Con mi sobrina
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Tyrant.
Hola a todos, me presento.
Soy de Ciudad de México, tengo 28 años.
Es mi primer relato que puedo publicar y es de una vez hace como… 8 o 9 años en que tuve una aventura con una de mis sobrinas.
Para empezar mi familia es una mezcolanza de culturas.
Por parte de mi mamá tenemos la ascendencia Neozelandesa y por mi papá la brasileña.
Y de esta última es donde puedo tener mi taco de ojo.
La familia de mi mamá es reducida en comparación con la de mi papá.
De ahí tenemos una prima que fue madre adolescente y tuvo dos niñas con diferencia de unos 3 años.
La primera Sandrushka y la segunda Rossaura.
Ambas son morenitas de buen cuerpo, Sandi es alta con pechos copa B, no muy acinturada pero con una cadera muy llamativa y unas nalgas muy bien formadas, dando honor al lado brasileiro.
Ross es mas menudita pero bien formadita, pecho muy paradito, cintura bien marcada y aunque no tiene tanta cadera como su hermana si tiene un par de nalgas muy antojables.
Yo soy mas grande que mi sobrina Sandi (la mayor) por un par de años, aunque casi nunca nos hablamos.
En una reunión familiar se dejó venir (jajajaja) una parte de la familia de mi papá, entre ella mi prima y sus hijas, ella no tiene marido.
Empezamos todos a platicar y tomar, recordando viejos tiempos y así.
Sandi ya estaba con unas copas de mas y me pidió que si podíamos ir a la azotea para ver las estrellas, ya que le gusta mucho todo lo relacionado a la astronomía.
En ese entonces mis padres estaban juntos por lo que la situación económica era muy buena y vivíamos en un pent house, por ende toda la azotea era nuestra para disfrutar.
Ambos nos subimos pero al ir por las escaleras Sandi tomó mi mano y no me soltó hasta que llegamos hasta la barda.
Mis papás habían construido una clase de casita de huéspedes para cuando llegara a ir toda la familia (y si que son un chingo) y una bodeguita de esas de plástico.
Sandi empezó a mirar el cielo y quería que nos sentáramos, así que de la bodega saqué una de esas sillas playeras para tomar el sol y como hacía un poco de frío, una cobija de esas infaltables en las familias mexicanas, con el león o tigre jajaja.
Estábamos acostados sobre la silla y tapados con la cobija cuando me empezó a preguntar por las constelaciones, no es por ser mamón pero se un poco sobre el tema y a ella le fascinaba, entonces vio algo en el cielo que le llamó la atención
Sandi- Y esa que estrella es?
Yo- Esa en realidad es Venus, le dicen el lucero de la mañana
Sandi- Pero es de noche
Yo- Bueno, Venus se ve al amanecer y al anochecer y por lo regular es la estrella mas brillante y a la que, en los cuentos y películas cursis, se les pide un deseo
Sandi- Voy a pedir uno
Cerró los ojos y empezó a reír
Sandi- Ya… crees que se me haga realidad?
Yo- No, la verdad no jajaja
Sandi- Ah que malo, pero yo si creo que se me haga
Yo- Pues ya veremos
En ese momento Sandi me giró el rostro y me plantó un beso en la boca, la verdad se lo seguí ya que pues no era nada malo, pero las cosas comenzaron a subir de intensidad cuando empezamos a masajearnos las lenguas, y nos dimos esos besos ricos y largos.
Mordiéndole el labio inferior, chupando su lengua.
Poco a poco comenzaron las caricias, y siguiendo mis instintos empecé a sobar su espalda, empezando a la altura de su omoplato y bajando poco a poco y como que la cosa no quiere.
Ella me detuvo cuando estaba en su cintura.
Sandi- Sabía que se haría realidad mi deseo
Yo- Deseabas besarme?
Sandi- Si, bueno, era parte… la verdad me gustas mucho tío.
De un tiempo para acá empecé a verte no como mi tío, sino como otra persona.
Me siento mal pero me gusta
Yo- Pues tu estas bastante bien sobrina, la verdad si te soy sincero, cada que nos visitamos, aprovecho para ver ese rico culo que tienes
Sandi- Jajaja pues igual es contigo, me dan ganas de apretarlo
Yo- Pues vamos a apretarnos todo
Mi sobrina empezó a reír pero de inmediato volvimos a los besos, ella bajo su mano hasta mi trasero, no es por presumir, pero si esta bien formado.
Y comenzó a acariciarlo, obviamente hice lo propio y comencé a acariciar esas nalguitas que tantas veces me provocaron una erección.
Los besos seguían con mas intensidad y en un momento dado, metí una de mis manos por debajo de su playera y acaricié sus pechos por encima de su sostén, ella gimió levemente y eso me prendió bastante.
