Armonía familiar (segunda parte)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Nos abrazamos como dos amantes y nos decíamos cosas y ella mi hermana de pronto me dice, tienes que hacérmelo por detrás, si, a mama le encanta cuando papa se lo clava.
Sintió algo y volteó su mirada hacia la puerta y sus ojos y su boca se abrieron al máximo, y al yo girar mi cara vi allí en la puerta parada a mi madre quien simplemente nos observaba………………….

Nos quedamos ambos como petrificados mi hermana se cubría con la bata a medio poner y yo simplemente puse mis manos sobre mi verga ya flácida, entró y dirigiéndose a mi hermana le dijo “a tu cuarto” y se sentó a mi lado.
Que sucede hijo, dime el porque de esto que vi.
Le dije que había ha visto a mi hermana masturbarse y que eso me había excitado y ella simplemente me había pedido que jugáramos como tu lo hacías con papa.

Si me dijo, se que ella es caliente como yo, se que juega con tu padre pero el a pesar de los juegos no había querido penetrarla, pero tu si lo hiciste.
Yo avergonzado bajaba la cabeza y ella poniendo su mano sobre mi pierna me dijo.
Eres un macho hijo y eso me complace, sólo que hay que tener cuidado, le metiste toda la verga, a ver y apartó mi mano y observó mi verga dormida.
La acarició y me dijo “para tu edad estás bien, regular de largo y algo gruesa” “volverás locas a las chicas”, dicho eso me agarró la verga y comenzó a sobarla con una sonrisa y al notar que comenzaba a reaccionar a pesar de la pena viéndome comentó, “serías capaz de otro luego de tu faena anterior”.

Nada respondí pero mi verga estaba tiesa, ella abrió su bata y nada tenía debajo, sus tetas medianas y palpitantes firmes con sus pezones rosados y sobresalientes captaron toda mi atención, tócalos me dijo, comencé a hacerlo tímidamente, su dureza y suavidad me impresionaron, mientras mamá bajaba si cabeza y metía en su boca mi verga totalmente, lo sacaba, lo lamia y volvía a meterlo mientras acariciaba mis testículos, pronto se montó a horcajadas sobre mi y colocó mi verga en la entrada de su húmeda vagina y comenzó a meterla hasta el fondo, una vez dentro se inclinó hacia mi mientras me decía besándome, Ummm que rico dime sientes algo, si mama siento que algo me esta apretando mi verga, a lo que me dijo si bebe, es tu madre que tiene esa facultad, los hombres lo llaman de muchas maneras, esos movimientos involuntarios de la vagina apretando el pene son muy apreciados y aquí le decimos cangrejera, o cocomordán, la vagina succiona o chupa el pene, ustedes se vuelven locos por una mujer así, tu tienes la suerte de que tu madre lo tenga, y las mujeres que lo tenemos somos particularmente calientes, deseamos mucho una verga, así que complace a tu madre.

Dicho esto comenzó a subir y bajar con un ritmo acompasado, mi verga entraba y salía y mi madre se movía, se meneaba mientas entraba y salía, arrodillada sobre y apoyada en sus rodillas y sus codos, prácticamente me estaba cogiendo ella a mi, dale, que entre toda, duro, no acabes todavía, uff, así, ay mételo dame, si quiero verga, mucha verga, verga entera, coge a tu madre puta, a tu madre fogosa y sedienta de maraca de hombre, si chúpame las tetas, muérdela, muérdeme los pezones, ay sii ay duroooo y comenzó a tener espasmos pronunciados hasta que con un largo ugggggggfff se aferró a mis hombros y cayó sobre mi mientras yo descargaba en su interior mediante un orgasmo increíble cuanto me restaba de leche.

Acostados uno junto al otro, ella sudorosa y se veía complacida, su mano en su pubis y yo, complacido, sorprendido y molido de joder esa noche, pero mis años y mi cachondeo y deseos podían mas que el cansancio físico.

Entonces me dijo: “tu padre y yo somos muy liberales en cuanto el sexo, nos recogimos un poco en cuanto a cualquier libertinaje al casarnos y yo parirlos a ustedes dos.
No queremos extraños en nuestra vida sexual, solo ustedes y nosotros”.
Si Orlando he deseado mucho un trío entre tu padre tu y yo.
Deseo se penetrada doble por delante y por el culo, solo una vez lo hice antes de casarme y me mata el deseo de sentir dos vergas a la vez, ya nuestro deseo esta a punto de cumplirse, ya nos cogiste a tu edad, a tu hermana y a mi, tu padre debe estar cogiendo a Josefina tu hermanita, fue el quien los vio cogiéndose y me avisó y planificamos así, espero te haya gustado y estés complacido, pronto seremos una familia feliz y completamente liberada, incestuosa y sexualmente amplia.

Dicho eso, se reclinó sobre mi y me dio un largo beso de lengua, mientras que su mano acariciaba mis piernas y yo sus tetas, mientras pensaba, “creo que pasará mucho tiempo antes de que me vuelva a dar una paja”.