Después de follar a mi primita con la ayuda de mis tíos estos me violan a mi.
introdujo otro de sus dedos en mi pequeño y estrecho ano podía sentir como se me rompía el culito, no pude evitar llorar, quería gritar, pero mi tío José no paraba de bombear mi boca con su vergota. .
Luego de 4 meses y medio en los que mis tíos y yo fallábamos salvajemente a mi primita Camila, paso algo que cambiaría todo y me pondría a mí en el ojo del huracán.
Después de estos meses de aprendizaje sobre como lamer y chupar la rica vaginita de mi prima, llego a mi lo inesperado, debido a que el menor de mis tíos que se llama Fernando tuvo un accidente en la ciudad capital en donde vivía y estudiaba, mis abuelos se fueron para la ciudad a acompañar y cuidar de él, debido a que mi madre no quería tener a su cargo a Camila, mis abuelos optaron por llevársela con ellos a la capital, en principio se había acordado que este viaje solo duraría unas semanas pero eso no fue lo que sucedió.
Los contextualizare un poco, la finca de mis abuelos quedaba a 4 horas del pueblo más cercano y al ser una finca cafetera la propiedad abarca barias hectáreas por lo que los vecinos están a kilómetros de distancia y al ver una población tan baja las opciones de pareja para mis tíos eran muy limitadas y estos a su vez ya estaban muy acostumbrados a follar con mi primita desde que esta llego a casa de mis abuelos a sus cortos 5 años, además que las labores en la finca les consumía casi todo su tiempo y no les permitía socializar, debido a estas razones ellos no tenían ninguna novia o nada parecido. Gracias a esto se presentó la situación que a continuación les narrare.
Había transcurrido ya un mes y dos semanas desde que mis abuelos y Camila salieron de la finca, mis tíos estaban ya desesperados por no poder follar con Camilita, estos estaban siempre de mal humor y llamaban constantemente a mis abuelos para que estos regresaran a la finca junto a Camilita, pero mis abuelos estaban más preocupados por la salud de su hijo menor que por regresar a la finca.
¡En una mañana de domingo mi madre decide salir con una de sus amigas al pueblo y debido a que saldría a comprar ropa para ella, desistí en acompañarla GRAVE ERROR EL MÍO! y pues ella solo opto por dejarme al cuidado de mis tíos, como en otras ocasiones, ella salió a las 9am y anuncio regresaría a las 4 de la tarde ya que almorzaría con su amiga y pasarían la mañana y tarde juntas.
Ya estando solos, mis tíos aprovechan que la casa está sola y deciden poner sus películas porno en la sala de estar, para así masturbarse a sus anchas, yo por mi parte solo los veía sentado desde uno de los sofás, la película empieza a rodar y mis tíos se desnudan por completo y empiezan a tocar sus vergas que ya están duras y sus guevos se descuelgan a su vez dando a notar lo cargados de leche que están, yo solo observaba, ya que hacía semanas que no los veía desnudos y desierta manera también yo extrañaba compartir las folladas que junto a ellos le dábamos a Camilita, mientras los veía mi tío José y con un rosto de enojo grita, no hijueputa esta mierda no me calienta yo quiero es vagina quiero culiar(follar) de verdad a esto responde Juan Carlos diciendo, si estas películas porno son lo mismo de lo mismo yo quiero es carne una vaginita bien caliente o al menos algo que se le parezca.
En ese momento mi tío José me señala y Juan Carlos solo responde «será» yo los veo y noto que estos se acercan a mí y sin mediar palabra mi tío José me toma fuerte por el brazo ubicándome justo en medio de los dos, quedando mi cara justo en frente de sus duras y titilantes vergas que se movían frente a mis ojos, yo no sabía lo que sucedía solo me quede ahí congelado, el silencio se rompió cuando mi tío José toma mi cara me pone su verga en la boca intentando fuertemente a que se la chupara, yo no quería e intentaba retirar mi boca, sin embargo, él me tomo fuerte y grito, chúpala, métetela a la boca, yo sé que tú la quieres MARICONCITO CHUPALA, este último grito me asusto bastante y a su vez debido a lo fuerte que me está tomando por el cuello, accedí y puse la cabeza de su verga en mi boca, mientras se me escapaban mis primeras lágrimas.
Mis piernas temblaban sin control, mientras mi tío José metía y sacaba su verga en mi boca, al mismo tiempo mi tío Juan Carlos se acercó y mientras se masturbaba, me bajo mis pantalones y ropa interior, yo no paraba de temblar y podía sentir el sabor salado del líquido preseminal de mi tío José, este estaba jadeando de forma descontrolada mientras violaba mi boca, para este momento ya tenía la mitad de su verga en mi boca y sentía estas ganas de vomitar, pero cada vez que parecía que vomitaría, él sacaba su verga por un momento y luego seguía presionando más fuerte su verga hasta el fondo de mi garganta, mientras esto sucedía Juan Carlos también comenzó a actuar, se ubicó detrás mío y con sus manos podía sentir sus grandes y toscas manos apretujando mis nalgas, luego de varios minutos de apretar mis nalgas con sus manos y rozar sus dedos en mi virginal anito, escupió su mano y puso toda esa saliva en mi ano.
