Corte de pelo con final feliz 3ra y última parte
Después de aquella tarde, cada vez que podíamos llevábamos a cata a la choza a pegarle unas cogidas bestiales, ya con más practica la sesiones era cada vez mejor, hasta que un día, me cruzo con Pochi… Pochi: hola, tanto tiempo, no volviste mas Yo: .
Corte de pelo con final feliz 3ra y última parte
Así termino el relato anterior
Esa tarde la volvimos a coger un par de veces más, a veces solos y otras en grupo, todos probamos sus agujeros. Cuando ya no podíamos más Martin trajo un trapo húmedo la limpiamos un poco para sacarle los lechazos, la volvimos a vestir y se fue.
Continuemos…
Después de aquella tarde, cada vez que podíamos llevábamos a cata a la choza a pegarle unas cogidas bestiales, ya con más practica la sesiones era cada vez mejor, hasta que un día, me cruzo con Pochi…
Pochi: hola, tanto tiempo, no volviste mas
Yo: hola Pochi, es que aún no me creció el pelo
Pochi: pero vos sabes, que no hace falta el corte de pelo jajaja
Yo: además, tampoco cuanto con dinero últimamente
Pochi: mentiroso, te estas cogiendo a mi hija, piensas que no me iba a enterar
Me quería morir, encontrarme descubierto no me lo esperaba, no sabía que decir, no me salían las palabras de la boca
Pochi: todo bien no pasa nada, ya te dije que a ella le gusta, y así está tranquila y no me jode cuando estoy con clientes. Pero me gustaría que pases cada tanto
Yo: apenas tenga algo de dinero voy a ir
Pochi: pero no vengas solo, trae a tus amigos, porque ellos también se la cogen. Igual les hago precio
Pochi: no tengas miedo, nadie obliga a nadie, a mi hija le gusta y por eso va con ustedes, eso sí, nada de obligarla ni lastimarla.
Yo: no obvio, jamás la lastimaríamos ni haríamos nada que no tenga ganas de hacer.
Después de eso nos despedimos con la promesa de ir con mis amigos en forma de compensación.
Esa misma tarde me junté con mis amigos y le comenté lo que había ocurrido, medio se asustaron, tenían miedo de tener problemas.
Yo: no pasa nada, solo hay que ir cada tanto, tener algo con ella pagarle, el que quiere coger coge, el que quiere solo la chupada paga por eso. Si bien no dijo que no cojamos a la nena, creo que sería justo ir poner unos mangos cada tanto, así podemos coger con la nena sin problemas.
Estuvimos todos de acuerdo, coordinamos para X día de la semana para ir, nos presentamos puntuales nos atendió Pochi siempre con buena onda, nos hizo pasar y charlamos unos min.
Pochi: chicos que gusto verlos, hacía tiempo que tenía ganas de que vinieran, quieren un corte de pelo o vamos al grano.
Nosotros nos mirábamos unos a otros, nadie hablaba, el aire se cortaba con cuchillo, eran los nervios de estar todos juntos frente a ella y el saber que nos cogimos a la nena.
Pochi noto el nerviosismo y para romper el hielo dijo…
Pochi: chicos, como le dije a él, ya se lo que hicieron con mi hija, no pasa nada, si a ella le gusta todo bien, pero cada tanto me vienen a ver a mi les hago un descuento porque me gusta la lechita de nenes. ¿Entonces que va a ser hoy?
Yo: chupada de pija para mí, supongo que para ellos lo mismo
Y asintieron todos con la cabeza, nos hizo para en forma de circulo y ella se puso en el medio, nos bajamos los pantalones y nos empezó a chupar la pija a todos, un rato a cada uno. Iba intercambiando cuando tenía nada mientras a otros le hacia una paja, por momentos se metía dos en la boca.
Creo que, si alguien nos veía, nuestras caras de placer eran de un placer eran un poema, teníamos los ojos en blanco como el maestro PO (por la serie de los 80’ kung Fu). Lo que chupaba pija esa mujer era increíble, como ya comenté nunca me toco alguna igual. Es muy difícil de describir lo que hacía con su boca.
Además, nos iba diciendo cosas como…
Pochi: espero que estén cargaditos chicos, tengo mucha hambre, denme lechita calentita
La verdad no aguantamos mucho, fuimos acabando uno a uno en su boca, la muy puta no desperdicio ni una gota. Nos dejó descansar unos minutos mientras nos seguía hablando…
Pochi: chicos espero que tengan más, porque con eso no me alcanza, ahora les traigo algo de tomar para que recuperen fuerza y vamos por la segunda ronda.
Nos trajo unos vasos con gaseosa, nosotros no emitíamos palabra, era muy imponente y nosotros nenes, solo obedecíamos órdenes.
