ocupan las adolescentes, le quedaba muy bien para su edad, comencé a darle pequeñas mordidas en su nalga, luego fui bajando su calzoncito con mi manos casi hasta sus rodillas, y con mis dedos de mis pies se los quite por completo, acomode mi pene en medio de su colita la tome de la cintura y empecé a moverme de atrás hacia delante muy despacio, tanto tiempo sin tener sexo con ella hizo que mis impulsos sexuales estén a mil por hora, hace mucho tiempo que no lo hacíamos de esta manera, por lo que lo hacía con calma en lo posible evitando hacer ruido para escuchar la puerta ya que no tenía seguro puesto, sentía como mi pene se deslizaba a través a de sus nalgas cada vez que intentaba metérsela, en ese momento con mi mano la abrece de la cintura y con la otra la tome de su pequeña manito, podía sentir el aroma caliente de su cuerpo, acomode me pene en su anito y presione con fuerza, escuche un pequeño quejido, luego me dijo más despacio, era la primera vez se quejaba, pero me gusto escucharla hablar ya que ella también lo disfrutaba, así que le hice caso y me movía más despacio sentía como mi pene lubricaba su anito, y poco a poco presionaba con más fuerza, podía escuchar como inhalaba con fuerza cada vez que mi pene luchaba por entrar en su cuerpo, baje mis manos a su cintura para acariciarla, mientras besaba su cuerpo recordaba todas las veces que veía su colita en el parque, nunca pensé que acabaría así, montándomela por la noche, después de eso me acerque a su cara mientras la tenía de espaldas para poder besarla, entonces me anime a subirle su minifalda hasta el pecho la quería desnudar por completo, en ese instante ella intento levantarse para resistirse, pero la abrace con fuerza y deje caer mi peso sobre su espalda para recostarla de nuevo, y con mis muslos le abrí sus piernas y empuje mi pene hacia arriba y se volvió a agarrar con su manitos del cubrecama, luego baje mis manos y las puse encima de sus nalgas e intentaba separarlas cada vez que presionaba con mi pene intentando introducírsela, me gustaba sentir su culito desnudo en medio de mi pene, con mis manos me levante hacia arriba, como para que todo mi peso cayera en mi cintura presionando mi pene con mucha más fuerza contra su cuerpo, vi como se agarraba con fuerza del cubrecama cada vez que sentía mi pene viscoso entrar, fui aumentando el ritmo rápidamente haciendo mucha presión con mi pene de atrás hacia adelante porque estaba lubricada deslizándose fácilmente, deje caer de nuevo mi peso sobre su cuerpo la agarre de su cintura y seguía culeandomela de abajo hacia arriba, mientras le decía que ella era muy hermosa, al final presione mi pene con todas mis fuerzas y eyacule en su colita, me quede un rato abrazándola, podía sentir como mi semen salía muy despacio y cubría el medio de su culito, en ese momento se dio la vuelta, me abrazo y me acaricio la cara con su pequeña mano, se acomodo su mini y se levanto, agarro su semitanga prendió la luz y me dijo que se ducharía para cambiarse de ropa, en ese instante recordé que había varios chicos que la molestaban que seguro darían lo que sea por estar en mi lugar, salió vestida con una polerita blanca y un buzo rozado lo que mi hizo recordar que su lado infantil era lo más lindo que tenía, vino a mi lado y se recostó sobre mi brazo, se cubrió con una sabana y se durmió, al poco rato Daniel entro y me dijo que vaya a descansar nomás a mi cuarto, por que habían terminado de jugar.
Para ese entonces mi tío compro el terreno de al lado de casa para construir unos cuantos cuartos de momento, mi prima me pidió que fuéramos a ver como estaba la construcción, ella llevaba un corto negro bien apretado y una solerita verde, eran tres cuartos ya tenían techo tan solo faltaba poner cemento en el piso y acomodar puertas y ventanas, de broma le pregunte que hacía con sus fans que la perseguían, ella me contesto que ningún chico la molestaba, yo sonriendo le dije seguro deben especiarte en educación física para verte, como serás me decía, además tu eres el único que me ha visto sin ropa, no sabía qué hacer ante esa respuesta, pero con una sonrisa la abrace y luego la cargue, ella se abrazo de mi cuello y me la lleva a la parte de atrás de los cuartos donde nadie nos vería, y la senté en la orilla de la ventana, me abrazo mi cintura con sus piernas y comencé a besarla apasionadamente y muy despacio mientras acariciaba sus piernas y su colita con mis manos estuvimos así un buen rato hasta que me dijo que es mejor que vayamos antes que nos busquen, pensé que parecíamos enamorados y no primos con este tipo de relación.
