No temas, yo te cuido… por bi1596
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por bi1596.
Son las 20:00h de una fría noche de invierno. Me dispongo a bajar la persiana. Salgo y le doy al mando. No hay nadie en la calle y está empezando a lloviznar. Tengo que agacharme para quitar los cerrojos de seguridad y ponerlos abajo: me quedo en cuclillas. De repente noto un aliento en mi nuca… y un susurro en mis oídos: “no temas, yo te cuido…” Le doy al mando otra vez y la persiana se para.
Entonces me invaden los escalofríos, me giras y me miras a los ojos. Veo los tuyos clavados en mi mirada y te acercas. Me levantas la barbilla con tu mano, me besas sin dejar de mirarme. Un beso lento, dulce.
Tus manos rodean mi cintura, suben por mi vientre y bajan por mis hombros y espalda. La paz que me haces sentir se torna calor, ansiedad, sed de ti. Nuestras lenguas se aceleran cada vez más. Hacía demasiado tiempo que no nos volvíamos a ver. Tu boca recorre mi cuello reconociendo cada milímetro, RECORDANDO cada milímetro. Mi mano izquierda acariciando tu nuca, la derecha tu pecho. Te desabrocho la camisa. Me encanta como hueles. Tus manos rodean mi cintura, me aprietan contra ti y tú me aprietas contra la pared. Me agarras las manos, las levantas y apoyas en la pared mientras me besas más y más. Coges las 2 manos con una sola tuya y con la otra me quitas la pinza del pelo dejando que éste caiga sobre mis hombros. Mi espalda se arquea. Se oye un trueno no muy lejos, empieza a llover con fuerza. No nos movemos ninguno de los 2, parece que no va con nosotros. El agua resbala por nuestras caras. Tus manos, que me agarran con más fuerza que nunca, me van liberando poco a poco y van bajando por mis brazos hasta mi cara. No has parado de besarme desde que has llegado, y eso me encanta. Introduces una de tus manos bajo mi sueter, llegas al sujetador, me acaricias el pecho y lo liberas.
Mientras tu otra mano me agarra del pelo y tira de el para arquear mi cabeza y dejar mi cuello al descubierto. Así puedes morderlo más fácilmente. Me subes el sueter. Entre el frío, la lluvia y tus caricias mis pechos están durísimos. Me los besas y te los comes mientras yo recuerdo cuando fue la última vez que lo hiciste.
– Aquí no, todavía queda gente por la calle.
– Vamos donde tú me digas Bombons – me dices-
– Ven. Cada vez que he pensado en ti he pensado en hacerlo en el lugar a donde te llevo. Me da igual que diluvie y haga frío.
Te cojo la mano, te pego contra mi y echo a andar. Estamos empapados los dos, ya no importa si nos mojamos más aún.
– Son sólo 2 calles.
– La playa??? – preguntas-
– Si, la playa. El mar estará precioso ahora.
Y es cierto. A la que llegamos a la avenida de delante el rugir del mar ya se oye. Ha dejado de llover por un momento. Vamos a las dunas. Me tumbo en la arena mojada y te traigo hacia mí. Te recuestas a mi lado, tu mano derecha acariciándome la cara, tu boca comiéndome la mía, tu mano izquierda metiéndose bajo mi sueter y jugando con mis pechos. Baja un poco hasta mi pantalón, desabrocha el botón y baja la cremallera. Mis caderas se elevan invitándote a seguir por mi Monte de Venus. Tus dedos notan lo excitada que estoy y yo me dejo hacer. Mi respiración se acelera y noto la tuya en mis pechos.
Tu lengua recorre mi vientre bajando poco a poco hasta llegara mi coño. Con el frío que hace y siento que me ardo por dentro!! Me ayudas a quitarte los pantalones. A través de tu boxer se nota lo excitado que estás. Meto mi mano y cojo tu polla. Estas completamente empalmado y dejas escapar un gemido. Me encanta ese sonido. Nos besamos con pasión mientras mis manos juegan con tu polla y tus huevos y las tuyas con mi clítoris y mis tetas. Las aprietas, empiezas a chuparlas, a comertelas y diriges tu lengua a mi coño. Estoy completamente mojada. Empiezas a lamerlo, despacio mientras con tus manos me coges el culo. Yo aprieto tu cabeza con fuerza para notarte más y más dentro. Pones la lengua dura y empiezas a follarme como un loco.
