El Burdel Familiar capitulo 2

Muy emocionado por el detalle de mi hija, entregarme a mi nieta para hacerla mujer….
La mesa estaba servida, mi hija me dejó a mi nieta lista para hacerla mi mujer, era la inocencia pura a sus 8 años y yo era un demonio que deseaba cógerla sin piedad.

Pensé en cógerla como folle a mi hija la primera vez, encima de ella, asi que tome un poco de vaselina y la unté en su vagina, me puse en posición y le empecé a tallar mi verga en su abdomen para que se me pusiera más dura, ella sonreía porque le provocaba cosquillas, me baje un poco y la empecé a besar toda su carita, su cuellito, y poco a poco la empecé a penetrar, con movimientos suaves y circulares, sin darme cuenta ya la tenía toda adentro, algo raro pasaba, a sus 8 años mi nieta ya la recibía toda y no se quejaba tanto. La empecé a coger con más fuerza y ahí fue donde ya empezó a llorar, cada vez las embestidas eran las fuertes asta llegar al orgasmo y correrme dentro de ella.

Me levanté de la cama algo confundido, le grite a mi hija para preguntar qué estaba pasando, ella al momento ya estaba en la recámara.

La niña no era virgen, no sangro y le entró muy fácil, explícame por favor. Ella con una sonrisa en la cara me contesto, lo que pasa es que yo la estaba preparando desde los 5 años, la masturbaba con un consolador para que la primera verga que la penetrara no le hiciera mucho daño.

Tu no sabes lo que a mí me dolía cuando me penetraban mi hermano y tú a mis 10 años, sentía que me desgarraban por dentro, por eso decidí yo quitarle la virginidad a mi niña con un consolador, yo sabía perfectamente cuál sería su destino y lo mejor fue ayudarla.

Yo me encontraba muy molesto por ese engaño, así que le hable a mi hijo, la niña seguía acostada en la cama, al llegar mi hijo le ordene que follara la niña, al fin ya no era virgen, mi hijo sin dudarlo se sacó la verga y se dirigió hacía la niña, mi hija se interpuso entre el y la niña, yo tuve que agarrar a mi hija para que se calmará.

Mi hijo penetró a la niña sin piedad, mi hija enojada me golpeaba en el pecho y trataba de aruñarme como una gata callejera, la tomé de los brazos y la puse de espaldas, mi verga aún seguía erecta por efectos del Viagra, le levanté el vestido y la penetre por el ano, en la esquina de la cama la empecé a follar bruscamente por el ano, mientras mi hijo follaba a su hija de una manera bestial, la niña estaba ahogada en llanto recibiendo la verga de mi hijo, así las tuvimos por varios minutos y le dije a mi hijo, ya que termines con la niña, voy yo deseo volver a llenarla de mi semen.

Así fue, al correrse mi hijo dentro de la niña, avente a mi hija al piso y me monte sobre la niña ya casi para terminar, me vine de nueva cuenta dentro de mi nieta que estaba a punto de desmayarse por tremendas cogidas.

Mi hijo se carcajeaba por la hazaña consumada y mi hija nos gritaba desgraciados, animales, miren como dejaron a mi niña.

La tomé del cabello y la avente a la cama donde estaba la niña desmayada, le dije enérgicamente, esto fue para que no se te olvide que las mujeres de esta familia las estrenamos nosotros y no un consolador, primero las disfrutamos nosotros por un tiempo y luego las ponemos a atender a los clientes como las putas  que son, recuerda que para eso naciste tú y tu hija, para putas.

Después del regañó, gire instrucciones. Desde mañana empieza tu hija a trabajar en el burdel, hay que aprovechar que aún no la pueden preñar, de seguro va ser muy solicitada.

Mi hija comprendió que ella y su hija eran unas putas y que tenían que obedecer, bajo la mirada y dijo claro que sí padre, así será, mi niña mañana va estar lista para trabajar en el burdel Familiar.

El burdel es un negocio familiar por tradición, las mujeres de la familia nacen para putas y mueren como putas y los hombres estamos  para iniciarlas y enseñarles cómo deben de satisfacer los deseos sexuales más depravados y seguir generando grandes ganancias para le burdel familiar.

Gracias de antemano a las personas que leen mis relatos y espero que con mis letras echen a volar su imaginación y disfruten de un rato muy erótico, a quien no les guste el tema que trato, pido una disculpa y espero seguir con más historias del burdel familiar.