Niñera
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola, mi nombre es Diana, vivo en Buenos Aires, soy abogada y trabajo en un estudio jurídico, ahora tengo 28 años, y soy una chica bastante común, pero bonita, delgada, menuda, cabello castaño y ojos color café, no soy muy alta y siempre me dan menos edad que la que tengo.
Esto que voy a contar no lo sabe nadie y me atreví a publicarlo como un desahogo. Me ocurrió cuando tenía 21 años, recién cumplidos, en esa época yo estaba estudiando abogacía en la U.B.A. y como soy de Olavarría trabajaba para poder pagar mi estadía, mis padres me ayudaban pero como no me alcanzaba me busque trabajo como niñera. Fue fácil conseguirlo pues tenía muy buenas referencias. Me contrato una familia de muy buena posición que vivía en San Isidro en una hermosa casa, muy grande y con un enorme parque con piscina, la Familia estaba compuesta por el papa de 40 años y la mama de 36, eran profesionales y viajaban a menudo, el papa trabajaba en una empresa de vigilancia y era ingeniero en electrónica, el niño que tenía que cuidar se llama Nicolás, tenía 10 años cuando empecé a trabajar, era hermoso! delgadito, muy rubio y con unos ojos grandes color celeste claro, su carita es preciosa y parece un angelito, Nos encariñamos enseguida, era muy dulce conmigo y muy afectuoso, además muy obediente, siempre estaba abrazándome y diciéndome que era la chica más linda que había. Parecía que quería complacerme y que yo estuviera encantada de estar con él, Yo lo veía divino! Lo mimaba como si fuera un hermanito chiquito,
Lo ayudaba con sus tareas escolares y mejoro muchísimo su desempeño, nos sentábamos a estudiar y el me prestaba toda su atención, sus papas estaban encantados conmigo, cuando viajaban los fines de semana, yo me quedaba a dormir, tenía una habitación muy bonita en el segundo piso que daba al parque. Esos fines de semana extrañaba mucho mi ciudad y a mi novio, yo salía hace 4 años con un chico de Olavarría, lo conocía desde que éramos chicos, nos llevábamos muy bien, hacíamos el amor cuando yo viajaba, varias veces me masturbe pensando en él, Cuando el día era lindo usábamos la piscina y jugaba con Nicolás en el agua, yo siempre pensaba que cuando fuera grande las chicas se morirían por él, era hermoso verlo con su cuerpito bronceado y en mallita, tenía una carita hermosa y bien de hombrecito, muchas veces cuando me decía que era hermosa, o dulce o muchas otras cosas lindas le decía riéndome que era muy guapo y que cuando creciera las chicas lo iban a perseguir! Él siempre me contestaba que solo me quería a mí! Y que cuando fuera más grande seria mi novio! Paso un año y lo quería cada vez más, cumplió 11 y unos meses después en diciembre un día, jugando en la piscina note que me abrazaba y me agarraba mucho, a veces lo llevaba en el agua montado en mi espalda, pero esa mañana Nicolás me tomo de atrás mientras se sujetaba de mi cuello, pensé que quería que lo lleve a caballito, me rodeo con las piernitas y se me apoyo en la cola! luego me agarro del pecho! Jugando y riéndose me dijo -te tengo atrapada!! Ya sos mía!!
A través de la fina tela de mi biquini sentí que Nicolás tenía una erección! Me apretaba las tetas mientras empujaba su vientre contra mi cola!! Sentía su pene durito! Solo tenía 11 años! Pero estaba excitado! Respiraba muy agitado en mi cuello! Se movía como si me estuviera cogiendo! Veía su carita hermosa mientras me sonreía! El pequeño estaba disfrutando mientras me frotaba el pito contra mi culo! El chiquito me estaba tratando de hacer el amor! Me quede muy sorprendida sin saber que hacer! no quería rechazarlo de mala manera y le dije despacito –Nicolás! Soltame, no juegues así! No me contesto solo me miraba intensamente con la carita contraída de placer! Se movía rápido mientras me empujaba con su pene! Comenzó a jadear! Me susurro -Diana! Te quiero! Y dio un gritito! no lo iba a dejar hacer eso conmigo! Lo separe dulcemente y mientras lo sujetaba de sus bracitos sentí como temblaba! Me miraba agitado y ansioso!
Le dije que no era un juego lo que hacía y que era muy chico para hacer eso! Pero ya casi tenía mi altura y era bastante fuerte para su edad, se burló y me dijo que si fuera más grande seria mi novio! Yo me reí y salí del agua, pero pude ver que seguía con su pito muy paradito! Me dio mucha ternura verlo así, excitadito! tan chiquito y con sus primeros impulsos sexuales! mi pequeño hombrecito! Era hermoso! Todo quedo ahí, pero me cuide de no estar tan cariñosa con Nicolás, trataba de que no me abrazara fuerte pues notaba que a veces se me frotaba! Parecía un perrito alzado! Sentía como se le paraba y temblaba excitado! Me di cuenta que ya estaba entrando en la adolescencia, seguro que ya se masturbaba y no quería que se excitara conmigo pues yo lo veía como a un niño y lo quería mucho.
