Puerto Vallarta 1998
Terminé la prepa, toca disfrutar antes de ir a la universidad. Encontré un par de chicas sonorenses..
Verónica y Leticia como protagonistas, Verónica era una mujer de 28 años pelo negro largo, facciones toscas pero sexys, unas tetas grandes y pezones pequeños pero largos un abdomen plano y un muy sexy ombligo, no era nalgona pero su vagina siempre estaba húmeda y muy cerrada, meter un dedo costaba algo de trabajo pero esa humedad y sus gemidos cuando metía mi dedo en su ano o vagina hacían la pena todo. Depilada desde pequeña no tenía un solo vello, sus piernas trabajadas por ser bailarina. Leticia mucho más joven que su hermana rubia ceniza, ojos verdes una sonrisa coqueta y pequeña, cuello sexy pero no largo, una espalda definida y sexy, las nalgas eran medianas no muy abundantes pero firmes donde las nalgadas rebotan, sus senos eran más bien prominentes con su pezón medio pero de fácil excitación, 19 años su cuerpo casi perfecto, su panocha no mojaba como su hermana, ni apretaba pero no necesitaba una verga gigante o mucho tiempo para tener uno tras otro los orgasmos y vaya que eran fuertes parecía el exorcista después del segundo.
Cómo las conocí, en el hotel donde nos quedamos con mis amigos, Leticia se me acercó porque no sabía nadar y quería hundirse en la alberca pero le ganó el miedo. Como me vio varias veces nadar, se me acercó a preguntarme si hablaba español.
-claro, de donde eres?
Soy de Tijuana
Muy bien primera vez en Vallarta?
Si y esta muy bonito, me enseñas a hundirme
Si, tienes que tomar aire, y poner los pies juntos, dejar caer tu cuerpo al fondo y ayúdate con los brazos
No me sale, y si te abrazo y así nos hundimos?
yo dije, bueno, cual es el problema.
La tomé de la cintura, era delgada y tenía puesto un bikini 2 piezas cubriendo lo básico jejeje.
Me abrazó por la cintura y yo hice lo mismo.
Toma aire
Dio una gran respiración y nos sumergimos, ya entrando al agua, me puso una mano en la barriga al borde del traje de baño, eso me excitó y puso duro mi pene, en el agua no se notaba pero si salía seguro se vería al quedar el traje pegado. Ella lo sintió de alguna forma por que se ajustó más a mi, abrazó sus piernas a mi pierna derecha y sentía su entrepierna y sus tetas en mi brazo, cuando nos hundiamos mi mano izquierda trataba de tocar su trasero. Mi pene rozaba su pierna. Así por algún tiempo, después llegó Verónica y nos invitó a subir en el parachute. Me costó trabajo salir y que no se notara mi erección. Ya en la playa Leticia me pidió subir con ella, por ser mucho más grande en tamaño que ella fui primero y ella se sentó en mis piernas, cuando tomamos vuelo ella se acomodó lo más arriba de mi y abrió las piernas, me pene seguía firme y por mi imaginación o deseo sentía como sus labios abrazaban por encima de los trajes mi pene. Sé que lo sintió, debió… con su mano bajó a la entrepierna y tocó la cabeza de mi pene, volteo y me dijo «estas cabezón»… Ya estaba rojo del sol, me puse mucho más y pude todo mi esfuerzo en no eyacular, sentía no poder mas.
Bajamos y yo estaba nervioso y mareado, no sabía qué hacer ni lo que había pasado… Regresamos a la alberca y esta vez fue Verónica quien quiso le enseñara a «nadar». Ella fue más abierta pero menos aventada por lo menos en ese momento. Se aventó al agua igual me abrazó y nos hundimos, al salir se puso de espaldas a mí e hizo como brincos para que le viera el trasero que tenía, pues traía bikini de hilo bastante pequeño. Antes de salirnos de la alberca me dice que le gustaría tener un hijo mío, yo si me espante, pero aplomo total y solo sonreí… Nos fuimos, yo a mi cuarto y quedamos de vernos pronto en su cuarto, pa’pronto me bañe fui por condones, primera vez que compraba. Llegué a su cuarto y las 2 estaban de huevonas jajajajaja, Verónica se metió a bañar pero se dejó ver desnuda frente de mi y Leticia le decía «andale sigue enseñando, quieres que te den en el baño?» fue raro y cachondo.
Total me acosté a lado de Leticia, yo boca arriba y ella de lado solo tapada con la sabana. Estiró su mano y la puso sobre mi pene, «quiero cabezón. Me dejas con ganas», volteo y sus pechos quedan en mi boca listos para que los coma, solo pude abrir mis labios y con mi mano derecha acercarla a mi. Le comencé a besar los pezones, a nada de la caricia esta chica gemía de forma muy cachonda, tomó mi mano y la metió en su tanga reaccione instintivamente y hice un desperdicio de la oportunidad pues no sabía ni donde estaba el clítoris, pero sentí muy húmedo y allí comencé a frotar lo que creo era la entrada de la vagina. Estaba muy húmeda, mis dedos resbalaban fácilmente y entraban en su vagina, sentía como su mano me continuaba masturbando con un ritmo enloquecedor, estaba muy dura mi verga y yo seguía comiéndome sus pezones. Saqué de la bolsa del pantalón el condón, y me la saque estaba muy roja y bien parada, me quito el condon se lo puso en la boca y me lo puso de forma magistral, experiencia de la niña. Sin perder tiempo se sentó en mi palo pero no bajaba, se volvió a levantar y me la chupo un poco, se volteo y me dejó sus nalgas a mi boca a placer, olía muy bien, inexperto pues pase mi lengua por toda la vagina, el hoyo el clítoris y hasta el ano, cada lenguetazo eran arqueadas por ella, mas cuando metía mi dedo en su vagina y chupaba el ano, fue algo muy rico dejó sus nalgas completamente en mi boca y me comía su clítoris a todo lo que podía. Ya que se sintió mojada se volvió a voltear «quiero que me partas con tu cabezota» se sentó en mi verga de frente esta vez bajo toda su cadera hasta el fondo, grito de dolor o gusto pero se hizo para atrás y vi su vagina y clítoris como pude me puse de rodillas y la acosté en la cama, le besé las tetas las apreté duro hasta que me quito las manos, las quería amasar como masa para bolillo, mordí sus pezones como si me quisiera alimentar de ellos. Empujaba lo más al fondo que podía mi verga sin mucha prisa, pero bombeaba fuerte y lo rápido que me dejaba, sus ojos estaban en blanco jadeaba y meneaba la cola de forma salvaje, me retire un poco o volví a mamar su vagina, el clítoris estaba duro y era más fácil chuparlo, escurría de su vagina mucho lubricante mis dedos entraban sin problemas 3 a la vez, gemía con fuerza pensé que su hermana saldría a pegarme por que que le estaba haciendo a su hermanita.
Cómo se levantó y se puso de nalgas a mi, su ano estaba abierto y su vagina se veía muy abierta y mojada. Sin más le deje ir todo mi pene solo escuche «que cabezón estas» «cogeme» «cogeme» le arremetió con dureza la nalguee un par de veces con toda mi mano solo oía como mi cadera aplaudida contra sus nalgas y la vagina salía más líquido, seguía metiendo lo más que podía mi verga hasta que la sensación del semen subir por mis huevos y llegar a la punta de la verga me hice atrás para no venirme en ella pero se culo hacia mí y no pude mas termine por venirme al cual solo escuche «que cabezón y tan rojo»
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