PERDIDOS II (CAP39) SEXO DURO CON LA TÍA COLO (SEGUNDA PERTE)
Después de que mami eligiera a Tomy para dormir la siesta con ella, Jonathan muy ofendido con el “rechazo” de mami, fue con su tía Colo a darse un energico “desahogo” con la pelirroja, quien entre cogidas y charlas nos sigue sorprendiendo con su grado de perversidad y sed de venganza.
CAPITULO 39:
SEXO DURO CON LA TÍA COLO (SEGUNDA PERTE)
Después de que mami eligiera a Tomy para dormir la siesta con ella, Jonathan muy ofendido con el “rechazo” de mami, fue con su tía Colo a darse un energico “desahogo” con la pelirroja, quien entre cogidas y charlas nos sigue sorprendiendo con su grado de perversidad y sed de venganza.
Con el correr de las horas, el sol fue cediendo paso a la oscuridad de la noche, hasta que finalmente ya llegada la noche ella despertó completamente desnuda en la cama abrazada a su “sobrino”, e inmediatamente su mente empezó a repasar los momentos vividos con Jonathan antes de quedarse los dos profundamente dormidos luego de haber cogido tan duro, y también recordó el dialogo entre ellos dónde Jonathan le prometió un futuro trio con su hermano Ronaldo a quien le gustaba el “sexo duro” tanto cómo a la Colo y Jonathan.
Pensar en todo esto hiso que la Colo empezara a excitarse nuevamente, y con intenciones de despertarlo fue que comenzó a acariciarle todo su cuerpo besándolo incansablemente por todos lados.
El chico poco a poco comenzó a despertarse y a corresponderle los besos y caricias a su “tía”.
- ¿Querés que hagamos el amor otra vez? Le murmuró la incansable pelirroja al hijo de su amiga.
- ¿Qué hora es tía? Responde Jonathan aún modorriento.
- Las 9 y media de la noche. Le responde ella.
- ¡Uuuuuuuy, nos re dormimos, me voy a la mierda, mami y los chicos me deben estar esperando! Reacciona sorprendido el joven.
- ¿No te querés quedar a cenar con la tía? …… ¡Te preparo unos tostados cómo cuando eras chico? ¿Te acordás cómo te gustaban? Le propone ella casi en tono de súplica para que se quedara con ella.
- ¿Todavía tenés la tostadora viejita con la que me hacías esos tostados tan ricos tía? Le pregunta él, recordando las panzadas de tostados que se echaban con sus hermanos cuando pasaban el día con la tía Colo.
- ¡Si, y sigue haciendo los mismos sandwichitos tan ricos cómo antes! ¿Te acordás cómo te los comías cuando eras chico? ¡La tía te los tenía que enfriar para que no te quemaras con la desesperación que te los comías! Recuerda ella.
- ¡Jajajajajaja, si me acuerdo cómo se enojaba mamá cuando me veía comérmelos cómo un angurriento muerto de hambre, y Vos te peleabas con ella por defenderme! Le responde él.
Ella se pone la bombacha blanca y el corpiño del mismo color, y así en ropa interior va a la cocina a preparar los tostados para cenar con su “sobrino”, mientras él se da una ducha rápida en el baño para luego cenar con la tía Colo.
La Colo estaba poniendo ya la quinta tanda de dos sándwiches en la tostadora, cuando Jonathan aparece en ropa interior cómo ella en la cocina.
- Bueno mi amor, ¿Comemos? Dice la tía llevando los tostados a la mesa.
- ¡Uuuuuh, que genial se ven tía, encima tanto coger me dio hambre! Responde él cuando la ve venir con los tostados.
- ¡Jajajaja, buen provecho amor! ¡La tía te los hizo porque sabe cómo te gustaron siempre, y además para agradecerte por cómo te la cogiste! …. Mi amor, ¿Podemos hablar de algo mientras comemos? Le dice ella.
