Yo y mi pequeña cristal
Está es una historia larga, pero con bastante contenido, espero sea de su agrado..
Al fin lo logré, llevó 2 años de cacería pero valió la pena.
Salí del hospital con una bebé recién nacida, pasé demasiado tiempo investigando la seguridad, los pasillos, personal, pacientes y guardias.
Soy un doctor reconocido, estoy especializado en pediatría, tengo 45 años y nunca pude tener hijos, estuve casado en 2 ocasiones pero me divorcie por las mismas razones ambas veces. Mi gusto por las niñas.
Jamas me atraparon haciendo nada malo, pero mis miradas y actitudes eran algo obvias para mis ex esposas.
Cuando me dieron la noticia me mi esterilidad en mi primer matrimonio fue muy devastador para mí, fuí muy cuidadoso para escoger a la madre de mis posibles hijos, rubia, delgada, ojos verdes, alta y al no poder engendrar quisimos adoptar, y ahí fue el primer problema, siempre que íbamos a los orfanatos, mis ojos no se despegaban de los culitos de todas esas preciosas niñas,. Mi esposa me confrontó, y no pude ocultar la verdad, y se separó de mí.
Mi segundo matrimonio fue por pura coincidencia, pues ella estaba embarazada cuando la conocí, el padre de la criatura se había ido, abandonandola, y yo estaba ansioso por esperar la llegada de mi hijastra, cuando nació yo era el hombre más feliz del mundo, pero no duró mucho mi felicidad, ella nunca me dejaba a solas con la bebé, y al pasar la semanas yo enfrenté la situación, pero ella jamás accedió a verme como el padre de su hija, yo siempre fotografiaba a mi hijastra, y ella encontró las fotos, creo que el zoom hacia su culito en la mayoría de las fotos era suficiente para que le generará desconfianza pura.
Por lo tanto acabo ese matrimonio muy rápido.
Ahora, se dió la oportunidad perfecta para llevarme a la niña lejos, cambie de ciudad y de nombre.
La niña era de una familia demaciado pobre como para que pudieran hacer algo al respecto, estará mejor conmigo.
Apenas comenzamos la estadía en nuestro nuevo hogar y yo estaba preparando todo. Todos los días la bañaba, la alimentaba, cuidaba de su salud, la abrigaba, jamas nada le faltaba.
Y todas las noches sin falta le daba amor, leche caliente era vertida sobre su pequeño cuerpo, mientras masajeaba su vientre, su pecho, sus nalguitas y sus piernas, todo al aire libre, ningún prenda cubría su cálido cuerpo, pero siempre mantenía la calefacción para evitar que se enfermara, así con mi gran mástil regaba su pequeña flor, que permanecía cerrada.
Pasando el tiempo la gente me comenzaba a conocer en la ciudad, el doctor y su pequeña Cristal.
Tenía mi consultorio personal, la confianza era innegable, muchos niños y niñas me visitaban todos los días, y al ver esos pequeños cuerpos mi exitacion crecía, pero jamás los llegué a tocar, eso sería malo para mi reputación, causaría que me quitarán a mi pequeña cristal.
Siempre al terminar mi día, en cuanto recogía a mi pequeña de la guardería me la llevaba a casa, apenas y cerraba la puerta la recostaba en el sillón y me sacaba el pene, que después de tanto ver niñas estaba muy mojado, tomaba a mi bebé, la abrazaba con mi brazo izquierdo mientras con mi mano derecha comenzaba a masturbarme, cuando sentía que la leche venía acostaba a mi pequeña cristal y la bañaba nuevamente con leche de papi.
Eso fue el primer año, en el segundo mientras hacía una revisión de una paciente, ella tenía 10 años, su madre llegó muy preocupada pues la niña parecía haber sufrido de abuso, al revisar me di cuenta que su vagina había sido profanada, la madre lloró desconsolada, yo estaba demaciado exitado para poder quedarme sin hacer nada, así que le pregunté a la chiquilla que había pasado, ella con bastante miedo me comenzó a platicar que había sucedido.
Ella había tenido sexo con su novio de 15 años, yo mantuve mi profesionalismo y expliqué todo a su madre y se fueron a proceder legalmente, sobra decir que yo estaba como caballo en celo. Al llegar a casa con mi pequeña Cristal, la desnudé y la pose sobre el sillón, me baje los pantalones ya con un mástil que salia de ellos, 25cm de dureza pura, y una niña de 2 años desnuda frente a mi, tome su boquita y le hacía probar la cabeza de mi arma, que quería dispara todo dentro de ella. Así comencé a darle clases de sexo oral, y lo que fue una corrida diaria sobre su cuerpo se convirtió en una dentro de su boca, así ella se fue convirtiendo en una profesional, en ese mismo año la comenzaba a masturbar y le explicaba como hacerlo, y donde si y dónde no debería hacerlo.
Todo el año sin falta era de orales, ella sola se metía lo que podía en su boca, los dientes ya estaban en su boquita, pero era cuidadosa de no morder, yo por mi parte estaba deseoso de meter mi pene en su pequeña flor por lo que tomaba sus piernas y las apretaba fuerte contra mi pene, recreando una penetración.
Al tercer año de cristal, ya hacía los orales como una diosa, y en su cumpleaños decidí comenzar a amoldar su pequeña flor, primero comenzaba a meter sus propios dedos, así podría tomarle gusto, en su pequeña carita se podía ver lo caliente que se ponía cada vez que sus deditos entraban en su estrecha vagina, conforme entraba un dedo, se metía el segundo y el tercero. Fueron semanas de preparación y su exitacion era cada vez mayor, en su momento pude ver cómo 4 deditos de su mano podían entrar sin problema, lo que me daba la oportunidad ya de poder penetrarla. Entonces por fin ocurrió, 3 años de espera para ese momento, primero la bañe con agua tibia, la vestí con un uniforme de niña de kinder, una pequeña falta tableada, unas mallas blancas a las cuales les corte la parte que cubría su vaginita, unos calzoncitos blancos de osito, una blusa blanca, y su chamarrita para el frío. Y nos fuimos a la escuela… Le enseñé que decir, y que no mencionar a sus compañeros y sus maestros, ella jamás cuestionó mis decisiones con ella, tomamos el autobús, desde muy temprano y la llevé hasta los asientos traceros, me senté y a ella sobre mis piernas, ella miraba a sus alrededores impasible por llegar a su nueva escuela, yo mientras cubría mis piernas con su falda para poder sacar mi pene, acomode sus caderas y moví su ropa interior a un lado, le pedí que no hiciera ruido y que no dijera ni una palabra, mientras coloque mi pene en su vagina y metí solo la punta dentro de ella, solo había personas hasta 3 filas delante de nosotros, así que comencé a moverme, no era para desvirgarla aún, era solo para darme algo de placer mientras llegábamos a la escuela. Ella se mantenía lo más quieta posible pero su carita se estaba poniendo roja por la excitación, entonces, la voltee hacia mí, con cuidado de no dejar ver nada, la abracé y se la metí de nuevo, las irregularidades del camino y que íbamos en la parte trasera del autobús nos mecian al ritmo, logrando un orgasmo en ella que reprimió abrazando y apretando mis brazos, yo aún no había sacado nada de leche, pero era mejor así, más no se la saqué aún, la dejé dentro de su vagina hasta llegar a nuestra parada, pero unos metros antes subieron 2 adolecentes muy ruidosos, que se sentaron al lado de nosotros, antes de que llegaran logré sacarle el pene, pero no podía acomodarmelo dentro del pantalón, me comencé a poner nervioso, y en un descuido de ellos al ver algo por la ventana opuesta me acomodé el pantalón, tome a Cristal en mis brazos y nos bajamos.
