APP XXX 20
Finalmente la aventura de Cas acabará, solo le queda algo por hacer, y lo disfrutará mucho….
Advertencia: este relato es completamente Ficticio, no tiene nada de real y solo esta para entretener con una buena de dosis de morbo a todos los lectores que gusten…
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Había sido una pesadilla, apenas se salvaron, pero después de aquel infierno, la familia tuvo que tomarse unas vacaciones, que por suerte se pudieron adelantar debido a las fechas, las fiestas invernales, se hizo una nota falsa de nuevo, para que nadie supiera lo ocurrido, solo que un tipo se metió a su casa a robar, aunque no darían otros detalles, Raul terminaría encerrado, pero ahora en un manicomio, pues le tuvieron algo de compasión, al menos por parte de Constance, quien ahora deseaba vengarse del chico por lo que le había hecho, por suerte su bebe no fue afectado, aunque por la edad de ella tendría cierto riesgo. Por otra parte la familia dejaría por unos días su residencia debido a los problemas, era obvio que no resultaba segura, tendrían que irse a un lugar más seguro, o eso pensaban al ver cómo es que aquel chico se había logrado meter y causado tanto daño, por lo que acabarían en la isla del placer, ahí Eddy ya tenía a sus niños, nacidos de unas preciosas gemelas, y los tratarían con la misma calidez familiar, al menos gracias a su parentesco sanguíneo.
El ambiente como de costumbre estaba cargado de un aire sexual tan erótico, que parecía ahogar a cualquiera, aunque era solo para los mas inexpertos, una fragancia que incitaba al sexo, apoyado por la mira de las bellas meseras o trabajadoras, que por un precio justo podrían ser presa de todas las fantasías que pudieran tener sus clientes, mujeres de todos los tamaños, formas y sabores, que usaban trajes de acuerdo a sus oficios, pero con una credencial con nombre y precio que aseguraban cumplir cualquier antojo. Luego de todo lo ocurrido, Janet se quedó algo inquieta, vivir aquellas cosas fue un tremendo shock, el cual casi le hacía perder la compostura, siendo igual con Lana, pero no haría nada porque lejos de Cas estaba perdida, no tenía a donde ir, haciéndola que se acercara a el de manera más mimosa, coqueta, buscando un contacto intimo, mientras que Julianna, se aferraba mas al joven, uno que se confundía entre lo filias con algo más intimo, y bajo alguna clase de acuerdo comenzaban a tener una relación sexual triple, donde no dejaban de fornicar de tal forma que intentaban escaparse de su realidad, entregados en la lujuria, mientras se sentían en libertad para disfrutar de sus cuerpos de manera carnal, como si fueran una clase de relación especial. Lana de igual forma se iría entregando al novio de su hermana, aunque buscaría solo ciertos momentos, no estaba contenta, todo lo sucedido era horrible, pero igual formaba un apego con Cas, para dejarse tomar en cada oportunidad, y en la isla llegaría incluso a vivir la fantasía de coger en un salón de clase, viviendo un momento excitante, lo cual necesitaba para superar parte del miedo. Pasaría lo mismo con las gemelas, quienes se aferraban al joven con tal de alejarse de toda esa realidad, ver a su hermano convertido en ese monstruo era algo que no deseaban haber visto, aun recordaban como este les metió cosas en sus culos, haciéndoles chillar de dolor, no de placer, como lo conseguía Cas, quien encontraba cada vez mas irresistibles a tan sensual Duo, quien parecía tomar un aspecto cada vez mas erótico.
Cabe decir que el padre de Cas estaría internado en un hospital, donde recibiría atención especial, lo querían vivo, pero inservible, para que sufriera por todos sus crímenes, lo cual sucedía, saber todas esas cosas y el estando impotente en una silla de ruedas, siendo visto como héroe afuera pero siendo tratado como basura le dolía, era un deleite para otros, en especial para el viejo Razo, quien lucía un poco mejor, algo bueno le había sucedido. En esos días recibirían la visita de Mat, pues este se encargaba de muchos casos de este tipo, de hecho el seria quien llegara primero a la escena del crimen deteniendo a Raul, el pobre loco apenas podría defenderse del oficial, quien fue a darle una paliza sin problemas, aunque para su llegada, todo había terminado, pues alguien más desarmó al criminal de un tiro bien dado.
Mira, ya todo está hecho, Raul está recibiendo atención psiquiátrica, parece que este bastardo fue sacado por un magnate de los medios, estaba asociado con todo lo que sucedió con bienes raíces y demás bastardos, incluso uno de los hoteles, que hace años quedó fuera, un imbécil que fue linchado, quizás no lo sepas, pero ese loco fue grabado después de beber un “tumba burros”, una bebida especial, y perdió una apuesta importante, muchos magnates del club les gusta abusar de los perros fieles, por eso varios de los nuestros mueren, bueno, dentro de poco tu cambiarás de lugar, espero que eso no te haga engreído – decía Mat un poco inquieto.
Tranquilo, ha sido un gusto conocerte, primo, no esperé que todo esto se ocultara, aparte que es un placer ver eso que gozas cuando quieres – dijo Cas mirando a las hembras que cargaba su primo, pues hacían una reunión familiar.