A veces haciendo la tarea sentados juntos en la mesa notaba que estaba con una erección y me miraba ruborizado, me abrazaba y se ponía una manito sobre su pantalón! se daba cuenta que yo sabía lo que le pasaba! Y se sonreía con una mirada picara! Yo le acariciaba la cabeza y le decía sonriendo –tranquilízate mi amor! Concéntrate en la tarea! E l me contestaba con vos temblorosa –es que te quiero mucho! Un sábado sus padres viajaron y yo me quede a cuidar a Nicolás el fin de semana largo, pues el lunes era feriado, a la mañana Nicolás estaba jugando en el parque cuando sentí un grito! Fui corriendo y lo encontré tirado en el pasto, se había caído de un árbol y se había lastimado el brazo! Estaba gritando de dolor, lo ayude a levantarse y lo lleve a la clínica, le hicieron varias placas pero no se había fracturado, solo era un esguince lo vendaron para inmovilizarle el brazo derecho y la mano izquierda pues se quejaba de que le dolía mucho, le dieron calmantes y antinflamatorios, volvimos a casa y lo ayude a comer pues solo no podía, después del almuerzo tenía que bañarse pues estaba sucio y transpirado, lo acompañe al baño, me miro con vergüenza y me dijo –como voy a hacer para desvestirme y ducharme! –no te preocupes, yo te voy a ayudar. Se puso colorado! Mi bebe! le daba pudor que lo bañe su niñera,
Entramos al baño y comencé con cuidado a sacarle la remera, le dolía mucho y se quejaba, le saque con cuidado el cabestrillo, le desanude las zapatillas y se las saque junto con las medias, le baje el short y se dio vuelta, estaba rojo de la vergüenza, le saque su calzoncillo y se metió rápido en la ducha, se quedó dándome la espalda, me causo mucha ternura verlo desnudito, con su hermosa colita redondita! Tome el duchador y comencé a lavarle la cabeza, luego enjabone su espalda, le lave los cachetitos de la cola y las piernas, me dio placer frotar su piel, era muy suave, que hermoso varoncito era, después le pedí que se diera vuelta para lavarlo por delante, me dijo despacito –me da vergüenza, no quiero que me veas el pito! –no seas chiquilín! Yo soy grande y te tengo que lavar! A regañadientes se volteo, pude ver su pene, aun no estaba desarrollado como el de un hombre, pero era mucho más grande y largo de lo que me imaginaba, aunque todavía era infantil ya tenía sus primeros vellitos! Así como estaba, era un nenito precioso, y bien machito! Yo jamás lo había visto desnudo y me gusto! Era divino! lo notaba muy avergonzado,
Lo comencé a lavar, enjabone su pechito, su vientre y trate de limpiar su pene con suavidad, yo no era virgen y había tocado antes a un muchacho, además le chupaba el pene a mi novio, me gustaba hacérselo pues él lo disfrutaba, y me lo pedía, a mí me excitaba la sensación de dominio que sentía cuando yo lo controlaba, pero no lo dejaba acabarme en la boca pues no me gustaba, pero el de Nicolás me causo una sensación maternal, no lo podía ver como un hombre! Lo enjabone despacito, le pase jabón con cuidado por sus huevitos, su pielcita era muy fina y suave, sus bolitas me causaron una sensación de orgullo, mi pequeño hombrecito! Qué lindo varoncito era Nicolás! luego trate de correr la pielcita para lavarle la cabecita, me costó mucho descubrirla, estaba muy apretadita! Me preocupo que tuviera fimosis, yo sabía que muchos niños sufren de estrechez de prepucio y puede causar problemas, le pregunte despacio -Nicolás, te corres la pielcita para lavarte? -me cuesta mucho! Y si me la empujo me duele! Dijo despacito y con la vos temblorosa, Me sentía muy rara tocándole el pene a Nicolás, empuje con suavidad y de a poquito la deje destapada! La tenía muy roja! La pielcita le apretaba mucho la cabeza! Tenía el frenillo corto, Se le empezó a hinchar! Le pase con suavidad los dedos con jabón, y estando lubricada pude deslizarla más fácilmente, se la corrí de adelante a atrás hasta que sentí que se movía con facilidad! sentí como se le ponía durito, la volví a descubrir para lavarlo y lo enjuague con cuidado, se le paro! Me quede sorprendida! Lo tenía muy largo! Sentí como latía!!Era suave! Sin venas gruesas como el de mi novio! Me arrepentí de haberlo lavado ahí!