- ¡Sí, claro ¿De qué quiere hablar mi tía hermosa? Pregunta él empezando a comerse el primer tostado.
- Me desperté pensando en lo que empezamos a planear, lo del trio con Ronaldo, el trio con tu mamá y la orgía entre todos. Empieza a contar ella.
- ¡Ah sí, jajaja estaría muy bueno! ¿No? Le responde él, tal vez un poco en broma.
- Jony, Yo quiero hacerlo realmente. Le dice ella con su mirada llena de perversión y excitación.
- ¡Bueno está bien! Le responde él un poco sorprendido por la determinación de la Colo a seguir con todo esto hasta el final.
- Me gustaría que lo vayamos hablando desde ahora para irlo planeando todo de a poco y por parte y con lujo de detalles. Le dice ella.
- Bueno, y ¿Que proponés? Le dice él mientras se dispone a escucharla mientras come.
- Me gustaría primero el trio con Vos y con tu hermano, quiero algo bien “salvaje y duro” cómo lo de esta tarde. Continúa detallando la Colo.
- Bueno y ¿dónde lo haríamos? Le responde él
- ¡En eso es en lo que quiero tu ayuda! …. ¿Podés dejar de tragar y tragar cómo angurriento y poner atención a lo que estamos hablando? Protesta ella al ver que el hijo de su amiga la escuchaba sin dejar de comer y sin hacer muchos aportes en la conversación.
- ¡Jajaaja, bueno, bueno está bien! ….. mirá Yo mañana hablo con Rony, y no creo que él diga que “no” a la oportunidad de cogerse a semejante mujer cómo Vos, en ese sentido el Rony es el más parecido a mi……. en cambio, Jonás, Tomás y mamá ya son otra cosa, ellos son muy parecidos entre ellos y muy distintos a Rony, Vos y Yo, cómo que nosotros tres somos más liberales, ellos son más bien conservadores, más introvertidos, más recataditos que nosotros ¿Entendés tía? Le plantea el panorama él.
- Mhm, bueno si, mirá, Vos encárgate de Rony, de proponérselo, de convencerlo, a Rony y Tomy, Yo a tu madre la tengo a mis pies, además voy a disfrutar más domándola personalmente y sobre todo si en su renuencia a participar de “nuestros jueguitos”, se me pone suplicante o caprichosa…. ¡Me encanta “domarla” a esa yegüita! Reflexiona ella.
- ¡Jajajajaja! Ríen ambos, mirándose perversamente embriagados en su propia perversión y malicia.
- ¿A sí que se te pone caprichosa la mami? ….. ¿Cómo es eso? …. ¿Que hace, que te dice? Le pregunta él muy intrigado, mientras toma otro tostado del plato grande en el centro de la mesa.
- ¡Uuuuuuh, no sabés! …… ¡Me enfrenta refregándome sus “valores morales” en la cara, me insulta un poco, me critica y se horroriza de lo puta, enferma y callejera que soy, me quiere corregir, enderezar……! ¡Y cómo Yo no le llevo el apunte en todas las sartas de estupideces que dice, y me le planto firme en salirme con la mía, ahí viene la lloradera y las suplicas, que obviamente me las paso bien por la concha, y al final se hace lo que Yo digo y punto! Le detalla la Colo.
- ¿Toda esa pantomima te hace mamá? Le pregunta sorprendido él, reconociendo en su madre a una mujer de carácter firme y prácticamente indoblegable.
- ¡Toda esa pantomima! ….. ¿Lo podés creer? …. ¡Y cuando ve que sus berrinches ni me afectan, me empieza a ofrecer dinero! Le cuenta la Colo.
- ¡Jajajajajaja! Ríen ambos, intercambiando perversas miradas.
- ¿Y entonces, cómo terminás dominándola? Insiste él.
