Padre e hija adictos al exhibicionismo

Poco a poco nos arriesgamos a mas cosas con mi pequeña hija de 9 años.
Viendo que mis últimos relatos tuvieron apoyo seguiré contando mas de mis historias junto a mi niña.

Teníamos una relación espectacular, mucho sexo y esa niña poco a poco se volvía mas atrevida, algo despertaba en ella, ya no era la niña tímida que crie, estaba cambiando, aunque para muchos padres seria escandaloso que su hija se convierta en una putita, a mi me fascinaba yo ya no la veía solo como mi hija era mi novia y la única mujer con la que queria hacer el amor.

Ella también estaba muy enamorada de mí, a pesar de ser tan pequeña ya hablaba de casarnos y tener hijos, aun no entendía que siendo padre e hija biológicos eso era improbable, pero se preocupaba mucho por mí, ella queria aprender a cocinar y hacia todo en la casa, queria ser una buena esposa, su inocencia me cautiva y solo hacia que mi amor por ella crezca.

También se hacía más atrevida, empezó a dejar de vestir como sus amiguitas y mas bien queria lucir su cuerpo, buscaba tops y faldas cortas, incluso me pregunto si había lencería para niñas de su edad, ella sabia que me encantaba que camine muy atrevida y se robe miradas, al final que otros hombres deseen a mi hija me excitaba demasiado porque sabia que esa pequeña vagina era solo mía.

Esa niña crecería mas hermosa que su madre, estaba seguro de eso, con 9 añitos ya se notaba su belleza, siempre donde iba se robaba miradas incluso dentro su colegio despertaba ciertas cosas, varias peticiones de noviazgo de chicos mayores, pero ella siempre rechazo a todos, era solo mía y lo tenía muy claro.

Y el sexo era lo mejor, su vagina apretaba como no se pueden imaginar, mi pene es de un buen tamaño y para su pequeño cuerpo queda grande, me encanta penetrarla y ver esa vagina bien abierta, cuando veo los videos que grabamos, se puede notar lo grueso de mi pene a lado de esas delgadas piernas, es de las mejores sensaciones de la vida sentir una vagina tan apretadita y ella lo sabe así que mientras hacemos el amor aprendió a contraer su vagina y apretar mi pene, a pesar de estar muy mojada entra con dificultad y realmente me encanta sentirla así, algunas veces termina dolorida no mentiré y cuando lo hacemos muy fuerte llegue a lastimarla un poco, pero esa putita disfruta de eso, los mejores orgasmos que tuvo fue cuando mas duro la penetre, a pesar que luego le dolería ella lo disfrutaba.

Aprendió a provocarme, sabe que eso me encanta cuando me muestra su vagina en publico debajo su faldita me prende como no se imaginan y es por eso que ella disfruta hacerlo, sabe que mientras me provoque más rico será el sexo y a pesar de su corta edad se vuelve adicta al sexo, es muy raro que estemos un día sin hacerlo, la puse a prueba para ver si yo la obligo o si enserio ella lo desea tanto, no mostré nada de interés en penetrarla, pero alli toma la iniciativa provocándome en exceso porque su pequeño cuerpo desea pene, siempre dormimos juntos y alguna vez me desperté con esa niña frotando su vagina contra mi pene estando dormido, esas acciones solo llevan a que la penetre con más fuerza.

Pero ante todo seguía siendo una niña varias veces la encontré jugando con sus muñecas o me pide que le compre juguetes, incluso habla con su amiga de cosas que cualquier niña de su edad lo haría, ya me pidió comprar kit de maquillaje para niñas así que estoy seguro será una putita, es una relación muy extraña sigue siendo mi niña consentida, pero ambos nos tenemos deseo y llegamos a tener sexo muy increíble y al terminar vuelve a ser la niña que tanto amo.

