Viaje de Ejecutivos
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Viajes de Ejecutivos
Con motivo de mi trabajo, debo viajar bastante y la mayor parte de las veces, por las distancias lo hago por avion.
Esto que voy a relatar, me sucedio un dia en que viajaba desde mi ciudad hacia la Capital, para luego de unas reuniones, seguir viaje a otra ciudad del interior.
Me encontraba haciendo el check-in en el mostrador de la aerolineas, cuando observo que se acerca una señorita, con una cara angelical y un cuerpo hermoso, unas tetas bien paradas, un culito que se marcaba muy bien en el trajecito que llevaba, lo que hacia que todos los hombres del aeropuerto la miraran con admiracion, y que estaba luchando con su maleta, la que por esas cosas de esos utensilios, tienen la maldita costumbre de que siempre una de sus ruedas, se traba y es dificil hacerla correr, mas si van algo pesadas.
Como todavia no habian terminado conmigo, me acerque a la niña y la ayude con su maleta, acercandola hasta el final de la cola de pasajeros.
Me dio las gracias, pero lo mas hermoso fue su sonrisa al hacerlo, lo que hizo que se le iluminaran sus ojos verdes.
Volvi al mostrador y ahi se me ocurrio una idea, sobre como poder sentarme al lado de dicha preciosura.
–“Vea señorita ”, le dije a la empleada que me atendia, “la señorita que acabo de ayudar, es mi prima, que llego demorada y no quiere pasar delante de los demas pasajeros para atenderse junto a mi, por lo que le puede reservar el asiento junto al mio, para asi poder viajar juntos?”
La empleada se fijo y me dijo: Señor el asiento que le di tiene el del al lado ya asignado, le importa si lo cambio de lugar?
Por supuesto que acepte, no importa donde me mandara, con tal de poder viajar junto a esa hermosa mujer.
Me termino de atender y me retire del mostrador, quedandome cerca para que ver que pasaba.
Cuando le toco ser atendida, veo que en un momento, la empleada me señala, ella se da vuelta y me mira sorprendida, pero no dijo nada y termino su despacho.
Se volvio hacia mi, y al acercarse me dijo con un sonrisa, “Asi que somos, primos?”, no te habia reconocido”, mientras se largaba a reir.
Conversamos un momento, pero llamaron a embarcar y fuimos ingresando al avion, le di a elegir si queria ventanilla o pasillo y ella eligio ventanilla.
Durante el viaje intente seducirla, pero ella no se dejaba, hablamos bastante, pero ella habia instalado como una barrera, que detenia cada uno de mis avances.
Al llegar a destino, cosa que me parecio mas rapido que de costumbre, ya sabia que ella tambien viajaria hacia mi destino final, en unos dias, asi que nos intercambiamos los celulares, para ver si podiamos combinar para viajar juntos, ya que ni ella, ni yo sabiamos cuanto tiempo nos demorariamos en nuestras ocupaciones.
La lleve con mi taxi hasta su hotel, y al descender, con una sonrisa que le ilumino su rostro, se despidio diciendo. “ espero tu llamada, primito, para combinar”.
Ese dia tuve que participar de varias reuniones en la central de mi empresa, pero llegadas las 6 de la tarde, todo el mundo se fue retirando, y como yo, todavia debia tener una reunion mas por la mañana siguiente, decidi llamarla a Mirta, porque ese era el nombre de la niña de ensueño para ver como podiamos combinar.
Como sabia en que hotel se alojaba, procedi a llamarla, pero no la halle, asi que deje el recado, diciendo que luego me comunicaria.
A la hora, y mientras me encontraba duchando, suena mi celular, y era ella, la que me decia que tambien se debia quedar hasta el mediodia por una reunion con un cliente y que a partir de alli, podria viajar, por lo que me ofreci para hacer las reservas y comunicarle a que hora volariamos, aprovechando para invitarla a cenar esa noche, a lo que se nego, por tener que cenar con un grupo de clientes que la habian invitado, pero agregando algo que me sorprendio, “no te preocupes, que cuando estemos en destino, primito…., tendras oportunidad de desayunar, almorzar y cenar conmigo, jajajaja”.
Dicho echo, me deseo buenas noches y corto.
Procedi a hacer las reservas para los dos, en un vuelo de las tres e la tarde, pedi asientos contiguos, y le deje el mensaje en su hotel.
Por supuesto que lo dicho, me daba vueltas en mi cabeza, y no sabia interpretar que sentido le habia dado ella a la insinuacion, por lo que durante la cena, solo estuve pensando en eso.
