Descubro a mi pareja follandose a mi hija y me uno
Historia de una madre que descubre algo impactante pero a la ves excitante.
Me llamo Luisa, tengo 28 años y contaré la vez en que una simple noche se convirtió en un intenso trio entre madre, padre e hija.
Todo fue en una noche lluviosa de Sabado, mi pareja y yo nos disponíamos a dormir. El y yo tenemos una relación sexual un tanto complicada, hubo una época donde las jornadas de sexo eran intensas y frecuentes, y, en este caso, una época donde el no me toca un pelo… en la habitación del otro lado del pasillo dormía Elena, nuestra hermosa hija de 6, la cual en esa misma noche, al parecer, se quedó dormida con la luz prendida, y al ser una familia que vive con las justas, no podemos darnos el lujo de derrochar energia, por lo que le aviso a mi hombre a que vaya a apagarle la luz… pense que me iba a costar hacer que vaya, siempre suele refunfuñar cuando está cómodo y debe hacer algo que lo quita del lugar de comodidas, pero fue como una luz hacia su habitación, fue raro, pero bueno… aproveche el momento para «acariciarme» un poco. Meti una mano bajo mi ropa interior y otra bajo mi camison para empezar a masturbarme… ¿pensando en que?, pues en los momentos de gracia de nuestra relación. Suponía que pronto iba a volver, por lo que frote mi vagina rapidamente buscando llegar rapido al climax, frotė, jugue con mi clitoris, amasė mis tetas con mucha pasión y esmero hasta que conseguí acabar… fue una linda sensación, como siempre… en fin, ya estaba satisfecha y podía dormir tranquila, aunque obviamente nada reemplaza a una buena cogida… Pasaron unos cuantos minutos y mi pareja no regresaba, me empecé a preocupar, ¿Habrà pasado algo?. No tuve otra que levantarme e ir hacia la habitación de Elena, en silencio caminé ese pasillo, no queria despertar a mi nena en vano por una corazonada… Abro la puerta, y lo que vi fue algo que a simple vista me dió una sensación horrible, pero rapidamente fui cambiando de parecer: Mi pareja, el padre de mi Elena, le estaba metiendo la punta de la polla en la Boca a mi pequeña hija que se encontraba en un profundo sueño… No lo podía creer, estuve a punto de entrar y armar un gran escandalo, pero en eso, Elena despierta, ve a su padre y, luego de sonreirle, le da una dulce lamida.
-Hola papi, ¿ya es hora de nuestro juego ?
-Si, querida- respondió de manera breve, preso de la excitación.
Quedé atonita, ¿Mi hija acepta hacer estas cosas? ¿Pero como?.
Elenita se arrodilla en la cama, agarra la gran polla de mi marido con las 2 manos y comienza a lamerla de un costado al otro, alrededor del glande y hasta sus testiculos. ¡Mi hija de 6 años le daba mejor servicio oral que yo!. No pasó mucho tiempo hasta que la situación comenzó a excitarme, me bajé la ropa interior y, parada junto a la puerta, comencé a meterme los dedos. Ver a mi querida Elena hacerle tan efectiva mamada a su padre me ponia a mil, quería unirme a ellos, pero si ellos sabían que estaba ahí, dejaran de hacer lo que estaban haciendo y arruinaria lo que estaba viendo. De repente, una mala posición hizo que me cayera y que abriera la puerta de golpe sin querer, ambos se detuvieron y mi pareja saltó de la cama.
-Amor, puedo explicarlo! Yo estaba… estaba-
-No intentes explicar, lo vi todo-
-Mamá no te enojes por favor, el no estaba molestándome, nos estábamos divirtiendo-
-Si eso si, se estaban divirtiendo sin mi…
-Amor, te juro que no vol….. ¿Qué dijiste?
Me dirigi hacia la cama de mi hija, tome a Elena de las 2 manos y, apuntando mi trasero hacia mi pareja , procedí a darle un apasionado beso con lengua. Mi vagina ya estaba bien humeda con todo el festival de situaciones diversas, movía mi trasero de un lado al otro mientras le comía la boca apasionadamente a Elenita, era una clara invitación para que mi hombre arremeta contra mi, como lo hace en nuestros mejores días, y edo hace… toma mi cintura y no duda en meter su gran polla dentro de mi vagina. Esto era super excitante y morboso, mi lengua recorria la peque boca de mi Elenita mientras mi pareja me follaba con una llamativa energía. Separé mi boca de la boca de mi hija y procedí a quitarle las braguitas.
-ah…. mami, vas a hacer lo mismo que papi?-
-mmh si amor, abre bien las piernas…
Elena obedece y deja ver su vagina tan cerradita y tierna… no dudo un segundo en comerme esa rajita con mucho amor, mientras mi pareja, al parecer en modo berserk gracias a la vista que tenía, cada vez me follaba con mas fuerza, lo que me contagiaba h hacía que mi lengua penetrara a Elenita, que gemía y se retorcía mucho.
-aghh esto es mucho para mi, acabaré en cualquier momento!- Exclamó con fuerza mi pareja.
-Espera, no acabes dentro de mi- Advertí y luego me acomodé al lado de mi hija.
-Ahora si, acaba, rocía tu leche en nosotras- Le pedí, abriendo la boca y sacando la lengua, acción repetida por Elenita.
-Ahí voy!!- dijo el con un grito, una gran explosion de semen cubrió nuestras caras y llenaron nuestras bocas. Entrr ambas, limpiamos la polla de nuestro hombre, acto siguiente volví a comerle la boca a mi pequeña, esta vez intercambiando el semen de nuestras bocas con la lengua.
Esa noche fue el inicio a una relacion familiar incestuosa increible y llena de sexo, adqurí un vicio hacia mi querida Elena, lo que antes era darle un besito de buenas noches, ahora es un beso de lengua intenso mientras le meto 2 dedos en la vagina, a veces se me da por despertarla sentandome en su carita, frotando mi vagina en esa boca que, al igual que con la polla de mi pareja, hace un trabajo de los dioses con tan solo 6 años, sin dudas todo un talento, ahora entiendo perfectamente el porque mi pareja perdió interes sexual conmigo.
wow que super es eso sigue contando saludos
Ufff un sueño hecho realidad
Delicioso relato , una familia unida !!
Prefiero sin la madre
Por joto.