APROVECHE EL DISTANCIAMIENTO DE MIS PADES

Voy a resumirles los hechos que rodearon mi deseo de llegar a la intimidad con mi madre aprovechando el distanciamiento que existía entre ella y mi padre, en razón a los tiempos de su trabajo, visitador médico, constantemente viajaba, lo normal era verlo los fines de semana.
Voy a resumirles los hechos que rodearon mi deseo de llegar a la intimidad con mi madre aprovechando el distanciamiento que existía entre ella y mi padre, en razón a los tiempos de su trabajo, visitador médico, constantemente viajaba, lo normal era verlo los fines de semana, pero como les decía se notaba el distanciamiento con mi madre, casi que se trataban como amigos. Por esta época, yo comenzaba en la universidad y en una fiesta estudiantil conocí a Jorge con quien existió mucha empatía desde ese momento, él estaba tres semestres adelante.  Jorge mayor que yo, tenía mucha experiencia con las mujeres y con su facilidad de palabra le resultaba fácil conquistarlas, aunado a esto su aspecto físico, que facilitaba la atracción de las mujeres.

Como les decía aprovechando el distanciamiento entre mis padres y teniendo una mama tan atractiva mis deseos por romper el hielo y lograr llegar a la intimidad con ella, aprovechando que los dos pasábamos semanas solos en casa, se me ocurrió invitar a Jorge a casa cuando fue la celebración de mi cumpleaños, a una pequeña fiesta que organizo mi madre y en esta reunión creo que hicieron clic mi madre y Jorge, el muy respetuoso, pero para mí fue evidente que algo nació entre ellos. Mi primera intención era excitarla y después yo actuar con ella.

Cuando se fueron despidiendo los invitados hubo una excepción cuando Jorge se marchó. Todos se despedían deseándome lo mejor y salían, pero cuando Jorge se marchó mi madre se ofreció a acompañarlo hasta la salida y yo muy curioso no los perdí de vista y noté que, en el momento de decirse adiós, Jorge abrazó a mi madre por la cintura y le dio un beso en los labios y ella no lo rechazó, por el contrario, vino un segundo beso. Después al separarse Jorge le debió pedir el número de teléfono porque lo vi anotar algo en su celular mientras mi madre le hablaba.

En ese instante, aunque mi deseo era que mi madre rompiera la fidelidad con mi padre, sentí celos al verla besarse con Jorge y algo de rabia por lo que él había logrado y yo no, pero después recapacitando acepte que eso era lo que yo quería, y no me debía incomodar por lo sucedido.

Al terminar la fiesta, nos dedicamos a recoger el desorden con mi madre y en ese momento aproveche para agradécele la fiesta que me había organizado y entre las varias cosas que hablamos salto lo que esperaba y era alguna pregunta sobre Jorge. Ella me dijo… Muy queridos tus compañeros de universidad, ¿todos ellos son compañeros de tu clase? Entonces le aclare que prácticamente todos con excepción de Jorge. Y ella me dijo… ¡y cual era Jorge? Entonces aproveche para decirle que era el joven rubio de ojos azules a quien ella acompaño hasta la salida. Enseguida ella dijo… Ah, sí, si, un joven muy simpático ya recuerdo el rubio de ojos azules ¿y no es compañero tuyo de clase? Le respondí… No, no, él está tres semestres adelante y nos hicimos amigos en la fiesta estudiantil. Ah, qué bueno entonces te podrá ayudar cuando tengas dudas, al estar más preparado y así terminamos esa noche, cada uno se fue a su habitación, active la televisión, la miraba, pero mis pensamientos estaban en otra parte y a media noche me venció el sueño.

En los días siguientes por momentos volvía a mi mente los pensamientos sobre mi madre y Jorge y una mañana me encontré con Jorge y después de agradecerme que lo hubiera invitado a la fiesta de mi cumpleaños, vino la pregunta sobre mi madre como estaba y agregando que le había parecido una mujer maravillosa y por demás hermosa. Tu padre la debe cuidar mucho para que no se la roben. Pero sin pensarlo termine desnudando mi vida familiar. Primero le dije que a mi madre también le había agradado mucho que nos hubiera acompañado ese día y segundo le confese que la relación de mis padres era muy distante, la prueba más fehaciente es que el día de mi cumpleaños no estuvo presente.

