Soy Luisa
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola a todo, me llamo Luisa, tengo 55 años, divorciada, soy de estatura mas bien baja, mido 1,55, ahora soy bastante rellenita, vivo en Valencia, sola, ya que no quiero una pareja estable, soy una mujer muy liberal, otros me dirían puta, pero así es mi vida, la que yo elegí. Me case a los 20 años, con un hombre al que adoraba, lo complacía en todo, todo lo que quería lo hacía, tríos, intercambio de parejas, sexo lésbico para que él me vea, todo, absolutamente todo, hasta que un buen día me dijo que se había aburrido de mi, y se largo. Yo quedé destruida, en que había fallado. Yo me deje llevar por la vida, me dedique a salir a bares, a beber, iba por la calle caminando y si alguien me gustaba, yo iba y le decía si me quería follar, en cualquier lado, en un portal, en un parque, no tenía, y bueno, no tengo vergüenza de hacerlo en cualquier lado y con quien sea.
Recuerdo que una vez salí de uno de los bares donde yo suelo ir, un poco mareada, y me cruzo con un chico negro, alto, fornido, atractivo, y la verdad que no pude contenerme y le dije si le apetecía follarme, él, me quedó mirando, y yo empecé a pasar mi mano por su polla sobre su pantalón, "ven cariño, vamos al parque que quiero chupar y comerme una polla negra", le decía sin dejar de tocar su polla, que noté que se estaba poniendo dura dentro del pantalón, el chico me miró y nos fuimos al parque que estaba cerca del bar, como no era la primera vez que me iba a follar ahí, sabía donde podíamos estar tranquilos, nos metimos entre unos matorrales, me puse de rodillas frente a él y le baje el pantalón, dejando una polla como jamás había visto ni tenido en mi vida, casi no me entraba en la boca, yo abría mi boca lo mas que podía y costaba trabajo hacerla entrar, y ahí estaba yo, bastante mareada, chupando la polla de ese chico negro que ni su nombre supe jamás, escuchaba sus gemidos a medida que chupaba y lamía su polla
Cuando estuvo bien dura, me puse de pie, le di la espalda, me recogí la falda, quitándome las bragas y me puse en posición para que meta toda su tremenda polla dentro de mi coño, que estaba muy mojado, la guíe con mi mano, y gemí de placer y dolor cuando me la empezó a meter, me llenaba el coño con su polla, "que hermosa polla tienes, como se siente dentro del coño", le decía moviendo mi cintura y sintiendo esa enorme polla como me estaba follando, mete sus manos dentro de mi camisa y me empieza a estrujar las tetas a medida que me seguía follando, "la quieres por el culo?", me dijo, metiendo y sacando su polla de mi coño, estrujando mis tetas, haciendo que disfrute como loca, por lo caliente y lo mareada que estaba le dije que si, que intente meterla por el culo, siento como saca su polla de mi coño, apoya su mano en mi espalda, haciendo que me agache un poco mas, así sacaba mas mi culo hacia él, me abro las nalgas con mis manos y siento como pasa saliva por mi ano, siento su polla pasar un par de veces o tres por mi ano, hasta que la acomoda, y haciendo fuerza siento como me la empieza a meter en el culo, haciendo que grite de dolor al sentir tremenda polla entrar, yo he follado innumerables veces por el culo
Perdí la cuenta de los hombres que me follaron por atrás, pero esta polla era tremenda, gruesa, larga, sentía como me la iba metiendo, como mi ano se rasgaba para que esa tremenda polla entre, yo gemía de dolor, "basta, saca tu polla que no la aguanto, me duele mucho el culo", le dije, notando que me estaba haciendo daño, pero el chico ese, lejos de sacarla, me cogió de la cintura y la metió toda de un solo golpe, haciendo que de un tremendo grito de dolor al sentir esa enorme polla entrar toda en mi culo, quedé aturdida por el dolor, estaba a punto de caer al suelo, mientras ese chico me follaba el culo con tremenda brutalidad, yo solo le suplicaba que me saque esa enorme polla del culo, estaba llorando de dolor, mientras sentía su polla destrozar mi ano, hasta que por fin se corrió y me saco la polla del culo, yo caí de rodillas, llorando, sentía mi culo lastimado, jamás en mi vida me había dolido así el ojete, él simplemente se limpio su polla en mis cabellos y se marchó dejándome así, dolorida, como pude, me arregle mi ropa y me fui caminando a mi casa, el dolor en el culo era tal, que casi no podía caminar.