Como se habrán dado cuenta, nuestra relación iba como se dice “de viento en popa”, ya que a veces cuando no tenía clases iba a su colegio para recogerla, sus amigas le decían en broma que su enamorado la estaba esperando en la puerta, ella se acercaba sonriendo para que vea y escuchen lo que decían por mi culpa, yo le respondía que solo venía a acompañarla por ahí me la querían robar, ella jugando me contestaba ¡te mato cuando lleguemos a casa!, un día sábado cuando ella estaba sola en la cocina lavando los platos me acerque para abrazarla por la espalda, ese día tenía el cabello suelto, una malla rosada y su licra anaranjada, le di un beso en la nuca, y me acerque a su cuello ya que me gustaba sentir su olor dulce de niña tierna, le pregunte si quería que la ayude, ella me contesto que ya acababa, entonces le di la vuelta para que quede frente mi y comencé a darle pequeño besos en su boca, ella me contesto abrazándome del cuello, comencé a acariciar su cintura y con calma le baje su licra con su calzoncito hasta la mitad de sus piernas, me agache un poco ya que no era muy alta y empecé darle masajes con mi pene a su vagina de abajo hacia arriba, la verdad es que estaba arrecho, llevábamos buen tiempo en abstinencia ya que dificultosamente podíamos estar solos, me había olvidado lo bien que sentía mi pene rozando su suave vagina caliente, ella me dijo que me detenga por favor, por hay nos pillaban, simplemente le hice caso, ya que tenía mucha razón, con cariño le acomode su ropa y le dije que cuando acabe se venga a ver tele, apenas termine voy contigo me contesto, en ese momento tocaron la puerta, era su amiga Angélica de 9 añitos, así que se quedo en la sala con ella, al poco rato mientras jugaban le escuche preguntándole a vero que cosa hacía conmigo la semana anterior en la noche porque dice que vino casi a las 11:30 para preguntarle si le ayudaba con su tarea porque no podía acabar para el día siguiente, ambas vivían frente a frente (vecinas), luego le dijo que cuando miro por la ventana, la luz estaba apagada y vio que yo estaba encima de ella y movía como si fuera perrito, vero rápidamente le indico que solo jugábamos y que después eso yo le daba masajes porque le dolía la espalda, según yo, no sé si lo abra creído, pero dejo de preguntarle, y me quede más tranquilo, angélica no se dio cuenta que yo estaba en el otro cuarto viendo televisión. La verdad las forma en la pasaban los días sentía que era demasiado rápido y lo peor es que no podíamos estar a solas en ningún momento, y pensé que no era tan afortunado como creía.
A finales de julio, mi tía Carla y mi madre nos indicaron que se casaría su hermana menor Mariela (para mí tía Mariela) se casaría, creo que la fecha era 30 de julio, pero caía sábado por lo que deberíamos ir bien trajeados, cuando me acorde del hombre con quien se casaba mi tía recordé que se dedicaba a plantar soya (soyero) pero en grandes hectáreas con maquinaría pesada, sino recuerdo mal vivía a 2 Km de un pueblo llamado pailas, su casa era una hacienda enorme lleno de plantas de mandarina, pomelo, naranja era una casa muy bonita y espaciosa para pasar un fin de semana, la verdad estaba ansioso de poder ir, ya que al día siguiente (domingo) podríamos salir a pasear. A veces durante la semana me podía encontrar con ella en la noche un momento a solas cuando salía Daniel con mi hermano a jugar futbol y su mama se encontraba afuera charlando con la vecina, generalmente solía encontrarla haciendo sus tareas en el sofá ya que era consciente, y me acomodaba detrás de ella la abrazaba de su cintura y preguntaba si podía ayudarla, ella me indicaba que no era difícil que no me preocupe, cuando me apoyaba en su hombro podía sentir su olor que emanaba de recién bañadita era muy dulce, le besaba su hombro y su cabecita con cariño, mientras le tomaba su mano, en ese momento ella se agarraba de mi pierna con fuerza y se daba la vuelta para decirme ¡oye que haces! Con su pequeña sonrisa picara, le daba un beso en su mejilla y le dejaba que termine su tarea para que no se le haga tarde y si no tenía nada que hacer la sentaba en mis muslos preguntándole como le había en sus clases, ella se dedicaba a contarme un montón de cosas mientras yo le acariciaba sus piernas, me gustaba ver su pequeña sonrisa inocente.
