Accidente de sabado por la tarde
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por hermanitos20s.
Cierto día en la materia de ciencias de la salud, (del grupo de Ale) se toco el tema de la sexualidad responsable, hicieron investigación de enfermedades de transmisión sexual, uso de métodos anticonceptivos tales como pastillas, preservativos, diu, etc., dividieron el trabajo en equipos y al equipo de Ale le toco como tarea explicar a sus compañeros de clase como colocar un condón, así que hicieron la investigación, expusieron el tema en clase y así termino la semana, el sábado por la tarde nuestros padres salieron a una reunión con algunos amigos, de esas que terminan hasta muy entrada la madrugada, así que Ale y yo nos quedamos solos en casa, ya en la tarde me platicó lo de la exposición que hicieron colocándole el condón a una zanahoria y a un pepino, como se reían sus compañeros, como ella y sus compañeras de equipo estaban nerviosas tanto al ir a solicitar los condones al imss, como cuando en la clase tuvieron que colocarlos, y así en la plática me preguntó, oye y a todo esto tu si sabes ponerte un preservativo, no vayas a embarazar a Claudia (mi novia en ese tiempo), me reí y le conteste que nosotros no habíamos tenido relaciones aun, pero que nunca me había puesto un condón, pero que yo creía que no debía ser nada difícil, que llegado el momento me lo podría poner fácilmente, me dijo, ¿no quieres que de todas formas te enseñe a ponértelo?, me quede poco extrañado de que me haya sugerido eso, le dije que me daría vergüenza que ella siendo mi hermana menor me enseñara, me contesto que no era motivo de vergüenza que era algo normal y que no me preocupara.
Y aquí es donde todo comienza… me dijo, prepárate ahoritita regreso, ahí fue donde sucedió el accidente, yo entendí mal, así que cuando ella salió de mi recamara yo me quite la pantalonera y bóxer, quedándome sólo con la playera, y ella que regreso con el condón ¡¡¡ y una zanahoria!!! Entró a la recamara y soltó la carcajada y preguntó, ¿¿qué estás haciendo encuerado?? Le conteste, pues que no me ibas a enseñar a ponerme esa cosa, sin parar de reír me contesto que sí, pero que con una zanahoria como en la clase, para esto yo jamás trate de cubrir mi pene con la mano ni con la playera ni nada y ella tampoco me pidió que me tapara, vi que traía una bolsita con varios condones así que ya medio excitado por la situación le dije, tú se lo pones a la zanahoria y yo me lo voy poniendo donde va realmente
Se quedó un poco pensativa pero ya con menos risa dijo, bueno, ya que esta el pene erecto completamente se pone así, la interrumpí y le dije dame 2 minutos (no sé si fue cosa de nervios o porque era mi hermana con la que estaba, pero yo no tenía el pene completamente erecto, así que empecé a masturbarme), me vio y me pregunto, ¿¿qué haces?? Masturbándome para que se me ponga completamente erecto, cuando eso paso le dije, listo, ahora si comencemos, ella se lo puso a la zanahoria con bastante facilidad, y yo, en fin primerizo comencé a batallar, así que obviamente como a todas las mujeres que les encanta decir “te lo dije” ella me lo dijo, ya ves, no es tan fácil, le dije ayúdame un poco aquí, ¿ahí con tu cosa?, me respondió, me dio risa y le dije pues ¿¿qué más da, o no?? Igual se rió pero se acercó y dijo así mira… y comenzó a colocarlo, al sentir sus manos me puse aún más caliente, cuando termino de ponerlo le pregunte, oye y entonces ¿¿ en este espacio de enfrente es donde se queda el semen?? Rápidamente contestó que sí, le dije que se me hacía muy chico para eso, que no cabía, haz la prueba y luego me cuentas, yo, ya muy caliente, le dije pues de una vez, y comencé a masturbarme nuevamente, ella se quedó ahí sentada viendo hasta que termine, una vez más me dijo “te lo dije” me dio mi pantalonera y me dijo ve a limpiarte, una vez que terminé, regrese a mi recamara, ya con la pantalonera puesta, y por un largo rato estuvimos platicando sobre sexo, nos hacíamos preguntas uno al otro, pero ese día ya no sucedió nada más.
Los días siguientes yo no paraba de pensar sobre lo que había sucedido, me excitaba mucho imaginando el cuerpo desnudo de Ale, como sería, si querría dejarme verla, querría hacer algo conmigo, etc. en fin debo confesar que varios días estuve masturbándome pensando en ella.
Así que cuando estuvimos solos la siguiente vez después de pensarlo un rato y con un poco de nervio me desnude completamente y fui a su recamara, al verme así se rió pero a la vez se sacó de onda y me pregunto ¿¿ ahora tu que tienes, estás loco o que te pasa?? Le conteste, vengo a ver si no te quedaron condones, se siente rico masturbarse con uno puesto, si tengo me dijo, me dieron muchos, pero ¿por qué vienes sin ropa? ¿¿No podías venir a pedirlo vestido?? Le conteste que sí pero que además quería el favor de que me lo pusiera, no voy a mentir batalle fácil como 30 minutos para convencerla pero al fin accedió, una vez que comenzó a ponerlo me dijo, oye la tienes durísima, es porque estoy muy caliente le dije, me excita que me veas así y que me lo pongas, ¿quieres que me masturbe aquí delante de ti?, mmm, pues si quieres, contestó, pero no dejaba de verme el pene, así que comencé a masturbarme ahí, ¿no quieres ayudarme a esto también?