Jejeje, todas mías, Carmela mi esposa, es una locura, me cumple todos los caprichos, y tengo de sobra delicias, algunas las conseguí de aquí, pero eso está de más, muchos me adoran, porque soy perro de pelea, pero tengo un truco, y en eso me ayuda mi mujer, que por cierto, ya le hice panza, espero que el viejo me aguante para que vea a su bisnieto, finalmente está superando a Dany – dijo Mat algo inquieto.
Mm, ese Dany, bueno, no me tocó conocerlo, es una lástima, digo, muchos se murieron ¿cierto? Mencionó a un Jordi, es que el otro día hablé con el viejito, se ve mejor que la otra vez, incluso me dio consejos para cogerme a mi Noemi, ella es la única que me falta – dijo Cas un poco inquieto.
Jejejejeje, escúchalo bien, el único que sabría como cogerse a una nena pequeña, aparte del viejo seria Dany, si le dio con todo a su hermanita de 5, uno de los culitos más hermosos que habrías visto, aunque aclaro que en ese momento era crio de 13, pero el tiempo le enseño, era todo un semental, yo le tenía respeto, carajo, por cierto que las hermanas eran en verdad sus primas, nuestras también – decía Mat algo inquieto.
Si, lo sé, me comentó parte de la historia, lo necesitaba, no puedo creer todo lo que pasó, es una locura, al menos me pude vengar de mi papá, igual el viejo razo que le dio algunos bastonazos en nombre de mi madre, pero eso está de más, desde que llegué aquí, no he dejado de coger, me gusta, pero es bien difícil aguantar a tanta hembra caliente – aseguro Cas suspirando un poco.
Pues aprende, porque todos somos machos sementales, y en cuanto pueda hay algunos coñitos que pienso disfrutar, mm, en serio que tengo mucho que hacer, mira, me vienen a buscar – dijo abruptamente Matt antes de retirarse, dejando a su primo solo, pues unas crías, preciosas, culitos frescos se asomaban con tiernos bikinis, lo que asombraba, pues eran jovencitas.
Todo parecía haber concluido, su padre, ese bastardo estaba destrozado, se daba cuenta de cada cosa que sucedía en casa, pero no podría hacer nada, sabía que quien desvirgaría a Noemi sería Cas, la convertiría en su amante, mientras este seguía postrado en una silla de ruedas, adolorido, y lo peor sería que lo haría para festejar que entraría al club de magnates, siendo empresario de software y comunicaciones, un titulo bastante importante, también pensaban hacer una buena orgia con todas sus hembras, al menos la mayoría, pues Tea se quedó en la ciudad como una representante asistente de Constance, de igual forma habría querido traer consigo a Luisa, Julia y Anne, pero seguían entrenamiento, por lo que desvirgar a Noemi sería su único triunfo sexual esa noche, lo que le molestaba al viejo idiota. Se tuvo que mantener firme, Cas, sin tocar a ninguna por las últimas 24 horas, mirando a cada una de ellas con unas ganas de coger, ya que parecían incitarlo con sus juegos o sus diminutos bikinis, pues quería llegar con carga, había sido una verdadera locura, Constance también se mantenía tranquila, no quería mas sobresaltos, su vientre se comenzaba a hinchar, haciendo evidente su embarazo, por lo cual debía evitar algunos esfuerzos, pero estaba contenta, porque su imagen era impecable, una buena madre con varios hijos, incluso adoptados, lo único que extrañaba sería el calor de los brazos de su hijastro dándole duro en el coño, pero no se podía evitar, su hijo seria su prioridad junto a sus deberes, pero veía con gusto la forma en que todos los demás niños a su cargo seguían:
Lana, era como una nueva hija, le estaba enseñando de todo, de cierta forma le recordada a ella misma, pero con la deliciosa diferencia que se dejaba hacer, su actitud tan sumisa ante sus ordenes le permitía disfrutar de tan deliciosa criatura cuando quisiera, tocándola, haciéndole toda clase de travesuras, no supo cuantas veces hicieron a las hermanas quedarse en su casa para gozar la señora de la niña, de su cuerpo en desarrollo, chuparle los pechos, meterle algún juguetito en el coño, la estaba pervirtiendo, pero no de manera vulgar, odiaba al padre por ser un sádico, pues constance le decía a Lana: eres preciosa pequeña, usa tu cuerpo, es tu arma, crecerás para volverte irresistible, pero debes aprender a ver con quien quedar, tu boquita, tus tetitas, y ese coñito coqueto, dentro de poco te volverás irresistible, y tienes que estar lista; así con gusto vería cuanta atención le pondría al verla entregarse a su hijastro, hallándoles en el Jacuzzi cogiendo de manera tan perfecta, ella gemía de manera golosa, pidiendo más, dejándose clavar, mientras le mordían un poco las tetillas en su vaivén, siendo acariciada, mientras sus cuerpos se fundían en un encuentro carnal apasionado, ella lo cabalgaba moviéndose con cierta delicadeza, pero en varias ocasiones la encontraba de perrito donde le clavaban con más fuerza, o puesta contra la pared que era cuando se quejaba mas, ella no solía hacerla de misionero, lo cual parecía extraño, pero no le importaría, seguía haciendo sus jueguitos tan calientes, hallarlos entregados en esa pasión era exquisito, le encantaba verlos así.