- ¡Ignorándola, y pidiéndole más dinero del que me ofrece! …. ¡Llora otro poquito y se me arrodilla a mis pies, y entonces empieza a obedecer sin chistar! Explica la Colo.
- ¡Jajajajajajaja! Vuelven a reírse ambos, entre perversas miradas.
- ¿Y qué le has hecho hacer? Le pregunta él, deseoso e impaciente por los detalles.
- ¡Ya logré satisfacerme con varios logros! ……. ¡Comprarme varias cositas con su dinero, aumentar mi nivel de vida, saberla revolcándose con el viejo que tantas veces la pretendió y ella con asco rechazó, saber que se va a revolcar con un chico de 18 años para festejarle su cumpleaños, que luego lo hará con su padre, que se acuesta conmigo y me come la concha cada vez que se lo pido, y que le demuestro que ella es tan o hasta más perra que Yo! Detalla la Colo con una mirada de satisfacción en su cara y gestos de triunfo al hablar que está concretando su venganza.
- ¿Y eso te hace feliz tía? Pregunta él intrigado.
- ¡Eso me trae paz, me excita, me calienta verla sufrir primero y después gozar cómo una buena perra! ¡Me encantó saber lo que pasó allá en la isla, me encantó saber que la muy perra se revolcó con todos ustedes, me lamento no haber podido estar allá para verlo, por eso ahora quiero que se la cojan adelante mío, quiero que ustedes vean cómo me la como a mamá y ella lo disfruta, no quiero que vuelva a referirse a mí y a mi vida, sin antes tener que morderse la lengüita! Dice ella casi llorando al final de sus palabras.
Él la queda mirando unos segundos, y la ve secarse las lágrimas con una servilleta de papel.
- ¿A qué edad tuviste tu primera vez tía? Le pregunta Jony.
- ¡Jajajaja, a los 14 con un compañero de la secundaria, y después vinieron los novios y otros menesteres. Le resume ella su respuesta.
- ¿Otros menesteres? ¿Cómo es eso? Pregunta él.
- ¡Y bueno, pagar deudas, aprobar alguna que otra materia de la facultad, conseguir trabajos, aumentos de sueldos, prestamos, favores! Detalla ella.
- ¡Ah, ahora entiendo las diferencias que tuviste con mamá entonces! Le dice Jony.
- ¡Ay sí, no sabés cómo se ponía cuando Yo contaba en frente de nuestras amigas, cómo les sacaba la plata a los tipos! ……… ¡Me llegaba a decir que no tenía estómago para escuchar mis cochinadas! …. ¡Jjajajaja, y Yo sí tuve para escuchar las de ella, y hasta escribir un libro con sus historias de “buena madre”! Dice la Colo.
- ¡Jajajajajaja! Ríen ambos llenos de lujuria.
- Decime una cosa: ¿Vos nunca te planteaste de que lo del naufragio en la isla estuvo armado por ella y Jonás para poder dar rienda suelta a la “pasión prohibida” entre ellos? Le plantea la Colo.
- Mirá tía, cuando Yo me enteré que ellos tenían encuentros secretos en aquella cueva alejada del campamento, por un momento pensé muchas cosas, entre ellas esto que me estás planteando, pero después me lo puse a pensar fríamente, y no tenía mucho sentido. Además, ella se terminó revolcando con todos nosotros ante la imposibilidad de negarse a darnos el mismo trato a todos. Además, lo de ella con mi hermano Jonás cómo que se fue dando de apoco y con el correr del tiempo, porque cómo él es el mayor de nosotros, ella se apoyaba mucho en él, en sus diálogos a solas y esas cosas. Explica Jonathan.
- Sí, pero tengo entendido que dormían juntos ¿No? Insiste ella.
- ¡Es que con alguien tenía que dormir, no alcanzaban los colchones que alcanzamos a rescatar del yate antes que se hunda! Le explica él.
- ¿Los escuchabas coger a la noche? Le pregunta ella acariciándose la concha por encima de la bombacha blanca parada frente a él.