Una vez en la entrada de la escuela, la llevé a su salón, y la presenté con su maestra, ella era una mujer mayor, le expliqué que Cristal en ocasiones tenía problemas con la masturbación, tuvimos una charla sobre el tema y al final ella me reportaría cualquier cosa. Me despedí de Cristal y le repase las reglas rápidamente, ella asintió con la cabeza y se fué a con sus compañeritos, había muchas niñas muy hermosas en su salón.
Fuí a con la directora y le expliqué mi trabajo, ofreciéndome cómo doctor pediatra en la institución, y después de casi una hora de platica, llegamos a un acuerdo, dónde yo podía ir durante ciertas horas a la escuela o en caso de emergencia ellos me llamaban, así podía cuidar mi consultorio y asistir a la institución.
Al finalizar la hora de clases, fui a recojer a mi niña, me platico su día y sus amigos nuevos, y me dijo que sin que ella dijera nada uno de sus amigos (Miguel 3) le contó que el tenía una hermana mayor (Alexandra 6) , y que jugaba con su hermano aún mayor que los 2 (Saúl 15) pero que nunca lo invitan por qué era muy hablador, y que hacían lo mismo que nosotros.
Yo me imaginé esas escenas y me calenté. De vuelta en el autobús ya no pude hacer lo mismo, pues había mucha gente, así que tube que esperar hasta llegar a casa.
Una vez ahí apenas entramos, la desnudé y ahí en la sala, ella sola me desabotono el pantalón y me saco el pene, comenzando con una buena mamada, cómo siempre se la metía hasta su pequeña garganta, ya que estaba toda babeada la acosté en el sillón y le pedí que abriera las piernas, en ese mismo momento se comenzó a meter los dedos, primero 1, 2, 3 y 4, ya en el 4to dedo le pedí que me dejara continuar, apunte a su vagina, le pedí que se relajara, y comencé a metersela, ella al principio creyó que sería como en el autobús y se empezó a mover, pero conforme se movía yo empujaba más, cuando ella estaba cerca de su orgasmo yo sentia su himen, y justo cuando ella se contrajo por él, yo entre profundo, rompiendo su himen y haciendo que ella tuviera uno aún más fuerte, dejándola casi desmayada de placer. Mientras ella se quedaba inmóvil yo la tomé por la cintura, y comencé a penetrarla suavemente, constantemente, y profundamente, primero 5cm, después 8cm, cuando toque el fondo de su útero, al ver la escena, de mi pene dentro de mi hijita, mis mayores fantasías se habían echo realidad, haciendo que de manera bestial soltara mucha leche dentro de ella, ocasionando un orgasmo final en ella. Saque mi pene y mucha leche se vino de tras, mi hija estaba desmayada y la leche venía con sangre, la limpié y revisé que ni haya algún desgarre interno. Cuando me cerciore de que todo estaba bien, la limpie con toallitas húmedas y la dejé dormir, a la hora despertó y me preguntó que que había pasado, le expliqué la situación tal y como fue y ella me sonrió, pidiendo que lo hiciera de nuevo por qué estaba dormida cuando pasó, yo estaría encantado de repetir lo sucedido pero ella debía descansar después de eso.
Al pasar los días compré un dildo de un tamaño similar a mi pene, unos 20cm de largo y un grosor mediano. Le dije que cuando ella estubiera aburrida y yo estubiera ocupado, podría usarlo, también le conseguí un lubricante para que no tuviera problemas al usarlo.
Las mañanas fue rutina las penetraciones en el autobús, y sexo a la llegada a casa, ya en la noche una buena mamada mientras ella se metía el dildo.
En la escuela ya me comenzaban a llamar para hacer revisión a los niños y niñas desde los 3 hasta los 12 años. Cosas simples como una gripe, dolores de estómago y cosas mas interesantes como infecciones en genitales, cómo ya tenia una buena reputación fuera de la escuela, no tardaría para hacerme con la confianza de los papás. Entonces conocí a la hermana de Miguel, el amiguito de mi niña, Alexandra, 6 dulces años y un cuerpo de deseo. Recordé la historia que mi hija me contó, al parecer fue a revisión por un dolor que sentía en su vagina hace unos días, pero le daba pena decirlo, llegó su mamá, (no se puede hacer ninguna revisión sin un padre presente) su mamá le puso su bata sin ropa de bajo, la dirijo a la silla de inspección, y se sentó, primero explique el proceso que haría para que se sintiera tranquila, le coloqué una sábana sobre las piernas y le pedí que las subiera a los apoyos, me dió una vista increíble, era más grande que la vagina de mi hija, más abultada y seguramente más profunda, su mamá se puso al lado de su hija y le dió la mano, le dije que comenzaría a revisar, entonces me di cuenta… Es niña no era virgen, su himen estaba roto, y al parecer eran ya varias veces que la habían penetrado, abrí sus labios y están muy profunda su entrada, dije que metería un pequeño tubo para revisar desde dentro que sentiría frío, pero que debería resistir, tome la herramienta que tenía una cámara en la punta, le puse lubricante y comencé a meterla, tenía un poco enrojecida las paredes vaginales, pero me comenzó a ganar la calentura, le dije que le pondría una crema para bajar el dolor, pero que sentiría algo de dolor, pero solo sería un momento.