Sandi- Te gustan mis tetitas tío?
Yo- Claro que si, están duritas y caben en mi mano, hasta puedo agarrar las dos con una mano
Y para comprobarlo tome sus dos pechos con mi mano y se los junte, ella empezó a moverse como queriendo masturbarse
Sandi- Ay siiii, apriétamelas
Al oír esto aproveche para meter mi mano debajo de su sostén y acariciar uno de sus pezoncitos, que se sentía duro, empecé a acariciar con la yema del dedo y eso hizo que se le parara mas y que se le pusiera chinita la piel de su seno.
Ella sola se levantó la playera y se bajó el brassiere… la mejor imagen fue ver sus pechos duritos, firmes pero suaves y esos pezoncitos de un color cafecito claro y una aureola casi nula.
Sin dudarlo comencé a chupar ese par de pechos, pasaba mi lengua por su aureola y pezones, le daba pequeños mordiscos y lamía todo su pecho
Sandi- Ay si tíoooo… chúpame las tetas.
Yo- Están bien ricas tus tetitas corazón, tan duritas
Sandi- Siiii, me gusta que me las chupes, jálame los pezones… anda, eso me gusta
Obediente yo, tome sus pezones entre mis dedos índice y pulgar de cada mano y comencé a jalar con cuidado, ella solo gemía “mmmmmm que rico, así, lentooo… aaaaaahhhh”
Volví a chuparle sus pechos y mis manos bajaron hasta sus nalgas, acariciándolas primero y después ya dándole apretones descarados y salvajes.
Ella se sentó sobre mi y empezó a hacer movimientos de copulación
Sandi- Tíooo… mmmmm… apriétame las nalgas
Yo- Ay Sandi, que ricas nalgas tienes
Mientras le agarraba las nalgas, ella se desabrochaba el pantalón, y al terminar con el suyo, empezó a bajarme el cierre.
Rápido metí una de mis manos por debajo de su pantalón y empecé a agarrar su nalga, la muy putita traía un calzón tipo tanga y pude sentir toda la piel de sus nalgas duras, se veía que de menos salía a correr (después me entere que era por el ciclismo) y estaban bastante bien formadas.
Esas nalgas me ponían a mil y ella lo sabía.
Como pudimos nos acomodamos de costado, pero viéndonos de frente.
Empecé a bajarle el pantalón y a meter una mano por delante y con la otra apretar su nalga mas próxima.
De tan sólo tocar su pubis encontré la sorpresa de que casi no tenía bello y sin problemas llegué a su rajita, comencé a frotarla y ella gemía de gusto, metí un poco mas los dedos y encontré su clítoris y seguí hacia sus labios.
Sandi- Ay tío, que rico me masajeas la puchita, aaaaaahhhh….
Mmmmm… que rico me masturbas…
Yo- Sandi, que puchita tan mojadita tienes, apenas te toco y ya estas toda mojada
Sandi- Aaaaaahhhh… es que soy muy sensible… mmmmm… anda, dedeame…
De nuevo todo bien obediente empecé a meterle el dedo medio en su puchita, estaba apretada como ninguna, al parecer no era virgen pero tampoco estaba muy usada.
Adentro su calor, sus jugos, todo se sentía delicioso, y mientras mas la dedeaba mas se movía como queriendo copular.
No se en que momento pasó pero mientras la dedaba con mi otra mano le estaba acariciando la entrada de su ano y ella empezó a gemir y a respirar entrecortada y sin darme cuenta ya había sacado mi verga con su mano
Sandi- Ay tío, la tienes bien dura
Yo- Pues con semejante espectáculo quien no?
Sandi- Ay que rico se siente, toda calientita y suave…
Yo- Igual tu puchita, apretada y mojada…
Sandi- Es tuya tío… mmmmmm… síguela dedeando que le encanta estar ensartada… aaaaahhhh
Yo- Si? Qué putita es esa pucha… si pudiera la ensartaba con mi verga
Sandi- Hazlo tío… cógeme… por favor, hazme tuya
Yo- No puedo corazón, no tengo condón.
Sandi- No importa tío… aaaaahhh, dámela así… quiero sentir tu carne… andaaaaa…
Yo- Te puedo embarazar
Sandi- No te preocupes… mmmm… aaaahhhh… solo cógeme… quiero que me hagas realidad mi deseo… no quieres cogerme?.
no quieres meterme tu verga en mi puchita?
Yo- Claro que si, pero no quiero que termines preñada o algo así
Sandi- No va a pasar, hazlo… por favor tío… métemela…
La verdad si lo pensé, pero la calentura y la excitación era tal que pues no me pude contener y le pedí que se volteara, tantito para que fuera mas fácil y tanto para ver esas ricas nalgas tragarse mi verga.
