Comencé buscando una habitación para vivir y termine cogiéndome una milf
Habia entrado a la universidad y necesitaba un habitación para vivir y así fue que conocí a una mujer madura con la cual termine teniendo sexo y descubriendo otros secretos.
Mi nombre es Mario mi historia sucedió cuando entre a la universidad yo soy originario de la ciudad de Oaxaca de México, pero había logrado entrar en la universidad de la capital así que comencé mi búsqueda para poder encontrar un lugar donde poder vivir he ir ala universidad ya que sería muy cansado y económicamente más caro estar viajando ida y vuelta todos los días, para mi sorpresa los precios eran extremadamente caros dure bastante buscando, hasta que un día encontré un anuncio, se renta habitación sin amueblar en casa casa familiar para estudiantes, el precio era accesible y muebles no necesitaba con una colchoneta me daba por servido así que agende un visita para ver la habitación un día sábado por la mañana.
Llegue puntual a la visita, me recibió un señor algo pasado de peso me dijo que su nombre era Gilberto, me mostró la habitación, no era muy grande pero para llegar solo a dormir me servirá bastante, así que acepte y firme un contrato, estaba a una semana de empezar las clases así que aproveche y me fui a vivir a la habitación 3 días antes para dejar mis cosas e ir conociendo la ciudad.
El día que fui a dejar mis cosas me recibió un chico 2 años menor que yo, luego me enteré por el señor Gilberto que era su hijo de nombre Felipe y estudiaba aún la preparatoria, era muy callado y parecía que no le gustaba socializar mucho. después conocí a la esposa del señor Gilberto su nombre es Rosalba, para mi sorpresa una hermosura de mujer, tez blanca delgada, con uno senos bastante grandes un cintura muy bien formada y un tremendo trasero, estaba muy bien maquillada y su perfume olía bastante bien, tenía su cabello ondulado teñido de rubio, llevaba puesta una minifalda azul y una blusa de tirantes rosa bastante escotada hasta se le veía un lunar en su seno izquierdo, con una personalidad muy alegre, bromista y calurosa, que desde que llegué me hizo sentir en casa, me sirvo de comer y fue ella misma la que llevo mi maleta a mi habitación.
Al dia siguiente me levante temprano y me dispuse a ir al baño así que tome mi cepillo de dientes, champo que llevaba en mi maleta y una toalla, cuando, baje estaba ocupado el baño pero se escuchaba la regadera así que me senté en la sala a esperar, cuando se abrió la puerta salió Felipe con el cabello aun mojado, vestía solo un short y traía una toalla colgada en el hombro, al verme solo me dijo buenos días y se subió a su habitación, me levanté para entrar pero aun se escuchaba la regadera, pensé…. igual y la dejo abierta y se le olvidó cerrarla, al entrar vi a alguien aun en la regadera solo se podía ver su contorno por el vidrio mateado.
– Felipe no se te olvide cerrar la puerta – Dijo levantando la voz.
Era la señora Rosalba me quedo sorprendido, no quise decir nada por miedo a que pensara que la estaba espiando o algo.
– ¿Felipe ? – Pregunto. – ¿Quién es ? -Pregunto nuevamente.
– Soy Mario señora, perdone, es que vi la puerta abierta y pensé que estaba libre el baño. Perdón – Respondí.
– Ahh Mario, no te preocupes, no pasa nada, ya casi término – Me respondió.
Asi que sali, y nuevamente me fui a esperar a la sala estaba totalmente apenado. No pasó mucho cuando salió la señora Rosalba con una toalla cubriendo su cuerpo y otra en la cabeza enredada en su cabello.
– Listo Mario ya puedes pasar – Me dijo.
– Si, muchas gracias y una vez más disculpe. – Le dije.
– No pasa nada tu tranquilo, es mas si quieres te puedo lavar la espalda – Me dijo riendo
– Co … co… ¿Cómo ? – Respondí todo nervioso.