De esa manera el fin de semana llego rápidamente era Viernes teníamos que alistarnos, preparar nuestros trajes para la boda, el regalo, una pequeña maleta para cambiarnos la ropa el domingo, cepillo y esas pequeñas cosas que son necesarias. Por la noche mi madre, mi hermano y yo fuimos los primeros en irnos, ya que mi tía Carla no dijo que llegaría en lo posible temprano por la mañana debido a que ella tenía que ir con su marido, cuando llegamos al pueblo era casi las once nos quedamos en un pequeño alojamiento, al día siguiente (sábado) mi Carla llego a las 10 am, almorzamos en un restaurante junto con ellos, luego fuimos al local donde se celebraría la boda, ayudamos un poco a acomodar las sillas con Dani, Vero y mi hermano, luego me pidieron que ayude a meter un refrigerador al fondo del local para que este bien escondido, ya ese era el regalo para mi tía Mariela, a eso de las cinco nos fuimos al alojamiento para cambiarnos, mi tía Carla también se alojo en el mismo lugar, nosotros nos fuimos primero a la Iglesia, ya que vero y Daniel no estaban todavía listos, como de costumbre fuimos los primeros en llegar y en la bendita Iglesia no había nadie, estuvimos esperando hasta las seis de la tarde (18:00 pm), para ese momento llegaban los invitados, al poco rato llego mi tía Carla junto con su esposo e hijos, cuando miré a mi prima Verónica estaba realmente hermosa, llevaba un vestido blanco de tirantes con pliegues de un tono rosado claro con pequeños adornos brillantes pero no tan exagerados, una pequeña manilla de flores en su mano derecha, unos tacones medios para adolescentes los que tienen como tirantes para amarrarse por encima de su rodilla, estaba un poco maquillada, su lápiz labial era de color rojo muy suave con brillo, sus uñas de sus manos y pies estaban pintadas de rojo claro, que hacían buena combinación, sus aretes eran una piedritas de color lila, su perfume era muy suave y agradable como frutilla o fresa como para alguien de su edad, su vestido era muy hermoso y ceñido (ajustado) , llegaba hasta la mitad de sus muslos dejando ver sus hermosas piernas blancas y cuidadas, la tela de su vestido era algo parecido a seda porque cuando tomaba asiento o agachaba se ajustada a la forma de su cuerpo, dejándote ver su hermosa cintura, colita y piernas delineadas, al entrar a la iglesia me senté a su lado, para verla más de cerca, en ese tiempo su cabello ya era bastante largo, casi cerca a su cintura, su peinado era rizado y se notaba que estaba con crema porque siempre parecía húmedo y brilloso, hubiera deseado tener una cámara personal para sacarle fotos en aquella época, (en ese tiempo no habían celulares con cámara y lo celulares eran esos que parecen ladrillos), después de eso nos fuimos al local donde los recién casados bailaban como marido y mujer de manera oficial, dentro de la pista de baile, al poco rato yo disimuladamente me salí afuera por nunca me agrado mucho el consumo de bebidas alcohólicas, ni las fiestas, me fui a un costado donde era un poco oscuro y me senté donde había un banquillo para que nadie me obligue a entrar, después de más de media hora mi prima Verónica se acerco y me pregunto si estaba enfermo, en sus manos tenía un vaso de coca cola y una pequeña charola papas fritas con queso, le respondí que estaba un poco aburrido, mientras hablábamos me invitaba un poco de papas y me indico que había chicas de mi edad para que me acerque a hablar con ellas, le conteste que ¡ninguna de ellas es más hermosa que tú!, Verónica se rio pensando que lo decía en broma, pero lastimosamente era cierto no había nada para ir a mirar dentro de la fiesta, también añadí que no sabía bailar, en ese instante me dijo ella tampoco y que intentáramos aprender aquí afuera para que nadie se ría adentro, la verdad ese lado inocente que tenía era tierno, me levante las tome de las manos y me puse a