Como empezó mi exhibicionismo
Cómo empezó mi amor al exhibicionismo con mi hermano.
Mi nombre es Marianela, soy de Buenos Aires Argentina, es mi primer relato así que disculpen si tengo una mala redacción 🙂 Empiezo contándoles que tengo 24 años, mido 1,65 , tetas medianas, un culo grandecito, me gusta mucho exhibirme discretamente y que me vean desnuda me excita muchísimo.
Les voy a contar como empezó mi exhibicionismo y si les gusta les voy contando algunas cosas que fui haciendo después.
Esto pasó hace 3 años, cuando yo tenía 21 años y vivía con mis padres y mi hermano Emanuel, que en ese momento iba a la escuela.
Mi hermano había tenido algunas noviecitas, pero era virgen. Siempre tuvimos una relación normal con el, no éramos muy cercanos pero nos llevamos bien. Era verano, y a mi siempre me gustó andar por casa bastante suelta de ropa y me empecé a dar cuenta que mi hermano me miraba más de lo normal (supongo que se debe a que sus hormonas empiezan a hacer su trabajo) Pero no me molestaba, al contrario, me gustaba. Y por eso empecé a andar más seguido con ropa suelta, con tops o con shorts bastante cortos.
Un día que no estaban mis padres me fui a bañar. Empecé a sacarme la ropa y cuando ya estaba en ropa interior, me doy cuenta que Ema me está espiando por el agujero del picaporte (se había roto y no lo tenía, por eso quedó el agujero) Rápido me moví del ángulo de vista de mi hermano, porque desde que empezamos a crecer nunca me había visto en ropa interior, o eso quiero creer.
Cómo si no me hubiera dado cuenta que estaba ahí, le grité desde el baño diciéndole que tenía que acomodar el living antes de que lleguen nuestros padres, cosa de que se tenga que alejar del baño para responderme así yo «no me daba cuenta que estaba ahí».
No tuve respuesta, pero el ya no estaba en la puerta del baño, así que me terminé de desvestir y me metí a la ducha. No podía dejar de pensar en lo que había hecho Ema. Yo sentía una sensación rara, que me gustó y decidí que tenía que sentirla de vuelta.
Después de bañarme, salí del baño y me crucé con mi hermano.
Yo: Te hablé hace un ratito.
Ema: No te escuché, estaba con los auriculares.
Yo: Te dije que no te olvides de ordenar el living antes que lleguen.
El: Ya lo hice recién.
Me metí a mi pieza, cerré la puerta y empecé a pensar en cómo hacer para que el pueda verme más seguido. No se me ocurría como hacer, hasta que el me pidió mi cargador del celular porque se le había roto. Y ahí se me ocurrió.
El entraba 7:30 a la escuela, y yo entraba a trabajar a las 9, así que tenía un rato más que el para dormir. Así que le dije que se lo prestaba, pero que lo cargara de noche, y antes de irse a la escuela que pase a mi pieza y enchufe el mío. De esa forma, al ser verano, podía dormir con poca ropa y el me podía ver cuándo entre a mi pieza.
Ema aceptó sin pensarlo, y más sabiendo que yo tengo un sueño muy pesado y no me iba a despertar cuando entre.
Al día siguiente me desperté a las 6:30 y escuché a mi papá irse a trabajar. Me desperté a esa hora porque quería estar despierta y hacerme la dormida cuando Ema llegue. Siempre duermo desnuda, pero me daba cosa que me vea totalmente desnuda. Así que me puse una tanguita negra y un corpiño.
Se hicieron las 7:15 y no se sentía nada de ruido. Me estaba por dormir de vuelta pensando que no iba a ir a la escuela, hasta que escuché que abrió la puerta de su pieza y se metió al baño.
Ahí me preparé bien, me puse boca abajo para que vea bien mi culo y me hice la dormida.
Pasaron 2 minutos, entró a la pieza y prendió la luz. No pude verlo porque estaba de espaldas a él, pero estoy segura que se quedó mirando mi culo porque tardó en agarrar mi celular y ponerlo a cargar.
Mi corazón latía muy rápido y las manos me transportaban. Una vez que apagó la luz y cerró la puerta me desnudé y me empecé a masturbar pensando en lo que había pasado. Estaba súper caliente y ya estaba pensando en hacerlo de vuelta al día siguiente. Lo seguí haciendo por unos días y cada vez tardaba más en enchufar mi celular.
Mi papá salió de vacaciones en su trabajo y se iban una semana de viaje, nosotros no podíamos ir por mi trabajo y la escuela de mi hermano, así que decidí que esa semana me mostraría completamente desnuda. Le dije a mi jefe que estaba enferma y si me podía dar una semana para recuperarme y volver bien, lo cual accedió sin problemas debido a la buena relación que teníamos y yo siempre cumplía en el trabajo.
El primer día solos transcurrió normal, yo estaba buscando un buen momento para mostrarme pero no lo encontré, así que hice lo mismo que las noches anteriores, solamente que esta vez completamente desnuda.
Me desperté a las 6:30 solamente para que mi hermano me vea desnuda. Ya estaba desnuda porque así duermo siempre, así que me puse boca arriba, con las tetas al aire y mi conchita completamente depilada a esperar que llegue Ema.
