DAVID Y SU HIJO ALBERTO 3
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por angelblack.
No quería llegar a casa, no quería ver a mi hijo, pero ellos me esperaban para el desayuno, por lo cual tuve que llegar.
Pero que sorpresa me llevé, mi hijo actúa como si nada hubiese pasado, todo normal: lo que me hizo estar mas tranquilo… y prometí olvidar lo ocurrido.
Los días pasaron, todo era normal en nuestras vidas, pero mi hijo Alberto se hiso más apegado a mí… y como padre siempre tenía tiempo para todos.
Aunque tenía ciertas dudas, deje las cosas en paz, pues supuse que era mí imaginación, así Qué cerré ese capitulo y deje las cosas como estaban.
Cierto día, monte a mis hijos en sus respectivos caballos, el más chico tuvo que irse conmigo pues aun es pequeño, como es costumbre por la tarde vamos a reunir el ganado para que en la mañana sean ordeñadas.
Luego de terminar con la tarea, los niños querían pasar al río a darse un chapuzón… pues no tuve ningún inconveniente, así que al llegar todos desmontados dejando a los a caballos a un lado, los niños corrieron rápidamente a la orilla del río, como si fuera competencia se desnudaron rápidamente y se metieron al agua.
Los niños jugaban, disfrutando de la profundidad del rio, mientras yo los observaba sentado a la orilla….
Mi hijo menor me llamo, diciendo que yo entrará con ellos al agua pero le dije que no.
Pero los demás también insistieron.
Alejandro: anda papi, métete con nosotros…
Alberto: siiii papi….
el agua está rica….
Yo: no, yo mejor me quedo aquí viéndolo….
Alberto: ven a nadar con nosotros papi….
No tengas miedo…
Alejandro: si papi, juega con nosotros….
Ante la insistencia de ellos, me desvestí quedándome con bóxer, porque no podía andar completamente desnudo como ellos y entre al agua, los 3 al verme entrar corrieron hacia a mí derribándome, me sumergí junto con ellos y empezamos a jugar los cuatro, montándose sobre mí tratando de sumergirme, yo me los quitaba de encima y los tiraba al agua y así.
Un agradable momento para los cuatros….
Mi hijo Sebastián se tiro sobre mí, Aferrándose con sus manos mi cuello, sus piernitas alrededor de mi cintura, Alejandro se puso detrás de mí sujetándose con sus manos de mi garganta y con sus piernas rodeo mi espalda… mientras que mi hijo Alberto trataba de separarlos de mi…
Al ser mi hijo pequeño Sebastián lo abracé fuerte, para que no fueran a quitarlo….
Oh oh, mala idea, empezó a dar de saltos sobre mí verga, que estaba flácida pero poco a poco empezó a ponerse dura sobre mi bóxer Como una estaca.
Libere a Sebastián para que no se diera cuenta.
Pero Alberto inmediatamente ocupó su lugar.
Todos reíamos, yo estaba sentado sobre la arena, el agua me daba hasta el pecho, entre el forcejeo mi brazo derecho sujete a mi hijo Alberto, sintiendo su suave piel, mi mano se fue deslizando hacia abajo, colocándola sobre sus pequeñas y desnudas nalguitas…
Mi dedo medio sobaba su pequeño agujerito mientras iba enterrándolo dentro de él, no cabe decir que para este momento mi verga estaba durísima como roca, Sebastián se canso de jalar a Alberto por lo cual se fue para atrás donde estaba Alejandro e intento separarlo de mi.
Entre juego y juego el agua se volvió turbia por eso me anime a bajar mi bóxer por delante liberando un poco mi verga, acomode Alberto sobre mi verga, pegándolo más a mi, ahí sentí sobre mi estomago su pequeño penecito que estaba duro.
Mientras Sebastián intentaba quitar Alejandro de mi, yo intentaba meterle la verga a Alberto, el muy canijo al sentir mi verga haciendo presión para entrar en el, empezó a cabalgarme, riéndose con sus hermanos… fue raro cuando sentí que mi verga empezó entrar con algo de dificultad sin lograr meter por completo la cabeza.
Yo estaba muy caliente, de no ser porque estaban ahí mis otros hijos me Detuve, no era el lugar indicado, podía ser descubierto así que todo esto debía terminar ahí….
Pero Alejandro se soltó de mi cayendo al agua, por lo cual Sebastián se aferro a mi espalda inmediatamente, ambos riendo a carcajadas, Alejandro dio la vuelta y se paró frente a mí, intentaría quitar a Alberto y si lo lograba el ocuparía su lugar y podría darse cuenta de mi gran erección que estaba fuera de mi bóxer .
Sujete fuerte a Alberto con mis brazos su espalda, Alejandro lo tomo de las axilas intentando levantarlo, pero lo soltó y yo al estar tirando de el hacia abajo con fuerza, su peso cayó sobre mi verga enterrando la cabeza completamente en su culito….