Con esta información vi que a Jorge se le iluminaron los ojos ante la perspectiva de acercarse a mi madre, pero para ello debía contar conmigo y yo le ayudaría para llevar adelante mi idea de lograr intimidad con ella.  Y lo hice el sábado que sabía que mi madre estaría en casa y le comenté que tenía una deficiencia en mis estudios y considerando lo que me había sugerido respecto a Jorge, que estando más adelantado me podía ayudar, lo iba a aprovechar.

El sábado en la tarde cuando llego Jorge mi madre mostro mucha felicidad, previamente se había preparado en su vestir, con una falda negra algo corta arriba de la rodilla, no muy común en ella, una blusa de seda que permitía imaginar la belleza de sus senos y medias de liguero color humo y zapatos de tacón. Todo esto la hacía ver muy sensual y en efecto causo el impacto que ella esperaba en Jorge, que la escaneo de abajo a arriba y de seguro a otra mujer le hubiera podido causar incomodidad, pero para ella fue un halago. El saludo fue bastante efusivo y luego pasamos al estudio. Allí, me dedique a preguntarle a Jorge sobre temas que yo sabía, pero simulaba desconocer y el muy acucioso me daba las explicaciones.

Había pasado al menos una hora cuando me dijo que iba al baño, no le tuve que indicar donde, porque ya conocía la casa desde el día de la fiesta. Cuando salió del baño lo escuche hablar con mi madre y mientras ella le agradecía que me ayudara en los estudios, él por su parte se dedicaba a cortejarla diciéndole que estaba muy hermosa y que se veía tan joven que parecía mi hermana mayor. Y esto debió impactar en ella porque más tarde nos preparó una merienda muy especial y mientras comíamos no dejo de admirar a Jorge.

Luego regresamos al estudio termino de darme algunas explicaciones y me dijo que se tenía que ir a un compromiso familiar, nos despedimos en el estudio, pero cuando salió del estudio se encontró con mi madre que se ofreció a acompañarlo hasta la salida. Con curiosidad me asome para observarlos y note que cuando caminaban hacia la salida Jorge le paso el brazo por la cintura de manera que al llegar a la puerta no le resulto nada difícil acercar a mi madre y besarla en la boca y ella le correspondió, al tiempo que él sin perder la oportunidad le acaricio las nalgas y los senos, hasta que ella le dijo… Creo que te debes marchar, seguro recapacitó que yo los pudiera sorprender. Al despedirse Jorge le dijo que si la podía llamar y ella le dijo que si, y le abrió la puerta para que Jorge se fuera.

De allí en adelante me dedique a hacerle seguimiento a su celular, sus llamadas y los mensajes de whats app y ese primer mensaje llego y decía… Sofia desde el primer instante que te conocí no te he podido sacar de mis pensamientos y volver a verte me lleno de alegría. Besos.

Y a continuación la respuesta de mi madre… Jorge no sé qué me pasa cuando te veo, pero siento algo muy especial, espero volverte a ver pronto. Besos.

Pensé que yo debía promover otro encuentro, pero a la vez deseaba presenciarlo, no sé porque siendo mi madre tenía esa sensación morbosa respecto a ese momento y comencé a pensar cómo hacerlo realidad. Una forma era que el encuentro se diera en nuestra casa, pero ¿cómo presenciarlo? Podía con algún engaño invitar a casa a Jorge y yo marcharme para dejarlo solo con mi madre. Pero ¿cómo presenciar el encuentro?

Se me ocurrió ir a un almacén de productos electrónicos y averiguar sobre algún aparato para la seguridad en casa pero que fuera muy discreto. Me mostraron equipos muy sofisticados voluminosos pero lo que yo necesitaba era mucha discreción. Así que finalmente el vendedor me ofreció aparatos comunes usados en las casas pero que incluían cámaras de buena resolución pudiéndose conectar a los celulares.

Hubo uno que me pareció el adecuado y fue un reloj de mesa que se podía colocar en cualquier parte sin que llamara la atención y el día del encuentro, como mi madre al llegar Jorge, iba a estar más pendiente de él que de nada más, no lo notaria.