Tienes un culito muy apretadito y nos vas a dar mucho placer este día mariconcito, esas fueron las palabras de mi tío Juan Carlos, justo antes de meter su dedo en mi ano, sentí un dolor inmenso, quise gritar, pero mi boca estaba siendo violada, de forma inmediata y sin importarle mi dolor introdujo otro de sus dedos en mi pequeño y estrecho ano podía sentir como se me rompía el culito, no pude evitar llorar, quería gritar, pero mi tío José no paraba de bombear mi boca con su vergota. Juan Carlos estaba extasiado, no para follar mi ano con sus dedos, la sala de estar se llenó de los gemidos y jadeos de mis tíos, junto a mis quejidos de dolor.
De repente sentí que mi boca se llenaba de un líquido caliente, espeso y amargo que inundaba mi boca y bajaba por mi garganta, quería evitar tomar de la leche, pero fue in evitable dejar que varios de los primeros chorros de su semen llenaran mi garganta, en su momento no lo sabía, pero mi tío José estaba en su clímax, sus jadeos se convirtieron en gritos de placer, de su verga seguían saliendo chorros de caliente y espeso semen que desabordaba por mis labios y se deslizaba por mi cuello hasta llegar a mi pecho, fue hasta después de varios minutos de haber botado lo último de su semen que saco de forma brusca su verga de mi boca, al mismo tiempo mi tío Juan Carlos saco sus dedos de mi roto y dilatado ano, inocentemente pensaba que ya todo había acabado, sin embargo, todo apenas comenzaba.
Minutos después de que mi tío Juan Carlos retirara sus dedos de mi anito, se pone en sus rodillas y me toma fuerte mente la cintura volteándome y haciendo que caiga sobre mi espada directo sobre la alfombra, veía su mirada de perversión, calentura y deseo, lanzó un par de escupitajos en su mano y lo puso en su verga y mi ano, yo estaba congelado mi cuerpo no reaccionaba solo estaba ahí sobre la alfombra sin la más mínima idea de lo que pasaría, al finalizar de lubricar toda su verga y mi ano toma firmemente mis piernas con una sola mano y las levanta dejando mi ano al aire y justo a la medida perfecta para que su verga pudiera ser insertada, al mismo tiempo me dice en voz alta ahora es mi turno mariconcito te voy a romper ese culo y te lo voy a llenar ese culo con mi leche.
Inmediatamente introduce la cabeza de su verga en mi anito sentí un gran ardor y dolor, lancé un gran grito podía sentir como literalmente la verga de mi tío Juan Carlos rompía mi ano, este grito no lo detuvo al contrarío lo animo a meter por completo su verga dentro de mi ano, rompiendo por completo mi anito, fue ahí cuando grite como nunca lo había hecho, de inmediato mi tío José se acerca y antes de que pueda seguir gritando me toma mi cara y tapa mi boca, mi tío Juan Carlos empieza con su bombeo mientras lanza un gran escupitajo en mi ano para lubricar el bombeo, él aumenta su bombeo y la fuerza del mismo, yo por mi parte sentía como su verga de 23cm llegaba hasta el fondo de mis entrañas y llegaba casi hasta mis estómago, era el dolor más grande que hasta esa edad había sentido, seguía gritando pero las fuertes manos de José impedían que estos fueran oídos, mientras los jadeos de mi tío Juan Carlos se intensificaban y gritaba a su vez, que rico, apretadito y caliente tienes ese culito sobrinito.
Sus bombeos eran incesantes y luego de varios minutos, ya mi estaba tan cansado de luchar, de gritar y del dolor que solo me deje llevar, mi mente quedo en blanco por varios minutos, hasta que volví en si cuando mi tío José pone nuevamente su verga en mi boca y me obliga a mamarla de nuevo, yo solo me rendí ante sus vergas dejando que violaran mi ano y boca, minutos después los jadeos de Juan Carlos se convierten en gritos de placer y sus bombeos se intensifican, sintiendo como presiona más fuerte y profundo su verga dentro de mi ano, sus testículos cuelgan y chocan contra mis nalgas de manera muy fuerte, sentía que mi tío ya no era un hombre, era un animal envistiendo a su presa.
Luego de un gran alarido y una última fuerte bombada, cae sobre sus piernas y saca bruscamente su verga que chorrea sangre, semen y restos de mierda, entre suspiro y jadeo saca también mi tío José su verga de mi boca y se masturba para venirse en mi cara dejando mis labios y la mitad de mi cara escurriendo su tibio semen, yo estaba ahí como entrence solo me quede paralizado y sin hacer un solo movimiento, solo podía sentir como mi ano palpitaba y chorreaba semen, luego de un par de minutos mi tío José me toma de la espalda y piernas para cargarme y llevarme a la ducha en donde los tres nos bañamos, ellos hablan y comentan que no deben dejar rastros, luego de esto ellos me llevan a la cama y me dejan ahí para que pueda dormir.
No olviden dejar sus comentarios.
Un muy caliente relato, gracias por compartirlo