Una nena muy atrevida. 2

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Sebas..
No me gusta engañar a los lectores diciendo que son cien por ciento reales, por lo que nada es verdad, nada es mentira, todo depende del cristal con que se mira, este relato es completamente una fantasía, pero por ahí puede haber algunas nenas que sean así.

Salí del restaurante muy excitado todavía por lo rico que me jalo el pene la nena, en el auto me masturbe hasta venirme otra vez antes de quitarme el condón, me cambie la ropa y fui a ver a los clientes de la tarde, mientras seguía pensando en la negrita caliente indeciso de irla a ver a la noche, no sabía si ya excitado, no me iba a controlar penetrándola, era un caliente y me gustaba disfrutar del sexo con mujeres lindas pero nunca había hecho nada con una nena tan chica y no quería lastimarla al penetrarla.

Termine mis visitas a las cinco y media, fui al hotel a darme un baño tenía el pene muy parado todavía de recordad a la nena, por lo que decidí ir a su encuentro para que jugara con mi pene y hacerla disfrutar un rato.

Me puse una bermuda sin ropa interior y una playera, tome una toalla del hotel y salí en el auto a Mandinga a su encuentro, pare el auto frente al parque que me dijo y baje quedándome recargado en el, en el parque había varios nenes y nenas jugando y hablando pero no veía a la negrita, ya había oscurecido, mire el reloj y eran las siete y media por lo que pensé que a lo mejor la nene me había jugado una broma, decidí esperar solo un poco mas antes de irme.

No paso mucho en que la vi venir caminando moviendo su cuerpo seximente al parque, traía una minifalda de mezclilla más costa que la de la tarde con una playera corta dejando ver la cintura y ombligo, cuando me vio camino directo hacia mí, me sonrió y sin parar dijo
—–sígame para que no vean que me voy con usted—
Le sonreí, cerré el auto y fui tras de ella a corta distancia, camino unas dos calles antes de parase y esperar a que la alcanzara, cuando estuve con la nena me toco el pene sobre la bermuda
—–que bueno que si vino para que me deje tocarle su pene—

Me fije que nadie estuviera en la calle y metí una mano bajo su playera tocándole un pecho pues no traía corpiño
—-negrita también me quede con ganas de tocar tu lindo cuerpo, pero tenemos que ir a algún lugar donde no nos vean manoseándonos—
Me sonrió agarrándome de la mano y empezamos a caminar
—-se donde lo podemos hacer sin que nos vean y molesten, solo hasta las nueve porque tengo que regresar a casa-
Me llevo por unas calles hasta llegar un enrejado, me toco otra vez el pene que ya estaba parado
—- vamos a meternos por este hueco del enrejado a mi escuela y nos metemos a uno de los salones—-
Mire nervioso a todos lados, le acaricie el cabello
—-nena pero se puede dar cuenta el conserje—
Me toco otra vez el pene
—- el conserje ya es un viejito, toma mucha cerveza seguro ya está dormido, mi hermano y yo nos hemos metido varias veces a hacer cosas—

Se metió entre el enrejado y la seguí, me tomo de la mano y caminamos hasta uno de los salones, lo abrió nos metimos y cerró la puerta con pasador, aunque era de noche el salón se iluminan muy bien por la luz del alumbrado público, se paro frente a mi quitándose la playera y falda dejando ver su lindo cuerpo pues no traía ropa interior
—-acá me lo puede hacer sin que nadie nos mire—

Me quite también la ropa, los dos ya estábamos muy excitados, me agarro el pene jalándolo muy rico, con una mano empecé a acariciar y apretar sus pezones, me incline un poco y la bese, ella misma me beso en la boca y nuestras lenguas no tardaron en estar jugando, con la otra mano le acariciaba la cintura y nalgas, era tan rico lo que sentía que no tarde más de diez minutos en que me dio el orgasmo saliendo el semen que fue a parar en el pecho y abdomen, al sentirlo se separo mirando como le escurría
—–me echo su leche, está muy calientita—
Se lo empecé a untar en el cuerpo bajando la mano hasta llegar a su concha, por lo que con un dedo empecé a jugar con su clítoris, la sentí ya húmeda por sus jugos, la negrita se estremeció al sentir eso
—-nena te voy hacer gozar rico—