Fuí por un tubo de ensayo del grosor de mi pene de unos 15cm, y lo escondí en mi bata, tome otro mucho más pequeño y le dije a la mamá lo que haría, que solo sería un momento, entonces al entrar debajo de la sábana dí el aviso y cambie el tubo, le puse la crema y me impresionó la facilidad de como la vagina de Alexandra se fue comiendo el tubo de ensayo, eso me decía que su hermano ya la tenía bastante entrenada, ella poco a poco comenzó a excitarse, y antes de que algo más pasará se lo saqué y le dije que era todo, solo quedaba descansar.
No me podía quedar con las ganas, y necesitaba desahogarme, entonces fui por mi hija y le pedí que me acompañara, entonces entramos al cuarto de las consultas y la desvestí, la subí a la misma silla y la coloqué con las piernitas abiertas, y comencé a penetrarla de una manera que nunca se lo había echo, ella no podía aguantar los gemidos de niña pequeña, que a sus 3 años era muy exitante escucharlos, así seguí durante 10 minutos tapando su boquita para que no sonara muy fuerte, sacando una cantidad bestial de leche, apenas y sentí la primer expulsión se comenzó a salir de su vagina, con las demás se derramó hasta el piso, mi pobre hija estaba exhausta, la dejé descansar así con las piernas abiertas, y al terminar el recreo, ya estaba lista para su siguientes clases.
Yo por mi parte tube una idea, compré un osito de peluche que hablá, le instalé una cámara oculta viendo un tutorial, y al día siguiente le pedí a Alexandra y a su mamá que regresaran para seguir con la inspección, así regresaron y dí un segundo vistazo ahora ví un poco de semen dentro de ella, mi mente retumbó la idea de que definitivamente su hermano la usaba todos los días, por eso estaba tan irritada. Entonces después de la inspección, le regalé el osito, para que lo dejara en su cuarto y la cuidara, pasaron unos días y le pedí a Alexandra que si podía traerme a su osito, para revisarlo y ella accedió sin preguntar, cuando me trajo al oso, le cambié la memoria y la batería recargable, le regresé el oso y le dije que en 5 días me lo trajera de nuevo para volver a revisarlo, y ella muy sonriente me dijo que sí.
Metí la memoria en la computadora y comencé a revisar los archivos de videos, la camara se encendia cada vez que detectaba movimiento, así que en lo que llegó a su casa ví todo su día, al llegar la noche nada pasó, a la mañana el oso estaba apuntando al techo, al parecer durmió con Alexandra, ella lo levanto le dió los buenos días y lo sentó apuntando a su espejo, ella se comenzó a arreglar para su día de escuela y todo parecía algo normal, llegué a créer que me había equivocado, entonces pasó… Su hermano entró en escena, mientras ella se ponía sus zapatos, le daba la espalda al oso, sentada en su cama, él de manera súbita se bajó los pantalones a media nalga y se sacó el pene frente a Alexandra, y claramente pide escuchar como decía.
Saúl: Chupalo rápido! Antes de que mi mamá venga.
Ella sin mucho que hacer con su mano le agarro el pene y lo empezó a masturbar, en cuanto se le puso duro él le agarró la cabeza y se la metió hasta la garganta, varias veces, ocasionando arcadas y reflejo de vómito, ella como podía aguantaba las embestidas y después de unos minutos el saco su leche dentro de su boca diciendo.
Saúl: tragate toda!
Yo no daba crédito a lo que veía, creo que su hermano era muy duro con ella, y están impaciente por ver cómo se la cogía.
Comencé a adelantar el vídeo y según la fecha y hora esa misma noche su hermano la visitó de nuevo solo que para mí mala suerte no se pudo ver nada, solo escuchaba los gemidos de ambos y los impactos que le daba a su pobre vagina, en un movimiento brusco el oso se movió, y dejo ver cómo Alexandra estaba inmóvil en su cama mientras su hermano se ponía de pie, sacando su pene ya algo flácido y lleno de líquidos sexuales, la dejó ahí sin limpiarla ni nada, entonces ella se puso de pie y se limpiaba la vagina toda mojada, pero no lloraba, ni en su cara se veía mal, al parecer era algo normal para ella.
Adelante el vídeo esperando ver ese espectáculo, la siguiente vez que la camara se activó estaba Alexandra jugando con sus peluches, incluído el oso que estaba apuntando de frente a Alexandra, entro su papá, preguntó cosas comunes y se fue, después entro su mamá haciendo exactamente lo mismo, entonces entro su hermano, yo esperaba que la cogiera o algo pero no, el la abrazo, jugo con ella unos minutos y se fue, yo estaba algo confundido, pero creo que es la mejor forma de seguir usando la chiquilla, mantenerla en un ambiente cordial te puede ayudar a seguir en confianza.
Al llegar la noche en el vídeo, paso algo que no creí que pasaría nunca, el oso estaba apuntando a la cama desde enfrente, Alexandra entraba cubierta con una toalla, su mamá la metió al cuarto, la secó y la dejo sentada a la orilla de la cama desnuda, comenzó a sacar ropa del closet y entro su hermano, él le dijo a su mamá.
Saúl: mamá, puedo?
La mamá lo miró, miro a Alexandra y dijo.
Mamá: Alex, quieres?
Alexandra asintió con la cabeza, entonces Saúl se bajó los pantalones se sacó el pene y agarró la cabeza de su hermanita y se la empezó a meter en la boca, yo abrí los ojos asombrado por lo que escuche y ví, ahí estaba la mamá, y pidió permiso para eso! Que clase de familia era esa. Saúl comenzó a embestir la cara de Alexandra haciendo que diera arcadas, la mamá salió del cuarto diciendo.
Mamá: cuando acabes Saúl la limpias que la última vez la dejaste sucia, salió del cuarto y cerró la puerta, Saúl le sacó el pene de la boca y se bajó a chupar su vaginita, las expresiones de Alexandra eran de puro placer, yo no podía hacer otra cosa más que masturbarme, Saúl se levantó y clavó sin cuidado a Alexandra por casi 15 minutos, las embestidas que Alexandra recibía eran tan rudas que ella tenía orgasmos sin control, Saúl sacó su pene y bañó a Alexandra de leche por todo el cuerpo, Alexandra solo estaba acostada respirando muy fuerte, mientras Saúl salía del cuarto medio desnudo, regreso con una toalla y comenzó a limpiar a Alexandra, llegó su papá y su reacción fue completamente neutral, les pidió darse prisa para ir a cenar.
