A solas con mi hijo
El Inicio .
Tuve mi primera vez a los 15 años con mi primer novio, digamos formal, de 20 años y con quien pensaba casarme, tener hijos y pasar toda mi vida con él, como nos suele ocurrir cuando nos enamoramos locamente por primera vez. Por supuesto eso no ocurrió pero fue una relación de tres años muy intensos, de descubrimientos y por sobre todo de mucho, muchísimo sexo. Aprendí todo con él y supongo que el también descubrió nuevas cosas conmigo. Especialmente porque además de que nuestro sexo juntos era impresionantemente placentero, con el tiempo fuimos abriendonos el uno al otro con nuestras fantasias. Todas, incluso las inconfesables. Ese tipo de fantasias que compartidas excitan muchísimo y van mejorando aún más las relaciones sexuales. Las primeras fantasias compartidas eran las tipicas de vernos uno al otro teniendo sexo con alguien mas. Jugabamos a que el se cogia a mis amigas y yo a sus amigos. Que haciamos trios con otra chica o que el miraba mientras yo cogía con otra mujer. A veces más grande de edad, otras más chica. Cierta vez en uno de esos juegos me confesó que fantaseaba con mi mamá y que lo hacía conmigo y los tres juntos. Accedi a ese juego pero redoblando la apuesta. Le pedí que queria verlo con su mamá y después hacer un trio. Estos juegos de roles fantaseando juntos en la cama nos excitaban cada vez más. Cuando le insinuè lo de su mamá se incomodó mucho y en principio no queria acceder. Fui tan insistente y persuasiva que logre que accediera. Resultó increíble. Jamás lo habia visto tan excitado. Literalmente enloquecia pensando en su madre. Fui por más y termino confesandome lo inconfesable. Su mamá fue su primer deseo de niño, siguió siendolo de adolescente y seguiría siendo por siempre su excitación máxima.
Siempre despues de saciarnos sexualmente jugando con las fantasias surgia la charla si las llevariamos a la realidad alguna vez, si nos animaríamos a concretarlas o si quedarían allí escondidas para siempre en algún lugar secreto de nuestras mentes.
No quiero decepcionarlos pero realmente durante esa relación nunca concretamos ninguna de esas tantas fantasias compartidas.
Fueron pasando los años, otras parejas y fui comprobando en estos juegos lo que sucedia indefectiblemente con los hombres al tocar el tema sexual y las fantasias con sus madres. Algunos confesaban y otros lo negaban. Pero todos se excitaban locamente.
A mi tambien me re calentaba que mis parejas se excitaran pensando en sus madres. Cuando me confesaban su deseo mas prohibido me preguntaban si yo lo haria en el futuro con mis hijos. La verdad no podia imaginarlo, no lograba conectar con ese hijo que aun no tenia. Mi respuesta era vere que sucede cuando los tenga…
Fueron pasando los años y varios hombres. Muy ocasionalmente, algunas chicas de una noche o dos también que nunca llegaron a convertirse en pareja. La realidad es que me gustaba el sexo con algunas mujeres muy especiales muy de vez en cuando, la mayoria no me atraia. En cambio los hombres la mayoria me enloquecia y enamoraba.
Cuando conoci al hombre con quien luego me casaria y tendria un hijo, conocí logicamente a todos sus amigos, pero particularmente uno de ellos bastante mayor que nosotros, casado con una mujer hermosisima y ya con hijos, un niño y una niña.
Nos casamos y esta pareja de amigos con hijos se fueron convirtiendo en muestros mejores amigos. Compartiamos fines de semana, viajes, vacaciones, todo.
De pronto y sin planearlo me enrede con ella, convirtiendonos en amantes. Solo sexo de vez en cuando y sin ningun otro plan porque ambas amabamos a nuestros maridos. Todo perfectamente claro entre las dos.
Cuando su hijo mayor fue dejando la niñez y entrando en la pubertad me fui poniendo muy curiosa e inquisidora durante nuestros encuentros sexuales. Sabia que los niños luego hombres fantaseaban con sus madres, pero aún no sabia que pasaba con las madres…
Lo intuia pero más lo deseaba confirmar que a las mamas les sucedia algo con sus hijos…sexual, me refiero.
Con ella casi logré sentirlo ese deseo reprimido aunque jamás consegui tener su certeza, su confesión.
Al fin lo descubri yo misma con mi propia mente, mi propio cuerpo y mi propio hijo….
Ser madre es lo máximo que nos puede suceder a las mujeres. Es tan increible la sensación y el amor que no se imagina antes de serlo. Y los hijos verlos crecer es un amor incomparable.
