Mis aventuras con Dalia 3era parte.
En esta acción les contare dos anécdotas: lo que ocurrió en uno de los eventos deportivos escolares y el primer fin de semana que pase asolas con Dalia..
Luego de nuestro encentro en la casa Talía, no tuvimos la oportunidad de tener sexo hasta el evento deportivo de la escuela. Todo guiado y orquestado por mi linda Dalia, la cual ya estaba mostrando signos de dejar de ser una niña tranquila y sumisa en la cama, para despertar el deseo de que experimentáramos más a la hora de hacer el amor, volviéndose cada vez más atrevida y asertiva respecto al sexo.
Como ya les había contado en relatos anteriores, en nuestra escuela de monjas habían tres grandes eventos anales, La primera comunión la cual se empataba con la graduación de la primaria, La fiesta de las quinceañeras (el evento más grande de toda la comunidad escolar) que se juntaba con la graduación de secundaria y la celebración de Pentecostés, la cual a diferencia de los otros dos que eran bailes de una vez en la vida (En mi caso pace por el de las quinceañeras tres veces). Pero a diferencia de los otros dos la celebración de Pentecostés se realizaba de forma anual en el mes de junio cerca del fin de curso. Esta se realizaba un domingo en el centro deportivo de la comunidad y era un evento de convivencia e integración familiar, a través del deporte.
Las madres organizaban varios eventos, torneos, ralis y competencias, tanto entre alumnos, como entre grados, padres y familias completas, desde la mañana hasta la tarde noche, con un picnic familiar a media jornada. Claro en este evento las familias numerosas como la mía tenían la ventaja ya que formábamos equipos para todas las competencias, sin recurrir a tener que integrar familias. Solo de estudiantes éramos en ese momento 17 (entre hermanos y primos en primer, segundo y tercer grado distribuidos en todos los niveles) más nuestros padres y abuelos, como nosotros había como 6 o 7 familias más, ya saben cómo son los pueblos tienes parientes en todos lados jajajajaja. En cambio Dalia, terminaba uniéndose a la familia de Talía y otra más para competir.
Todo transcurrió con normalidad, hasta que inicio la competencia de basquetbol de padres e hijos, Yo, mi Papa, mis Primos y Tíos participamos como cada año. Mientras seguíamos avanzado en las competencia llego el momento de darnos con el equipo de Familia de Dalia, en este estaba mi suegro presupuesto, el papa de Talía y su hermano mayor y los otros dos chicos de la otra familia que integraba al equipo. En este juego me puse un poco molesto ya que uno de esos chicos que era de tercero se la pasaba coqueteando con Dalia eso me encambrono, pero no decía nada ya que no era de buscar pleitos a menos que fuera algo necesario. Cosa que Talía uso para burlarse, ya que no me habían visto en mi faceta celosa, es parte de su forma de ser. Dalia solo lo ignoraba y se alejaba de este.
Cuando empezó el juego nos empezamos a marcar Fauls, entre ese chico y yo. Dalai empezó a echarme porras, por lo que él puso más violento, por lo tanto yo igual. Así nos la pasamos, con grito de la madre que hacía de árbitro. El chiste es que el golpe vino de donde menos me imagine al distraerme con el chico. El papa de Dalia me enterró tremendo codazo en la cara mientras marca el pazo de la pelota, pareció un accidente, pero algo en mi decía que lo hizo con todo la intención. Desde que me volví novio de su hija este me ha guardado un resentimiento muy grande que mantiene hasta el día de hoy que vivo con ella como pareja.
La sangre me brotaba de la Nariz a chorros y estaba tendido en el suelo, lo normal por recibir el impacto de un adulto del doble de mi tamaño y peso. La madre detuvo el juego, para que me revisen rápidamente y luego enviarme a la enfermería del centro deportivo, el mayor de mis primos me ayudo a levantarme y a caminar hasta el lugar, el porrazo me dejo aturdido me centro de gravedad. Dalia se fue corriendo conmigo y nos acompañó a la enfermería, las actividades continuaron como se planeó. Me revisaron por el doctor y a mi primo le dijeron que no era nada, solo fue un golpe simple y el sangrado fue por el impacto, me dejo con trapo frio en la frene y mi nariz en posición horizontal apenas el sangrado terminara podría regresar, pero que yo no participara más. Al escuchar eso mi primo regreso con la familia, mientras yo me quedaría en la enfermería un rato para esperar, como el doctor dijo, Dalia se quedó conmigo a esperar cantándose a mi lado, sosteniendo mi mano izquierda ya que la derecha la tenía en mi nariz.
