Valentina y Tatiana (quinta parte)
seguimos con las aventuras de estas calientes primitas, Tatiana recibirá al fin lo que tanto estaba deseando..
Eran cerca de la 6 de tarde, la mamá de Valentina estaba atendiendo a los clientes en la panadería donde trabajaba, al ser una mujer atractiva y de buen físico había varios hombres que estaban tras de ella, incluido el señor José, dueño del negocio; y Daniel, un joven de 19 años que trabajaba como repartidor y encargado de las compras.
La señora no tenía la más mínima idea de que su hija estaba por recibir verga una vez más, a pesar de que estaba consciente de que su hija era un poco traviesa, se la imaginaba tocándose encerrada en su cuarto, y no completamente desnuda sobre un mueble a punto de iniciar otra faena sexual.
Mientras tanto, en el pequeño almacén que tenía Carlos dentro de su tienda, estaban 2 niñas totalmente desnudas, dispuestas a complacer los más bajos instintos del pervertido adulto.
Valentina esta acostada boca arriba sobre el sofá, Carlos le había colocado un cojín debajo de la cintura para mejor comodidad de ambos; al costado estaba Tatiana, expectante de lo que allí iba a pasar, ambas niñas tenían la mirada fija en ese miembro erecto que seguramente las iba a llenar de placer.
Ya estas mojadita cariño. -–le dice Carlos a valentina mientras pasaba su cabeza por el exterior de la conchita de la nena, como haciéndole sentir todo lo que se iba a comer.
Valentina por su parte no quitaba la vista de esa verga que prometía meterse completamente dentro suyo, y mordía sus labios, más por ansiedad que por miedo, y es que la nena estaba cachondisima.
Carlos se acostó casi completamente sobre Valentina, acomodo sus codos a los costados de su cabeza y empezó a besar con pasión a la nena, todo eso sin haberla penetrado aún.
Valentina por su parte correspondía los besos de Carlos con mucho gusto, pero ella quería y estaba lista para más, y lo hacía notar por la forma en que lo había abrazado de la cintura atrayéndolo más hacia ella, y también por la forma en que movía su pelvis tratando de tener el mayor contacto posible con el pene del sujeto.
Ya quieres verga verdad cariño. –susurro Carlos al oído de la nena.
UMMM!!! UMMMM!!! –gemía ella sin dejar de retorcerse debajo de él, y abrazándolo fuerte, tratando de que de una vez esa verga tan deseada por ella se le meta toda.
Respóndeme, cariño, quieres verga verdad. –le volvió a preguntar, esta vez introduciendo la cabeza en la infantil vagina.
Siii… Quiero verga… métamela. –respondió Valentina, ya sin aguantar tanta calentura, sorprendiéndose ella misma de lo que acababa de decir.
AYYYY!!! AYYY¡¡¡ UMMM!!! UMMM!!!—Grito la nena al sentir como el pene del sujeto se le metió completamente.
OHHHH!!! ¡¡¡QUE RICA ESTAS CARIÑO!!! UFFFF!!!
Carlos cumplió el pedido de Valentina y de una sola se la clavó hasta el fondo, provocando un grito de la nena, grito mezcla de mucho placer y un poco de dolor.
AYYY!!! UMMM!!! UMMMM!!!
¡¡¡QUE RICO APRIETAS VALENTINA… TIENES UNA CONCHITA DELICIOSA CARIÑO!!!
Se la dejo dentro unos pocos minutos, esperando que la vagina de la niña se amolde a ese intruso.
A un costado estaba Tatiana tratando de mirar cómo tenían ensartada a su prima, pero por la posición de ambos amantes le era imposible observarlo, Carlos se dio cuenta de eso y decidió darle una vista de lo que allí estaba pasando.
Al darse cuenta de que valentina ya estaba más que lista para empezar la faena sexual, se incorporó un poco de modo que ya se podía observar claramente como esa verga estaba introducida hasta la base en la cuquita de la niña, y como si eso no bastara, lentamente la saco casi toda y la volvió a meter, repitiendo esto varias veces, para deleite de ambas nenas.
