Solteros por una noche

Una pareja casada por más 20 años deciden dejar el compromiso por una noche para salvar su relación..
Irina y Sergio son una pareja de 40 y 50 años, siendo él mayor que ella.

Irina es una mujer delgada con buenos pechos y culo grande lo que llama la atención de los hombres pero no les hace caso porque solo tiene ojos para su marido.

Sergio es un hombre muy alto y muy gordo sumado a sus pocas habilidades sociales, tuvo la suerte de conocer a una esposa que lo ama y aguanta todo su peso en la cama.

Llevan casados y viviendo juntos por más de 20 años y no piensan separarse por nada del mundo porque se aman incondicionalmente. O eso parecía, ya que en los últimos años ambos han sentido que ya no son lo mismo.

En el día a día todo bien, Sergio es un hombre cariñoso y atento con su esposa y siempre busca su felicidad. Irina por su lado es una mujer muy coqueta, lo que siempre le gustó a sergio, pero el problema era en la cama.

Las que antes eran noches de pasión y desenfreno, se habían convertido en noches tranquilas viendo series.

Atrás habían quedado las mañanas teniendo sexo en la cocina preparando el desayuno, ahora lo preparaba la madre de Irina que se había mudado con su hija hace un año por la muerte de su esposo…

El caliente sexo en la ducha se había convertido en un «duchate primero tú y luego yo*

Quizás la llegada de la suegra había tenido que ver, a Irina le gusta gemir, pero no cuando su madre está en la habitación de al lado.

O quizás fue la gran carga que tenía Sergio como el nuevo gerente de recursos humanos en su empresa.

Fuere la razón que fuere, debían hablar sobre ello como la pareja comunicativa que son:

S: amor, tenemos que hablar de algo

I: de que mi amor

S: mira, estoy desnudo frente a ti y no pasa nada, antes ya me la estarías chupando

I: pero si eres tu el que no me toca!

S: mi vida, no quiero pelear, solo quiero hablar, desde hace como un año que no hacemos el amor rico como antes

I: bueno tienes razón… Pero que podemos hacer?

S: ven, acercate a mi «pájaro»…

I: mmh~

Irina le empezó a hacer sexo oral a su marido, pero no se sentía tan bien, era lo mismo de siempre. A Sergio nisiquiera se le paró el pene…

I: bueno… Lo intentamos.

S: perdon… Yo de verdad quería…

I: no pasa nada, mi amor, está bien te amo, eso es lo que importa

S: si, yo tambien te amo, pero una pareja casada debería de poder tener sexo feliz, siempre, y nosotros ya no sentimos lo mismo en la cama… Aunque cueste aceptarlo.

I: mi amor, no digas eso… Quizás solo necesitamos un poco de variedad.

S: a que te refieres?

I: un día vi en la TV que una pareja que tenía problemas en la cama, se daban una noche para que ambos pudieran tener sexo con quien quieran. Y luego volver al día siguiente renovados y seguir como si nada.

S: estás loca? Me quieres ser infiel?

I: no! Tu también podrías ir con cualquier mujer!

S: si pero es peor! Los dos seriamos infieles

I: no, porque no estamos dando permiso!

S: … Ah, no lo sé amor, no me gusta la idea de que otro hombre te meta el «pájaro»

I: se te va a olvidar cuando tengas el tuyo dentro de una puta!

S: jaja. Bueno puede ser… Quizás mañana…

I: mañana? Vamos, vistete! No puedo pasar una noche más sin sexo, Sergio!

S: que? Pero nisiquiera me eh bañado!

I: mejor! Así las atraes con tu riquísimo olor natural

S: jaja esto es una locura, pero si nuestra relación sobrevive a ésto, demostrará que nos amamos de verdad

I: así se habla!

Eran las 10pm, Sergio y Irina se alistaron para salir, ella con un vestido rojo de noche y el con una camisa y un pantalón clasicos.

En la sala aún se encontraba la mamá de Irina ordenando algunas cosas.

M: hija, Sergio, van a salir? Pero si ya estaban en pijama jaja

I: surgió una fiesta inesperada, no nos esperes, volvemos mañana.

M: no te preocupes hijita, vayan con dios, yo les cuido la casa

S: gracias suegrita, descanse

Salieron de la casa y cada uno tomo un taxi a discotecas distintas…

[UNO – Narrado por Irina]

Jamás pensé salir de mi casa tan tarde y menos para ir a buscar a otro hombre que no fuese mi marido, desde que me casé con el nunca volví a ver a otro hombre. Pero está vez debíamos hacer algo para salvar la relación.

A pesar de que siempre me sentía muy excitada viendo a mi gigante hombre, últimamente nuestro sexo se volvió rutinario y poco interesante. Por lo que hoy será la oportunidad para refrescar mi vida sexual.