Bueno pues a ver me dijo, me acerque y comenzó a hacérmelo ella, me pregunto, oye ¿cuándo te masturbas así sin condón salen muy fuerte? Le conteste que dependía de la excitación pero que normalmente si salían fuerte, le dije si quieres quítame el condón para que veas, se rió pero me lo quitó y siguió haciéndolo, debido a que tenía toda la mañana esperando a estar a solas con ella pensando e imaginando cosas a la hora que termine salió mucho y con mucha fuerza, con lo último aun le manche el short y la blusa, puso cara de molesta y dijo mira nada mas ya manchaste todo aquí, piso, cama y a mí, vete a limpiarte ándale, ella fue inmediatamente a echar la ropa a la lavadora y pues a limpiar el piso y eso.
Sobra decir que después de eso yo menos paraba de pensar en ella, fantaseaba día y noche y esperaba que pronto llegara el día de estar solos en casa por largos ratos, unas semanas después nuestra mamá consiguió trabajo, ¡¡era mucho más de lo que yo estaba esperando!!
El primer día que llegamos a casa y sabíamos que estaríamos completamente solos hasta la noche, le dije, oye ¿al ratito no me quieres ayudar con algo? Si, ¿con qué? Con mi manuela le dije, me contesto, no, tu puedes solito ándale, una vez más, después de algo de rogar y labor de convencimiento lo logré, la condición era que sería con condón, porque aún no olvidaba que la había manchado toda y eso, accedí, y pues para no darle más vueltas y vueltas a lo mismo, diré que esa semana a diario me masturbo en las tardes después de la escuela, el lunes de la siguiente semana camino a casa le pregunte, ¿qué vas a hacer en la tarde? Nada, dijo, le conteste, ¿qué onda, llegando otra vez igual? No se puede me dijo, y ahora ¿por qué no? Pues porque ya no hay condones, pues así sin condón no importa mira al cabo el semen no deja marca ni en las sabanas ni en el piso, contesto que da la ropa se quitaba pero mientras iba a oler y a medio verse la mancha, ese no es ningún problema, quítate la ropa y ya, se rió y dijo ganas tienes chiquito, yo muy serio le dije, la verdad si, dejo de reírse y me dijo, ya, ahorita vemos, en la tarde como toda la semana anterior, igual me desnude y fui a su recamara, vengo por si va a haber juego hoy, ya te dije como le puedes hacer para no mancharte, es que me da pena sin ropa me dijo, le dije que no tenía por qué tener pena, ya cuantos días tienes tu viéndome encuerado, no pasa nada, no tienes nada que no haya visto, ¿pues no que no habías tenido relaciones con ninguna de tus novias?, me preguntó, pues no, pero pues he visto en videos y películas, aaa, míralo, ¿con que ves mucha pornografía?
Pues no mucha, pero a veces si veo, ¿pero entonces qué onda, jugamos? Pues es que no sé, anímate, es más quédate en ropa interior, ya sería mucha mala surte que te cayera precisamente en el brasiere o el calzón, es como si estuvieras en traje de baño, ándale pues, contesto con una sonrisa medio picara y comenzó a quitarse el pantalón, yo sentía que me quemaba de la calentura de verla así, me acosté en la cama y cuando estuvo lista comenzó a masturbarme, mientras lo hacía le dije, me excita mucho hacer esto contigo, ojala alguna vez te animes a desnudarte completamente, únicamente me sonrió sin decir nada, seguimos así un rato y de pronto me pregunto, y ¿por qué ? pues porque va a ser, conteste medio nervioso de decir eso, porque me gustas y verte encuerada es algo que me calentaría mucho, se rio y dijo ¿maaas?
Pues sí, aunque no lo creas le dije, terminé, nos limpiamos, me vestí, en fin el ritual que siempre hacíamos, pero ella seguía en ropa interior, me extrañó mucho que así fuera, pero no dije nada, solo me limite a disfrutarlo, le pregunté ¿quieres venir a mi cuarto a ver videos o una película? Si, oye, ¿En serio te gusto y quieres verme desnuda? me contesto, me quede sorprendidísimo con esa respuesta, bueno, más bien con esa pregunta, sí, mucho, le conteste, y ¿qué te gusta de mí? Pregunto de nuevo, yo no podía salir de mi asombro y nervios, pero decidí ir por todo, así que le conteste muy sinceramente, me gusta todo, tienes muy bonita cara, además de un cuerpo muy bonito, tus piernas me encantan, en fin le hice una declaración supongo halagadora, note que se sorprendió, pero sonrió y dijo, bueno, solo un poco pero con la condición de que tú también te desnudes, se me fue la sangre a los pies, ¡claro que sí! Le conteste, en un parpadeo me baje la pantalonera con todo y bóxer y me saque la playera, wow, que rápido, me dijo, y comenzó a desabrochar su brasiere, se lo quito y agachando la cara con una sonrisa tímida y picara a la vez fue bajando muy despacio el calzón, abrí unos ojos de búho y le dije, no cabe duda de que estas muy bien, estas más hermosa que como te había imaginado, ¿me imaginabas? Si, confieso que me he masturbado imaginándote, contestó, o sea que después de que yo te masturbo ¿tú lo vuelves a hacer? Pues si para que veas como me pones, le dije, ¿quieres que te masturbe ahorita otra vez? Si, como no voy a querer, pero oye, tú tienes ya varios días masturbándome, me gustaría regresarte ese favor ahorita, ¿puedo? Por esta vez sí, si puedes, contesto, hacía media hora que me había masturbado, así que, aunque lo tenía erecto, tardé mucho para venirme, así que pude disfrutar mucho acariciar su cuerpo y su sexo por largo rato, mientras nos masturbábamos mutuamente platicábamos de pornografía, ¿Dónde la ves, qué sale, cómo es? (En aquel tiempo aún no había internet en cada esquina, así que no era fácil a nuestra edad tener acceso a la pornografía), le pregunte ¿te gustaría ver porno conmigo para ver que puedo conseguir?, pues sí, me da curiosidad, si traes si veo, ¿encuerada? Le dije, se rió, ya veremos dijo, confórmate con lo que está pasando ahorita, lo estoy disfrutando como no tienes idea, le dije…