Las gemelas Ivonne e Ines eran por otra parte exquisitas, no les faltaban fanáticos, aunque seguían siendo parte del programa infantil, se mantenían bastante activas, el show era del gusto por el morbo que despertaba, muchos adultos o jóvenes le miraban, en especial cuando estaban con minifaldas que poco podían esconder sus piernas, que empezó a ponerles medias y shorts debajo para que se lucieran, sus imágenes eran deliciosas, despertaban las más bajas pasiones, muchos querían cogerlas hasta hacerlas escupir semen, arrancarles las ropas en un acto casi de violación, chuparles las tetillas con gula, hacerlas un desastre entre varias vergas, pero no lo tendrían jamás. A Constance le encantaba ver a sus niñas usando a su hermanita en sus juegos sexuales, quien se dejaba mimar por ambas, siendo usada de una manera tan sensual que le hacía perder la compostura, encontrar a las 3 muy contentas desnudas en la cama solo era superado cuando Cas las tenían bien clavadas, pues las 2 siempre compartían al chico en un juego bastante bien cuidado, ambas lo excitaban con toda clase de posturas o juegos sencillos, nada vulgar, eran putitas de lujo, pero una se dejaba clavar mientras la otra tomaba todas las caricias, entregándose en un trió pasional, perfecto para pasar luego de la corrida a un cambio de posiciones, en que las 2 disfrutaban, aunque parecían exprimir al joven en un ritmo constante de calor electrizante, donde Cas siempre terminaba contento, olvidaba cuantas veces terminó con las 2 golosas sobres si suspirando cansadas, escurriendo sus mieles mezcladas con leches, durmiendo tras una sesión de sexo total, aunque debía reconocer que ninguna de las 2 pasaban de eso, siempre lo cabalgaban en turnos, mientras la otra se entregaba en algo más pasional o romántico.
Luego de ello debía reconocerlo, Janet sería una buena nuera, como modelo resultaba perfecta, cuantos años estuvo fingiendo que todo estaba bien en su casa, cuando su abusivo padrastro le hacía de todo, violarla o golpearla, ahora tuvo que ponerle un correctivo, sabía que ese tipo perdió parte de la cara, pues le mandó a un matón que le destrozo como jamás esperó, y quedó como un borracho drogadicto, jamás volverá a aparecerse en las vidas de sus hijas, así que tenia total libertad de manejar a su nuera, quien era adorada, su historia trágica le hacía llamar la atención, aparte que era tan linda que pocos la ignoraban, en especial por la preciosa figura que cargaba, pechos que muchos querían mamar, un vientre plano que las gordas envidiaban, causaba tanto odio en esa puercas, un culo tan carnoso que varios soñaban con tenerlo entre sus manos, aparte que por ello tenía prohibido usar pantalones, pues muchos querían ver debajo de su falda, para disfrutar de las tangas que usaba, era un deleite tenerla trabajando, tantos pervertidos la miraban babeando, haciéndose pajas mentales, volviéndose la razón de muchas de sus fantasías, por lo que podía imaginar cómo es que muchos soñaban con clavársela, ya fuera por el coño o el culo, chuparle los pechos, lamerlos, morderlos un poco, entrar y salir en un ritmo lleno de lujuria para satisfacer sus deseos sexuales, besarla hasta meterle al fondo sus sucias lenguas, mientras amasaban sus deliciosas formas, o al menos eso era lo que pensarían. Constance casi se reía para sus adentros, pues todo lo que esos locos pudieran soñar, lo hacía Janet con su hijo, Cas la disfrutaba de todas las formas posibles, le encajaba la verga sin dudarlo, haciéndola gemir hasta perder la cordura, en ocasiones los llegó a encontrar en el baño juntos, apenas cubiertos por el jabón, sobándose delicadamente, aunque le daba con una firmeza tal que no dejaba de gozarlo, de hecho recordaba ese gesto tan delicioso, cuando se corría en su interior, dejándola exhausta, pues la jovencita se entregaba completamente, de todas ella era la que mas posiciones del Kamasutra había intentado con su amante.
Por su parte Julianna, su preciosa hija, lo sabía perfectamente, había sido una niña mala todo este tiempo, le gustaba abusar de su suerte haciendo toda clase de maldades, ignoraba a cuantos dejó con las vergas bien tiesas, deseando tomar de ella sus favores más personales, era igual que con su nuera, la razón de varias fantasías, si bien que conocía a la mayoría de estos, pobres diablos que se obsesionaban con una figura preciosa, deseando tenerla para comerle su vulva, tocar sus partes más intimas, disfrutar de sus labios mientras sobaban sus tetas, antes de empezar una faena sexual, entregarse en un vaivén sexual donde sus sexos se conectaran en un juego de placer que llenara la habitación de gemidos o la fragancia del sexo, en la cual le dejarían bañada en su semen, incluso querrían ponerse un poco violentos, tratándola como guarra los mas degenerados. Pobres ilusos, su hijastro tendría la oportunidad de tener todos sus favores sexuales, gozar de cada roce sensual, hacerle cuanto quisiera, de hecho sabia sus secretos, él era el amo ella su esclava de la pasión, deseosa de cumplir sus caprichos, le haría cualquier cosa, pero le encantaba , disfrutaba de sus formas tan sensuales, pues desde las tetas traviesas, la cintura estrecha, sus muslos torneados sobre piernas sensuales, realmente era su vivo retrato, solo que con algunas facciones propias de su papá, la adoraba tanto, July era su niña preciosa, le encantaba verla jugar, ahora con una verga bien metida en su coñito mientras sus manos atadas la hacían esclava del deseo, siendo presa de los dedos traviesos de Cas, quien iba recorriendo cada parte de ella, en un acto tan morboso, cargado de lujuria, disfrutando, haciéndola gemir de manera viciosa, perdida entre las embestidas, mientras se acomodaban en una forma ideal que fuera permitiendo la perfecta sincronía sexual gozando tanto como fuera posible. Al final aunque en un comienzo se negaba, su hijastro había podido domar a su niña, convirtiéndola en su amante, superando a tantos otros idiotas que se sentían tan capaces, cuerpos trabajados para despertar las pasiones femeninas, le daba gracia pues muchos supuestos cazanovas, terminaron burlados por una cría caprichuda, pero un chico que no sobresalía les gano sometiendo a la niña, jajaja, le parecía una buena broma.