Alberto se quejo del dolor pues, entre sin aviso y sin lubricación…
Alberto: aaayyy….
Yo: ¿paso?
Alberto: me dolió….
aaaayyyy.
….
(Intentando zafarse de mi)
Yo: tranquilo, quédate quieto… (no deje que se escapara)
Los niños se quedaron quietos al escuchar a su hermano quejarse….
Alejandro: ¿Qué te paso? ¿estás bien?
Sebastián: papi, ¿Qué le pasó Alberto?
Yo: nada, solo que se golpeó conmigo, pero ya paso…
La cabeza entro en él, llame a Alejandro para que intentará apartarlo de mi, el cual acepto inmediatamente….
Lo que quería era que moviera a su hermano para disimular lo que había pasado.
Intento un par de veces sin lograr quitarlo, entonces se me ocurrió algo…
Yo: haber Alejandro y Sebastián ¿vamos a jugar a encontrar la roca?
Alejandro: siii… pero, Alberto no va a jugar con nosotros?
Sebastián: si papi, el porqué no juega?
Yo: va a jugar también, pero quien pierda de ustedes dos, entrará Alberto… de acuerdo…
Tome una roca y la lance un poco lejos, eso me daría algo de tiempo, los niños salieron a buscar la roca donde había caído, llevé mi mano Hasta mi verga y empecé a masturbarme sin sacarle la cabeza de mi verga a mi hijo.
En ocasiones tomaba su pequeña cintura y lo hacía cabalgarme, quería entrar más en el pero a falta de lubricación no podía, temía lastimarlo.
Mientras mis hijos buscaban la roca dentro del agua, mi mano se movía rápidamente sobando mi verga de arriba hacia abajo….
En pocos minutos me mordí los labios para ahogar mi gemido que anunciaba mi descarga Que guardaban mis bolas, termine dentro de Alberto.
Cuando termine de correr me hasta la última gota, saque mi verga del culito de Alberto que aún seguía dura, quería dar batalla nuevamente… pero no aquí ni en este momento, mandé a mi hijo a jugar con sus hermanos, mientras yo me saque toda la arena del bóxer, me salí del agua y camine para ponerme mi ropa.
Cuando ya estaba listo, llame a los niños para que se vistieran , mientras yo fui por los caballos, luego partimos a casa….
Por la noche me di una ducha para dormir fresco, con toalla en la cintura fui a la habitación, seque el resto de agua que había en mi cuerpo, me puse una trusa blanca , prendí la tv, apague las luces y me tendí en la cama.
Más tarde La puerta se abrió muy despacio, una pequeña silueta apareció, prendió la luz, Cerré mis ojos haciendo el dormido, se acercó a mí muy despacio, se quedó quieto observándome, abrí un poco mis ojos para ver que hacía, estaba parado ahí sin hacer nada, llevaba puesta una camiseta y solo su pequeño bóxer.
Luego de unos minutos de estar pensando, se ánimo hacer lo siguiente: su mano empezó a tocar mis pelos del estomago, fue bajando la mano Hasta ponerla sobre mi paquete que estaba en reposó.
Empezó a sobarlo sobre la tela, sentía su pequeña mano apretar mi miembro, yo trataba de contenerme para no tener una erección, pero fue en vano Alberto ante el insistimiendo de mi hijo, poco a poco mi verga empezó a despertar y se acomodó hacia el lado derecho de mi entrepierna.
Yo no me movía, quería ver Hasta donde iba a llegar mi hijo, por su parte el seguía tocando mi verga que levantaba parte de mi trusa, quería ser liberada de su prisión y empezar a dar batalla.
Sabía que era Alberto, por lo tanto lo deje hacer lo que quisiera….
Se subió a la cama.
Separo mis piernas y se acomodó entre ellas.
Puso sus manitas a cada lado de mi trusa y con algo de fuerza tiro de ella, dejando a su vista mi hombría completamente dura.
Era la primera vez que veía mi verga, lugar de donde de donde el provenía , se quedó viendo mis grandes bolas, con su mano las empezó a tocar sintiendo su consistencia su curiosidad lo estaba llevando hacer eso.
Dejo mis bolas y ahora sujeto mi verga con su pequeña mano y con la otra mano tocaba mi bello púbico que siempre los tengo recortados.
Acercó su cara para ver más de cerca sin perder ningún detalle, oh dios….
Respire profundamente cuando su pequeña lengua empezó a pasar la cabeza de mi verga, luego abrió la boquita para ir comiéndose poco a poco mi herramienta dura….
Mi respiración se aceleró, mis gemidos eran en silencio….
