Relato verídico

Esta historia es real, es la primer confesión que escribo, cambié los nombres para proteger las identidades.
Este relato que les voy a contar es totalmente cierto, hasta ahora los relatos que he publicado son ficción, sacados de mis propias fantasías o simplemente alimentados por los libros que he leído o anécdotas que he escuchado, pero este será el primero que ralamente me pasó a mi, así que no esperen un relato de sexo en grupo o gemidos descontrolados o una historia de sexo desenfrenado, solo es un trato recuerdo que hoy me animo a compartir.
La historia comienza en 2013, yo tenía 23 años y me encontraba haciendo mi servicio social en la ciudad de Vallarta, nada interesante me pasó en casi todo el año hasta una ves que con mis compañeros fuimos a la playa, el viaje era con propósito de fin del servicio, era un sábado, y al día siguiente nos regresamos cada quien a nuestro lugar de origen, irían más personas conocidas de una compañera, entre esas personas iba una muchacha que también estaba haciendo si servicio, era de ciudad de México, por fines de preservar el anonimato la llamaré Karina y yo le llamaré Enrique, tenía la misma edad que yo, No tenía un cuerpo de modelo, estaba delgada, cabello muy chino, piel moreno claro, tenía nalgas de tamaño normal pero sus pechos si eran algo grandes, yo mido 1.70 de complexión robusta, sin llegar a ser gordo, nada atlético y soy el típico nerd, hasta con lentes y todo, no estábamos en la misma área pero ya la había topado varias veces, siempre me sonreía al verme.
Ese día en la playa nos divertimos, yo no le quitaba la vista de encima pies llevaba un bikini aunque usaba un short pero el top hacia lucir muy bien sus pechos, desde el principio nos llevamos bien, a los dos nos gusta leer y somos muy curiosos, en un descuido me metí al mar con los lentes puestos, no me meto en lo más profundo porque no sé nadar pero aún así una ola logro revolcarme, perdí mis lentes y sin ella no vista es pésima, Karina me ayudó a salir del agua, ya no me pude meter porque me había entrado agua en la nariz y en los ojos, decidí quedarme en la orilla pero Karina quiso hacerle compañía, estuvimos más de una hora platicando, al caer la tarde decidimos regresar a nuestras casas, un compañero traía carro y nos fe dejando en puntos cercanos a nuestras casas, por cosas del destino Karina viva en el mismo fraccionamiento que yo, de hecho viva a un par de calles, ella me ofreció ir a su casa para darme horas para los ojos pues los traía muy irritados, al llegar entramos, ella vivía con una compañera que ese día se había ido con el novio a la playa y no volverían hasta el día siguiente, me senté en el sillón y ella me atendió muy bien, aún llenaba la ropa de playa, solo que ahora llevaba una blusa de botones abierta
Enrique: todo por pendejo me pasa, ahora no tengo lentes y ya no pude divertirme, y yo que quería seguir viendo a las muchachas en bikini
Empecé a bromear con ella, ella empezó a reirse
Karina: pues que bueno que los perdiste para que no andes viendo ahí a otras viejas que ni figura tienen
Enrique: ya se, tu les ganas pero igual ya no te pide ver
Ella se sonrojó, se levantó y se fue al baño, pensé que la había incomodado, al volver se había quitado el short y la blusa, solo llevaba el bikini, debo decir que la parte del calzón que no mostró en todo el día era increíble, era a media nalga, pero sus glúteos se veían hasta abultados, yo me sorprendí mucho y me sentí muy caliente en ese momento
Karina: pues para que no pierdas la oportunidad ándale
Enrique: Kari… te ves increíble, porque no anduviste así en la playa?