– Es broma jaja solo mirarte te pusiste todo rojo, bueno te dejo que te bañes – Me dijo y se subió también a su habitación.
Después de eso, ese día solo lo aproveche para conocer la ciudad, y al día siguiente comencé mi primer día de clases como universitario pero una vez más me llevé una sorpresa, me levanté más temprano, me bañe y todos los demás aún seguían durmiendo y cuando iba ya de salida me encontré con la señora Rosalba en la cocina, traía puesto un beibidol negro de encaje con transparencias que me permitían ver atreves de el su tanga negra.
– Hola Mario buenos días, ya listo para tu primer día – Me dijo.
Ni se inmuto al ver que la estaba viendo vestida así, – Buenos días – Le respondí.
– Hey cierra la boca, se te van a meter moscas – Me dijo riendo.
Te vas a tener que acostumbrar a ver mujeres así o con menos ropa Mario, por que en la universidad te apuesto que varias van a ir tras tus huesitos – Me dijo aun riendo, pegándose a mi.
– Bueno ya no te entretengo más, que tengas un buen inicio de clases Mario – Me dijo al oído y luego se fue a sentar a la sala cruzada de piernas con una taza de café en mano.
Pasó un mes desde entonces y ya me había acostumbrado a la forma tan abierta y lanzada de ser de la señora Rosalba, no solo la llegue a ver semidesnuda por las mañanas, si no también por las noches y más de una vez la llegue a escuchar gritar y gemir cuando tenia relaciones con su esposo, encontré también folletos en la mesa de la cocina sobre clubs swingers y fue cuando entendí por que se lo tomaba tan normal exhibirse así. y me cuadraba todo ya que acostumbraban a salir los fines de semana por la noche y ella siempre iba muy despampanante y regresaban casi al amanecer.
no fue hasta que el señor Gilberto tuvo que ir a ver a su padre ya mayor que se encontraba hospitalizado por lo cual dejaron de hacer esas salidas ya que el señor Gilberto se tuvo que ausentar por unas semanas de la casa.
Un viernes por la tarde me encontraba terminando unos trabajos en la mesa de la cocina con mi laptop y llegó Felipe con otros amigos a la casa eran como las 4 de la tarde y entraron todos a la sala, luego bajó la señora Rosalba se quedó platicando un rato con ellos y luego se me acercó.
– Hola Mario perdón se me paso avisarte que Felipe haría un reunión hoy, espero no te moleste el ruido – Me dijo
– No para nada, no se preocupe – Le respondí.
Yo me quede en la cocina y ellos en la sala, la señora Rosalba se quedó con ellos hasta que dieron las 10 de la noche, fue cuando me percate que la señora Rosalba ya no estaba en el grupo y ya algunos andaban borrachos, eran varios chicos y una que otra chica, de pronto se me acercó Felipe y me ofreció una cerveza la cual acepté.
– ¿Qué haces? – Me preguntó.
– Terminando unos trabajos de la uni – Le respondí.
– Que flojera, la verdad lo mío no es la escuela, deja eso tomate un descanso y ven con nosotros – Me dijo.
– Ya casi termino, me apuro y pasó un rato con ustedes – Le dije
– Vamos ya llevas toda la tarde ahí sentado – Insistió.
– Bueno un rato – Le dije y fui con él a la sala.
Me presento a sus amigos y estuvimos platicando un rato mas bien me sentí entrevistado, me preguntaban por la universidad y como era, ya que alguno de ellos el siguiente año les tocaba ingresar a ella, estuvimos así platicando aproximadamente por unas dos horas, luego decidí irme a mi habitación, a terminar lo que me faltaba, en eso pase enfrente de la habitación del señor Gilberto y de la señora Rosalba, estaba su puerta abierta y como si alguien me hubiera dicho voltea lo hice, y vi a la señora Rosalba hincada en el suelo y enfrente de ella uno de los amigos de Felipe, este tenia el pantalón abajo y ella le estaba practicando sexo oral, el la sostenía que la cabeza con una mano mientras con la otra mantenía arriba su playera, me volteo a ver la señora Rosalba sin dejar de chuparle el pene seme quedo viendo, hasta que solo me guiño un ojo y continuo con su labor, luego el amigo de Felipe se percato que los estaba viendo, le saco su miembro de la boca y se acerco a cerrar la puerta.