Era la primera vez que me mamaba la verga mi hijo, sabía cómo hacerlo porque yo lo estaba disfrutando, su pobre boca se abría lo más que podía para tratar de dar paso a mi gran pedazo de carne, quería tomarlo de la cabeza con mis manos y cogerlo por la boca, pero no era el momento aún, mejor seguirá disfrutando de su deliciosa boquita a su estilo de mamar.
Su saliva se escapaba por la comisura de sus labios mojando mi verga, se detuvo por un instante, luego se bajó de la cama, ¿esto se había acabado? No puede ser, ¿apoco ya se va? Quería detenerlo para que siguiera chupándome.
Mientras el estaba de espalda rascándose la pierna me baje la trusa rápidamente hasta mis rodillas para que se animara a chuparme la verga nuevamente, cuando volteo se quedó viendo mis grandes piernas y yo hacia que mi verga se moviera sola para animarlo a volver, Pero mi sorpresa fue otra, se quitó el boxer y volvió a subirse a la cama.
Mi verga soltaba líquido transparente, puso saliva en su culito, luego puso saliva en la cabeza de mi verga, se monto sobre mí con sus manos colocó la cabeza en la entrada de su agujerito, dándose pequeños sentones, yo sentía como su agujerito se iba dilatando poco a poco para recibirme en el.
Estuvo haciendo eso por unos minutos hasta que por fin se sentó un poco mas fuerte, haciendo que su hoyito se abriera, ahí pude entrar un poco y el lo noto.
Por eso volvió hacer lo mismo con un poco mas de fuerza entre en él, el se quedó quieto sin salirse, luego empezó a bajar un poco más muy despacio pero sentía como mi verga iba entrando en su interior, hasta lograr tener casi media verga dentro, respiro profundo y se quedó quieto….
Podía sentir como intentaba cerrar sus culito apretando mi verga.
Me moví un poco, Hundí con fuerza mis nalga en el colchón, luego me impulse hacia arriba para que sintiera como mi verga se enterraba un poco más, quería que el me cabalgara, que me diera pequeños sentones, que el controlará sus movimientos… este niño no era la primera vez que hacía esto… alguien le había enseñado, yo lo descubriría….
Pero mientras tanto si verga quería, verga tendría….
Mientras el se movía despacio sobre mi verga abrí los ojos para verle a la cara, pero el tenía los ojos cerrados, así que me quede observándolo, su pequeño pene estaba duro, tenía la boquita abierta de la cual salían tenues jadeos.
Luego se detuvo, abrió los ojos y yo Cerré los míos inmediatamente…
Sus piernitas empezaron a temblar, fue sacando mi verga poco a poco, supuse que se había cansado y talvez se iría a dormir, debía actuar rápido antes de que mi verga saliera por completo y el se fuera.
Abrí los ojos, puse ambas manos en cada lado de su cintura….
diciéndole….
Yo: ¿apoco ya te vas?
Mi cintura empezó a moverse, mi verga ahora entraba y salía a mi ritmo, mi hijo cerró los ojos disfrutando de mi verga… Minutos después, fui retirando mi verga poco a poco hasta salirme por completo.
Hice a un lado a Alberto, me deshice de mi trusa, puse una almohada doblada en el centro de cama, acomode a mi hijo boca abajo sobre la almohada, me acomode detrás de él, separe sus nalguitas y escupí una buena cantidad de saliva.
Tome ni verga pasándola por toda su rajita un par de veces, luego la acomode en la entrada de su agujerito, con un firme movimiento hacia adelante empecé a entrar en el, su anillo traspase fácilmente, seguí empujando centímetro a centímetro hasta tener una buena cantidad dentro de él.
Me apoye sobre mis codos y mis piernas e inicie mi vaivén, empecé a darle una rica cogida, veía como aguantaba fácilmente la mitad a de mi verga, no quería lastimarlo con mis 19 centímetros por eso me bastaba con tener la mitad dentro.
Yo estaba disfrutando de ese gran momento al igual que mi hijo Alberto.
Que rica satisfacción….
no pude aguantar más….
Deje caer todo mi peso sobre mi hijo, mi pene entraba y salía rápidamente de su culito, con una fuerte estocada termine….
Alberto: mmmmmmmm, mmmmmmmm.
….
Yo: aaaaaaaaahhhhhhhhhh….
Que rico….
aaaahhhhhh
Mi leche lleno su pequeño agujerito, me moví un par de veces mas y fui saliendo poco a poco hasta sacar mi verga….
Bese su espalda un par de veces.
Yo: ¡¡¡gracias, campeón!!!! (Agarrando mi verga) “cuando quieras esto… sólo pídela”
Mi hijo sólo asintió con la cabeza, ahora teníamos un trato entre el y yo….
Pero tendría que aclarar ciertas dudas.
Gracias por leer y escribir trato de contestar a todos.
….
ESTO AÚN CONTINÚA.
….
Por favor espero la parte 4 plis
y supiste quien inició a tu hijo?