Karina: porque me da pena, más cuando se me quedan viendo, pero contigo hay confianza, no me molesta que me veas así
Ambos estábamos muy nerviosos, me acerque poco a poco a su cara y ella no se alejo, entonces nos besamos, era un beso tierno, lento, sin lengua, solo nuestros labios fundiéndose, entonces por impulso lleve mi mano a su cintura, su piel se sentía muy suave, la acaricie toda la cintura y sino hasta llegar a sus pechos, me detuve antes de tocarlos pero ella tomo mi mano y la puso en sus pechos, eso me dio el impulso final para dejarme llevar, desamarre su top y empecé a besar sus pechos, lamía sus pezones, primero uno y luego el otro, su piel sabía un poco salads por el agua de mar pero aún así me encantaba
Karina: quítate la ropa, quería sentir tu cuerpo junto al mío
La obedecí, me desvestí por completo, ella me miró, ni pene no es de actor porno ni nada, mide solo 16 CM pero en sus manos pequeñas se veía más grande, lo tomo entre sus manos y se agachó, yo había tenido sexo pero nunca me habían hecho sexo oral, ella lo hizo y yo estaba temblando, me esforzaba por no quedarme en blanco, empecé a tocar sus pechos de nuevo mientras ella hacia eso, lleve mis manos a sus bragas y desamarre el bikini por un costado y luego el otro, calló al suelo por obra de la gravedad, y ahí estábamos, los dos desnudos en su sala, ella dejo mi pene y me tomo de la mano, me llevo hasta su cuarto, yo iba tras de ella viendo como su trasero se meneaba al caminar, al entrar al cuarto nos besamos de nuevo, y fuimos a la cama, yo la acariciaba con mucho cuidado como teniendo que se rompiera, acaricie sus glúteos y lleve mi mano a su vagina, ella se depilaba y entonces metí un dedo entre sus labios luego dos, la masturbaba con mis manos y ella empezó a soltar leves gemidos
Enrique: Kari hay algo que quiero probar pero no sé si te guste
Me baje hasta su vagina y empecé a lamerla, era la primera ves que hacía sexo oral a alguien, sabía un tanto amargo pero a la ves era delisioso, metí mis dedos, ella estaba muy mojada ya, me tomaba por el cabello
Karina: ahhh siii si me gusta, lo haces bien para ser tu primera ves!!! Pero trata de meter más tu lengua
Yo seguía sus instrucciones, metí mi lengua hasta encontrar su clítoris, y lo lamía con la punta de la lengua, era increíble todas esas nuevas sensaciones
Karina: ahora me toca a mí
Me acostó y se acercó a mi pene, lo tomo de bueno con sus pequeñas manos, y primero lamio la puntita, luego se metió la cabeza de mi pene en su boca, lo lamía alrededor, con su lengua haciendo movimientos circulares, era increíble, luego se metió todo mi pene en su boca, acariciaba mis testículos
Karina: mmm que bueno lo tienes, con el traje de baño no se notaba
Enrique: Kari tu también estás de ensueño, estás riquísima, el uniforme no deja ver tu cuerpo tan hermoso
Ella se acomodo y puso sus piernas sobre mi cabeza, ahora hacíamos un 69, yo la sujetaba de las piernas mientras le metía la lengua, ella se apoyaba en mi mientras se metía mi pene en su boca, empecé a darle nalgadas suaves, ella solo se reía, notaba mi nerviosismo
Karina: tranquilo puedes hacerlo, me gustan las nalgadas
Empecé a hacerlo más fuerte ella sería con mi pene si boca, entonces sentí como se mojo aun más, con mi lengua en su clítoris, una mano dándole de nalgadas y ni pene en su boca ella tenía un orgasmo.
Karina: ahh ya no aguanto, quiero sentirte dentro de mi por favor
Me puse sobre ella, lleve sus piernas a mis hombros y acomode mi miembro en la entrada de su vagina, estaba muy mojada así que entró sin dificultad, la tomé de las manos y empecé a moverme, nos besamos en todo momento, como queriendo ser uno a través de los besos, no en importo en ese momento que no tenía condones, solo importaba ella y yo, entonces con ella seguí experimentando el sexo
Karina: me lo harías de perrito? Me gusta mucho esa posición
Yo no era muy versado en el sexo pero hice lo que pide, se puso en 4 y acomode de nuevo ni pene en su vagina, la metí y la sujete de las caderas
Karina: ahhh que rico! Si la tienes gruesa heee, no se nota pero si
Empecé a penetrarla más rápido cuando lo sentí, mi semen empezó a salir y quedar alojado sentir de ella, yo estaba en las nubes, ella aún no alcanzan el orgasmo así que antes de perder la erección seguí penetrándola y lleve mis manos a su clítoris, lo estimule como pide mientras la penetraba y pide sentir contracciones en su interior, estaba teniendo un orgasmo, ambos caímos en la cama, agotados
Karina: no te apures, mi amiga tiene pastillas de emergencia, nomás le robó una y ya
Me acarició el rostro, y nos besamos, dormí con ella esa noche, no volvimos a hacer el amor, entre la playa y el sexo caímos rendidos y nos dormimos, a eso de las 6 am me desperté, ese día desayunamos juntos, parecíamos una pareja de casados, su camión a ciudad de México salía a las 12 PM, el mío a mi ciudad salía a las 4 PM, me fui a mi casa a arreglar mis cosas y en cuanto acabe regrese corriendo a su casa, eran las 10:30 pero ya había salido, me sentí muy triste, más porque sabía que quizás no volvería a verla, pero al menos una noche fui muy feliz, le pedí su número a su compañera de área antes de irme, actualmente seguimos en contacto, no se ha repetido lo que vivimos y de hecho desde entonces no nos vemos, la tengo en redes y a veces hacemos video llamadas pero nada sexual, de hecho ella me ha contado de los novios que ha tenido y yo de las novias con las que he estado, ahora somos muy buenos amigos y estoy planeando ya que acabe la pandemia o que me toque estar vacunado ir a visitarla.