Combo, Mamá e Hija 3

Se llegó el día para ir a cuidar a Esmeraldita .
Después de esa cogidota que les había dado a Esmeraldita y a su mamá, esperaba con ansias el día que me volviera a llamar.

El viernes en la tarde me escribió Daniela para confírmame si podía cuidar a Esmeralda el siguiente día y que ella tenía que ir hasta la capital a a realizar varios mandados, con todo gusto acepto- le respondí.

Llegué ese sábado a las 7:00 de la mañana, Daniela ya estaba lista para partir y Esmeraldita estaba en la mesa desayunando, me ofrecio algo de tomar pero de ver tan hermosa a Daniela, con esa blusa escotada me la comía a besos. Ella se despidió, me dijo todo anotado sobre lo que había para comer y salió. Yo me quedé aún sentado con Esmeraldita en la mesa y comencé a sacar plática. Ella había sido un poco tímida conmigo, le comencé acariciar su cabello y le pregunté que si su mamá salía seguido, ella me respondió que algunas veces se iba y que su novio llegaba a cuidarla- novio? Le pregunté, acaso tu mami tiene novio? No, me respondió el novio de ella no, el mío- tu tienes novio le pregunté- si me dijo. Y sabes lo que es tener novio entonces? Ella me dijo que la besaba, que le regalaba cosas y le hacía el amor. Mi verga comenzó a tener una reacción a lo que ella me decía. Yo aún con dudas le pregunté- como es que te hace el amor? Me hace suya y me baña – yo quedé sorprendido ante la confesión de Esmeraldita. Que edad tiene tu novio o como es? Le pregunté- es así ya grande como tú- me respondió. Y te gusta ser su novia- siiii – respondió con mucha alegría. Me imaginé muchas cosas sobre eso, solo de pensar a cuántos más le habia dado Daniela a su propia hija o saber desde que edad ya le rompían rico ese culito, me tenía ya bien duro.

Terminó de desayunar, se lavo sus dientes y fue a la sala a ver tv. Yo me senté a la par de ella y comencé a acariciar sus piernas. Ella andaba con una faldita bien cortita de lona y una camiseta. Quería romper el hielo y le pregunté si me podía enseñar lo que hacía con su novio, que jugaramos a qué yo era su novio, y me respondió rápidamente que si, que si mamá le dijo que yo le pediría que jugaramos a eso. Dentro de mi dije- Daniela ya sabía que hoy iba a tratar a su hija como mi mujercita.

Esmeraldita se acercó y me dijo, primero nos damos muchos besos, ella se levantó y se sentó sobre mi, puso sus brazos alrededor de mi cuello y yo la tomé de la cintura, ella bien sentadita con sus piernas abiertitas, comenzamos a darnos unos besos tan ricos, yo cada vez iba comprendiendo porque ella era una experta besando, esos  labios tiernos , sa lengüita se estaba volviendo mi adicción, ella me comía con sus besos  y yo me la devoraba, le besaba su cuellito y comencé a escuchar sus jadeos tímidos, después de unos minutos nos detuvimos y nos nos miramos fijamente y me dice- usted es bonito y me gustan sus besos, entonces le dije- quieres ser mi novia ? Yo sería tu novio 2 pero así en secreto, nadie se tiene que enterar le dije- lo pensó y me dijo si- y comenzamos a besarnos nuevamente ahora yo la besaba con más pasión, le acariciaba su espadita y llegaba hasta su culito, sentir esas nalguitas bien paraditas, empecé a meter mano y note que no tenía calzoncito, le levanté la faldita y y comencé a apretarle suavemente las nalguitas mientras nos seguíamos besando.

La detuve y le dije,- quiero que me muestres que has aprendido con tu novio- me tienes que hacer lo mismo y mejor le dije y los dos nos reímos. Ella se inco y me dijo que era hora de que ella chupara bombón, me comenzó a querer quitar el pantalón y yo le ayude, me lo quite todo, pantalón y boxer, ella comenzó a besarme mi verga ya bien parada y con su lengüita me la pasaba desde abajo hasta arriba- yo le decía- que bien has aprendido Esmeraldita hazme igual que a él. Y comienza a darme una mamaditas tan ricas, sentir esa boquita experta en mamar pijas, intentaba tragarla toda y algo que me ponía a mil es que siempre usaba su le lengüita en mi cabecita de la pija.