Llegué a la discoteca y me pedí un trago medio fuerte, dispuesta a todo, con todos.

Y no tardaron en acercarse un par de hombres a coquetearme, pero no eran muy agradables y los rechacé. Hasta que se acercó mi un hombre al parecer de Estados Unidos, tan alto como mi marido pero más delgado, tenía ojos azules y cabello rubio, hablaba español un poco mal

?: hola, dama, está sola?

I: eh… Si jaja.

?: y ese anillo?

I: oh, es un anillo de amistad con mi mejor amiga

?: me dejas verlo?

I: pues, claro!

?: … Oh… Porque tu anillo dice, «hasta que la muerte nos separe» tan amigas son? Jaja

I: me atrapaste! Jaja, si… Estoy casada

?: y que haces aquí? Como sabras, a una discoteca no se viene solo a tomar…

I: bueno, es muy privado pero, que más da! Yo y mi marido decidimos darnos una noche de libertad… Y pues aquí estoy, esperando a un hombre disponible para… Ya sabes, jaja

?; oh jaja, ya veo, entonces… Ves a un hombre disponible?

I: pues si… A ti.

?: en está discoteca está permitido el nudismo sabes?

I: no, no lo sabía…

?: si… Aún es temprano pero a estás horas empiezan las mejores orgías que podrías imaginar.

I: bueno, porque no empezamos?

?: estaba esperando que lo dijeras!

Le bajé el pantalón al gringo y toda la gente empezó a acercarse. Debajo de su bóxer estaba un enorme pene que le ganaba al «pájaro» de mi marido por mucho.

Comencé a chupar ese gran miembro mientras toda la disco comenzaba a quitarse la ropa. El gringo sujetaba mi cabeza y la presionaba contra su pene que estaba bien parado y duro.

?: ah! Mira, todos empezaron a tener sexo solo con vernos!

I: si~ mmh~

?: ya, suficiente, ahora date la vuelta que te voy a dejar llena pra que tu marido vea lo bien que lo pasamos.

Me dio la vuelta y comenzó a penetrar mi culo con mucha fuerza, jamás había sentido algo así en mis 20 años de matrimonio. Me hizo sentir mujer con su enorme miembro entrando y saliendo detrás mío.

Se corrió dentro de mi culo y me embarró las nalgas con su semen.

?: uff… Me encantó,

I: si~ gracias por ésto señor, me hizo sentir como nunca antes! Ahora me voy a ver a mi marid…

?: irte? Jaja, aún no has visto nada, quizás estés más acostumbrada a el deprimente pene de tu marido, pero de aquí no te vas hasta que todos los hombres de la fiesta te hayamos probado mínimo dos veces

I: pero… Uhm~… Ya te volvió a parar! Quizás pueda quedarme solo un rato más…

[DOS – Narrado por Sergio]

Cuando llevas casado tantos años, es imposible pensar en otra mujer que no sea la tuya, desde que nos conocimos, ha sido la única mujer que ocupó mi mente y así había sido hasta hoy, por eso cuando ella me dijo está idea, me costó un poco aceptarlo, pero si podemos hacer algo para salvar la relación debemos intentarlo…

Llegué a la discoteca bastante rápido ya que era cerca de mi casa y había poca gente, yo nunca supe como ligar bien, así que solo me senté a mirar a la gente, nisiquiera tenía ganas de tomar, solo me dediqué a pensar en como sería mi vida sin mi esposa

Al cabo de una hora regresé a mi casa medio triste, pensando que quizás mi mujer se había arrepentido y había regresado tal como yo. Pero no.

Al entrar en casa me encontré a mi suegra rezandole a un cuadro de su difunto esposo, así que me acerque a ella…

M: que pasó Sergio? Y mi hija?

S: ah, se fue con sus amigas a un pijamada de chicas jaja, me tuve que regresar solo.

M: ah, que susto, ya no quiero más desgracias…

S: usted extraña mucho a su esposo verdad?

M: no tienes idea… El era el hombre perfecto, tan amable como responsable, todos lo querían.

S: a pesar de que no lo conocí tanto, se que lo extrañan mucho, eso habla muy bien de él…

M: ay… El era un santo…

S: no se ponga triste, el está en un lugar mejor, vamos, que me dice si nos tomamos unos tragos en su honor!

M: no, es muy tarde y a mi no me gusta tomar.

S: solo un poco! Seguro que a su esposo le gustaba tomar!

M: oh si! Siempre tomaba vino antes de hacerme el am.. oh que digo! Es que ya tengo sueño! Perdon

S: no pasa nada suegrita, es normal que al recordarlo recuerde también sus noches de pasión!

M: si pero igual!

S: y que le parece si nos tomamos un vino en su honor?

