Ahora soy la puta del mejor amigo de mi padre.
Alex no sé contuvo más y se puso de pie bajo su pijama quedando totalmente desnudo poniendo justo frente a mi rostro su verga, era rosada venosa gruesa y muy grande unos 23,6cm era inmensa sus huevos colgaban como dos naranjas.
Después de este día mi tío y mi abuelo hacían de mi su puta y yo lo disfrutaba cada día, más mi abuelo con su experiencia me sabía exitar al máximo y descubrí el placer de ser clavado por una buena verga, el dolor ya no era un problema y al contrario sus vergas me exitaban y me llenaba de placer ser penetrada por ellos, pasaron dos meses y mi padre se recuperó por completo de su acción y lesiones, yo estaba muy molesto pues papá me llevaría consigo a su casa y ya no podría estar con mis nuevos dos amores.
Como era de esperarse nos fuimos de casa de mis abuelos pero con una sorpresa, mi padre antes de su accidente había estado saliendo con una mujer y está había quedado embarazada teniendo así 6 meses, papá se lo tenía bien guardado y los padres de la chica le exigieron a mi padre hacerse cargo de su hij@ que venía en camino, la chica era muy guapa una catira de ojos verdes bajita 160 de estatura piel blanca y grandes tetas.
Despido a este nuevo miembro en la familia mi padre decidió mudarse a otra ciudad ya que su mejor amigo vivía allá y tenía una casa departamento grande que alquilaría a muy bajo precio a papá para ayudarlo, yo estaba furioso odiaba a la tipa está y su embarazo, pero más odiaba el hecho que no podría visitar a mi abuelo y tío, lloré bastante y tuve mi primera etapa de rebeldía, llegamos a la nueva ciudad el apartamento era bonito grande pero la ciudad era totalmente extraña para mí además el cambio de liceo también me afectó mucho, eso y el tener una madrastra en casa todo el tiempo hacia mi vida muy aburrida.
Todas las noches pensaba en mi abuelo y tío, gracias a esto aprendí a masturbarme rodando mi penecito con las almohadas y a pesar de no botar semen la exitazo era muy rica, pero no tanto como sentir una caliente carnosa venosa y lechosa verga, estaba como una perra en calor a pesar de solo tener 6 años era sexualmente muy precoz, no perdía el tiempo viendo los bultos de cualquier hombre que viera en la calle tv o a mi papá, aunque este estaba más concentrado en su mujercita y su futuro bebé.
Pasaron los meses y ya me había acostumbrado a mi nuevo hogar y mi madrastra, además descubrí algo muy bueno en mis vecinos o mejor dicho en el mejor amigo de mi padre, él era muy guapo ojos grises, rostro muy bonito alto más alto que papá, media 192 sólo tenía una cosita mal, era muy delgado, pero aún así me encantaban sus hermosos ojos, cada que él iba a casa a hablar con papá yo siempre lo saludaba y era muy cariñoso con y él también aunque de principio era muy serio luego se fue soltando y jugábamos y me hacía bromas.
Así pasaron los meses hasta que llegó la hora de parto de mi madrastra, papá se fue al hospital con ella y al ver que su amigo tenía tanta confianza y cariño hacia mi le pidió que me cuidara a lo que Álex el amigo de papá accedió, yo estaba feliz de poder estar con ese hombre al menos como su amigo, esa noche Alex sé quedo en casa preparo la cena y puso una película de acción en la TV, yo me senté en el sofá junto a él, Alex tenía su pijama una sudadera holgada y una camiseta de mangas largas, de repente recordé como había seducido a mi abuelo, así que empecé a preguntar si era peludo como papá y si tenía novia o esposa, él respondió no soy velludo, no tengo esposa pero si unas camitas que me cómo de vez en cuando, lo dijo con tanta naturalidad que no noto lo que me había dicho.
Inmediatamente le pregunté ¿te comes a las chamas? El me miró se rió y me dijo es sólo una expresión algo de adultos, yo ya sabía que significaba eso y le respondí entonces ¿entonces le das guevo y le chupas la pepa (vagina) a tus amigas? El me miró fijamente y no pudo contener una carcajada y me dijo tu de donde sabes eso, quién te enseñó tu papá? Yo respondí no, no fue él pero muchos amigos del liceo hablan de eso, él se rió entonces me acerque a él y le dije me puedo recostar en tus piernas mientras veo la peli el dijo si claro, no era la primera vez que lo hacía, sin embargo en esta ocasión estábamos solos y mi intención era poder sentir su vergo.