Me fui directo a mi habitación, por un momento pensé decirle a Felipe pero me calme y solo pensé es algo que no me debe importar, aquí solo soy el inquilino, así que trate de continuar con mi trabajo pero mi mente no me dejaba ya que debo admitir que se veía muy excitante la escena que acaba de presenciar. recuerdo que solo dije en voz baja a mi mismo rayos que suerte tiene ese chico.
Después de un rato me propuse dormir, pero no podía, ya que abajo en la sala a un traían su fiesta ya que se escuchaba más fuerte la música, así que solo estaba en mi colchoneta viendo hacia el techo aun pensando lo que vi unas horas antes, aunque no me extraña después de todo era su forma de ser de ella.
Al día siguiente me desperté más tarde, me había vencido el sueño, baje al baño y aún había amigos de Felipe dormidos en la sala, me lave solo la cara para aliviarme el sueño y salí al patio a tomar un poco el sol. Justo en eso iba entrando de la calle la señora Rosalba llevaba puesto solo un short corto azul marino y una sudadera café claro.
– Buenos días Mario – Me dijo.
– Hola buenos días – le respondí.
– Perdona se te nota en la cara que no pudiste dormir bien – Me dijo.
– Si no puede dormir nada pero no se preocupe. – Le respondí
– Bueno ya somos dos igual a mi no me dejaron dormir nada, ya sabes a lo que me refiero – Me dijo poniendo una mirada traviesa mientras me ponía su mano en mi pecho.
– Pero bueno no creo que nadie se levante ahorita, fui por el desayuno que te parece si desayunamos nosotros en lo que se levantan los demás – Me propuso.
– Claro, muchas gracias– Le dije.
Me tomó de la mano y me llevó hasta la cocina sujetados de la mano.
– Toma asiento en lo que sirvo – Me dijo.
Desayunamos con normalidad, luego ella tuvo que salir a comprar unas cosas y yo me subí a mi habitación y luego baje a la cocina, ya como por eso de las 3 de la tarde se iban los amigos de Felipe, no había pasado mucho cuando llegó también la señora Rosalba con una bolsas de tienda de marca de ropa, no saludo a su hijo y a mi y se subió a su habitación, luego Felipe me dijo que ya no aguantaba el sueño y que se iría a dormir un rato, así que me quede yo solo, me dirigí a la sala y me senté mientras mi lap se actualizaba, pero al final igual me gano el cansancio que termine dormido en el sillón.
Solo sentí como alguien me tocaba el hombro y al abrir los ojos, vi que era la señora Rosalba, traía un vestido cortito, muy entallado color rojo, totalmente maquillada con un collar con aretes dorados y como era costumbre el rico aroma de su perfume.
– Mario ve a dormir a tu habitación te puede dar un resfriado, está haciendo mucho frio – Me dijo.
– Perdon me terminó ganando el sueño – Le dije.
Me quedé viendo cómo se veía con su vestido y ella se dio cuenta.
– ¿Qué sucede ? – Me pregunto.
– Se ve muy hermosa, y más joven que ni parece que tuviera un hijo – Le dije
– Vaya estoy Feliz de escuchar eso, es la primera vez que me coquetean de esa forma – Me dijo.
–¡No..! Perdone no quería que sonara como coqueteo, disculpe – Le dije.
– No te avergüences, muchos hombres me coquetean, pero no de una forma tan sincera como tú, pero sabes que de vez en cuando a mi también me gusta probar suerte – Me dijo y se sentó en el sillón frente a mi.
– Pensaba salir hoy con unos amigos, pero pensándolo mejor me quedo a averiguar qué sucede si hago esto – Dijo ella, mientras abria sus piernas, dejando me ver su tanga de color negro.