Teniendo todo organizado, invité a Jorge a las tres de la tarde para que estudiáramos, pero a la vez me fui a las dos de tarde diciéndole a mi madre que iba a realizar un trabajo en el que me iba a ganar un dinero aplicando lo que estaba aprendiendo en la universidad y que me llevaría toda la tarde y agregue que antes de regresar la llamaría por si acaso se le ofrecía algo.

Cuando dieron las tres Jorge llegó y mi madre lo recibió sorprendida porque no sabía que yo lo había invitado a estudiar conmigo, minutos después me estaba escribiendo un mensaje diciendo… Hijo acaba de llegar Jorge que había quedado contigo de venir a estudiar. Le respondí… Que pena mama, se me olvidó avisarle que me había salido este trabajo y que aplazáramos el estudio para otro día. Por favor atiéndelo y dale mis disculpas. La respuesta de mi madre fue… Ok te disculpare.

Y enseguida active la conexión de mi celular a la cámara del reloj, habiendo cargado a tope mi celular y estando sentado en una cafetería, hice el pedido de una bebida mientras me dedique a observar la pantalla de mi celular. Gracias a mi audífono podía escuchar lo que sucediera sin que alguien se enterara, además para contrarrestar los ruidos a mi alrededor fue lo mejor.

Llego el momento en que entraron a la sala, mi madre le comento mi mensaje y Jorge le respondió que lamentaba mucho la confusión, pero por otra parte era un placer verla, que por demás estaba más linda que siempre. Ella le agradeció su galanteo y a continuación le pregunto que le podía ofrecer. Él le respondió que un vaso con agua porque tenía mucha sed, pero ella le replico, que mejor una cerveza y ella lo acompañaba, el acepto. Ella salió a traer las cervezas y cuando regreso se la entrego, él estiro el brazo para que brindaran y le dijo… Por el placer de volver a verte, me alegra mucho la confusión de la cita con tu hijo porque podemos vernos y tras beber un sorbo largo de la cerveza, dejo el vaso sobre la mesa y se acercó a mi madre para tomarla por la cintura y le dio un beso en los labios, que ella le correspondió y así se mantuvieron por varios minutos como enamorados. Jorge experto Don Juan, desplego sus manos por el cuerpo de ella y los blancos principales fueron sus nalgas y sus senos al tiempo que la apretaba contra su cuerpo y si en ese momento él ya tenía una erección, ella la debía estar sintiendo.

Pasaban los minutos y yo no despegaba los ojos de la pantalla y llegue a ignorar lo que acontecía a mi alrededor, estaba tan concentrado que la persona que me atendía debió repetir varias veces cuando me pregunto si se me ofrecía algo más, entonces pedí otra bebida. Y volví a lo mío.

Tras esta escena de pasión que se desarrollaba en la sala de la casa, me concentré y vi como Jorge acariciaba todo el cuerpo de mi madre y cuando ella ya estaba muy excitada deslizo su mano por debajo de la falda y acariciando la parte interna de sus piernas fue subiendo su mano hasta llegar a su coño, momento en que ella hizo un movimiento brusco, de seguro no se lo esperaba, pero él la controló y siguió adelante. En este punto ella ya estaba entregada y Jorge podía hacer de ella lo que quisiera.

El inicio soltando los botones de su blusa y apareció su sujetador cubriendo sus senos que pronto quedaron a la vista al soltar Jorge el broche de la espalda, entonces la boca de él se dirigió a esos hermosos senos y los beso, chupo y hasta le dio pequeños moriscos mientras tanto ella aumentaba su excitación, luego ella le bajo el cierre del pantalón a Jorge dejando a la vista su verga, que estuvo masajeando  hasta cuando él se arrodillo frente a ella, le bajo el cierre de la falda y aparecieron las hermosa piernas de mi madre enfundadas en sus medias de liguero que la hacían ver muy sensual. Sin perder tiempo Jorge la despojo de la tanga quedando a la vista su coño perfectamente depilado al cual dirigió su boca y empezó a prodigarle una sesión de sexo oral, que continuo más tarde con más intensidad cuando la hizo sentar en el sofá y ella separando sus piernas le dio libertad para que él recorriera con su lengua y sus labios su coño de punta a punta hasta cuando se concentró en el clítoris y ella empezó a gemir aigg, aigg, aigg,  ufff, ufff, uhmmm, uhmmm, y su excitación aumentó más y más hasta que ella le dijo… Jorge para, para, ya llegue, ufff, que ricoooooo.

