Por necesidad VI

Vivencia.

Depuse de esa primera chupada en el baño por parte de mi vieja, al menos una o dos veces por semana cuando volvía del colegio esa era la rutina, me metía a “bañarme” y me chupaba la pija, hasta hacerme acabar.

Hasta que un día llegue,  dejé mis cosas como siempre y me llamo a su habitación.

Las cortinas estaban cerradas, la luz baja, y ella en medio de la habitación con una tanga de hilo roja y el corpiño que le hacía juego. Toda maquillada, apenas la vi, no podía creer lo bella que era mi madre.

Extendió su manos y me invitó a entrar, me acerqué y lo primero que noté fue que el trípode y su celular estaban apuntando a la cama.

— tranquilo ignora el celular.. solo somos vos y yo hijito..

Me dijo mientras me quitaba la remera.

Los siguientes que hizo fue inclinarse un poco y comenzar a besarme, lento primero, pero después más intenso, me metía la lengua profundamente, y gemía sutilmente, Mirando de reojo a la cámara.

— veni sentate..

Me dijo, apuntando a la cama.

Yo me senté, y me quedé ahí quieto no sabía qué hacer. Ella empezó a bailarme lentamente, y a poner mi mano, primero en su nalgas, después en sus pecho. Mientras bailaban sensualmente sin música.

Depuse se acercó a la cámara y se quitó el corpiño, dejando sus tetas libre moverse. Se tocaba mirando la cámara, hasta su regreso a mi.

Se inclino y empezó a pasárseme las tetas por la cara rápidamente, mientras me pedía que se las chupe, Y así lo hice como negarme antes aquella exquisitez.

Después se giró, y apunto su culo contra mi cara, y empezó a frotarse contra mi. Estaba bastante perfumada, el aroma mezclado con el de su Concha y su culo, me pusieron duro como piedra.

— ahora bebe.. mamá se va a bajar la tanga y quiero que uses la lengüita okey?

Me dijo, mientras yo asentía con la cabeza.

Se inclinó y se bajó la tanga lentamente, pro primera vez tuve en primera persona la conchs que me trajo al mundo.

Mamá se tiró para atrás y yo hice lo que me pidió y le pasé la lengua por toda la raja depilada. Era lo más, es sabor, el aroma, sabía que después de eso iba a querer más y más.

— esoo mmm asii hijito.. chúpame la Conchita bebé.. ahhh sii sii ahhjmmm

Mi vieja gemía mientras yo como perro sedientos lamía esa hermosa cocncha.

Depuse de un rato me detuvo, y se giró sobre sí, me miró tomándome del rostro y volvío a besarme.

Poco a poco se fue poniendo de rodillas y tomó mi pantalón y me lo bajo con calzoncillos y todo.

Mientras miraba la cámara, me sujetó el pito y comenzó a lamerlo de lado, no quería que la cámara se perdiera de ella chupándome mi pequeña pija.

— mmm ahh ahh que rics.. mm. Sii te gusta como mami la chupa? Mmm ahhh ahhh

Me decía mientras lamía y escupía mi verga. Hasta que finalmente sin poder contenerme más, solté toda la leche que tenía cargada. Y mí vieja se quedó ahí con mi pito en la boca recibiendo mi lechazo.

Se levantó y fue directo a la cámara para abrí la boca y mostrar la cantidad de leche que le había soltado. Con ese final cortó la filmación y se limpió los restos.

Se giró y me miró,, con una sonrisa.

— Gracias hijo.. eso es todo.. anda a hacer la tarea..

Mientras buscaba su ropa interior por la habitación. Me subí los pantalones y me fui a hacer la tarea, pero quien podría concentrarse con tan increíble momento que vivi.