Luego de un buen rato, creo que fueron como 20 minutos la verdad no sé muy bien o no me acuerdo, a mí se me hizo largo, el doctor me volvió a revisar la nariz, preguntándome si había dolor mientras tocaba y examinaba. Él nos hacía conversación creo que para medir mis reacciones en caso de contusión la verdad tampoco se. Ad Dalia de le pregunto de relación tenia conmigo, ella me le dijo que era mi novia, desde ese momento la note diferente, era la primara ves que lo decía abiertamente y contento ahínco. El doctor se reía. Luego de varias preguntas, el doctor dijo “Estas bien ya puedes regresar con los demás, tómatelo con calma, hidrátate y no hagas movimientos muy fuerte, apenas puedan dile a tus padres que te lleven al doctor a una revisión más amplia” A noto todo en una papel tipo receta y nos lo entrego. A Dalia de le dijo “Cuida que tu novio no se meta en más líos” ella le contesto un –Si, yo me encargo—mientas me tomaba de la mano y se acurrucándose sobre esta, caminábamos con los brazos entrelazados como toda una pareja.
Mientras regresavamos con los demas, Dalia me pregunto
–¿De verdad estas bien?—/ –Si no te precupes. Yo le conteste
–Mi papa es un tonto al pegarte así—Dalia me comento /–No tranquila fue un accidente a beses pasa—Yo le dije para que se calmara, pero por dentro sospechaba que lo hizo apropósito aprovechando la situación.
Ella me pidió que camináramos por el lugar ya que no quería regresar estaba molesta tanto con su papa, como con el alumno de 3ero que no dejaba de acosarla. Me dijo
–Ese idiota es realmente irritante, no le entra en la cabeza que no me interesa ya que tengo novio-
El complejo era muy grande, las madres vigilaban el lugar para que ningún alumno dejara el área que nos permitieron utilizar. Nosotros lo logramos ya que nos fuimos a la enfermería del lugar que estaba en la arte de en medio.
Ya bastante alejados del evento, nos sentamos en una banca que estaba en la parte de atrás de tolo el lugar cerca de la piscina de clavados. Ambos estábamos con el pants y la playera deportiva de la escuela, Dalia llevaba un gorra azul en la cabeza y una cola de caballo que le salía por la faja de ayuste de la misma.
Platicamos un poco más, al ver que prácticamente nadie se asomaba Dalia, se quitó la gorra, asentándola en la banca detrás de ella, acerco su rostro al mío, y volteándolo para quedar inclinada con respecto a mi posición empezó a besarme, ella adopto esa posición para que su cuerpo no golpeara mi nariz. Ella intentaba que el beso sea profundo metiendo su lengua en mi boca, la verdad era un poco incómodo, por lo que yo tomo su rostro, colocándolo en una posición más normal pero teniendo cuidado. Ambos intercambiamos nuestras lenguas, en unas coacciones dentro de la mía, luego en la de ella, acariciándonos por medio de movimientos circulares. Nos detuvimos luego de varios minutos, ambos teníamos baba en el mentón.
Dalia se percató que su gorra había volado dentro de una pared de arboleda Limonaria, esta se encontraba dentro de un agujero en la pared. Me levante para ir por la gorra pero ella no me dejo, al agacharse para meterme medio cuerpo en el espacio entre los árboles, ella de detuvo.
Yo mientras contemplaba su trasero, mientras esta estaba en 4 patas. Ella salió de allí, pero en vez de ponerse de pie, seguido agachada, voltio a verme y con la mano me hizo una señal para que fuera. Al acercarme a ella, me acache para estar a su altura, preguntándole que pasaba. Ella no me contesto nada, de limito a tomar me mano para guiarme, adentro del espacio de la arboleda, nos arrastramos un poco y salimos dentro de esta. Era un casillo como de dos metros, tal vez un poco más, entre el muro y la arboleda. Ambos eran muy altos y cubrían desde la base del suelo hasta casi 3 metros por encima de nuestras cabezas.
Ya estando se pie en el pacillo, Dalia me llevo, hasta el final de este que era la parte trasera del edificio que servía como gimnasio múltiple. Éramos completamente inciviles al exterior, por el recubrimiento del muto, los árboles y el gimnasio. Yo estaba medio embobado, por el pacillos y la estructura, cuando Dalia tomo la iniciática. Ella se agacho frente a mí, bajando mi pants con todo y bóxer, a medio muslo, tomo mi pene levantándolo horizontalmente y llevándoselo a la boca. Primero le dio unas buenas mamadas, metiendo y sacando mi miembro de su boquita, luego mientras los sostenía con las manos, cupo el cuerpo de pene haciendo que este mirara a la derecha, luego froto su lengua en mi glande haciendo movimientos circulares, para luego hacerme una felación con su mano derecha.