Bueno esta historia comienza así, nuestra vida seguía su rumbo normal, mucho sexo y algunas veces lo hacíamos a la salida o al ingreso de su colegio, el lugar no importaba, dentro del auto o en plena calle, pero si salíamos de casa ella queria tener mi semen dentro de ella si o si, según sus palabras así sentía que éramos novios y nos amábamos, su profesora me llamo a una reunión donde me explico que ella se volvió más social, empezó a ser la mas popular de su salón y que yo era un gran padre, pero al mismo tiempo me pidió tener cuidado porque físicamente es muy hermosa y seguramente varios hombres lo notaran, me sugirió conseguir una imagen materna que la ayude y guie en su crecimiento, lo cual negué rotundamente ella y yo solos vivimos muy bien y todo lo que consiguió fue sin necesidad de ninguna imagen materna, su profesora estaba orgullosa de ella, pero se la notaba algo preocupada, quizás sospecha algo o también quizás mi hija hizo algo que no debia, pero esa señora es alguien de quien debemos tener cuidado.

A la salida ya la esperaba con un regalo por las el crecimiento como mujer que estaba teniendo, un peluche que sabia deseaba tanto, justamente se había estrenado una película de ese personaje y ella queria ir a toda costa, lastimosamente los cines estaban ya llenos y era imposible conseguir un buen lugar, así que le prometí que un día le haría faltar a colegio e iremos en un horario poco común, así encontramos lugar, me encantaba verla feliz, su inocencia llenaba mi vida de felicidad, esos momentos era mi hija y no la miraba con deseo o lujuria, la miraba como mi niña y me encantaba su sonrisa eso me daba fuerzas para seguir.

Esa noche ella me devolvió el regalo y se me entrego como nunca antes, mientras cenábamos, fingió que hizo caer su cuchara y me dio una sorpresa mientras comía, gateo hasta mí, bajo el pijama y comenzó a chupar mi pene, era la primera ves que intentaba algo así pero sentir su pequeña boquita era fascinante, ver su pequeña boquita completamente llena por mi pene fue demasiado para mí, se notaba su inexperiencia, porque me mordía, solo la cabeza de mi pene casi llenaba esa pequeña boquita, con ambas manos agarraba mi pene y trataba de meterlo más aun, sentir eso fue increíble, no lo hacia bien pero el simple hecho de que lo intentaba me fascino, a media chupaba se detuvo y me dijo:

Jessy: Lo hago bien papi

Yo: como aprendí a hacerlo tan bien mi niña

Jessy: vi unos videos y decían que a los hombres les encanta que se lo chupen

Yo: no pares mi amor, quieres tomar la leche de papá

Jessy: Si, porfa quiero tomármela toda.

Escucharla decir eso me excito más, agarré su pequeña cabeza con ambas manos y comencé a penetrarla mas adentro, estaba con los ojos llorosos porque segundamente lo metí muy adentro, pero no me importo seguí haciéndolo así, hasta que finalmente sentí que estaba por acabar, ella lo noto, esa putita ya sabia cuando iba a correrme, mi pene comienza a palpitar y luego el semen saldra.

Saco un poco mi pene hasta que solo la cabecita este dentro sus labios y alli empecé a botar el semen que tanto queria, sentí unos 7 chorros de semen salir directo a esa pequeña boquita y al sacar mi pene le dije “no te lo tragues muéstrame primero”, abrió su boquita y pude verla llena de semen no dejo caer ni una gota, así que solo le dije que se lo trague y ella comenzó a tragar todo ese semen, lo hizo con dificultar pero muy rápido llego a comerlo todo, se limpio los labios con su brazo y me mando una sonrisa increíble, abrió su boca para mostrarme que se lo trago todito y yo me sentí orgulloso de mi hija y con mas ganas de hacerlo, se puso de pie y metí la mano dentro su ropa, al acariciar su vagina la sentí muy mojadita ella tuvo un orgasmo estba seguro de eso, yo ya estaba muy excitado así que le dije “ahora te daré lo que quieres”, la cargue en mis brazos y ella se sujeto de mi cuello, camine así a la sala y apague la luz, ella solo queria ser penetrada pero yo ya estaba fuera de mi mismo, queria adrenalina, la deje caer en un sofá que queda junto a la ventana que da a la calle, alli la hice poner en 4

Jessy: Papi acá nos van a ver la ventana da directo a la calle, nos pueden oír

Yo: Mi niña yo no te pregunte, si quieres hacerlo será acá.