Así pasamos varias semanas increíbles, acariciándonos mutuamente a diario después de la escuela, no siempre Ale se desnudaba completamente, pero ya lo hacía bastante seguido, únicamente lo días que reglaba no se quitaba ni el short únicamente se sacaba las tetas, además de eso nos volvimos muy aficionados a la pornografía, a diario después de la escuela nos desnudábamos en cuanto llegábamos a casa, veíamos alguna revista, o película porno abrazados y acariciándonos, así pasábamos la tarde entera y ya cuando era hora que fueran a regresar nuestros padres nos masturbábamos mutuamente, y así aficionándonos cada vez más a la pornografía y a nuestros juegos le dije, enserio que me fascina y disfruto mucho esto que hacemos y como nos la pasamos, pero me gustaría, si es que tú quieres intentar experimentar con cosas nuevas, ¿cómo qué? Me respondió ella, pues no lo sé contesté, cosas así como las que vemos en las películas o revistas, eso sí que no, no voy a dejar que me la metas, imagínate si llegara a salir embarazada, no, definitivamente no, no hablo precisamente de eso le dije, pero podríamos intentar el sexo oral o que me masturbes con las tetas, o no sé cosas nuevas, ¿a ti se te antoja algo o has pensado en algo nuevo para hacer? No había pensado en eso, pero pues ya lo veremos después…
Así siguieron pasando las semanas y cuando creía que las cosas no podían ser mejores… ¡¡¡llegaron las vacaciones de la escuela!!! Dos meses para hacer y des hacer desde en la mañana que despertábamos, hasta la noche que nuestros padres regresaban.
Experimentos en época de vacaciones.
El último día de clases había llegado, y de camino a casa le dije a Ale, tendremos mucho tiempo para nosotros, tendremos el tiempo del mundo para experimentar mucho, así que tienes el fin de semana para pensar que haremos las próximas semanas, no platiques de esto en la calle nos puede escuchar alguien ya en la casa lo platicamos, me dijo, al llegar a casa me sugirió conseguir más películas y revistas, sería buena idea cambiar esas que tenemos ya las hemos visto varias veces y pues las nuevas nos pueden servir para tomar ideas nuevas y así experimentar, obviamente dijo la palabra clave, ese día por la tarde salí a cambiar las revistas y películas y pues ya de paso comprar algunas más (no nos fuera a faltar inspiración), así que ese viernes ya no hicimos nada y el fin de semana sin estar solos en casa tampoco, así que el lunes por la mañana despertamos con muchas ganas de estar juntos, cuando desperté escuche la televisión encendida en su recamara, así que no quise esperar más, me levante, me cepille los dientes y a la vez me desnudaba, fui su recamara le di los buenos días y le pregunte ¿ya te bañaste? Aún no, me dijo, entonces ven vamos
nos bañamos deliciosamente juntos enjabonándonos el uno al otro, masturbándonos y disfrutándonos al máximo, me acomode detrás de ella de tal manera que quedara mi pene entre sus nalgas, y con las manos acariciaba su sexo, muslos y tetas, estaba tan caliente que comencé a besar su cuello y oídos, precisamente estaba en sus oídos cuando le dije al oído, me encantas y esto es lo primero que quiero experimentar, la tome de la cadera la gire para ponerla frente a mí y comencé a besarla en la boca (beso francés), para mi sorpresa ella no hizo por quitarse ni nada de eso, al contrario, se me repego más y comenzó a jugar con su lengua en mi boca, mientras me masturbaba y acariciaba mi espalda, y yo pues igual jugaba con sus nalgas y acariciaba su espalda, así duramos buen rato, cuando el beso terminó, un vez más la tome de la cadera haciendo presión hacia abajo, me acerque a su oído y rosándolo con la lengua le dije chúpamela, estaba tan caliente que no pensaba en nada, si iba a querer o no, qué pensaría, que diría, nada de eso pasaba por mi cabeza, y supongo que por la de ella tampoco, se hinco, comenzó a masturbarme un poco y luego puso mi pene en su boca, suavemente paseaba su lengua por la cabeza, luego por el tronco, acariciaba mis testículos con su mano, la paseaba de ahí hasta llegar a las nalgas, estuvo haciendo eso por un ratito, la tome de los hombros y le dije, espera, vamos a salir de aquí para estar más cómodos, salimos, nos medio secamos, la acosté en la cama y de nuevo puse mi pene en su boca, pero esta vez yo también estaba chupando su sexo, de pronto dijo, no vayas a terminar en mi boca, avísame cuando vayas a venirte, después de un rato ella comenzó a casi gritar, “me vengo, me vengo” e intentaba separar mi cara de su sexo, a mí no me importo y me aferre a ella hasta que sentí su jugo en mi lengua, no dejes de chuparme, dije, y comenzó de nuevo y yo seguía jugando con mi lengua en ella, hasta que sentí que me venía, me separe de su sexo solo lo necesario para avisarle que me venía, saco mi pene de su boca y lo puso en su mejilla, y ahí termine como nunca lo había hecho, me enderece para verla y entonces me dijo con una picarísima sonrisa, mira nada mas como me dejaste la cara, traía mucho semen en toda la mejilla y como al igual que yo se enderezó, le escurrió bastante por su cuello hasta sus tetas, ¿a qué sabrá?, me preguntó, pues la verdad ni idea tengo, pero pues no hace daño, pruébalo, ¿y tú cómo sabes que no hace daño? Me dijo, pues en la mayoría de las películas que vemos las mujeres se lo comen y no les pasa nada, tú no te lo comas, nada más tenlo en la boca y lo escupes, pues será para la próxima, ahorita que estaba muy excitada si lo pensé pero al último me dio quién sabe qué, igual y un día de estos me animo y se te hace venirte en mi boca como en las películas, sería riquísimo le dije, si se me antojaría hacer eso.