Me tomo de los hombros y tenso la barriguita! empujo su pito contra mis manos! Y se comenzó a frotar!! Nicolás dio un pequeño gemido! Lo solté y le dije – perdón! Te hice doler? – no! es la primera vez que una chica me toca el pito! Me gustó mucho! Me quede sin saber que decir, me ruborice! el me miro y me dijo con voz suplicante –Diana, me podes lavar más? se siente muy bien!! Límpiame la cabecita! nunca la pude destapar del todo sin que me duela! Me lo haces de nuevo? El chiquito se había excitado! Quería que lo siga tocando! Me di cuenta que no debí tocarle así su pito! Ya no era un bebe! -NOO!! Nicolás que decís? Estás loco! No te voy a hacer nada! Ya estas limpio! Y sos un niño grande! Me pidió suplicando –por favor Diana! no me podes dejar así! Vos hiciste que se me pare! – fue sin querer! Solo te quería lavar! –pero ahora estoy muy excitado! Y es culpa tuya! Por tocarme!! Hace que se me baje! –Nicolás, si estás muy excitado mastúrbate! Es lo que hacen todos los chicos! Te dejo solito y vuelvo en un rato! Con mucha vergüenza me dijo –no sé cómo hacerlo! y no puedo! Tengo lastimado el brazo! Además siempre me dolió la pielcita! Por favor no se lo voy a contar a nadie! No me dejes así! Solo un mimo chiquito! Por favor! Diana! Enseñame como se hace!!! Solo un poquito! Sos la única que me ayuda! Me suplicaba con angustia, con su carita hermosa de nene! Me miraba intensamente con sus grandes ojos celestes!
Estaba desesperado temblaba de la excitación! su pene le latía! No sé en qué pensé pero me conmovió! me dio pena que no supiera masturbarse! Lo vi tan infantil y desesperado! Y en cierta forma era mi culpa por haberlo tocado, no debí agarrar así su pene y descubrirle le cabecita! No imagine que podía pasar esto!! Lo mire y lo abrace! Tratando de que se tranquilizara y se le pasara la excitación, le acaricie la cabeza y le dije –tranquilo amor, no tengas vergüenza! ya se te va a pasar, trata de relajarte! Se te va a bajar solito! Yo lo quería muchísimo, pero no lo veía como un hombre! Y no lo iba a masturbar! pero seguía temblando y estaba con su pancita tensa! Su pitito seguía muy parado! Se le veía la cabeza afuera con la pielcita muy tensa! Me miro fijo con sus inmensos ojos celeste y temblando susurro –por favor! Diana!! No me dejes así! por lo menos córreme la piel! Me duele mucho!!! Me está latiendo! La tengo muy apretada y nunca me la puedo mover sin que me duela! Me asusto mucho dejarlo en ese estado! La tenía muy paradita y muy colorada! Y si su prepucio le cortaba la circulación? Y le pasaba algo a su pene? Se le había puesto roja como una cereza! pensé que podía taparle su glande y eso lo iba a calmar! que se relajara y se le bajara el pitito! –está bien, te corro la pielcita, Te muestro como se hace!
Tome su pijita con mis dedos, La tenía delgadita y larga, era suave pero estaba muy durita! nada que ver con la de un adulto, apenas tenía pelitos! Trate de correrle el prepucio, pero con suavidad para no lastimarlo, pero por más que empujaba no se le retraía! Se le puso más duro! Le empecé a mover despacio la piel mientras lo sujetaba con la otra mano, Nicolás dio un gemido! tenso el vientre! Y empujo con su pene! Jadeo despacio -Diana! Me calma! seguí! seguí! Comencé a masturbarlo despacito pues tenía miedo de lastimarlo! Sentía su pequeño pene latir en mi mano! Se me abrazo fuente y comenzó a gemir! Me daba besitos en la cara y el cuello! Jadeaba y murmuraba –Diana! Diana! Te quiero! Te quiero! Temblaba de la excitación! Me sentí muy rara haciéndole esto a Nicolás! Me recordó a mi novio cuando me pedía desesperado que lo pajeara o se la chupara! Sentía ternura pero a la vez me excite un poco viendo a mi Nicolás disfrutando del sexo por primera vez! Lo estaba estrenando yo! Era un niñito todavía y lo veía muy excitado! No sabía si ya podía acabar a esa edad, les salía semen a los nenes de 11 años? Sentí curiosidad y me dio mucha vergüenza el pensar algo así en ese momento! Lo masturbe más rápido para ver si le salía un poquito de lechita a Nicolás, por ahí así se tranquilizaba! Comenzó a gemir fuerte! jadeaba y murmuraba –Diana acariciame! Sos hermosa! Te amo! Pajeame más! Quiero acabarte encima!! Sácame la leche! Diana! Te quiero! Estaba como loco! La situación me estaba desbordando, Se puso tenso y sentí como se le contraía el vientre! Gimió y jadeo -Diana! Te amo!!
