Mi primera experiencia
Despues de ver a mi mamá siendo infiel no podria calmarme y terminaria aceptando las constantes invitaciones de un compañero a estudiar….
Hola de nuevo, esta vez voy a relatar lo que sucedió despues de ese dia tan particular dónde mí deseo sexual despertó, lo cual les conté en el relato anterior.
Habían pasado ya un par de días, yo comenzaba a dejar todo eso atrás y me estaba preparando para los exámenes de la secundaria, una vez mas Gilberto «el pitalla» había estado pidiéndome que por favor fuera a estudiar con él, me prometía que sería divertido y que además me recompensaria, la verdad a ese punto ya estaba cansada y decidí acceder, pensaba ademas que un repaso adicional me vendría bien. Acorde que iríamos al día siguiente por peticion de él, de nuevo estuvo muy insistente en que fuera precisamente mañana, justo el día en el que teniamos educación física.
Esa vez no volví a casa con mi amiga de siempre, si no que subí al auto de la mamá de Gilberto y nos fuimos, la señora era muy agradable, en cuanto a mi mamá, ni me preguntó demasiadas cosas, solo le dije que iría a casa de unos amigos a estudiar.
Al llegar pude notar que era una casa grande, a mi familia nos iba bien pero eso era otro nivel para ser sincera, asi que entramos y procedí a estudiar con él en su sala tomando asiento en una pequeña mesita de madera, muy tranquilo todo, parecía que en serio queria aprender, comimos unos emparedados y continuamos un poco mas, hasta que su mamá tuvo que salir, fue cuando Gilberto me pidió un pequeño receso
– uno pequeño nada mas ¿si?
Tomé asiento en su sofá y me relaje, me sentia cómoda pero a él lo notaba inquieto, me miraba y parecia querer decir algo
– oye Kathy ¿quieres ir al patio de atras? Es grande y bonito y podemos descansar ahi mejor
Accedi por que tenia curiosidad sobre que tan grande sería, lo seguí pero antes de salir se giro y me vio de forma algo lasciva sin duda
– oye, todos en el salón dicen que eres la mas tetona del grupo ¿es verdad?
Me puse roja al escuchar sus palabras, ademas de molestarme, no queria saber nada de eso y me sentia algo asustada
– ¡Gil! Le voy a decir a tu mamá
Me disponía a volver cuando me tomo de la mano, me sujetaba con algo de fuerza y yo intenta alejarme
– nada mas quiero ver, ándale Kathy, ándale
Estaba cada vez mas asustada pero él no me soltaba, no salía ni mi voz, asi que deje de forcejear, estaba cansada de que siempre fuera tan insistente conmigo, me temblaban los labios pero pude hablar finalmente
– y con eso ya no me vas a molestar?! Ya no me hablaras ni en la escuela, si?
Gilberto asintio con su cabeza, su cara tenia una gran sonrisa, me di la vuelta, estaba avergonzada y mi corazón sentía que se salía de mi pecho, con cuidado levante mi blusa, por suerte (o desgracia) era la ropa de deportes asi que fue facil, al igual que hice con mi brasier, respiraba agitada y finalmente pude darme la vuelta de nuevo, con mis manos sostenía mi blusa dejando ver mis pechos, me sentia algo insegura, no por el tamaño, si no por que sentia que eran raros, en ese entonces no sabía por que pero despues entendi que era por que mis areolas eran algo grandecitas aun a esa edad, creía que se burlaría y eso seria el final pero no fue así
– ¡tienes las tetas bien ricas Kathy! ¡En el salón tienen razón eres la más tetona!
Y se acercó más podia sentir su respiración pero ya no me sentía tan molesta era solo que la sensación de calor del otro día volvía, no sabia que decir, su cara cada vez estaba mas cerca asi que finalmente me pude alejar de él, cubriéndome nuevamente
– ¡ya viste! ¿Ahora dejemos esto si?
Ahi podia verlo como, él se inclinaba un poco hacia delante y ponía una de sus manos en su ingle
– ándale Kathy un poco mas, casi no las vi bien, ademas si me dejas tocarlas te puedo dar dinero mis papás siempre me lo dan cada semana
Tenía sentido, su familia tenía dinero de sobra seguramente siempre ha visto como resuelven todo con dinero… y la verdad me decia a mi misma que, quizas podria asi tener cosas para mí, tal vez mas adelante incluso ese vestido que tanto quería… tal vez yo también podia sacar algo de todo esto
– e-esta bien Gil… ¡pero nadie puede saber! O… o le digo a…
– ¿a mi mamá? Si si Kathy ándale ya, porfa
Una vez mas deje mis pechos al aire, cerre mis ojos, sentía como mi cara estaba tan roja como un tomate y ahí fue el momento donde todo se descontroló para mi, comenzó a apretar mis pechos con fuerza, tiraba de mis pezones incluso, fueron solo un par de segundos pero me dolió mucho así que lo aleje otra vez
– ¡ah! ¡Ya! Me lastimas… ay…
Con mis manos masajeaba un poco mis pechos, intentando que el dolor de fuera, Gilberto no se veía feliz pero parecia entender.