Ese mismo día por la tarde recibí la llamada de un amigo que me sugería que hiciéramos cambio de algunos videojuegos solo por la época de vacaciones, yo no había pensado en el videojuego en varios días, pero igual acepte, llegó casi para anochecer y como igual ya casi era hora de que nuestros padres regresarán pues me dispuse a jugar, dure jugando hasta entrada la noche y al día siguiente al levantarme lo primero que hice fue encender el videojuego para continuar en lo mío, bien dicen, ¿quién puede interponerse entre un hombre y su videojuego?, estaba tan entretenido que jamás me di cuenta de la hora, era casi medio día cuando Ale entro a mi recamara completamente desnuda a preguntarme ¿jugarás más tiempo con eso, hoy no jugarás conmigo? Ahí pensé, estoy en el paraíso, puse el control en un lado y le conteste pon porno voy a lavarme los dientes al mismo tiempo que me los lavaba me quitaba la pijama, así que entre a la recamara ya desnudo y ella estaba recostada en la cama viendo porno, me recosté pegado a ella y comencé a acariciarla y besarle desde los oídos, la mejilla, bajando hasta la barbilla y el cuello hasta pasar por sus hombros, seguir bajando y llegar a sus tetas, mientras con las manos acariciaba sus muslos y nalgas, ¿qué haremos hoy?
Me preguntó, primero hay que saludarnos le dije, y me lance a besar su boca, un delicioso beso como el del día anterior en la regadera, pero esta vez se prolongó por muchos minutos más nos separábamos apenas lo necesario para tomar aire, mientras dábamos vueltas en la cama acariciándonos como locos, de vez en vez yo recargaba mi pene en su sexo y podía sentir lo caliente que estaba, gemía con más fuerza y se retorcía más cada vez que lo sentía cerca, ponlo entre mis nalgas como ayer, me dijo, me senté en la orilla de la cama y le dije ven acomódate, se recargo en mí, de modo que mi pene quedo entre sus nalgas, yo con una mano, acariciaba sus tetas y con la otra la masturbaba, y claro bese su cuello y oídos hasta que comenzó a gemir de nuevo, ella tenía ambas manos en mis muslos y se movía hacia arriba y abajo de modo que me estaba masturbando con las nalgas, yo estaba tan caliente que le pedí que se detuviera, estoy muy caliente y no quiero venirme tan pronto, le dije, así que volvimos a la posición de besos y caricias por toda la cama, por un largo rato, yo siempre buscando apoyar mi pene en el sexo de Ale, luego con mi mano lo dirigí para frotarlo hacia arriba y abajo sobre su rajita a manera de masturbarla, pero sin dejar de besarla, después de un largo rato así le dije, quiero chuparte,¿ y qué esperas?, me contesto, hagámoslo como la última vez, así que al igual que el día anterior nos acomodamos en un muy rico 69, antes de comenzar a chupar su sexo le dije, ahora no quieres intentar probar el semen, tal vez, contestó, entonces ambos comenzamos a darnos placer con nuestras bocas, pero esta vez yo al mismo tiempo que la chupaba acariciaba su rajita (idea obtenida de una película por supuesto), una vez más comenzó a gemir y a retorcerse un poco, pero poco a poco fue gimiendo más y más fuerte hasta que dijo en voz alta, no manches, que rico, una vez más pude sentir como se vino en mi boca, pero a diferencia del día anterior, esta vez no hizo nada por apartarme de su sexo, poco rato después le avisé que ya estaba por venirme, ella estaba con los ojos cerrados y parecía que estaba disfrutando mucho esa posición, pensé que no me había escuchado, así que se lo repetí un par de veces, “me vengo, me vengo” (yo ya no podía aguantar más), échamelo que tiene, sentí que lo saco de su boca pero puso la lengua sobre la cabeza, no pude más y ahí me vine… sonrió, y dijo, está como agridulce, no sabe tan mal como pensaba, creo que verás realizada esta fantasía tuya más veces, que rico le conteste, pero de inmediato me respondió, aunque creo que me gusta más besarte, y si te la chupo ya no vas a querer que te bese verdad, me reí y le conteste la verdad ya caliente no me importa nada, así que no te preocupes por eso, tu bésame y chúpamela cuantas veces se te antoje.
Me está gustando esto de cumplir tus fantasías, me dijo, se te ocurren cosas que al principio tengo mis dudas pero ya después me gusta hacerlas, claro! si no no la pasaríamos tan bien, ¿o no? Pues eso si me contesto, ¿tienes alguna otra? Si, muchas, pero pues la mayoría son imposibles, ¿qué cosas se te ocurren ahora? Pues por ejemplo tomarnos fotos encuerados juntos (en aquel tiempo comenzaban apenas las cámaras digitales y nosotros no teníamos una), si, pues esa es imposible, que más se te ocurre? Pues contarle a algunos de nuestros amigos o amigas lo que hacemos y si quieren pues que nos vean, no me contestó, también me gustaría meterte la verga, pero como te digo casi se me ocurren puras cosas imposibles, me contestó, pues tal vez Adriana quiera y pues si usas condón a mí también me gustaría que me la metieras, yo estaba con una cara de sorprendido que no podía con ella, apoco es en serio, sí, ¿porque no? Hay que probar cositas nuevas, ven vamos a bañarnos, y así fue como ese día mientras nos bañábamos comenzamos a pensar y planear como le confesaríamos a Adriana de lo nuestro.
