Una experiencia muy extraña 2
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Karen estaba acurrucada contra mi, sentía como pasaba sus pies por mis piernas, "me duele el ano", me dice, buscando mi boca con la suya, "me imagino, recién lo acabamos de romper", le dije, besando sus labios y pasando mi mano por sus redonda y blancas nalgas.
"Te gusto papi?", me dijo, pasando sus tetas por el costado de mi cuerpo, "si, mucho", le dije, haciendo que se ponga boca arriba y le empecé a chupar los pezones, mientras que con la mano que le acariciaba las nalgas le empecé a acariciar la concha.
Ella suspirando, abrió sus piernas y me dejaba que le meta los dedos, mientras lamía y chupaba sus pezones.
La escuchaba gemir, "hay papi, me haces calentar enseguida", me dijo, y noté como tenía mojada de nuevo su concha.
Karen me empezó a besar la boca, la cara y siguió bajando por mi pecho, subiendo encima mío, acomodando su culo contra mi cara y siento como se mete mi pija en su boca y la empieza a chupar.
Yo le abrí las nalgas y vi su ojete hinchado, como salido para afuera, con manchas de sangre y leche, su concha rosada y abierta, mojada, se le notaba que estaba bien jugosa.
Mientras Karen me seguía chupando la pija, yo empecé a pasar mi lengua por los labios de su concha, buscaba su ojete con mi lengua, ella retorcía el cuerpo a medida que la iba lamiendo, movía su culo contra mi cara, sentía como me daba mordidas en la pija, gimiendo, "te gusta papi, te gusta lo que te hace tu niñita?", me dijo, volviendo a meter la pija en su boca y seguía chupando, "estas divina", le dije, lamiendo su concha y metiendo mi dedo en su culo y escuchando como Karen daba un fuerte gemido al sentir mi dedo entrar en su culo.
Siento como deja de chupar mi pija, se va dando la vuelta sin bajar de mi cuerpo, y con su mano acomodó mi pija contra su concha y se fue sentando de nuevo, hasta que la volvió a tener toda dentro de nuevo, "papi, papi, me vuelve loca tu verga", me dijo, moviendo su cintura, cerrando sus ojos y sacando su pecho hacia adelante.
Mientras Karen no dejaba de mover su cintura, yo empecé a jugar con sus tetas, "hay papi, como haces disfrutar a tu nenita con tu hermosa verga", me decía, sin abrir los ojos y sin dejar de moverse, "mi nenita la quiere de nuevo dentro de su culito?", le dije sin dejar a apretar sus pezones, "si papi, dale toda la verga en el culo a tu nenita", me dijo, subiendo y bajando su cuerpo haciendo que mi pija entre y salga de su concha.
"Ven, ponte así", le dije, haciendo que se baje de encima mío, y la puse boca arriba, le levante las piernas y le pase saliva por el ano, acomodando mi pija, "papi te va a dejar el culito bien abierto", le dije, haciendo fuerza y escuchando el gemido de Karen cuando le empezó a volver a entrar mi pija en su culo, "si papi, si, deja mi ano bien abierto", me decía, a medida que mi pija le entraba toda, "me duele papi, pero como me gusta, me gusta mas que por adelante", me decía entre gemidos de placer que daba a medida que yo movía mi pija bien adentro de su culo.
"De quien es este culito?", le decía, sacando y metiendo mi pija, "de mi papi rico, que me lo rompió con su hermosa verga", me decía, moviendo su cabeza de un lado a otro gimiendo.
Yo le miraba la cara y veía como disfrutaba con mi pija bien adentro de su culo, le levanté mas las piernas y se la saqué, viendo como le había quedado el ojete, abierto, redondo, "hay papi, que pasó, no le vas a coger mas el culito a tu niñita?", me dijo, abriendo sus ojos sorprendida, "si mi amor, es que lo vamos a hacer de otra manera", le dije, sentándome en el borde de la cama y le dije que se siente sobre mi pija.
Karen se paró dándome la espalda y se abre las nalgas buscando mi pija con su culo, que yo con mi mano se la acomodé y se sentó de una sola vez, haciendo que mi pija le entre toda.