Por la mañana, al estar en las oficinas de mi empresa, todavia seguia pensando en lo mismo, tal es asi que en un momento dado, el presidente de la misma, me pregunto si mi estado se debia a que estaba imaginando un nuevo plan para la compañia, sin pensar, en que nuevo plan yo estaba pensando.
Terminadas las reuniones, pase por mi hotel, retire mis cosas y me dirigi hacia el aeropuerto, a pesar de que eran recien la una de la tarde, pero era tanto el deseo de encontrarla que no me importo.
Alrededor de media hora despues, le veo llegar, otra vez luchando con su maleta, procediendo a darle un beso en la mejilla, y ayudarla para llegar al mostrador.
Terminados los tramites, le propuse ir a almorzar, a lo que acepto y nos dirigimos hacia el restaurante del lugar.
Mientras esperabamos el servicio, ella me dijo directamente. “ ayer habras notado que note deje avanzar cuando me tirabas indirectas, sucede que me conozco y sabia que si las aceptaba, me podia poner muy cachonda en el avion, y como soy bastante conocida en la ciudad donde vivimos los dos, y en el avion viajaban varios conocidos, no querian que me vieran en alguna situacion comprometida, fue por eso, primito, me dijo sonriendo, que no te deje avanzar, pero ahora es distinto, y ya veras cuanto lo es.”
Lo dicho por Mirta, me auguro una estadia placentera, pero nunca, ni con mi imaginacion mas febril, podria haber imaginado cuanto iba hacerlo.
Ya almorzados, y sabiendo los dos que eramos casados, nos acercamos al embarque y ella me propuso, esperar a que subieran los demas pasajeros, para poder comprobar, si en ese vuelo viajaba alguien conocido.
Fuimos de los ultimos en subir, y nos acomodamos en nuestros asientos, aprovechando yo al dejarla pasar hacia la ventanilla, en nuestro asiento de 2, a meterle mano en su culo, que lo tenia de pelicula, ya que estaba tapado por los otros asientos y si bien ella dio un repingo al sentir mi mano, me miro y se sonrio.
Comenzado el vuelo, le tome su mano y comence a acariciarla, mientras que la miraba a los ojos, ella asomo la punta de su lengua por entre sus dientes y acercandose a mi me dio un suave beso, que hizo que mi miembro se disparara, lo que al observarlo, Mirta como al descuido, dejo caer su mano sobre mi regazo, y con lentos movimientos, de arriba hacia abajo, me lo empezo a acariciar.
Paramos porque vimos venir al personal de abordo, ofreciendo cafe, y cuando se retiraron, nos dimos un jugoso beso de lengua que a los dos nos dejo con la respiracion bastante entrecortada.
Asi continuamos los 45 minutos que duro el vuelo, aprovechando yo en un momento, a meter mi mano debajo de su falda, momento en el que ella, abrio mas sus piernas para dejarme trabajar, comprobando que tenia todo su sexo humedo, humedad que se habia trasmitido a su ropa interior.
Mis dedos, se introdujeron entre su ingle y el elastico de su tanga, y alcance a sentir, que tenia su concha depilada, llegando a meterle un dedo dentro de ella, respondiendo Mirta con un suspiro y cerrando los ojos, mientras que con las manos, se aferraba fuerte a los apoya brazos del asiento.
Esto duro solo un instante, ya que habia algunos pasajeros que se dirigian al toillette del avion, por lo que saque mi mano, y ella con una sonrisa complice, me dijo al oido. “que lastima que no seguiste, estaba disfrutando una enormidad…”, pero se sonrio mas cuando vio que yo con mucho descaro, me metia mis dedos en la boca, y me los sorbia para poder gustar de sus juguitos.
Al descender en nuestro destino, me parecio que la entrega de maletas duraba una enormidad, pero cuando nos reunimos con ellas, salimos apurados a tomar un taxi que nos llevar a nuestro hotel, al que llegamos rapidamente y donde al registrarnos, pedimos nos dieran habitaciones en el mismo piso y mediante una seña y propina mediante, al conserje, linderas.
El mismo nos acompaño junto al botones a nuestros cuartos y luego de dejar a Mirta en el suyo, para que se desempacara el equipaje, me acompaño al mio que estaba al lado, y cuando el botones se retiro, guiñando un ojo, me dijo: “señor, aqui se encuentra la llave de esta puerta que comunica con el cuarto de al lado, donde se aloja su prima.”
Esto le merecio una propina adicional, ya que ese detalle, me evitaria, el tener que andar por el pasillo, entrando o saliendo del otro cuarto.