Jessy: Perdón papi yo solo hago caso

Yo: Ahora por ser desobediente será así (mientras abro las cortinas para quedar al descubierto)

Jessy: Cuidado hay gente caminando

Yo: Sigues quejándote

Jessy: Disculpa, papi no me quejare de nuevo has lo que quieras conmigo.

Y efectivamente había gente caminando por la calle frente a la casa, pero apague la luz, al menos el manto de la noche nos protegería un poco (eso espero). Procedí a desnudar a mi hija y a desvestirme, si hiciéramos algo loco mejor hacerlo bien, al final si nos descubren ya no importa como estemos, agarre mi celular y comencé a grabar, siempre me encanta tener recuerdos de todo lo que hacemos y ver esos videos junto a ella es lo mejor, hace que nos excitemos de inmediato y queramos hacer cosas aun mas atrevidas, con la otra mano agarre mi pene y lo acomode en la entrada de su vagina ella intentaba ocultar su rostro en el sofá, agarre su cabello y lo estire un poco, ella levanto su cabeza de inmediato y la obligue a apoyar sus manos en la ventana, en ese momento luego de esa mamada, estaba tan excitado que queria que nos vean, ella estaba asustada, en el reflejo de la ventana pude ver su cara de miedo.

Empecé a meter mi pene dentro de ella, despacio queria que lo sienta y disfrute, por suerte nuestra casa estaba alejada de la ciudad, una comunidad sin edificios ni tantos ajetreos, calle completamente vacía donde solo conducíamos los vecinos del lugar, pero igual no era muy tarde y de rato en rato gente caminaba por la calle.

Cuando mi pene iba por la mitad, lo saque despacio y luego di vía libre al desenfreno metí de golpe todo mi pene, sentí el fondo de su vagina y aun no entro todo mi pene, comencé a penetrarla duro, mientras golpeaba su útero con cada metida, ella gritaba de dolor, incluso me pidió parar, creo que estaba siendo muy brusco, pero no me importo mucho sujete su cabello con la otra mano para que levante bien la cabeza, queria que la vean bien a esa niña de 9 años que estaba siendo penetrada, mientras con la otra mano grababa en primer plano como mi pene entraba dentro esa vagina, no podía prender la linterna del celular, eso nos delataría de inmediato, pero con la luz de la luna y la luminaria de la calle era suficiente para grabar bien cada metida que le daba, no la solté mientras la penetraba y poco a poco vi en el reflejo de la ventana que esa carita de dolor y miedo se convertir en la mirada que me encantaba, de una puta dispuesta a todo, sus quejidos de dolor pasaron a ser gemidos de placer y cuando estábamos en la mejor parte vi una familia caminar por la calle de en frente, eran nuestros vecinos de a lado, la distancia era muy corta y seguro nos verían yo me detuve, porque a pesar de las fantasías que teníamos, tener a gente conocida tan cerca me asusto, pero mi niña comenzó a mover sus caderas haciendo que la penetración no pare. Solo escuche esas palabras “Porque paras, tu quieres que nos vean o no” y tan solo oír esas palabras de mi hija volvió la lujuria a mi cuerpo, comencé a penetrarla mas fuerte aun, ella no ocultaba sus gemidos, con el celular grabe a mis vecinos pasar por frente a mi casa aunque en el video se los veía un poco lejos, estaban muy cerca de nosotros, solo la calle y el patio delantero nos separaban si llegaban a escuchar el minimo gemido de mi hija se voltearían a ver y ella parecía notarlo así que no oculto esos gritos de placer, finalmente pasaron de largo, no se voltearon para ver nuestra casa.