AHHHH¡¡¡ AUMMMM¡¡¡ AYYYY¡¡¡ AHHHH¡¡¡
Valentina había empezado a gemir casi sin control, y es que, para suerte de Carlos, la niña había resultado ser gritoncita y no tenía reparos en hacerle saber a su macho de turno lo mucho que estaba gozando.
QUE RICO MI AMOR¡¡¡ UFFFF QUE RICO DARTE VERGA CARIÑO¡¡¡
Tatiana estaba tan caliente por ver porno en vivo por primera vez, que de manera inconsciente se había llevado una mano a su conchita y había empezado a tocarse.
Carlos estaba con una pierna flexionada sobre el mueble y la otra extendida en el piso, había puesto las piernas de valentina sobre sus muslos, en esa pose se podía ver claramente la verga del sujeto entrar y salir de la vagina infantil.
La nena tenía ambas manos a los costados intentando agarrase de cualquier cosa, mientras tanto Carlos ya había empezado a cogerla como se debe, la verga del sujeto entraba y salía a cierta velocidad de la vagina de la nena, haciendo que de sus labios se escapen gemidos celestiales.
Tatiana estaba al costado mirando todo el espectáculo, la nena nunca había estado tan caliente, y es que observar como esa verga entraba y salía de la cuquita de su prima, y verla retorcerse de placer hacían que se ponga cachodisima.
Estuvieron cerca de 5 minutos así, Carlos cogiendo a Valentina, y Tatiana mirando en vivo, hasta que el sujeto se salió de la nena y se sentó, haciendo que la nena se siente sobre él, quedando los dos de frente.
Ahora tú me vas a montar cariño. —le dijo a la nena, al mismo tiempo que acomodaba el miembro en la entrada de la cuevita infantil.
AHHHH¡¡¡ AYYYY¡¡¡ AYYYY¡¡¡ –empezó a gemir Valentina mientras subía y bajaba incrustándose ella sola ese pedazo de carne que tanto le gustaba.
ASI CARIÑO¡¡¡ QUE RICO TE LA COMES¡¡¡ UFFF¡¡¡¡ –bufaba Carlos por el tremendo pacer que le estaba dando la niña.
UMMM¡¡¡ UMMM¡¡¡ UMMM. –unos gemidos ahogados se escuchaban al costado, era Tatiana que había empezado a frotarse con más vehemencia la conchita, llegando incluso a meterse un dedo en la colita.
Valentina seguía en lo suyo, moviéndose como toda una putita sobre la verga de su macho, sus rodillas estaban a los lados de la cadera del sujeto y sus brazos alrededor de su cuello, mientras que Carlos la tenía agarrada de las caderas, y aunque no era necesario, de vez en cuando la agarraba de las nalgas para ayudar a que le nena suba y baje.
Carlos estaba más que feliz disfrutando de esa hermosa, caliente y desarrollada nena, sus manos no se quedaban quietas, acariciaban y agarraban todo lo que estaba a su alcance, iba de sus caderas a sus nalgas, a sus piernas gruesas, le acariciaba la espalda, los brazos, todo esto mientras le devoraba los labios y metía su lengua dentro de la boquita infantil.
AHHHH¡¡¡ AYYYY¡¡¡ AHHHH¡¡¡ UMMM¡¡¡ –gemía Valentina desbordada por el tremendo placer que la hacía sentir el sujeto, y como respuesta a eso movía aún más sus caderas y su pelvis, haciendo que ambos amantes se sientas en el paraíso del placer.
Tatiana tenía la mente en blanco, había tenido un orgasmo por el espectáculo que le estaban dando, había bajado la velocidad con la que se frotaba la vagina, estaba con los ojos cerrados y la cabeza recostada en el respaldar del mueble; de pronto siente que alguien le agarra la mano y la empieza a jalar, abre los ojos y ve que Carlos la está mirando con una sonrisa y le hace indicaciones para que se acerque más a él.
