Mi Profesor particular I
No se porqué a mi corta edad tenía ganas de que él me tocará, así que inventé un juego de la nada.
Me llamo Maryori, en la actualidad tengo 25 años soltera pero nunca sola; los relatos que les voy a contar sucedieron cuando yo tenía 7 años y estaba en 2do grado de primaria.
Las matemáticas nunca fue mi materia favorita así que siempre tuve problemas con ese curso debido a eso mamá tuvo que buscar un profesor particular para que me ayudara no solo con es curso sino también con los demás; es decir que mi profesor particular me ayudaría además a hacer todas las tareas dejadas en el día a día.
A esa edad ya tenía cierta curiosidad por el sexo, de vez en cuando espiaba a mis papás y entraba en algunas páginas para adultos y aprovechaba en tocarme y acariciar mi vulvita que se ponía muy caliente.
Estábamos en el último bimestre del año y mamá no quería que yo vuelva a reprobar matemáticas así que con insistencia buscó un profesor particular cerca a mi casa, para ser exacta a 2 cuadras de mi casa; al parecer una muy buena vecina le había hablado de él, la noche anterior a mi primera clase con él escuché a mamá que le decía a mi hermana mayor que ya me había encontrado un profesor y que estaba muy guapo y que tenia buen cuerpo pero que estaba casado.
– Mama: ya le encontré profesor para la Maryori, se llama Carlos, está guapísimo, tiene buen cuerpo y se le nota que tiene un buen paquete; pero está casado
– Hermana: lo de guapo y buen cuerpo es obvio pero ¿cómo te diste cuenta de que tenía un buen paquete?
– Mamá: es que lo encontré jugando con sus hijos y él llevaba puesto un bibidi y un short deportivo; espero no se haya dado cuenta que le miré la entrepierna
– Hermana: jajaja que atrevida eres mamá, entonces mañana te acompaño a conocer a esa cosita rica
Escuchar a mamá y a mi hermana despertó en mi un deseo incontrolable por descubrir si era cierto que mi profesor tenía un buen paquete, así que esa noche me fui a dormir ansiosa porque llegara la hora de ir a casa de mi profesor.
Al día siguiente volví del colegio y encontré a mamá y a mi hermana muy guapas, mamá llevaba puesto un pantalón Jean muy pegado a su cuerpo y una blusita de tiritas que dejaba ver sus enormes tetas, mi hermana se había puesto una falta corta y un top; ambas con tacos altos; almorcé rapidamente y me fui a bañar porque yo tambien quería estar bonita para mi profesor, sabía las intenciones de mamá y de mi hermana y eso me dio rabia quería ser yo la única de las 3 que iba a conocer esa cosita tan rica. Me puse un leggins para que se notara mis piernas pero sobre todo quería que mi profesor me viera el culito y un polito bien pegadito a mi cuerpo para que se notara mis pezoncitos ya que no usaba formadores, así nos fuimos las 3 en busca de nuestro macho, perdón de mi profesor. Al llegar a su casa tocamos la puerta y él, lo más bello y hermoso que hasta hoy han visto mis ojos (perdón pero me enamoré de él desde esa primera vez que lo vi) nos abrió la puerta, él levaba puesto un polo y un pantalón de buzo y sin vergüenza alguna mi hermana y yo le miramos la entre pierna y ¡¡¡siiii!!! se le notaba que tenía un paquete muy grande; nos invitó a pasar, y mientras conversaba con mamá mi hermana y yo no le quitábamos los ojos a su entre pierna, nos presentó a su esposa una mujer muy bonita con linda figura y sobre todo muy amable, nos saludó nos dijo que estábamos en su casa y salió; al cabo de unos minutos pregunté.
– Yo: ¿A qué hora empezaba con las tareas y en dónde las haría?
– Mamá: bueno hija ya vámonos, le estamos quitando tiempo al profesor
– Hermana: ¿A qué horas vengo a recoger a mi hermana?
