Abusando de mi madre Fabiola 1

Mi primer experiencia con mi mamá.
Mi nombre es David, mido 1.73, soy de piel blanca, delgado, cuerpo fit, mi mamá se llama Fabiola, es muy caderona, tiene unas hermosas tetas y culo muy grande, de piel blanca con el cabello largo y oscuro, es muy bella, se viste muy sensual con vestidos floreados y acampanados. Vivimos solos en la casa, no conocí nunca a mi padre y falta no me hace.

Por mi edad, tengo pensamientos calientes con muchas mujeres, compañeras de la escuela, maestras, vecinas, etc., pero recientemente mis pensamientos se centraron en mi madre a partir de un simple juego.  Ambos estábamos en la sala hablando ese día…

Mi mamá: ¿Te parece si jugamos un rato para pasar el día?

Yo: Claro, ¿que jugamos?

Mi mamá: Póker, pero un poco distinto

Yo: ¿cómo distinto?

Mi mamá: Quien pierda tendrá castigos

Yo: ¿cuáles?

Mi mamá: Lo que el otro pida

Ninguna mala intensión pasó por mi mente, era mi madre y no tenía interés alguno en ella, si hacer el juego me lo pidiese alguna compañera o amiga habría pensado diferente, pues mi calentura es grande. Sin mucho ánimo acepte el juego, mi mamá trajo un mazo de cartas y repartimos las mismas para jugar. Jugamos la primera ronda y perdí, para mi sorpresa el castigo fue quitarme una prenda de ropa, me retire la playera y continuamos el juego, la segunda ronda la perdió ella, por lo que le devolví el favor y le pedí que se quitara una prenda.

Mi mamá: No, yo traigo un vestido

Yo: ¿y qué? tú me quitaste la camisa

Mi mamá: No es lo mismo, mi vida

Yo: pues hazlo, son tus reglas

Ella dejo caer su vestido de la parte superior mostrando su brasier, no se veía incomoda y yo tampoco lo estaba, ambos estábamos de acuerdo tácitamente, por instinto mire hacia sus pechos, eran grandes y se veían cubiertos de pecas en el centro, yo seguía sin sentir morbo, pero la atracción comenzó ahí. Repetimos ronda y volvió a perder ella, me miró con incredulidad

Mi mamá: ni me digas eso

Yo: jaja, ya sabes, tu iniciaste eso

Mi mamá: pero no así

Yo: ya, quítate el vestido completo

Mi mamá: ¡No!

Yo: entonces dejamos de jugar

Resignada se levantó del sofá y dejo caer su vestido, su ropa interior no era conjunto, pero se veía muy bien, ni parecía mi madre, era mucho más atractiva que las maestras de la prepa, volvimos a jugar una nueva ronda y ella volvió a perder, rápidamente habló

Mi mamá: Ya no puedo quitarme mas

Yo: Claro que si

Mi mamá: eso no, para nada, ya no quiero jugar, esto es demasiado

Yo: no quieres jugar porque vas perdiendo y no quieres quitarte más ropa

Mi mamá: porque soy tu madre, niño

Yo: pero tú me quitaste la primera…

Mi mamá: era un juego, no te iba a quitar todo, tu estas mal al hacer esto así

Yo: ¿cómo?

Mi mamá: mira, recoge las cartas, por favor y dejemos esto

Yo: bueno, lo hare

Ella levantó su vestido del sofá, se lo puso rápidamente y se retiró a su cuarto, el día transcurrió sin hablar entre nosotros, ella en su habitación y yo en la mía, trate de no darle importancia, no era la primera vez que me peleaba con ella, pero si era la primera vez que me hacía sentir como un sucio pervertido.

Al día siguiente era sábado, ella salió temprano de casa, se despidió de mí de manera normal pero no me dijo a donde iba, se fue tan rápido que ni tiempo tuve de avisarle que ese día yo esperaba la visita de mi amigo Lucas, él venia tan seguido a la casa que consideré innecesario decirle a mi madre por esa ocasión, mi amigo llegó a medio día, jugamos a la consola PS hasta el anochecer, cerca de las 9 pm escuchamos a mi madre llegar a la casa, venia acompañada.

Sali del cuarto a ver, mi madre estaba ebria y la escoltaban mi primo mayor Fernando y su amigo Franco, supuse que la trajeron para cuidarla pues era notable lo pasada de copas que se veía. Eso era muy raro en ella, siempre se cuidaba con el consumo del alcohol.

Sentía que me habían ignorado o no me habían visto cuando llegaron, así que caminé despacio hacia ellos, pero no pude acercarme para ayudar pues rápidamente se dirigieron al cuarto de mi mamá, entraron dejando la puerta mal cerrada detrás de ellos, así que decidí espiar.

Los tres estaban de pie, se escuchaban jadeantes, me asomé por el espacio abierto de la puerta y los vi besándose, los jóvenes besaban el cuello de mi madre y la desvestían, ella se dejaba hacer mientras les frotaba sus miembros por encima de la ropa.