Carlos quería disfrutar al máximo esa experiencia, así que atrajo a Tatiana a su lado, y la acomodó de tal forma que los pechos de la nena estén al alcance de su boca, como había dicho anteriormente, Tatiana, a pesar de su edad ya tenía unas tetitas desarrolladas y bastante apetecibles, lo que hacía que cualquier hombre, incluido Carlos, deseara probarlas,
La escena era demasiado excitante; Carlos, como si de un rey se tratara, estaba sentado en el mueble, con la espala apoyada en el respaldar, Valentina estaba montada sobre él, cabalgándolo lentamente, pero sin pausa, y Tatiana estaba arrodillada frente a Carlos, de modo que él tuviera comodidad para besar, lamer y chupar sus tetitas.
UMMMM¡¡¡ UMMM¡¡¡ AHHH¡¡¡ –Valentina había empezado a acelerar el movimiento de caderas, su pelvis se meneaba frenéticamente de adelante hacia atrás, era evidente, estaba por correrse, a su corta edad estaba por sentir algo a lo que se estaba volviendo adicta.
Carlos por su parte estaba en el paraíso, tenía la mano derecha sobre las caderas de valentina, acompañando sus movimientos, y con la mano izquierda estaba manoseando las nalgas de Tatiana y apretándola a él para poder sentirla mejor y poder chupar sus tetitas a gusto.
OHHH¡¡¡ UFFFF¡¡¡ QUE RICO TE MUEVES CARIÑO¡¡¡
Bufaba Carlos preso del placer y a punto de correrse también, y es que en esa situación era imposible que dure un poco más.
ASI CHIQUITA¡¡¡ ASI CARIÑO¡¡¡ QUE RICO MI AMOR¡¡¡ QUE RICO TE MUEVES ¡
AHHH¡¡¡ AYYY¡¡¡ UMMMM¡¡¡ UMMMM¡¡¡–gemía descontroladamente la niña al llegar al clímax y sentir como era llenada de espeso y caliente semen dentro suyo.
UFFF¡¡¡ QUE RICO CHIQUITA¡¡¡ QUE RICO DARTE VERGA¡¡¡–Soltaba Carlos mientras llenaba el útero de la nena con varios chorros de esperma.
Luego de tomarse un momento para recuperar el aliento, Carlos pregunto a las nenas si querían algo de la tienda, a los que ellas respondieron alegremente y al unísono que sí, detallando que es lo que querían, y él por supuesto que las iba a complacer en todo.
Un par de minutos después, Carlos regreso con una cesta casi llena de cosas, había refrescos, galletas, helados, chocolates, etc. Y es que el tipo estaba mas que agradecido por tremendo placer que había recibido por parte de ambas niñas.
Después de comer y al darse cuenta de la hora, las nenas se despiden del sujeto, con la promesa de volver a visitarlo para “jugar en la play”.
Pasaron cerca de tres días hasta que las nenas pudieron volver donde el sujeto, y se repitió lo mismo, el sujeto las puso a mamar verga a las dos juntas, y al terminar les lleno la boquita de esperma caliente, para luego cogerse a Valentina y llenar su vagina de leche de verga.
En el lapso de 2 semanas las nenas habrían ido unas 4 veces a visitar al sujeto, y mas que por las golosinas que les daba, iban por que les gustaba lo que él les hacía, sobre todo valentina, que se había vuelto adicta a tener un par de orgasmos cada vez que lo visitaba.
pero Tatiana cada vez quería más, y para ella ya no era suficiente solo mamar y masturbarse viendo como se cogían a su prima, ella también quería sentir una verga dentro, no le importaba si era dentro de su colita o de su vagina.
Y es que en las dos ultimas veces que fueron a visitarlo, el tipo intento metérsela por la cola, pero estaba tan apretada que ella se quejaba del dolor, lo que hizo desistir al sujeto, y terminaba metiéndosela a valentina, dejando con cierta frustración a Tatiana.
Carlos también quería cogerse a Tatiana, nunca había estado con una nena de esa edad, y menos con una tan hermosa como ella, pero el tiempo jugaba en su contra, y al tener a una nena nalgona de 10 a su disposición pues, estaba mas que satisfecho con eso.