bailar, daba lástima era arrítmico, parecía un muñeco de cuerda, hasta ella se dio cuenta, y me dijo eres malísimo, ese rato le dije te voy a matar mientras la abrazaba, tome asiento de nuevo, ella de callada se sentó en una de mis piernas, puse mi mano sobre sus piernas acariciándola por encima de su vestido, y ese rato me jalo de mi mano y me dijo que la acompañe adentro, que estaba sola, que Daniel y mi hermano estaban jugando con otros primos, cuando entramos al rato sirvieron el plato frio de la noche, después se quedo conmigo intentado querer bailar, mis tíos se reían de los dos, yo solo me reía de las cosas estaba haciendo, mi vero se veía muy bella sonriendo, después de eso casi a las una de la mañana el esposo de tía Carla ya no podía sostenerse en pie, así que mi primo Daniel junto con su madre se lo llevaron al alojamiento, indicándole a Vero que se regrese conmigo, a eso de las 01:45 am mi madre me dijo que mi hermano estaba cansado y que regresaban al pequeño hotel descansar, en ese momento busque a Verónica para irnos, pero no la encontraba, así que le indique a mi madre que los alcanzaríamos mas rato, cuando la encontré estaba con dos chicas de su edad casi creo que jugando, ni modo que hacer espera a que se canse, a eso de las 02: 18 creo ella me dijo que ya quería dormir, para mi mala suerte nunca me fije el nombre del alojamiento y mi madre nos trajo en taxi a la iglesia, en ese instante busque a mi tía Mariela ya que seguía con su esposo, le conté lo sucedido, y su esposo le pidió a su padre que no llevará a la finca para que descasemos, me sentía aliviado porque no dormiría de pié bajo las estrellas, sino recuerdo mal la finca estaba lejos nomás a casi 20 minutos desde el pueblo, cuando llegamos le dije que si veía a mi madre o tía Carla que le diga dónde estamos para que no se preocupen, nos indico donde dormir, el baño y nos sirvió un poco de té con pan, era un hombre educado, estaba completamente sano sin ninguna gota de alcohol, pensé que alguien estaba en la casa, pero me indico que no había nadie en ese momento y que ellos llegarían tarde, así que mejor nos dijo que durmamos juntos para que Verónica no se asuste, porque era bastante oscuro en el campo, después de eso se retiro, la verdad era que su casa era tétrica y diseñada a la antigua, primero acompañe a Vero al baño y regresamos a la cocina para tomar té, mientras hablábamos de fantasmas y esas cosas, estuvimos así un buen rato hasta que ella se durmió en mi hombro, también yo quería dormir, pero cuando lo pensé mejor estábamos solos en esa casa, podíamos hacer lo que queríamos, la bese en su frente, la levante en mis brazos con calma y me dirigí al dormitorio , abrí la puerta, prendí la pequeña lámpara que estaba ahí, cerré con mis pies la puerta, me senté en la orilla de la cama y la puse sobre mis muslos, muy despacio comencé a besarle en su boca, mientras acariciaba sus piernas, mi pene se puso erecto al sentir el cuerpo de mi prima Verito, entonces la recosté en la orilla de la cama, y comencé a acariciar sus piernas, ella realmente era preciosa, sentía como la deseaba con todo mi ser, muy despacio le subía su vestido mientras besaba sus piernas, sus muslos eran muy suaves y deliciosos, cuando me acerca más arriba pude ver que su ropa interior era algo parecido a una tanga de color blanco y rosa con dibujo de flores, pero que estaba amarrado a lado de su cintura derecha como un bikini, simplemente con un tirón podía desamarrarlo y quitárselo, al ver eso, me excite más, acerque mi cara y le di besos suaves a su vagina por encima de su pequeño calzoncito, luego procedí a besar su cuello con cariño, subí mis manos a sus hombros, y comencé a deslizar los tirantes de su vestido hacia abajo con delicadeza, mientras besaba su cuerpo, hasta quitárselo por completo, solo la deje con su pequeña semitanga, cuando la mire bien era