Yo estaba boquiabierto al ver esas escenas. Su familia era lo que yo tanto he querido.
Detuve el vídeo, y seguí con mi trabajo en la escuela, cada niña que entraba era una sensación cortante, necesitaba explotar dentro del vientre de alguna de ellas, hasta que llegó mi niñita hermosa, sin quitarle nada, baje un poco su malla y moví sus calzoncitos y comencé a penetrarla sobre mi escritorio, embistiendo de la misma manera que Saúl a su hermanita, era tanta la exitacion que sentía que no duré ni 5 minutos cuando exploté dentro del útero de Cristal, mi hija me miraba de manera extraña y le pedí que trajera a su amigo Miguel, que necesitaba hablar con él. Ella fue de inmediato y entro Miguel, a ambos los senté frente a mí y comencé a preguntarle cosas a Miguel.
El me dijo que Saúl y Alexandra, no eran sus hermanos, que el hera hijo de su mamá y su papá, pero ellos solo eran hijos de su mamá. Pero que a él lo excluían mucho de sus actividades familiares, pero que el sabía que hacían pues varias veces los ha visto, pero que siempre su mamá lo regaña, a pesar de que él no hace nada.
Yo no sabía que estaba pasando con esa familia, pero quería ver qué tanto eran capaces de hacer, entonces usé la amistad de Miguel y Cristal para investigar más a fondo.
Al regresar a casa continúe con el vídeo, dónde las escenas se repetían, Saúl pedía permiso y se cogía a su hermana, pero Miguel jamás apareció en los vídeos, el papá nunca tocó a Alexandra solo Saúl, y la mamá tampoco interfería, solo los dejaba. Conforme avanzaba mi estadía en la escuela me ganaba la confianza de los papás de Miguel, logrando un día visitar su casa. La mamá se llama Erika, el papá Jorge, ambos de buen porte, su casa era grande, 4 avitaciones, 2 pisos, 2 baños completos, un carro para cada uno, una sala con una televisión enorme. Miguel y mi hija se fueron a jugar a su cuarto, mientras yo y sus papás platicábamos en la sala, cuando bajó Saúl y le pregunto a su mamá.
Saúl: Mamá puedo?…..
Saúl no se habían percatado de mi presencia, y antes de articular su siguiente frase se detuvo a media escalera.
Erika lo miró abriendo los ojos y apretando los dientes dijo.
Erika: hay visitas!
Saúl dijo entre dientes para que su mamá leyera sus labios.
Saúl: por favor, no hare ruido.
Erika: si! ya vete…
El sonrió y se fue corriendo.
Jorge: Sin hacer ruido!!!
Erika: (tartamudea) estos niños y sus videojuegos jaja…
Yo rápidamente intuí que pasaba y dije:
Yo: Si, mi hija ya quiere que le compré un celular pero es muy pronto para eso, por cierto y Alexandra? No la he visto desde que llegué.
Erika: Ejem… Está en su cuarto estudiando.
Yo: Que bien, y Miguel y Cristal? A dónde se fueron?
Jorge: supongo que en el cuarto de Miguel precisamente, ahí tiene muchos juguetes para entretenerse.
Yo estaba intranquilo, quería ver qué pasaba en el cuarto de Alexandra, entonces pregunté dónde estaba en cuarto de Miguel, para ver si mi hija necesitaba algo, Erika toda nerviosa me dijo que estaba arriba, yo tranquila mente me disponía a subir pero Erika me detuvo.
Erika: espera, aquí tengo un teléfono que sirve para comunicarme a los cuartos,
Yo: No, está bien, no es necesario, la comunicación directa es más práctica. Erika me guió hasta donde mi hija se encontraba pero en el camino hablaba muy fuerte, supongo que para que Saúl escuchara que estábamos subiendo, entonces pasamos la puerta de Alexandra que estaba cerrada, y llegamos a la de Miguel, mi hija y Miguel jugaban tranquilamente con cubos armables, una cantidad exagerada de cubos, mi hija estaba bien, tranquila y sin novedades, entonces el papá resguardaba celosamente la puerta de Alexandra, su cara era de preocupación, pero intentaba cubrirla con una sonrisa, yo medio entre al cuarto de Miguel, pero no dejaba de ver de reojo a Jorge, que cuando creyó que no estaba viendo abrió la puerta de Alexandra y movió los brazos dando una señal para que pararan lo que estubieran haciendo, cerrando la puerta muy rápido.
Ya después de que me di cuenta de que no podría ver a Alexandra en acción decidí retirarme por el momento.
Me despedí de Erika y Jorge al igual que mi hija, de camino a casa el autobús estaba bastante lleno, ocasionado que fuéramos de pie, llegando a una zona bastante poblada, el autobús sobrepasó la cantidad de personas que debería tener, obviamente el disgusto no se dejó esperar, pero enfin, nada se podía hacer, llevaba a mi hija al lado mío, yo estaba perdido en mis pensamientos, pensando en todo lo que estaba pasando. De reojo ví a mi hija y la note extraña, creía que por tanta gente estaba incómoda, pero al ver más detenidamente, me dí cuenta que una mano salía de entre la gente muy escondida por la falda de mi hija, no sé quién era pero estaba tocando a mi hija en su vagina, eso me exito bastante, y a Cristal por lo que ví, quería ver quién era el que lo hacía, pero la cantidad de personas no me permitían ver.
Cuando comenzaron a bajar del autobús esperaba ver a quien manoseaba a mi niña, pero ya no volvió a pasar. Nos tocó bajar del autobús y le pregunté a Cristal si vió a quien la tocó, pero era la misma situación, no logro ver a nadie, pero sintió rico… Al llegar a casa repetimos el sexo, pero ahora quería ver qué tan profundo podía meter mi pene, así que me recosté sobre el sillón, tome a Cristal por la cintura y la comencé a bajar metiendo 10cm sin ningún problema, estaba prácticamente sentada sobre mi pene duro como piedra, su pequeña vagina estaba abierta y adaptada al grosor de mi pene, era una vista presiosa, 11cm fue todo lo que la vagina de 3 años de mi hija pudo aceptar. Su cara de dolor era evidente, así que le pedí que a lo que ella pudiera aguantar se diera sentones sobre mi pene, ella como pudo comenzó a subir y a bajar, primero despacio y después con algo de ritmo, era súper exitante ver cómo ella sola se cogía a mi pene, se le notaba el cansancio a los minutos, a lo que la acosté sobre el sillón, subí sus piernas a sus hombros y la comencé a penetrar lentamente, pero ahora la dejé que gimiera de manera libre, para que expresará su placer, sus quejidos eran muy lindos, cuando me detenía ella movía su cintura y cuando continuaba ella se detenía, y una vez comenzaban sus orgasmos ya nada la detenía hasta que terminaba exhausta, últimamente le comenzó a tomar gusto a que le lanzará mi leche a su boquita. Y entonces le pregunté.
