Calores familiares

Cuando te pones caliente no hay diferencia.
Hace un tiempo cuando vivía aun con mis padres, me paso algo muy morboso

siendo un fin de semana, llego de visita un primo hermano nuestro, como no habia mas lugar, tuve que compartir mi cama con el, despues de todo, nos llevábamos muy bien pese a la diferencia de edades, ya que era mas pequeño que mi hermanito y a este ultimo le llevaba casi 8 años

despues de todas las actividades, recostados, me quede dormido y en un giro que hice tope con mi primito, yo en ese entonces tenia 20 años, con las hormonas rebosando de calentura, senti algo tibio, eram las nalgas de mi primito, abri los ojos en la penumbra, con muy poca iluminacion pero podia ver su colita, apenas cubierta por su pijama, me entro un tremendo calor

lentamente baje sus ropas y las mias, despacito, le arrime mi ereccion que ya tenia en crecimiento, que rico se sentia su piel, tibia, suave, como seda, disfrutaba de ella cuando senti que se movia, fingi dormir, mirando con los ojos semi cerrados como subia sus ropas, deje pasar tiempo y repeti la misma accion, no podia evitar mi excitacion por esa cola. la tenia tan parda, llena y bien formada, sumado a mi calentura, era una mezcla peligrosa

volvi a disfrutar de su colita, esta vez baje sus ropas debajo de sus hermosas nalguitas, apenas senti que se movia, repeti lo mismo, el me miro en la penumbra y nuevamente subio sus ropas, deje pasar tiempo, y volvi al ataque, fue tal mi calentura que me quite las ropas de abajo y solo me cubria con mi delgada sabana, me acomode y disfrute otra vez de esa suavidad y tibieza, era delicioso, cuando senti sus movimientos, de la misma forma me tapaba y fingia, paso tiempo y repeti, esta vez mi verga hasta se resbalaba en su canal tibio de su culito tierno y sabroso, hasta su pierna le habia levantado, casi pude sentir que se le erizaba su piel

senti como se empezo a mover, inmediato me reacomode cerrando mis ojos y tapandome, note que me miro y se movio, pero no puse mucha atencion, cuando deje pasar tiempo y baje mis manos para bajar sus ropas, descubri una caliente sorpresa, esta vez mi primito no se habia subido sus ropas, suave y lento acaricie sus carnes, me acomode pegando mi verga que temblaba de deseo por ese culito, claramente senti como se erizaba su piel, casi pude escuchar un leve suspiro

aprovechando aquello, decidi tomar mas riesgos, lentamente baje sus ropas hasta quitarlas, podia sentir como temblaba, si medio vestido se veia rico, desnudo de la cintura para abajo era delicioso, comence a acariciarlo, despacio sin prisa, sintiendo sus suaves y apenas nacientes vellos erizarse, hice algo que nunca habia hecho mas que con mis novias y amigas, comence a besar suavemente su cuello y escuche un suave y leve gemido, mis manos se metieron debajo de su pijama y pellique los nacientes botoncitos de pezon que tenia, mientras mi verga se frotaba intensamente contra ese culo prohibido y deseado

pasaban los minutos y los manoseos eran mas intensos, tanto que senti como paraba la cola, como perrita en celo dispuesta a ser poseida por su macho, mi verga hurgaba sus carnes, mi glande chocaba con su sedoso ano, mientras sus jadeos se hacian mas intensos, lo besaba como si fiera una de mis hembras, quite las ultimas prendas que nos estorbaban, presa de la caliente novedad, se pegaba a mi, mientras arqueaba su espalda, jadeando, no hubo resistencia alguna cuando lo puse boca abajo

me acomode y mi verga empezo a buscar como desvirgar aquel caliente culo, que estaba en su punto de calentura maxima, podia sentir como lo impulsaba, mi falo estaba como piedra, tan tieso parado y humedo, que cuando hallo su agujero, empuje disfrutando como se lo abria, tape su boquita ahogando sus quejidos, mientras lo sometia, susurrando a su oido cuanto me gustaba su culo

yo -aaahhh primito aahhh que ricoooo aaghh apretadito y calente mmmm-

primo -hggmmm, uggg, oohhggg-

mi verga lo taladraba con placer, abriendo su culo, mientras le comia a besos el cuello y las orejas, susurrando palabras calientes y cariñosas, el sumiso dejaba que su culo diera placer a mi verga, comence a cogermelo duro, con fuerza pero lento, que sintiera cada pedazo de carne que lo abria y como su ano se amoldaba, pareciamos perros en celo, paso de los quejidos y chilidos a sonoros gemidos ahogados y su culo se movia mas y mas buscando la verga que lo rompia

perdido de placer, comence a eyacular en sus entrañas disfrutando de como arqueaba su espalda al sentirme, que rico se movia y apretaba, a cada cogida, el apretaba su culo, exprimiendo mi verga, susurre excitado

yo -asiii asiiii primito aahhh te encanta mi verga aahh verdad?- solo asintio sumiso gimiendo

cuando acabe de llenarlo, repose besando su espalda, mirando como se erizaba, lento se la saque y me recoste, se acomodo a mi lado y me miraba, suspirando, miraba mi verga aun media erecta, sin pedirselo, me la tocaba, acariciandola, despacio, sus dedos rozaban mis huevos dandome tanto placer que me sacudia, con voz quebrada de calentura susurro

primo -te gusta? me dejas hacerte algo?- asenti dejando que jugara

lentamente descendio y senti como besaba mis testiculos, dandole suaves chupadas, haciendome gemir ahogadamente, su lengua exploro cada bolsa, hasta que alcanzo mi ano, vaya que me hizo brincar, nadie lo habia hecho, su pequeña lengua hurgaba aquel rincon, dandome placer, tanto asi, que alce mis piernas facilitando el acceso, como si fuera un dulce, ataco, senti su lengua mojandome, mientras respriaba agitado, esto provoco tremenda ereccion

descubriendo lo que hizo, subio hasta que su boquita tierna, engullo mi tolete, dando una larga y suave chupada, vaya sorpresa, el pequeñin, no eran tan inocente como pensaba, despacio me la mamaba hasta donde le cabia, tomando aire de vez en cuando, mirandome como me agitaba de placer, para despues volver a chupar, no se cuanto duro aquella delicia

de repente senti bestiales ganas de eyacular y se la empuje, sujetando su cabeza, dandole toda mi leche, que bebio con dificultad pero sin hacer ascos, mi semen fue directo a su estomago, fue excitante verlo sacarsela, con su boca escurriendo mi leche, sonrio, mientras me miraba

notando que mi ereccion habia bajado, se acomode junto a ella, entre mis piernas, acariciandola con ternura, curioso ante tanta sorpresa pregunte desde cuando lo hacia, en susurros me confeso

primito -pues se la mamo a mi tio, y la primera vez fue en un baño con un señor, pero…nunca me habia cogido, aun que si me habian tocado, en el camion donde voy a la escuela, varios señores me meten mano y me acarician mis pompis-

yo -te encanta que lo hagan- y asintio con mirada penosa

sin pedirlo se la engullo otra vez y comenzo a mamar, lo hacia con tanto gusto, que en poco tiempo empezo a crecer mi verga, provocando su mirada de deseo, susurro

primo -que rica, me gusta su sabor mmmm y como se siente al crecer en mi boca-

esa noche no dormimos, nos la pasamos cogiendo casi hasta amanecer, fue de las mejores noches que tenido, aun hoy dia somos nunca hubo reclamos o problemas, es nuestro secreto

saludos