La bese en la boca sin dejar de jugar con su clítoris, me hinque para quedar a su altura para besar y chupar sus pequeños pechos, con la otra mano le acariciaba las nalgas, empezó a dejar escapar unos pequeños gemidos estremeciendo el cuerpo al sentir como la manoseaba, ella se dejaba acariciándome el cabello mientras yo seguía acariciando la concha y clítoris hasta que gimió mas fuerte sintiendo como terminaba salido más liquido, le bese en la boca sin quitar la mano de la concha
—–te gusto lo que sentiste negrita—

Sonrió agarradme el pene
—-si, sentí muy rico, mi hermano no lo sabe hacer, métame su gran pene—-
Estaba muy excitando pero no la iba a lastimar, la lleve al escritorio la tome de la cintura sentándola, la recosté subiendo y abriendo las piernas, la muy caliente ya tenía bien abiertos y húmedos los labios vaginales viéndose la entrada de la vagina, me metí entre sus piernas besándonos en la boca, después le lamí y chupe los pechos antes de llegar a la concha para besarla y lamer pasando la legua por la vagina metiéndole la puntita saboreando sus ricos jugos, no tardo en estar otra vez gimiendo y moviendo su cuerpo por lo que sentía, solo a veces con voz entre cortada me pedía que se la metiera, aunque estaba muy caliente decidí no penetrarla, la bese en la boca y tocándole los pezones
—–negrita linda, no te quiero lastimar, por eso no te meto el pene, tengo dos lindas sobrinas de tu edad y no me gustaría que las lastimara un señor metiéndoles el pene, solo disfruta lo que hacemos, ya tendrás edad para sentir un pene grande—

Le abrí las piernas puse la mano y le metí el dedo índice a la vagina, la nena gimió subiendo la cadera, lo empecé a mover para que lo sintiera
—–nena, disfruta del dedo como si fuera mi pene—
Sin dejar de moverle el dedo dentro le lamí el clítoris, empezó a gemir por lo que sentía, el pene me punzaba por lo excitado que estaba al escuchar a la nena, que movía el cuerpo y se tocaba ella misma los pechos, aunque no me estaba tocando el pene sentí que me iba a venir, saque el dedo me agarre el pene pasando la punta en la concha, salió el semen quedado en la concha y escurriendo entre sus piernas por la vagina, apenas termine le metí el dedo otra vez
—–me echo su leche en la concha—
La bese en la boca
—-si mena para que sientas mar rico—

Empezó a gemir más seguido con su respiración entre cortada, estaba a punto la nena
—-vamos negrita gaza vente rico—-
Gimió fuerte tensando su cuerpo, sentí como la vagina punzaba apretando mi dedo y mojándome la mano por los jugos que le salían, cuando termino relajo su cuerpo abrió los ojos sonriéndome
—-me gusto mucho las cosas que me hiso, sentí muy rico—

Casi ya eran las nueve, le bese los pezones y después en la boca
—–negrita linda también me gusto mucho hacerte cosas ricas, pero ya es hora de irnos, sino te regañan por regresar tarde—
La ayude a bajarse del escritorio me agarro el pene duro jalándolo
—-se lo puedo mamar para que me de leche—
Le acaricie los pechos
—-nena si tú quieres, lo puedes hacer—

Se agacho frente a mí, lo agarro y se lo metió a la boca chupándolo gozando mucho lo que sentía, seguro muchas veces se lo había mamado a su hermano porque sabía muy bien chuparlo, le acaricie el cabello y cara
—-así negrita, me estás haciendo sentir muy rico, chupa mas casi me sacas la leche—
Sentía como pasaba su lengua por la punta, mientras con la mano jalaba despacio el pene, trate de aguantar lo más que pude para disfrutar, pero sentí que llegaba el orgasmo
—-nena, ya se me va a salir la leche—
Ella siguió mamado aunque sintió los chorros de semen en la boca, por sus labios escurría parte de él, se paro sonriendo sin soltar el pene
—esta muy rica su leche, a mi hermano le sale muy poca—
Le acaricie las nalgas
—negrita es hora de irnos—-

Nos pusimos la ropa, salimos rápido del salón y de la escuela, dos calles antes de llegar al parque se paro tocándome el pene,
—-gracias, me gusto mucho lo que me hizo, mañana va a venir—
Metí una mano bajo la falda tocando su concha que se sentía todavía hinchada y húmeda
—–a mí también me gusto mucho estar contigo, eres una negrita muy caliente, mañana vengo a comer y a verte—
Nos dimos un beso de legua, al estar a una calle del parque deje que se adelantara, al llegar al parque su hermano la vio y fue con ella, hablaron algo y los vi caminar rumbo al restaurante y su casa, me fui al hotel a bañarme y dormir después de lo rico que me la pase con la nena.