Finalmente vería a la pequeña Noemi, no llegaban a nada todavía, ella debía ser especial, le fascinaba su hijastra, la dulce niña la trataba como si fuera su verdadera madre, aunque manejaba una sensualidad poco usual, si muchas veces escuchó a sus socios decir varias cosas, como tenían ganas de cargarla para darle mimos especiales, viejos mañosos que deseaban carne fresca para saborear, estaba segura de todas las cosas que le harían de ser posible, querían probar sus partes más intimas con un desespero rabioso, hasta hacerla chillar de placer, más que con a otras tantas niñas, de poder la empalarían con sus arrugadas vergas, dándoles todo lo que les quedaba de vida, en un arranque de pasión que solo daba risa por su edad, deseaban hacerle tragar su leche, pero eso no sería nunca, la pequeña estaba destinada a ser la amante de su hermano, quería verla coger, aunque era muy pequeña, debía esperar, aunque saberla chica, encajada por una verga grande abriendo sus partes intimas, la hacía escurrir, deseando lamer aquellas mieles, pues pese a su edad ya se estaba corriendo como toda una golfa, era un deleite total, que deseaba comprobar, que tan mujercita era Noemi en manos de su hermano Cas.
Habían llegado para descansar, pero debido a las fechas se realizó una fiesta especial en la isla del placer, todo estaba bien arreglado, no solo era la reunión familiar, el viejo Razo había estado buscando a muchas de sus hijas, mismas que habían sido vendidas como era el caso de la madre de Cas, quien había muerto como otras tantas, pero le sobrevivían varios hijos, que no estaban en buenos términos con sus padres, por lo que conocer a su abuelo materno era un consuelo, aunque jamás perdonarían a la arpía que había provocado todo aquello, una bruja que quedaba fuera, pues era parte de la familia, una que era odiada, aunque bien se veían sus hijas, quienes llegaban con uno de los líderes del club, el temido Dad Army, quien era miembro y aparte un militar de temerse, sabían que era de poca paciencia, aparte que por un accidente, estaba furioso, pues con gusto adoptó a las hijas de aquel par de bellas mujeres, Cas las veía, sabía que eran sus tías, un par de monumentos a la femineidad, que le hacían sentir incomodo, tenía el fetiche del incesto, pero aunque hermosas, algo dentro del decía que no debía tocar a ninguna de las 2, de hecho evitaba la mirada con ellas (varios lo hacían).
Cas conocería a muchos miembros, la mayoría eran hijos de Razo, o al menos de su descendencia, aunque se daba cuenta que había muchas ausencias, nombres que faltaban, era por culpa de varios locos, siendo una pena, mucho de lo que él estuvo sufriendo, era por culpa de los secretos que iba descubriendo, aunque también estaban algunos que poco les importaba, por lo cual causaban descontento, en especial a Razo que parecía ser una especie de patriarca en medio de todo, siendo acompañado de una prima que trabajaba de enfermera, Nancy, si mal no recordaba, ahí aparte se veían preciosas meseras con indumentarias fogosas, todas tratando de gustar a los chicos, primos que eran verdaderos barbajanes, aunque algunos se pasaban de listos buscando a mujeres ajenas, de hecho se notaba que muchos eran idiotas de cuidado, sacando armas cuando verían que la guardia portaba rifles de mayor potencia. En medio de todo el viejo Razo daría unas palabras, un lindo discurso, y dejaba ver que algunos primos de Cas recibirían títulos de perros, se volvían miembros del gremio, pero en una felicitación especial era a él quien lo nombraban oficialmente parte del Club, lo cual le permitiría grandes privilegios, si casi el viejo le decía que podía tomar a la mujer que quisiera, pero este rechazó pues no podía pedir más, o al menos eso diría mientras veía su mesa aunque al ver algunas de las bellezas que cargaban otros, se quedaba indeciso, como Micky y Sayo, un par de preciosidades que apenas usaban algo de tela, vestidos sensuales que parecían a punto de caer en manos de su macho, Mat, quien lucía contento con ambas, aparte se le notaba feliz con una niña preciosa, mas jovencita que Noemi, que igualmente usaba un vestido sencillo, y estaba ahí muy mimosa, como otras tantas, por lo que pensaba en hablar con él para ver que sucedía, pues dentro de unas horas, iba a hacerle el amor a su linda Noemi, y no deseaba cometer errores.