Yo me sentía en la gloria, era delicioso,–Dalia lo haces increíble dios, se siente también—Yo le decía mientras ella seguía generándome placer. Al ver que mi miembro ya estaba erecto totalmente, Dalia se puso de pie, dándome la espalda, ella se bajó el pants y su pantaleta rojo vino a media mula también, empinándose hacia la pared, llevo sus manos a su culo abriéndolo para mí.
–Cielo, méteme tu cosa, estoy caliente y te quiero solo a ti—Esa fue la primera vez que ella tomaba la iniciativa sexual, pidiéndome sexo directamente. Eso me calentó a mil, me coloque detrás de ella apuntando mi cosa a la entrada de su vagina, la cual ya estaba bien humedecida.
Empecé a penetrarla mientras la tomaba de la cadera, mis envestidas era fuertes ya que estaba realmente excitado, Dalia junto sus labios para ahogar sus gemidos. A los pocos minutos de empezar con mis entradas y salidas a su interior, tome su playera del colegios y la alce sobre su cuerpo hasta los senos, me acerque a su oído y le dije “Quítatela, quiero verte desnuda”, Dalia ni lo dudo acomodo sus brazos para que le pudiera sacar la playera. Tenía puesto un sostén deportivo blanco ya que era obligatorio en el colegio que lo usara cuando sus senos empezaran a desarrollarse. Yo le moví las cintas que lo sostenían hasta los lados de sus hombros para poder bajar el sostén y exponer sus tetas al aire. Mientras yo la envestía como loco.
La penetraba mientas jugaba con sus pechos, masajeándolos, apretándolos y hundiendo sus pezones. Con voz baja ella gemía –Haa, Siii hazlo mas—ya que no quería de nos descubrieran. Estábamos perdidos en nuestro placer cuando del otro lado de la arboleda se escucharon las voces de unas señoras, cuales se sentaron en la banca que estaba enfrente de nosotros, Dalia apretó más los labios, solo alcanzando a decir “Sigue no pares”. Por lo que reinicie el acto sexual. Nueva mente tomamos ritmo cuando escuchamos que más señoras llegaban, entre ellas la mama de Dalia. Nuevamente me detuve, me imagine que querría parar, igual que en aquella ocasión con los curas. Mi sorpresa fue que Dalia por si misma empezó a mover las caderas, metiendo y sacando mi pene de dentro de ella, sin importarle que su mama estuviera frente a nosotros, separada por un árbol muy tupido que no la dejaba vernos. Por lo que al ver si iniciativa de no parar, reanude por tercera ves mis envestidas y esta vez no me detendría.
Las señoras estaban se alejaron para fumar, se sentía el olor tabaco. Mientras hablaban de sus hijas, lo difíciles que eran tratarlas por las hormonas y los novios, Todo delante de nosotros que cogíamos como locos, dalia ya tenía sus manos en la boca para evitar hacer ruidos, mientras que yo trataba de no chocar nuestros cuerpos.
Ambos terminamos corriéndonos juntos, pero acusa de la excitación de la situación y el peligro de ser descubiertos, mi miembro permaneció activo, por lo que continúe penetrándola tras llenar su interior, Dalia se sentía más apretada que nunca, así continuemos un rato hasta que ambos tuvimos un segundo orgasmo, nos quedamos, recordados semi desnudos en la pared, luego de unos momentos la mama de Dalia y las señoras se fueron, por lo que aprovechamos para vestirnos y luego de unos minutos salir rápidamente.
Nos regresamos con los demás, para el almuerzo, cada uno con su familia, luego siguieron los eventos, en donde ya no participe, solo me dedique a ver concursar a Dalia y a mi prima Karen.
Dos semanas después se iniciaron las vacaciones de verano, las primeras dos me la pase como cada año en la playa con mi familia donde acostumbraba coger con Karen casi a diario en los baños del hotel, como les conté anteriormente en mis vivencian con Karen (https://sexosintabues30.com/relatos-eroticos/incestos-en-familia/mis-aventuras-con-mi-prima-nuestros-dias-en-la-playa/)
Al regresar de las vacaciones, solía salir de ves en cuando con Dalia y sus amigas. Nos íbamos al cine, la plaza del pueblo a comer helado y marquesitas (Barquillas dobladas en forma de tacos mexicanos rellenas de queso o chocolate), unos sorbetes o raspados (creo que es la forma más típica de llamar al hielo raspado, con cobertura de frutas de sopores) o helados (el más típico es el de Coco ya que somos una zona costera). Lo malo y lo que molestaba a las chicas eran las ojos vigilantes de los papas sobre protectores de Dalia, ya las chicas o llevaban a sus novios y las que no tenía buscaban enamorar a alguien pero no se acercaban por los papas de mi novia. Esto de lo cuento fuera de los recuerdos sexuales, porque es una anécdota muy genial sobre todo en las borracheras.