– ¿Te vas a quedar callado, solo mirando mi entrepierna ? – Me pregunto, y yo no sabia que decir en verdad me tomó por sorpresa.
– Se ve muy …muy rica – Le dije.
– ¿Yo o lo que estaba entre mis piernas? – Me pregunto riendo.
– Vamos ven – Me dijo mientras se levantaba, me tomo de la mano y subimos los dos a su habitación, me sentó en la orilla de su cama mientras ella se comenzó a desnudar frente a mi, se quito, se bajó el cierre de su vestido hasta llegar a su cinturón y lo dejó caer al suelo, luego se desabrochó dando la espalda su brasier y lo dejó caer, se dio la vuelta y se vei muy rica con sus senos al aire, solo tenía puesta su tanga.
– Mario vamos por que aun no te has desnudado, o quieres que sea yo la que te ayude a hacerlo – Me dijo mientras se acerco a mi, tomo mi playera y me dijo levanta las mano de me la saco rápidamente.
Luego se encimo sobre mi haciendo que callera acostado en la cama y ella sobre mi, nos comenzamos a besar, luego ella se levanto tomo mi cinturón y lo desabrocho y abrió mi pantalón y comenzó a jalarlo, bajándomelo poco a poco hasta que logro quitarlo, junto con mi bóxer.
– Vaya qué tenemos aquí, como se llama tu amiguito y por qué no me lo habías presentado antes – Me dijo ella, al ver mi pene, se terminó quitando su tanga dejándome ver su entrepierna y como tenía vello en forma de triángulo.
– Vamos acuéstate bien sobre la cama – Me dijo y obedecí.
Una vez acostado bien sobre la cama ella se subió arriba de mi y se dio la vuelta quedando se vagina frente a mi cara y ella frente a mi pene haciendo un 69, sentí cuando tomo mi pene y comenzó a masturbarme primero y poco después sentí cuando se lo introdujo en su boca, esa sensación de humedad y de succión se sentía bastante bien.
– Vamos Mario tú también juega con mi vagina – Me dijo mientras me la acercaba más a la cara, así que comencé a lamerla primero y luego a meterle mis dedos dentro de ella y cada vez se mojaba mas ya que mis dedos salían cubiertos por los fluidos de ella.
– Tu pene ya se puso muy duro, dime cómo se siente mi boca, ¿se siente bien ? – Me preguntaba, yo le respondía – increíblemente bien se siente.
– Me alegra escuchar eso, ahora que nunca lo olvides – Me respondió y comenzó a mamarme el pene con más rapidez, que termine viniéndome en su boca.
Al voltear a verme podía observar como mi semen se escurría entre su barbilla y su nariz.
– Vaya si fue mucho lo que dejaste salir – Me dijo sonriéndome.
Luego se levantó, se bajó de la cama, tomó papel y se comenzó a limpiar la cara. una vez se la limpia regresó a la cama se recostó a mi lado y con una de sus mano tomó nuevamente mi pene y comenzó a masajear de arriba hacia abajo.
– Dime Mario, ¿quieres hacer con o sin condón ? – Me pregunto.
– Este ..como usted guste – Le dije.
– Tu como quieres, no te preocupes si quieres hacer sin condón yo asumiré toda la responsabilidad, entonces que decides ? – Me pregunto.
– Sin condón por favor – Le dije y ella solo me sonrió y me volvió a dar un beso, para luego subirse sobre mi, se acomodo sobre mi pene y se lo fue introduciendo en su húmeda pero cálida vagina – ¡haa!! está entrando – Me decía.
Una vez que mi pene estaba totalmente dentro de ella comenzó a mover sus caderas de una forma muy rica, mientras ella presionaba sus pezones, sin apartar su mirada de lujuria de mi.
– Tu pene se siente asombro – Me dijo.