Él se detuvo y levantándose observaba el cuerpo desnudo de mi madre y le dice… No sé cómo tu esposo no vive pendiente de ti, si eres una mujer muy hermosa, desde el día que te conocí no te he podido sacar de mi mente.

Y ella le respondió… También para mi eres muy especial y te pienso constantemente desde el día que me diste el primer beso y deseaba con ansias que llegara este momento.

Mientras ella hablaba, Jorge se quitó el pantalón y quedando más a la vista su verga super erguida y de buen tamaño, mi madre sentándose en el sofá, le pidió que se acercara y estirando su mano tomo la verga de Jorge para luego meterla a su boca y empezar a mamarla y masajearla hasta cuando Jorge la detuvo y arrodillándose nuevamente frente a ella, acerco su verga al coño de mi madre, ella la tomo con su mano y la dirigió al sitio adecuado y a continuación vino una penetración lenta pero profunda. Ella separo al máximo sus piernas para que Jorge comenzara a follarla, al comienzo lentamente, entretanto disfrutaban de un beso apasionado en el que compartían sus lenguas como queriéndose devorar mutuamente.

En el momento cuando la verga de Jorge entro por primera vez en la concha de mi madre me excito tanto que tuve que poner el saco sobre mis piernas para disimular. Pero pasados los momentos de acoplamiento, el movimiento de cadera de Jorge clavándole su verga al coño de mi madre se aceleró y ahora los dos gemían y respiraban agitadamente, pero después se detuvieron, mi madre se puso de pie y Jorge la hizo inclinar apoyando sus manos en el sofá y Jorge desde atrás volvió a penetrar la concha de mi madre, la tomo por las caderas y aumentando la energía de sus penetraciones llegó al clímax y él le dijo… Me voy a correr, me voy a correr, no aguanto más y ella le respondió… Yo también, córrete dentro de mí, lo estoy deseando ya. Y aquí terminaron pegados respirando agitadamente y con mucha felicidad. Él le agradeció en medio de besos en el cuello ese maravilloso momento y ella le correspondió verbalmente muy emocionada. Cuando Jorge se fue, una hora después regresé a casa y para calmar mi excitación fui directo al baño para darme una masturbación que me hizo descansar

En los días siguientes no perdí oportunidad de revisar el celular de mi madre y leyendo los mensajes que se cruzaban me di cuenta de la enorme pasión que Jorge había despertado en ella y estaba sorprendido como iban saliendo sus deseos lujuriosos en la medida que Jorge la provocaba con frases llenas de evidente sexualidad.

Debieron pasar varios meses hasta cuando note que a Jorge ya le estaba bajando la calentura de follarse a mi madre y fue cuando en una oportunidad que él y mi madre habían concertado reunirse aprovechando mi ausencia, yo regrese antes que ellos terminaran su encuentro pasional y cuando Jorge se fue deje que mi madre notara mi presencia y enseguida se acerco a preguntarme a qué hora había regresado, y en medio de su azoramiento, le respondí que cuando ella y Jorge estaban disfrutando de su momento de pasión y que me había gustado verla follar, hasta disfrute ver tu maravilloso cuerpo generándome una tremenda erección que aún se mantenía.

Ella no sabia que hacer y finalmente dio media vuelta y se fue para su habitación. Yo me quede pensando que podía pasar después de ese momento y espere en mi habitación hasta que en la noche ella me llamó a cenar. Cuando entré a la cocina me encontré que estaba vestida con un baby doll bastante transparente y llenándome de valor me pegue a su espalda y la abrace, ella sin mirarme me dijo… Tengo mucha pena por lo que paso con tu amigo, pero debes saber que tu padre hace mucho tiempo no se me acerca y yo aún siento deseos y al presentarse la oportunidad decidí aceptarla.

Le respondí… que no tenía nada de qué preocuparse, yo siempre seria su cómplice, y cada vez que ella quisiera estar con Jorge lo podía hacer. Pero quería confesarle que desde que la había visto desnuda y follando con Jorge nació en mi un deseo tremendo de estar con ella.  A esto último no me respondió y acelero el proceso para servir la cena. Mientras disfrutábamos la comida yo la observaba y ella por momentos rehuía mi mirada.

