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Heterosexual, Masturbacion Femenina, Sexo con Madur@s

Mi vecina de cara fea y un culazo de infarto.

Mi vecina que barre las calles y banquetas es muy fea y poco aseada pero tiene un culazo divino..
Me siento afortunado por tener una casa propia y un buen trabajo, por las mañanas al salir a mi trabajo siempre hay una mujer que estaba riendo las banquetas de los demás vecinos alrededor y un día saliendo a mi trabajo se me acercó, es una mujer de 50 años de esas señoras que no se asean mucho, siempre la veo con el mismo pantalón pants gris descolorido y una sudadera de manga larga que al parecer nunca se cambia, siempre trae el cabello recogido y ese día que se me acercó no olía mal pero al parecer se baña poco, es estatura medía alta y de verdad que no es nada guapa tiene la boca grande y sobresalen un poco sus dientes, ese día que se acercó a mí haciendo que revisaba mi teléfono me entretuve un poco para observarla pues de verdad tiene un culo muy grande, que al caminar por su naturaleza se contornea mucho como si no trajera ropa interior y me tenía embobado observando la disimuladamente.

Pasados unos 5 minutos se acerca y me pregunta si me barría la banqueta de mi casa sin pensyrlo más le pregunté que cuánto me cobraría y me decía que lo que yo quisiera y ella se encargaba de tirar la basura y mantener limpio el frente de mi casa, acepté y le dio un poco de dinero por adelantado, me fui al trabajo y por la tarde al regresar merodeaba por mi calle, fumando un cigarrillo y se detuvo un poco al pasar cerca y me saludó, así sucesivamente puse atención todos los días al irme a mi trabajo la veía por las mañanas y en ocasiones por la tarde cuando regresaba, mi trabajo no es muy pesado y tengo la facilidad de manejar mis horarios, y decidí que dos días de la semana iría solo por la tarde para checar que todo estuviera bien en el almacén donde trabajo, la primera mañana observé por la ventana que la señora estaba barriendo y mientras se agachaba observaba el principio de la división de sus nalgas pues el pans que traía puesto como que se le bajaba ye me tenía la verga cómo piedra mientras la desnudaba con la mirada, aprovechando que era temprano decidí decirle que me consiguiera algo de almorzar y al salir me vio preguntando si no saldría y le dije que dos días estaría en casa y le pedí fuera a traer de comer para 2 personas ella inmediatamente fue y al regresar la invité a almorzar conmigo, se negaba pero al final aceptó, mientras almorzábamos platicábamos cosas cotidianas sobre mi trabajo y sobre ella, se llama Débora y en mis adentros pensaba con ese tremendo culazo ha de devorar muy bien…

Acabamos de almorzar y me ayudó a recoger algunas cosas regadas en el comedor cocina y sala y yo le di un billete de $100 pesos lo cual no quería aceptar pero yo se lo daba en agradecimiento y pensando podermela ganar poco a poco, estuvimos conversando por un rato más y le dije que mañana la volví a invitar a almorzar y aceptó de buena gana, yo no dejaba de admirar su cuerpo como dije era un poco alta con un poco de vientre sin llegar a ser obesa pero sus caderas anchas me tenían loco en ese momento quería comérmela y meterle mi verga Pero sabía que tenía que tener paciencia nos despedimos y quedamos de vernos al siguiente día.

Día 2.

Eran aproximadamente las 9 de la mañana cuando asomé por mi ventana y vi que la señora Débora ya andaba haciendo sus labores Pero esta vez ya estaba bañada y su ropa habitual muy desgastada pero no dejaba de admirar su trasero que ya se había vuelto una obsesión para mí, dije que siguiera con sus labores y al término de casi una hora le llamé para que fuera a traer lo del almuerzo y al regresar ya un poco más confiada entro a mi casa y tenía preparadas una cervezas en la heladera pues quería abrir un poco más la confianza con ella, después de almorzar le propuse que tomáramos unas cervezas y aceptó nos fuimos a la sala de estar y la noté cómoda y con más confianza, al término de tres cervezas me acerqué pegado a ella y no se alejó, empecé a acariciar su pierna sobre su pantalón y no se opuso me acerqué a besarla y me correspondió, sobre su pantalón empecé a acariciar su vagina y se sentía que no tenía ropa interior lo cual facilitó más las cosas, entrelazamos nuestras lenguas y era muy tosca para besar pero mi deseo por cogérmela es la más grande.