Me empujo fuerte el pene contra mi mano! sentí cómo se le corría el prepucio para atrás de golpe! Se le corto el frenillo!! Su cabecita quedo descubierta del todo! Dio un fuerte grito y le salto un chorro de esperma enorme! No podía creer que le saliera tanta leche! Tenía 11 años! Me salpico la mano y todo el pantalón! Le sostuve el pene y siguió lanzando chorritos de semen! Se sacudía mientras gemía! Tenía su hermosa carita contraída de placer! Se quedó temblando abrazadito dándome besitos en el cuello! Su pene se fue bajando despacito y le apreté despacio su pija hasta que le saque las gotitas de leche que le habían quedado, pude correrle la pielcita con facilidad!! Note un poquito de sangre! Su prepucio se había soltado!! Ahora se deslizaba más fácil! Me sentí excitada! Mi nenito había eyaculado como todo un hombrecito! Y era su primera vez! Le había roto el frenillo! Como si le hubiera rasgado el himen a una nena! Sentí un placer morboso!! También mucha vergüenza por haberle hecho eso un nene de 11 años! Lo separe, no podía mirarlo a los ojos! Lo enjuague y lo seque despacio, se quejó un poquito, le salía sangre de su prepucio! Le puse una pomadita con antibiótico y cicatrizante, el me miraba con amor! me abrazo y me dijo despacito –Diana, te amo! nunca sentí algo así! Es lo mejor que me paso en la vida! Solo le di un beso en la carita y lo abrase, ya no sangraba, lo vestí y lo acompañe a su dormitorio, lo acosté y antes de salir me dijo –Diana sos lo más! Te quiero mucho! Nunca antes había sentido eso! Fue hermoso! –yo también te quiero Nicolás pero esto estuvo muy mal, soy tu niñera y no debí hacerte caso! No sé cómo me convenciste! Ahora ya sabes cómo masturbarte, así hacen los chicos, tendrías que haber aprendido con un amiguito, pero es algo privado y muy íntimo, tenes que hacerlo cuando estas solito! no tengas vergüenza pues todos los nenes y nenas lo hacen, es normal que quieras aprender, pero no conmigo, no se lo podemos contar a nadie! Estuvo muy mal que yo te enseñara esas cosas, mejor lo olvidamos. Me guiño un ojo con picardía y me dijo -Diana! Va a ser nuestro secreto! Y se dio vuelta para dormir.
Fui al baño a lavarme y me saque el pantalón, estaba lleno de semen! me puse una pollera, no podía creer lo que había hecho! Había acariciado a Nicolás! Le había tocado el pito mientras lo lavaba y lo había excitado! Y lo masturbe hasta hacerlo eyacular! Le había cortado el frenillo haciéndole la paja! Era un niño! lo habían dejado a mi cargo! Todavía recordaba su carita de placer mientras acababa! Me había llenado la ropa con su semen! Estaba arrepentida y muy asustada! Si se enteraban los padres me iban a denunciar por abuso! Me dio mucho miedo pensar en lo que me podía pasar y en lo que dirían mis padres y mi novio! Pensé en hablar con él y pedirle perdón y que entendiera mejor, y que estaba muy mal que yo le hiciera o le enseñara cosas sexuales, todavía no entendía como me había puesto en esta situación, estaba confundida, pues lo recordaba acabando en mi mano y me causaba un raro placer! sería una pervertida acaso? A la tarde fui a despertar a Nicolás para que tomara la merienda, dormía como un angelito, lo acaricie para despertarlo, me sonrió y me abrazo despacio, me pidió que lo lleve al baño, pues seguía vendado, lo acompañe y le baje el short y su calzoncillo, hiso pis pero se quejaba y me dijo –Diana me duele mucho! Me pones más pomadita? No supe que hacer, no quería agarrar su pene de nuevo, pero no podía dejar que le pasara algo a su pitito y tener que llevarlo al médico, que le iba a decir! Tome la pomada y le corrí la pielcita, su cabecita estaba muy bien y solo tenía una pequeña marquita, le puse crema y se la cubrí rápido, sentí como se le empezaba aparar! –Nicolás! Tranquilito! Mi amor! Le subí rápido su ropa y salí del baño, fui a la cocina a hacerle la merienda, entro con una carita feliz y me miro con complicidad, el resto del día paso en forma normal solo que me miraba y me sonreía con cariño, me dijo muchas veces que me quería, yo me quede mucho más tranquila al ver que lo tomaba así, que no hablara del tema y que no me pidiera que le ponga pomada o que lo acaricie.
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