Me limpio el ano, y estaba sangrando, no recuerdo haber tenido abierto así mi ano, ni habiendo follado con varios tíos a la vez. Al otro día cuando fui al trabajo, me costaba caminar, yo soy cocinera en otro bar, cuando mis compañeros me vieron así, me preguntaron que me había pasado, y les conté, ya que todos ellos me follan cuando quieren o cuando sus mujeres no los complacen el algo, acá esta su amiga Luisa para aliviar sus necesidades. Me fui a la cocina y le dije a mi ayudante que me de un trapo bien mojado y escurrido, me baje el pantalón y le dije que lo meta entre mis nalgas para refrescar el ano, así sentí un poco de alivio, cuando me estoy arreglando la ropa, veo como mi ayudante saca su polla que estaba dura y me dice que se la chupe, "hay hombre, me haz follado por el culo las veces que haz querido y por verme así, te haz puesto palote?", le dije, metiendo su polla en mi boca y chupando hasta hacer que se corra y me trago su leche, y justo cuando se estaba corriendo, entra un camarero y al verme así, saca su polla también y hace que la chupe hasta correrse él también en mi boca.
Al terminar mi primer turno, me voy a casa, quería recostarme, cuando voy entrando al portal, me encuentro con el conserje, un hombre bastante mayor, pero que se conserva bien, alguna que otra vez habíamos follado, "como estas Luisa, a descansar un rato?", me dijo, con su una sonrisa simpática, "eso pretendo", le dije, devolviendo la sonrisa, "Aurelio, me puedes hacer un favor?", le dije antes de entrar en casa, "vale, que necesitas?", me dijo, entrando a casa conmigo, yo le conté lo que había pasado la noche anterior y le dije si me podía ver el ano, como lo tenía, ya que si bien me dolía, no sabía como estaba, y como con Aurelioi también he follado varias veces y me ha follado el culo, no sentía vergüenza ninguna de mostrarle como estaba.
Me quito el pantalón, me pongo sobre el sillón y me abro las nalgas dejando que mi amigo me vea el ano, "hombre, Luisa, yo no entiendo mucho de medicina, pero se nota que tu ano esta bastante lastimado", me dijo, sin pasar sus dedos, ni tocarme, "pero mi coño no, mi coño esta bien, quieres echarme un polvo?", le dije, poniéndome ahora boca arriba y abriendo bien mis piernas dejando que Aurelio me vea bien el coño, abriendo mis labios exteriores con mis dedos, a lo que él, de inmediato se bajo su pantalón dejando su polla fuera, que yo cogí con mi mano y se la empecé a chupar, despacio, haciendo que se ponga bien dura, hice que se siente en el sillón, y yo me subí sobre él, guiando su polla a mi coño y dejando que me entre despacio y toda, "chupa mis tetas mientras me follas", le dije, subiendo mi camiseta y dejando mis tetas al alcance de su boca, que mientras el me las chupaba yo movía mi cintura disfrutando de su polla como me estaba follando, "hoy eres el primero que me folla", le dije sin dejar de mover mi cintura, "que raro que todavía no te haya follado nadie?", me decía moviendo su polla dentro de mi coño y chupando mis tetas, "no, hoy solo he chupado dos pollas nada mas", le decía moviendo mas rápido mi cintura, sintiendo que iba a tener un orgasmo
"Aurelio, me voy a correr, quieres llenar mi coño de leche?", le decía entre gemidos y a punto de correrme, hasta que no pude aguantar mas y me empiezo a correr y siento como casi de inmediato Aurelio me empieza a llenar el coño de leche, yo aplastaba su cara contra mis tetas sin dejar de mover mi cintura, sintiendo como el conserje me llenaba el coño con su leche caliente, disfrutando del rico polvo que me estaba echando. Si les gustó lo que he contado, dejen sus comentarios y seguiré contando sobre mi vida.
Pues la verdad que si es puta, y ya no en tono de halago si se puede decir asi, sino uno degradante si se nota que de andar siendo tan coño fácil le fue mal.
Dice un tema: «¿Qué gracia tiene andar por esta sociedad, jactándose de irresponsable?».