Me estuvo mamando por casi 10 minutos, yo la levanté le quite la faldita y la blusita y  admire ese cuerpecito tan hermoso, sexy y rico que me volvía loco. Le dije- te puedo dar besitos tambien en tu cuquita, – sii me dijo- , la cargue y la senté, yo me inque y abrí esas piernitas, iba besando desde sus pies hasta la entrepierna y ella algo cosquilluda se reía un poco, llegué a su rajita, eran tan hermosa, así enchadita, le abrí bien su rajita y comencé a pasar mi lengua, sentía sus jueguitos, entre saladitos y con un olor rico, era un placer total comerme esa mielita de ella. Yo me deleitaba y la voltee a ver, Esmeraldita con los ojos cerrados, su boquita entre abierta y sacaba usos suspiros que pronto sentí la reacción cuando sentí más sabor saladitos, estaba lubricando rico, intenté meter mi dedo pero ella me dijo que allí no porque le dolía, pregunté si alguna vez le hicieron el amor por allí, me dijo que su novio había intentado pero que no le entraba su pipí y que a ella le dolía, entendí porque el culito era el uno tragón de pija. La puse en 4 y comencé a comerme su culito, lo lubrique mucho con mi saliva, yo ya quería estar dentro de dese culito rico y hermoso. Me puse de pie , me acomodé bien y comencé a pasarle la cabecita de mi pija en su entradita.

Comencé a meterla y ella solo hacía shhh- hmmm, entró sin dificultad y se la dejé ir hasta dentro, me quedé así unos minutos y luego comencé a darle con más ánimo y pasión, ese culito se alimentaba de mi pija, ver cómo se la comía toda era una fantasía cumplida. Le di lo más fuerte que calculé que ella aguantaba mientras le daba nalgaditas y la agarraba de su cinturita. Le di por unos 15 minutos así. Luego me senté y me la puse encima viendome, ella solita se sentó en mi pija y comenzó a moverse, era una cajita de sorpresas como ella a su corta edad se movía de una forma tan rica. Yo dejé que ella se matará con mi pija a su propio ritmo, llegó un momento donde fue bastante movimiento, ella me estaba dando unos sentones tan deliciosos que ya me hacía venirme. La detuve y comence a besarle las tetitas, le daba chuponcitos, al ratito la acosté boca abajo en el sillón y comencé a taladrarla con fuerza, mi pija sacaba mucho líquido preseminal y eso ayudaba a qué todo se mantuviera bien lubricado y disfrutar ambos.

Nuestro sexo fue largo, parabamos un rato, yo la morboseaba y luego seguimos cogiendo, nos estuvimos desnudos toda la mañana, incluso cuando ella quería ir a orinar yo me iba con ella al baño y miraba como le salían esos orines de su rajita, yo mismo se la secaba y le daba lengüita para terminar de hacer bien el trabajo de niñero por un día. Cogimos en la sala, en el baño,  en la cama, me encantó cuando nos metimos a la ducha, ella puso su cuerpo a la pared y saco su culito y me lo dió a disposición, te gusta así contra la pared le pregunté, así me gusta me respondió y eso me encendió más, yo atrás de ella dándole rico. Logré acabar dos veces, adentro de su culito. Le quedaba bien escurridito de leche. A la hora del almuerzo le pregunté si alguna vez le habían dando la lechita en la boquita o que si ella lo habia probado y me dijo que si, que si novio muchas veces le daba la lechita en todo su cuerpo, la forma de como ella naturalmente me contaba las cosas me encendían más. Quería darle la última cogida la lleve a la cama y la puse en la orilla para poner sus piernas en mi pecho, le daba bien rico , su carita de disfrute era lo mejor, le dije que si quería lechita en su boquita y me la acepto, se la di toda y ella se la tomó. Me dijo que estaba más dulcita que la de su novio y eso me llenó de orgullo.

Daniela llegó a las 3 de la tarde, estabamos en la cama y nos preguntó cómo la habíamos pasado, te extrañamos mucho mami- respondió Esmeraldita- claro que te extrañamos dije yo también, y ella se rió- y respondió – ya me imagino. Me levanté y le dije que me la quería comer pero ella andaba en sus días por lo que solo me ofreció el culito, allí en frente de Esmeraldita le termine de dar la cuarta deslechada a su mami, me pidió la leche en la boquita, se dió cuenta que no saqué mucho ya, y ella volteo a ver a su nena y le dice, casi no me dejaste leche verdad y las dos se rieron como cómplices.

Me despedí con un beso a cada una pero besé más a Esmeralda. A ella se la salió un te quiero- y me puso muy sentimental.

Me fui ese día y no dejaba de pensar en mi nueva noviecita, la falta que me haría en esos días, pero a las dos semanas recibí un mensaje de Daniela con una propuesta que fue la cúspide de toda fantasía…..

Continuara….

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