VERO

Un juego de niños nos hizo vivir momentos ricos .
Siempre que llegaba el fin de semana mi tía y mi prima Vero aparecían en mi casa, somos de la misma edad y jugábamos a lo que sea mientras nuestras mamás conversaban o salían a la calle, uno de nuestros juegos favoritos era al papá y la mamá, pero no hacíamos otra cosa que ver tv juntos, o comer, nada del otro mundo, así fuimos creciendo y fuimos descubriendo el sexo, entonces cuando ya tuvimos 12 años nos volvimos a quedar solo y jugamos de nuevo, pero esta vez sí nos besamos y nos tocamos, fue extraño pero nos gustó mucho porque lo hacíamos seguido, todo cambió cuando ella en una parte del juego me dice:

Mira tú vas a llegar cansado del trabajo y yo te daré tu desayuno está bien?

– Está bien

Caminé hacia ella, me dio un beso, amor sé que estás cansado así que te daré tu desayuno, entonces se quitó la licra, el calzón y se sentó con las piernas abiertas, era la primera vez que veía una vagina, aún no tenía vellos, entonces me dijo que lo chupara, que eso era mi desayuno, sin ganas me acerqué y comencé a lamer, sin muchas ganas, pero a ella le gustó mucho, todo debía seguir, pero sus padres se separaron y se mudó muy lejos de la ciudad, nos veíamos muy poco hasta que llegó su fiesta de promoción y quiso que sea su pareja de baile, lo cual acepté, con el compromiso que ella también sea mi pareja de promoción, Vero aceptó encantada.

Llegó el día de la fiesta, la recogí, de solo verla se me paró la pinga, estaba preciosa con un vestido color champagne, un peinado que hacía resaltar su lindo rostro, pareces una novia le dije y ella respondió y tú mi novio jajajaja nos reímos todos.

La fiesta estuvo demasiado bien, bailamos, tomamos un poco a escondidas, ya la fiesta estaba llegando a su fin, la noche también así que debíamos ir a su casa, mi tía nos había reservado un lugar en el cuarto de Vero, ya en el camino ella me agradeció por aceptar y por estar siempre para ella, entonces me nació abrazarla y me dí un beso muy cerca de su boca.

Llegamos a su casa y oh sorpresa, nuestras mamás estaban durmiendo juntas y nos dijeron que podíamos dormir juntos, nos reímos y nos metimos al cuarto, Vero se sacó el vestido mientras yo buscaba ropa para dormir en mi mochila, mi prima se fue al baño y se cambió, vero traía puesto su pijama de shorts y polo, yo igual, nos metimos a la cama y aunque teníamos sueño estuvimos conversando, entonces le dije:

Cierra los ojos

– Que?

Cierra los ojos

– Está bien

Sin hacer trampas

– Yaaaa

Entonces como yo estaba pegado a la pared y debía ir a buscar algo a mi mochila, pasé por encima y le robé un beso, ella quiso abrir los ojos y le dije que nos los abra, saqué de mi mochila un regalo que sabría que le gustaría, era un peluche graduado, no era muy grande, pero le iba a gustar, entonces le dije:

Estás lista?

– Si, eso creo

Ok, abre los ojos

Ella gritó HAY QUE LINDO, mi tía vino corriendo a ver qué había pasado, y ellas encantadas con el regalo.

Eres el mejor primo, me dijo.

Mi tía me dió un beso mientras me decía que bueno que quieras mucho a tu prima y se fue cerrando la puerta.

Ya vamos a dormir me dijo y nos metimos a la cama.

Vero

– Que

Te acuerdas cuando jugábamos al papá y la mamá?

– Si, jajajajaj

Ahora estamos durmiendo juntos como el papá y la mamá

– Duérmete ya

Mañana quiero mi desayuno

– Tu desayuno está listo

No aguanté más y bajé a chuparle toda la concha, estaba depilada y jugosa, como esperando que beba todos sus jugos, no podíamos hacer bulla, pero déjenme decirles que escuché varios gemidos, después que la hice venir ella solita comenzó a chuparme la pinga hasta hacerme venir, se tomó todo el semen y nos quedamos dormidos.

Al despertar Vero estaba dormida, me levanté sin hacer bulla, fui a buscar a mi mamá y no había nadie, llamé a mi mamá para preguntarle dónde estaba y me dijo que estaba en el mercado, regresé al cuarto y encontré a Vero desnuda con las piernas abiertas:

Ahora sí mi amor toma tu desayuno

Me quité el pijama y comencé a comerme esa panocha rosadita, mis lamidas fueron de menos a más y sus gemidos super fuertes, ahí va tu primer jugo me dijo mientras se venía en mi boca, no me contuve y puse mi verga en si entrada y poco a poco fui penetrando a mi prima, mis embestidas fueron brutales, ella tenía que acordarse toda su vida que su primo la estaba cachando, después de un rato la puse en cuatro al filo de la cama y le chupé el culo mientras le metía dos dedos a la concha, cachar a mi prima era delicioso, justo cuando estaba por venirme se la puse en la boca y volvió a tomar toda la leche, ese día nos bañamos juntos y salimos por la tarde como dos enamorados, me tuve que regresar con la promesa que nos volveríamos a ver y hacernos el amor