M: bueno, solo un poco eh?

No fue necesario más que un vaso para que mi suegra se soltara a hablar un poco más suelto…

M: mi marido hacia mucho ejercicio por su trabajo por eso siempre estaba muy delgado, y con la vejez se puso aún más flaco… Pero siempre muy guapo y atlético.

S: me imagino, en las fotos se le ve muy delgado

M: si… Por eso luego en la cama, jaja, se movía como una serpiente, muy rápido por tan ligero jaja.

S: oh, claro jaja

M: y por eso aveces me pregunto como haces tu para hacerle el amor a mi hija? Jajaja. Perdon pero, es que eres muy grande y gordo…!

S: jaja, bueno suegrita, aún con mi peso puedo moverme muy bien y además a su hija le gusta así

M: si, me imagino… Está bien, a una mujer le podría gustar ser aplastada por un gran cuerpo…

S: exacto! Así es!

M: mmh… Me hubiera gustado probar a un gordo… Pero solo tuve sexo con mi marido.

S: bueno, aún está a tiempo

La situación se tornó coqueta muy rápido, nos estábamos acercando cada vez más.

M: mmh… Y será verdad eso que dicen de los gordos?

S: que?

M: que tienen el miembro pequeño…

S: jaja, claro que no!

M: puedo comprobarlo?

S: oh… Pues si, justo lo tengo duro.

Me abrió el pantalón y saco mi «pájaro» con todo y huevos.

M: oh… Si es grande

Empezó a tocarlo suavemente y masturbarme

S: ya ve, mmh… Si es grande.

M: … Ah… Súbete encima mío y penetrame Sergio!

S: ay suegra, yo no quería faltar el respeto, pero si usted lo pide!

Le subí el pijama que era como un vestido suelto y le quite su calzón de abuela. Encima del mueble le empecé a meter el «pájaro» rápidamente por las gana que nos teníamos.

S: ay! Que rica vagina suegra! Así deberíamos estar todos los días! Uno encima del otro! Con el pájaro metido! Ah!

M: aaahh~! Ay Sergio estás tan rico! Ah! Me encanta tu panzota rozandome el abdomen! Ah! Agarrarme las tetas! Tocame!

Le sobaba las tetas a mi suegra, estaban un poco caídas por la edad pero eso las hacía más únicas y lindas para mí.

No pude más y me vine dentro de ella.

S: ah… Uf… Ay suegrita eso fue muy rico…

M: todavía la tienes parada Sergio!

No lo podía creer, tantos meses sin lograr mantener una erección y ahora tenía otra nada más acabar.

S: si! Estoy muy excitado aún…

M: bueno… Tu cama está libre verdad?

S: si… Vamos!

[TRES – EPÍLOGO]

Llegó la mañana, el sol iluminaba a las 7am

A esas horas llegó Irina muy alegre y renovada después de haber estado con todos los hombres de la discoteca.

Entra a su casa, luego a su habitación, solo para encontrar a su madre y a su esposo durmiendo completamente desnudos en su cama.

I: pero, que significa esto!

Los dos amantes saltaron asustados.

S: Irina, ya llegaste mi amor!

I: si! Llegué y solo para encontrarte con mi mamá desnudos en mi cama!

S: hey, ese era el trato no?

I: dije que con una mujer, no con mi mamá!

S: bueno, ella es una mujer no?

I: Sergio no te hagas el idiota!

S: y tu? No te hagas la santa, seguro estuviste fon 50 hombres!

I: si! Y? Ese era el trato

S: no, dijimos solo un hombre!

I: agh, bueno da igual, mamá como pudiste?

M: no hija, es que el vino me hizo hacer esto!

I: osea que la emborrachaste? Estas loco sergio!

S: solo fue un vaso, además ella quería hacerlo!

I: bueno, ah! Ahora solo quiero descansar, mamá retirate, y vistete

M: perdon hija! Ya me voy…

I: y tu? No te vas sergio?

S: te olvidas de quien es la casa?

I: agh… Ya quédate, da igual

Ambos se acostaron pero no se miraron, el silencio dejó que pensaran con más calma.

S: …

I: … la pasé muy bien…

S: yo tambien…

I: bueno… Al menos atendiste a mi mamá que de seguro le hacía falta un poco de «pájaro» jaja

S: si… Me di cuenta después de las 6 rondas jaja

I: jaja… Es increíble, después de probar tantos penes… Mi favorito siempre será el tuyo.

S: justo ahorita lo tengo parado…

I: mmh… Y si me lo das?

S: hagamoslo mi amor.

Así Sergio y Irina lograron salvar su relación, a partir de ese día no volvieron a tener sexo con nadie más, habían recuperado la pasión entre los dos, aunque aveces la madre de Irina se les unía.

Y la pareja nunca se separó