Al otro día era el último que estaba en Veracruz, por lo que en la tarde tenía que salir rumbo a Tabasco, me pare temprano a ver los dos últimos clientes, al terminar fui a una tienda sex shop para cómprale un dildo vibrador chico y discreto.

En el hotel me cambie poniéndome un short y playera sin trusa, me fui a Mandinga a comer y despedirme de la nena, entre al restaurant y salude a la mama, la nena al verme sonrió, traía una mini falda tableada azul oscuro y un top rojo, me fui a sentar a la misma mesa que por el lugar en que estaba se podía hacer algo sin llamar la atención, la nena termino de atender una mesa y camino sexi sonriéndome, empezó a limpiar la mesa
—–hola linda negrita, como dormiste anoche—
Al estar poniendo el mantel me toco el pene
—bien gracias, me gusto lo que me hizo anoche—-

Vi salir de una de las puertas de la cocina a su hermano que ese día estaba ayudando también, metí la mano debajo de la falda tocando la concha sobre la panty, ella sonrió y abrió un poco las piernas para que tocara más adentro
—-le traigo su negra fría—

Sin deja de tocarla
—-no negrita, mejor una coca cola fría, no puedo tomar porque en un rato tengo que viajar a Tabasco, termine acá mi trabajo—
Su hermano camino a una mesa cercana y la nena se separo para que no la tocara, fue por la coca cola, me la trajo sirviéndola en el baso
—–entonces ya no va a venir—-
Le toque las nalgas acariciándola, abrí las piernas y me saque el pene parado por una de las piernas del short
—-no podre, pero en cuatro meses estaré por acá de regreso para verte negrita linda, para que juegues con mi pene—
Sonrió por lo que dije,
—en un rato regreso a ver qué va a pedir—

Me puse el condón por si me la jalaba la nena, después de atender otras mesas regreso conmigo metiéndose un poco tras la mesa para cubrirse se subió la fala dejando ver la panty bikini color violeta donde se le notaba la concha hinchada, se puso una mano en la cocha acariciándola
— anoche sentí cosas muy ricas que nunca había sentido, cuando me tocabas la concha—

Le metí la mano tocando la concha y vagina
—-lo se nena, por eso te traje un regalito para que no me extrañes mientras regreso—
Saque de la bolsa el dildo enseñándoselo y se lo di, al ser discreto no tenia forma de pene, era como un simple tubo de plástico con una de las puntas redondeada y por el otro extremo la tapa para las baterías, se lo di para que lo mirara
—-que es esto—
Le pique la vagina sombre la panty
—ese juguetito te lo metes por acá, lo enciendes y vas a sentir muy, pero muy rico que vas echar tanto liquido como si te orinaras—
Cuando se lo decía lo encendí vibrado en sus manos, por lo que sonrió, sin dejar de tocarla
—-quieres que te lo meta para que lo pruebes—
Sonrió sin contestar, se lo quite de la mano, jale la entrepierna de su panty, le coloque el dildo en la vagina y se lo empuje a dentro, cerró los ojos y se estremeció su cuerpo, cuando lo tuvo todo a dentro le acomode la panty
—-te gusta el juguete que te compre—
Le llamaron de otra mesa y se fue con el dildo ensartado, cuando se desocupo regreso le metí la mano tocado la concha, que estaba húmeda
—negrita creo si te gusta lo que sientes con el juguete, deja te lo quito sino mas a terminar muy mojada—
Se retiro acomodándose la falda
—-déjelo un rato más, siento rico, que le traigo de comer—

Me agarre el pene que ya me punzaba de lo excitado que estaba
—-solo tráeme un coctel de camarones y otra coca cola fría—
Se fue la nena moviendo su cuerpo sexi al sentir vibrar el dildo, cuando regreso con el pedido se metió tras la mesa subiendo la falda, ya traía la panty mas mojada por sus jugos, sonrió y se agacho ocultándose con la mesa, me agarro el pene jalándolo muy rico
—siento cosas muy ricas con el juguete—
Le subí el top tocándole los pezones paraditos
—-lo se nena, por eso te lo compre—
Vi que su hermano se acercaba, le acomode el top
—-negrita viene tu hermano—

