Drogue a mi tía para cogermela

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por joserosas10.
La historia que voy a contarles ocurrió cuando yo tenia 17 años, estaba aun en la prepa y vivía con mis padres y una tia que estuvo con nosotros por un tiempo debido a que cayo en la depresión porque su esposo la abandono porque ella no pudo darle hijos, con ello se intento suicidar y pues se fue con nosotros a la casa para que la cuidáramos y no estuviera sola.
Mis padres tienen una empresa organizadora de fiestas (bodas quince años, despedidas, etc) así que solían trabajar por las noches, siempre salían a las 2 o 3 de la tarde y no llegaban hasta el día siguiente a las 5 o 6 am después de que terminaran y recogieran lo del evento.

Por ello mi tía y yo siempre estábamos en la casa y yo cuidaba de ella. ella tenia 35 años cuando ocurrió su separación. ella se deprimió mucho y casi no salia de su cuarto, no hablaba con nadie que no fuera conmigo o mis padres. así que yo me dedicaba a hacerle de comer, a tender su cama limpiar. ella por lo regular estaba medicada con un montonal de pastillas que le dio el psiquiatra y yo era también el encargado de dárselas.

Mi tía Carmen estaba muy bien a los 35, era chaparrita, complexión gordibuena pero no gorda panzona, piel clara, pelo largo café y ondulado. tenia unos senos muy grandes y bonitas caderas. la verdad a mi me calentaba mi tia, la haba estado espiando en el baño cuando se duchaba y me masturbaba pensando en ella hasta que un día se me ocurrió que podía hacer algo mas que fantasear.

En las noches yo le daba tres pastillas alas 9 de la noche, según el medico para la depresión y para que ella durmiera, no recuerdo el nombre de las pastillas pero la mayoría terminaba en pan, plazapan, zepan, algo asi. una era para el sueño, otra para la depresión y una para la ansiedad recuerdo. yo hacia semanas había notado que después de darle las pastillas, alas 11 de la noche cuando volvía a su cuarto a ver si ya se había dormido, siempre la encontraba dormida y tenia que sacudirla para que ella despertara un poco y mas dormida que despierta se acomodara de lado en su cama . obvio cuando pasaba eso, yo aprovechaba para toar sus senos y piernas disimuladamente, en algunas ocasiones me masturbaba enfrente de ella y cuando me venia le ponía un poco de mi semen en su boca para que ella lo lamiera y se lo trabajara pensando que era saliva. Eso me excitaba siempre pero ya no aguantaba mas solo poder hacer eso.

Así que un día cansado de hacer lo mismo le di una pastilla extra para dormir en su jugo, se la molí y se la disolvi para que no se fijara y le lleve el vacito con sus tres pastillas, ella las tomo y yo me retire. la verdad se me hizo eterno el tiempo para que dieran las 11 y fui a su cuarto, la encontré dormida como de costumbre respirando tranquila y profundamente. entonces me acerque y le hable fuerte preguntando si estaba dormida y no dijo nada, después la sacudo del hombre pero tampoco, ella seguía babeando la almohada muy dormida y no sentía cuando la movía, por ultimo le di un pellizco fuerte en una de sus pompas y no hizo mas que un ligero movimiento en su pierna. viendo eso , yo estaba muy nervioso y taquicardico pues tenia una mezcla de miedo y de excitación al tener a mi tía enfrente de mi y a disposición mia.

Le quite la cobija y la acomode un poco con el cuerpo boca arriba y con la cabeza de lado, y yo temblando le baje el pans de la pijama rosa que traía y su pantaleta negra para poder así dejar al descubierto su hermoso triangulo peludo a la vista, era fantástico. y le subí la playera arriba solo dejando sus pechos enormes y con sus pezones pequeños rozados, la verdad me sorprendí, eran mas grandes sus pechos de lo que imagine. estaba sudando y con mi respiración agitada, traía mi verga peluda, venuda y negra al mil, la comece a tocar y a jugar con su vagina y a ver que ella no despertaba abrí lentamente sus piernas y le apunte mi verga de 17 años a su entrada y se la metí lentamente, sentía riquísimo, estaba muy caliente su interior, estaba muy apretado creo que por falta de uso, pero cuando menos pensé ya le tenia toda adentro y empece a bombear muy despacio y venia como pi pene salia todo embarrado de sus secreciones blanquecinas vaginales. También comencé a besarle los pechos muy cuidadosamente para no dejar marcas y acelere el ritmo sacandole casi todo el pene y dejandoselo ir muy fuerte hasta la base de mis huevos, era muy cachondo ver como mis vellos púbicos frotaban contra los de ella. A cada metida sentia que me venia pero aguantaba muy bien no hacerlo, pero a los 10 minutos de montarla acelere el ritmo y antes de venirme la saque y le avente todos mis mecos su cara. Con mi dedo se los arrimaba y metía a su boca lo que ella inconscientemente tragaba poco a poco penando que era saliva. depues limpie su vagina con un paño húmedo tibio y su cara. me puse los pantalones y salí despacio de su cuarto, todo nervioso pero agusto por que ya había podido poseerla y llenarla de mi verga.

Al día siguiente estuve muy nervioso y asustado por lo que había pasado, deseando que ella no lo había notado pero despertó muy somnolienta y me dijo que se sentía rara y cansada, yo le dije, "tia no se preocupe, deje le doy una pastilla para el cansancio y le di media pastilla de la de dormir diciéndole que era paracetamol y se volvió a quedar dormida, así estuvo todo el día y ya no hizo ningún comentario. los días pasaron y el miedo se esfumo, tal parece que no se dio cuenta, así que ya haba descubierto la manera de poseerla a mi antojo cuando yo quisiera, el sexo se repitió después con a misma técnica pero ahora se me ocurrió hacerlo con algo mas cochino, me dije que porque no incluir el zoo, la idea me domino y me propuse a hacerlo, pero eso, eso es otra historia dijo la del comercial…

Espero sus opiniones, y me gustaría conocer gente que también le encante el zoo o incesto. saludos