Soy gitana
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola a todos.
Me llamo Abigail, tengo en la actualidad 22 años, pero desde que tenía 13 años, siempre quise ser distinta, yo veía a mis padres que apenas sabían escribir, mi madre siempre ocupada con mis tres hermanos menores y mi padre buscando chatarra, yo quería estudiar, ser alguien.
La única regla que estaba dispuesta a aceptar es la de llegar virgen de la vagina al matrimonio.
Mi prima Tere tiene 14 años, es mas gordita que yo, sus tetas son mas grandes que las mías, y su culo también mas grande.
Yo a esa edad era bastante delgada, apenas me estaban asomando las tetas y mis nalgas eran pequeñas.
Con mi prima estábamos siempre juntas, cuando íbamos al parque nos poníamos a luchar y se daban los roces, hasta que directamente nos tocábamos.
A mi sus tetas me vuelven loca, me encanta chuparle los pezones y mientras hago eso mi prima me mete su mano dentro de mi pantalón y me acaricia las nalgas, pero en el parque era muy arriesgado, ya que alguien nos podía ver y podríamos tener serios problemas con nuestros padres.
A la tarde noche, nos escondíamos detrás de un muro a la entrada del garaje de donde vivíamos, pensando que nadie nos veía y nos dedicábamos a tocarnos, lo que no sabíamos es que había un vecino, un payo, que nos miraba, un hombre como de la edad de mi padre.
Mi prima se fue con sus padres unos días a casa de su abuelo y me quedé sola, aburrida, extrañaba a mi prima.
Una tarde estaba en la vereda escuchando música, y este señor sale a pasear a su perrita y me ve, nos saludamos y me pregunta por mi prima, "fue unos días a casa de sus abuelos paternos, ya que mi madre y la suya son hermanas", le dije, y así conversando, fuimos a pasear al perro.
Mis padres lo conocen a Federico, que es argentino y siempre dicen que es un buen hombre, por eso no me dicen nada si me ven hablando con él.
"Abi, sabes que lo que hacen con tu prima te puede traer serios problemas con tus padres si se enteran", me dijo, cuando íbamos caminando, yo quedé sorprendida, "que hacemos con mi prima?", le dije, como si no entendiera lo que me decía, "mira, ahí donde se esconden para tocarse, da mi ventana y las veo siempre como como vos le chupas las tetas y ella te mete la mano dentro del pantalón", me dijo, yo me quedé de piedra, no sabía que decir, "pero tú no dirás nada verdad?", le dije muerta de miedo, "no, vos sos distinta, se nota que vos queres ser alguien en la vida, te veo estudiosa, tenes una linda forma de hablar, pero Tere va a ser como todas las demás, cargada de hijos", me dijo, y seguíamos caminando, "y cuando te mete la mano dentro del pantalón, que te toca, el culete o el coño?", me dijo, soltando al perrito, dejando que corra, "las dos cosas", le dije, ya que no me valía de nada mentir, "y te gusta?", me dijo mirando mi cara, que estaba roja, "si", le dije bajando la cabeza, "y que más han echo?", me seguía preguntando y yo me moría de la vergüenza, "nada, solo eso", le dije, "pero no se han visto desnudas, no se han dado besos en sus partes, solo se tocan así?", me decía, yo no sabía si seguir respondiendo e irme o seguir hablando con Federico, "una sola vez nos vimos desnudas, pero de besarnos ahí, no sabía que se podía hacer", le dije, notando que estaba cada vez mas nerviosa.
"Te va a gustar mucho que te besen ahí, vas a sentir cosas muy ricas, que a medida que te besen ahí y te vayan acariciando vas a sentir nuevas sensaciones", me decía, y yo picada por la curiosidad, le pregunté que sensaciones iba a sentir, "vas a sentir como se te moja la vagina, vas a sentir la necesidad de tener el pene del hombre dentro tuyo para disfrutar más", me contaba, "pero es que nosotras tenemos que casar virgen", le dije confundida, "bueno, dejas que el hombre entre por tu culete", me dijo, "pero se puede hacer por ahí también?", le pregunté curiosa, "si, te va a doler un poquito mas que hacerlo por la vagina, pero después que pasa ese dolor, vas a disfrutar mucho", me decía.