No habría pasado ni 30 min que Pochi se fue directo a uno de los chicos y le trago la verga lo mismo hizo con los otros, y vuelta al círculo para que nos chupara la verga, estábamos en plena faena y de repente aparece cata. Nos mira a todos y dice…
Cata: sentir rico, sentir rico
Pochi se la quería sacar de encima, la mando a la habitación, pero no hacía caso, repetía sentir rico, sentir rico. En mi caso ya sabía cómo era el tema y que de un momento a otro se iría, pero mis amigos se querían morir con la situación.
Pochi largo las vergas, a agarro del brazo y la quiso llevar a la habitación, pero no, no había caso…
Cata: sentir rico, mama, sentir rico. Casi lloraba. Solo decía, mama, sentir rico, sentir rico mama
Pochi volvió hasta donde estábamos y de directa…
Pochi: chicos, yo sé lo que hacen con cata y está todo bien, hoy esta súper caprichosa y no me hace caso. Se animan a hacer algo con ella delante mío. No les voy a cobrar, solo lo que habíamos acordado.
Nos miramos entre nosotros y asentimos con la cabeza. Solo quedaba ver quien iba con quien,
Yo: me quedo con vos, y dos de ellos que vayan con cata (la verdad que quería probar a la jovata)
Bueno, demás está decir que siguió con su terrible chupada de pija, pero esta vez me habilitó a cogerla…
Pochi: hoy por ser un día especial te voy a dejar cogerme y no te voy a cobrar por eso, además la situación me tiene caliente y necesito una verga en mi concha.
Dos de los chicos se quedaron con cata, uno le cogía la concha y al otro le chupaba la pija, yo me fui con Pochi a un costado con el restante. Se puso en cuatro…
Pochi: dale papi, métemela en la concha, estoy caliente…
No me hice esperar como era obvio, apunte a su agujero, y adentro de una, la verdad que fue bastante decepcionante tenía una cacerola por concha, había pasado un palo de luz por ahí jajaja.
Acostumbrado a la conchita divina y el culito apretado de cata, esa concha dejaba que desear, lo bueno es que ella le puso mucha onda, sabia moverse y apretarme la pija con la concha, eso suplió lo grande que la tenía, no voy a decir que no me gusto, pero cuando comes caviar, ya no quieres mortadela jejeje. A mi otro amigo Pochi le chupaba la pija como solo ella sabía hacerlo.
Yo: Pochi, ¿te la puedo meter en el culo?
Pochi: normalmente no me dejo, o cobro más caro, pero dada la situación, dale
Ahí fue otra cosa, si bien no me costó nada meterla, porque de lo mojada que tenía la concha fue lubricante suficiente, el culo si lo tenía más prieto, eso sí me daba gusto.
La habitación era un cumulo de gritos de placer, suspiros, sentir rico que siempre repite cata, barbaridades como te gusta puta como te cogemos, etc.
Sinceramente no estoy seguro de si Pochi gozaba o solo fingía como con los clientes, pero poco nos importaba. A esa edad solo te interesa acaba, y seguí cogiendo.
Luego intercambie lugar con mi amigo, ahora era el que la cogía y a mí me hacia una de sus chupadas magistrales, hasta…
Pochi: chicos, quiero que los dos me la metan en la concha así los siento mejor…
Con mi amigo nos miramos y no teníamos ni la más pálida idea de lo que nos pedía…
Amigo: pero ¿cómo es eso? ¿Cómo se hace?
Pochi: perdón chicos, me olvide que ustedes son tiernitos, recién arrancan, hay dos formas, una se ponen de frente entre ustedes cruzan las piernas entre sí para que se acerquen las pijas o la otra es que uno se acueste en el piso me la mete, y el otro desde atrás.
Elegí la segunda opción, la verdad que andar rosando los sables no me causaba mucha gracia, pero era algo nuevo y siempre hay que probar (mientras sea como activo, no me cierro a nada). Mi amigo se puso abajo, Pochi se ensarto sola se recostó cobre él y yo desde atrás se la metí. Ahora si era otra cosa, era todo más apretado, entre el roce de la concha y la pija de mi amigo el placer era superior.
Yo: boludo, avísame antes de acabar, no me quiero llenar la verga de tu leche, yo hago lo mismo.
Sin más palabras le empezamos a taladrar la concha, creo que esta vez sí estaba gozando, tenía la concha llena de pija, era imposible que no o sintiera.
Pochi: si chicos, me gusta, sigan así, llénenme de leche caliente, que lindo es coger con pendejos, a tienen durísima…
Yo: ¿ahora te gusta mami?
Pochi: si, si, sigan, no paren hasta llenarme de leche
No sé ni cuánto tiempo había pasado, cuando estaba por acabar, la saque, se la metí en el culo, y se lo llené de leche. Mi amigo duro un rato más, y le lleno la concha. La puta chorreaba por los dos agujeros.
Los otros dos que estaban con cata, ya habían terminado antes y disfrutaban del espectáculo que les dábamos.