El chiste es que en una salida al cine nos fuimos a una mega plaza comercial casi recién inaugurada cerca del pueblo como a 30 min en camión. Había de todo y tiendas muy grandes costosas y de renombre en la república. El primer complejo Cinepolis cerca de nuestro hogar, el del pueblo era pequeño de dos salas y pocas butacas. El chiste es todos nos encontramos en el veríamos una El Amanecer De Los Muertos (a escondidas de nuestros padres claro ya que era de Zombis +18). El problema es que al papa de Dalia se le ocurrió quedarse al ver que no había ningún otro papa. Nos seguía a cierta distancia como halcón mientras recorríamos las tientas. Mientras estamos almorzando en el Burger King en el área de comida Talía arte de sus mamadas, dijo que iría al baño, pero en realidad fue con los guardias de seguridad, para decir que un viejo extraño anda siguiendo y mirándonos éramos un grupo de 6 chicas adolescentes y dos chicos, tenía mucho miedo ella nos explica como lloro ante la caseta de los guardias. Regreso luego de un buen rato toda tranquila. La verdad es que no me di cuenta de nada pero unos guardias observaban a mi suegro también de lejos. Al terminar seguimos caminando por el centro comercial junto con nuestra sombra. Nos metimos a una enorme tienda de discos, con de esas máquinas para escuchar canciones y ver si te gustan. Estuvimos un buen rato, Dalia y Yo escuchamos un Cd de un grupo popular en el país es ese momento OV7, nos empezamos a pegar hasta que ella empezó a abrazarme enojando a su papa, no escuchábamos nada por lo audios, pero parece que el al acercarse de golpe los guardias lo sometieron por acosar menores de edad. Mi suegro estaba tirado en el suelo mientras los guardias lo sostenían, nosotros volteamos, ya por el ruido, el gritaba
“no soy un pervertido en mi Hija y sus amigas” Dalia estaba toda asustada que tomo mi mano como para esconderse en ella. Una guardia le pregunto a Dalia si lo conocía y era verdad lo que decía. “Yo a ese señor no lo conozco” Dalia le contesto a la guardia, así que se lo llevaron. Luego que todo se calmó todos nos reímos incluyendo a Dalia, fuimos al cine y sin su papa Dalia y Yo nos pusimos más empalagosas y agasajadores, caminando con los demás con nuestras manos en nuestras cinturas, nos basábamos y demás. Nos enteramos después que mi suegro paso 24hrs en la Penitenciaria local y su mujer tuvo que ir por el para sacarlo.
La vacaciones continuaban, llego el mes de agosto yo tenía planes de ir con unos amigos el fin de semana a pasar una maratón de películas de ciencia ficción cosa que hacíamos cada año. De repente me llaman a mi celular, era Dalia marcando desde la casa de Talía. Me pedía que fuera a verla y que llevara un cambio de ropa claro yo le conteste, de seguro me invitaban a bañarme en la piscina de Tilia, dije entre mí, me voy con las chicas y de allá con los chicos.
Salí de mi casa a las doce, en mi bicicleta, llegando a casa de Talía como en 10 o 15 minutos. Toque el timbre, traía en mi mochila con ropa para un fin de semana y varias películas. La que me abrió la puerta fue Dalia, invitándome a pasar, entre dejando mi bici amarrada dentro del porche, cuando entre me di cuenta que no quedaba nadie en a casa más que nosotros dos. Dalia me dijo que Talía y su familia se fueron el fin de semana y regresarían hasta el lunes en la noche, su amiga le dejo un juego de llaves y la contraseña da la casa para hacerle el favor de alimentar a su perrita y sus peces. Luego de eso ella me abrazo llevando sus manos a las bolsas traseras mi pantalón.
–“Pensé que podríamos aprovechar el espacio y quedarnos juntos el fin de semana”—Dalia me dijo mirándome con una cara coqueta y seductora.
Yo en cambio le pregunte por sus papas. A lo que Dalia respondió –Ellos creen que me fui con Talía el fin de semana no se van a enterar—Yo simplemente trague saliva por la proposición la cual termine aceptando total yo ya tenía permiso de dormir fuera. Llame a mis compañeros y los mande a la fregada, eso los medio molesto, pero era lógico dos días de películas o dos días se sexo en plena pubertad cualquiera aria lo mismo.