La película continuaba y comencé con mis preguntas de nuevo y le dije, Alex y que se siente chupar pepita y clavarte a tus amigas, el me miró se puso un poco serio y dijo eso es algo de adultos y no te voy hablar de eso, inmediatamente yo respondí, pero acaso no todos lo hacen mi papá se come a mi madrastra y también a mi mamá cuando ella vivía con nosotros no es alg normal, él respondió si es verdad pero no es algo que un niño deba saber, yo respondí aunque con mentiras pues yo ya e visto las vaginas de algunas compañeras y hasta les metí el dedo y nos dimos besitos.
El me miró y se rió nuevamente, vaya eres igual a tu papá un precoz de mierda, yo entonces tomé coraje y apesar de que mis piernas temblaban del miedo que tenía, le dije si la bese y le toque su vagina pero en realidad lo que me gusta es mamar verga, dicho esto Alex se levantó inmediatas del sofá y me dijo de que estás hablando? A Pesar de mi miedo respondí fuerte y claramente, sí que a mí me gustan son los guevos las vergas chuparlas y sacarles la leche.
Alex sé quedó en silencio y luego me dijo ya estuvo bueno te vas a dormir y no se habla más de esos temas usted es un niño y tiene que actuar como tal, vete ya a tu cama a dormir y no quiero excusas o preguntas, yo obedecí y me fui a mi cuarto, él apagó la TV y se fue a dormir al cuarto de mi papá, yo no podía dormir no sabía que pasaría si Alex le contaría a mi papá o que pasaría, pasadas unas horas me fui al cuarto de papá, ahí estaba Alex sin camisa ya que estaba haciendo calor y con las sábanas de lado, yo no pude resistir y me subí a la cama suavemente, Alex era blanco y lampiño muy delgado se marcaban sus costillas, pero aún así era un hombre y yo lo deseaba, me acerque y comencé a rozar poco a poco su pecho, baje por su ombligo y luego hasta su verga.
A diferencia de mi padre, tío o abuelo a él no se le marcaba nada el bulto, sin embargo, yo lo deseaba lo acariciaba por encima de su pijama suavemente él no se movía, empecé a sobar más fuerte pero nada pasaba, me sentí un poco frustrado, así que volví a su cara y empecé a acariciar su cara y orejas, no sé por qué pero lo hice tocaba también sus labios rosados y su mentón, estaba tan concentrado que él se despertó y de un solo grito casi me mata del susto, Que coño haces ya te había dicho que te portaras como un niño, ya deja la mariquera y portate como un hombre, yo solo pude empezar a llorar, el me grito nuevamente ya cállate marico vas a despertar todo el mundo, yo seguía llorando y salí corriendo a mi cuarto.
Seguí llorando en mi cuarto por varios minutos hasta que Álex llegó a mi cuarto y me dijo en un tono más calmo, ya deja de llorar y duérmete, para este momento estaba dolido, con rabia y triste por cómo me había tratado y entonces le grité, no me callo y no dejaré de llorar y no dejaré de chupar vergos y no dejaré de comer vergas, él se sorprendió y se quedó parado y en silencio por varios minutos yo seguía llorando, el se acercó un poco a mi y me preguntó enserio te gustan esas cosas y las has hecho, es decir eres maricon y te has comido alguna verga? Sí respondí airadamente y varias me gusta me encantan las vergas y si quieres dile a papá no me importa.
Mi llanto aumento y no me podía contener me tiré en la cama boca abajo y llore como nunca lo había hecho, Alex permanecía en silencio hasta que sentí que se sentó cerca a mi y me puso su mano sobre la espalda ya cálmate no llores más no diré nada a tu papá, si eso es lo que te gusta pues ya serás tú quien se lo diga a él o no, yo me voltee y entre sollozos le dije gracias y me lancé sobre él con un fuerte abrazo, el me abrazó también, podía sentir su respiración en mi cuello y sus manos abarcando toda mi espalda me sentía especial, querido.
