Cogida rica con mi primo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Todo comenzó cuando mi primo al que veo solo durante las navidades, me escribió para que realizara un viaje con él, puesto que todas las veces en que habíamos intentado quedar, no había sido posible.
Yo le dije que si, que me encantaría acompañarlo y asi de paso empezaba mis vacaciones después de un duro semestre en la universidad.
Después de analizar nuestro tiempo de viaje y el costo decisidimos que la mejor opción era viajar en avión para llegar más rápido a nuestro destino y obtener una linda vista de las montañas.

Como el viaje iba a ser en avión la mejor opción que teníamos era hospedarnos cerca del Aeropuerto para no peder el vuelo.
Y así lo hicimos.
Una vez en el hotel pensamos que sería excelente salir por una bebidas, una vez en el antro y después de muchos tragos más tarde terminé emborrachandome.
Por lo que al día anterior nos fue imposible llegar a tiempo al vuelo porque me quede dormida.
Afortunadamente la recepcionista del aeropuerto nos repromagramo el vuelo y decidimos volver al hotel donde estábamos.

Una vez ahi, me tumbe sobre la cama.
Y mi primo me siguió recostandose a mi lado y rodeandome con sus brazos, mientras me decía en el oído que quería hacerme gozar en estas vacaciones.
Esas palabras me encendieron así que comence a besarlo.
Asi comenzamos: él me sacaba la blusa, yo besaba su cuello y mordía su oreja.
Luego de sacar sacarme la ropa comenzó a mamar mis tetas y moder mis duros pezones.
Yo me retorcía de placer mientras respiraba agitada , en ese momento comence a acariciar sus testículos y su pene que esta ya muy duro y erecto.

-Metemela dura- le dije entre jadeos.
Asi que el al instante se saco su ropa y colocó mis piernas en alto y me penetró tan fuerte como podía mientras yo mordía la almohada para no gritar de placer.
Al rato de evestirme con dureza.
Me dijo que queria hacerlo anal.
Yo nunca lo había hecho anal asi que no estaba muy segura de hacerlo.
Sin embargo gracias a su buen desempeño y al rato que me había hecho pasar le dije que si.
Este comenzó introduciendome dos dedos en mi ano.
Se sentía tan rico que comence a alentarlo para que me diera más.
Su pene era corto pero grueso y eso era todo lo que necesitaba.
Me puso de cuatro y de una me la metio toda.
Se sentía tan rico que le pedia que no paran y que me diera más.
Cuando iba a terminar lo tome del pene y le comence a acariciar su puntita que estaba caliente de la acción.
Pronto comence a sentir su semen calientico sobre mi mano.

Ese día cogimos igual de rico muchas veces hasta quedar rendidos.
El dia siguiente tomamos nuestro vuelo y pasamos unos dias maravillosos rodeados de naturaleza.

Tal vez muy pronto se vuelva a repetir este reencuentro de familia tan maravilloso.