Coloque en forma rapida mis ropas en el placard, me quite el saco y la corbata, y procedi con cautela a hacer girar la llave para entrar al otro cuarto, ingresando al mismo, y observando que Mirta, se habia despojado de su trajecito y estaba sacando su ropa de la maleta.
Como el piso estaba alfombrado, no me oyo llegar, por lo que la pude agarrar desde atras por su cintura, a lo que dio un respingo, pero al mirarme y ver quien era, y sentir mi miembro bien duro apoyado sobre la raya de su culo, se dejo estar, y se recosto mas intensamente sobre mi.
La hice dar vuelta, y al hacerlo observe que su tanga era un diminuto triangulo que apenas cubria su sexo, mientras que en la cola, era un hilo que se le introducia en los cachetes, dejando su hermoso culo todo a la vista.
Nos abrazamos con mucha pasion, y ella se apretaba de su cintura para abajo, para que mi pene se restregara con su concha.
Su corpiño apenas podia contener esas dos tetas tan duras, y siendo de un material muy fino, permitian comprobar que sus pezones estaban bien parados y desafiantes.
Sus manos comenzaron a desabrochar mi camisa, y una vez echo esto, comenzo a acariciar mi pecho, jugando con la mata de pelo que lo cubre, deteniendose en mis pezones, a los que acariciaba con movimientos circulares, y con pequeños pellizcos, que me producian una descargas como de electricidad que iban desde mi cerebro hasta la cabeza de mi pene, haciendo que este quisiera salir de su encierro, dentro del pantalon.
Mientras nos seguiamos besando y tocando, Mirta dandose vuelta y retirando su diminuta tangita, me dijo, “me gusta que me hagas la cola, no sabes cuanto placer me da, saberme bien empalada por alli”.
“Bueno respondi, vamos a gozar los dos con tu culito”, y haciendola poner al borde de la cama con su hermoso culo apuntando hacia mi, comence a besarselo lentamente, lubricandolo, mientras que con mis dedos, se los introducia en su concha, la que ya estaba rebosante de jugos vaginales, tambien le pasaba mis dedos y se los introducia en su culo.
Tambien me puse algo de esos jugos en el glande de mi pene, y cuando vi que el culito de Mirta disponia de suficiente dilatacion, acerque mi miembro al mismo y una vez que entro su cabeza, de un solo empellon, lo mande hasta el fondo de su ano, golpeando con mis huevos la entrada del mismo.
Mirta y yo comenzamos una danza de mete y saca, mientras ella me decia: “ Asi, segui asi que me gusta, metela bien adentro, segui que me gusta sentirte dentro mio, cuanto placer, dame mas, papito, segui, vamos dale, no pares, que ya me vengo, Siiiiiii, que rico, como me gusta como me coges mi culo, segui, dame mas…….”
Mientras yo tambien le decia, “te gusta como te la pongo?, la sentis bien adentro, me vas a dar todo el placer con tu culito, ”, aprovechando tambien para darle una ligeras palmadas en su cola, lo que parecio gustarle mas.
Mientras ella con sus dedos, se acariciaba el clitoris, y yo que la tenia tomada de su cintura, seguia empujando hasta el fondo mi verga, la que sentia como era apretada por el esfinter de Mirta, produciendome un dulce dolor, pero compensado por oleadas de placer.
En un momento mas, senti como ella aceleraba su ritmo, y dejando escapar un gritito, exclamo. “ Ya te acabo, Ricardo, dame tu lechitaaaaa , toma toda la miaaaaa, que bonito, como gozo, dame maaaaaaaas, ya me vengo, segui, por favor segui, papito, no te detengas, Siiiiiiiii, Ay cuanto placer me estas dando, cuantas veces me vine, pero este es el mejor de todos, que hermoso.”
Tras lo cual, se desplomo sobre la cama, todavia con mi verga dentro suyo, y diciendo:”dejamela un ratito adentro corazon, quiero sentir esa vergota tuya dentro de mi, ya que tanto placer me has brindado.
Pasado un rato de estar sobre ella, con mi verga inflamada todavia, se la saque y me coloque junto a ella, aprovechando para hacerle circulos con mis dedos en sus pezones, los que seguian estando bien duros, y pasando luego a besarlos con fruicion.
Decidimos ducharnos y bajar a cenar algo rapido, para poder volver al cuarto y continuar con nuestra sesion de sexo, asi que nos dirigimos al baño, donde mientras nos duchamos, aprovechamos para hacer el amor de parados, mientras el agua nos caia, secandonos mutuamente y quedando en encontrarnos en el hall del hotel en media hora.