Yo: mi niña, te gustaría que alguien más te la meta? Así como yo?
Cristal: pero no se supone que nadie más debía hacerlo?
Yo: sí, pero esto seguirá en secreto.
Cristal: mmm… No sé…
Yo: que te parece Saúl?
Cristal: puedo intentarlo, lo hace con su hermana, así que… Sí, lo haré con Saúl.
Yo: ok pero se discreta.
Cristal: que?
Yo: ten cuidado y que nadie se entere.
Cristal: ah. Oky, en la próxima visita que le hagamos lo intentaré.
Yo: muy bien, pero necesito que grabes con esta camara disfrazada, le dí el mismo oso que le dí a Alexandra la primera vez.
Pasaron los días y por fin tube una excusa para visitarlos de nuevo, solo que en esa ocasión Erika no estaba en casa, al llegar le di el oso a Cristal y le pedí que hiciera todo con cuidado.
Ella asintió con la cabeza y yo me quedé a platicar con Jorge, entonces mire como Cristal se dirija a escondidas junto con Miguel al cuarto de Saúl, que dormía en la parte de abajo, me disgusto un poco que Miguel fuera de tras, no sabía que le había contado y me preocupaba.
El señor Jorge me pidió un momento para ir al baño, y en cuanto entro corrí con cuidado al cuarto de Saúl, la puerta estaba cerrada sin seguro, así que abrí poquito la puerta y miré lo que tanto esperaba, ya estaba sobre mi hija, metiendo todo su pene dentro de ella, solo ví eso y me regresé, justo me senté y Jorge salió, seguimos platicando con normalidad, y ví salir a Cristal del cuarto de Saúl junto con Miguel.
Una hora después regresamos a casa, ya en casa le pregunté a Cristal que le había dicho a Miguel, a lo que ella me contestó.
Cristal: tube que pedirle ayuda, por qué no sabía cómo, y él sabía que Saúl solo tenía sexo con su hermana, entonces fuimos sin que nos vieran y al llegar al cuarto de Saúl lo primero que nos pidió fue que saliéramos de ahí, entonces yo le pedí de favor si podía probar su pene, a lo que Saúl me dijo que estaba loca, entonces para que me creyera me baje mis calzones, Saúl quedó boquiabierto y le pidió a Miguel salir de el cuarto, pero yo le dije que no, que el se iba a quedar, para ver, porque nunca lo dejaba ver cuando lo hacía con su hermana y no era justo que lo excluyeran.
De ahí fuí a revisar la grabación, tome mi computadora y revise el vídeo del oso, tal cuál como mi hija me dijo, Saúl se puso al frente de mi hija y ella sola le bajó el pantalón, sacó su pene que por la situación ya estaba duro y lo comenzó a chupar, Saúl preguntó que de dónde había aprendido eso y ella dijo que sola, y que ya no hiciera más preguntas, mi hija me hacía sentir orgulloso, la cara de Saúl expresaba una exitacion tremenda por l mamada que cristal le hacía, Miguel estaba sosteniendo al oso, por lo cuál no podía ver su expresión. Después de una buena escena de mi hija comiendo pene, Saúl la besó en los labios y siguió bajando de su cuello hacia su estómago, al llegar a sus piernas le quitó todo de la cintura hacia abajo, y siguió besando su piel, cuando llegó a su vagina le dijo.
Saúl: aquí voy a meter toda mi verga!
Cristal: ya…
Miguel: dónde?
Saúl acostó a Cristal sobre la cama y el se quedó de pie en la orilla, dejando las piernas de mi niña al filo de la cama, así Miguel se acercó y me dió la vista perfecta para ver cómo le entraba otro pene que no fuera el mío a mi hija; Cristal abrió sus piernas y con sus manos sus labios vaginales, Saúl comenzó a meter su pene y se notaba su exitacion, Cristal era toda una profesional pues esperaba pacientemente a que Saúl comenzará a penetrarla.
Apenas Saúl metió la cabeza de su pene, Miguel tomo al oso y lo puso sobre la mesita al lado de la cama, no era la misma vista pero ahora podía veros a los 3, Miguel también se sacó su pequeño pene y se comenzó a tocar sin saber cómo, pero se notaba su erección. Cristal se mantenía quieta y esperaba las embestidas de Saúl, y Saúl estaba concentrándose para no venirse, al parecer hacerlo con una niña más pequeña que su hermana lo estaba volviendo loco, entonces Saúl comenzó a moverse, primero fue despacio, y gradualmente aumento la velocidad, Miguel estaba dándole la espalda a la puerta, esperando a que terminaran, Cristal seguía en calma, pero no significaba que no le gustara, sus manos sujetaban fuerte las sábanas, y Saúl comenzó a golpear el vientre de mi hija con el suyo, logrando los primeros gemidos de Cristal. Si Saúl fuese un poco más perspicaz se daría cuenta que mi pequeña cristal ya no era virgen, o quizá si se dió cuenta más no le importó, cada cuánto una niña de 3 años se te ofrece para que le practiques sexo a su pequeña vagina? Miguel comenzaba a mover su pene hacia todos lados, estaba muy exitado por ver cómo penetraban a su amiguita, Saúl subió a la cama y subió la cadera de cristal, y comenzaron las embestidas con más brusquedad, en ese momento me ví a mi mismo abrir la puerta y cerrarla, Saúl estaba que no podía mas y de repente saco su pene lanzando unos brutales chorros de leche, que por tanta potencia cayeron sin tocar a mi hija, y el último apenas y si tocó su vagina, mi hija tomo lo poco que la alcanzó y se lo metió en la boca, se bajó de la cama se vistió y junto a Miguel salieron del cuarto con el oso, mientras Saúl estaba inmóvil en su cama.
Cuando estaba a punto de ir felicitar a mi hija la escena continúo, pues en cuanto llegaron al cuarto de Miguel ella le bajó el pantalón a su amigo y se la empezó a chupar, obviamente no le saldría nada de su pequeño pene, pero Miguel estaba absorto en lo que su pequeña amiga le hacía, se bajó sus pantalones y le pidió a Miguel que le metiera su pene, Miguel no sabía que hacer así que mi hija lo acostó en e piso sobre una alfombra y ella lo montó, Miguel no sabía cómo corresponder pero mi hija sola se encargó de darle su primer sexo vaginal, hasta que mi hija se ocasionó un orgasmo. Después de eso los 2 se quedaron acostados y terminó la grabación, le hable a mi hija y le dije al llegar.