Así entre besos y caricias se me ocurrió que haríamos que nos viera como por “accidente” y pues obviamente después de habernos visto un poco no quedaría otra más que confesarle y pedirle que guardara muy bien nuestro secreto, una vez hecho el plan una vez más la tome de los hombros y la empuje hacia abajo, creo que me merezco un premio por la idea, ¿o no? Claro, y comenzó a chupármela a la vez que con sus manos acariciaba mis piernas, luego comenzó a besar mi abdomen y así fue subiendo poco a poco hasta que llego a mi boca, después de un largo beso me dijo, ahora ya sabes a qué sabe tu cosa, muy rica, le conteste y de nuevo empujándola hacia abajo le dije ¿no quieres más? Siguió chupándola de una manera muy rica hasta que de nuevo termine en su boca, esto también es rico, luego riéndose dijo tal vez también un día lo pruebes, no conteste, sólo reímos y pues el siguiente objetivo era elaborar bien el plan para confesar lo nuestro, primero a Adriana y después a ver a quien más.
En proceso el cumplimiento de la fantasía
Después de un par de días planeando como íbamos a confesar lo nuestro a Adriana por fin se llegó el día y Ale la invito a la casa, contaré la anécdota como sucedió, (ya obviamente ustedes saben que todo era parte de un plan).
Ale la invito para que llegara a eso del mediodía, el plan era que iban a comer y a ver películas y cosas de esas durante el resto de la tarde, así que un rato antes de que Adriana llegara yo salí de la casa, para cuando llegué ya habían comido y estaban escuchando música y platicando en la recamara de Ale, entré a casa sin hacer ruido y me desnude completamente, así llegue a la recamara donde estaban ellas abrí la puerta y desde ahí dije “¿ya estas lista para jugar?” Ale soltó una carcajada y yo cerré la puerta y me fui rápidamente a mi recamara me puse un short y una playera y unos cuantos minutos después tocaron a mi puerta, Ale medio riéndose preguntó, ¿estás vestido, podemos pasar? Si adelante, entraron las dos, y yo con la cabeza abajo como si estuviera muy apenado no dije nada, por un momento todo fue silencio, hasta que, aun con la cabeza abajo dije, perdón, es que yo no sabía que había visita, Ale dijo, pues si ya sabemos eso, pero pues tuve que contarle lo que a veces hacemos, ¿tú tienes algo que decirle? Yo levante la cabeza y voltee a ver a Adriana y le dije, perdón en serio no sabía que estabas ahí, por favor no le cuentes nada de esto a nadie, me contesto, no te preocupes pues ustedes están en su casa y ustedes saben lo que hacen, pero, ¿en serio tienen relaciones como si fueran novios? Yo me le quede viendo a Ale así como con cara de molestia por haber contado eso, a lo que ella respondió, te dije que había tenido que contarle lo que pasaba, o ¿de qué otra forma le explicaba que tu entras encuerado a mi recamara pidiendo jugar? No le conteste, me dirigí otra vez a Adriana y le dije por favor no digas nada a nadie, ¿cómo comenzaron a hacer eso? Pues ¿En serio quieres saber? le preguntó Ale, con la cabeza respondió que sí así que comenzamos a contarle la historia con lujo de detalles, de cómo habíamos comenzado, que habíamos hecho etc. En algunas partes se reía, en otras se notaba sorprendida, pero no dejaba de hacer preguntas y de repente hacia exclamaciones como “wow” ó
“¡que barbaros!” pero se notaba interesada, al final de la historia dijo, casi no lo puedo creer, si no fuera porque te vi entrar desnudo en la recamara de plano no creería nada de nada, quítate el short, me dijo Ale, ¿Qué? Contesté yo, si, quítate el short para que nos crea, al cabo ya te vio desnudo ahorita que más te da otra vez, Adriana se rio y le peguntó ¿Qué vas a hacer? Ya lo veras le respondió Ale,¿ tienes algún problema con lo que le pedí?, no, para nada contestó, se rio y dijo sirve que me fijo mejor, Ale se rio también y dijo ándale es en serio quítatelo, se puso de pie y se bajó la pantalonera, obviamente no traía nada abajo y se subió la blusa para dejar sus tetas de fuera, ándale es en serio ahora vas tú, así que me quite la playera, me levante y quite el short, Adriana se rio y dijo, de verdad ¡que barbaros! Ale se acercó a mí, me beso y luego comenzó a chuparme la verga, yo estaba más caliente que nunca disfrutando el momento al máximo con los ojos cerrados pero siempre que los abría veía que Adriana no perdía detalle de lo que estaba sucediendo, hasta que de pronto dijo, si quieren yo mejor me voy para dejarlos que estén a gusto, no es necesario le dijo Ale, de todas formas estamos a gusto, ¿ya viste como la tiene dura?