– Profesor: En un 2 horas creo que habremos terminado
Cuando se fueron me dijo ven, vamos y me llevó a una sala de estudio en la cual había una pizarra, un escritorio y una mesita la cual iba a ocupar yo, antes de empezar con las clases en voz alta casi gritando les dijo a sus hijos que cualquier cosa él estaba en la sala de estudio; le pregunté que hacían y me dijo que estaban jugando en su play porque ya habían hecho las tareas, y así empezamos con las clases, como nunca presté atención y a cada ejercicio que explicaba él me dejaba uno para que yo resolviera y que al final lo revisaríamos juntos para ver en que fallé, un poco antes que se cumpliera las 2 horas me pidió que le diera mi cuaderno para que revisara los ejercicios que me había dejado, él se sentó a revisar yo me paré a su costado y poco a poco me fui arrimando hacia él logrando sentarme en una de sus piernas, a lo que él me miró con asombro pero yo le sonreí como calmándolo; el aprovechó para correr la silla un poco hacia atrás y yo aproveche para sentarme directamente en su paquete él como que al parecer lo presioné y me pidió que me levantara un ratito.
– Yo: ¿Qué pasó profesor?
– Profesor: Es que te sentaste un poco fuerte y me hiciste doler
– Yo: jajaja me sentaré más despacio
– Profesor: (acomodándose el paquete) ahora si siéntate
Ni bien me senté me sentí en la gloria porque poco a poco pude notar como le crecía ese enorme bulto mientras yo me movía en circulos, de adelante hacia atrás y arqueaba mi cuerpo dejándome caer sobre su pecho, él me tomó de la cintura y con esas manos fuertes pero a la vez suaves me apretaba contra su miembro que estaba duro y me hacía suspirar y gemir porque sentía que mi conchita se estaba mojando.
– Profesor: (susurrándome en mi oído) Eres una niña muy mala ¿te gusta?
– Yo: siiiiiii me encantaaaaaaa!!!
– Profesor: eres toda una putita ¿quiéres ser mi putita?
– Yo: siiiiiiii quierooooo!!!
– Profesor: pero no le dirás a nadie será nuestro secreto
– Yo: está bien no le diré a nadie
Me giró la cabeza me besó, fue mi primer besó, sentí como su lengua buscaba mi lengua, me chupó mi lengua, chupé su lengua nos besamos apasionadamente yo me sentí en el cielo, mi cuerpo se estremecía en cada movida , en cada beso con lengua, con sus manos había levantado mi polo y me acariciaba mis pechitos, jugaba con mis pezones y cuando empezó a acariciar mi pancita deslizándose hacia mi conchita tocaron la puerta; era la perra de mi hermana, había venido a recogerme. Me acomodé rápidamente mi polito, mi calzoncito porque de tanto moverme se me habia metido al culo, tomé mis cuadernos y salí con mi profesor agarrados de la mano, había logrado mi objetivo, ser la primera en sentir esa cosita rica que tenia entre las piernas.
Mientras nos dirigíamos a casa con mi hermana ella me preguntaba si es que había entendido, si había hecho las tareas, yo estaba en la luna, mi mente estaba recreando todo lo que había vivido minutos antes, estaba absorta; llegamos a casa y corrí al baño tenía la conchita y el calzón mojados, no aguantaba más y comencé a tocarme. Al salir del baño escucho conversar a mamá con mi hermana y que mi hermana le decía que se turnarían en irme a dejar; un día iba ella y otro día iba mi mamá.
Continuará…
Si les gustó mi relato dejen sus comentarios para subir poco a poco la más hermosa historia de amor entre una niña de 7 años y su profesor de matemáticas.
si porfa cuenta mas amiga, uff que rica historia wow que buenos momentos vividos eh
me alegro que te haya gustado y en estos días subo la segunda parte
Por qué en «abonos»
Escribe el relato completo, eso de estar esperando no es grato.
Lo tendré en cuenta
Excelente muy excitante, espero la continuación pronto.
Me calentó mucho imaginar cm se sentaba en su pene y cm se movía en círculos. Esperamos la segunda parte
Por favor continua siempre es bueno saber lo que piensan las niñas putitas
Excelente, espero con ansias la segunda parte.