- ¡No, ellos eran muy cuidadosos con su secreto! Yo con el tiempo empecé a sospechar.
- Y ¿Ella que pensaría? …. ¿Que nunca nadie de ustedes los iría a descubrir? …. ¿Alguna vez se habrá planteado cómo iría a quedar esa relación si volvían a la civilización? Se preguntaba la Colo muy intrigada, cómo pensando en voz alta.
- ¡No sé tía, lo que sí sé es que cómo no lo supieron cortar a tiempo, todo se les empezó a ir de las manos, y todo empezó a saberse, así que cada uno de nosotros restantes, le fuimos pidiendo “nuestra parte” a mamá y ella ya no se pudo negar! Explicó él.
- ¡Jjajajajaja, y así fue cómo la más puritana y remilgada de mis amigas, se convirtió en la perra de sus propios hijos! ¿No? ….. ¡Qué historia la de ustedes! ¿Eh? Concluye ella sorprendida una vez más con la historia del naufragio de los Herzoch.
- ¡Así fue cómo los demás la empezamos a espiar cuando se bañaba en el manantial, y nos la queríamos coger cómo Jonás! Le agrega él.
- ¡JAJAJAJAJAJA! Y ahora ¿No te la querés coger bien duro a tu tía Colo, ¿cómo a ella tanto le gusta? ….. ¿No querés que te dé tu parte? Le pregunta ella en tono seductor y floreándose frente a él muy coquetamente vestida solo en su conjunto de ropa interior de bombacha y corpiño blanco.
- ¡Obvio que te quiero dar bien duro perra! Le dice él mientras emprenden camino hacia el cuarto de la Colo.
Al llegar a la habitación de la hermosa pelirroja de 54 años, el chico se transforma inmediatamente en la fiera dominante y agresiva que a ella tanto la excita en la cama.
Jonathan la empuja sobre la cama y se abalanza sobre ella, y la Colo abre sus piernas, y al hacerlo siente inmediatamente la dureza del pene del hijo de su amiga ejerciéndole presión sobre su vagina por encima de la bombacha blanca que tenía puesta.
- ¡Aaaaaayyyy, mi amor despacio! …. ¿Así le tratás a ella? ¡Trátame cómo la tratabas a la perra de tu madre allá en la isla, trátame cómo la vamos a tratar cuando la tengamos indefensa entre nosotros! …. ¿Te imaginás lo que podemos llegar a hacer con ella? Le dice ella, mientras Jonathan la manosea desesperadamente por las tetas y la concha por encima de su ropa interior.
- ¡No, no sé, contame que tenés ganas de hacerle y que le hagamos con Ronaldo! Le responde él animándola a usar la imaginación.
- ¡Podríamos llevarla a un lugar, cómo “secuestrándola”, tenerla varios días, someterla a nuestros instintos más bajos y carnales, quiero verla sufrir, suplicar, pedir piedad, pedirme perdón por todas las que me hizo pasar! ….. ¡Por favor Jony prometéme que me vas a ayudar con ella, júramelo y a cambio te doy lo que me pidas! Le suplica la amiga de su madre, besándolo apasionadamente, mientras se excita más y más con cada palabra que se oye decir, mirándolo llena de lujuria y totalmente poseída por su propia perversión.
- ¿Y qué le haríamos? Pregunta él, siguiéndole “el jueguito”, mientras siguen besándose, acariciándose y manoseándose.