Entre risitas contesto que sí, no quieres tocársela, ¿qué? Contesto ella, ay Adriana no te hagas, bien que tienes ganas tu y yo ya nos conocemos como somos, que no te de pena con él, ándale ven a tocársela, yo dije, pues la verdad conmigo no hay problema si quieres tocar, bueno, pero solo un poquito me contestó, se acercó y comenzó a tocar primero mi abdomen y poco a poco bajo hasta comenzar a acariciarme la verga y los huevos, ¿Qué te parece? Le preguntó Ale, que para esto se había ido a sentar a un banquito junto a la cama, en verdad muy dura contestó, jálasela para que veas cuanto esperma le sale, ay Alejandra me haces que me avergüence mucho, le contestó Adriana, Ale se rio y le dijo como te haces del rogar, fíjate le voy a cerrar los ojos para que no vea como se la jalas, entonces se levantó se quitó bien la blusa y se sacó la pantalonera que traía hasta los tobillos, se acercó a mí, me dio un beso no muy largo y en seguida se acomodó para que le hiciera sexo oral, yo, claro está, cerré los ojos y comencé a mamar su rajita, ¿viste?, ya cerró los ojos, dijo Ale, ándale, sin pena jálasela, no había dejado de tocarla desde que se acercó pero en ese momento comenzó a masturbarme, yo estaba muy caliente con esa situación sentía que no iba a tardar mucho para comenzar a eyacular, así que me enderece para sentarme y dije, momento, aquí falta algo, nosotros ya contamos nuestro secreto y hasta estamos jugueteando aquí contigo, le dije a Adriana, y tú sigues con toda tu ropa puesta
Luego use la misma frase que use con Ale cuando apenas comenzábamos, aunque sea en ropa interior, es como si te viera en traje de baño de esos bikini, ¿o no Ale? Si Adriana ándale no te hagas la seria y encuérate la estamos pasando muy rico, acuérdate que el tiempo es oro y ya al rato que lleguen nuestros papás se nos acabara el juego, bueno, al menos por hoy, conteste yo, los tres nos reímos y Adriana contestó, pues si me invitan otra vez a jugar si vengo, pero encueradita no te hagas contestó Ale, ándale, así sentada como estaba se desabotono la blusa y falda e igualmente así sentada se las quitó, para nuestra sorpresa de inmediato se desabrocho el brasier y se puso de pie para quitarse el calzón, no terminaba yo de recuperarme de esa muy agradable sorpresa, cuando al instante vino otra, ¡tenía su rajita completamente depilada! No había comentado que Ale era de las muchachas que si bien, recortaba el vello púbico, si lo tenía de manera natural, quiero decir, únicamente le quitaba lo largo, así, que ver a Adriana encuerada y depilada me hizo ponerme como mil veces más caliente, ollitas para la baba, dijo Ale riéndose, la verdad que sí, contesté, pero bueno sigamos en lo que estábamos, me acomode en la cama y Adriana se acercó para seguirme masturbando, pero Ale le dijo, ahora vamos a cambiar un ratito, ¿cómo? Contesto ella, ahora a mí me toca masturbarlo y tu pues acomódate como quieras, ven, si quieres acuéstate así, por aquí, le dije a Adriana, se recostó y comencé a acariciar sus piernas, subiendo muy poco a poco a sus muslos y de vez en vez apenas rozando su rajita, luego, igual muy lentamente comencé a besar sus muslos hasta acercarme con mi boca hasta su raja, levante la cabeza un poco y le pregunté, ¿puedo hacértelo oral? Nunca me lo han hecho, pero si quieres hazlo, no me dijo dos veces, inmediatamente comencé a besar su raja de arriba abajo para después comenzar a lamer con más fuerza, puso sus brazos tras su cabeza como apretando la almohada y comenzó a gemir, mientras tanto Ale veía y me la jalaba, tuve que decirle que esperara un poco porque sentía que ya me iba a venir y pues yo quería seguir disfrutando un poco más, Adriana seguía gimiendo con los ojos cerrados y cuando medio los quería abrir los tenía completamente en blanco, así que al verla así aproveche para acomodarme para acariciar con una mano sus nalgas y con la otra sus tetas, cuando comencé a jugar con sus pezones comenzó a gemir mucho más fuerte, mmm, te gusta ahí, dijo Ale, ella no contestó solo seguía gimiendo muy fuerte, así que me acomode para quedar sobre ella y ahora mamarle las tetas, mientras con mi verga le frotaba por encima la raja, abrió los ojos y dijo, nada más no me la vallas a meter, no te preocupes contesté, estuvimos en esa posición un buen rato hasta que con sus piernas me agarro apretándome muy fuerte alrededor de la cintura y diciendo, wow, que rico, Ale se rio y dijo, préstamelo tantito, no? Ahora me toca a mí, si, cambio otra vez ahora yo se la chupo, ¡mírala!
Que rapidito se te quito la vergüenza, le dijo Ale, pues como tú misma lo dijiste el tiempo es oro, Ale se rio y dijo, bueno, entonces, ¡a seguir jugando! Nos acomodamos de tal forma que yo quede acostado para mamar y manosear a Ale y Adriana me lo chupaba a mí, un rato después le dijo Ale a Adriana, cuidado, a él le gusta terminar en la boca, Adriana rápidamente dejo de mamar y dijo, en la boca no, no seas malo avísame para quitarme, no te preocupes, le contesté, yo te aviso, pero aún me falta un ratito creo, en cuanto dije esto ella continuo chupándome y masturbándose a la vez, hubo un momento muy rico en que todo lo que se oía eran gemidos de los tres, hasta que después de un rato a pesar de todos mis esfuerzos por aguantar dije, ya no puedo más, me voy a venir, Adriana se quitó rápidamente y se hizo para atrás, como se ve que eres nueva dijo Ale en tono de broma a la vez que se acercó a jalármela, ven aquí cerca, mira cuanta cosa le sale dijo, y casi inmediatamente comencé a venirme como en muy pocas ocasiones, no la había hecho quedar mal, en realidad fueron varios grandes chorros que avente, manchándolas a ellas y a mí mismo, esta saladito, ¿quieres probar? Le dijo Ale a Adriana, no, contestó ella, la verdad no se me antoja nada, ¿apoco tú si se lo pruebas? Pregunto, si apenas hace poco comencé, pero si, mira, y se acercó a hacérmelo oral nuevamente y pues obviamente tenía la verga muy embarrada de mecos