Sin miedo alguno lo mire a los ojos y con mis manos lo tomé de su rostro y le dije te quiero mucho Alex, el me miró fijamente y me dijo yo también, de repente sus brazos me arrastraron hacia su pecho y me dio un gran beso, su lengua me rozaba cada parte de mi boca y sus labios se rodaban bruscamente a los míos, sus besos eran apasionados y sus brazos me presionaban a él era como si quisiera desbaratar me entre sus brazos, yo intentaba hacer lo mismo tome su cara fuertemente y deje que su lengua hiciera lo que quisiera dentro de mi boca.
Mientras todo esto pasaba pude sentir en mis piernas como la verga de Álex crecía y se ponía dura como el metal, Alex no sé contuvo más y se puso de pie bajo su pijama quedando totalmente desnudo poniendo justo frente a mi rostro su verga, era rosada venosa gruesa y muy grande unos 23,6cm era inmensa sus huevos colgaban como dos naranjas estaba totalmente lampiño, su glande era grande y rojo parecía que estaba a punto de estallar y un líquido transparente se asomaba por la punta de su glande, yo me acerque y puse mis manos sobre aquella vergota y la lleve directamente a mi boca, sabía delicioso era algo exquisito a mi paladar el gimió inmediatamente y puso su mano sobre mi cabeza cuando mis movimientos e intentando que la mentira lo más profundo posible, pero esta era muy gruesa y larga, solo un cuarto de su verga estaba en mi boca, sus gemidos eran tan masculinos y excitantes, que no aguante más me solté de sus manos y solté su verga me di la vuelta y me puse en cuatro dejando mi culito a su vista abrí lo máximo que pude mis piernas y me quedé inmóvil.
El entendimiento mi ofrecimiento y sin pensarlo sumergió su cabeza en mi culo lamía mi ano como si fuera miel o la comida más rica, su lengua se abría paso en mi culo sus manos sujetaban fuertemente mis nalgas y las abría a más no poder yo solo gemía como una pequeña puta, el se detuvo mando un gran escupitajo a mi ano y de la forma más brusca metió su verga solo medio la mitad pero se sentía como si fuera la verga de un caballo rompiendo mi ano y entrañas, sujetando mis hombros empezó su embestida y cada embestida su versa ingresan más y más, el escupía mi culo y lo lubricada en cada embestida, yo sentía como se partía mi culo el dolor era casi insoportable, pero yo lo deseaba así que mordí la almohada y solo deje que ese macho me poseyera, su respiración era muy fuerte sus gemidos se intensificaron y su verga ingreso por completo en mi ano.
Alex me embestía como un como un animal, su pelvis golpeaba fuertemente mis nalgas, podía sentir como su verga llegaba a lo más profundo de mis intestinos sentía un dolor inmenso y por un momento parecía que su verga llegaba justo hasta mi ombligo, yo gemía casi gritando del placer y dolor, Alex tapo mi boca y me sostuvo con sus dos manos mientras bombeaba mi ano, yo sentía que en cualquier momento me desmayaría ya no tenía fuerzas y las embestidas de Álex eran tan fuertes y rápidas que en su momento pensé que me mataría, unas últimas embestidas me tiraron a la cama ya mis piernas no dieron más y caí boca abajo sobre la cama, Alex continuaba y su sudor mojaba toda mi espalda y bajaba directo a mi culo.
Un fuerte grito seguido por muchos gemidos me hizo saber que ya había terminado y que su leche ahora llenaba todo mi culo culo, Alex sacó lentamente su verga y se tiró al lado mío yo estaba en un trance, placer y dolor era la sensación más extraña, Alex se acercó y me preguntó estás bien yo le dije si excelente aunque por dentro solo quería morir, él me abrazó y nuevamente me dio un beso, esta ves uno más suave más delicado, yo olvide todo el dolor y solo me aferre a su cuello mientras él me comía a besos, los dos nos tranquilizamos y en silencio nos metimos bajo las sábanas y me dormí en su pecho.
Que rico, espero siga la saga de éste relato. Ha sido muy placentero leerlos.