Cenamos en un restaurante a la vuelta del hotel, para estar cerca y regresar, mientras lo haciamos, Mirta me confio que su esposo, un alto ejecutivo de una multinacional, viajaba muy a menudo y trabajaba mucho, lo que le hacia suponer, que tenia otra u otras mujeres, y que cuando estaba con ella, solo la cogia por cumplir, sin importarle, los juegos previos, ni cumplir alguna de sus fantasias, o sea que era un sexo mecanico.
“ Que imbecil debe ser, ya que teniendo en casa una criatura tan hermosa y tan ardiente, no le presta atencion ”, le dije.
“Gracias ” me dijo ella, “es por eso que siendo una mujer muy caliente, aprovecho mis viajes para tener sexo con aquellos hombres que me parecen interesantes.”
Por eso me explico: “ como a mi me gustan que me cojan bien cogida por el culo, lo primero que te pedi es que lo hicieras por alli, y no sabes papito cuanto me has hecho gozar”.
Mientras eso me decia, y como estabamos frente a frente en la mesa, y el lugar , que tenia una luz muy tenue, y sus mesas eran pequeñas para hacer mas intima la cena, siento que su pie, del que se habia sacado sus zapatos, me restregaba la verga muy suavemente, a lo que yo respondi quitandome mi mocasin y colocando mi pie entre sus piernas, notando que ella no se habia puesto nada debajo de su falda, lo que casi me decide a suspender la cena y partir para el hotel.
Con una sonrisa me dijo: “ te diste cuenta, no, corazon? ”, “me puse asi para ti y para no perder tiempo al llegar al hotel…..”.
Nos trajeron el pedido, la comida estaba deliciosa, pero nosotros estabamos mas interesados en tocarnos con nuestros pies, asi que luego de tomarnos una botella de vino, no pedimos postre, pero si la cuenta y calzando de nuevo nuestros zapatos, iniciamos el regreso al hotel, tomados de la cintura.
Con nuestras respectivas llaves en nuestro poder, tomamos uno de los ascensores y ni bien cerraron sus puertas, nos apretamos y besamos ardientemente, apretando mi sexo contra el suyo y acariciando las dos masas de sus gluteos, mientras que tambien aproveche para acariciar sus desnudas intimidades, las que ya presentaban una lubricacion excelente.
Por las dudas al llegar a nuestro piso, hicimos la ceremonia de despedirnos en la puerta de ella, y yo presuroso, entre a mi habitacion, y luego de desvestirme, procedi a abrir la puerta de comunicacion y pasa al cuarto de Mirta.
Ella aparecio desde el baño, con solo un camisolin totalmente transparente, y sin nada abajo, por lo que se podia admirar en toda su majestuosidad la belleza de ese cuerpo y su conchita bien depilada.
Nos abrazamos con ardor y comenzamos a besarnos apasionadamente, mientras nuestros sexos se refregaban uno contra el otro, y yo comence a besar su cuello y decirle palabras bonitas al oido.
Deslice su camison de sus hombros y comence a besar primero su espalda descendiendo por su columna vertebral hasta sus nalgas, separando las mismas con mis manos, y besando tambien ese culito que ya habia sido mio, y la conchita, que a estas alturas se veia inflamada y esperando ser penetrada.
A todo esto, Mirta emitia unos pequeños gemidos, cada vez que mis labios y mi lengua tocaban alguna zona sensible, en especial cuando me detuve a la entrada de su ano y luego al seguir con sus labios vaginales.
La alce en brazos y la deposite en su cama, comenzando a efectuarle un masaje por su cuerpo, usando para ello, una crema que encontre en la mesa de luz.
Le fui masajeando sus hombros, baje hasta sus pechos y alli comence a masajearlos y acariciarlos, haciendo circulos con mis dedos.
Luego baje por su plano abdomen, y llegue a la puerta de su concha, la que ya presentaba una muy buena lubricacion, efectuando alli suaves masajes circulares sobre el boton rosado de su clitoris.
Ella seguia con sus ojos entrecerrados y entre pequeños suspiros y gemidos me decia: “segui papito, que buenos son tus masajes, continua asi, que tengo sensaciones que ya habia olvidado, segui, masajeame bien mi clitoris, para que se ponga a mil y te pueda dar toda mi leche, sigue, sigue….. ”.
Como yo a esas horas tambien estaba muy caliente, comence a introducir mis dedos dentro de esa cuevita caliente que era su conchita, y cuando ella comenzo a efectuar movimientos con su pelvis, sacandome el calzoncillo, procedi a introducir de un solo envion mi verga dentro suyo, sintiendo de inmediato como los musculos de su vagina me aprisionaban mi verga y me descargaban como una corriente electrica.