Adriana se rio y dijo la verdad que cada vez me sorprendes más Alita, ella dejo de mamar y dijo, vamos a limpiarnos, porque mira nada más como nos dejó este, pues yo también estoy igual dije, ya se vamos a lavarnos en la recamara de mis papás, ¿no Ale? Sí que rico contestó ella, ven, le dijimos a Adriana, entramos al baño y cuando vio que abrí la llave para llenar la tina dijo, no, yo no puedo regresar a mi casa con el cabello mojado, ándale contesto Ale, les dices que nos estábamos haciendo peinados y que te lo lavaste para quitarte lo duro del spray, fíjate que sí, que lista eres, oye y aun no regresarán sus papás, no, aún falta un buen rato para que regresen, así que los tres nos metimos y ahí estuvimos casi una hora platicando y haciéndonos preguntas unos a otros, salimos, fuimos de nuevo a mi recamara, ahí estaba la ropa de Adriana y la que se había quitado Ale, entramos, yo me quite la toalla así que obviamente estaba desnudo Ale llevaba su bata de baño puesta pero abierta y Adriana iba enredada en una toalla, ya me voy a cambiar porque ya no tardan en hablarme, muy bien dijo Ale, se quitó la toalla y antes de comenzar a vestirse dijo, que raro, estar aquí desnuda como si nada con ustedes y haber hecho lo que hicimos, ¿no creen? Pero, ¿te gusto? Pregunté yo, pues si, fue rarísimo, pero si me gustó, nada más no le cuentes nada a nadie por favor y pues cuando quieras dinos y nos ponemos de acuerdo, Ale se rio, pero dijo, si de veras, cuando quieras jugar otra vez me dices y ya nos ponemos de acuerdo, muy bien, cuando me anime otra vez yo les digo y comenzó a vestirse, ¿ustedes se quedarán así? Tenemos un rato antes de que regresen nuestros papás, así que podemos estar encuerados un rato más, una vez que terminó de vestirse Adriana Ale bajo con ella para acompañarla a la puerta solamente, volvió pronto aunque ya sin la bata pero aun desnuda, ¿qué te pareció? Me pregunto, pues yo me la pase muy pero muy bien, ay no me digas, si no me dices te juro que no me doy cuenta, si eyaculaste un chorro, se veía que estabas bien caliente, me dio risa, pues la verdad mucho muy caliente diría yo, ¿y tú que tal? Pues yo también me la pase muy bien, ya le podemos poner una palomita a la primer cosa de tu lista de fantasías, dirás, nuestra lista, ¿no? Bueno si, aunque yo aún no le pongo nada, me dio risa y le dije pues apúrate porque a mí cada vez se me ocurren más cosas, ¿en serio?
Ahora como que se te ocurre, bueno, ya te había dicho el otro día, metértela, ¿sólo esa? Esa ya te había dicho que sí, nada más haz lo que te dije y listo, también me gustaría que te depilaras así como Adriana, ya sabía yo que no ibas a tardar en pedirme eso, se notó a leguas que eso te fascinó, pues la verdad sí le contesté, le dio risa y dijo, ¿qué tal con nuestra amiga estrella porno?, ¡depilada y toda la cosa! Me dio risa y dije, no puedes negar que se ve veía muy bien, casi como estrella porno exactamente, se rio y dijo, bueno, si me depilo, pero los hombres que hacen porno también se depilan ahí, así que la condición para depilarme el vello de ahí es que tú también te lo depiles, ¡si, porque no! No tengo ningún problema en hacerlo, si quieres de una vez, le dio risa y dijo, no, cálmate, para eso necesitamos bañarnos y ahorita ya no alcanzamos, espérate a mañana, bueno, que conste, respondí, oye y ¿qué más te gusto de Adrianita? Pues tiene unas piernas muy bonitas, aunque en general tiene bonito cuerpo, así que me gustó toda ella, bueno, oye igual y la próxima vez hacemos lo mismo pero ahora con un amigo, me dijo, pues sí, tenemos que pensar con quien para que todo nos salga perfecto, así como con Adriana, yo pensé que me ibas a decir que hombres no, dijo ella, no claro que no tú ya le entraste a invitar a una mujer ahora yo tengo que hacer lo mismo y ya vamos a vestirnos no vallan a llegar y nos agarren aquí encuerados.
A la mañana siguiente desperté muy tarde, estaba muy cansado del ajetreo del día anterior, fui a buscar a Ale a su cuarto pero no estaba ahí, baje y nada, no había nadie en casa, desayune y volví a la cama a ver la televisión un momento después escuche la puerta, era Ale que había regresado, que bárbaro como duermes, ya es casi medio día y tu ahí acostado, me sentía muy cansado le contesté, por cierto ¿a dónde fuiste? Pues a comprar algunas cosas para nuestro regaderazo de hoy, a caray, ¿qué cosas? Pues esto, y saco 2 rastrillos para rasurar, no pensabas usar los de mi papá, ¿verdad? Ándale vente o ya te vas a echar para atrás, no, claro que no, le conteste al mismo tiempo que me desnudaba, nos metimos a la regadera nos enjabonamos y me dijo, bueno tu comienza, bueno, tu mandas le dije, así que comencé a depilar completamente la zona de mi verga y huevos mientras ella me veía y de repente me ayudaba un poco, batalle un poco pero al fin termine, ¿qué te parece? Le pregunté, quedaste como bebé, te ves muy bien, se te ve más grandota, gracias le conteste mientras me reía, ahora sigues tú, te toca a ti quedarte como bebé, igualmente se enjabono y comenzó a depilarse mientras yo veía y de igual forma de repente le ayudaba, una vez que terminó me preguntó, ¿me veo igual de bien que Adriana? Me reí y le conteste, no seas celosa, tú te ves mucho mejor, no cambiaría una noche contigo por cien noches con ella, se rio y dijo, ay que poeta y que lindo, ven te voy a dar un premio por ese comentario, se puso en cuclillas me acerque y comenzó a mamarme deliciosamente, tanto que unos pocos segundos me tenía muy caliente, ven vamos a la cama, ahorita continuamos aquí, entramos al cuarto y le dije, recuéstate, quiero probar esa rajita depilada, hagamos un 69 contestó, yo también quiero esa verga en mi boca