- ¡Quiero que se confiese cómo una “verdadera zoraa” ante nosotros, que nos confiese que disfrutó siendo cogida por cada uno de ustedes, que los mire a los ojos y les diga cómo disfruta revolcándose conmigo, que les cuente cómo disfrutó cuando se la cogió el viejo Tiburcio, el mocoso de Ramiro, y con cuanto tipo o mujer la haya logrado revolcar Yo! Que me agradezca haberla introducido a mi “bajo mundo”, que se revuelque conmigo frente a ustedes, y después con ustedes frente a mi……. ¡Después podríamos hacer tríos, orgías y toda clase de prácticas con ella, Aaaaaahhhh, de solo imaginarlo, de solo decirlo ya creo que estoy teniendo un orgasmo aaaaaa! Dijo ella y tuvo un orgasmo al escucharse así misma exteriorizando sus más oscuras fantasías con su amiga Judith, mientras sentía la dureza de la verga del hijo de su amiga presionándole la concha por encima de la ya muy humedecida bombacha blanca, al tiempo que la comía a besos apasionadamente.
- ¡Mhhhhh, me calienta tanto saber que Sos tan “mala” …! Le dice él.
- ¡Ahahahaha, sácame la bombacha y cógeme carajo, no me dejes con esta semejante calentura hijo de tu re puta madre! Le dice ella en tono rabioso y entre jadeos histéricos de excitación.
El hijo de su amiga le obedece de inmediato, y una vez que le sacó la bombacha blanca y totalmente humedecida a la Colo, él se sacó su calzoncillo y se arrojó sobre ella nuevamente.
- ¡Aaaaaaaaaahhhh! Gritó ella al tiempo que le clavó las uñas en su espalda cuando lo sintió entrar hasta los huevos en su muy dilatada concha.
El muchacho empezó a moverse cómo endemoniado sobre ella, La Colo levanta sus piernas, su cuerpo se estremece por completo al tiempo que en su mente repasa todo lo charlado recientemente con el hijo de su amiga. Ella abre la boca sin poder emitir sonido alguno, mientras lo mira fijamente con los ojos desorbitados.
- ¿Así perra, así querés que me la coja a mamá enfrente tuyo? Le gritó él mientras se la coge salvajemente y sin miramientos.
El escucharlo decir estas palabras, fue algo mágico para Jaky, quien de inmediato explotó en un tremendo orgasmo que apenas había podido contener prácticamente desde el momento en que lo sintió entrar en su vagina.
Jonathan sintió cómo ella estiró y arqueó su cuerpo totalmente rígido, al tiempo que abrió toda su boca si siquiera emitir sonido alguno, y de repente empezó a temblar y literalmente mearse mojándolo a él, la cama y el piso.
La meada fue larga, intensa y abundante, tras la cual ella quedó totalmente rendida, mientras Jonathan continúa bombeándola mirándola sonriente por lo que le había pasado a la amiga de su madre.
- ¡No puedo más hijo de puta pará que me llegué a re contra mear, aaaaaaaaaaa, pará que me estás matandoooo! Gritaba ella con sus últimas fuerzas.
- ¡Dale hija de puta, dale que recién empezamos! Le grita furioso él.
- ¡Aaaaaaaaaaaaaaa, me estás partiendo la concha hijo de tu puta madre aaaaaaaaaa! Gime a gritos la Colo, ya desesperada.
Viendo que la pobre cincuentona de la amiga de mamá, ya realmente no podía más. Jonathan la arrodilló en el piso, exactamente dónde quedó el charquito de meada, y parándose frente a ella la penetró por la boca, hasta sentirla entrar en la estrecha garganta de Jaky.
Ella empieza a toser, ahogándose, teniendo arcadas eructando y moviéndose histéricamente tratando de zafarse de tan bestial cogida de boca al que la estaba sometiendo el cabrón del hijo de su amiga.
- ¡Vamos perra, vamos, ahora no me vengas que por la boca no te entra! Le grita él hundiéndosela casi hasta la mitad, cuando ella lo sorprende con un caliente y abundante vomito en su verga y piernas.
- ¡Ooooouuuuu perra, eso, eso largá todo así tenés espacio para la leche,
- aaaaaaahhh! Le grita él mientras ella lo vuelve a vomitar.