Yo: Todo estuvo perfecto, pero, porque te cogiste a Miguel?
Cristal: Es que el nunca lo había echo, y como lo ví así, no quise dejarlo…
Yo: Mi niña hermosa, ten cuidado, no sabes que pueda decir.
Cristal: Su hermano tiene sexo con su hermana, que más da?
Yo: Prométeme que tendrás cuidado la próxima, sino tú y yo tendremos problemas.
Cristal: Está bien papi, ahora solo quiero dormir.
Yo: Está bien, vamos a dormir.
Con todo esto al día siguiente le pedí a Alexandra que me trajera el oso de vuelta, para darle uno más grande, en esta ocasión ya era un oso común, ya tenía lo que necesitaba, tome el oso que ella tenía y lo revise para ver qué había obtenido nuevo. Al revisar la nueva grabación, durante 10 días sin falta era mínimo una visita a Alexandra, Saúl tiene mucho apetito sexual, su hermana se nota cansada, pero en la última parte de la grabación paso algo, el mismo día que visitamos a su familia y Saúl se cogió a mi hija, Alexandra platicó con su papá poco después de irnos
Alexandra: Papá, hoy mi hermano no ha venido, que pasá?
Jorge: Cómo que no a venido? No creo que con la visita se haya arrepentido, quizá algo paso.
Jorge salió del cuarto y Alexandra se quedó acostada en su cama, no parecía muy feliz, tan acostumbrada estaba a ser penetrada diariamente?
A los minutos llegó Erika a casa, fue directamente a con Alexandra, y al verla así Preguntó.
Erika: Hija está bien?
Alexandra: No lo sé, Saúl no ha venido…
Erika: ??? Cómo? Pies que pasó?
Alexandra: No sabemos, papá fue a preguntarle.
Erika: espera un momento.
Erika salió del cuarto dejando sola a Alexandra.
Yo cada vez me hacía más preguntas, que rayos pasa con esa familia? Por qué es tan normal para ellos eso? Desde cuándo pasa?
Duda tras duda invadian a mi mente, así me di cuenta de la obsesión que comenzaba a tener.
Adelanté la grabación hasta que aparecieron los papás de Alexandra, y al parecer Saúl no se sentía bien, no sé si estaba fingiendo tratando de ocultar su cansancio o realmente algo malo pasaba.
Esa noche, Alexandra se masturbo mucho, y ahí entro Miguel.
Miguel: Al… Están bien?
Alexandra: Me estoy masturbando, déjame en paz.
Miguel: Te puedo ayudar?
Alexandra: cómo me vas a ayudar? No sabes nada de esto.
Miguel: ya aprendí, ya puedo hacerlo.
Alexandra: vete.
Miguel se dió media vuelta y antes de cruzar la puerta dijo.
Miguel: yo también soy hombre como mi hermano, y también tengo esto!
Se bajó los pantalones y saco un pene pequeño pero muy firme.
Miguel: ahora puedo metértela!
Alexandra miro a Miguel y el ímpetu que tenía y dijo: está bien, no creo que sea peor que mis dedos.
Miguel se entusiasmo y subió a la cama con su hermana, prácticamente repitió lo que vió con Cristal y Saúl, Alexandra primero estaba inmóvil, haciendo cara de aburrimiento, pero poco a poco empezó a disfrutar, Miguel daba todo de si, quería hacer sentir bien a su hermana, pasaron varios minutos y Alexandra ya estaba gimiendo de placer, hasta que entraron sus papás.
Erika/Jorge: que están haciendo?!
Miguel se apartó de Alexandra con cara de susto, mientras que Alexandra se metió los dedos enseguida ocasionandose un orgasmo instantáneo, Erika se sentó con Miguel y le pidió que no hiciera eso, que era solo para Saúl y Alexandra, Miguel comenzó a llorar y a preguntar porque.
Erika: Ya lo habíamos hablado, por favor no insistas.
Miguel se fue llorando.
Erika: hija, no debiste hacer eso, Miguel no debe hacerlo, sabes que Saúl es el único que puede tener sexo contigo, ese fue el acuerdo. A tu papá, en paz descanse le hicimos un promesa, la recuerdas?
Alexandra: si mamá, que cuando el se fuera solo mi hermano podría hacerlo, y nadie más.
Erika: entonces mi niña, intenta no caer en esas tentaciones.
A cada trozo de información me volvía loco, su papá original también sabía que hacían eso? Necesitaba respuestas…
El vídeo continuo pero ya no pasaría nada fuera de lo normal, los siguientes días de grabación continuaban normales.
Creía yo que el papá o la mamá también se involucraban en el sexo, pero no.
A los días le pedía a cristal que le preguntara cosas a Miguel, para ver qué información podía darnos, pero nada, Miguel verdaderamente estaba fuera de eso. No me quedo opción más que confrontar a Alexandra. Cómo excusa le dije a Erika que debía hacer una revisión a Alexandra y ahí hacerle preguntas.
Y como Erika me tenía toda la confianza acepto, un vez en mi consultorio personal le pedí que me asistiera en la revisión para que Alexandra no estubiera incómoda. Pero me dió la oportunidad de hacer la revisión yo sólo, eso me ayudaría bastante, podría hacer preguntas sin problema.
Entonces metí a Alexandra al cuarto de revisión ella sola se desvistió y se puso la bata, paso a sentarse y subió los pies a los descansos, dejándome la vista completa a su vagina, ella estaría a punto de cumplir 7, y su vagina estaba bastante usada para ese entonces, comencé a revisar y a hacerle preguntas.
Yo: Alexandra, necesito hacerte unas preguntas, y necesito que seas honesta, para poder darte un tratamiento en vaso de que lo necesites. De acuerdo?
Alexandra: em… Ok…
Yo: Te masturbas?
Alexandra: … …
Yo: Que no te avergüence, soy profesional y te hago estas preguntas para que tú estés bien.
Alexandra: … Em… Si…
Yo: cada cuando lo haces?
Alexandra: … Todos los días…
Ella está muy enrojecida por las preguntas, pero cooperaba…
Yo: Alexandra, te haz metido objetos? En tu vagina?
Alexandra se volvió un colorete completo.