Con mi marido teniamos una vida srxual plena y placentera que siguio luego de la llegada de nuestro pimer hijo: Gianlucca.
Gian era un niño hermoso adorable cariñoso amoroso muy buen compañerito y de hacer muchos amiguitos y amiguitas en el jardin y despues en el colegio primario.
Iba creciendo y seguia siendo mi bebe y esas fantasias locas no llegaban ni me las imaginaba siquiera. Pensaba que era imposible que sucediera…
Hasta que un dia inesperadamente y sin proponerselo se produce un click dentro de una que poco a poco va creciendo y haciendose cada vez mas imposible de reprimir. El deseo mas excitante que se pueda conocer. Ireefrenable. Intenso. Unico. Sea fantasia o se concrete en la realidad.
Me encantaba bañarlo a Gian y a el le encantaba tambien que lo bañara. Jugabamos en el agua horas los dos solos mientras mi marido trabajaba
Era nuestro ritual diario cuando llegaba primero del jardin y despues del cole. Para estar bien limpito para cuando llegara papa, cenar e ir a la cama.
Cuando entro a primer grado ya con seis años el papa empezo a sugerirme que lo fuera dejando bañarse solo. Yo me reia y le preguntaba por que si era un bebe y ademas lo disfrutabamos mucho los dos. No lo comprendia. Segimos haciendolo hasta casi los 8 años y medio cuando el papa hablo seriamente con ambos y casi nos ordeno que lo dejara e hiciera solo pq ya era un hombrecito.
Discutimos mucho, no lo entendia y el no me daba ningun argumento logico y razonable. Hasta que una noche lo increpé. Le pregunte que temia que pasara. Tenes miedo que nos excitemos le dije directamente. Y lo acuse de desear a su madre desde niño por eso su temor. Pero tambien le asegure que eso a las madres no nos pasaba nunca con nuestros propio hijos y que el lo deberia saber por su relacion con su madre
Se enojo muchisimo, me grito y casi llega a la violencia fisica. Me grito degenerada y que no sabia nada. Se fue de casa esa noche. Llore muchisimo.
Volvio al dia siguiente y nos abrazamos y pedimos disculpas. Le di la razon que Gian ya era un hombrecito y que debia cortar esa relacion tan umbilical y dejarlo ser.
Nuestro matrimonio se fue deteriorando poco a poco y terminamos divorciándonos en muy buenos términos. Gian todavia no llegaba a los 11 años.
De pronto nos quedamos viviendo solos. Se iba con el papa los fines de semana y nuestras despedidas eran terribles. Ninguno de los dos deseabamos dejarnos solos pero debia cumplir con su padre y lo entendiamos
Llego su cumple de 11 y organice una super fiesta en un salon con todos sus compañeros, futbol, baile y juegos. A la hora de la torta y soplar las velitas su papa no estaba. Nunca llego aduciendo una excusa inverosimil. Gian termino apenado.
Volvimos a casa en silencio. Me abrazaba y me decia gracias que habia estado genial pero se sentia un dejo de tristeza…
Sin decirle nada lo consolaba con besos y caricias. Lo mande a bañarse oara despues ir a la cama
Me quede pensativa y triste muentras escuchaba el agua corriendo detras de la puerta cerrada del baño.
Sin pensarlo y en un acto instintivo abri la puerta de golpe y entre al baño cuando Gian se duchaba.
Cerre la puerta una vez adentro y lo vi parado inmovil mirandome fijo sin decir palabra. Yo tambien inmovil miraba fijamente toda su desnudez.
Te molesto susurre timidamente. No mami me contesto mientras me fui acercando lentamente
Queres que te bañe mi amor como antes que tanto te gustaba le pregunte
Me dijo que no sabia con temor. Temia que diria su padre. Lo tranquilicé asegurandole que si era miedo a su papa que nunca se lo diria. Le pedi que fuera sincero y que era algo solo entre nosotros. Me pregunto si yo queria y le dije que si claro que era mi amor mi hijo.
Se animo y me dijo yo tambien quiero.
Le dije que enseguida volvia y me fui a cambiar.
Volvi al baño con una remerita que apenas cubria mi tanguita sin corpiño. Comoda para bañar a mi nene desnudo.
Le corte la duche y le dije que hagamos baño de inmersión como jugabamos cuando era niño.
Se acosto en la bañadera mientras se llenaba de agua tibia y yo preparaba la espuma.