Hola primo, mira que no me había fijado, pero también tienes a una nena, pensé que solo cogías con mujeres bien hechas – decía un poco inquieto.
Jajajaja, vine con un grupito de princesas, todas bien preciosas, me las cojo cuando quiera, ahorita sus papás piensan que se ganaron un premio para ir a un campamento en una súper fiesta, verdad a medias, voy a gozarlas como no tienen idea, puede que a mis gemelas ya las deje preñadas, todos mis jefes quieren verlas amamantando niños, pero mi linda Janeth, bueno ese es caso aparte – decía muy calmado y burlón Mat viendo a su primo.
En serio, porque el viejo, papá, no quería tocarla por ser tan chiquita – decía Cas algo inquieto.
Tu papito era un viejo idiota, no sabía cómo tocar a una nena delicada, te dije que hablaras con Razo, ese y Dany eran los mejores a la hora de coger con niñas chiquitas, hacerlas gozar, mm, lo vi hacerlo con una nena, y esta gemía como gatita en celo, hacía gestos de amor que ni te imaginas, en serio que se volvía un espectáculo, pero tú lo que quieres es saber cómo no lastimarla, mira, métesela, ve a hasta donde le llega, no te dejes dominar por el deseo y ve metiéndosela así, es lo único que puedo decirte, pero más detalles con el maestro, porque mira a ese – decía Mat apuntando a un gordo negro, primo de parte de una de sus tías.
El muchacho de algunos 18 años, llegaba con una mesera, estaba muy obeso, pero lograba que la jovencita, de algunos 16 años le siguiera, iban a un lugar oscuro, y este aun revisaba, de hecho intercambiaba miradas con Mat, quien le aseguraba que todo estaba bien, lo cual encendió algo en la vista del muchacho, antes de empezar a embestir a la sexy trabajadora, quien usaba medias de red, minifalda, con mandil, un top que apenas contenía sus preciosas tetas, este le hizo a un lado la tanga, que se le clavaba en el coño, disfrutando de la vista de un culo que parecían pedir a gritos ser destrozado por una buena verga, la cual se dejaría meter sin problemas, empezando un momento de pasión inesperada, tan intensa como para que la sangre hirviera, dejaba ver perfectamente como se la estaba metiendo, era un gusto inesperado, así empezaba a darle con todo, sacándole las tetas, agarrándoselas hasta el punto de estrujarlarlas, mientras se movía con un desespero total, su ritmo era frenético, la agitaba como si fuera muñeca de trapo, ella ahogaba todos sus gemidos, aunque se le veía perdida en la gloria carnal, pero eso era poco frente al deleite que se daba el muchacho, este se hallaba gozando de ese cuerpo exquisito, hasta que finalmente se correría, llenándole el coño de leche de macho, y en un acto de locura, se la llevaba aun escurriendo semen.
Ese es Teo, es muy bruto a la hora de coger, pero la chica esa es Frida, le gusta que la traten sucio, se dio cuenta, así que se dieron gusto, la ha estado rondando, puede que algo arregle el viejo Razo para que se la quedé, a fin de cuentas este sabe cosas, lo acaban de meter en el gremio como entrenador, es muy vicioso, pasara un tiempo junto a Corvin, o mira acá, ese chico que va muy bien vestido, el que coquetea con la mesera castaña – decía Mat haciendo que Cas volteara.
Ahí estaba un joven de algunos 23 a 25 años, estaba muy bien arreglado, aunque tenía cara de vicioso, llegaba con otra chica del lugar, vestida igual pero de largo cabello rizado castaño, aparte que se veía deliciosa, este como todo un galán llegaba para comenzar a coquetearle, ella se veía algo incomoda, pero respondía bien, dejándose besar, mientras sus manos iba recorriendo desde su cintura, pero sobaban mas, llegando al culo con un desespero salvaje, ella se entregaba abiertamente, entrando en un besuqueo tan sensual que muchos le miraban con envidia, deseando estar en su lugar, cuando súbitamente se soltarían, para irse a un lugar más privado, aunque cabía decir que la chica apenas tendría 18 años, pero se dejaba manejar con toda calma.
Seguro que este quiere preñarla para quedarse con ella, es un poco idiota, no termina de entender su posición, pero podría ser contratado como anfitrión o presentador en negocios del gremio, un puesto decente, por suerte tiene su encanto para tratar con mujeres, así que toma nota, señaló Mat muy tranquilo, mientras una niña bien arregladita se le acercaba y quedaba en sus piernas para jugar a los novios.
Oye, y ¿Cómo es que tienes a esta nena? Ah – preguntaba Cas algo inquieto.
Su papi es medio bobo, se le olvida que la tiene – dijo el primo muy calmado.
Sipi, papi por andar con sus compañeras de trabajo en ¿orgias? Olvida cuidarme, por eso estoy con Mat, soy su novia secreta, jijijijijii – decía Janeth mientras se dejaba tocar, incluso la mano de este tocaba debajo de su ropa con total libertad, lo cual era inesperado, pero igual de erótico, dándole unas ganas de ir por su pequeña Noemi.