Yo me quedé pensando en lo que me había dicho, "y como tendría que hacer, mi prima no tiene polla para meterla en mi culete", le dije toda inocente, "no lo se, es un paso muy delicado hacer eso, debes de estar muy segura que quieres probar otras cosas y no solo tocarse así en la calle, que es muy peligroso que sus padres las pueden descubrir", me dijo, lo cual tenía razón.
Yo no me quería ni imaginar que me podrían hacer mis padres si nos descubren a Tere y a mi tocándonos.
Llegamos a donde vivimos y cada uno se fue a su casa.
Yo me quedé pensando en todo lo que Federico me había dicho, no sabía que hacer.
Así estuve pensando unos días y cuando regreso del instituto voy a casa de Federico, que vive en el bajo, y le digo si él me puede enseñar todo eso que me dijo.
"Si, pero ahora anda a tu casa así tu madre no sospecha nada y cuando salgas a la calle, ven directo a mi casa", me dijo.
Yo fui a casa, mi madre me estaba esperando con la comida, que apenas comí de los nervios que tenía, ayudé a mi madre a limpiar la cocina y me fui casi corriendo a casa de Federico.
Cuando lo golpeo la puerta, suave sin que nadie escuche, me abre y me hace pasar, yo tenía las manos sudadas, no sabía que me iba a hacer, él se sentó en el sillón del salón de su casa y me hace que me siente en sus rodillas, hablando conmigo y pasando sus manos por sobre mi ropa me acariciaba las tetas, que son muy pequeñas, le daba suaves pellizcos, me empezó a pasar su lengua por mi oído, empezando a meter su mano dentro de mi camiseta, haciendo que me sienta nerviosa, pero no intranquila, a medida que él seguía con sus caricias en mis pechos y su lengua en oído, mi respiración se iba haciendo mas fuerte, sentía una cosquilla extraña entre mis piernas.
Me saca la camiseta y se mete uno de mis pezones en su boca, haciendo que ahora desahogue mis nervios con un fuerte suspiro, sentía su lengua lamer mi pezón y como quería meter su mano dentro de mi pantalón, yo estaba como soñando, hasta que siento sus dedos acariciar mi coño, eso me dio como electricidad.
Federico saca su mano de dentro de mi pantalón y se mete los dedos con los que me estuvo acariciando el coño en su boca.
Me hace poner de pie y nos fuimos a su dormitorio, ahí me termino de desnudar y me acostó en su cama, haciendo que abra mis piernas y él pasaba sus dedos con mucha suavidad por mi coño, haciendo que mis gemidos sean mas fuertes.
Yo jamás había sentido nada de esto, eran sensaciones nuevas para mi.
Veo que me abre mas las piernas y mete su cabeza entre ella, haciendo que de un grito de placer al sentir su lengua lamer mi coño, haciendo que me retuerza, "te gusta?", me dijo, volviendo a seguir lamiendo mi coño, "si, mucho", alcance a decir antes de que se me escape un fuerte gemido, veo que ahora el que se desnudaba era él, por primera vez en mi vida estaba viendo una polla, que me pareció enorme y hermosa a la vez.
Federico se puso de rodillas entre mis piernas y siento como la empieza a pasar por entre los labios de mi coño, para arriba y para abajo, haciendo como él me había dicho la necesidad de que me la meta.
Me hace dar la vuelta y quedé con mi culete para arriba, Federico me empezó a besar y lamer mi espalda, hasta que llegó a mis nalgas, donde me las siguió besando y lamiendo, siento como me las abre y su lengua empezó a lamer mi ano, haciendo que sienta esa sensación extraña pero muy agradable, sentía como apoyaba sus labios contra mi ojete y hacía fuerza como si estuviera sorbiendo una bebida con pajilla, y otra vez su lengua lamer todo el contorno de mi ano.