Enseguida subimos al cuarto de Talía, era la segunda ves que tendríamos relaciones sexuales en ese lugar, Dalia quito la sabanas que cabrían la cama, remplazándolas por otras, para cubrir cualquier evidencia, dentro de su maleta también tenía condones y un lubricante, se vía a leguas que estaba preparada, para todo. Ese día Dalia llevaba un pequeño short de mezclilla ajustado, y una blusa campesina de tela de manta.
Mientras estaba preparando la cama, yo me acerque a ella recargándome sobre su cuerpo, así llegar a sus pechos en ese momento de di cuenta que no traína brasier, y sus pezones era disimulados por el bordado de su blusa a la altura del pecho.
Ambos no dejamos caer sobre la cama, mientras nos reíamos, Dalia rápidamente se voltio obligándome a hacerlo también, quedando ella en sima de mí. Dalia estaba en una posición de perrito encima mío, sus piernas se apoyaban en sus rodillas localizadas cada una en un castado de mi cintura, su manos sodas extendidas horizontalmente a los contados de mi cabeza, su ledo caí sobre mi cubriendo mi rostro, cual se encontraba frente al de ella.
–Estos días voy a hacer tuya así que por favor hazme el amor como nunca—Dalia me pronuncio mientras nuestras miradas se conectaban. En ese momento algo en mi era diferente, y ahora que soy adulto puedo reconocer con facilidad, yo amaba a Dalia, estaba enamorada de ella, tal y como lo estoy en la actualidad.
Ella acerco su cuerpo al mío e iniciamos con un beso, yo lleve mis manos a su espalda, mientras le decía que la amaba, entre los besos. Luego de unos intercambios con nuestras lenguas, lleve mi mano a su trasero metiéndola dentro de su pantalón, tampoco traía pantaletas, cosa que me decepciono pero me trague la sensación y continúe deslizando mi mano sobre su trasero, introduciendo mi desde central derecho dentro de su raja, deslizándome dentro de esta.
Luego de unos minutos, ella rompió la conexión en la que nuestras bocas se encontraban, sentándose sobre mi cintura, yo saque mi mano de ella.
Dalia procedió a quitarse la blusa dejadme ver sus adorables pechos copa A o tal vez para ese momento ya más grandes. Yo también me senté, para llevar mi boca asta ellos y mamarlo, estos era ya un poco más firmes que cuando empezamos nuestra vida sexual, también sus pezones ya sobresalían bastante. Tomada cada peco para ayudarme a comerlos a chupetones, la respiración de Dalia era acelerada, ella tomo mi rostro llevándome a sus senos para que no dejara de alimentarme de ellos. –Ella me decía que parecía un bebe, que no dejara de mamar, que se sentía rico—todo seguido de pequeños alaridos que intentaba ahogar por costumbre.
Me detuve y con un poco de fuerza salí de sus brazos, –Dalia hagamos el 69, por favor—Yo le pedí a mi chica. Ella complaciéndome se colocó en la postura adecuada para intercambiar sexo oral entre ambos. Entre ambos nos quitamos lo short el uno al otro, pero mientras lo hacía pude notar una macha de humedad en la entrepierna sobre las costuras de la mezclilla, proba de lo excitada que Dalia estaba, al sacar su prenda por completo pude ver los hilo se baba que se encontraban entre la tela u su cuerpo.
–Amor ya estas todas listas aquí abajo—Yo le dije bromeando mientras llevaba mi boca a su vagina
–No lo puedo evitar ponerme caliente cuando tú me tocas Bebe—ella me contesto de forma coqueta mientras también empezaba con su oral a mi pene.
Ambos intercambiamos, mamadas, chupetones y lamidas en nuestras parte sexuales, escuchándose en la casa nuestros jadeos y gemidos mientras nos llena vamos de amor mutuo, terminamos cociéndonos en la boca del otro.
Luego la Dalia para acelerar mi recarga se sentó cobre mi miembro, colocando este de tal forma que se viera envuelto con su raja, para luego frotarlo con movimientos de hacia delate y hacia tras, cobre el tronco de mi pene, una vez mi pene estuvo erecto tomamos un condón para luego hacer el amor al estilo vaquero, con Dalia montándome con fiera, mientras yo realizaba envestidas en su cuerpo de arroba hacia abajo, Dalia contenía sus gemidos, pero le dije que estábamos solo que podía hacer el ruido que quisiera, por lo que ella empozo a gritar lo mucho que le gusta mi pene, que este era solo de ella y que sería suyo alta el fin de sus idas. Yo le contestaba lo mismo de su cuerpo, lo caliente que era y que sería mía para llenarla cuando quiera. Luego de un rato ambos llegamos al orgasmo. Dalia enseguida saco el condón para devorar su contenido.