La carga de adrenalina que recorrió mi cuerpo fue demasiada, esa sensación fue algo increíble, me hacia adicto a eso, se que es muy pero muy peligroso, pero al mismo tiempo es como una droga, la adrenalina junto a la excitación producen una sensación de placer difícil de explicar y mi hija también la sentía porque cuando paso ella sentí su vagina más mojada aun, quizás estaba teniendo un orgasmo, eso me encanta, sentir a mi hija correrse por el pene de su propio padre me encanta, seguí penetrándola solo un momento mas cuando ya no resistí, metí mi pene lo mas adentro que pude y comencé a terminar otra vez, llenar esa vagina es lo mejor del mundo, su cuerpo es tan pequeño y mi pene queda enorme a su lado, pero aun así le entra todo, ella dio un grito de placer al sentir mi semen y juntos tuvimos un orgasmo muy rico, caímos rendidos y dormimos en ese sofá alli mismo, ella se dio la vuelta y quedo acostada sobre mí, la muy putita se metió nuevamente mi pene y dormimos así.

La historia podría acabar acá, pero al día siguiente nos pusimos muy locos así que mejor se las cuento acá mismo, yo me levante antes que ella así que fui a preparar el desayuno vi que a las 10 am la película que tanto queria ver estaba en la sala casi vacía, así que luego de semejante noche se merecía un premio, reserve los asientos y llame a su colegio para avisar que ella se faltaría esa mañana, ella se despertó y vino somnolienta a la cocina

Jessy: Perdona papi me quede dormirá, estoy un poco adolorida (luego sonrió)

Yo: Tranquila te olvidas del colegio

Jessy: Ay cierto, prepara el desayuno porfa yo iré a ducharme y me alisto rápido

Yo: (le muestro el celular con la reserva) y si mejor nos vamos a esto, ya llamé a tu colegio para avisar que te faltarías

Jessy: (Sus ojos se abrieron como platos) Es enserio papi

Yo: Claro mi niña te mereces un premio por ser la mejor hija del mundo

Ella solo me abrazo mientras daba saltos de felicidad, fue corriendo a cambiarse para ir a ver la película que tanto queria, tan emocionaba estaba que ni si quiera desayuno y solo me hablaba de la película, el camino al cine fue divertido, ella recordó que es una niña y solo me hablaba de la película y todo lo que vio en tik tok y redes sociales, entramos y ella fue corriendo a los asientos, el cine estaba vacío para nuestra suerte solo una 10 personas compraron boletos para esa hora, así que le sugerí mejor vámonos más arriba desde alli veremos mejor, ella emocionada acepto y nos fuimos a otros asientos, al final con la sala tan vacía nadie reclamaría esos lugares.

Yo se que algunas salas tienen cámaras de seguridad y no sabia si esta era una de esas, así que debia controlarme, aunque tenga muchas ganas este lugar era muy peligroso, podíamos quedar grabados, además estaba por mi hija y ese día era solo para ella, la película empezó y en la sala habían unas 8 personas a parte de nosotros, solo familias con niños, la película ya estaba demasiado tiempo en salas y era de esperarse que estaría tan vacía, además esa hora no era muy común para ir, solo abrece a mi hija mientras veíamos la película nadie sospecho jamás solo éramos un padre e hija como cualquier otro disfrutando de un día juntos, casi 30 minutos de película ya pasaron y mi hija estaba un poco decepcionada, su amiga le aviso que no era muy buena, pero ella no le hizo caso al final termino dándole la razón, yo la verdad estaba aburrido un humor muy infantil para mi gusto, pero hacia esto por mi niña.