Ambos dimos un fuerte gemido, fue increíble sentir como Karen se metió toda la pija en el culo de una sola vez.
"Así papi, que rico", me dijo, pegando su espalda contra mi pecho, y buscando mi boca con la suya, y mientras nos besábamos, yo le acariciaba las tetas, le hice abrir las piernas y le empecé a acariciar la concha, a lo que ella gemía y gritaba de placer.
"Me voy a poner celosa cuando los escuche coger a ti y a mamá, que ella este disfrutando de esta hermosa verga, pero se que cuando podamos, esta hermosa verga me va a coger a mi también", me decía, abriendo sus nalgas y moviendo sus caderas en círculos con toda mi pija dentro, "si mi amor, y no te olvides nunca que esta pija fue la que te rompió el culo", le dije, metiendo mis dedos en su concha, haciendo que Karen grite de placer.
Nos seguíamos moviendo, besando, mis manos le acariciaban todo el cuerpo, Karen gemía, se retorcía de placer.
"Papi, papi, dale verga por el culo a tu niñita", me decía, lamiendo mi cara.
Karen estaba tan caliente que me hacía poner muy loco a mi también, "si mi amor, que rico, como te estoy cogiendo el culo", le dije, pasando mis manos por debajo de sus nalgas y la empecé a subir y bajar, haciendo que mi pija entre y salga de su ojete, haciendo que Karen grite de placer, "hay papi, me matas de placer, que rico me coges", me gritaba, acariciando ahora ella misma sus tetas, mientras que yo no dejaba de subirla y bajarla de mi pija.
"Papi, deja que me ponga en cuatro y me llenas el culito de leche, no doy mas, me estas matando", me dijo.
Yo la deje bajar de mi pija y ella sola se pone en cuatro, se abre sus nalgas dejando que le vuelva a ver su ano, no se si sentir lástima, placer, morbo, orgullo, o una mezcla de todo al ver como estaba su ojete de abierto.
Se la acomodé y se la volví a meter de una sola vez, volviendo a gemir tanto Karen como yo de placer al sentir sus nalgas pegadas a mi, y mi pija bien adentro de su culo, "papiiiiiiiiiiii", me gritó Karen, agachando mas la parte de adelante de su cuerpo y sacado mas su culo hacia mi.
Yo le agarré la cintura y le empecé a sacar y meter mi pija fuerte de su culo, escuchando como se pedorreaba, como gemíamos los dos, cogiendo así de fuerte su ojete, "dame leche papi, llena el culito de tu niñita papi", me gritaba, aplastando su cara contra contra el colchón, mientras yo seguía cogiendo con mucha fuerza su culo, "papi, me vengo, me vengo papiiii", me empezó a gritar, empezó a temblar su cuerpo, yo se la metí lo mas adentro que pude y sentía como salían los chorros de leche de mi pija dentro de su culo, también gemía como loco, me retorcía, era una cosa que no puedo explicar lo que me estaba pasando, pero si se que estábamos gozando como locos los dos.
Ver a Karen de rodillas en el borde de la cama, con sus tetas aplastadas contra el colchón, sacando su culo hacia mi, y ver como mi pija sale y entra de su ojete, eso es algo alucinante, ese culo de nalgas bien blancas, ver como se las abre para que no quede nada de mi pija fuera, sacarle la pija, ver lo abierto que le queda el ojete rosado, como le sale la leche, como Karen lo abre y lo cierra, volver a meterla, ver como le entra, despacio, hasta que desaparece toda por su ojete, volver a sacarla, acariciar sus nalgas tersas mientras no dejo de ver su ojete, lo abierto que lo tiene, como poco a poco se va acostando boca abajo en la cama, pasar mi huevos por sus pies, me va a resultar difícil no poder cogerla mientras esté Plinia en casa, le dije a Karen de como a la madre no le gusta salir a caminar, que vayamos ella y yo, así hacemos ejercicios y podemos coger en el monte que hay a unos kilómetros de casa, y así, Karen y yo nos pusimos de acuerdo para salir de vez en cuando a caminar y echarnos unos polvos en el monte.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!