Ella se volteo dándome la espalda y sacando ese culo.
Con una de mis manos le separé las nalgas y con la otra encamine mi verga hacia su entrada vaginal.
Cuando sentí lo mojado de su puchita empecé a acariciarle los labios con el glande, ella lanzaba pequeños gemidos
Sandi- Yaaaaaa….
Mmmmm….
Tíooooo… métemela yaaaa
Yo- La quieres?
Sandi- Siiii, házmelo yaaaa
Yo- Pues ten putita
De una se la dejé ir completa, hasta el fondo… esa puchita parecía una mano apretando mi verga.
Estaba demasiado justa y me estaba excitando de sobremanera, empecé a bombear como loco, fuera de mi y mientras con una mano le apretaba una nalga con la otra le acariciaba sus tetitas.
Sandi- Ay así, así… dámela toda… mmmm… que rica verga… que rico me coges tío… aaaaahhhh anda métela hasta adentro, aaaaaahhhh… si, así… cogete a la perra de tu sobrina… anda, enseñale como se cogen a las putas
Yo- Ay sobrina, que rica… me estas apretando delicioso… aaaahhhh… que ricas nalgas tienes, tu pucha es divina
Sandi- Si tío? Te gusta mi pucha mojada? Aaaahhh que deliciosa verga… dame duro anda, cógeme como si fuera una puta… anda, dame toda esa verga… dame duro… mmmm…
Yo- Toma putita, toma tu verguiza….
Aaaahhhh aprieta esa verga, anda….
Eres una zorrita
Sandi- Siiiii… lo soyyyy… pero solo para ti tío… que rico me lo haces
Empecé a darle con todo, por un momento pensé que romperíamos la chingada silla, pero por suerte no sucedió.
Le pellizcaba sus pezones y ella gemía mas duro, el escuchar sus nalgas chocar con mi pelvis fue la gota que derramó el vaso… o en este caso la verga.
Ya sentía que no podía mas y se lo hice saber
Yo- Ay sobrina… me voy a venir.
la tienes tan apretada que me vas a hacer correrme
Sandi- Espera tío, no te vengas
En eso con una de sus manos alcanzó mi verga y se la sacó de su pucha y empezó a jalármela, aprovechando que estaba llena de sus jugos y rozando la cabeza de mi verga con sus labios vaginales hasta que ya no pude mas y me corrí a chorros, parecía que llevaba años sin coger me vine como en 8 lechazos que le cayeron casi todos en su rajita.
Mientras me corría me la seguía jalando y se sentía muy cabrón, tuve que quitarle la verga de su mano y los últimos dos lechazos le cayeron en su nalga.
Ella con su mano tomo el semen de su nalga y se lo esparció
Sandi- Tíoooo… que venidota te aventaste
Yo- Ay Sandi, si supieras cuantas veces había querido ver ese culo así, empinado y súmale tu puchita tan apretada y rica
Sandi- Ay tío, la verdad que rico lo haces… sino grité fue porque no quería que nos escucharan
Yo- Hablando de eso, vamos a bajar, sino van a sospechar que algo pasa, ya llevamos un rato por acá
La verdad es que aunque no lo parezca, sólo habían pasado como 30 minutos, pero yo en mi total proyección de semental, pensaba que había pasado como una hora o mas.
Mi sobrina se levantó y empezó a escurrir el semen de su rajita y rápida se subió su tanga-calzón y luego luego su pantalón.
Eso me volvió a prender un poco pero pues ya no era momento.
Nos arreglamos y bajamos de nuevo a la reunión donde, como repito, no había pasado tanto tiempo pues casi ni notaron la ausencia.
Seguimos platicando y uno de mis primos, con mi hermana y mi otra sobrina, estaban jugando videojuegos en mi cuarto.
Sandi y yo nos unimos a ellos y nos sentamos en la cama… no se si fue por la acción y porque de verdad estaba cansado pero al poco rato ya me estaba durmiendo, igual ella.
Afortunadamente ya también los demás andaban cansados y decidieron irse a dormir.
Mi hermana compartiría cuarto con mis sobrinas y yo con mi primo, pero como vieron que los dos nos estábamos durmiendo y sin sospechar ni la mas mínima cosa, nos dejaron en mi cuarto.
Sandi medio se acomodó y se tapó sin quitarse la ropa y yo solo me quite la playera.
Lo bueno es que alcancé escuchar a mi sobrina Ross decir que se iban a quedar todo el fin.
Voltee a ver a Sandi con picardía y ella me lanzó una sonrisa de cómplice y nos quedamos dormidos “apenas es viernes” pensé para mi.
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