realmente preciosa para sus 11 añitos, no habrá tenido pechos, pero su bello cuerpo lo compensaba, ese rato me quite la camisa y mi pantalón, y los puso a lado de la lámpara, y volví a besar sus piernas, dándole pequeñas mordidas a sus muslos, acerque mi nariz y mi boca al lugar donde estaba su vagina, cuando comencé a olerla me desespere, quería más, así que simplemente jale del cordel y su ropa interior cedió, con mi mano izquierda se lo fui bajando hasta muslos, mientras besaba alrededor de su vagina, me levante un poco y le quite por completo su semitanga, la tenía desnuda para mí solo, todo la noche, así que me acerque a sus piernas e instintivamente comencé a lamer sus muslos y darle mordidas suaves como si se tratara de comida, mi vero al sentir eso cerro sus piernas, esa pequeña resistencia me excito un poco más, no sé en qué momento acabe con mi boca sobre su vagina desnuda, mi cuerpo lo hizo por si solo como si ya supiera que hacer, en un principio solo se lo bese, pero no era suficiente para mí todavía, así que utilice mi lengua, ella empezó a respirar más rápido, al rozar mi lengua sobre su vagina sentía un sabor y textura muy raro que me volvía loco, note que sus piernas se relajaron, abrí un poco sus piernas y me puse a lamer su muslo de su pierna izquierdo, y con mi mano derecha acariciaba sus piernas y de rato en rato deslizaba mis dedos por en medio de su vagina, la sensación era parecida a tener sed y no poder saciarla, me levante un poco y me acerque a su cara para besarla, ella tenía los ojos cerrados, luego apoye mi cuerpo encima del suyo, mientras acariciaba sus piernas, la verdad era que en ese momento para mí era como una mujer muy hermosa, su cabello acomodado, sus uñitas pintadas, mire a sus pies y tenía sus tacones todavía puestos, quería quitárselos pero estaba ansioso de continuar, así que se los deje. La hice recostar de costado, y yo me puse detrás de ella, la abracé de su cintura, y acomodé mi pene en medio de sus nalgas, mientras la besaba en su nuca, con cariño acariciaba sus piernas, luego levante su pierna derecha y la puse sobre mi muslo, como para abrirla un poco, luego acomode la punta de mi pene, en medio de sus labios vaginales, y me acerque a su boca (era un poco difícil no sé como lo hice ya que estaba de espaldas), y ella giro un poco su cuello para pudiera besarla, sus labios infantiles y tiernos eran muy lindos, su aliento era cálido, aún sentía un poco de su perfume infantil a fresas, me di cuenta que no solo era sexo, sino que realmente la quería como si fuera una mujer, así que lentamente comencé a balancearme de atrás hacia adelante intentando introducir mi pene en su vagina, y cada vez que mi pene tocaba su vagina, la besaba y le decía que la quería y que se veía hermosa en la fiesta, un rato estuve así, sentía como mi liquido seminal salía, cada vez que mi pene rozaba su vagina, me detuve y la acomode a lo largo de la cama, con cariño puse su cabeza encima de la cabecera, le di un beso en la boca y saque de mi billetera el condón y lubricante que tenía, recuerden que yo era un principiante en ese entonces, pero tenía una idea básica de cómo era la cosa, lo mejor que pude me acomode el condón y con mis dientes rompí el paquete del lubricante, y le abrí las piernas, y se las volvía a lamer lentamente tomándome mi tiempo, con mis dedos seguía acariciando su vagina, tome algo de lubricante y se lo untaba en su vagina y mis dedos, para metérselos con delicadeza, me acerque a su boca para besarla, mientras lubricaba su vagina con mis dedos, cuando ella sentía mis dedos abría un poco sus piernas, después de un rato me subí encima de ella, le abrí un poco mas sus piernas con mis muslos, y acomode mi pene encima de su vagina, poco a poco comencé a hacer presión, esa sensación le gustaba a ella, ya que se abrazo de mí y comenzó a besarme como dándome permiso