Al estar desnuda se hincó, Fernando y Franco se bajaron el pantalón al mismo tiempo dejando sus penes libres y erectos frente a mi madre. La vi devorar esas vergas con mucha hambre, ni las putas a las que les pagan se les ve así. Los intercambiaba en su boca. Yo estaba excitado, estaba fuera de mí con esa escena. Lucas apareció detrás de mi

Lucas: ¿Que pasa amigo?

Yo: Silencio…

La puerta se cerró fuertemente de improvisto pues nos escucharon hablar, me resigné.

Yo: ya valió Verg…

Lucas: ¿que fue eso? ¿Qué paso?

Yo: mi mamá con unos amigos…

Lucas: ah ok, suertudos jaja

Yo: oye puñetas

Lucas: ah perdón jaja, es que pues ya sabes jaja

Yo: bueno, no sé, pero ya vamos a jugar

Lucas: ¿mmm no quieres quedarte a escuchar?

Yo: no mames pervertido

Lucas: un rato, ya te vi todo excitado, no te hagas

Yo: cállate

Sin decir más y estúpidamente acepte quedarme a escuchar cómo se cogían a mi madre en su cama, las voces de ellos eran tenues, hablaban sobre virginidad, ser hombre, mujeres mayores, etc, casi no se entendían, pero lo que si era claro y fuerte eran los gemidos, los tres bramaban como animales, parecía el audio de una porno o algo así.

Después de unos minutos pensé que era humillante estar ahí oyendo como mi primo y su amigo se cogían a mi mamá, así que le dije a Lucas que nos fuéramos al cuarto, el aceptó, pero su rostro se veía excitado de sobremanera, su cara blanca estaba muy sonrojada.

Una hora y media después, escuche a Fernando y Franco salir de la habitación, no tardaron en irse de la casa, al verlos alejarse Lucas y yo nos dirigimos al pasillo y vimos la puerta del cuarto de mi madre cerrada, nos acercamos, abrimos la puerta, encendimos la luz y la vimos dormida en la cama. Estaba desnuda, llena de semen, su cara, su cabello, sus pechos, su vagina y piernas, la cama estaba muy salpicada de todo eso, la piel la tenía magullada, debieron tener sexo duro con apretones, nalgadas, azotes, mordidas y todo lo que se imaginen.

Nuestra presencia no despertó a mi madre, estaba profundamente dormida, cansada por la faena y agotada por el alcohol, Lucas tomo iniciativa, los dos queríamos hacer cosas y sin decirnos nada actuamos, él se acercó a ella y apretó sus pechos, los limpio del semen y luego los lamio como un bebe, yo me subí a la cama también, mi excitación me controlaba, mi madre no despertaría y yo deseaba hacerle cosas con mi amigo.

Trate de voltear a mi madre, la tome de las piernas para girarla y dejarla boca abajo, al hacerlo ella quiso despertar, solita se acomodo de perrito y dijo entre sueños, ¿otro round Fer? Ustedes no se cansan jaja, aquí esta tu tía mi amor, cójanme como les plazca…

Me quede pasmado, ella creía que yo era Fernando y se dejaría hacer por mi, también debió pensar que Lucas era Franco y nos aprovecharíamos de ello. Me coloque detrás de ella y contemple su gran trasero, su vagina estaba depilada, roja por la faena y cubierta de semen, me baje el pantalón para liberar mi pene, antes de entrar vi a Lucas sin pantalones cerca de la cara de mi madre, ella le chupaba el pene, lo hacia despacio por lo cansada, pero se veía muy rica la escena, ella estaba con los ojos cerrados, imagino que algún tipo de jaqueca por alcohol le impedia abrirlos, era perfecto.

Rápidamente la sostuve de las caderas y la penetre, la embestí con fuerza y deseo, su vagina se sentía muy humeda y resbalosa, casi no apretaba mi pene pero igual era delicioso, sus enormes, blancas y pegajosas nalgas rebotaban como un par de balones con cada golpe, ella empezó a gemir medio dormida, dejo de mamar la verga de Lucas por mi cogida, por lo que mi amigo inicio los movimientos de penetración forzando su boca, la escena me parecia en extremo caliente, no tarde en venirme dentro de mi madre, al terminar me retire y jugos de semen cayeron en la cama, mi pene se encogió quedando bañado en semen tibio de varias personas, al bajarme de la cama, Lucas vino a donde yo estaba y comenzó a penetrar a mi madre de forma bestial como yo.

Me acerque a mi madre, pues quería sentir la boca de mi madre limpiar mi pene, ella aun tenia los ojos cerrados mientras gemía, cuando me puse a un lado de ella dijo…

Mmm Fer, tu amiguito es muy duro, que no pare mmmm, ¿quieres que te limpie? ¿Quieres que tu tía te limpie chiquito? Trae ese pene para acá bebe, mmmm

De inmediato metí mi pene en su boca, ella lo chupo con mucho deseo y hambre, sentía que me lo iba a arrancar, unos minutos después Lucas no tardo en correrse dentro de mi madre, al hacerlo se dejo caer sobre ella muy cansado y jadeante.

Cuando Lucas cayo encima de la espalda de mi madre, ella abrió los ojos y me vio frente a ella, con mi pene en su boca, mi sangre se puso fria…