Pero debía esperar, era una fiesta, y muchos ahí pasarían la noche de manera ardiente, a pesar de ser fiestas decembrinas, realizarían una orgia total de locura sexual cada cuarto tendría sexo, ya fuera con las trabajadoras, o con las hembras que cada uno de los machos traía consigo, el lugar se llenaría de un ambiente de sexo, muchos gracias al licor se estaban poniendo cariñosos a mitad de todo el evento principal, pero las cosas no terminarían pronto, aunque la recepción acabara todo continuaría en las suites, aunque para ese momento el aroma del placer era como en tiempos anteriores, solo que ahora todo era parte de un magno evento privado. Y a su debido tiempo, todas las familias se retiraban, esperando continuar con aquel sexoso evento, donde desatarían su lujuria, ocultos en sus cuartos dejarían libres sus impulsos, aunque algunas de las hembras no podrían hacer mucho, pues con un evidente estado de embarazo, era obvio que de intentar algo llegarían a lastimarse, ya que algunos de esos hombres eran presa de los más bajos deseos carnales, y desataban una lujuria sin límites.
En su habitación, Cas estaba algo inquieto, pues era el momento, entraría para ver a todas las mujeres de su vida hasta ahora esperándole con el deseo marcado en sus ojos, viéndolas con cierta mezcla de amor con lujuria, pues aquellas hembras de alguna forma le pertenecían, aunque habría deseado tener más, sin embargo ahí se hallaban las que le siguieron para ese momento, vistiendo deliciosas lencerías que remarcaban su sensualidad, Janet con un conjunto en negro que hacia contraste con su piel, mientras que Julianan usaba una en purpura que le daba un toque demasiado sensual, en ambas sus formas resaltaban, pechos grandes, con cinturas breves, piernas torneadas, ambas se entrenaban para tener esas figuras, que muchos deseaban clavar con pasión, aparte se dejaron medias y tacones, pues le encantaban al joven, quien se metía casi de un salto a la enorme cama, donde sería recibido como un rey:
Muy bien cariño, fue difícil pasarlo fuera verdad – decía Janet presumiendo sus tetas en una pose muy sensual, que le ponía a tono con la verga bien parada.
Espero que no sea ella la única causa, de eso – agregó July mientras apuntaba a su erección, usando una voz cargada de sensualidad.
Sin demora comenzarían a hacer el amor, estaban tan calientes que nada importaba, besos, caricias, era parte de todo, pues aquello era un juego, o de eso se daría cuenta.
Cariño, aquí tienes una prueba, hable con tu abuelo, mm, siempre me gustó su trabajo, es tan erótico, ahora entiendo porque eres tan bueno, pero tengo que verte como hombre, así que debes sacarle orgasmos a todas, que se corran, solo que tu no debes hacerlo, toda tu lechita de esta noche debe ser para esta dulzura – advertía Constance mientras dejaba ver a Noemi, apenas usando un pequeño bikini, pero aparte algunos accesorios de gatita, entre ellos un consolador anal en su culito para conectar con una colita falsa.
Menuda prueba le pondría, así que sin demora, se ubicó al lado de janet, pero no la penetro, en vez de ello la tomó por la espalda para besarla, amasar sus tetas, pero sutilmente le fue tocando la vulva, que se hallaba jugosa, tanto que desde el primer momento se sentía tan jugosa, lo gozaba en sus dedos, que se llenarían de su fragancia femenina, al tiempo que empezaba a responder, esto le hacía sentir tan acelerado, su corazón latía a toda velocidad, y su verga rozaba contra las nalgas, que estaban tan gruesas, parecía que la chica en ese tiempo había entrenado, por lo que su cuerpo había mejorado, solo ganando más firmeza, porque no quería músculos, eso le parecía para ciertos fetiches, que no eran de Cas. Este por su parte se sentía encantado, con toda aquella figura estaba a punto de perder la compostura, en serio adoraba a su chica, cada parte de ella, era demasiado delicioso, ese juego lo impulsaba a sobar ese cuerpo que no dejaba de gustarle, y escucharla gemir era un deleite, le causaba un fervor sexual tan fuerte, motivándole a sacarle cada parte de sus mieles sexuales, pero como esperó pronto se correría.
Mm, que rico, así me gusta cariño, vamos a tener una larga vida juntos – decía con una dulzura erótica difícil de resistir, mientras tomaba distancia.
Cas chuparía sus dedos para saborear el flujo de su noviecita, aunque pareciera estúpido quería tenerla para el resto de su vida, era como si realmente estuviera enamorado, aunque si tuviera dudas, esas serian porque Julianna llegaba a su lado para besarle con una pasión que apenas podía resistir, cayendo en la cama para ella quedar al lado, se entregaba de una manera tan sublime que no podía creerlo, era realmente la chica de antes, no, se había vuelto más sensual con el tiempo, pues se estaba entregando por completo, dándole una sensación de curiosidad, que hacía que sus dedos temblaran en especial cuando amasaba sus nalgas, alcanzando el coño que esa masajeado, con un cuidado especial. July había perdido la cabeza, quería sentirse propiedad de Cas, era su fantasía mas ardiente, ser su hermana, pero a la vez amante, esclava del placer, todo le causaba una sensación de gloria irresistible en su mente, que se llenaba de un calor mental que derretía sus ideas, no le importaba nada, aparte de estar con él, recibiendo su verga hasta el fondo de su coño que escurría como si fuera una fuente, y esta era su oportunidad, así que se perdían en los labios, mientras un calor embriagador los envolvía a ambos en un aroma de sexo vicioso que fue previo a su orgasmo sonoro.