Le quité la sudadera y ciertamente no traía sostén empecé a chupar sus tetas aunque medianas pero de buen tamaño y ella se dejaba hacer empecé a quitarle el pantalón para dejarla desnuda y ella empezó a quitarme la ropa de dormir que traía puesta lo cual facilitó más las cosas para los dos, aunque iba un poco aseada no dejaba de percibir el olor de su sudor y el olor ácido de su vagina, empecé a meter mis dedos en su cavidad vaginal arrancándole gemidos muy ruidosos, ella con su mano masturbaba mi pene y nos dejamos llevar por la calentura, inmediatamente la recosté en el suelo sobre una alfombra y empecé a lamer su coño el cual tenía un olor muy intenso me prendió demasiado y con dos dedos empecé a hurgar en su ano escupiéndole saliva a mis dedos empecé a penetrarla por el culo con ellos ella gemía muy fuerte y me pidió con una voz de súplica diciendo: Dame tu verga en la boca, en ese momento me acomodé en la posición de 69 y me daba gusto el olor ha sido de su vagina lamiéndole también el ano el cual ya estaba muy dilatado por el mete y saca de mis dedos.

Ella no dejaba de chuparme el pene con mucha dedicación el cual entraba sin dificultad en su boca sin resistencia y la verdad me daba una mamada deliciosa, la puse en cuatro admirando sus nalgas llenas de celulitis las cuales tenían un movimiento excepcional muy flácidas que tenían un movimiento que me ponía el pene como una roca… De una se lo metí por el culo ya dilatado, y empecé a cogérmela con dedicación y ella solamente se quejaba pidiéndome más verga hasta adentro, yo no paraba de meterle todo mi miembro que al entrar y salir notaba residuos fecales y el olor que emanaba me ponía loco en ese momento, le dije que cambiáramos de posición ella sobre de mí yo recostado y me dio una mamada súper apasionada, de una se sentó sobre mi falo haciendo rebotar sus nalgas con mis piernas y mis testículos, la volteé dándome la espalda y así sentada notaba como sus nalgas rebotaban en mi pubis y vientre haciendo un movimiento muy acelerado, apretaba con mis manos sus nalgas prendiéndome de ellas como si se me fueran a escapar, tuvo un orgasmo el cual era muy oloroso y muy espeso lo cual le pedí que me dejara de gustarlo haciéndole sexo oral el olor que desprendía me ponía loco me comí todo lo que salió de ella intercambiando entre sus dos orificios y ella me recostó en el suelo de nuevo y me empezó a hacer la felación como desesperada hasta que me vine dentro de su boca expulsando todo mi semen y se lo tragaba diciendo que le encantaba.

Recostados en el suelo le dije si quería ser mi puta ocasional y le dije que la compensaría y ella solamente respondió: trabajo es trabajo de Esto hace ya dos meses y lo llegamos a hacer una o dos veces por semana en las mañanas y yo le digo que no se bañe incluso que lleve su ropa de trabajo que normalmente ocupa y ella extrañada me ha preguntado por qué y le respondo que me excita mucho hacerlo así, le he pedido que no se depile la vagina ni el culo, le he pedido que use ropa interior a su gusto de ella pero también al mío, y le he pedido que nuestros encuentros durante días no se cambie las bragas y ella cada que nos vemos me dice que hasta cuatro o cinco días lleva usando la ropa interior la cual me dispongo a oler mientras me mama la verga, y el chuparle la vagina y el ano todo sucio me hace extasiar se ha convertido en un fetiche para mí el hacerlo con una mujer fea maloliente y demasiado culona, la cual me ha regalado unas mañanas llenas de sexo sucio y muy satisfactorio.

Gracias por leer mi relato saludos!

 

15 Lecturas/20 noviembre, 2025/0 Comentarios/por Masiosare1976
Etiquetas: culo, mama, oral, orgasmo, semen, sexo, vagina, vecina
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