Cuanto terminamos todos, nos tiramos en el piso a descansar y recargar las pilas, las dos estaban contenta.
Cata: mami, sentí rico, sentí rico
Pochi: que bueno hija, ¿quieres más?
Cata: si mami, quiero sentir rico
Pochi: ya la escucharon chicos, cuando quieran….
Yo: danos unos min que recuperamos y te la atendemos
En la habitación había olor a transpiración y sexo. Nos trajo unos vasos con gaseosa que agradecimos y como pasa a esa edad, no pasó nada de tiempo para estar a palo de nuevo.
Intercambiamos lugares, ahora nos tocaba cata…
Mi amigo se acostó boca arriba en el piso y llamo a cata…
Amigo: venia cata, sentaste aquí, así sentís rico
Cata como si se tratara de un juguete o algo que le gustaba, fue contenta y se ensarto solita y empezó a saltar sobre la verga de mi amigo.
Cata: sentir rico, sentir rico
La tuve que parar para acomodarla, la empuje despacio hacia adelante, mientras mi amigo al seguía cogiendo, le escupí bien el culo, me ensalive la pija, se la apoye en el ojete, un poco de presión y entro hasta la mitad, esta vez no costo como la primera vez, ya lo tenía usado.
Me quede quieto dejando que ella sola se la terminara de clavar mientras se movía sobre la poronga de mi amigo, cada movimiento se la metía un poco más hasta que la tenía toda adentro hasta el moño.
Ese culito prieto me tenía loco, me apretaba la verga como un guante, solo me concentré en taladrarle el ojete, perdí de vista a los otros chicos que estaban con Pochi. Solo escuche decir…
Pochi: bueno chicos, prepárense que hoy van a aprender varias cosas
Y me dedique a lo mío, le pegaba chirlos en las nalgas, la pendeja gozaba como una bestia, le gustaba la verga más que comer, como siempre, en su lenguaje escueto solo decía, sentir rico, sentir rico
Mi amigo estaba incómodo y me pidió cambiar de lugar, pero no, ese día ese culito era solo mío.
Amigo: dale boludo, cambiemos
Yo: no, si quieres Salí de abajo y que te chupé la pija, este culo es solo mío hoy
Amigo: ok dale, ya me duele la espalda
La pare a cata, tenía cara de desilusionada, como si le hubieran sacado un juguete la tranquilice diciendo…
Yo: tranquila cata, ahora seguimos, y sentís rico
Solo asintió con la cabeza, mi amigo se fue adelante le puso la pija en la boca y cata se prendió como cordero
Me agache detrás de ella, y otra vez hasta el moño, ya tenía las nalgas coloradas de los chirlos, pero se ve que le gustaba porque se movía solita, se ensartaba sola. Quise probar algo nuevo, se la saque del culo y se la metí en la concha, y luego volví al culo. Con el tiempo descubrí que algunos le dicen la del talabartero, un rato por cada agujero jejeje
Ya había perdido la noción del tiempo, lo único que importaba era coger a esa nena cuando estuve a punto de acabar, apure el ritmo y le llene el culo de leche, fueron 5 lechazos largos, todos hasta el fondo. La deje adentro hasta que se salió sola y me tire en el piso a descansar.
Esa tarde, nos la pasamos cogiendo, a veces a cata, otras a Pochi, ya no importaba nada, a cuestión era coger, no importaba como, ni con quien sea ya daba igual.
Con Pochi cada tanto íbamos los cuatro a que nos chupe la pija y darle guita, como compensación de que nos dejara coger a cata cuando teníamos ganas (era todos los días obvio) pero dependíamos de que nuestro amigo tuviera la casa sola e ir a la choza. Cuando se daba la oportunidad, alguno de nosotros buscábamos a cata, solo le decíamos sentir rico y ella nos seguía para deslecharnos.
Fuero algo así como 3 años que seguimos con la rutina no siempre íbamos todos y con el tiempo como que perdimos el interés, algunos se pusieron de novio, otros cogían con otras u otros como mi caso jejeje (le entraba y le entro hasta un bombero embalsamado) si son chicos mejor, con hombres grandes ya no.
Ellas siguen viviendo en el mismo lugar, Pochi se jubiló literalmente además que ya tiene como 75 calculo, no creo que nadie tenga ganas de pagarle jejeje. Y de cata supimos que cuando tenía 15 quedo embarazada de un tipo de barrio de unos 48 años, se armó terrible revuelo, se enteró todo el mundo y se tuvo que ir el tipo.
Hasta aquí la 3ra parte y final del relato, espero les haya gustado y como siempre digo…
Si me quieren escribir, @eltecnico en telegram, [email protected] no importa la edad que tengan, charlo con todo el mundo. Mientras nadie obligue a nadie, todo está permitido. Total, solo es charlar
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