Mm, hasta que la muerte nos separe, sabes que si me preñas eso justifica nuestra boda – decía de manera picara Juliana al tiempo que se alejaba.
Hija, no juegues con eso, todavía no es momento para que lo tengas, no quiero un nieto de la edad de tu hermanito, al menos se esperan unos años, y con respecto a ti, Cas, quiero que hagas algo diferente con Lana, no te arriesgas nada – decía Constance mientras seguía con la pequeña Noemi en sus manos acariciándola de manera sensual.
Sin siquiera pensarlo un poco lana se acomodaría, solo usaba un camisón de seda fina, pero dejaba ver un coño delicioso apenas cubierto por una fina tanga, a eso se le agregaba que sus tetillas se le estaban formando, formándose pequeños conos de carne sensual, para crear una imagen de gran erotismo, por lo cual empezaría Cas a disfrutarla, de una manera astuta, pues no estaba dispuesto a perder la oportunidad, y le comenzaría a comer el coñito a la chiquilla, metiéndole la lengua hasta el fondo, y eso le encantaría a su cuñadita. Esta se quedaría roja, hasta hace poco temía del sexo, muchas veces vio a su padre borracho violar a su hermana, no le gustaba, pero desde que llegó con Cas, este le había enseñado del gusto por el sexo, el cual se acentuó bajo la guía de la señora Contance, quien era su maestra, pero la quería más que eso, ahora estaba deseosa de sentir aquel calor tan especial invadir su cuerpo, sentirse atrapada por ese miembro, coger hasta perder la cabeza, por lo cual intercambiaban miradas entre ella con su amante, al tiempo que esa lengua le daba el placer tan vicioso, se aferraba a la cama, gozando, disfrutando de lo lindo, perdida en esa sensación que apenas podía controlar cuando se acabó corriendo.
Cas, también quiero ser tuya, una hembrita mas como dicen los de tu familia, eres buen macho, me gustas, ahhh – decía un poco coqueta mientras se terminaba de correr, entre suspiros que la hacían adicta a esa delirante pasión.
Pero Constance no estaba contenta, se la había ganado todo de manera muy fácil, así que iba a cambiar eso, y para ello estaban las gemelas, quienes eran sus favoritas, le encantó lo que hizo su marido con ellas, aunque odiaba como las maltrato, estaba de acuerdo con las reglas del viejo Razo, el placer tan fuerte que hiciera adictos a todos, así que las mandó para que hicieran de las suyas, y con gusto vería como una ofrecía su coñito para ser disfrutado por esa lengua, pero la otra tallaba su vulva con la verga de Cas imitando una penetración, aunque era en verdad un masaje vaginal, lo cual era demasiado excitante, pronto se correría alguien. En verdad las gemelas eran especiales, un mar de sensualidad que podía ahogar a cualquiera, jamás esperó un juego así, parecían querer exprimirlo, sacarle toda la leche en ese juego, sus cuerpos eran una delicia, sus tetillas estaban formándose de manera delicada, sus nalgas eran más redondas, aunque lo que más gustaba era que sus formas se iban desarrollando inocentemente, para dar un aspecto que a sus fans, volvían locos, soñando con lo que ahora se hallaban haciendo, tallándose de tal forma que poco podría durar, aunque pronto Ines diría:
Mm, hermana, no puedo más, mm – eso sería ante s de correrse dejando todo en la boca de Cas, quien casi se ahoga, pero le dejarían respirar cuando se acomodaran de nuevo.
Ahora sería Ivonne quien ofreciera su coñito, que estaba algo pegajoso, por la baba previa a su corrida, pero no importaría, porque la otra gemela comenzaría a tallarse, y debía hacer un esfuerzo, concentrándose en ese delicioso coño para poder desvirgar el de Noemi, quien miraba todo con una ansia deliciosa, siendo tratada como una gatita, estaba lista para ser mujercita, suspiraba pesadamente, pues las manos de su madrastra eran bastante hábiles, iban dándole unos ligeros espasmos, lograba que su conchita se mojara, tanto que acabaría teniendo un orgasmo ligero entre sus dedos, suspirando deliciosamente. Mientras que Cas al ver aquello se esforzaba, hacia lo posible para sacar el ultimo orgasmo, mientras evitaba que le sacaran la leche, que no podría esperar mucho, pues realmente se movían de una manera embriagadora, esas gemelas eran de temer, pues su juego era delirante, quizás podrían terminar por correrse juntos, pero eso no lo deseaba, eran una locura total, aunque se contenía porque estaba acostumbrado a correrse dentro, por lo cual odiaba sus días peligrosos, porque solo así no las tocaba, y ese pensamiento le salvaría, pues en toda esa faena se perdían así que acababa por escuchar.
Mm, si, finalmente, me vengo, mm – decía con un gusto sexual Ivone corriéndose antes de que lo hiciera Cas, quien sentía la leche en la punta.