Alexandra: s s s si….
Yo: Que cosas?
Alexandra: m m mis d d dedos…
Yo: Algo más?
Alexandra: este… Yo…. Um…
Yo: no te juzgaré, puedes decirme.
Alexandra: Es que, se supone que no lo diga.
Yo: Necesito que lo hagas, estás bajó secreto profesional, solo yo lo sabré.
Alexandra: (respiración profunda) por favor, no le diga a mi mamá que le dije, mi hermano y yo… Hacemos… Eso…
Yo: Que cosa?
Alexandra: tenemos juegos.
Yo: estoy entendiendo que tú hermano abusa de ti?
Alexandra: No! Eso no es así, mis papás saben que hacemos eso y están de acuerdo, mi hermano… Perdón, no debo decirle eso.
Yo: Alexandra, estoy preocupado por tí, y quiero que estés bien, necesito que me digas que está pasando.
Alexandra: desde que tengo memoria mi hermano me ha penetrado, conozco toda la información sobre el sexo, y se que no debemos hacerlo por qué somos hermanos, pero mi papá, no Jorge, mi verdadero papá tenía un problema, le atraían mucho las niñas pequeñas, y cundo conoció a mi mamá le confesó eso, que el sabía que estaba mal, pero necesitaba, descargar esa emoción. Mi mamá por alguna razón lo comprendió, y lo ayudó, al tiempo mi mamá quedó embarazada y nació mi hermano, todo fluía bien, mi papá no tenía deseos por un niño, y parecía que todo había pasado, e problema paso cuando yo nací, mi hermano tendría ya 9 años, y mi papá despertó sus instintos cuando me conoció, mi mamá me contó todo ésto, una vez cuando estaba ella de mercado al volver encontró a mi papá con su pene dentro de mi boca, mi papá intentó explicar pero todo era más que obvio, mi mamá lloró, pero ella sabía que dentro de él escondía esos deseos, y a pesar de que mi papá intentó detenerse era mas fuerte el deseo. Mi mamá poco a poco cayó en el pensamiento de mi papá, y poco a poco ella también le ayudaba conmigo, mi mamá me tomaba en brazos y abría mi boquita y mi papá llenaba mi boca con su gran pene, también me daba bastante leche. Después de un año, eso se volvió costumbre, pero ahora mi mamá participaba, mientras mi papá me comía la vagina, tenía sexo con mi mamá, al parecer le exita mucho ver cómo me saboreaba, a los 2 años, mi papá me comenzó a dar por mi culito, dejándome muy abierta, pero ahí fue donde mi hermano apareció, él miro a mis papás jugando conmigo y el quiso intentarlo, mi papá estaba muy caliente y mi mamá no distinguió que sus hijos eran los que tenían sexo, mi papá dejo mi colita lista y mi hermano me comenzó a penetrar, a mis 3 años en mi cumpleaños mi hermano estaba dándome por el culito cuando e un mal movimiento atravesó mi vagina, obviamente me dolió, pero mi hermano estaba más que exitado como pará detenerse, así que el me quitó la virginidad a los 3 años, pero yo estaba felíz, me sentia muy bien, cuando mi papá se enteró se enfadó con mi hermano, y evitó que me tocará, pero ese mismo año tubo un accidente, y antes de dejarnos, le pidió a mi hermano que me cuidará, y que no importaba lo que haya pasado, que no dejará de tener sexo conmigo….
Se todo eso también, porque tenemos videos donde salgo yo siento una bebé mi mamá y mi papá, solo recuerdo algunas cosas desde mis 3 años y, eso es todo…
No esperaba una historia tan completa, pero algún entendí que pasaba, ese otro papá realizó mi sueño.
Yo: y como entonces tú nuevo papá aceptó eso? Por qué el sabe no?
Alexandra: el en realidad es mi tío, y obviamente conocía a su hermano, no había secretos entre ellos y el comprendía la situación, con el tiempo se fue acercando a nosotros hasta que se quedó en mi casa, el nunca me ha tocado y respeta lo que hacemos, y cuando nació Miguel nos pidió que nunca le mencionaramos esto, pero es muy difícil, igual Miguel ya sabe, inclusive una vez Miguel desesperadamente intento hacerlo, pero lo detuvieron.
Yo estaba impresionado, pero tenía que seguir manteniendo la calma.
Yo: Alexandra… Alguien más te a tocado?
Alexandra: No, mi papá y mi hermano fueron los únicos, pero no quiero tener problemas por esto.
Yo: Es que no me puedo quedar de brazos cruzados, si alguien más se entera de esto estarás en problemas.
Alexandra: por favor no se lo diga a nadie, estoy bien de verdad.
Yo: y que podemos hacer?
Alexandra: (voz nerviosa) s s si quiere, metamela, pero no diga nada…
Yo prácticamente tenía una erección que reventaba mis pantalones, y no diría que no a tremenda propuesta.
Yo: está bien, pero que sea mañana, ahora le diremos tu mamá que todo salió bien y que solo hay una leve inflamación de acuerdo?
Alexandra: si, muchas gracias señor…
El resto fue bastante normal, le di el diagnóstico a Erika y el día siguió con naturalidad, mi hija y yo veíamos una película, mientras ella estaba recostada sobre mi estómago desnuda yo le punteaba la vagina, ella se excitaba y se movía sola hasta que tenía un mini orgasmo, y seguía mirando la película, poco antes de terminar yo llenaba su vientre de leche caliente y a bañarse, seguido de una cena y a dormir. Ya acostados le dije a cristal que quería invitar a Alexandra y a Miguel a casa, para jugar con ellos, así como nosotros, a Cristal le encantó la idea y entonces ahora sí a dormir.
Todo el día siguiente paso bastante normal, y le pedimos a Erika si podía Miguel ir a jugar con Cristal, Erika sonrió y dijo.
Erika: sí, me dará tiempo de hacer mis mandados, y puedo pasar yo misma por el más tarde.
Entonces Cristal dijo.
Cristal: puede venir también Alexandra?
Cristal puso su carita toda tierna.
Erika: est bien, puede ir.
Cristal salto y gritó de alegría. Por su parte Miguel y Alexandra llenaban su mochilas de cosas que podrían ocupar.
Yo: Gracias Erika, por dejar a tus hijos, hay algo que necesite saber? Alergias miedos o algo?
Erika: bueno, Alexandra es alérgica a los mariscos y Miguel aún no sabemos.
Pero, estarán con un profesional así que no me preocupo, y miedos pues, a Miguel le dan miedo los payasos y Alexandra a los espacios cerrados.