Se paro acomodándose la falda sonrió y se fue, mientras comía la miraba atender otras mesas y como a veces se le notaba en la cara como se aguantaba las ganas de dejar escapar un gemido de placer, cuando termine de comer regreso pegándose a mí, agarro el pene jalándolo
—-quítese el condón se lo quiero mama para que me de leche—
No lo podía creer lo que dijo, el dildo la puso muy excitada, quite el condón envolviéndolo en unas servilletas de papel, se fijo que no la vieran se agacho poniéndose sentada sobre sus rodillas con las piernas un poco abiertas, agarro el pene y se lo metió a la boca mamándolo muy rico, le pues las manos en la cabeza acariciándola
—-que rico la mamas negrita, para que te de leche—
Solo escuchar su respiración rápida y como ahogaba los gemidos de placer, su hermano vino a una mesa cercana a atender a los clientes y vio a la negrita empinada sobre de mi pene
——nena, espera tu hermano vio lo que estás haciendo—-

Dejo de mamármela mirándome a los ojos
—–no se preocupe, el no dice nada porque yo lo he visto haciendo cosas con unas primas y primos—-
Se metió otra vez el pene a la boca y continuo mamándomela muy rico pero no tardo ni un minuto que dejo de mamarla sin sacarse el pene de la boca sentí como se estremeció y vi entre sus piernas como caían un poco de su liquido al piso, a la nena le dio un orgasmo, al termino siguió mamando rico, trate de aguantar lo mas que pude
—–negrita ya me sacas la leche que rico me la mamas—
Siguió mamado aunque salía la leche hasta que se la saco de la boca, se paro subiendo la falda, la panty estaba muy mojada
—–es muy rica su leche, me moje mucho—
Le puse la mano entra las piernas jale la panty y le saque el dildo, lo empecé a secar con una servilleta
—-negrita ve a quitare la panty para que no mojes la falda y me traes otra coca cola—
Se fue y cuando regreso agarre el dildo encendiéndolo
—-nena súbete la falda, te voy a enseñar de que otra manara puedes usar el juguete—

Se metió tras la mesa y subió la falda, su concha y labios vaginales estaban muy abiertos, le puse la punta del dildo en su clítoris ella sonrió al sentirlo vibrar ahí
—si lo pones en tu clítoris vas a tener muchos orgasmos sintiendo más rico—
Su hermano de lejos nos miraba con sonrisa morbosa aunque no veía lo que le hacía a la nena.

La llamaron de otra mesa por lo que se retiro, limpie bien el dildo y lo guarde en una bolsita que venía con él, regreso en un rato, le metí la mano bajo la falda tocando su concha hinchada y húmeda
—–negrita, cuando te estés divirtiendo con el juguetito acuérdate de mí, pero busca donde lo puedas esconder para que no lo vaya a encontrar tu mama, me tengo que retirar nena linda, tráeme la cuenta—
Fue con su mama y regreso en un rato con la cuenta, le pague dándole la propina y otro dinero para ella
—–este otro dinero es para que te compres ropa interior muy sexi, para que cuando regrese a verte te veas más sexi y linda negrita—

Sonrió y me agarro el pene
—gracias, me hizo sentir muy rico—-
Salí del restaurante despidiéndome de su mama y hermano, fui al estacionamiento pequeño que tenía, me subí al auto me quite el short y me puse un condón para masturbarme rico y sacarme semen de lo caliente que seguía, estaba muy entretenido jalándomela cuando vi de reojo que el hermano estaba parado a un metro del auto viendo como me masturbaba, la negrita había dicho que el no diría nada de lo que vio así que seguí disfrutado de la paja, en su short se le notaba que tenía el pene parado por morboso, la jale despacio y rápido gozando lo que sentía, cuando sentí el orgasmo deje de jalarla sin soltarla sosteniéndolo para arriba, salió el semen llenando la punta, en ese momento lo mire y le sonreí
—-se siente muy rico hacerse la paja cuando uno está caliente, mas cuando se sale la leche, apoco tu nunca te la jalas—

Sonrió tocándose el pene sobre el short y se metió sin decir nada, me puse el short y salí del estacionamiento rumbo a Tabasco.

Sebas.