– Tu vagina igual se siente muy calidad se siente muy bien– Le dije también
En eso se puso como en cuclillas aun con mi pene dentro de ella se sostuvo de mi abdomen y comenzó a subir y bajar sobre mi pene, empezó lento y poco a poco fue subiendo la intensidad que parecía que estaba brincando sobre mi, solo se escuchaba el rechinar de la cama y como chocaba ella contra mi ¡plas plas plas!
– Rayos estoy a punto de venirme de nuevo…!!! – Le dije.
– Vamos llena mi vagina con tu semen ¡¡Hazlo!!! – Me dijo ella.
Terminé corriéndome nuevamente, ella se levantó, con sus manos y con la ayuda de sus dedos abrió su vagina dejando chorrear mi semen sobre la cama.
– Mira todo lo que te corriste, eres un buen chico así se hace – Me dijo y se dejó caer sobre la cama se puso encima de mi y me volvio a besar.
– Quiero que a partir de hoy viertas tu semen dentro de mí – Me dijo luego de besarnos.
Y así fue, a partir de entonces comencé a tener ese tipo de relacion de sexo por diversión con ella, me había contado todo lo que hacia con su esposo y todas las fantasías que ya había cumplido, desde tríos, hasta orgias o intercambios de parejas, habia dias que me encontraba en clase y me mandaba mensajes muy calientes o fotos de ella desnuda o masturbándose, hasta fotos cuando se la cogían otras personas o su esposo.
Dentro de su casa aun cuando ya había llegado el señor Gilberto ella me hacía visitas nocturnas para coger, Cuando llegaron las vacaciones tenía pensado regresar a mi casa para ver a mi familia pero la señora Rosalba siempre me daba buenas razones en forma de sentones para quedarme en las vacaciones así que decidí quedarme solo la mitad de ellas s y la otra mitad las usaría para ir a ver a mi familia, cosa que la señora Rosalba acepto.
Un día salí a comprar unos metros de cable que me había pedido de favor el señor Gilberto ya que estaba arreglando o cambiando unas lámparas de la casa y como no tenía nada que hacer hasta la noche que era cuando me acostaba con su esposa y hasta donde yo sabía, la señora Rosalba ya le había contado a su esposo de su aventura conmigo pero aun así no atrevía hacer algo con ella sabiendo que él estaba despierto o rodando por la casa a pesar que ella se me insinuar o me sedujera siempre me mantenía al margen y ella terminó por ceder y entendió que solo por las noches era cuando estaba dispuesto a coger con ella.
Estaba llegando a casa cuando recibí un mensaje del señor Gilberto donde me decía que tenia que salir al centro ya que una de las lámparas que había comprado salió con un defecto y rota, le respondí que yo ya estaba por llegar, y solo me dijo por mensaje que dejara el cable en la sala y cuando el llegara el continuaba colocándolo.
Así que hice lo que él me indicó y luego comencé a buscar a la señora Rosalba para ver si podíamos aprovechar el tiempo en lo que su esposo no estaba pero no la encontré en ningún lado, así que me termine mandando un mensaje,
– Donde estas, tu esposo acaba de salir fue al centro y se va tardar quería ver si quieres hacer cositas – Le dije en el mensaje.
– ¿Qué tan bueno eres guardando secretos? – Me respondió ella.
– Sabes que no diría nada que tuviera que ver contigo – Le respondí
– Ok confirmare en ti, ni una palabra a nadie menos a mi esposo, estoy en la habitación de Felipe sube – Me respondió.
Asi que subí, y al intentar abrir estaba cerrada la puerta, pero luego la abrieron desde adentro, era Felipe el que me abrió, pero cuando pensé que no me podía sorprender más, me sorprendió verlo desnudo de la cintura para abajo.
– Entra – Me dijo
Entre y estaba la señora Rosalba empinada sobre el escritorio de Felipe, y al igual que él ella está también desnuda de la cintura para abajo y su ropa regada en el suelo.
–Hola mi amor, como puedes darte cuanta, esta pasando lo que te estas imaginando, practico el incesto con Felipe desde que me descubrió teniendo ya sabes sexo con otras personas – Me dijo, mientras Felipe se colocaba detrás de ella y la penetraba por su ano.