Mirta coloco sus piernas alrededor de mi cintura para que pudiera llegar mas adentro de su concha, dimos inicio a un baile, donde nuestras cinturas se adelantaban y retiraban al compas de nuestras embestidas.
“Dame todo tu verga, la quiero toda dentro mio, cogeme con ganas, que yo te voy a dar todo el gusto que vos quieras, asi, papa, segui asi que te siento dentro mio, te gusta tu putita, amor? que rico…., segui, me volves loca, quiero que me cojas toda la noche, papi, damela toda, UHHHHH, que bonito, SIIIIIIIIIIIIII, ya estoy por venirme, cuanta leche tengo para vos, dame la tuya, papito, acabame adentro que quiero sentir tu lechita caliente ”, cuando en ese momento, senti que ya proximo a eyacular, ella se abrazo con mayor fuerza a mi y casi parandose, comenzo una serie de convulsiones, durante las cuales, yo sentia como acababa y su leche rebozaba su sexo.
“ Me haces acabar como una yegua, papito, que lindo que me coges, senti cuanta leche tengo para vos, Hay, que rico lo que siento, me muero de placer, senti como vibra mi concha, y yo siento tu verga que me destroza, pero que placeeeeeeerrrrrrrrrr ……….. hay corazoooooonnnnnnn ”.
Con lo cual, luego de tan tremenda acabada, me desplome sobre ella, sin sacar mi pene de su interior, y ante eso, Mirta me hizo dar vuelta, poniendome boca arriba, y se sento con mi verga dentro suyo, moviendo sus caderas, para ir palpitando como iba disminuyendo su tamaño, pero queriendo disfrutarlo hasta el final.
Cuando se hubo calmado, se cambio de posicion, y comenzo a chuparme el pene de una manera, que en pocos momentos lo limpio de todo rastro de leche mia y suya.
Nos servimos una copa de champagne de la provision del frigobar del cuarto y brindamos por el habernos conocido, a lo que ella agrego con una sonrisa picara. “ lo que mas placer me da, es el hacer el amor con este primo que he encontrado, y sin tener ningun remordimiento de que fueramos parientes, este primito mio, me ha dejado tan satisfecha en este dia, que ni mi marido en cinco años lo podria hacer…. ”
La coloque sobre mi pecho, mirando hacia mi, y con mucha delicadeza al principio, comence a saborear su conejito, y para que pudiera disfrutas mejor de mi trabajo, ella se reclino hacia atras, apoyandose en sus brazos, para entregarmelo todo a mi deleite.
Mi lengua se introducia entre sus labios y penetraba todo lo que podia en el interior, mientras ella me iba calentando cada vez mas, al decir: “no solos me coges por el culo y por la concha de una manera maravillosa, papito, como me chupas….., como sabias que me enloquece que me la chupen….?, es maravilloso, segui, mordeme alli, comete toda mi conchita, hay, que placer, me haces acabar como nunca, dale, no pares, segui asi”, dicho lo cual, se coloco dada vuelta y mientras yo seguia libando de su sexo, ella me dijo: “ no es justo que tu verga se quede sin ser besada, asi te gusta papito’ ”
Y se puso a mamarme de tal manera que fui yo el que ahora, entre chupada y chupada a su sexo le decia: “ asi se chupa una verga, Mirta de mi vida, me llevas al paraiso, tragate todo mi mastil, corazon, sacame toda la leche que me queda, asi podemos acabar los dos juntos, que rico la chupas, asi, si, asi, asi, no pares… ”.
Nos vinimos los dos casi juntos, y mi boca se lleno de todos los jugos que destilo el sexo de Mirta, mientras que ella recibio en su boca toda la leche que mi verga le lanzo, aprovechando para tragarse una gran parte, y con el resto, se la puso en sus manos y se la esparcio por sus senos.
Luego de eso, nos bañamos y desnudos como estabamos nos quedamos dormidos, hasta que desde la recepcion nos despertaron, y fue en ese momento que aproveche para hacer el amor ni bien nos despertamos, con tanta o mas energia que lo echo por la noche, alcanzado los dos los maximos estadios del placer.
Cada uno se fue a cumplir con sus obligaciones, pero nos encontramos todos dias a la siesta y cada uno de ellos fueron de intenso juegos de amor, los que reiteramos por las noches.
Convenimos que al regresar a nuestra ciudad, nos veriamos y ya veran ustedes en un proximo relato como este primo, deja contenta a su prima, sin que el marido sospeche nada al respecto y ademas me lo agradezca por hacerle compañia.
rian_319@hotmail.com
Autor: Anonimo
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