Tras esto nos recostamos juntos un rato, para luego pedirle que se duchara conmigo, cosa que nunca aviamos hecho antes. Dalia se sonrojo y me dijo que le daba pena, yo me reí mucho, haciendo que ella hiciera un puchero hermoso, mientras me reclamaba.
–Por qué te ríes de mi—yo le conteste –Hay mi amor ya conozco, todo tu cuerpo, el tocada y lamido cada centímetro de él y te da pena el que no bañemos juntos—ambos nos reímos juntos, para luego irnos al baño donde nos enjabonamos entre nosotros, nos acariciábamos y besamos, la verdad al ver a Dalia desnuda y empapada en el agua de la regadera, nuevamente me provocaron una erección, por lo que fui por un condón y enseguida la penetre por atrás, clavando mi miembro en su vagina, entraba y salía de ella mientras Dalia se recargaba en la pared de la ducha.
–HAaaa, Haaa,– gemía con mis envestidas –Solo quisiste entrar al baño para esto verdad—Dalia me comento en pleno sexo. –No lo puedo evitar amor eres tan sexy / Dime acaso de molesta—yo le conteste. –Pero para nada deme más duro recuerda que soy tuya—Dalia gritaba entre gemidos que nos llevaron nuevamente a corrernos en el baño. Luego de tragar mi semen del condón salimos del baño. Nuestra tripas ya rugían, pero no podíamos tomar mucho de la alacena o la bodega por lo que decidimos ir a la tienda.
Al regresar de esta Dalia me mando a la sala ya que ella cocinaría para mí, claro aria cosas básicas, ya que compramos, salchicha, pan, unos huevos, un poco de jamón y cheso, con eso sobreviviríamos el fin de semana.
Mientras Dalia cocinaba, yo me puse a husmear en la sala, y en una repisa en el dentro de entretenimiento vi varios DVDs, cosa que llamo mi atención así que revise la colección, entre ellos había una copia “Del Hombre De La Máscara De Hierro” protagonizada por Leonardo DiCaprio, el tipo no me agradaba, pero a los chicas las volvía locas sobre todo por Titanic, la cual vi con Dalia y Talía en el cine y cada minuto de la película me quería arrancar los ojos, yo soy un chico de cencía ficción y terror clásico, jajajaja. Pero al ver que la historia estaba basada uno de mis dos libros favoritos en la vida, 20 años después de Alejandro Dumas me dije a mi mismo esta si la puedo tolerar, así que me la lleve.
Luego de cenar le pedí Dalia que viéramos esa película. Ella lo dudo un momento pero luego acepto, yo tenía palomitas de microondas en mi maleta así que aprovechamos. Al abrir el DVD, vi que no tenía ninguna imagen, así que creí que era pirata, no le di importancia. Le di reproducir, mientras nos acurrucábamos en el sofá grande de la sala, apagamos las luces y cerramos las cortinas.
Al principio solo se mostraba lluvia de estática en la pantalla, para que luego apareciera un letrero en una cartulina blanca, que decía “Fiesta de Hadas numero 8 Feliz cumpleaños Papi”. Eso me extraño pero seguimos viendo, luego la cartulina se quitaba dejando ver a una niña blanquita peinada con dos coletas, un tutu y un payasito rosa. Dalia reacciono diciendo “Mira es Talía cuando teníamos 8” y luego de eso me percate que era cierto. Talía se encontraba sobre una cama un cuarto que no conocíamos, a los pocos minutos entro su papa desnudo para acercarse a su hija, para empezar besarse en los labios eran unos besos apasionados donde ambo jugaban con sus lenguas, luego de eso Talía sin levantarse de donde estaba dentada empezó a realizarle un oral al pene de su papa, la cámara hico un zoom a la felación que la niña realizaba.
Yo tome el control para quitar la película, pero Dalia me detuvo colocando su mano derecha sobre la mía, bajado el control a la mesa de café nuevamente, al voltear a verla vi como tenía comezón en la entrepierna y se tocaba inconscientemente sobre el pantalón.
Yo me peque junto a ella y besándola en la mejilla le pregunte si quería continuar, ella me dijo que si, luego le pregunte que si era su primer porno, a lo que ella contesto con una afirmación, entonces le pedí que se desvistiera y yo ara lo mismo, así lo hicimos, pero esta vez le dije a Dalia que se centrara sobre mí, cual hizo.
Continuamos viendo la porno, la cual ya había avanzado, el papa de Talía se encontraba sentado en la cama, mientras que la niña en 4 sigue comiendo el pepe de su papas mientras este acariciaba el borde de la entrepierna del payaso de licra rosa con un vibrador de masaje.