Lo había logrado, pero seguía la verdadera prueba, Noemi, quien entraba a la cama algo nerviosa, siempre jugaron con ella, solo que esta sería su verdadera primera vez, seguía siendo virgen, por lo que no le gustaba el dolor, sabía que eso le dolería, sin embargo ahí estaba y amaba a su hermano, deseaba ser sólo de él, su sueño húmedo, quien estaba listo, la haría suya, así que abrió sus piernitas, que se veían coronadas por unas nalguitas redondas y preciosas, pero antes la saboreo un poco Cas, quería evitar accidentes, y él seguía con los flujos de una de las gemelas, así que podrían unirse, estaba nervioso, pero oiría:
Vamos hijo, dale a tu hermanita todo tu amor – le diría Constance incitándolo.
Sin más por hacer, pues la nena lo miraba con una mezcla de emociones, comenzaría a prepararse, ubicaría su verga para penetrarla, recordando lo que le dijeron, así la iría penetrando, dándole tan suave como podía, aunque deseaba penetrarla con fuerza, todo aquel momento lo tenía como fiera a punto de liberarse, mas no debía, hacer suyo ese coñito debía ser con delicadeza, por lo que fue entrando a su interior, abriendo los pliegues lentamente, para que se fuera acostumbrando, por suerte antes la habían tallado con una loción afrodisiaca, un toque ligero, puesto que querían evitar dolor, logrando que la nena sintiera una onda eléctrica que calentaba su cuerpecito sensual, en una penetración relajada, rompiéndole su himen sin darse cuenta, apenas siendo visible por la sangre, porque ella se le abrazaría dejándole ver su coñito perfectamente a la señora, quien se tallaba con gusto, dándole una sensación tan gratificante, como si fuera un monarca, y ella pujaría mientras era invadida por un vibrador para resistir las ganas de unirse, mientras su pequeña se perdía en un gusto total, por segundos creyó que se rompería en llanto, pero lo conseguía, empezaba a correrse al sentirse penetrada, y Cas la besaría con pasión al saberse dentro de tan bella muñequita, iniciando un vaivén sexual que era lo necesario, mientras se iban entregando al deseo carnal, en movimientos lentos, pues sentía próxima la primera carga, en ese momento la excitación era tal que no podía aguantarlo, seguía duro como fierro, listo para continuar, perdido en el deseo, mientras la preciosa nena pelirroja se aferraba a su macho, convertida en una linda mujercita, incluso diría:
Hermanito, ahora yo también soy tu hembrita – dijo sonriente Noelia, aunque sus ojos estaban llorosos, lo cual le hizo perder un poco la compostura, continuando con su vaivén antes de volver a correrse, pero en ese estado podría hacerlo otras 3 veces más.
No perdería tiempo, cambiarían de posición, para que ella lo cabalgara, y con la ayuda de las gemelas, formarían una verdadera orgia, mientras que Janet hacían un poco de trampa entre ellas, jugando con Lana, como si fueran las gemelas con Noemi, todo era observado por Constance, quien sonreía al ver aquello, sobándose el vientre, queriendo unirse, pero no era momento, le encantaba toda esa depravación, sus hijos se entregaban a la lujuria, hasta el punto que no sabía donde terminaba uno para comenzar otro, pero si lograba notar como Noemi, durante esa noche no solo seria bañada de la leche de su hermano, también la probaría con su lengüita, harían de todo, solo faltaría que le abrieran su culito, aunque Cas lo empezaría a hacer al meterle su dedo, logrando que se quejara un poco, pero igual no se negó, pues era la novia secreta de su hermano, por lo que debía darle todo el placer, y sentirse una hembrita, le enloquecía de una manera irreal.
A la mañana siguiente Cas suspiraba tranquilo, toda su familia estaba reunida, comiendo en una especie de escena festiva que se mezclaba con el erotismo de sus apariencias, todas apenas vestían algo de ropa, sus cuerpos se presumían demasiado eróticos, apenas cubiertos con sedas que acentuaban su desnudes, y por suerte pasaría unos días de locura cogiendo con todas, ahora Noemi, quien estaba comiendo hot-cakes, quería los suyos con leche, aunque no de la condensada, sino de otra, había pasado una noche de locura, gozándola como si fuera una mujercita golosa por su amante.
Al terminar se dio un descanso, en verdad todo estaba bien, y por momentos se acercó a la playa, pues desde su comedor vería a su abuelo, ese viejo sabio del sexo y sus placeres, quería darle el aviso de Noemi, además era un día especial, quería felicitarlo por las fiestas, sin contar que seguramente recordaba a su difunto nieto Dany, cuando pudo oír a Nancy hacer lo mismo, lo cual mejoraba el momento.
Felicidades abuelito, otro año más, te vez mejor – decía la linda enfermera, mientras lo besaba en la mejilla, lo que iba a aprovechar Cas cuando oiría al viejo decir.
Mira mi niña, mira bien – el anciano con su celular en mano, parecía tener una foto en pantalla, la cual sorprendió a su prima, por lo que se acercaría a ver, reconociendo a la persona.
Esperen, yo conozco a ese – decía Cas mientras miraba la imagen de una persona con un delicioso grupo de chicas a su lado…
***con esto acaba la historia, que seguramente se habrán dado cuenta, es parte de los que fue iniciado con Familia, Corrupción y Sexo, continuo con el Vigilante de la Privada, y si gusta esto, luego les daré el desenlace final, pero de momento será todo, nos vemos…
Muy agradecido por la saga, un grande.