Mi hermano cada vez más puntual llegaba. Eran las 7:10 cuando abrió la puerta de mi pieza y prendió la luz. Yo abrí muy poquito los ojos para que no se de cuenta y lo espiaba. El estaba totalmente perdido en mi conchita, no dejaba de verla. Después de unos minutos, que se me hicieron eternos disimular, agarró mi celular, lo puso a cargar y se fue a la escuela.
Me dormí un rato más y me levanté a bañarme. Cuando salí de la ducha escuché ruido en casa, así que me sequé rápido y salí del baño. Eran las 10 de la mañana y mi hermano ya había vuelto de la escuela. Normalmente él llegaba a casa tipo 1:30. Así que se me ocurrió que esa era una oportunidad para simular no haberme dado cuenta que el estaba y andar desnuda por la casa.
Busqué mis auriculares Bluetooth y me puse música muy fuerte, no podía escuchar nada que no fuera la música. Me desnudé toda y me puse a lavar los platos del día anterior. Cómo no venía empecé a hacer más ruido y a cantar como para llamar la atención. Yo estaba de espaldas a las habitaciones pero tenía una ventana en frente mío que daba al patio. Por el reflejo de la ventana ví que Ema salió de su pieza y se quedó parado a 3/4 metros de distancia. Salpiqué un poco de agua al piso a propósito y me agaché a limpiarla sin doblar las rodillas, dejándole mi culo totalmente a la vista de el. Termine de lavar los platos y vi que Ema se metió a su pieza de vuelta.
Yo estaba muy caliente y no quería terminar el show ahí. Así que me fui a mi pieza, con la puerta abierta y con los auriculares al máximo, y empecé a meterme los dedos y un dildo que tenía. Empecé a gemir cada vez más fuerte haciendo de cuenta que no había nadie en la casa. Seguramente el me estaba espiando, porque yo estaba de espaldas a la puerta. Después de varios orgasmos, estaba muy cansada, quería ir a bañarme de vuelta. Cuando salgo de mi pieza totalmente desnuda, me cruzo con mi hermano en el pasillo y me tapo lo que puedo con las manos. El da vuelta la cabeza rápido y aproveché para ver en su pantalón un buen bulto que se le notaba. Rápido me metí a mi pieza y le dije:
Yo: No sabía que estabas acá, hace cuánto llegaste?
Ema: Hace una hora más o menos.
Yo: Y dónde estabas?
Ema: Llegué y me fui a mi pieza hasta recién.
Yo: No saliste de la pieza en todo el tiempo? Estaba desnuda haciendo las cosas de la casa, por qué no me avisaste que llegaste?
Ema: Solo una vez fui al baño pero no te vi, solo te escuché en tu pieza.
Yo: Perdón, no sabía que estabas en casa. Me voy a bañar.
Me metí al baño y empecé a tocarme de vuelta sabiendo que Ema me estaba mirando por el agujerito de vuelta.
Por dos noches más dormí con la puerta de mi pieza abierta, la luz prendida y completamente desnuda para que el me vea cuando se vaya. Incluso uno de esos días dormí con un plug toda la noche y antes de que se fuera me puse boca abajo para que cuando entre a mi pieza lo vea.
La última noche solos tenía que ser la mejor. Ema había salido con sus amigos asi que aproveche y me saqué muchas fotos desnuda, de mi culo, concha, tetas, incluso grabé un vídeo metiéndome el dildo.
Eran las 3 de la mañana y todavía no había vuelto, ya que el día siguiente era sábado y no tenía que ir a la escuela.
Yo quería probar hasta donde llegaba mi hermanito, así que le mandé un mensaje:
«No podía dormir, así que me tomé unas pastillas para dormir, no te olvides de cerrar bien la puerta»
Me tomé las pastillas cosa de no sentir nada, puse una go pro escondida grabando lo que pasaba en la pieza y dejé mi celular desbloqueado con las fotos y videos que había hecho.
Cuando me desperté, lo primero que hice fue ir a mi computadora a ver el vídeo. Y lo que ví fue mejor de lo que me esperaba: Mi hermano entró a mi pieza y se quedó viéndome, y detrás de él entro un amigo suyo, que parecía de la misma edad. Se quedaron viéndome muy de cerca. Mi hermano agarró mi celular y empezó a ver las fotos y videos y se las empezó a mostrar a su amigo. Después de un ratito, se animaron a tomar mis tetas muy despacito y con cuidado. Y cuando vieron que no me despertaba me empezaron a tocar la concha entre los dos. Me sacaron fotos con sus celulares y después de un ratito me chuparon las tetas desesperados.
Antes de irse de la pieza Ema me dio un beso en la concha y su amigo en la boca.
Ese fue mi relato, espero que les haya gustado y que lo hayan disfrutad
o tanto como yo. Pronto estaré subiendo más.
Sencillamanre espectacular amiga, un tremendo relato, me hace recordar cuando yo hacía lo mismo, pero siempre buscando que mi hermanita me viera, me trajo gratos recuerdos ojalá continúes pronto con más relatos.
Ojalá tuviese una hermana como vos! Muy bien relato.