Mi hija dejo de reír como al inicio, los otros niños disfrutaban porque eran mas pequeños, fue alli cuando mi hija intento abrazarme y su mano roso mi entrepierna, yo no se porque pero estaba excitado con el pene duro, quizás porque para distraerme comencé a recordar lo que hicimos la noche anterior, pero mi niña lo sintió así que casi en un movimiento natural comenzó a pasar su mano por mi pene una y otra vez, se apego mas a mi y sus caricias eran mas fuertes y directas, eso solo provoco una erección más fuerte, ella lo notaba y sentía, no decía ni una sola palabra, tampoco me miraba, solo hacia lo que su instinto queria, sin aviso abrió el cierre de mi pantalón y con esfuerzo saco mi pene y lo deje al descubierto, estaba parado y duro y ella solita comenzó a acercar su boquita a mi pene y lo chupo, ese rato me dio mucho miedo porque no sabía si habían cámaras en la sala y también teníamos a gente cerca familias enteras viendo la película, pero a mi niña ya no le importo solo chupaba mi pene.

Al igual que el día anterior se notaba su inexperiencia, aunque intentaba cosas nuevas moviendo su lengua, yo me sentía en el cielo, aun no detalle pero ella vino al cine con una faldita cortita y un calzoncito rosa floreado, típico de una niña, yo se que ella no tenía la intención de hacer esto por eso vino así, además una falda tan corta es casi obligatorio llevar ropa interior, con mi mano comencé a acariciar su culito mientras me chupaba, levante su faldita y metí la mano dentro su calzón y comencé a acariciar ese culito pequeñito, fue riquísimo mi mano llego a su vagina y la sentí ya mojadita lista para ser penetrada, ella seguía chupando y yo empecé a acariciar su pequeña vagina, la sensación de ser vistos me encantaba y poco a poco ambos dejamos de tener miedo por lo que hacíamos, fue cuando en una de esas ya no aguante todo era demasiado rico y sin avisarle comencé a botar mi semen en su boquita, sentía como ella tragaba cada chorro, estaba en el cielo llenando la boca de mi hija con mi semen en un cine con gente cerca, al acabar fue la primera ves que miro desde que inicio la película y solo vi una sonrisa enorme y esa frase que me encanta oír “saca tu celular papi”.

Comencé a grabar, estaba oscuro así que la linterna fue obligada, eso nos delataría aún más, pero nuestros cuerpo ocultaban un poco la luz, ella se levantó y se acomodó, yo me recline todo lo que pude en ese asiento del cine, la posición era incomoda, pero la verdad no me importaba, no podía creer lo que estaba por hacer, mi hija solita se subió sobre mí, de espaldas, y con una mano sujetaba mi pene, mientras la otra hacia a un lado su ropa interior y comenzó a metérselo solita, esa niña ya sabia muy bien lo que hacía, ya no sentía miedo como las primeras veces, ella sabia como hacerlo y no tenía miedo alguno.

Mi pene empezó a entrar en su pequeña vagina, aunque este mojada siempre es difícil de meterlo, es muy apretadita y la entrada es lo mas difícil, debemos hacer un poco de fuerza, solo así logra entrar, una ves la cabecita pasa la entrada el movimiento es mas fácil, pero no deja de apretar ni un solo segundo, así que grave como penetraba a mi propia hija en una cine con gente cerca de nosotros, levante su faldita para verla mejor y era riquísimo, fue la primera ves que lo hicimos con su ropa interior y ver ese calzoncito floreado claramente de una niña en una cuerpo tan pequeño lo hacía más morboso aun, así que una vez mi pene entro ella solita empezó a moverse, con la otra mano tome tu cintura para ayudarla y empezamos a hacer el amor, de raro en rato escuchábamos risas de la gente, ella tapaba su boca con una mano y con la otra se apoya del asiento de enfrente, para no perder el equilibrio, yo comencé a mirar alrededor buscando cámaras, pero no vi ni una eso me tranquilizo un poco pero sabía que las cámaras de los cine no son tan obvias solo estan bien ocultas, levante mas su falda, si alguien podía vernos queria que nos vea bien, sus movimientos no paraban y era muy rico ver como esa pequeña vagina recibía todo mi pene, ella trataba de sacarlo todo lo que podía, así cuando bajaba sentía cada centímetro de mi grueso pene, sus gemidos ya eran difíciles de ocultar, yo mire a la gente que estaba frente  a nosotros, obviamente estaban debajo y fácilmente nos podían ver, fue una sensación demasiado excitante para ambos, yo y mi hija haciéndolo frente a tantas personas, sin protección alguna, cualquiera que voltearía nos vería claramente, a una niña de 9 años montar el pene de un hombre mayor, ella igual disfrutaba cada momento, porque sus movimientos se hacían más rápido y al mismo tiempo evidentes, con una mano agarre su cintura y la bajaba con fuerza, para que lo sienta bien dentro de ella, apenas podía ocultar sus gemidos y en un arranque de placer, levante su top, aun no tenia senos, solo unos botoncitos que parecían limones, pero eran muy sensibles, quedo con sus senos de niñas al descubierto , comencé a acariciarlos y sus gemidos fueron mas fuertes, dio un grito, hasta yo lo escuche y estoy seguro que alguien mas lo escucho, pero por suerte o desgracia, nadie se volteo a ver, todos estaban muy concentrados en la película, la adrenalina estaba en su punto mas alto, estaba teniendo el mejor sexo de la vida, así que seguimos haciéndolo, no tengo idea cuanto duramos, pero fue increíble.