Me hace poner en cuatro en el borde de la cama y me empezó a pasar su polla por mi culo, y lo hacía llegar a mi coño, la apoyaba contra mi ano y sentía como hacía fuerza pero no la metía.
Era cierto todo lo que me dijo, mi coño estaba empapado, tenía la necesidad de que meta su polla dentro mío.
Mis cabellos estaban sobre mi cara, me ahogaba de tanto placer, solo podía gemir, siento como me pasa algo viscoso por mi ano, y muy despacio va metiendo el dedo.
Al principio me molestó un poco, pero como estaba así, me relaje y lo logró meter todo, lo movía en círculos dentro de mi culo, haciendo que mis gemidos sean mas y mas fuertes.
Saca el dedo y siento como acomoda su polla contra mi ojete, haciendo un poco de fuerza y será por el lubricante que me puso, que gemí de dolor cuando sentí como su polla me empezó a entrar en el culo, otro empujoncito y otro pedazo de polla que me entraba, haciendo que vuelva a gemir.
Me dolía, pero a la vez me era muy agradable sentir como Federico me iba metiendo la polla en el culo.
Me pasó su brazo por debajo de mi tripa y siento un dedo suyo acariciar mi coño, haciendo que me relaje y otro empujón y mas polla dentro de mi culo, hasta que con el brazo que me paso por debajo de la tripa, me levanta y él se sienta en el borde de la cama, dejando que por mi propio peso haga terminar de entrar su polla en mi culo, mientras no dejaba de acariciar mi coño.
"Estas disfrutando?", me dijo, lamiendo mi oreja de nuevo y acariciando mis tetas y mi coño con sus manos, mientras estábamos quietos los dos, yo estaba con su polla bien dentro de mi culo, "me duele, pero si estoy disfrutando mucho, era verdad todo lo que me dijiste", le dije, pegando mi espalda contra su pecho, mientras Federico pasa sus manos por debajo de mis nalgas y me empieza a subir y bajar y yo sentía como entre nubes como su polla salía y entraba de mi culo, "Abi, cuando estén Tere y vos juntas no dejes que te toque el ano, ya que te va a quedar abierto", me dijo, sin dejar de subirme y bajarme de su polla, "y si se lo digo y venimos y se lo abres a ella también?", le dije, dejando que me siente y su polla se vaya bien adentro de mi culo, y cogiendo mis caderas me movía en círculos, "yo a Tere no le tengo mucha confianza, mejor que esto lo mantengamos en secreto vos y yo, me dijo sin dejar de mover su polla dentro de mi culo, "vale, como tú digas", le dije, dejando que me siga follando el culo, "ahora vas a sentir como te lleno de leche el culo", me dijo, moviendo mas y mas rápido su polla y su dedo acariciaba mas fuerte mi coño, haciendo que me mee ya que no pude contener esa sensación, y Federico empezó a gemir fuerte y sentía como si su polla latiera dentro de mi culo.
Yo estaba muy agitada, cansada, pero feliz, extraña, me había gustado todo lo que este payo me hizo, lentamente me hizo bajar de su polla y sentía como si tuviera ganas de ir al baño, mi ano se abría y se cerraba solo, me quedé parada frente a Federico y sentí algo líquido correr por mis piernas hasta mis pies, "y esto?", le dije, pasando mi mano por lo que me corría, "es la leche que te deje dentro del culo, que ahora como tenés el ano abierto, se te sale", me dijo, cogiendo una toalla y se limpió la polla, me dijo que me quede ahí donde estaba y fue al baño, y volvió con la toalla mojada y me empezó a limpiar el culo y las piernas.
Vi manchas de sangre en la toalla y me dijo que era porque habíamos roto el ano, que es normal, pero que no pasaba nada.
Lentamente me vestí y me fui, con la promesa de que iba a volver otro día y que me había gustado como me había follado el culo.
Voy a ver si convenzo a Tere, así venimos las dos juntas, pero de esto no le voy a decir nada a Federico.
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