Yo: Muy bien, entonces si no hay más que decir nos iremos en taxi.
Llegamos a casa y dejé a los niños jugar, yo mientras preparaba el consultorio para que Alexandra estubiera cómoda.
Después de una hora de juegos, comimos algo y a Miguel le puse algo para dormir, entonces mientras el dormía me lleve a las niñas al consultorio.
Yo: Alex, necesito decirte algo,
Alexandra: Alexandra por favor, no me gusta el nombre de Alex…
Yo: perdón, Alexandra… En fin, yo y Cristal necesitamos decirte algo.
Cristal: hacemos lo mismo que haces con tu hermano.
Alexandra: de que hablas?
Cristal: de que yo y mi papá también tenemos sexo.
Alexandra parecía no creer lo que Cristal decía, entonces Cristal se desnudo de inmediato y me bajo los pantalones, tomó mi pene con sus manos y lo comenzó a chupar, Alexandra se impresionó al ver a mi hija.
Yo: No te preocupes, hacemos esto desde que ella era bebé, cómo tú.
Alexandra: entonces que quieren que haga?
Yo: lo mismo que con tu hermano, tendremos sexo.
Cristal dejo de chuparmela y yo le tome la mano a Alexandra, dirigiendo su cabeza a mi pene, entonces tome mi pene con mi mano, le abrí lo boca, metí mi pene y mobi mis caderas.
Yo: Repite conmigo lo que haces con tu hermano.
Cristal estaba viendo cómo Alexandra me lo chupaba y ella se metía la mano en su entrepierna, entonces yo me senté en mi sillón Alexandra de arrodilló y sola me comenzó a hacer un oral exelente, como una niña de 6 años debería hacerlos, mientras yo subí a cristal a mi cara devorandome su vagina toda mojada.
Yo: Alexandra, quítate la ropa.
Alexandra: sí
Se comenzó a desvestir frente a mi, lo que me ponía como un toro, era un cuerpecito esbelto, limpió, pequeño.
Yo: Cristal, súbete como a caballito, Alexandra sube a mi cara como Cristal.
Cristal: si papi.
Cristal se subió a mi pene, y comenzó a montarme, ya podía entrar 15cm de mi pene, lo que era bastante para su corta edad, y así ella sola me daba y se daba placer. Alexandra por su parte estaba siendo devorada por mi, su vagina era bastante suave, a pesar de estar tan usada, jugos y jugos salían de su vagina, después de estar solo 5 min con mi lengua entrando y saliendo de su vagina ella tubo un orgasmo y me orinó ensima, sus jugos eran un deleite para mí.
Yo: Cristal, dale la oportunidad a nuestra invitada de sentarse.
Cristal se puso de pie, y Alexandra se bajó a mi cintura, apunte mi pene y se la metí poco a poco. Mi sorpresa fue increíble, su vagina se había comido 20cm, Alexandra cerraba los ojos mientras sujetaba fuerte mi cintura, entonces si un empujón y los 25 cm le entraron! No daba verasidad a lo que veía.
Yo: Valla, entro todo. Estás bien?
Alexandra: si, me puedo meter hasta 30cm, pero ya me duele mucho.
Solo al escuchár eso me puse a embestirla desde abajo mientras sujetaba sus hombros, la estrellaba contra mi cuerpo como a mi hija jamás pude, mientras Alexandra jadeaba sin poder respirar bien, cristal por su lado se masturbaba con su manita, era fantástico tener a 2 pequeñas a mi disposición.
Mi hija de comenzó a aburrir, entonces se me subió a la cara y me obligó a lamerle la vagina. Chorros de líquido le escurrían a mi pequeña, Alexandra ya había tenido 3 orgasmos pero no quería detenerse, y yo estaba en las nubes.
Ahora era mi turno de moverme, así que tome a las 2 niñas y las acosté una sobre otra, Alexandra abajo y Cristal arriba, las 2 viéndose a la cara, yo me posicioné por detrás y comencé a embestir a las 2 vaginitas alternadamente, para ese momento ya había pasado más de media hora, ya no pude soportar más y exploté dentro de mi pequeña. Al sacar mi pene mucha leche escurrió desde dentro de Cristal, chorreando a Alexandra.
Yo: cómo se sienten?
Cristal: muy bien papi, quiero más…
Alexandra: Señor, metamela en el culito por favor.
Yo: de verdad? Te gusta?
Alexandra: si, es que y me duele la conchita.
Cristal: a mí también papi!!
Yo: de acuerdo mis niñas.
Entonces puse a ambas boca abajo una sobre otra igual. Primero con calma comencé a abrir a cristal, quien pujaba a cada centímetro.
Alexandra: Ufff.. ouch! No sé detenga por favor, más adentro.
Yo seguí metiendo mi pene hasta que pude meter todo, me quedé quieto hasta que se acostumbró.
Yo: ya te habían metido tanto antes?
Alexandra: uno de verdad no, ufff… Solo de plástico…
Entonces igual ya te acostumbrarás.
Cristal: Papi, me toca (levanta el culito)
Yo: espera hija, deja que se amolde a Alexandra.
Un minuto después, di unas metidas hasta que podía penetrarla fácilmente, ahora comencé a puntear a Cristal, solo que a ella no la había penetrado mucho, así que use sus mismos jugos vaginales, se la metí e la vagina unas veces y ya mi pene humedecido pudo entrar mejor en su culito. De la mima manera alterné las metidas en ambos culitos, de alguna manera vaginalmente prefería a mi hija, que aunque no se la podía meter toda estaba un poco más apretada, pero el culito de Alexandra me absorbía de cierta manera que me llevaba a dar la vuelta al mundo y volver en un segundo.
Despues de media hora en diferentes posiciones ahora le llené de lechita el culito a Alexandra. Yo ya estaba exhausto entonces mandé a ambas niñas a bañar en lo que les lavaba su ropita, cuando fuí a ver a Miguel el seguía dormido.
De este punto en adelante las cosas cambiarán bastante, pues ahora Alexandra se unía a nosotros. Solo que pasarían aún más cosas.
Ufff excelente y excitante amigo!
Lo mejor que he leído por aquí 😏
Espero la continuación…
De los buenos, lo mejor, impecable👍
Que excelente relato compadre fabuloso no sé si es real o no pero a mí me pareció genial y me puso cachondo del inicio al final que rico compartir entre nosotros nuestros gustos te felicito.
Excelente y exitante espero que sea real felicidades