para seguir, me agarre de sus piernas y empecé a moverme en vaivén, haciendo presión con mi cuerpo para que mi pene entre, ella en ese instante me empujo a un lado y se paro fuera de la cama como si supiera lo que venía, pero yo ya estaba como loco, la tome del brazo me acerque a ella la cargue con las piernas abiertas sobre mi pene, ella no dijo nada, solo se agarro de mi cuello, y la volví acomodar sobre la cama, la tome de su cintura y seguí empujando mi pene contra su vagina, ella se agarró con fuerza de la cabecera, mientras yo me movía en vaivén presionando la punta de mi pene con fuerza contra su vagina, ella respira más rápido, de un de repente una parte de mi pene se hundía, en ese momento ella me abrazo la cintura con su piernas apretándome con fuerza, ese instante la abrace y bese en su mejilla, sentía como si mi pene fuera aprisionado por algo cálido, deje de moverme porque ya no entraba más y no quería lastimarla, así que la besaba en su boca, poco a poco esa presión fue desapareciendo mientras ella empujaba mi pene contra su vagina, sentía como sus labios vaginales se ensanchaban poco a poco, mientras su vagina se iba acoplando a la forma y tamaño de pene, lo que me gustaba era que ella seguía presionando como para que entre todo, en ese momento parecía que ella y yo éramos uno solo y estaba completo, era la primera vez para mí y ella que teníamos un coito completo, al poco rato empecé moverme en vaivén y pude notar que más de la mitad de mi pene estaba dentro de ella y que fácilmente entraba y salía mi pene su vagina, en ese rato le dije la quería tanto, ella solo se agarro de mi cuello y me beso, hasta que empecé a moverme más rápido y con más fuerza, ya no podía controlarme, y eyacule dentro de ella podía sentir como mi semen salía, pero ya no quería separarme de ella, como estábamos cansados solo me dormí sobre mi prima vero abrazándola.
Al día siguiente desperté por que la luz del sol daba en mi cara, seguíamos desnudos en la misma posición en la que nos habíamos quedado me levante un poco y los bordes de su vagina estaban con semen, estaba tan cansado que me olvide quitarme el condón después de eyacular, saque un poco de clínex de mi saco y la limpie con mucho cuidado para que no despierte, aun tenía impregnado el olor a semen en su cuerpo, cuando me fije bien su vestido estaba botado en el piso y su semitanga a lado de la cabecera sus tacones debajo de una silla, no pude recordar en qué momento se los quite, y lo peor es que se podía ver a través de la ventana y que esta tampoco tenía cortinas o persianas para cerrar, temí que alguien no haya visto desnudos, pero me fije bien y no había nadie afuera en el patio, mi prima Verónica seguía cansada, así que le di un beso en su mejilla y la cubrí con las mantas, parecíamos dos amantes y no primos, que tenían que esconderse para no ser descubiertos, lo bueno era que el cuarto tenía baño propia recogí mi ropa y entre a ducharme limpiando mi pene con mucho cuidado, la verdad estaba rojo y me dolía un poco, tal vez era porque su vagina era estrecha o porque también era mi primera vez, (para ese entonces no sabía que si haces el amor con una mujer que nunca tuvo sexo, ni siquiera se masturbaba, cuando la penetras puedes causarle sangrado – romper su himen-, pero si ella ya tiene practica aunque nunca haya tenido penetración real, no sangrara porque su vagina se dilata o ensancha fácilmente lo que sucedió en el caso de mi prima Verónica), me cambié, salí de la ducha levante su vestido se lo puse a lado de su cabecera, la bese en su boca con cuidado y la abracé, luego le dije que se levante que era ya era un poco tarde, y que se duche mientras que estoy afuera, ella de callada me hizo caso sin rechistar, hasta mientras fui a buscar a alguien y me encontré con la madre del esposo de mi tía Mariela quien me dijo que le aviso por teléfono a mi madre