Me gusta así, me gusta verte loco de pasión, y lo sabes, y disfrutas haciéndome sufrir de placer. Mis gemidos son cada vez más fuertes, quieres que me corra con tu lengua y no voy a tardar mucho en hacerlo. Juegas con mi clítoris y mi espalda se arquea de nuevo, me coges suavemente y me giras. Me dejas a 4 patas sobre la arena y mi pantalón y mis bragas a un lado. Me das un cachete al culo. Como te gusta eso… Tus manos agarran mi culo con fuerza. Lo lames, metes la lengua poco a poco, ya no me aguanto los gritos de placer. Tu mano derecha juega en mi coñito empapado, mi clítoris, mis labios, lo recorres todo, lo acaricias todo y tu lengua sigue dándome placer.
Y sigues, cada vez más fuerte.
Cuanto más gimo y grito más fuerte la metes. Noto tu dedo gordo abriéndose camino en mi culo, despacio y cuando mi agujero esta dilatado para ti empiezas a meter tu polla. Pequeños vaivenes para hacerla entrar hasta el fondo, hasta que tus huevos chocan con mi culo. Me follas el culo con fuerza, me agarras del pelo y tiras de él para besarme. Mis jugos todavía están en tu boca y los compartes conmigo. Sigo gimiendo con más fuerza. Los gemidos se vuelven gritos de placer. Tus manos juegan con mis pezones, los pellizcas, me besas la nuca, me lames el cuello. Me embistes cada vez más fuerte y grito cada vez más alto hasta correrme. Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!! La sacas de golpe y la vuelves a meter y repites las embestidas varias veces. Creo morir de placer. El mete y saca me está volviendo loca. La dejas fuera y en un momento metes tu cabeza bajo mi coño, apoyada en la arena y empiezas a comérmelo de nuevo mientras tus manos agarran mi culo. Ooooooooooooooooohhhh!!!!! Juegas con mi clítoris, lo rodeas, le das golpecitos, lo chupas, lo succionas, lo lames, lames todo mi coño, voy a correrme otra vez!!! Siiiiiiiiiiiii!!!!! Empujas mi cuerpo hacia abajo y me comes la boca. Pruebo mis fluidos en tu boca. Tu lengua jugando con la mía, retorciéndose, me muerdes la boca mientras introduces de polla dentro de mí.
Empiezo a cabalgar sobre ti. Mis pechos suben y bajan siguiendo mi ritmo. Tu los agarras con fuerza y los llevas a tu boca. Te gusta morderlos y pellizcarlos, te gusta lamerlos. Me levanto un poco y saco tu polla. Me vuelvo a sentar entra de golpe. Lo repito varias veces, tu respiración se acelera y tus gemidos me ponen más cachonda si cabe. Empiezo el mismo juego que tu de mete y saca.
Me tumbo a tu lado, mi cuerpo recostado en la duna y te pido que me folles la boca. Abro la boca para que me la meta hasta el fondo y cierro los labios haciendo presión sobre tu pene. Te cuesta sacarlo y lo vuelves a meter. Mis manos juegan con tus huevos y a la que la sacas de nuevo la agarro con ellas. La levanto y te lamo los huevos, los chupo despacio mientras mis manos te hacen una paja. Tienes la polla completamente tiesa. Me la empiezo a comer como si fuera un chupa-chup, es lo que más me gusta. Paso mi lengua por su rajita y cierro mis labios entorno a ella. Succiono. Tu gritas de placer. Me gusta oirte así. Noto tus venas que se van hinchando, me la meto en la boca y sigo comiéndotela, jugando con mi lengua hasta que te corres:
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhh!! Tu leche me llena mi boca, chorrea por la comisura de mis labios y la recojo con los dedos para volver a metérmela en l boca. No quiero derramar ni una gota de ti. Te chupo y te lamo hasta dejarte seco y bien limpito. Caes a mi lado. Te beso suavemente para que pruebes tu propia leche. Te abrazo y recuesto mi cabeza sobre tu hombro: “TE NECESITABA MARQUESADE, MAS DE LO QUE IMAGINABAS, NECESITABA ESTO, NECESITABA TENERTE COMO TE HE TENIDO MARQUESADE DE BI”. Tu me miras y sonries. Te acercas a mi y me susurras: ”No temas, yo te cuido”
A MARQUESADE: Espero que no te importe que te plagie tu última frase 😉 y que disfrutes como yo disfruté el tuyo.
Al resto… espero que disfruteis igualmente 😉
Bi1596
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