Con el "tio" (segunda entrega)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Bueno, continuamos así bastante tiempo, claro, no era todos los fines de semana.
Llego el día en que se casa y luego de su luna de miel, vuelve a la casa donde vivíamos.
Él tenia una habitación pequeña, que tenia solamente una puerta, sin ventanas. Si se cerraban las puertas (tenia dos que cerraban una con otra, son dos hojas) la habitación quedaba oscura, pero tenia unas cortinas que dejaban una penumbra durante buena parte del día.
Sucedió un domingo en la tarde. Era verano, habíamos almorzado y bebido algo de cerveza y hacia bastante calorcito, ambiente y en la sangre.
Yo ya había cumplido los 13 años y ademas de las practicas con el tío, me masturbaba con cierta frecuencia.
Como decía, el tío se fue a acostar con su nueva esposa, se despidieron y se fueron a la pequeña habitación. Yo quede leyendo una revista que había encontrado por el comedor. No era sobre sexo pero tenia algunas fotos bastante eróticas.
En un momento quiero ir al baño, paso por delante de la puerta de la habitación del tío, y siento que me llama suavemente. Yo lo había escuchado, pero como quería ir al baño seguí mi viaje…Cuando regreso y siente que paso me vuelve a llamar, esta vez un poco mas fuerte, me detengo y me pide que entre. Yo abro la puerta y en la penumbra los veo juntos, desnudos sobre las sabanas. Ella, cuando siente que abro la puerta, rápidamente se cubre con una de las sabanas. El tío me dice: "¿no querés venir a descansar con nosotros?", yo me emocioné y no voy a negarlo, me excité bastante.
No busque ninguna excusa para no aceptar, tampoco la tenía, entonces procedí a quitarme una remera y el short que tenia y con el pene ya algo excitado me acosté a su lado.
Aparentemente su mujer no quería hacerle sexo oral y luego comprendí que él quería que yo le demostrara que era algo que se podía hacer y no era nada desagradable. (Ella era muy tímida y reservada, de piel blanca, cabello negro pero corto y una figura muy agradable, pequeña de estatura y no le sobraba nada, quizá le faltara algo de tetas).
De inmediato él comenzó a decirle que viera como yo hacía y me invitó a que le hiciera sexo oral. Yo ya sabia como hacerlo, entonces me incliné sobre su pene, le corrí la piel para dejarle el glande al descubierto y comencé a meterlo en mi boca. Él gemía y ella comenzó a tocarme la cara, luego sentí como ella venía hacia mi, me comenzó a besar la cara, y llegó a separarme y me besó en la boca, quizá para sentir el sabor del pene. Lentamente ella se fue acercando al pene, ya bastante erecto y muy lentamente lo fue introduciendo en su boca.
El tío agarró su cabeza y comenzó a moversela para que el pene entrara y saliera de su boca. Yo, que estaba muy excitado comencé a tocarle los pezones, que los tenía muy duritos y ella entonces me levó una mano hacia su vulva, que estaba muy húmeda para que la masturbara.
En eso el tío larga la leche y ella la deja derramarse sobre el pubis del tío……
Yo continuaba masturbandola y sentía como el clítoris crecía con mis caricias. El tío le dice a ella: "¿no te gustaría que te la chupara?" y a ella le encantó la idea, entonces me agarro la cabeza con sus manos, me beso en la boca y la llevó hasta la vulva para que le hiciera un cunilingus.
De inmediato me di cuenta que estaba largando un jugo que yo lo lamia y lo tragaba, y le introducía la lengua por su vagina, ella gemía y yo me daba cuenta, y el tío también, de que ella gozaba mucho y esto era el comienzo de muy placenteras tardes de fin de semana.
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