que yo y Verónica estábamos en su casa, y que ellos llegarían dentro de media hora más, cuando mire el reloj eran las 10: 45 casi once, nos dijo que no nos preocupemos y desayunemos, al poco rato apareció Verónica bañadita y con la misma ropa de ayer, y saludo a la señora, mientras nos preparaba un poco leche, nos indico que había en la mesa pan, dulce y mantequilla, que nos sirvamos a gusto, en ese entonces no sabía que era evangélica, pero se notaba que era un buena persona, en instante en broma le dije a Verónica por que estas tan cansado que cosa hiciste ayer, ella me pellizco mi pierna sonriendo, parecía mi enamorada, estaba feliz ese día, cuando miramos la hacienda era enorme, y al fondo había algo así como un garaje pero de tamaño inmenso lleno de tractores, pero de esos monstruosamente enormes para cosechar soya en masa, al poco rato llegaron mi madre, tía Carla y Mariela junto con su esposo y mis primos, le dije que no regrese anoche la alojamiento porque no me acordaba donde era, mi tías me decían que era un volado y mi prima Verónica sonriendo dijo que era como para matarme, lo bueno era que estaban todos de buen humor y trajeron ropas para cambiarnos, vero se puso un pequeño short blanco muy corto ya que hacía calor, sandalias, un solerita celeste con su cabello amarrado a un lado, para mí siempre fue preciosa, salimos a caminar un rato, regresamos casi a las una de la tarde para almorzar, después nos preguntaron si no queríamos ir al pueblo junto con ellos a comprar carne y chorizo para hacer una parrillada, les dije que iba a esperarles nomas que estaba cansado, así me que fui al dormitorio, la cama estaba toda desarreglada así que la acomodé y me puse a descansar, pensando que estaría yo solo en la casa, al poco rato cuando estaba a punto de dormir, entro Verónica quién cerrando la puerta se recostó encima de brazo, me dijo que no fue porque tenía sueño, la abrace y la tome de la cintura, y comencé a besarla apasionadamente como si fuera mi enamorada, no sé de donde saque fuerzas pero la puse de espaldas y le baje su shortcito y su calzoncito, me quite el short por completo me puse sobre ella para montármela, Verónica no me dijo nada, la verdad es que ya estaba acostumbrada, con fuerza intente meterle mi pene, pero ella me dijo más despacio, ya no le hice caso, así que le abrí las piernas y con mis manos separe sus nalgas para que entre mi pene, ella me decía no así más lento, pero yo seguía embistiéndola rápido, mi pene entro pero solo la punta, cuando sentí su cuerpo caliente y pene en su anito, en ese momento ella se estremeció, así que la empecé a besarla cariñosamente, y lentamente comencé a moverme en vaivén, parecíamos los recién casados, la verdad a ella también le gustaba tener sexo conmigo aunque no lo decía se notaba, le saque su solerita y la deje desnuda sobre mi pene, su piel clara era hermosa, mientras la besaba me dijo que me quería y que la cuide, era la primera vez que me decía eso que a ella también le gustaba mucho, así que la abrece apasionadamente por su cintura acerque mi boca a sus pequeños labios y comencé a besarla con cuidado mientras metía mi lengua en su boca ella instintivamente movía su lengua alrededor de la mía , ella ya no se quejaba, solo me dejaba hacer lo que yo quisiera con su cuerpo, poco a poco presione mi pene con fuerza contra su colita cuando mire solo entro hasta la mitad pero para mí era suficiente, ella era solo me pertenecía a mí, abrí sus piernas y seguía presionando con más fuerza, ella estaba con la boca abierta respirando más rápido, en ese momento levante su cintura y puse la cabecera debajo para elevar más su colita, ella solo miraba lo que hacía con su cuerpo, le abrí de nuevo las piernas, agarré mi pene y lo acomode de nuevo sobre su anito, y la presionaba con más fuerza contra la cama, ella se sujetaba con fuerza del cubrecama, sentía