Ella no paro ni disminuyo el ritmo, aunque era muy pequeña mi hija ya tenía muchas energías y no paraba por nada, fue en una de esas que moví mis caderas y le metí mi pene con fuerza soltó un gemido que nuevamente alguien debio oír y alli sucedió algo que temía, mire a la gente debajo de nosotros y un niño volteo a vernos, el brillo de la pantalla hizo obvio darnos cuenta que nos estaba viendo, no estoy seguro si podía vernos, al final estaba oscuro todo, susurre al oído de mi hija “mira alguien te ve” y ella se percato de lo mismo, se detuvo un instante y volví a susurrarle “quiere verte enserio vas a parar” al oír eso ella volvió a moverse, sentí su vagina muy mojada estoy seguro que tuvo un orgasmo ese momento, pero no se detuvo, el niño siguió viéndonos un parte de segundos más, no paramos todo ese momento, cuando finalmente volvió a ver la película, nuestros corazones latían a mil, quizás ni nos vio bien y seguramente ni si quiera entendió  que pasaba, pero la sola idea de que alguien nos vio, llevo la excitación a otro nivel, así que comencé a llenar esa vagina nuevamente, con el semen de su papá, ella al sentir mi semen dejo caer todo su cuerpo sobre mí y comenzó a jadear muy agitada, yo baje su top y cubrir esos senos, finalmente acabamos, la acomode bien y grabe como saco mi pene de su vagina, apenas salio y una gran cantidad de semen salio junto a mi pene, acomodo su ropa interior y la dejo así, con toda mi leche manchando esa vagina de 9 añitos, se sentó a mi lado nuevamente y solo nos acomodamos fingiendo que nada paso, ese momento el padre del niño que nos vio se volteo a vernos junto al niño, golpee el pie de mi niña y ella entendió lo que pasaba, solo miro la pantalla fijamente y soltó una gran risa cuando paso una escena de comedia, vi al padre voltearse y regañar a su hijo, seguramente el niño le dijo algo, pero al vernos todo normal el padre no le creyó, si demorábamos un minuto más, hubiéramos sido descubiertos, solo nos miramos fijamente y comenzamos a besarnos, sentí el palpitar de su corazón, estaba muy acelerado por lo que nos pasó, sonreímos juntos y al mismo tiempo soltamos un “te amo”.

El regreso a casa paso sin sobresaltos, al final nadie a parte del niño si quiera sospecho lo que hicimos dentro esa sala, pero seguramente dejamos un olor que cuando limpiaron el lugar adivinaron lo que paso, la pregunta es si había cámaras en el lugar, eso quizás nunca lo sabremos.

Y bueno ese es el fin de mi relato, como ven poco a poco aumentamos la intensidad, actualmente tenemos un sexo aun más intenso, pero espero llegar a contar todo lo que hacemos, espero les haya gustado y pronto volvere con otro relato de nuestras aventuras.