Escucharla decir eso me calentó como un toro, estaba tan caliente que poco me importaba cualquier cosa, después de un rato de estar en el 69 comencé a girarme para besarla desde el abdomen, subir y llegar a sus tetas el cuello y la boca mientras acariciaba todo su cuerpo con mis manos y su rajita con mi verga, me gustas mucho quiero meterte la verga ya, ya no quiero esperar, métela, contestó, yo no lo pensé 2 veces me acomodé y comencé a penetrarla al tiempo que la besaba, mamaba sus tetas y la acariciaba toda, pero dada mi inexperiencia y calentura muy pronto comencé a sentir que explotaba, me vengo, grite, ella se quitó de inmediato y contestó a la vez que me empujaba para atrás y se hincaba en la cama, no chiquito aun no, espera un poco, comenzó a mamarme la verga que estaba a punto de reventar, de inmediato dije de nuevo, me vengo, sácame los mecos y dámelos a probar, en cuanto termine de decir eso me vine yo pensé que se iba a quitar pero esta vez me dejó que terminara casi completamente dentro de su boca y enseguida comenzó a besarme, mientras con la mano seguía masturbándome, después de un largo beso, pero realmente largo beso, me dijo sonriendo,¿ y a qué saben los mecos? Pues no tan mal como yo pensaba, están saladitos, se rio y dijo ven vamos a descansar un ratito, nos acostamos acurrucados, ella acariciando mi verga y yo su raja, estuvimos así largo rato, entre besándonos y platicando, no creí que te fueras a animar a hacerlo, me dijo, pues la verdad sentía curiosidad y estaba tan caliente que no me importó el asco, no saben tan mal, ¿lo harías de nuevo? Es que me excitó mucho que hiciéramos eso, si a ti te gusta y te calienta más, si lo haría, la próxima vez me gustaría que te vinieras sobre alguna otra parte de mi cuerpo y de ahí lo lamieras, a caray, como en tus tetas, raja o nalgas, le conteste, se rio y dijo, pues sí, esas podrían ser algunas opciones, ¿qué otra cosa se te antoja?
Le pregunté, tengo un par de ideas me contestó, aunque la verdad aquí el de las buenas ideas desde que comenzamos eres tú, me reí y le contesté, mira estuve pensando que tal vez podríamos usar la misma técnica que usamos con Adriana con José Luis, es buen amigo de los dos, creo que nos puede guardar bien el secreto y además también le encanta el porno y es caliente, pero pues quien sabe que opine de este tema en específico, ¿tú como ves? Pues puede ser que tengas razón, pero usar exactamente la misma técnica que usamos para convencer a Adriana es algo que no me convence, creo que no funcionaria, yo creo que tendríamos que hacer algunos cambios, toda esa tarde la pasamos jugueteando y planeando lo que haríamos con José Luis, así que en la noche lo llame para invitarle al otro día con el pretexto de intercambiar algunos videojuegos, para el día siguiente estábamos listos para confesar lo nuestro a una persona más, nos levantamos emocionados por comenzar un día más de experiencias nuevas, pero, sorpresa!
A nuestro amigo José Luis no le gustó nada saber de lo nuestro, así que literalmente salió huyendo de la casa, ese día nos quedamos muy angustiados, pensamos que Luis iría a contarle todo a nuestros conocidos, amigos y familia, en fin nos daban vuelta en la cabeza mil cosas, así que esa tarde no hicimos absolutamente nada, ni siquiera estar desnudos, que se había vuelto ya tan cotidiano, en la tarde ya casi para anochecer me llamo por teléfono para decirme que no nos preocupáramos porque fuera a abrir la boca, que él no diría nada a nadie con la condición que pensáramos bien lo que estábamos haciendo, que buscáramos ayuda profesional, etc. Etc. En fin cosas que uno no espera escuchar de un amigo libidinoso y pornográfico, pero cada quién su gusto y pensamiento
Cuando terminé de hablar con él fui a contarle a Ale para que también ella estuviera tranquila, estuvimos platicando largo rato al respecto, sobre los pros y los contras, al fin decidimos que si nosotros lo disfrutábamos y estábamos bien con la situación no teníamos por qué parar, así seguimos pasando varias tardes muy agradables juntos, sin tener en mente ya la idea de invitar a alguien más para contarle lo que hacíamos, una de esas tardes llego Adriana a la casa, así de sorpresa y sin avisar, sólo que no iba sola, iba acompañada de Fernanda su hermana, dos años menor que ella, estábamos en mi recamara cuando escuchamos el timbre de la puerta y Ale bajo a abrir enredada en la bata, la escuche decir, hola, ¿cómo estás? Y cuando escuche la voz de Adriana contestar al saludo casi bajo en dos segundos así encuerado, solo que inmediatamente después de saludar dijo tengo muchos días pidiéndole a mi mamá que me trajera y pues hoy que me trajo se me pegó esta metiche (Fernanda), Ale se rio y dijo, está bien, no seas mala con tu hermana, ya ves, contesto Fernanda, ibas a bañarte, preguntó, si, en eso estaba, contestó Ale, me baño rapidito y regreso, no tardo… en fin, una tarde más que no haríamos nada.
De esas siguieron muchísimas en las que lo pasamos realmente bien, no hemos parado de experimentar, aparte de Adriana ha habido otras amigas y amigos que si han querido compartir momentos ricos con nosotros, de eso hace ya casi trece años y aún tenemos relaciones cada vez que tenemos oportunidad, en fin, esa es la historia del comienzo, de cómo nuestra relación atípica que surgió un poco por accidente comenzó.
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