¡Ahhh..!! no tan brusco Hijo ya te dije que no lo metas de golpe si me lo haces por el ano – Le dijo ella quejándose.
Y sin hacerle caso, la tomó por sus caderas y comenzó a meterla empujando fuerte contra ella, aprovechaba y en ocasiones le daba unas nalgadas mientras ella comenzaba a gemir, con su propia mano ella la colocó sobre su vagina y mientras era penetrada por el culo ella se masajeaba su vagina para luego meterse dos de sus dedos.
– Es lo mejor el sexo anal, que rico se siente tu ano mamá – Dijo Felipe.
– Si…!! mi vida se siente muy rico como me penetras – Le dijo ella
– Te gusta tener mi pene dentro tu de tu culo verdad mamá, eres toda un pervertida – Le dijo Felipe
Yo no aguante mis ganas y me comencé a masturbar mientras los veía coger era tan morboso ver a su hijo dandole por el culo y ella los disfrutaba bastante.
Felipe se detuvo y se la saco la tomó y la puso en 4 sobre la cama el se subio en la cama y se coloco detrás de ella flexionando las rodillas se la volvió a meter en su culo.
– No tan fuerte Felipe me estas lastimando Ahh Ahhh ouhh.!!! – Le decía su mamá mientras gemía de dolor.
Le comenzó a dar con tanta fuerza que hizo que ella cayera de frente sobre la cama y él sobre ella y aun así no dejaba de cogerla, hasta que felipe se vino dentro de su culo, se saco su pene y se podía ver su culo totalmente dilatado.
–Definitivamente aun no acabo – Le dijo, mientras se ponía frente su cara, la jalo del cabello y le metió su pene en su boca y ella comenzó a chuparlo.
–Que esperas Mario, metesela por el culo – Me dijo Felipe.
– Yo ya tenia mi pene totalmente erecto, asi que solo me quite bien el pantalón y me subí detrás de ella, buscando su entrada coloque mi pene y como si tuviera mantequilla le entro sin ninguna dificultad por el culo el cual ya lo tenía muy abierto, ella comenzó a patalear cuando se lo meti todo, y trataba de decir algo pero Felipe no se lo permitía por que tenia su pene dentro de su boca así que me acomodo como si estuviera haciendo unas extrañas lagartijas y comencé a meterlo y sacarlo de su ano, ella solo se quejaba pero poco después dejó de patalear mientras la seguía penetrando.
Felipe se la sacó de la boca y ella comenzó a gritar No pares no pares me vengo me vengo ..!! y poco después sentí como las sabanas estaban totalmente mojadas, se la saque del culo y me levanté y había dejado un amancha sobre la sábana, como si se uniera orinando sobre ella.
Se levantó la señora Rosalba y se puso de rodillas en el suelo y nos comenzó a suplicar que le diéramos nuestra leche mientras sacaba la lengua y abría la boca, así que tanto Felipe como yo no acercamos y no comenzamos cada uno a masturbarse hasta que nos corrimos en su cara y su boca, y ella solita con su manos tomaba nuestro semen de su cara y se lo metía en la boca y se lamia los dedos para no desperdiciar ni una gota.
– Déjenme tomar un respiro chicos por hoy – Nos dijo.
recogió su pantalón y su tanga del suelo y se bajó al baño, y cuando voltee, Felipe salió detrás de ella, entrando al baño con su mamá y recordé el día que la encontré bañando, así que ese día se la estaba cogiendo en el baño pensé, no quise hacer mal tercio y ya no me involucre en lo que estuvieran haciendo dentro del baño, así que tomé mi ropa y me fui a mi habitación.
Actualmente estoy a nada de terminar mi carrera y aún sigo viendo con ellos, estos dos años y medio me lo he pasado de maravilla con la señora Rosalba y espero que aun cuando termine la universidad siga siendo así.
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