Mientras to tenía mi mano en la vagina de mi novia, la cual estaba súper mojada, la masturbaba por fuera de estas mientras ambos nos concentrábamos en la película.
Luego el Papa de Talía enfoco el payasito, mojado en la parte de su culo, le quito el vestido y empezó a tener sexo anal con la pequeño Talía, ella gritaba y gemían con la envestida de su papa y su enorme pene, al como rato ella también movía las daderas excitada totalmente por su papas, hasta que ambos terminaron viniéndose, Talía primera y luego su papa la lleno de semen.
La pantalla se puso negra y luego de algo de estática salió un letrero en cartulina que decía “Fiesta de Hadas numero 9 Feliz cumpleaños Papi” para luego mostrar a Talía ya mayor, pero esta vez con una traje de baño brasileño formado solo de hilos, para luego seguir con una escena de sexo esta vez en la vagina de Talía quien montaba a su papa, el cual grababa en primer plano las envestidas de su hija subiendo y bajando mientras el pene se insertaba en ella, continuaron hasta que Talía se vino sobre él, para luego no ponerla boca abajo y clavarle el pene en el año con fuerza, cuando este se correría saco su pene y lleno su espalda
Luego pasó lo mismo pero esta vez en el letrero aparecía un número 10, pero en este video las cosas eran un poco más turbias, ya que vimos a Talía con lencería sexual negra, medias y ligueros, ya saben de esas pantaletas con orificios para introducirles el pene, en la vagina y el ano. Un brasier diminuto con apertura para los dejar los pezones expuestos. Talía estaba encadenada de pies y manos, con una mordaza entérica en su boca, un consolador vibratorio, en cada orificio que entrabe y salía de ella. La película empezó con sus gemidos de desesperación ¡MMMmmmm! Se escuchaba debido a la mordaza. Mientras su papa se masturbaba en un cilla a lado de ella, nos hacían unos primeros planos, de sus penetraciones, donde podía verse su vagina, ya sexualizada con algunas artiguitas, ya mostraba algunos pelos den su monte venus, pero por el video que tenia del retito espiritual sabía que estaba totalmente depilada su zona intima. Sus pezones ya estaban formaditos e hinchados, al igual que su busto que mostraba ya montes bien debidos y en crecimiento, es más es la que tiene para sus 13 años los senos más grandes y formados de la clase y el 2do de secundaria y ahora sé por qué ya que era estimulada desde chica. Luego de como 15 minutos donde presenciamos dos orgasmos de su parte, su papa la desviste para coger con ella, primero de misionero, luego de perritos dándole nalgadas muy fuertes, mientras la llamaba perra, zorra y puta.
Dalia ya se había corrido un par de veces por mis estimulaciones en su punto G, mientras que yo estaba duro como roca, me era extraño ya que le porno casi no me provoca eso, soy más de porno animado ese si me calienta, pero al ver una chica que no solo conocía, sino que también tenía una relación muy cercana me llevo al éxtasis, como con el video de mis compañeras en el baño.
Pero en esa tercera parte Dalia apago la televisión diciendo –Esta aquí vamos mejor a la cama quiero hacerlo contigo—la verdad luego me confesaría que tenía miedo de ver lo que seguía debido a que era su mejor amiga y para los 10 años ya hacia cosas que para ella eran fuertes y vulgares. Yo por otra parte tenía el morbo, por lo que les adelanto que cuando Dalia quedo bien dormida baje a terminar de verlo y si aumentaba al menos el de los 12 fue algo más fuete y vinchas, donde Talía era sostenida con arneses, cadenas y amarada, tanto en el aire como a la cama, usaron en ellas más juguetes sexuales en ella y se vio un poco que la cámara era manejada por su mama. Cada video surcaba alrededor de 30 minutos excepto el de los 12 que era como 1hrs con 20 minutos. Es no fue la única ves que nos quedamos solo en casa de Talía y para la segunda visita fui preparado y clone el video en un DVD virgen mientras Dalia dormía, para ese entonces ya debían de ser dos, ya que solo llegaba a los 12 y Talía tenía 16 pero si hay segunda parte no la encontré.
Regresando al relato, luego de apagar y levantar todo, las palomitas ni las tocamos. Decidí sorprender a Dalia, por la espalda y la cargue como novio en lecho nupcial hasta la cama, recostándola en esta, para luego comerme su vagina con delicadeza disfrutando todos sus sabores, mientras la chupaba la punta de su vagina, luego recorría su raja delantera por fuera con la punta de mi lengua, luego la introducía dentro de esta mientras ponía mi lengua lo más firme que podía. Luego con el abrí su cavidad para introducirme en ella, lengüetear su interior, trate de alcanzar su punto G pero solo roce el borde pero lo hice con fuerza, mientras esto Dalia se estremecía y presionaba mi rostro a su entrepierna mientras gemía y me indicaba donde chupar con más fuerza, hasta que ella volvió a llenar mi boca con sus fluidos en un orgasmos.