como entraba poco a poco en medio de su colita, comencé a acariciar apasionadamente sus piernas y sus nalguitas, mientras besaba su cuello, sentí como ese aroma de niña se desprendía de su cuerpo, aun recuerdo con claridad ese olor a inocencia, en ese momento ella me apretó mi cintura con sus piernas como para que mi pene entre más rápido en su colita, ya no era como la primera vez, ella también me ayudaba para que le haga el amor como a ella gusta, su cuerpito estaba un poco húmedo por la calor, giro su cuello hacia mí y la bese de nuevo, mientras acomodaba su cabello hacía un lado para que no la incomode, con cariño me empecé a mover en vaivén de nuevo, me sujete con fuerza de su cintura y me moví más rápido y con más fuerza hasta que termine eyaculando dentro de ella, estuvimos abrazados un rato así en la misma posición mientras mi semen terminaba de salir, luego se cubrió con una sabana su cuerpo como si fuera una mujer, la abracé y le di un pequeño beso en su boca, y me dijo que ducharía un rato ya que le hacía calor, levanto su ropita y entro en la ducha, luego yo acomode la cama, me puse mi ropa, y me recosté de nuevo, aun podía sentir el olor de su impregnado en mi cuerpo, su dulce aroma de niña, salió del baño cambiadita, se recostó sobre mi brazo, la abrace y la puse encima mío con sus piernas abiertas, y comencé a besarla, con mi brazo izquierdo la tome de la cintura, y con mi otra mano acariciaba sus piernitas, la verdad a mí también me hacía calor, su cabellito mojado caía sobre mi hombro refrescándome un poco, su cuerpito estaba frio, se sentía tan bien sobre mi cuerpo, al poco rato nos dormimos.
A eso de las tres ella me despertó, diciéndome que ya habían llegado, estaba feliz por que traían bastante carne para hacer la parrillada, la tome de la mano y le dije “si claro vamos a ver”, ese fin de semana para mí fue el mejor, tuvo mi primer coito completo o penetración, y no solo por su vagina, sino que también por su hermosa colita aunque mi pene no entro por completo, estaba realmente satisfecho, pero muy satisfecho y feliz, ella me abrazaba de rato en rato sonriendo, en ese momento me di cuenta que estaba enamorada de esa enana hermosa, de piel clara, cabellito crespo largo, unas bellas piernas y colita, y su hermosa sonrisa inocente y dulce, y que la cosa fue al revés, yo había caído ante ella y no ella ante mí; al día siguiente nos levantamos muy temprano a eso de la 05:00 para alistamos y regresar a la ciudad ya que era lunes y teníamos clases, llegamos a la ciudad a eso de las siete de la mañana, me puse el uniforme y me fui directo al colegió recordando que había hecho en ese gran fin de semana.
Lamentablemente no pude rescatar el epílogo pero les dejo lo único que pude rescatar
CAPITULO 5 – EPILOGO.- “El final del sueño”
Después del matrimonio de mi tía Mariela todo iba de maravilla, ya estaba acabando octubre, durante esos tres meses solo nos encontrábamos de vez en cuando con mi prima Verónica, ya que yo tenía que esforzarme para recuperarme en algunas materias, además faltaba muy poco para los exámenes finales y tenía que estudiar con tiempo ya que no era un alumno brillante, así que de vez en cuando hablaba con mi prima Vero, ella siempre me decía que le estaba yendo bien a diferencia de mí, la verdad parecía que todo iba demasiado bien era como para no creerlo, a veces salía a la casa de un compañero para que me preste sus apuntes para poder aumentar las cosas que me faltaban. Un día miércoles cuando regresaba del colegió dirigiéndome a almorzar a casa de tía Carla, me la encontré llorando junto con verónica y mi madre a su lado, me contaron que mi primo coco había intentado violar a mi prima Vero, que cuando no estaba nadie en la tarde la obligaba a sentarse.
Delicioso, no cabde duda de que las primas son deliciosas! p.d. Me encantó el tela corta jajaja, sonó muy a albur.