Empezamos a reirnos mucho juntos y a jugar mientras suavemente le enjabonaba la cabeza y luego tododo el cuerpo ya tapado por el agua. Chapoteabamos y reiamos. Mi remerita se iba mojando toda, adhiriendose a mi cuerpo y transparentando mis pezones.
Todo iba transcurriendo tal como era antes, juegos y risas inocentes.
Hasta que en un instante senti su mirada intensa distinta. Todo parecia ir sucediendo en camara lenta. Las risas se iban apagando. Las caricias eran mas lentas y las miradas…nos mirabamos de una manera nueva, recien descubierta.
Se hizo un silencio de un instante que fue una eternidad. Lo miraba fijo y acariciaba suavemente su cuerpo. Gian me muraba a los ojos como hipnotizado. Sin premeditacion ni pensarlo, instintivamente acaricie su pene. Mi mano lo recorria dulce y suavemente totalmente erecto.
Ese instante eterno de apenas segundos logre romperlo con una carcajada tirandole agua a la cara y haciendolo reir, simulando que nunca habia sucedido aquello.
Le dije vamos a secarse y lo obligue a oararse de espaldas y lo rodee con un toallon gigante.
Lo seque rapido y hui del baño diciendole vestite solo grandulon y me encerre en mi cuarto empapada en todo sentido. Me habia excitado como nunca con Gian mi hijo. Y Gian mi hijo conmigo. No podia dejar de pensar en su poronga parada.
Me bañe y cambie. Me puse mi baby doll para irme a dormir pero no pude evitar ir a ver a Gian como se encontraba
No lo encontre en su cuarto. Lo llame. Estoy aca en el sillon ma, viendo una peli.
La luz de la tele iluminaba el living.
Gian estaba solo vestido con un slip celeste.
Quedate a ver la peli conmigo ma si queres me invito sin mirarme.
Si hijo lsusurre y me acomode en el sillon frente a el sin ver la tele
No nos dijimos nada por un largo rato. Yo no podia dejar de mirarlo recordando lo del baño, excitada.
Gian fingia ver la peli y cada tanto de reojo me observaba un instante y volvia a fijar la vista en el aparato.
Me excitaba mucho verlo y de a poco en poco, lentamente fui abriendo mis piernas. Me subi el baby doll por encima de la minima bombachita que llevaba.
Sabia que de reojo Gian me observaba. Fui apurando mis propias caricias con mis piernas ya totalmente abiertas mostrando mi concha apenas cubierta. Acariciandomela lentamente xon mis dedos y gimiendo silenciosamente le ofrecia una paja.
Gian miro de reojo una, dos, tres, varias veces cada vez mas seguidas mientras dejaba la quietud de su cuerpo para intentar acomodarlo disimulando que ya su pija comenzaba a erguirse nuevamente.
Yo cada vez me pajeaba mas freneticamente, corriendo la tanguita con mis dedos hacia un lado y el otro mostrando mis labios carnoso empapados, frotandomela dentro, colando mis dedos de a uno dentro de mi concha para luego chuparmelos y volviendolos a meter. Gimiendo de a poco cada vez un tono mas arriba…Gian Gian mirame mira…
Voolvi a ver esa mirada del baño fija en mi obnubilada.
Le ofrecia mi concha tocandomela y abriendola con los dedos toma mi amor mira es toda para vos Gian
Pajeate mi vida, mostramela hijo
Se bajo el el slip celeste se abrio de piernas y se tomo la pija con la mano mostrandomela toda. Ofreciendomela.
Nos pajeamos frente a frente el uno para el otro. Acabamos una, dos, no se cuantas veces. Enloquecidos . Yo hipnotizada viendo su poronga echando leche. Gian viendo mi concha penetrada por todos mis dedos mi mano completa, abriendomela toda para el
Ambos soñando fantaseando deseando cogernos, hacernos el amor sin parar.
Gian mi hijo y yo su mamá.
WoW, no me salen más palabras.
Wooow. Muy excitante. Me puso a mil.¿ Cuando habrá una segunda parte?
Wow!!! No suelo leer este genero pero este relato me fasino!!! Y me dejo queriendo mas. Por fa continua el relato!!! uwu
Casi me vengo con los detalles gracias
Me gusto mucho tu relato me excite
Imaginando la escena con tu hijo.
Llevaste genial cómo se daba todo y amo ese lenguaje vulgar, obsceno, explícito, que si no vi mal, crece al avanzar la historia. Me calentaste una barbaridad. Los peques son un manjar que nos encanta. Dale con todo a ese morbo en tus relatos.
DE LO MEJOR PUBLICADO.