Tras esto yo la puse de lado, abriendo sus piernas, (cosa que saque del video de Talía), llevando su tobillo izquierdo por encima de mi hombro. Luego la penetre alzando su pierna hasta quedar casi recta, yo entraba y salía de ella con fuerzas ella gemí ya sin apuros o miedos como nunca teníamos oportunidad, cuando me corrí ella me pidió el condón y nuevamente ella tomo mi semen. Dalia se me acerco coqueta diciendo lo mucho que le gustaba mi sabor, bajando a mi pene para darme una mamada de campeonato, al poco rato ya estaba al 100 (Lo vellos se ser joven y vigoroso jajaja), La puse en 4 y la penetre de perrito, es través no duramos mucho y nos corrimos juntos nuevamente, para luego compartir un 69 como al principio terminando ambos en la boca del otro, yo fue primero y ella unos minutos después.
Ya todos sudados, le dije a Dalia que caria cogerme en la tina. Por lo que llenamos la bañera de Talía, para luego entrar juntos, Dalia se colocó encima de mi dándome la espalda mientras con su mano dirigía mi nuevamente erecto pene a su cavidad, para penetrarla, el agua chapoteaba por nuestras embestidas desparramándose dentro del baño hasta que terminamos nuevamente, Dalia de recostó sobre mi mientras yo la abrase y de apoco mi miembro salió de ella. Ella metió las mano entre sus piernas para sacar el condón pero este desparramo mucho en la tina al llenarse de agua por la forma en que lo retiro, Dalia de decepción por el desperdicio, así que tomo lo que si alcanzo, meneando el semen entre su boca con su lengua por un buen rato asta tragarlo.
Nos aseamos, secamos y nos recostamos en la cama para disfrutar nuestra primara noche juntos como pareja, Dalia se quedó dormida entre mis brazos en un bello abrazo, yo también me dormite un rato. Ya en la madrigada con mi princesa en las tierras de Morfeo, con cuidado me salí de sus brazos me dirigí a la sala y termine de ver el video, intente hacerme una pasa pare la verdad ya no había combustible. Luego regrese a la cama y cuidadosamente me recosté junto a Dalia, ella se medió despertó preguntando adonde fui, le deje que al baño, por lo que ella, se volvió a recostar sobre mi brazo y se durmió nuevamente, lo mismo hice yo.
Al otro día nos levantamos como al medio día, yo en realidad me desperté por la mamada matutina que mi amada me realizaba, la llene con un poco de semen que ella disfruto, aun no estaba al 100 para continuar. Nos dispusimos a preparar algo para desayunar, cuando Dalia se empezó a vestir yo la abrace y la detuve –No amor quiero verte todo el día en calzones y madamas—Petición que ella acepto con un rostro sonrojado diciendo –Yo también quiero que estés encuerado para mí—cosa que también acepte, ambos estuvimos así casi todo el día, yo con las pelotas al aire y ella en sus calzones.
Durante el almuerzo ella se sentó desnuda en mi piernas mientras comíamos, para luego tener sexo en esa posición, mientras yo la penetraba, le jugueteaba la tetas ya que ella me daba la espalda, luego más en la tarde lo hicimos en el sofá de la sala y luego en la habitación, las sesiones se hicieron más cartas, pero las disfrutamos al 100%, la verdad yo quería coger en la cama de los papas de Talía, pero Dalia no me dejo hacerlo, tampoco en la habitación de su hermano, por cuestiones de respeto. El domingo en la mañana limpiamos todo empacamos nuestra basura, tome las bolsas y las leve a un parque cercano cuidado que no me vieran dejando todo dentro de las botes de este. Luego regrese con dalia y en bicicleta la lleve hasta su casa. Nos detuvimos en la esquina de a mañana para ver que sus padres no nos sorprendan y la deje a unas casas de la suya, nos dimos una despedida rápida con un beso. Me di la vuelta y regrese a casa, luego de cerciorarme de que Dalia entro a la suya.
Estas fueron dos relatos de como mi Novia Dalia cada vez tenía un morbo más grande cosa que me encantaba, la siguiente ocasión les relatare como pasamos nuestras segunda noche juntos, previo a la boda de mi hermana, cuando dalia se fugó de casa de sus padres. De nuevo les agradezco mucho por leer mis experiencias
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