– esta bien, voy a tener mas cuidado, creí que era como en los videos, no sabia que te dolía
Permiti que se acerque de nuevo pero, esta vez note mis pezones que estaban duros, por mi masaje para calmar el dolor sin duda
– Kathy ¿te gustó tocarlos? Están bien duros
Ahora tenia mas cuidado pero aun así me dolía un poco, apretaba mis pechos de forma lenta, los jalaba y mis pezones eran presionados con dos de sus dedos, ademas mis areolas, las tocaba aún mas, parece que le llamaban mucho la atención, estaba asi, jugando con mi cuerpo cuando la sensación de calor bajó a mi vulva otra vez, estaba agitada y respirando de forma mas profunda y Gilberto lo notó, parecia un animal en celo olfateando el aire
– ira Kathy, ven, dame tu mano
Me sentia ligera de la cabeza, como si todo no estuviera pasando y solo hacía lo que me pedía, dirigió mi mano a su pene, lo sentí a través de su pantalón, aunque quize alejarme no me lo permitió pero parecía que eso le gustaba más, aunque solo lo tocaba de forma superficial podia notar que estaba creciendo
– te voy a dar el dinero de mi mesada, si me agarras el pito
La verdad ya no pensaba tanto en el dinero si no en las nuevas sensaciones que atravesaban mi cuerpo, el de forma lenta pero cuidadosa soltó mi mano, bajo un poco su pantalón y por primera vez vi un pene, era algo grande, quizas unos 15cm, ademas de ser algo grueso y te su prepucio salía algo de líquido similar al que yo habia tocado hace unos días cuando frote mi vulva por primera vez, la vista era algo totalmente extraño para mi, no sabia como reaccionar.
Solo seguía lo que me decía, estaba, asustada pero a la vez interesada en lo que veía, se puso a mi lado casi abrazándome, él continuaba tocando mis pechos y yo sujete su pene, era cálido, duro pero algo suave, podia sentir como hacia pequeñas pulsaciones.
– pero dale con mas fuerza, como cuando aprietas el lápiz durante los exámenes jeje
Lo mire a los ojos, mientras el aun jugaba con mis pechos
– soy zurda… no se bien usar mi mano derecha
– ah, es verdad eres rarilla en eso
Me enoje pero queria seguir, el calor que sentia en mi cuerpo no se iba, aprete con algo mas de fuerza y el solo dejaba salir gemidos leves, no entendia bien que decia, en momentos apretaba mas mis pezones y tiraba de ellos, ya no me dolía tanto, parecia que me estaba acostumbrando.
– e-esto.. ¿se siente bien para ustedes?
Gil no me respondio, pero comenzaba a mover sus caderas, de forma mas rapida cada vez, mientras yo intentaba sujetar su pene con fuerza, estuvimos asi unos minutos más, Gil estaba mostrándose mas desesperado a cada segundo que pasaba y así me hizo ponerme de rodillas, ya no me ponía resistencia alguna
– te va a gustar Kathy ¡cierra los ojos!
Estaba sintiendo demasiado calor solo lo obedecí, ademas estando asi, podia presionar mis piernas una contra la otra y me resultaba placentero, sin darme cuenta me estaba masturbando con mis muslos, no queria abrir mis ojos… pero los entre abrí por mera curiosidad justo cuando senti algo caliente caer en mi cara que me hizo retroceder asustada, Gil estaba gimiendo de forma fuerte y eso en mi cara estaba en serio caliente, no sabia que era, pero se sentia espeso y olía extraño, demasiado extraño
– Gil!? ¿Que… que pasa? ¿M-me echaste algo?
– perate Kathy… haahaa… perate… deja, deja busco algo para limpiarte, son mis mecos jeje, no abras tus ojos que se te meterá
No sabia que hacer asi que solo espere, algo de esa cosa entró en mi boca y el sabor era horrible para mi en ese momento
– G-Gil que es esto?! Sabe feo… ¿dijiste mecos? Que es eso…
Después de varios segundos mas y escuchar como movía varias cosas en mis labios senti algo presionarse abrí mis ojos y pude ver que era su pene, asi que me aleje, ya no sabía ni que decirle
– quería que me limpiaras como en los videos… pero ya, déjame limpiarte
Con una servilleta quito eso de mi cara y pude estar mas calmada pero aun sentia ese calor extraño, volvimos a estudiar, esta vez las cosas eran diferentes, no podia ni verlo y cuando su mamá volvió Gilberto le dijo de inmediato
– ¿mamá puede volver a venir Kathia? Me ayudo mucho
– bueno Gilberto, eso depende de ella y que digan sus papás
Los dos me veían con una sonrisa yo aun estando confundida solo quería saber mas de esto que pasaba así que mi respuesta fue directa
– s-si señora, me gustaría venir de nuevo otro día…
Le dije con una sonrisa falsa para despues tomar mis cosas y esperar que me llevaran de vuelta a casa en su auto.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!