Cuando terminamos de cenar yo recogí los platos y nos levantamos para ir a nuestras habitaciones a descansar, pero en el camino ella me abrazo por la cintura y me llevo a su habitación, allí me dijo ven descansemos y vemos una película. Durante el tiempo que pasaba la película yo solo pensaba en ella y en su cuerpo, afortunadamente las escenas tenían algo de sexualidad y eso nos llevo a que al final yo la abrazara y llegara el primer beso. Sus labios me parecían tan suaves y el beso tan maravilloso que pasaron varios minutos durante los cuales mi verga se fue endureciendo y ella la debió sentir en su pierna.

Cuando note que su respiración comenzaba a agitarse, sin pedir permiso comencé a acariciar su cuerpo y en la medida que me tome confianza empecé a disfrutar de sus senos, metí mi mano por debajo del baby doll y sentí la punta de sus senos muy duras, esto me confirmaba su excitación. Seguí adelante y deslice mi mano hasta su coño y ella dio un pequeño salto como tratando de retirarse, pero enseguida acepto mis caricias. En ese momento la humedad de su coño era evidente y me decidí a quitarle el pantalón del pijama e hice lo propio con el mío, quedando los dos desnudos de la cintura hacia abajo. A continuación, me subí sobre ella y seguimos besándonos. Era evidente los mutuos deseos de follar que los dos sentíamos.

Acomode mi verga en medio de sus piernas y ayudados por el flujo de ella fue fácil deslizar mi verga por la parte externa de su coño. Sin tomar una decisión por parte de ninguno de los dos de iniciar una penetración, continuamos besándonos y al elevarse los deseos por parte de ella, bajo su mano por en medio de nuestros cuerpos y tomando mi verga la ubico en el sitio adecuado de su coño, no sin antes buscar lubricar mi verga en sus flujos y comenzamos a follar, los dos sincronizamos pronto los movimientos y el placer fue en aumento y a cada instante yo sentía que podía estar próximo a correrme y llevábamos varios minutos y escuchaba solo los aigg, aigg, aigg, de mi madre, pero no avizoraba que ella fuera a alcanzar su orgasmo, y le pregunte si era que lo estaba haciendo mal porque no sentía que ella fuera a alcanzar su orgasmo y me respondió que estaba disfrutando tanto  ese momento que no deseaba por ahora llegar al orgasmo. Me tranquilizo que no era que lo estuviera haciendo mal y lo tome con calma y sin apuro y suavice la energía de los movimientos e igualmente me dedique a disfrutar el roce de mi verga con su coño mientras nos besábamos apasionadamente. Nos turnábamos a veces ella arriba, a veces yo, en unas oportunidades ella llevaba la iniciativa y en otras yo y así prolongamos el momento que sin ningún apuro nos fue llevando al clímax y finalmente la escuche gemir como una gata en celo, con mucha energía, moviendo su cabeza de un lado al otro disfrutando su máxima excitación, cruzo sus piernas alrededor de mi cintura como no queriendo que me escapara y apretándome para que mi verga estuviera muy dentro de su coño, al punto que yo quede detenido en el camino de explotar dentro de ella y cuando mi madre se calmó, inicie un mete y saca con frenesí que me permitió correrme dentro de ella. Quedamos pegados, e inmóviles, solo yo la besaba en las mejillas, en la boca, en el cuello y ella lo disfrutaba y permaneciendo sobre ella me fui quedando dormido hasta que me deslicé a su lado y los dos quedamos profundos hasta el día siguiente.

Después de ese primer día hemos disfrutado en muchas oportunidades y ahora cuando converso con Jorge sobre sus experiencias, éstas se las transmito a mi madre para que ella maneje muy bien las relaciones con los hombres y no se aprovechen de ella.

Dentro de las confesiones que nos hemos hecho esta la que le conté a ella que me excitaba mucho verla follar con Jorge y cuando más se excita ella y gime como loca, mas crecen mis deseos de follarla y lo disfruto tanto como la primera vez. Por eso ahora aparte de ser su cómplice soy su confidente.  Hasta aquí mi narración para no cansarlos.