- ¡Aaaaaaa, aaaaaaaaahhh, ahí voy putarraca de mierda abrí grande esa boca y trágame todo, aaaaaa! Le gritó él y vació sus cojones en la boca y garganta de la pobre Colo, quien tragó hasta donde pudo, pero terminó vomitando todavía en plena eyaculada del vergón del hijo de su amiga.
Entonces ella se levantó, y corrió al baño a terminar con su vomitona, mientras él festeja triunfal la semejante cogida que le había vuelto a pegar a su tía Colo.
Jonathan la escuchaba desde la habitación, ella allá en el baño, tosía hasta tener arcadas con las que largaba todo lo que había cenado y la leche que había tragado de la verga del muy cabrón que vació sus cojones en su boca y garganta sin ningún tipo de miramientos ni tupé por la pobre amiga de su madre que ahora estaba allá en el baño, agachada frente al inodoro lavando su estómago.
Tras unos minutos de espera, él chico la oye tirar la cadena, lavarse los dientes y volver con él al cuarto.
- ¡Después de semejantes cogidas que me venís pegando, y ahora que me hiciste largar toda la cena en el baño, espero una buena recompensa de tu parte! Le dice ella en un tono áspero y seco.
- ¡ Jajajajaja! Ahora que tenés el estómago vacío ¿Tenés hambre de nuevo? Le, bueno bueno, y ¿Qué vas a querer? responde él burlonamente.
- ¡Te estoy hablando muy en serio pedazo de infeliz! ….. ¡Quiero que mañana mismo hables con tu hermano Ronaldo, y empecemos a organizar el trio! …. Yo mañana voy a la oficina de tu madre a recordarle que este sábado le tiene que “festejar” el cumpleaños a Ramiro. ¡Ya veremos con que sarta de estupideces y suplicas me sale la perra remilgada esa! …. ¡Bah, que haga y diga lo que quiera! ….. ¡Más lo voy a disfrutar poniéndola en su lugar! Piensa ella en voz alta, llena de lujuria, perversión y odio.
Ellos se acuestan en la cama, ella lo abraza tiernamente y se queda dormida en sus brazos.
Por su parte Jonathan se queda muy pensativo y preocupado por el lado absolutamente y descaradamente perverso que está descubriendo en su otrora tierna tía Colo.
A la mañana siguiente, cómo Jaky debía ir temprano a la radio a conducir el noticiero de las 6, se levantaron rápidamente y se vistieron para irse cada uno a sus obligaciones.
- ¡Ay mi amor, de solamente verte en mi cama, me dan ganas de cabalgarte otra vez! ….. pero no importa, después me desahogo con tu linda mami! Le dice ella sonriéndole.
- ¿ Así de insaciables Sos tía? ….. ¿Te despertás con esas ganas que te da lo mismo desahogarte con un hombre que con una mujer! ….. ¡Wooow, woow, woow, nunca vi algo igual! Dice él sorprendido.
- ¡ Ufff, y lo que te falta ver de mi todavía! ……. ¡Jajajaja! Le dice ella dejándolo pensativo y atónito, a él tan insaciable que resultó ser con su ex novia y su propia madre. Pero con la amiga de mamá Jony parece haber encontrado la horma de su zapato, porque cómo muchas veces la había escuchado decir a mami: ¡Al más loco se le termina la locura, cuando se topa en la vida con otro más loco que él! Y Jaky parecía ser esa horma de zapato que le faltaba a Jony, él que a todas dejaba sin aliento, había encontrado en la amiga de mamá, a una mayorcita que lo dejó sin aliento a él. Jaky en cambio prefería ver al hijo de su amiga, cómo el compañero ideal para la cama, alguien quien por fin parecía poder “trotar” al ritmo de la despampanante pelirroja de 54 años y que al fin y al cabo disfrutaba tanto cómo ella del sexo duro.
CONTACTOS CON EL AUTOR: [email protected]
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!