Tatiana en sus momentos de calentura se encerraba en su cuarto, metía sus manos dentro de su ropa y empezaba a tallarse la conchita, pensando en lo rico que seria sentir un pene dentro suyo, en su mente siempre estaban las imágenes de Carlos dándole verga a su prima, y deseaba y se imaginaba siendo ella la que aguante el miembro del sujeto, y algunas veces se imaginaba situaciones ficticias con algún maestro de su escuela al que había visto mirándola más de la cuenta.
Era tanta su calentura que en su mete ideo un plan para estar a solas con Carlos, y es que, a diferencia de valentina, sus padres la controlaban un poco mas y no la dejaban salir sola.
Habían pasado 4 días que no habían ido a ver a Carlos, y en el colegio habían acordado que hoy irían, ya que Valentina estaría sola en la tarde en su casa, y se podía dar una escapada. Tatiana estaba ansiosa y bastante caliente, así que a eso de las 3 de la tarde se metió a duchar, 20 minutos después ya estaba en su cuarto viendo que ropa ponerse, quería verse bonita. Una vez cambiada estaba indecisa en como convencer a su papá, había pensado en varias excusas para que la deje ir sola, pero no se convencía en cual decir, hasta que se decidió y salió con paso firme a la sala, donde su papa estaba sentado descansando, viendo la tele.
Robert le pregunto que dónde iba, que porque estaba cambiada, ella le dijo que estaba esperando a Valentina, que la iba a acompañar donde su amiga Carla para hacer unas tareas.
Pasaron cerca de 5 minutos, la nena estaba nerviosa, hasta que al fin dio el ultimo paso de su plan; le pregunto a su papá si podía adelantarse donde su amiga, que Valentina estaba demorando mucho, y que cuando ella legue le diga que la esperaba donde su amiga carla, la que vive por el parque.
La verdad es que con Valentina habían quedado en verse a las 4 de la tarde, eso le daba media hora con Carlos, quizá en ese tiempo al fin pueda llegar mas lejos con el sujeto.
Para Robert eso fue como un regalo del cielo, habían pasado poco más de 2 semanas que no se cogía a su sobrina, aunque le preocupaba y no se sentía cómodo dejando salir sola a su hija, no podía dejar pasar la oportunidad de volver a cogerse a valentina, además el parque estaba cerca de su casa.
Robert mira a su hija y le dice que puede ir, pero que vaya de frente hacia la casa de su amiga, que no se desvíe y no haga caso a nadie, a lo que la nena le dice que esta bien, que no se preocupe, él la despide en la puerta, y ve cuando se aleja hasta que da vuelta hacia la calle que da al parque, que queda solo a una cuadra.
Una vez que perdió de vista a su hija, raudamente se mete a la ducha a darse un baño rápido, y esperar ansioso a Valentina para dar rienda suelta a sus depravados instintos con tan nalgona niña.
Tatiana se para frente a la puerta de una casa donde vivía una amiga, su nombre no es Carla, y tampoco tenia pensado ir a hacer una tarea, abre la mochila en donde llevaba unos cuaderno, y de reojo mira en dirección por donde había llegado, para ver si su padre no la había seguido, al no ver nada raro, se dirige rápidamente a la tienda de Carlos, toca el timbre y el sujeto, luego de mirar las cámaras exteriores le abre la puerta y la hace pasar saludándola con una amplia sonrisa que denotaba lo feliz que le hacia tenerla allí.
Una vez que Carlos hizo pasar a la nena, la levanto de la cintura y la sentó sobre una mesa que tenia en su tienda, le dijo que estaba muy linda y sin preámbulo alguno se hizo paso entre sus piernas abiertas y empezó a besarla y a acariciarla, la nena muy gustosamente paso sus manos por el cuello del sujeto y le respondió el beso.
en ese mismo momento, Valentina estaba en su casa duchándose, y esperando ansiosa que sean las 4 de la tarde para ir a ver a su prima, y luego ir donde Carlos a recibir su ración de verga, misma que ya le hacía falta.
Como siempre espero sea de su agrado, y estaré atento a sus comentarios.
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